Hola! Ya estoy aqui de nuevo! Jajajaj, bueno, ya se que mi ff no os gusta pero... soy mu cabezota jajaja. Por favor, dejarme aunque sea rr para criticarme o lo que sea jajaja pero no os paseis mucho porque yo... yo... hago todo lo que puedo jajaja. Bueno, decirme lo que querais, incluso q me vais a tirar un huevo jajaja. Pero por favor, decidme algo jajajaj.

EL BANQUETE

Remus se puso algo rígido intentando no despertarla. Pero era tarde. Eli se despertó segundos después. Ella se notaba algo cómoda, demasiado como para estar en el tren. Miró hacia su lado izquierdo y notó que estaba apoyada sobre alguien. Levantó poco a poco la cabeza con miedo a ver sobre quien estaba apoyada. Estaba sobre el hombro de Remus. Sacó rápidamente la cabeza de su hombro y a continuación se puso aun más roja que Remus.

-Lo… lo siento, Remus. Lo siento mucho.

-No, no te disculpes. No… no pasa nada.

Bridge los miraba a los dos con una sonrisa pícara en los labios. Están hechos el uno para el otro>> pensó.

Cuando todos se despertaron, más bien los despertaron, eran las nueve de la noche. Estaban a punto de llegar a Hogwarts.

-¡Eh¿Qué hora es?- preguntó Lily impaciente-. ¿Por qué no nos habéis despertado antes?- Volvió a decir algo molesta.

-Son las nueve- respondió Eli-. Estamos a punto de llegar. Será mejor vestirnos, llegaremos en más o menos diez minutos.

-¡Si¡Es tardísimo!- gritó Lily perdiendo los nervios.

-Tranquila, Lily, nos dará tiempo, solamente hay que vestirse los uniformes- la intentó tranquilizar Remus.

-Ehh… chicos… ¿os importaría dejarnos solas?- preguntó Bridget.

-¡Claro¿Cómo no?- dijo Sirius-. Vamos chicos, nosotros también tenemos que vestirnos.

Los chicos salieron del compartimiento, James y Peter rechistando, pero Remus y Sirius, algo raro en este último, iba sin quejarse. Entonces las chicas se empezaron a cambiar.

-¿Por qué les has mandado salir, Bridge?- preguntó Emma sin entender.

-Emma¿lo dices en serio?- preguntó Bridge, Emma asintió con la cabeza-. Pues¿qué quieres que te diga? A ti no te importará que te miren cambiándote porque eres: guapa, rubia y aun por encima de ojos azules, pero creo que al resto de nosotras, no nos gusta que nos miren sin ropa. ¿No es eso cierto, chicas?

-¡Claro¿En qué diablos estás pensando, Emma?- contestó Lily aun atónita por la pregunta que Emma le había hecho a Bridge.

-Tenéis razón¿en qué estaré pensando? No me gustaría que me viesen así- Emma pareció comprender.

Menos mal que lo comprendes, Emma- exclamó Eli sonriendo. Estaba a punto de echarse a reír a carcajadas pero hizo todo lo posible por aguantar.

Si, claro que tenéis razón- cada vez se convencía más-. ¿A quién le gustaría yo si me viesen con estos pelos? Chicas, estoy súper despeinada, no podría estar delante de ellos.

Eli no pudo aguantar más la risa. Pero no solo fue ella, si no que fueron todas. Emma había puesto voz de pija y aun por encima aquello.

-¿De qué os reís?- preguntó Emma sin entender nada. Aquello no fuera una broma, era en serio.

-Cariño¿de qué nos vamos a reír? De las tonterías que dices a veces- explicó Lily.

Cuando terminaron de cambiarse, mandaron a Bridge a buscar a los chicos en el compartimiento contiguo.

-Chicos, ya estamos preparadas. Ahora podéis pasar.

-¿Ya estáis todas listas?- preguntó James con un tono disgustado.

-Si, bueno, excepto Emma- la sonrisa de James se reflejó, al ver la reacción de James, Bridge rectificó rápido-. Que se está peinando porque no quiere que nadie la vea despeinada.

La chica les hizo una señal con el brazo indicándoles el camino y James, Peter y Remus entraron delante de ella. Sirius miró un momento a Bridge de arriba abajo y susurro algo. Bridge lo miró y preguntó:

-¿Qué has dicho?

-Nada, cosas mías- dijo Sirius con su sonrisa, su sonrisa matadora-. ¿Te ha dicho alguien lo bien que te queda esa túnica? El color negro te sienta de maravilla- añadió después provocando que Bridge se pusiera roja de nuevo en todo ese día.

-Gracias- susurró ella-. A ti también te sienta bien- dijo ella con tono amable.

-Pena que no me sienta tan bien como a ti- susurró él-. Bueno, pasa tú, que creo que ya nos van a empezar a echar de menos- dijo, ahora en tono normal.

-Eso es problema de ellos, no nuestro- dijo Bridge sonriendo, después entró en el compartimiento notando como Sirius no le quitaba ojo de encima. Se sentó en su sitio con la sensación de que Sirius le había estado mirando el culo.

-El tren se está parando- dijo Remus cinco minutos después. Se levantó e hizo una señal a Lily para que le imitara-. Tenemos que irnos ya¿no?

-Si, claro, vayámonos. Ya llegamos tarde- Lily se levantó como una bengala.

Todos empezaron a coger sus equipajes para poder salir y coger la carroza guardando sitio a Remus y Lily. El carruaje les llevaría a Hogwarts.

Cuando salieron del tren, escucharon a Lily y a Remus llamando por los de primer año. Bridge fue en busca de un carruaje y en cuanto lo encontró, llamó al resto para que nadie se la quitara. Pero ya era tarde, Lucius Malfoy y Severus Snape se acercaron con la pandilla de Lucius.

-"Sangre Sucia", quita tus manos asquerosas de mi carruaje.

-Ni lo sueñes Malfoy-. Sirius había llegado primero hasta ellos.

-¡Ohh! Ahí viene el guardaespaldas de la "Sangre Sucia"- dijo Severus y todos se rieron. Snape se sentía orgulloso de lo que acababa de decir.

-Quejicus, tú métete en tus asuntos que esto no va contigo- dijo James a continuación.

-¡Hay¡Que miedo me das!- dijo Snape con voz irritante y sarcástica. Pero aún así, Bridge le notó algo de miedo en los ojos.

-¡Eh, chicos! Dejarlos que se marchen con esa carraca. Aquí hay uno más amplio- gritó Eli para que todos le oyeran.

-Pues entonces ese es el nuestro. Vosotros os quedareis con esa cosa- dijo Lucius-. Venga, chicos, vamos.

Todos se fueron detrás de él. Eli fue corriendo hasta ellos. Lily y Remus iban caminando tranquilamente hacia allí.

-Corred- gritó Eli. Estos hicieron caso y fueron corriendo hacia el carruaje.

Montaron en ella y observaron riéndose como Lucius y sus amigos, se quedaban allí, plantados porque Eli les había tendido una trampa y ese carruaje ya estaba lleno. Todos, dentro, se empezaron a reír recordando todo lo que había pasado.

-Esa ha sido una buena, Eli. Aunque nosotros nos la hubiéramos arreglarlo sin necesidad de nada de eso- dijo James haciéndose el importante.

-Si, no lo pongo en duda. Pero no llegaríais a Hogwarts y ya nos quitarían cincuenta puntos para Gryffindor- dijo Eli riéndose.

El carruaje se empezó a mover y a dirigirse hacia Hogwarts. El camino fue bastante tranquilo. Todos iban callados. James, como no, observaba a Lily con atención. A Lily le molestaba mucho que James le estuviera mirando, pero aun así, prefirió no decir nada para no terminar a mal con él.

Solo estuvieron un poquillo más de quince minutos en la carroza y llegaron a Hogwarts en silencio y tranquilos.

-Bueno, ya llegamos¿nos vamos?- dijo Sirius impaciente por salir a estirar las piernas.

James pareció despertar de un sueño profundo y sacudió la cabeza.

-Si, vamos- murmuró él.

Los chicos bajaron rápidamente. Cuando fue a bajar Lily, James extendió la mano para ayudarla a salir pero ella lo rechazó. Cuando Eli también iba a bajar, Remus, imitó a James, pero este algo vergonzoso. Pero Eli, no hizo lo mismo que Lily, sino lo contrario. Le cogió la mano y bajó con cuidado. Bridge desmontó en seguida en cuanto Eli salió. Pero Sirius se acercó y la dirigió otra vez hacia la carroza. Con cuidado la cogió y la subió en ella.

-Ahora me toca a mi. Me da igual que hagas como Lily a James, pero tengo que intentarlo- dijo Sirius a puntito de reírse pero intentando estar serio.

Sirius hizo una especie de reverencia con su mano y se la extendió. Al principio, Bridge hizo como si dudara un poco. Pero cuando Sirius puso cara de perrito abandonado y señaló con su cabeza la mano, Bridge sonrió y con cuidado cogió su mano e imitando a Eli salió del carruaje.

Sirius y Bridge se habían quedado atrás porque los demás no se habían dado cuenta. Fueron todo el camino hasta las escaleras del castillo riéndose. Pero antes de entrar, Lucius los alcanzó y primero miró con cara sorprendida a la pareja, pero después, dijo:

-Dile a tu amiguita que por esa jugarreta que nos ha jugado, la pagará muy cara.

-Tócale un pelo a mi amiga y el que tendrá problemillas este año, serás tu- Bridge salió en defensa de su amiga.

-Ya veremos. Haber quién tiene un accidente este año "Sangre Sucia"- dijo Malfoy en tono amenazador.

-Hijo de…- gritó Sirius-. Cálmate Sirius, no te pongas de los nervios ya el primer día- murmuró para que solo el se pudiera oír-. ¿Cómo te atreves a hablarle así? Como te oiga volver oírte hablarle así y llamarle eso, te las verás conmigo. Igual que si le tocas¿me has oído?- dijo intentando no ponerse de los nervios.

-¿Qué pasa aquí?- el profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras (DCAO) estaba allí presente. Además también era el jefe de la casa de Slytherin. Había acudido al oír los gritos de Sirius.

-Nada profesor. No pasa nada. No te preocupes. Nosotros ya nos íbamos. ¿A que sí, Sirius?- dijo Bridge aun algo asustada por lo que había pasado.

-Ehh… ¡Si, nos íbamos!- dijo Sirius con una cara de odio que dirigió mas bien hacia Malfoy y después dio media vuelta.

Anduvieron callados hasta entrar en el colegio. Después, Bridge, pudo pronunciar su primera palabra.

-¿Sirius?

-¿Uhm?- preguntó él esperando a que le dijera lo que le tuviera que decir.

-Gracias- dijo ella algo avergonzada.

-¿Gracias¿Por eso?- preguntó él sorprendido-. Ya te lo había prometido en el tren¿no? Solo estoy cumpliendo mi promesa- Sirius le dedicó una sonrisa.

-Ya pero… como te escuchara Horace…

-Mira, me da igual. Si me escuchara mejor. Entonces se daría cuenta de que nadie se tiene que meter contigo- dijo Sirius con tono de malas pulgas-. Bridge, Malfoy te amenazó. No sólo se merecía el echarle una bronca, si no que algo más.

-Pero…- a Bridge se le escapó una lágrima.

-¿Qué, qué pasa?- Sirius se paró en seco. No le gustaba verla llorar.

-Bueno… es que estoy algo asustada- otra lágrima calló y se perdió en su túnica negra. Bridge se abrazo a Sirius. Este también la abrazó.

- ¿Y por eso lloras? Bridge, tienes que ser fuerte. Tu sabes que no te hará daño, no te preocupes. Si yo puedo evitarlo, no te hará ni un poquillo. No te tocará un pelo.

-¿Y si no puedes?- preguntó ella algo desolada. Pero el que Sirius la abrazara le reconfortaba. Se sentía mejor.

-¿Qué?

-¿Y si no puedes evitarlo?

-Lo haré, no te preocupes. No es muy difícil. Solo tienes que estar veinticuatro horas día pegada a mi. Pero dime¿lloras solo por eso?- preguntó él esperándose oír esa respuesta.

-No, no del todo. Es que… me noto algo desplazada. No me he acostumbrado del todo a que me llamen "Sangre Sucia".

-Me lo imaginaba. Bridge, por eso no te preocupes. No va a suceder nada. Te lo prometo. Además, nos vengaremos en el partido de quidditch- dijo Sirius apartándose de ella (aunque lamentándolo mucho) y secándole las lágrimas-. Menos mal que no llevas rimel. Así no se te nota que has estado llorando.

-Jajaja… Si no encontramos buenos jugadores, dudo que podamos vengarnos.

-Boh… no le veas el lado malo. Además, entre: James, Eli, tu y yo, seguro que ya ganábamos a todos. Pero James es bueno con su trabajo. Encontrará a los perfectos jugadores, no te preocupes- dijo Sirius riendo.

¡Es verdad! James es nuestro nuevo capitán- dijo Bridge animándose un poquillo-. Tengo que darte las gracias, Sirius.

-¿Otra vez? Tu chiquilla no paras de dármelas- dijo Sirius en un tono gracioso mientras Bridge se reía. Tenía razón, en todo ese día, ya le había pedido sobre unas tres veces las gracias-. ¿Y esta vez a que debo ese placer?

-Por hacerme sentir bien. Por hacerme reír. Por ayudarme. Por portarte tan bien conmigo. Simplemente, por ser mi amigo- dijo Bridge sonriendo y diciendo todo esto con un tono de vergüenza en su voz. Esta vez fue Sirius el colorado.

-Gracias a ti guapa. La que te portas bien conmigo eres tú. Eres la única chica que me habla así, con toda esa sinceridad. Las demás o me odian o solo me quieren por interés, para ser populares.

Bridge se quedó mirando fijamente para él. Ojalá fuese con toda la sinceridad del mundo>> pensó. Se acercó un poquito más a él. Oía sus latidos del corazón. Pero de repente, se lo pensó mejor. A él, ella no le gustaba. Así que si lo besaba, no volverían a tener esas conversaciones; y él no la volvería a… abrazar.

Bridge paró en seco. El la abrazó. Bridge en esos momentos ya era feliz, así que no lo estropearía. También le abrazó.

-Así que… gracias por todo- los dos se separaron. Entrarían en ese momento en el gran comedor, estaba en frente. Nadie se había dado cuenta de que estaban allí, los dos juntos. Lily le había guardado un sitio a su lado. Igual que James a Sirius. Cuando se dieron cuenta de que habían llegado, Eli preguntó:

-¿Pero dónde os metéis vosotros dos "juntos" últimamente?- donde recalcó la palabra juntos más que ninguna otra.

-Nos encontramos con el mismísimo Malfoy- dijo Sirius poniendo cara de temor. Después se rió e hizo una mueca.

-¡Ah¿Os dio mucho la lata?- preguntó James y después un poco más ofendido dijo-. ¿Y por qué no me avisasteis?

-Tal vez… ¿Porque ya estabas dentro?- dijo Sirius pensando irónicamente.

-¡Ah! Tal vez sea eso.

-Bueno, ya está todo arreglado con él- siguió diciendo Sirius.

B

ridge, no entendía como Sirius, normalmente presumido, no les había dicho nada de lo que había pasado. No les había dicho como Bridge llorara abrazada a él. Aun así ella tampoco dijo nada y se quedó mirando para él. Su expresión era entre extrañeza y agradecida. Él miro para ella como diciendo¿Qué pasa?>>. Ella, negó con la cabeza y le sonrió.

Cuando James se dio cuenta de que estaba enfrente de Bridge, en vez de Lily, le pidió a Sirius que le se sentara donde estaba él para cambiarse de sitio. Así que cuando Lily se dio cuenta de lo que había hecho, dio un gran suspiro. Todos menos Lily y James se rieron.

Sirius miró hacia la mesa de profesores. Cuando Bridge miró para él, se dio cuenta de que aun no había echado un vistazo a los profesores.

En la mesa estaban los mismos profesores del año anterior. Dumbledore, estaba sentado en el centro de la mesa y hablaba animadamente con la: jefa de Gryffindor, subdirectora de Hogwarts y profesora de transformaciones, McGonagall. A su lado, estaba el jefe de la casa de Slytherin y profesor de defensa contra las artes oscuras, Horace. Horace, un hombre al que le parecía muy raro que Lily fuese tan lista siendo de familia muggle. Al otro lado de Dumbledore, estaba el jefe de la casa de Ravenclaw, Flitwick, un hombre muy bajito que daba clases de encantamientos. Las alumnas favoritas de este eran: Lily, Eli y Bridge, puesto que eran las mejores en esta clase. La profesora Margaret Sanders enseñaba herbología. Después también estaban sentados en la mesa: la profesora de adivinación, la de Aritmomancia, el de Cuidado de Criaturas Mágicas, el señor Binns de Historia de la Magia…

Todos hablaban animadamente entre ellos. McGonagall se levantó y salió del Gran Comedor porque la habían avisado que los de primer año ya habían llegado.

-A ver si veo a mi primo- dijo un James sonriente-. Empieza Hogwarts este año¿sabéis?

¿Sí? Que bien¿no? Reza para que no lo pongan en Slytherin. En cualquier casa excepto esa, estaría genial- dijo Eli a James encantada.

-¿Cómo es él¿Se parece a ti?- preguntó Bridge.

-No mucho, la verdad. Estudia mucho más que yo. Creo que lo escogerán para Ravenclaw. ¡Oye!- exclamó de repente.

-¿Qué pasa?- preguntó Sirius asustado.

-¡No nos hemos dado cuenta!- siguió James-. ¿Cómo nos hemos podido olvidar¡Que cabeza tenemos!

-¡Qué pasa?- dijo Lily exasperada-.¡Dilo de una vez!

-¿No echáis de menos a nadie?- dijo James dándose un golpe en la cabeza con su mano. Todos negaron con la cabeza.

De golpe se abrió la puerta del Gran Comedor.

-¡Emma!- exclamó Lily.

-¡Peter!- esta vez fue Sirius quien lo dijo-. ¿Cómo nos habíamos olvidado de ellos?

-Gracias por habernos esperado¿eh?- dijo Peter sarcásticamente mientras se sentaba a un lado de Remus. Emma se sentó entre Bridge y Lily. Así que ahora Bridge estaba sentada delante de uno de quinto curso.

-Mmm… lo siento. Ya notaba yo que nos habíamos dejado algo atrás- se disculpó Bridge- ¡No me lo puedo creer.

-Creo que digo en voz de todos nosotros que lo sentimos mucho- pronunció James.

-¿Dónde vinisteis?- preguntó Sirius con curiosidad.

-¡No os lo vais a creer, chicas!- dijo Emma por primera vez-. ¡Nos dejaron ir en barco con los de primero!

Dumbledore se levantó, llamó la atención con un "Ejem, ejem" y todo el mundo se sentó y cesaron los murmullos.

-Bienvenidos a Hogwarts un nuevo año. Ya se que normalmente no hablo antes que el Sobrero pero me gustaría deciros a todos que los tratéis como a vuestros amigos. Ayudadles y dadles apoyo en todos los sentidos. A los prefectos me imagino que no tengo que deciros nada, ya sabéis todas las normas. Después ya hablaré con más detalle. Bueno, pues dicho todo esto¡QUE ENTREN LOS DE PRIMERO!- gritó Dumbledore.

Las puertas del gran comedor se abrieron y entró la profesora McGonagall seguida por los nuevos alumnos que irían para primero. Todos los alumnos y profesores dieron un fuerte aplauso a los que acababan de llegar. Éstos tenían cara de estar muy asustados.

-¡Mirad, mirad, aquel de allí es mi primo! El que está entre el pelirrojo y el de pelo castaño muy oscuro.

-¿El de gafas?- preguntó Eli con curiosidad.

-Si, ese mismo. Físicamente se parece a mi de pequeño- dijo James orgulloso de si mismo. Estaba muy eufórico.

Todos se rieron excepto Lily que susurró:

-Oh, no… otro igual a Potter no, por favor.

La profesora McGonagall tosió para llamar la atención de sus alumnos.

-Quiero informar a los de primer año, que "El Sombrero Seleccionador" os dirá en que casa estáis cada uno de vosotros. Cuando diga vuestro nombre os sentareis en el taburete y os colocareis el sombrero. Cuando os diga vuestra casa, iréis a sentaros a la mesa de vuestra respectiva casa.

La profesora McGonagall puso un sombrero en el taburete entre la mesa de los profesores y las mesas de los alumnos. El sombrero empezó a cantar. Los de primer años ya estaban algo asustados pero con esto aun se asustaron más. El resto de los alumnos ya estaban acostumbrados. Algunos de los alumnos nuevos dieron un grito ahogado.

Cuando el sombrero terminó la canción, todos aplaudieron. La canción contaba una historia, la historia de los cuatro fundadores de Hogwarts. McGonagall se volvió a levantar. Tenía una lista en la mano.

-Ahora diré los nombres. El primero es: Seet Woods, Jessica.

Una chica morena andó poco a poco por culpa de su miedo. Temblaba ligeramente. Sacó el sombrero del taburete y se sentó. Se lo colocó en la cabeza y tardó un poco pero finalmente el sombrero gritó:

-¡Gryffindor!

La mesa de Gryffindor estalló en un fuerte aplauso. Jessica se quitó el sombrero y con una gran sonrisa se dirigió hacia la mesa de Gryffindor. Mientras la profesora McGonagall ya llamaba a un chico llamado Clooney Grint, Mathew, que sería elegido para Hufflepuff. Jessica se había sentado en la esquina al lado de Eli.

-Hola, tu eres Jessica¿verdad? Yo soy Eli. Y estos de aquí son todos mis amigos.

-Hola.

-Hola Jessica, yo soy Lily Evans, pero puedes llamarme Lily. Soy la prefecta de Gryffindor y este es Remus Lupin otro de los prefectos.

-Hola¿qué tal?- preguntó amablemente Remus.

-Bien, gracias- dijo ella algo vergonzosa.

-Perdónalos por ser tan maleducados y que no nos presentaran, pero nosotros somos: esta de mi lado, Emma. El que está al lado de Remus es Peter. Que el de su lado es James Potter. Este que esté en frente de Emma, uno de los más feos de Hogwarts- cuando dijo esto le echó la lengua y el se rió.

-Soy Sirius Black. Esta chica tan simpática que me presenta como feo se llama Bridget Roggers- dijo Sirius riéndose.

-Por favor, llámame Bridge.

Jessica se rió.

-Por favor a mi llamarme Jess. Todos mis amigos me llamaban así. Le echaré mucho de menos¿sabéis?- dijo ella poniéndose seria y algo triste.

Mientras decían esto, ya habían escogido a dos personas más. Douncan Abott, Mariah que se fue para Slytherin y Everett Clifford, Rachel que se fue a Hufflepuff.

-Si, te entendemos, nosotros ya llevamos siete años aquí y este es el último. Pero… tu eres de familia muggle¿no?- preguntó Bridge adivinando la respuesta.

-Si, lo soy. ¿Cómo lo sabías?- preguntó Jess.

-Lily y yo también lo somos, se nota.

-Graffman Jackman, Eduard.

Se colocó el sombrero.

-Ravenclaw- gritó el sombrero. Aplausos otra vez.

Ellos no hacían caso, charlaban con Jess animadamente. Aunque fuera algo pequeña les caía muy bien.

No se dieron cuenta hasta que iban yendo para la mesa de Gryffindor un tal David, Leah, Heleanor, Daniel.

Cuando la profesora McGonagall dijo Potter Jonson, Albert todos los alumnos prestaron más atención. Todos conocían a James, sabían que era un familiar de él.

Este no parecía estar asustado ni nada. Simplemente se puso el sombrero y espero a la respuesta del sombrero.

-¡RAVENCLAW!

-¿Veis¡Lo sabía¡Os lo dije! Fue para Ravenclaw. Después os lo presentaré. Es algo muermo, estudia demasiado.

-Entonces lo querré conocer. Seguro que es un encanto, no como tu- dijo Lily con malicia. James la miró desilusionado.

-Veo que sois amigos, pero no veo el cariño que os tenéis. Primero Bridge te llama feo- dijo dirigiéndose a Sirius.

-¡Oye! Eso era una broma. No lo decía en serio. Es muy buen amigo- dijo Bridge a la defensiva.

-Veo que entonces me estas llamando guapo. Bueno… pues entonces ya puedo estar tranquilo. Si tú dices que lo soy lo seré- dijo Sirius riéndose.

-No te eches flores caperucita. Que eres demasiado creído. No te fíes mucho de él. Que sepas que es uno de los más populares del colegio. De ellos nunca te puedes fiar. Los merodeadores son tramposos y mentirosos, excepto Remus.

-¡Ehh!- dijeron James, Sirius y Peter.

-Gracias Eli- dijo Remus sonriente.

Todos se rieron, incluso los aludidos. Después terminó la ceremonia con Vicent Sanders, Eric. Que el sombrero lo puso en Slytherin. Al final, cada casa acabó con ocho personas más o menos cada una.

Bueno, creo que este es hasta ahora el capitulo mas largo, si algo se ve mal o algo por el estilo, perdonarme.

Bueno, este capítulo se lo he de dedicar como no a mis Merodeadoras y a ti, mi felina y querida Effie¡Soys las mejores! Bueno, ahora las nombro a todas: Lils, Eli, Tibbs, Effie y tmb sería para mi misma, Bridget. Os quiero muxo a todas!

Bueno, tmb se lo quiero dedicar a Itzi, que solo he hablado una vez con ella pero me cae estupendamente, para ti tmb Itzi! Tkm mi niña!

Bueno, espero q os haya gustado el capitulo. Muchos besos a todos:

Bridget Roggers