Herida
-Amu: *Esto ya ha ido demasiado lejos, si esto es una broma, no es para nada graciosa*
-Los mire atónita y ellos solo se mostraron serios. Esto no puedo ser
-Amu: ¿Esto es una broma, no? Esto es solo una broma-Mi voz tembló. Tendré que tomar sangre de demonio; otra cosa que me quitara la poca humanidad que me queda
-Natsuno: Amu, sé que esto te parece espantoso. Pero es la única forma de que no nos devores a todos incluyendo a Kuro-Devorarlos…-ahora que ya despertaste y que eres hibrida solo la mitad de tu poder es controlado por ti, mientras que la otra mitad es de Kuso, si esa parte se llega a descontrolar y no ha sido alimentada comerá todo lo que esté en su camino
-Amu: *una razón más para decirme mounstro*-Tome las pastillas entre mis manos. Esta es la única forma
(…)
-Zero: ¡Levántate, Amu, si estuvieras realmente en una situación de peligro ya estarías muerta!
-Me encontraba tirada en el suelo vendada de los ojos, llena de tierra y respirando con dificultad debido al cansancio
-Kuro: ¡Amu, a este paso no seré tu arma demoniaca jamás! ¡Levántate!
-Amu: *Tengo que hacerlo…por el*
-Me recargue sobre mis manos y comencé a levantarme con las ultimas fuerzas que tenía, escuchando el silbido de los troncos acercarse, una por la izquierda y otro por la derecha. Tome impulso y di un salto subiéndome a uno de ellos. Mala idea. El silbido que hacia el tronco al moverse con rapidez, me impedía saber porque lugar me golpearían los otros troncos y las flechas. Salte del tronco y muy tarde escuche el silbido del tronco frente a mí, fue directo a mi estómago dejándome sin aire al instante, caí al suelo sin fuerzas.
-Zero: Detenlo, Kuro, ya está en su límite-el sonido de la palanca llego a mis oídos y los silbidos de los troncos pararon con lentitud-Sácala de ahí-Sentí los cálidos brazos de Kuro tomarme con delicadeza y llevándome a la mansión
-Kuro: Lo hiciste bien, esta vez hiciste un avance-Dijo susurrándomelo al oído y quitándome la venda, parpadee un poco hasta lograr acostumbrarme al repentino ataque de luz
-Amu: *Por fin, demasiada oscuridad por un dia* No seas mentiroso, llevo casi una semana haciendo esto y todavía no he tenido ningún avance-Kuro me sonríe y me quito el cabello de la cara
-Kuro: Soy el único que puede ver tus vectores, incluso no los veo desde el festival… hasta ahora, en el momento en que te levantaste salieron y con ellos fueron con los que te impulsaste para subir a aquel tronco…
-Amu: No se en que momento los saque…pero si no los hubiera usado mi paliza se hubiera duplicado…-Trague pesado al recordar los anteriores días en los que en los primeros dos minutos ya estaba tendida en el suelo del dolor-Apenas logro soportar el dolor de estos momentos…
-Kuro: Shh, descansa, lo necesitas-Me beso la frente y yo fui cerrando los ojos poco a poco, y al cerrarlos por completo solo pude escuchar la amable voz de Megumi diciendo 'esta lista' y caí en un sueño profundo
(…)
-Abrí los ojos lentamente deslumbrándome por un brillo opaco, no, un cielo opaco. Me recargue sobre mis brazos, ayudándome a levantar con estos. Al estar derecha observe que a mi alrededor no había absolutamente nada a excepción de un pequeño capullo rodeado de pasto a mi lado.
-'Este es tu interior, ¿cambió radicalmente a como estaba antes, no crees?' resonó por todo el lugar y Kuso apareció frente a mí con una sonrisa de satisfacción, me puse en guardia enseguida la vi
-Kuso: Tranquila, ya no intentare tomar tu cuerpo a la fuerza…-Sonrió con dulzura lo me pareció raro, vi sus ojos y ya no estaba esa maldad que tanto se distinguía en ella, sino todo lo contrario. Al ver eso relaje todo mi cuerpo
-Amu: ¿Mi interior…? ¿A qué te refieres…? ¿Por qué no estamos en el lugar oscuro de siempre?
-Kuso: El lugar oscuro representaba tu interior, ese lugar vacío y sin nada a lo que aferrarse desapareció, dando paso a esto-Kuso observo a su alrededor y miro al cielo-Por lo menos aquí hay un cielo que pueda ver todos los días…-Regreso su mirada a mí y me miro seria-Mas te vale cuidar ese capullo o esta vez si te matare-Mire el capullo con desconcierto
-Amu: Solo es un capullo… no le veo importancia.
-Kuso: Je, no lo entiendes, si ese capullo muere y este lugar comienza a quedarse sin luz…significa que tu "nueva familia" y todo lo que aprecias en este mundo desapareció para siempre-Di un sobresalto al escucharla, sacudí mi cabeza para sacar las ideas que vinieron de golpe a mi cabeza, con el entrenamiento en estos momentos no puedo pensar en nada más que eso. Espera.
-Amu: Ahora que lo recuerdo… tú… desde siempre me has dicho que debo matar a todo lo que tenga frente a mí, pero… en el momento en el que hicimos la ceremonia cambiaste de opinión, repentinamente dijiste que aceptara el poder ¿¡porque!?-Ella miro el suelo por un segundo y después vio el vacío
-Kuso: En ese momento lo pensé por un buen rato… y supe que si aceptabas ese poder, tendrías más posibilidades contra el…
-Amu: ¿El? ¿Quién es él? ¿¡Quién es ese hombre del que tanto me adviertes!? ¿¡Por qué demonios debo de tener cuidado con el!?-Una ráfaga de viento gélido comenzó a empujarme
-Kuso: Es algo que te diré en algunos años, no puedo decírtelo ahora…-Seguido de eso miro el capullo-…Porque todavía no se abre…-La ráfaga me empujo con más fuerza obligándome a cerrar los ojos, cuando los volví a abrir estaba acostada en mi cama, abrazada a Kuro. Me aferre más a el debido al repentino frio que me causo esa ráfaga
-Kuro: Si continuas así me vas a asfixiar…-Reprochó acercándome más a el-Y te quedarías sin calentador personal-Abrió un ojo y sonrió a lo cual yo me sonroje
-Amu: ¡Entonces asfíxiate!-Agarre la almohada y se la puse en la cara con fuerza-¡Listo!-A una velocidad increíble Kuro ya se encontraba sobre mí-¡Oye, no es justo! ¡Prefería cuando eras un gato común y corriente! ¡Yo siempre tenía la aventaja!-Con una mano agarro mis muñecas y con la otra la almohada-¡No te atrevas!
-Kuro: Desgraciadamente…-Sonrió divertido-… ahora soy yo el que tiene la ventaja-Y me puso levemente la almohada sobre la cara, comencé a forcejear para quitármela, sin éxito-No te muevas…-Obedecí y por unos segundos sentí un leve peso en la parte baja de mi cara que cubría la almohada-Listo…-Me quito la almohada y lo primero que vi fue un sonrojo sobre su piel blanca de porcelana
-Amu: Te ves tan tierno así…-Sonreí y el enseguida me soltó sentándose al borde de la cama
-Kuro: Amu, hoy…es el día en que nos convertimos en jinete y arma-¿¡Qué!? ¿¡Tan rápido!?-En unas pocas horas verán si somos compatibles, y si lo somos me pondrás el nombre que yo acepte-Me miro con un toque de frustración-Dime que no me vas a poner un nombre de niña-Ahí solté la carcajada de mi vida-Ambos sabemos que eres capaz-Me senté detrás de él y lo abrace por la espalda
-Amu: Ambos sabemos que eso es mentira…quiero ponerte un nombre que vaya de acuerdo con tu personalidad y tu carácter, y justamente tengo el nombre perfecto, por si no te gusta tengo otro de respaldo-De reojo vi la sombra de una sonrisa
-Kuro: Mas te vale que sea uno bueno, idiota, sino te dejare inconsciente por una semana-Solté una risa nerviosa al saber que él lo cumpliría sin dudarlo-Y no tendré compasión si eso esperabas-Menciono mirándome serio con los entrecerrados
-Amu: *Eso lo es de sobra* Lo sé, lo sé, no hace falta que lo repitas-Me levante dirigiéndome a la puerta-Nos vemos…-Abrí la puerta y antes de salir lo mire-…Kuro-Le sonreí y sin esperar su respuesta salí del cuarto cerrando la puerta detrás de mí-*Tengo….que hacerme más fuerte…eso es lo que dijiste Kuso…y tendré que cumplirlo*
-Camine por los pasillos buscando a Megumi y a Natsuno, sin éxito. Incluso buscando su olor no los encontraba, es imposible que ninguno de los dos este en casa, tendrían que estar preparándome para mi enlace con Kuro, ¿¡entonces porque no logro encontrarlos!?
-Baje a la sala e intente calentarme con el fuego que había en la chimenea, todavía no se me pasaba el frio que sentí con la ráfaga, segundos después todo paso en cámara lenta: el muro y la puerta principal quebrándose frente a mí, un trozo del tamaño de mi mano dirigiéndose contra mi cabeza, yo cayendo al suelo por el impacto, un demonio de aspecto horrible de piel que era de reptil de un color rojo, este estaba en cuatro patas, con brazos deformes en la espalda, con un ojo amarillo y el otro colgándole a duras penas por la cuenca vacía, los dientes terminados en punta, baba amarilla saliendo de su boca, seguramente un nivel 5, dirigiéndose a mí. 3 metros… 2…metros… 1 metro cada vez más cerca de mí.
-Ya sentía su aliento caliente en la cara cuando soltó un alarido muy agudo retorciéndose, lanzándome con sus patas delanteras contra la pared con una fuerza tremenda que por unos instantes pensé que perdería la consciencia.
-Desorientada dirigí mi mirada hacia el demonio tratando de enfocarlo, cuando por fin logre establecerme un poco observe que los brazos en su espalda ya no estaban, todos estaban tirados en el suelo doblándose. Vi la razón por la que sus brazos estaban así: en la pared junto a él estaba una guadaña hundida en esta.
-Amu: *Esa guadaña… esa guadaña es Nozomi… es la guadaña de Megumi*
-Sentí como alguien me levantaba de un tirón y pasaba mi brazo por su hombro ayudándome a estar de pie. La persona de quien se trataba era Kuro, a su lado estaba Zero con el labio sangrándole y uno que otro raspón en la cara. Escuche las voces de Megumi y Natsuno distorsionadas detrás de mí, mire sobre mi hombro y ellos se encontraban combatiendo al demonio. Kuro me ayudo a caminar pero al medio metro sentí como si algo me atravesara el estómago y algo espeso y caliente esparcirse por mi estómago. Mis rodillas flaquearon e incluso con Kuro a mi lado no basto para que mi caída se detuviera. De un segundo a otro me encontraba en el suelo viendo el rostro desesperado de Kuro y Zero frente a mí. Ambos estaban gritando, pero no escuchaba lo que decían, todo a mí alrededor estaba distorsionado. Kuro me agarro entre su brazos mientras que yo sentía mis parpados pesados y fui cerrando poco a poco los ojos, ahí todo se volvió oscuro…con un sabor dulce en mi boca, muy, muy dulce.
Yuki: Si, si, lo sé, casi dos meses sin actualizar y aparte el capítulo es demasiado corto, algunas me querrán matar y otras seguramente ni se dieron cuenta, en realidad chic s tuve un bloqueo, nada se me venía a la mente, siempre que intentaba escribir, por más que forzara mi mente no se me venía nada, solo logre hacer este poco, espero no me maten, nos leemos en el siguiente cap.
