Capítulo : Otro día más

Llegó la noche, pero Jimmy no podía dormir. Algo, o mejor dicho alguien lo estaba atormentando. Para colmos, la casa de enfrente ( la casa de cierta niña rubia) aparentaba estar de fiesta, se hallaba llena de luces, y se escuchaba música y muchos ruidos. Voces, sólo voces como ecos, que le retumbaban en su oído. Se levantó, y se sentó en la cama a reflexionar. Su perro, Goddard, estaba durmiendo, pero percibió lo que estaba aconteciendo y fue a sentarse al lado de su amo.

" Qué te sucede, amo?"

Jimmy lo miró con cara lastimosa.

" Nada, amigo. Ve y descansa tú, que puedes"

Pero Goddard no pensaba dejarlo en ese estado,

" Es Cindy, verdad?"

El niño genio no le respondió, pero un suspiro le dio la pauta de que era por aquella razón su infelicidad.

" No hay muchas opciones, Puedes, simplemente, ir a buscarla"

" No Goddard. Así no se hacen las cosas"

Y entonces, se paró frente a la ventana y comenzó a observar la casa de Cindy, que de un momento a otro, se deshabitó. Cuando esto ocurrió, pudo ver los adentros de la habitación de Cindy, quien estaba acomodando todos los regalos de Mark, con una cara sonriente. Y así la miró toda la noche, no se cansaba de observar como dormía aquel angelito bello. Nada dura nada; la noche, estalló en un día nublado y húmedo, y Jimmy seguía mirando a Cindy, quién estaba ¡acomodando su mochila! Pues claro, faltaba media hora para que el micro los pase a buscar, y Jimmy estaba con pijama aún. Desesperado, corrió e intentó desayunar, pero la bocina del micro lo interrumpió. Tendría que subir y afrontar la realidad de que Cindy se sentara con Mark, y ya no le importara. Así lo hizo, pero no vio a Cindy, ni a Mark, ¿pero entonces porqué estaría preparando una mochila? Pensó que Mark, ahora que eran ricos, la llevaría en limosina. Y comenzó a observar por la ventanilla, los árboles, los perros, todo...Hasta que sintió una mano que se le posaba sobre su hombro:

" Hey Jimmy"

Por unos instantes se alegró; especuló que era Cindy. Pero no, era Jennifer, quién se le fue a sentar a su lado.

" Al final...¿qué hiciste?"

"Que hice de que?"

"Pues...ya sabes. Hablaron?"

Jimmy captó lo que Jenny le estaba diciendo en una especie de código,

" No. Así no se hacen las cosas. Con las palabras no voy a solucionar nada, mucho menos viniendo de Cindy, ella nunca daría el brazo a torcer"

"Está bien. Te la pierdes. Hoy no creo que tengas oportunidad"

Jimmy asintió, pero como estaba dormido, no entendió lo que Jenny le decía, estaba tan adormecido que no era conciente de sus actos.

"¿Porque lo dices? Puedo hablar con ella hoy. Aunque seguro que sus guardaespaldas no me dejaran acercarme"

Jenny negó con una sonrisa realmente pesimista.

" No hablará contigo porque Mark la invitó a Puerto Madero, al restaurante más caro de todo el planeta"

" Pero...¿irá con mochila?"

Las preguntas que estaba haciendo Jimmy no eran las que solía hacer; estaba desconcentrado infinitamente...

" De qué hablas. Ni su madre ni la Seño Ave saben que se va a fugar de la escuela"

"¿Fugar de qué?"

" De la escuela. Cindy le está mintiendo a su madre, para escaparse con Mark. Mi hermano hace lo mismo...Buah, Creo que hablé de más"

Jimmy no podía creer lo que estaba sucediendo,. Una cosa así nunca podría venir de Cindy Vortex, señorita perfección.

" ¨¿De veras?"

" ¡! De veras..."

Y así se terminó la conversación, porque ya había llegado al destino final; la escuela. Jimmy caminaba como un sonámbulo; y no era para menos, no había dormido en toda la noche. Él no acostumbraba a dormir tarde, pero esa noche le había sido distinta. Un desvelo. Un desvelo, nada más.

Todos los niños entraron al establecimiento. Ese día, la señorita Ave comenzaría con un dictado de Naturales; el tema de Átomos, el que prefería Jimmy.

" Comienzo a dictar. Dejen sangría, comiencen con mayúscula. Los átomos son partículas que forman la materia y..."

Y así estuvo por una hora. Luego de que a todos se les acabaran las biromes, y les comenzaran a doler las manos, y el dictado terminara, comenzó a explicara todo lo escrito. Eso implicaba otra hora más, hasta llegar a la hora de salida.

Pero Jimmy ni podía enfrentarse a sus párpados, que amenazaba con cerrarse por un profundo cansancio y sueño.

" No puede ser que te duermas, Jimmy, este es el tema que más te apasiona" Se decía a si mismo, tratándose de controlar. Pero no pudo.

Media hora después, se despertó por los gritos de la señorita Ave.

" Que sucede contigo, Jimmy? ¿Quieres que te traiga una sábana?"

Todos comenzaron a reírse. Jimmy contestó:

" Lo siento, no volverá a pasar"

Y la señorita ave siguió con su explicación. Pero ahí iba de vuelta. El sueño lo amenazaba otra vez, y no se contuvo. Luego, sintió unos empujones, era el encargado de la limpieza en el aula. Jimmy se alertó cuando vio que el aula estaba vacía, y no había nadie en toda la escuela.

" Chico, hace cuatro horas terminó la clase. Vete a tu casa"

" Oh si, si"

Y Jimmy se marchó a su casa, eso que le había ocurrido, era presagio de mal acontecimiento...