"Una nueva historia"
Capítulo 2
Autora: micku-chan
Y así pasaron dos años, Serena ya era toda una mujer, ya hacía tiempo que había superado lo de Darien, todo gracias a sus amigas, sabía que ellas siempre estarían allí para lo que fuese, después de terminar con Darien, Serena se había ido un año y medio fuera del país a Inglaterra para terminar su carrera ahí, ya que le habían ofrecido una beca, a pesar de haberse marchado lejos, siguió manteniendo contacto con sus amigas, ya había anunciado su regreso y todas la estaban esperando en el aeropuerto…
- ¡Qué bien, por fin veremos a Serena – dijo una chica de cabello negro y largo - se la echaba mucho de menos.
- Tienes razón Ray, por fin la volveremos a ver – le dijo a la chica de cabellos negro, ella era alta y su pelo era castaño, sostenido en una cola alta.
- ¿Creéis que vendrá con algún chico guapo? – preguntó una rubia con el pelo suelto.
- ¡MINA! – dijeron todas, mientras ésta se reía pícaramente.
- ¿Qué! Podría haber pasado – dijo Mina, mientras una enorme gota de sudor resbalaba por la cabeza de las presentes.
- Buenas tardes a todos, les informamos que el vuelo Inglaterra-Tokio está aterrizando en la Terminal 2 – dijo la voz de una chica a través de un interfono.
- Ya la veremos – dijo Lita la chica del pelo castaño.
- ¿Cómo será ahora? – preguntó una niña al parecer la más joven del grupo, de piel pálida y pelo negro corto y unos ojos grises.
- Tranquila Hotaru, uno no cambia mucho en un año y medio, y más aun en Serena, eso es biológicamente imposible – dijo Ray. Todas mostraron una risa fingida.
De pronto hubo un ruido en la Terminal 2, todo el mundo se fijaba en una mujer muy hermosa, sus cabellos dorados, brillaban a la luz del sol, todo el mundo la fotografiaba, los hombres no dejaban de dar suspiros por ella, era alta esbelta, una mirada preciosa, si no fuera que era humana se diría que se trababa de un ángel.
- ¿Qué sucederá ahí? – preguntó Michiru .
- Al parecer ha llegado alguien famoso – dijo Haruka – de otro modo no armarían tanto escándalo.
- Fijaros es una chica muy bonita – dijo Amy - ¿quién será?
- No lo se, ni me importa – dijo Ray – Haber si Serena no se tarda tanto…
- ¡Hola chicas! – todas se giraron para ver quien era, se trataba de la hermosa mujer que habían visto llegar, corría hacia ellas con tanta ligereza que se diría que volaba, parecía como si sus pies no tocaran el suelo.
- Perdona – dijo Michiru - ¿Nos conocemos?
- Pero… chicas… ¿acaso no me reconocéis? – dijo la mujer cuando se empezaron a cristalizar sus ojos - ¿tan pronto me habéis olvidado?
- ¿SERENA! – dijeron todas, esos lloros eran inconfundibles, todas se quedaron estupefactas al ver a su princesa.
- ¿Qué decías Ray, como que nadie puede cambiar en tan poco tiempo – dijo Hotaru sarcásticamente.
- Vaya… Serena cuanto has cambiado – consiguió decir la sacerdotisa.
De pronto todas corrieron y abrazaron a su princesa.
- Chicas os eche mucho de menos – dijo Serena derramando unas lágrimas de felicidad.
- Vaya bombón, este tiempo transcurrido te ha favorecido… - dijo Haruka ruborizándose ligeramente – estás tan… diferente…
- Dirás tan hermosa – dijo Mina – no me extrañaría que tuviera novio –dijo la chica mostrando una sonrisa maliciosa.
- ¡MINA! – dijeron todas
Serena solo se limitó a sonreír. Ya en el taxi…
- Oye Serena, por qué tanto escándalo por tu llegada – preguntó Lita.
- Ah… veréis… lo que pasa es que aya en Inglaterra, me escogieron para una obra de teatro, que se hizo muy famosa, y resulta que al enterarse de que volvía para Tokio, pues decidieron hacer una gira, creo que no me querían soltar – contó Serena – y pues supongo que se deberá a que yo soy la protagonista de la obra…
- ¡Vaya, si que has cambiado en todo sentido – dijo Hotaru – me alegro que esté bien princesa…
- Venga chicas, sigo siendo la misma Serena Tsukino de siempre – dijo la chica mientras se reía y se dio un tortazo contra la ventanilla y lloraba de manera muy exagerada - ¡Ay! Que dolor, que dolor…
Mientras una enorme gota de sudor resbalaba por sus cabezas…
- Creo que tienes razón Serena en algunos aspectos no has cambiado – dijo Ray.
- Y por cierto¿dónde te vas a quedar Serena? – preguntó Mina - ¿en casa de tus padres?
- No que va ya tengo una departamento muy bonito que está cerca del parque Nº 10…
- Vaya…
Al otro lado de la galaxia…
- ¡Seiya, corre la princesa quiere vernos – gritó un joven de cabellos plateados.
- Ahora voy – respondió Seiya .
- Ya en la sala donde se encontraba la princesa…
- Princesa¿qué desea? – preguntó Seiya, mientras éste y sus hermanos hacían una reverencia.
- Levantaos – dijo la princesa Kakyuu – veréis, he tomado le decisión, de que ya es hora, de dejar de que estéis a mi servicio, es decir a partir de ahora sois libres, para disfrutar de vuestra vida sea en el lugar que sea…
Los tres chicos se quedaron sorprendidos, ante esta noticia…
- Pero princesa, nuestro deber es protegerla – dijo el joven de cabellera castaño y ojos violetas.
- Taiki, es más que una decisión, es una orden que yo os mando, sed felices, ya es hora, no creéis.
- Como usted ordene princesa – dijo Yaten.
- Y bien chicos¿que piensan hacer? – preguntó la princesa- se lo mucho que extrañáis a las sailors de la tierra, yo os recomendaría que hicierais aya vuestra nueva vida¿qué decís?
- Princesa, nada nos haría mas felices… - dijo Seiya.
- Bien pues tenéis exactamente, doce horas para recoger vuestras cosas y marcharos – dijo la princesa esbozando una sonrisa.
Cuando se marcharon hacia sus habitaciones para recogerlo todo, Seiya no cabía en sí de felicidad…
- Solo un poco más, y podré volver a verte bombón, no sabes cuando anhelaba este momento… aunque seas feliz al lado de tu novio, me conformo con estar cerca de ti…
Mientras que en la Tierra, en el departamento de serena.
- Vaya, es mas bonito de lo que parecían en las fotos – dijo Serena.
- Pues tienes razón – dijo Amy – está muy bien este departamento.
- Venga chicas tomad asiento, ahora vengo iré a comprar algo para preparar la cena, estáis en vuestra casa – dijo Serena mientras sonreía, era esa sonrisa, que llenaba todo de luz para las sailors, esa sonrisa que las hacía sentir tan seguras a su lado.
- Está bien si quieres te acompaño – se ofreció Mina.
- No hace falta, muchas gracias enseguida regreso –dijo la rubia mientras salía de casa.
- La verdad es que ya no es esa niña que nosotros conocíamos – dijo Ray.
- Tienes razón – concordó Michiru – ésta ya es toda una mujer.
- No se pero tengo un mal presentimiento – dijo la sailor de la destrucción.
- No creo que nada malo pase Hotaru, tranquila – dijo Haruka mientras la abrazaba…
Serena ya había salido de una tienda cercana, había comprado algunas cosas para prepararles una deliciosa cena a las chicas, aun no les había dicho que ya sabía cocinar, mientras pensaba en ello no se dio cuenta de que un joven que iba en dirección contraria con un libro en mano, el cual lo estaba leyendo, pasaba, sin darse cuenta, ambos chocaron este hizo que a Serena se le cayeran todas las cosas.
- Seré torpe – dijo el chico mientras ayudaba a Serena a recoger las cosas, tenía el pelo negro y corto y unos ojos azules – discúlpame estaba tan… - de pronto se fijo en el rostro de la chica que las palabras se le fueron de la boca - … Se… ¿Serena?- consiguió decir el chico…
- ¡Darien! – dijo Serena, sin previo aviso, su corazón se aceleró, recordó aquella tarde, aquella cafetería, aquella confesión de su entonces novio, y un dolor que ella creía curado, apareció en su corazón, dejando las cosas se disponía a salir corriendo, pero un brazo se lo impidió…
- ¡Serena, cuanto tiempo sin verte, vaya que si has cambiado… - dijo Darien fijándose en la apariencia de ahora, esa joven que lo miraba, no era aquella niña torpe y llorona de antes, era ya una mujer y muy hermosa, pero Serena se soltó de él y salió corriendo - ¡SERENA! Espera…
Al igual que aquella tarde de hace dos años, la chica corrió y corrió, no podía creerlo aun tenía esa herida que él le había causado, no podía soportar, el dolor la asfixiaba por dentro, sentía como poco a poco las fuerzas la abandonaban y, al igual que aquella tarde caía lentamente al suelo, pero esta vez no había nadie quien la levantara, se le nubló la vista y perdió el conocimiento. De pronto empezó a llover copiosamente, mientras que cerca de donde se hallaba Serena inconsciente tres estrellas fugaces aterrizaban en ese mismo instante…
- Por fin estamos aquí – dijo un joven de pelo negro largo y ojos azules – podré volver a verla…
- Si Seiya, pero recuerda que tiene novio – dijo el mas bajo de los tres de ojos verdes.
- Ya Yaten déjale, a él le gusta ilusionarse – dijo el más alto de los tres – nunca cambiará.
- Venga tenemos que buscar un lugar donde pasar la noche – dijo Seiya – está lloviendo y fuerte, no quiero mojarme…
- Como digas – dijo Yaten.
Mientras los tres jóvenes iban caminando, justo pasaban por un parque cuando Seiya observando al paisaje, se dio cuenta de que había alguien desmayado en el parque por el que pasaban…
- Chicos mirad allá – dijo – parece que alguien se ha desmayado.
- A lo mejor es un vagabundo que se ha quedado dormido – dijo Yaten sin siquiera mirar a la dirección que Seiya apuntaba.
- Creo que deberíamos ir a ver, sea quien sea no se merece estar bajo esta lluvia – dijo Taiki el más alto de los tres.
Los tres corrieron y al acercarse, les pareció que la vista les estaba jugando una mala pasada, ya que ese ser que se hallaba en el suelo se asemejaba mucho a un ángel, sus cabellos de oro estaban esparcidos por el suelo, esa mirada les daba una tranquilidad nunca antes imaginada, la verdad es que ese "ángel" era de una belleza inimaginable. Seiya rápido se agachó y recogió a la hermosa criatura, al ver bien su rostro se sorprendió, no podría ser cierto, acaso el destino le estaba engañando, la miro atentamente durante unos segundos, cuando después dijo.
- Pero ¿cómo?...- dijo - chicos venir acá y mirad a la joven…se parece tanto a…
- Pero si es Serena – dijo de pronto Yaten – vaya cuanto ha cambiado…
- Pero ¿qué hace ella aquí? – preguntó Taiki, quien le tomo la mano para comprobar su pulso – solo está inconsciente¿qué le habrá pasado?
Seiya deberíamos de llamar a las chicas, seguro que ellas estarán preocupadas… Seiya… ¡Seiya! – Yaten levantó tanto la voz que saco a Seiya de su ensimismamiento, no podía dejar de mirarla, el sentía que tenía que protegerla, no quería que nada malo le sucediera a esa criatura.
- ¿Si?.. que ah si tienes razón, debemos llamar a las chicas.
Los tres corrieron hasta ver una cabina de teléfono, Seiya llevaba en brazos a Serena, quien a pesar de estar inconsciente no se dejaba de notar lo mucho que había cambiado…
Taiki habló con Haruka por teléfono, les había dado la dirección de el departamento de Serena y ellos rápido fueron para allá, al llegar tocaron el timbre y subieron deprisa las escaleras.
- ¿Qué pasó? – preguntó una desesperada Ray.
- No lo sabemos – dijo Seiya quien aun llevaba a Serena en brazos – simplemente llegamos, pasábamos por ahí y la encontramos en el suelo de el parque…
- Y por cierto¿qué hacéis vosotros aquí?- preguntó Haruka sin rodeos.
- Ahora no es el momento – dijo Taiki – Serena podría tener fiebre no sabemos cuanto tiempo ha estado bajo la lluvia, tenemos que llevarla a su habitación.
- Todos se fueron a la habitación de Serena, y la recostaron en su cama, t la observaban, esperando a que se despertara…
- Pero que le habrá pasado – dijo Amy.
- No se pero algo me dice que tiene que ver con ese tipo – dijo Haruka apretando los puños - está en la misma situación que antes¿lo recuerdas Michiru?
- Es verdad, nosotras también la encontramos, estaba a punto de caerse al suelo pero Haruka detuvo su caída, y la llevamos a casa.
- Pero¿por qué le había pasado eso? – preguntó Seiya preocupado.
- Porque Darien había terminado con ella – dijo Lita – ella no quería aceptarlo y se fue corriendo, y se quedó sin fuerzas.
- Maldito Darien – pensó Seiya para sus adentros – no te perdonaré haberle hecho esto a mi bombón…
- ¿por qué terminaron? – preguntó Yaten, venciéndole la curiosidad.
- Porque ese, se había enamorado de otra chica – respondió Mina – yo misma los vi besándose, eso fue antes de que terminara con Serena…
- Vamos, princesa tiene que mejorarse – dijo Hotaru mientras lloraba, tomó su mano para transmitirle un poco de calor.
Serena abrió lentamente los ojos, ya era de día se dio cuenta de que se encontraba en su habitación, no sabía como había llegado allí. Se levantó y se fue al salón, ahí vio a todas sus amigas que se habían quedado a dormir, pero también vio a tres hombres, a los cuales no los había visto durante casi cuatro largos años, se alegró tanto de verlos, pero no quiso despertar a nadie, así que se vistió y salio a comprar cosas para preparar el desayuno. De regreso, sus amigos aun seguían durmiendo, así que ella se fue directamente a la cocina y empezó a preparar el desayuno. Mientras que en el salón Seiya se despertó por el olor de la comida, vio que alguien estaba en la cocina pensaba que era alguna de las chicas, pero cuando se asomó a la puerta vio que era ella, una felicidad lo embargaba de ver que ya estaba bien, tampoco pudo dejar de notar como el tiempo había transcurrido en ella para bien, silenciosamente se acercó a ella y la tomo por la cintura abrazándola…
