Mimi y Takuya intercambiaron miradas totalmente sorprendidos ante la situación que estaban viviendo, Sora y Taichi los habían escuchado y la verdad es que ninguno sabía que decir o que responder.
—¿Mimi estabas embarazada?— Preguntó Sora casi sin poder creer lo que había escuchado ¿su mejor miga embarazada? ¿Había escuchado mal? No, al parecer no, porque Mimi y Takuya intercambiaban miradas nerviosas que ella podía notar.
—¿E?— Balbuceo la castaña sin saber que decir, no estaba lista para enfrentar esa situación.
—Takuya, Mimi.— Habló Taichi— Respondan.
La Tachikawa se mordió el labio inferior.
—¿E? Taichi, Sora.— Takuya intento hablar— N-no creo que escucharon bien.
—¿Cómo que no?— Preguntó la pelirroja— Ambos lo escuchamos ¿cierto Taichi?
—Si.— Respondió el Yagami.
—Si, pero no creo que hayan entendido que...—Takuya intentó hablar, pero, Mimi lo tomó del brazo.
—Takuya.— Mimi llamó a su hermano y este volteo— Lo mejor será decirles la verdad.
Takuya alzó una ceja— ¿Estás segura?
Mimi asintió— Si.— Contestó— Además...—Suspiró— Son amigos.— Volteo hacia Taichi y Sora.
Takuya se mordió el labio inferior, él haría todo lo que le dijera su hermana, finalmente era su secreto y bueno, si ella estaba dispuesta a contarlo, la ayudaría. Suspiró y volteo hacia sus amigos, Sora y Taichi eran de confianza, no lo dudaba, pero también debía considerar que Taichi y Yamato eran muy buenos amigos y Sora también era amiga de Izumi hermana de Yamato. Bueno, fuera como fuera ellos eran sus amigos ¿no? Podían confiar en ellos.
Mimi observó a sus amigos y suspiró— No escucharon mal.— Respondió.
Sora y Taichi intercambiaron miradas.
—Cuando me fui a Estados Unidos yo estaba embarazada.— Contestó Mimi— De Yamato.
—P-pero ¿cómo?— Preguntó Sora.
—Bueno, creo que es obvio cómo se puede quedar embarazada.— Habló la castaña un tanto ruborizada.
—Si, lo sé, pero, me refiero ¿a cómo no lo supimos?— Preguntó Sora— Si estabas embarazada de Yamato ¿por qué no se lo dijiste? ¿Cómo ocultaste de nosotras tus amigas Izumi y yo? o mejor dicho ¿cómo no nos dimos cuenta?
—Bueno, creo que supe ocultarlo muy bien.— Comentó Mimi— Y pues, porque no me enteré de mi embarazo mucho antes de irnos a Estados Unidos.
—Pero ¿cómo no lo dijiste antes de irte?—Preguntó Taichi.
—¿Fue por eso que te fuiste así sin más?— Cuestionó Sora.
Mimi suspiró— Pues si...—Contestó con dificultad—Ya te había comentado Sora que tuve una razón por la cual me fui, un proceso en mi vida y esta fue la razón, el gran proceso que tuve que vivir con mi embarazo y pues, sé que en un momento algunos creyeron que fue por mi hermana, pero, la verdad es que la que andaba con problemas era yo, Damar simplemente me cubrió con su problema.— Comentó la castaña y bajó la mirada.
—¿Y por qué te fuiste así sin más? ¿si el padre de tu hijo estaba aquí en Japón?— No pudo evitar preguntar Taichi.
—Es ahí donde comienza lo difícil de esta historia.— Habló Mimi— Cuando me fui estaba embarazada, pero, por orden de mi padre tuvimos que irnos de aquí y no pude contarle la verdad a Yamato.
—Yamato tenía el derecho a saber.— Habló Taichi.
—Lo sé.— Suspiró Mimi— Pero, ustedes conocen a mi padre, él siempre hace prevalecer su opinión, él no quiso por ningún motivo que alguien supiera de mi embarazo, ya que, para él era una vergüenza que su hija fuera madre soltera y adolescente.— La castaña se abrazó así misma— Fue así cuando él se enteró de mi embarazo que nos sacó de un momento a otro de este lugar y nos llevó a Estados Unidos para que yo...—Cerró los ojos y las palabras dejaron de fluir, era muy dificil hablar de eso.
—¿Tú padre qué?— Preguntó Taichi.
Takuya abrazó a su hermana— Mimi no es necesario que lo digas.
Mimi abrió los ojos y tomó el brazo de su hermano— Si, es necesario Takuya.— Suspiró— Necesito sacarme esta verdad del pecho.— Alzó la mirada— Además, en cualquier minuto todos sabrán y prefiero que mis amigos sepan por mi boca que por otros.
Sora y Taichi no pudieron evitar sentirse ciertamente conmovidos ante la chica, verdaderamente se veía indefensa, hablaba de una forma muy débil.
Mimi nuevamente suspiró y volteo hacia sus amigos— Cómo les estaba diciendo mi padre nos sacó lo más rápido que pudo de aquí y nos llevó a Estados Unidos para que yo...—Suspiró.
—¿Para que tú?— Preguntó Taichi.
Mimi enterró sus uñas en su chaqueta— Abortara.— Respondió sin más.
—¿Qué?— Preguntaron tanto Sora y Taichi a la vez.
—Si.— Contestó Mimi y unas lágrimas salieron de sus ojos.
La Takenouchi y el Yagami intercambiaron miradas ante esto, sabían que Keisuke Tachikawa era un hombre de poder y temible cuando se lo proponía podía hacer cosas muy crueles ante la sociedad, pero ¿matar a su propia sangre?
—Pero, no lo logró.— Esta vez habló Takuya al ver el rostro sorprendido de sus amigos— Cuando llegamos allá el embarazo de Mimi estaba muy avanzado y por ende no pudo abortar por el bien de su salud.
La chica de ojos miel asintió— Exacto.
Sora alzó una ceja y dirigió su mirada hacia su amiga— Entonces ¿qué ocurrió?— No pudo evitar preguntar— ¿Qué no hayas abortado significa que tuviste al bebé?
Mimi suspiró— La bebé.— Corrigió— Fue una niña.
—¿Una niña?— Preguntaron Sora y Taichi a la vez.
Mimi asintió— Si.
—¡Vaya! Que mala puntería la de Yamato, no le dio para que fuera niño.— Bromeo Taichi llevandose la mirada fulminante de Takuya.
—¡Taichi!— Sora lo golpeo con su codo— ¡Ponte serio! ¡Esto no es un juego!
El Yagami llevó una mano a su estomago en donde Sora lo había golpeado, hizo una mueca— ¿e? Lo-lo siento.— Se disculpó.
Takuya y Sora rodaron los ojos ante esto, la pelirroja volvió su mirada hacia su amiga mientras que el moreno verdaderamente consideró la idea de darle un buen puñetazo luego de esa conversación.
—Por favor, continua Mimi.— Habló la Takenouchi.
Mimi suspiró.
—¿Qué ocurrió con tu hija?— Preguntó Sora.
Mimi bajó la mirada— Mi padre quería darla en adopción, en un país lejano donde nunca pudiera encontrarla, pero...—Alzó la mirada— Yo no lo iba a permitir.— Apretó su puño— A mi hermana se le ocurrió una idea con una amiga que tenemos en Estados Unidos, llamada Alice, y con Takuya le pedimos a la matrona que mintiera, que le dijera a mi padre que la bebé no había resistido, que estaba muerta y fue así como nosotros logramos darla en adopción a una persona que yo conocía, que sabía que la iba a cuidar y que hasta la fecha ha sido una excelente madre para con Natsumi.
—¿Natsumi?— Preguntó Taichi sorprendido.
—Ese es el nombre de la hija de Yamato y Mimi.— Respondió Takuya.
—Y a pesar de que regresaste.— Habló Taichi.
—Sé que esconder este secreto no tiene justificación absoluta, sé que debí haber hablado cuando pude, Yamato merecía saberlo, pero, era complicado.— Suspiró la castaña.
Taichi volteo hacia la chica— ¿Y planeas decirselo algún día?
Mimi asintió— Si.
—¿Y cuando?— Nuevamente preguntó el Yagami.
—No estoy segura.— Respondió la chica de ojos color miel.
Taichi la observó un tanto preocupado— ¿Cómo no estás segura?— Preguntó, sabía que ese tema no lo involucraba a él, pero desde que había ocurrido eso en la noche del 3 de Abril había aprendido que ocultarle a un ser querido algo tan delicado no era algo bueno, él por querer "proteger" a Hikari y no querer quedar mal ante ella no le había comentado que consumía sustancias, alcohol y fumaba, pero, finalmente la había desilucionado de una peor forma al haberle mentido y no ser el ejemplo a seguir que ella necesitaba— Mimi esto es muy serio, Yamato debe saber.
—Lo sabemos Taichi.— Habló esta vez Takuya—Pero, por favor entiende la situación es muy compleja nos fuimos por tres años, no podíamos llegar así como así y decirle la verdad de una.
—Primero tengo que buscar la forma de decirselo.— Suspiró Mimi— Y eso ha sido lo difícil, porque para mi ha sido difícil porque no es algo sencillo de entender, conociendo a Yamato, debo encontrar forma apropiada de que me entienda.
—¿Y te demoraras mucho en encontrar esa forma?— Preguntó Taichi— No quiero sonar mala onda ni nada como el estilo, pero son tres años Mimi, Yamato ha sido padre por tres años y no lo sabe.
Mimi bajó la mirada y suspiró, entendía que Taichi hiciera esas preguntas o hablara así, Yamato era su mejor amigo no le gustaba ocultarle las cosas— Bueno, no creo que me tarde mucho.— Se mordió el labio inferior— Luego de la llegada de Nene, creo que tendré que decirle a Yamato la verdad cuanto antes.
—¿Por qué por la llegada de Nene?— Preguntó Sora sorprendida.
—¿Qué tiene que ver la ex de Takuya en esto?— Cuestionó el Yagami.
—Alice, la chica de adoptó a mi hija es prima de Nene y la verdad es que Nene siempre ha querido fastidiarla, por ende se puso a investigar y finalmente logró descubrir que esa niña es hija mía y quiere decirle a todo el mundo mi secreto.— Respondió la castaña de ojos miel.
Sora abrió la boca sorprendida— ¿Qué? Pero ¿por qué?— Preguntó.
—Porque quiere regresar conmigo.— Respondió Takuya.
—¿Sólo por eso?— Preguntó la pelirroja casi sin poder creer lo loca que estaba esa chica como para jugar con algo tan fragil solo por un chico— ¿Ningún otro motivo más?
—Ningún otro.— Respondió Takuya.
—¡Vaya!— Sora exclamó un tanto horrorizada— Así que, verdaderamente está tan loca como ustedes dicen.
—Yo diría que peor.— Contestó el moreno.
—Pero, en ese contexto con más razón debes decirle a Yamato que tienen una hija juntos.— Habló Taichi.
—Lo sabemos Taichi, pero, por favor entiende la situación es difícil.— Habló Takuya.
—Lo entiendo, pero mientras más aplaces esto peor va a ser.— Contestó Taichi— Conozco a Yamato, conozco su forma de ser.
—Pero, Taichi, Mimi ya nos explicó porque no pudo decirle la verdad en su tiempo.— Habló esta vez la pelirroja.
—Lo sé y lo comprendo.— Contestó el Yagami— Sora tu fuiste testigo que todo lo que sufrió Yamato cuando Mimi se fue, ahora que regresó las cosas entre ellos se arreglaron, pero, dudo que actue muy bien al saber que le ocultaste esta verdad.
—Lo sé.— Suspiró Mimi— Y créeme llego a tener pesadillas con eso, pero, Taichi no sé como decirselo.
—Ya llegará ese momento, pero, hasta entonces, Taichi, Sora ustedes deben actuar como si no hubieran sabido esto.— Habló esta vez Takuya.
—¿Quieres decir que los ayudemos a esconder este secreto?— Preguntó Taichi.
—Si.— Contestó el moreno— Al menos hasta que Mimi encuentre la forma de decirselo, es un tema muy complicado no podemos dejar que otra persona más lo sepa o que llegue antes a los oidos del rubio.
—Por mi no hay problema.— Habló Sora— Finalmente Mimi es mi mejor amiga.
La castaña sonrió ante esto.
Taichi se mordió el labio inferior, verdaderamente no sabía si sería capaz de esconder ese secreto, Yamato era su amigo, su mejor amigo, el merecía saber.
¡Pero!
No podía actuar de una manera impulsiva, aunque no estuviera de acuerdo con que le siguieran ocultando la verdad, él le quería demostrar a todos que no era impulsivo, en otro momento hubiera ido de frente a decirle a Yamato, pero, ahora estaba intentando cambiar y pues, la Tachikawa también era su amiga ¿no?
—Conmigo tampoco hay problema.— Respondió el Yagami— Guardaré el secreto, finalmente es algo de ustedes, pero, Mimi mientras más lo aplaces más grande será el enfado del rubio.
—Lo sé.— Suspiró la castaña.
—Y considerando que Nene lo sabe es mejor que lo sepa por ti antes que por ella, que por cierto ¿qué planean hacer con esa chica?— Preguntó Sora.
—Pues, yo tengo una idea.— Respondió Takuya— Pero, ya me encargaré de eso.
—¿Una fiesta de disfraces?— Takeru preguntó sorprendido observando el gran poster que tenía Hikari en sus manos.
La castaña Yagami asintió— Si.— Respondió— Con la temática de superheroes.
Takeru alzó los ojos esa temática nunca la habían utilizado en alguna fiesta, sonaba interesante, aunque debía admitir que esto implicaría un gran debate en él, ya que era fan tanto de los superheroes del UCM y DCEU, podría vestirse de Ant-Man o de Superman— Me gusta la idea, ojalá a los demás les guste.
—Si, ojalá.— Respondió Hikari— Y espero que no se repita mucho un mismo traje así como ocurrió con el vestido de Izumi la última vez.
Takeru asintió horrorizado al recordar aquella hazaña de su hermana en baile del amor del año pasado, había escogido la temática de todos ir vestidos de blanco o negro y una chica había vestido exactamente la misma ropa que ella, ambas habían discutido bastante por esto y la fiesta había terminado bastante temprano debido a que se habían comenzaron a lanzar comida.
—Bueno, hay muchos superheroes ojalá mi hermana sepa ser autentica.— Respondió el Ishida— ¡Por cierto! ¿De qué te gustaría ir vestida?
—No estoy segura.— Respondió la Yagami— Pero, ya se me ocurrirá algo tenemos toda una semana para elegir, lo que está más próximo es la fiesta de Sora.
—¡Verdad!— Contestó el rubio— Estoy muy ansioso por esa fiesta, generalmente son increíbles.
—Si.— Respondió Hikari— Aunque ya quiero ver el rostro de la abuela de Sora al saber que mi hermano y...
—¿E? Disculpen, chicos.— Una voz interrumpió a Hikari provocando que ambos adolescentes voltearan encontrándose con un hombre de aparentemente cuarenta años de cabello rubio, ojos grises y piel pálida.
Takeru e Hikari observaron al hombre, llevaba un traje formal con una chaqueta azul, unos jeans, vestía de una forma bastante casual, ninguno de los dos recordaba haberlo visto algunas vez.
—Hola chicos.— Habló el hombre.
—Hola.— Respondieron ambos.
—Disculpen por molestarlos, pero estaba recorriendo el lugar y necesitaba hacerle algunas preguntas.
Hikari y Takeru intercambiaron miradas ¿qué preguntas quería hacerles?
—¿Tienen tiempo?— Preguntó el hombre.
—¿E? Si.— Contestó la Yagami y volteo hacia el hombre, evidentemente no era japonés, parecía ser americado por sus rasgos físicos, además tenía ascento inglés, quizás era Estado Unidense o Canadiense, ya que, no tenía ascento británico como para asociarlo con Londres— Diganos ¿qué preguntas quiere que respondamos?
—Unas preguntas con respecto al lugar.— Respondió el hombre antes de sacar de su chaqueta una libreta con una portada en donde habían unas letras en mayúsculas "DEA" decía en la portada, Hikari y Takeru notaron esto, pero no le dieron mucha importancia, seguramente esas iniciales eran de su nombre o algo así— ¿Es un lugar tranquilo?
—¿E? Generalmente.— Respondió el rubio— De vez en cuando hay movimiento.
—¿De vez en cuando?— Preguntó el hombre— ¿A que te refieres con eso?
—Me refiero a veces que hacemos actividades deportivas, algunas fiestas por algún motivo en especial, algunas veces también hacemos salidas recreativas.— Contestó Takeru.
—¿Y esas actividades, salidas o fiestas son muy seguidas?— Preguntó el hombre.
—Más o menos.— Respondió Hikari— Todo depende de lo que dicen la directora.
—La señora Nonaka ¿no?— Preguntó el oji-gris.
—Si.— Respondió Takeru.
—¿Ella es la única que está a cargo de la administración del lugar?— Preguntó el hombre.
Hikari asintió— Si, ella es la administradora de todo, esepto del dinero eso lo ve su Contador y un ejecutivo del banco.
El hombre tomó nota— ¿Cómo funciona el Internado? ¿es financiado por el estado o algo así?
—No, es financiado por los padres de los alumnos.— Respondió la castaña.
—¿Y cómo?— Preguntó el hombre.
—Con las mensualidades de cada alumno.— Contestó el rubio un tanto extrañado, ya que esas preguntas en sí le estaban produciendo cierta inquietud.
—¿Y con eso creen que les alcanza para pagar todas las instalaciones de este lugar?— Preguntó el hombre señalando el entorno.
Takeru e Hikari intercambiaron miradas— Bueno, nosotros no sabemos mucho de la organización financiera de este lugar.— Comentó el rubio— Esa información solo la manejan el Contador del Internado y la directora, con ayuda de un padre de uno de los alumnos.
—¿Los padres influyen en algún tipo de organización o solo pagan las mensualidades?— Preguntó el hombre.
—No estamos seguros.— Habló Hikari— Pero, al menos una vez cada semestre los padres tienen reunión con la directora y su equipo de trabajo, no estamos seguros de lo que hablen en esas reuniones, ya que es privada.
El hombre nuevamente tomó notas.
—¿Existen becados en este lugar?
—Si.— Contestó Takeru.
—¿Cuantos?— Preguntó el hombre.
—No sabemos el número exacto.— Respondió Hikari— Pero, por grado habrán unos cinco o seis.
—¿Y saben como se financian esas becas?— Preguntó el rubio de ojos grises.
Takeru e Hikari negaron— No.— Ese señor les estaba haciendo preguntas un tanto dificiles, ya que eran de básicamente la economía del lugar y ellos no estaban muy claros en aquello.
—¿Más o menos de cuanto es la mensualidad?— Preguntó el hombre.
—No estamos seguros, pero al rededor de unos 1530000 yen, aunque generalmente creo que usan dólares.— Respondió Takeru.
El hombre tomó nota.
—¿Por qué nos hace estas preguntas?— No pudo evitar preguntar la castaña.
El hombre cerró su agenda y observó a ambos adolescentes—Soy nuevo en la ciudad y estoy buscando un lugar en donde pueda estudiar mi hija.— Respondió mientras guardaba su libreta.
Takeru e Hikari intercambiaron miradas ante esto, esa respuesta era bastante lógica ¿por qué no se les había ocurrido antes?
—Muchas gracias por responder, jóvenes, disculpen por haberlos molestado.
—Está bien.— Respondió la castaña— Que tenga buena tarde.
—Ustedes igual.— Contestó el hombre de ojos grises antes de alejarse.
Takeru volteo hacia su castaña novia y la observó— Quizás, tengamos una chica nueva pronto en este lugar.
Hikari asintió— Si.— Respondió aunque no muy convencida, había desconfiado de aquel hombre, no sabía porque, pero él no le había dado buena espina.
Damar observó su móvil, eran las siete, Mimi y Takuya por alguna razón que desconocía le habían dicho que vendrían a su departamento a hablar con ella, así que, los estaba esperando.
Hace bastante tiempo había llegado al departamento, Kiriha y Ryouma se habían ido a ensayar con la banda y ella luego de que el efecto de los polvos blancos pasaran se había dispuesto a volver a su departamento, había tomado una relajante ducha y se había cambiado de ropa para que el aroma de esas sustancias no fuera evidente.
Se miró al espejo acomodando su top de tirantes bustier con malla en contraste, llevaba también un short de jeans ajustado luego de acomodar su top tomó una peineta y la pasó por su cabello con puntas moradas.
En un momento dado.
¡Toc, toc!
Sonó la puerta, Damar volteo en dirección a ella y comenzó a caminar hacia ella para abrirla, de seguro serían Takuya y Mimi. Pero al abrirla pudo verificar que no eran ellos.
Suspiró.
—¿Tú otra vez?— Preguntó la chica al ver al MInamoto frente a ella.
Kouji observó a la chica verdaderamente no podía evitar observarla, demasiado bien habían jugado los años a su favor, estaba comenzando a amar sus largas piernas que se veían excelentes con ese short ajustado y ese escote era mucho mejor que los otros podía ver mejor sus sensua...
¡Concentrate!
Alzó la mirada— Hola Damar.— Intentó saludar lo más serio posible.
—Hola.— Saludó la castaña—¿Qué haces aquí?
—Vine a ver a mi prima.— Respondió el oji-azul.
—Ella no está.— Contestó Damar— Salió.
—¿Salió?— Cuestionó el Minamoto— ¿Dónde?
—Preguntale a ella cuando vuelva.
Kouji alzó una ceja y se cruzó de brazos— ¿Y tú no me puedes acaso?
—No soy su niñera.— Respondió la castaña, si era sincera estaba respondiendo así más para fastidiar al Minamoto, últimamente se había dado cuenta que aquello era tan o más divertido que molestar a su hermano— Y la verdad es que no quiero hablar mucho contigo, estoy esperando a alguien.
—¿A alguien?— Cuestionó el Minamoto— ¿No estarás esperando al imbecil de Kiriha?
—Si fuera así no creo que te importe mucho.— Respondió Damar.
Kouji se mordió el labio inferior, no quería que le importase, pero le importaba— Verdaderamente estás mal como para estar juntandote con ese imbecil y su amigo Ryouma.
—No estoy mal y no veo algo malo en querer juntarme con ellos.— Habló la castaña— Ambos son chicos bastante...—Sonrió— Interesantes.
—¿Por las estupidas sustancias que venden? ¿no?— Preguntó el oji-azul.
—Bueno son interesantes y llamativas esas sustancias.
—No deberías consumirlas.
—¿Y te importa mucho que las cosuma?
—Claro que si, eres pequeña y la hermana de mi mejor, no es divertido ver como te arruinas la vida.
—¿Pequeña y la hermana de tu mejor amigo?—Cuestionó la castaña— ¿Estás seguro que es sólo por eso?—Damar se acercó a él, ella sabía que no era solo por eso, el Minamoto le estaba dejando más que claro que le importaba por otra razón.
Kouji se mordió el labio inferior, su escote era irresistable, no quería observar esa parte de su cuerpo, pero, era imposible no observarla— ¿Y por qué otra razón sería?
—Tu sabes porque razón.— Respondió Damar acercandose más mientras observaba los labios del chico.
El oji-azul suspiró, Damar verdaderamente se la estaba poniendo difícil en muchos sentidos, no solo se estaba comportando como una rebelde que quería revolucionar todo, si no que también se la estaba poniendo difícil con su físico, no quería admitirlo, pero, su mirada estaba comenzando amar aventurarse por la figura de la chica, parecía que cada día llevaba algo más escotado y todo eso. Se mordio el labio inferior un tanto enfadado, nunca le había gustado aventurarse con la mirada en el cuerpo de un chica, ni siquiera de las más seductoras del Internado Sora, Mimi e Izumi a quienes los chicos desnudaban con la mirada. Pero, ahora estaba comenzando a ser adicto a observar cada curva de la chica.
Suspiró.
Pensar que hace unos años había sentido su piel desnuda rosando la suya.
Alzó la mirada.
—A ti nunca te importo que fuera pequeña o la hermana de tu mejor amigo.— Habló Damar.
Eso era verdad no le había importado en un momento ni que fuera menor que él, ni que fuera la hermana de su mejor amigo, ni que fuera novia o exnovia de su propio hermano, básicamente no le había importado nada, y quizás en algún momento se había arrepentido, pero la mayoría del tiempo ese arrepentimiento desaparecia, porque a pesar de que se había propuesto alejarse ambos habían terminado más juntos que nunca antes de que ella se fuera.
—Antes, pero ahora...— Habló Kouji.
—¿Ahora?— Preguntó Damar.
Kouji nuevamente se mordió su labio inferior, ya que verdaderamente no sabía como finalizar, sabía que lo que dijera le jugaría en contra, finalmente ella le seguía importando por la misma razón de hace unos años, razón que no se relacionaba ni por ser muy niña o por ser la hermana de Takuya.
—¿Qué pasa Kouji?— Cuestionó Damar al ver que no tenía respuesta del Minamoto, ella sabía exactamente porque el oji-azul se preocupaba por ella, era muy fácil predecirlo, al parecer Kouji no lo diría, pero sería interesante preguntarle. Se acercó a su oido— ¿Te da mucho miedo admitir que todavía te ocurren cosas conmigo?— Susurró y luego volvió su mirada hacia los ojos del Minamoto mateniendo esa cercanía. Ella sabía que hace tres años había evidenciado que mientras más cerca estaba del oji-azul más control tenía sobre y a la vez era divertido verlo nervioso.
~Tres años atrás~
Damar suspiró y recostó su espalda contra la pared, Kouji hizo lo mismo y quedaron frente a frente, hubo un largo momento de silencio donde ella miraba el techo, mientras él miraba la puerta fijamente.
—¿Sabes? Fui una tonta.— Se lamentó la chica— Debí suponer que haría como esto.
—Ambos deberíamos haberlo sabido.— Kouji hizo una mueca— Solo espero que la tontera que hagan no sea tan grave.— Suspiró— Al menos que queden consciente y no tengamos que correr al hospital.
—No me gusta estar encerrada.— Regaño la castaña.
—A mi tampoco.— Respondió Kouji— Estar aquí me inquieta.— Dijo casi de manera inconsciente provocando cierta sorpresa en la chica.
Damar alzó una ceja— ¿Te inquieta?— Cuestionó sorprendida—¿Quieres decir que te inquieta estar aquí conmigo?— Preguntó la chica cruzándose de brazos y apoyándose contra la pared.
—¿E? N-no.— Contestó Kouji— Lo que quiero decir es que estar aquí es un tanto incómodo.
—¿Te incomoda estar conmigo?— Preguntó la chica.
—No, claro que no.— Se apresuró a responder— Es que...—Kouji verdaderamente estaba nervioso, como nunca lo había estado, de verdad, estar a solas con la chica que quería siempre lo hacia poner nervioso y ahora en esa situación se sentía peor.
Damar hizo una mueca, el chico estaba actuando muy extraño, no recordaba haberlo actuado así antes, parecía estar...¿nervioso?
"Mi primo se coloca nervioso contigo"
Las palabras que le había dicho Rika se hicieron presente en su mente.
"Algún día deberías darte cuenta que es verdad"
Otras palabras de Rika vinieron a su mente. Observó detenidamente al chico, estaba levemente sonrojado y desviaba la mirada, cosa que nunca hacia, ya que, tenía la manía de mirar fijamente a las personas.
"¿no has notado que se pone un tanto nervioso con tu presencia? ¡Hasta puedo jurar que se sonroja!"
Kouji comenzó a silbar y las palabras de Rika resonaron más en la cabeza de Damar, ya que, esa acción -silbar- siempre la hacia solamente cuando estaba nervioso. Alzó una ceja ¿podría ser verdad las palabras de su amiga? ¡No, claro que no! Suspiró, ella sabía que aunque ella lo quisiese a él, él no la quería a ella...¡Pero!...Debía admitir que le daba cierta curiosidad saber si era verdad lo que decía Rika, según sus palabras Kouji solamente sonreía, era amable y ¡hasta se ponía nervioso! cuando estaba con ella. Quería ver si era verdad y sin esperar más se acerco al chico, casi por instinto, no con segundas intenciones, solo ver si era verdad que se sentía así con ella— ¿Estás nervioso?
Kouji dejó de silbar y dirigió su mirada a la chica—¿E? N-no.
—¿Seguro?
Kouji retrocedió levemente— Si ¿por qué según tú, yo estoy nervioso?
—Porque eso dicen tus acciones.— Respondió Damar.
—Pues...—Retrocedió levemente— No lo estoy.
—Entonces ¿por qué retrocedes?— Preguntó la chica.
—Porque estás invadiendo mi espacio personal.—Contestó seriamente el Minamoto.
—Pero, no deberías actuar así conmigo, cuando éramos más pequeños siempre estábamos abrazos.— Recordó levemente la chica— ¿Por qué te pones nervioso ahora?
Kouji se mordió el labio inferior— No estoy nervioso.
—Te mordiste el labio inferior.— Comentó la chica— Y tiendes a hacer eso cuando estás nervioso, aparte de silbar como lo hiciste hace unos segundos.
Kouji hizo una mueca.
¿Lo conocía muy bien como para saber eso?
Damar se acercó más—¡Vamos! Enserio, dime ¿por qué estás tan nervioso? Si solo somos amigos.
Kouji retrocedió.
~Actualidad~
Kouji respiró profundo ante este acercamiento y no pudo evitar observar los labios de la chica, aquellos labios que había probado hace años, aquellos labios que lo habían hecho sentir algo, aunque, en realidad todo su ser lo había hecho sentir algo, lo había hecho sentir una atracción que nunca pensó sentir por alguien y ahora estaba produciendo lo mismo, aunque, de una forma más intensa.
—¿Kouji que haces aquí?— Una voz familiar llamó la atención de ambos quienes al voltear se encontraron con ambos hermanos de la castaña, Takuya y Mimi.
Mimi no pudo evitar observar un tanto sorprendida a su hermana y al Minamoto, lo mismo ocurrió con Takuya quién observó a su hermana y a su mejor amigo bastante sorprendido, estaban un tanto cerca ambos, bastante cerca ¡demasiado cerca! Hace bastante no los veía así.
—Takuya, Mimi.— Damar se alejó del chico— Al fin llegan.— Bastante se habían demorado en llegar.
—Lo sentimos nos retrasamos un poco.— Respondió la chica de ojos miel.
Takuya simplemente mantuvo silencio y observó a su amigo un tanto serio, no podía decifrar que ocurría con él, pero estaba ignorando la mirada de ellos. Se mordió el labio inferior, hace tres años esa cercanía lo hubiera molestado y preocupado, ya que sabía los sentimientos que tenía su hermana hacia el Minamoto, y aunque ignorara si su amigo sentía lo mismo, verlos muy cerca no era muy agradable. ¡Y más encima su hermana le estaba ofreciendo una gran vista con esa ropa!
Kouji respiró profundo, esperaba no estar ruborizado o sonrojado, aun así no quería voltear.
—Aún no me responden ¿Qué hace Kouji aquí?— Takuya no pudo evitar volver a preguntar, ya que anteriormente no había recibido respuesta.
Kouji rodó los ojos, ya que no pudo evitar reconocer cierto grado de enfado en la voz de su amigo, bueno eso no era algo nuevo, hace tres años casi ni hablar podía con la hermana de su amigo, porque a este le fastidiaba que se acercaran. Suspiró y luego volteo hacia su amigo— Vine a ver a Rika.— Respondió sin rodeos— Si no lo recuerdas vive en este mismo departamento.
Takuya hizo una mueca, por un segundo se le había olvidado ese detalle ¡maldito detalle! Aquel detalle que años atrás lo había molestado bastante, ya que esto implicaba que se vieran seguido su hermana y su mejor amigo.
—Pero, Rika no está así que ya se iba.— Habló Damar— ¿Cierto Kouji?
Ambos intercambiaron miradas.
—Si, yo ya me voy.— Respondió Kouji antes de voltear y alejarse del lugar— Adiós.
—Adiós.— Respondió Takuya y Mimi mientras Damar simplemente le dedicó una mirada.
Taichi caminó por uno de los pasillos del Internado prácticamente sin rumbo alguno, aún no sabía como actuar, había descubierto un secreto difícil de guardar para él. En otro momento probablemente (como era arrebatado) le hubiera ido a decir altiro a Yamato que era padre...
Padre.
Alzó las cejas.
¡Wow! Su mejor amigo ya tenía esa responsabilidad y pensar que el más despistado de ellos era él, tanto así que le había terminado diciendo a su novia (correción exnovia) que se cuidara con un método más efectivo.
Rió para sus adentros.
Yamato en esos momentos siempre lo molestaba o le hacia burlas con pañales y biberones ahora lo chistoso sería regalarle uno a él.
¡Aunque!
Se mordió el labio inferior al volver al debate en el cual se encontraba.
Llevó sus manos a su cabeza.
Concentrate Taichi, tu puedes, manten este secreto aunque se te sea casi imposible mentirle a Yamato.
Concentrate Taichi, tu puedes, manten este secreto aunque se te sea casi imposible mentirle a Yamato.
Concentrate Taichi, tu puedes, manten este secreto aunque se te sea casi imposible mentirle a Yamato.
Se repetipo miles de veces el Yagami en su cabeza, mentir era algo de todos los días, ya que generalmente la gente dice más de una mentira diaria, pero, para él siempre había difícil mentirle a su mejor amigo, sobre todo con cosas delicadas, debía mantenerse en silencio, lo sabía, pero no estab seguro.
Yamato no debe saber que Mimi tuvo una bebé.
Yamato no debe saber que Mimi tuvo una bebé.
Yamato no debe saber que Mimi tuvo una bebé.
Yamato no debe saber que Mimi tuvo una...
—Taichi.— Una voz masculina lo llamó.
—Bebé.— Gritó el chico Yagami en un sobresalto de susto al escuchar aquella sorpresiva voz llamarlo. Se mordió el labio inferior al ver al mismisimo Yamato frente a él.
El rubio alzó una ceja sorprendido ante la palabra sorpresiva de su amigo ¿qué había dicho?
—¿Bebé?— Preguntó el rubio sorprendido— ¿De que estás hablando Yagami?
Taichi observó al oji-azul alarmado, ni cuenta se había dado de que él había aparecido en su camino.— ¿E? Pues...—Balbuceo.
—No me digas que de nuevo Sora y tú están con alerta de un domingo siete.— Habló el Ishida.
Si tan solo supiera.
Pensó el castaño Yagami.
—¿E? Pues...—Balbuceo— No, claro que no, ya sabes que terminamos hace tiempo y nos cuidamos hasta el último momento de nuestra relación ¿por qué tendríamos alerta roja?
—Bueno, no sería la primera vez.— Respondió el rubio.
Taichi se mordió el labio inferior, no quería actuar nervioso o como si ocultara algo, pero la verdad es que no sabía como actuar con su mejor amigo.
—¿Qué hacias con él?— Preguntó Takuya.
—Nada, ya te dije que venía a ver a Rika.— Contestó Damar— Yo simplemente abrí la puerta y me encontré con él.
Takuya se cruzó de brazos— ¿Y no pudiste ponerte una chaqueta antes de abrir?
Damar alzó una ceja y rodó los ojos— ¿Por qué?— Preguntó.
—Por esa ropa que llevas.— Respondió el moreno.
Damar se cruzó de brazos y rió para sus adentros— No tiene algo de malo mi ropa.
—Claro que sí.— Contestó Takuya— Ese escote que llevas es peor que los otros has usado estos días y ese short tan ajustado, más encima corto.
Mimi hizo una mueca.
Takuya cómo siempre tan exagerado.
—¿A sí?— Preguntó Damar— ¿Sabes? Traje mucho más de este tipo, hasta diría que más descubiertos.
Takuya se mordió el labio inferior.
—Y también traje unos pantalones ajustados que justo pensaba estrenar mañana.— Comentó la menor de los Tachikawa en realidad para fastidiar a su hermano, si algo amaba hacer era molestar a Takuya, la verdad es que siempre había amado la ropa ajustada, pero no eran fan ni de las mini-faldas o escotes, aún así si podía fastidiar a su hermano con esto las usaría miles de veces— Y también traje unas mini-faldas super cortas que pensaba utilizar la próxima semana.
Takuya apretó su puño— Sobre mi cadaver.— Habló molesto— ¿No crees que ya es hora que empieces a moderar tu forma de vestir?
—¿Moderar mi forma de vestir?— Cuestionó Damar— ¿Por qué tendría que hacerlo?
—Porque exhibes mucho.— Respondió el moreno.
—Claro que no.
—Claro que si.
Damar rodó los ojos— Lo siento, hermanito, pero, no cambiaré mi forma de vestir solo porque tu lo dices.
Takuya frunció el ceño, nunca le había gustado que algún chico -sobre todo sus amigos- miraran a una de sus hermanas, ya que siempre había querido protegerlas, cuidarlas y debía admitir que era bastante celoso, pero tristemente ellas ya estaban volando de su nido y eso en sí le estaba molestando bastante. Se mordió el labio inferior ¿por qué Damar y Mimi habían salido con buen físico?
—Ya diganme ¿por qué era tan urgente verme?— Preguntó Damar sentandose sobre un sofá cruzandose de piernas y brazos.
Mimi suspiró, hablar de esto sería un tanto complejo, ya que a Damar nunca le agradó Nene, mucho menos cuando comenzó a salir con Takuya, y pues considerando que sabía de su embarazo y que la estaba sobornando para que volviera con su hermano solo podía concluir una cosa.
Habría problemas.
Rika observó atentamente la mesa en la que estaba, observó a los padres de Takato y a él mismo, le habían ofrecido una taza de té y unos panecillos.
¡Estaban deliciosos!
Nunca había probado unos mejores, pero lo que más le llamaba la atención era que los padres del chico estaban compartiendo con su hijo, en cada palabra le entregaban ánimo y cariño, eran amigables y por un momento sintió cierta nostalgia. Ella nunca había estado así con su familia, en una mesa compartiendo feliz sin discutir, no tenía padre y pues, antes compartía mesa con su abuela y de vez en cuando con su madre, pero siempre terminaban discutiendo.
—Y esa vez, Takato como era pequeño, se confundió de persona y creyó que otra mujer que tenía una chaqueta roja era yo, entonces se acercó y la llamó mamá.— Comentó la señora Matsuki.
Rika rió, la madre de Takato estaba contando cosas chistosas y vergonzosas de ese chico que le causaban mucha risa.
—El berriche que hizo esa vez fue inovidable.— Finalizó la mujer— No quiso volver a salir a la calle por al rededor de tres semana.
—Mamá no cuentes esas cosas.— Habló Takato.
—¿Por qué no?— Preguntó Rika— Si me estoy divirtiendo, no sabía que eras tan vergonzoso en el Internado no eres así.
Takato se ruborizó levemente— Bu-bueno, necesito de personalidad para sobrevivir en un lugar nuevo ¿no?
—Hablando de lugar nuevo ¿cómo se ha comportado mi niño en aquel lugar?— Preguntó la mujer.
—Me he comportado bien mamá.— Respondió el castaño— He intentado ser responsable y hasta el momento llevo buenas notas.
—Me alegra escuchar eso.— Contestó el padre de Takato— Ya sabes que es una oportunidad única estar en ese lugar.
—Si lo sé y creanme he intentado aprovechar bastante la oportunidad.— Contestó el chico.
—Bastante diría yo.— Habló esta vez Rika— Su hijo es super inteligente.
—Si, mi Takato siempre ha sido súper inteligente.— Esta vez la madre del Matsuki tomó la palabra— Tanto así que no gateo si no que se largó a caminar de una.
Takato se ruborizó más, su madre siempre elogeandolo y eso lo hacia sentir más avergonzado.
Rika observó al castaño y sonrió, su madre era tan amorosa y cariñosa, nada que ver con la suya.
—Bueno, ya hablamos mucho de mi Takato.— Habló la mujer y volteo hacia la pelirroja— Mejor hablanos de ti, lo único que nos has dicho es tu nombre y tu apellido, pero, no nos has dicho de donde vienes, quienes son tus padres, quién es tu familia, si eres becada como Takato o no.
—¡Hey! Mie, no ahogas a la chica con tantas preguntas.— Exclamó el señor Matsuki.
—¡Je! Lo siento.— Habló la mujer castaña avergonzada— Pero, tengo curiosidad.
Rika sonrió de lado— Bueno, pues, como ya saben mi nombre es Rika Nonaka.— Respondió— Se supone que vivo en Shinjuku, pero desde pequeña en época de clases he vivido en el Internado.
—¿Desde cuando más o menos?— Preguntó la madre de Takato.
—¡Mie! No es necesario que seas tan específica.— Habló el padre de Takato.
—Lo siento, pero me da curiosidad.— Respondió la mujer.
—Bueno, respondiendo a su pregunta estoy en el Internado desde que tengo seis años más o menos.— Respondió la pelirroja.
—Desde súper pequeña.— Comentó Mie.
Rika asintió.
—¿Y por qué?— Preguntó la mujer— ¿No debería una niña de seis años estar con su madre y con su padre?
Rika hizo una mueca— B-bueno, pues...—Suspiró— Mi padre murió antes que yo naciera.
—¡Ups! Disculpa por...
—No se preocupe.— Respondió la Nonaka— Ya estoy acostumbrada.— Rodó los ojos y alzó la mirada, todos tenían razón ese dato de su padre no debería influenciar mucho en su vida, generalmene hablar de él era sinónimo de tristeza, pero era tiempo de cambiar todo— Decir que está muerto es fácilmente admitir la realidad de las cosas.— Suspiró— Y bueno, con la ausencia de mi padre me quedé sola con mi madre.
—Su madre es la directora.— Esta vez habló Takato— Rumiko Nonaka.
Y al decir este nombre tanto el padre como la madre de Takato intercambiaron miradas sorprendidos de esta declaración ¿era broma?
—¿E? ¿Cómo dijiste?— Preguntó el señor Matsuki— ¿Dijiste que es hija de la directora? Rumiko Nonaka ¿la ex-modelo?
—Si.— Respondió Takato— Bueno, creo que el apellido lo hace más que obvio ¿no?
—¿E? Pero, yo creí que era un alcance de apellidos.—Habló la madre de Takato.
—Pues no, no lo es.— Contestó Takato.
Los padres de Takato intercambiaron miradas un tanto alarmados, ya que no se hubieran imaginado que su hijo se haría amigo exactamente de la hija de Rumiko Nonaka.
¡Rumiko Nonaka!
Físicamente se parecían un poco, pero esta chica tenía otra esencia, otra forma de ser, Rumiko era muy femenina, mientras que esta chica evidentemente era diferente.
—¿Por qué se miran así?— No pudo evitar preguntar Takato al notar las miradas entre sus padres.
Mie se mordió el labio inferior sin saber que responder.
—¿E? Pues...—Habló el señor Matsuki— Es que nos sorprendió, no pensamos que tu nueva amiga fuera su hija.
—No me sorprende.— Habló la pelirroja— Generalmente la gente no me cree que soy hija de mi madre porque ella es muy "femenina" para sus cosas, mientras que yo soy todo lo contrario.
Mie hizo una mueca— ¿Y? Por ser su hija ¿por casualidad tienes algún parentesco con el empresario Kousei Minamoto?
Rika asintió— Si, él es mi tío, era pariente de mi padre.— Respondió— ¿Cómo sabe eso?
—¿E?...— La mujer balbuceo, ella lo sabía porque el día en que había ido a visitar a su hermana, la ex concinera del Internado que habían enviado a prisión y que luego había muerto, le había dicho algo sobre el Minamoto y la Nonaka. Se mordió el labio inferior, no esperaba que la razón por la cual había caído a prisión estaría justo frente a ella en algún momento— Es que, en alguna revista creo que haber leído sobre eso.— Respondió y sin decir más, tomó su taza de té— Amor.— Le habló a su esposo— Creo que lo mejor será que volvamos a la panadería.
—Si, tienes razón.— Habló el hombre y luego volteo hacia los adolescentes— Creo que lo mejor será que pronto emprendan camino de regreso al Internado, ya saben, el tren se demora y pues, tienen hasta un cierto horario para llegar ¿no?
Takato dirigió su mirada a su reloj de pulsera— Si, tienes razón padre, debemos emprender pronto camino o sino llegaremos tarde.— Dijo antes de levantarse de su asiento— Rika iré a buscar mi cámara y nos vamos ¿si?
Rika asintió— Está bien.
Nene caminó por uno de los pasillos del Internado, Takuya se le había perdido, eso la había molestado bastante, pero bueno, luego de la advertencia que le había hecho a Mimi sabía que su hermano volvería con ella, si o si.
—¡Hey! Tú.— Una voz llamó su atención y al voltear se encontró con la rubia de ojos verdes que había destrudi su relación con Takuya.
—Tengo nombre.— Habló Nene.
Izumi hizo una mueca y se acercó a ella— Me da lo mismo cual sea tu nombre.— Respondió enfadada— ¿Cómo se te ocurre besar a Takuya?
—¡Vaya! Los rumores corren rápido en este lugar.— Habló Nene.
Izumi apretó su puño— De verdad debes estar muy desesperada y despechada como para besarlo así como así, aún sabiendo que él no te quiere.
—¿Y quién dijo que yo lo besé?— Preguntó la castaña— Él me besó a mi.
—Lo dudo mucho.— Habló Zoe cruzandose de brazos.
—No tienes forma de saberlo.— Nene habló desafiante— No estabas ahí, él fue quién me besó a mi.
Zoe rodó los ojos— Puede que haya estado ahí, pero estoy segura que Takuya no sería tan idiota como para involucrarse de nuevo contigo.— Habló seriamente.
—Si fue idiota al reemplazarme por ti, fácilmente podría volver conmigo.— Comentó Nene.
Zoe frunció el ceño enojada— Te lo advierto, zorra, no te acerques a él.
—¿Y por qué no?— Preguntó Nene— ¿Por qué tu me lo dices? ¡Ja!— Lanzó una carcajada sarcástica— No eres su novia.— Llevó una mano a su mentón— Y si mal no recuerdo tu eres novia de su mejor amigo ¿no?
Zoe se mordió el labio inferior— Eso no es de tu incumbencia.
—Tu relación no, pero Takuya si.— Habló Nene— Y te lo advertiré solo una vez ¡alejate de él!
—Esa es la advertencia que yo te quiero hacer a ti.— Habló la rubia— Él no te quiere Nene, deja de fastidiar y vuelve a ciudad a miles y miles de kilometros lejos de nosotros.
Nene sonrió— Verdaderamente no has entendido nada.— Comentó— Si yo vine de tan lejos a esta ciudad y hasta este Internado fue por una razón específica y esa es regresar con Takuya, así que no volveré a Estados Unidos hasta cumplir con mi objetivo.
—Sigue soñando con que eso va a ocurrir.— Habló Zoe.
—No sueño, es lo que ocurrirá...
Sobre su cadaver.
Zoe lucharía por Takuya— Ya veremos quién tiene razón.— Hablo desafiantemente antes de alejarse del lugar, no quería quería seguir viendo a esa chica.
Nene simplemente observó como la rubia se alejaba con una sonrisa en el rostro— Obvio que yo tengo la razón, Takuya será mío.— Susurró para si misma mientras observaba como la rubia tóxica se alejaba.
—¡Vaya, vaya! Parece que no eres del agrado de la rubia.— Una voz masculina llamó su atención.
Nene alzó una ceja sorprendida y al voltear se encontró con un chico de cabello castaño, piel morena y ojos azules.
—No me sorprende, es difícil que alguna chica que implique una amenaza para ella le agrade.— Habló el chico.
—¿Quién eres tú?— Preguntó Nene.
—Mi nombre es Ryo Akiyama, mucho gusto.— Se presentó el chico.
—Hola mi nombre es Nene...
—Ya sé quién eres.— Habló el Akiyama— Eres Nene Amano, la hermana de Yuu y ex novia de Takuya.
—Ella misma.— Respondió la castaña— Estás bien informado.
—Bueno, por mucho tiempo escuché hablar de ti.— Habló el castaño.
Nene alzó una ceja— ¿A si?
El Akiyama asintió— Tu fuiste quién destruyó en parte la relación de Takuya y Zoe.
—Creo que te equivocas chico, ella fue la que arruinó mi relación con Takuya.— Habló Nene.
Ryo sonrió de lado— No es necesario que me des esa explicación, yo sé exactamente lo que ocurrió entre ellos y tus mensajes.— Nene intentaba utilizar esa técnica de culpar a Zoe, para fastidiar pero era más que obvio que era por esa razón y no por que creyera que en verdad ella había arruinado su relación, conocía todo tipo de tacticas y esa era una, hacer sentir miserable a otros por tus desgracias era divertido.
Nene abrió los ojos sorprendida— ¿Cómo sabes sobre esos mensajes?
—Bueno, pues, tengo mis fuentes...
Takuya salió del departamento de su hermana.
Damar y Mimi habían quedado hablando sobre aquel tema, la mayor verdaderamente se encontraba afectada y desconsolada, así que había pensado en ir a la cocina a prepararle un té para calmar los nervios y también preparar un té para él, toda esa situación lo estaba estresando.
—¡Takuya Tachikawa!— Una voz familiar con tono de enfado llamó su atención.
El nombrado volteo y al hacer esto se encontró con la rubia hermana de Yamato que no lo observaba con buen rostro, estaba enfadada su ceño fruncido lo decía.
—Zoe ¿qué tal?
La rubia se acercó a él bastante molesta— ¿es verdad que besaste a Nene?— Preguntó sin rodeos.
—¿Qué?— Preguntó Takuya sorprendido de que los chismes corrieran tan rápido en aquel lugar, sin duda eso era lo que no extrañó esos tres años fuera del país.
—Lo que escuchaste ¿Nene y tú se besaron?
Takuya se mordió el labio inferior y suspiró— Si, nos besamos.
Zoe abrió la boca sorprendida— P-pero ¿cómo? ¿tú dijiste que no la querías?
—Y no la quiero.— Habló Takuya— Ella fue la que me besó a mi, prácticamente se me lanzó encima sin previo aviso.
Zoe se cruzó de brazos— Buena historia...
—Lo digo de verdad.— Insistió el moreno.
—Nene me dijo que, tú la habías besado a ella.— Habló la rubia.
—¿Y le vas a creer a esa loca antes que a mi?— Cuestionó el moreno.
Zoe observó al moreno ante esta pregunta, la respuesta era sencilla— No, claro que no.— Respondió— Pero, lo que me molesta es que no lleve ni un día aquí y ya se hayan besado.
—No nos besamos, ella me besó a mi.
—Aún así, fue un beso.— Habló la rubia, desde la vuelta de Takuya ella había demorado más de una semana en lograr besarlo, mientras que Nene no llevaba ni un día ahí y ya había logrado unir sus labios en un beso.
—Que no tuvo importancia.— Contestó el moreno.
—¿Estás seguro?— Preguntó la rubia.
—Claro.— Respondió Takuya.
—¿Segurísimo?— Nuevamente preguntó.
—Suena insegura.— Comentó el chico de ojos chocolates.
Zoe hizo una mueca, no quería ser insegura, pero, esa chica tenía muchas cosas a su favor— Tengo razones, esa chica es linda, atractiva, sensual, con ella tuviste tu primer beso, fue tu primera novia y con ella tuviste tus primeras experiencias de...—Rodó los ojos— Ya sabes que tipo.
—¿Y eso qué?— Preguntó el moreno— Tu eres mucho más linda, atractiva, sensual, llamativa, hermosa y puede ser que con ella probe cosas nuevas, pero tu sabes que ella no importa, al contrario yo estoy arrepentido de todo lo que hice con ella, porque, me costó mi relación contigo.— La tomó de las mejillas.
Zoe se mordió el labio inferior, las palabras de Takuya sonaban tan sinceras, tan reales, pero aún así no podía evitar sentirse insegura, esa chica había vuelto con toda la intensión de recuperar a Takuya y luego de todo lo que había hecho en el pasado, en todo lo que había ocasionado con aquello y considerando que ella también era intensa las cosas podían salir mal, no quería perder al moreno.
—Takuya ¿tú sigues sintiendo cosas por ella?
—¿Por qué preguntas eso?— Preguntó el moreno— Ya he dicho que no siento algo por ella.
—Si, pero ahora ella regresó con el objetivo de recuperarte ¿qué ocurre si te demuestra que efectivamente es mucho mejor que yo?
—Olvida eso.— Habló el moreno— Yo te quiero a ti ¿si? Siempre lo he hecho y siempre lo haré.
Zoe observó los ojos del Tachikawa, irradiaban sinceridad eso siempre le había gustado de Takuya, era un chico trasparente, sincero y directo. Algunas veces era insoportable, pero, eso era reemplazado por su caracter hermoso y tierno que tenía.
—Te quiero...— Le susurró.
—Y yo a ti.— Respondió la rubia antes de besar sus labios.
Ese famoso lemon lo estoy atrasando porque no encuentro el momento exacto donde subirlo, es un lemon bastante largo, entonces lo reservaré para cuando no tenga tiempo de escribir jsjsj LO SIENTO DE VERDAD pero es que hasta el momento no he encontrado el momento justo para subirlo. Digo en este momento lo subo y se me viene otra idea a la cabeza entonces no funciona. Podría subirles el lemon pero si queremos un capítulo coherente no puedo obligar la situación. Y por cierto el Lemon es un salto temporal jsjsj
OsiOsi: jsjsj saludos jsjsj Ah~ entiendo jsjsj no lo había entendido antes jsjsj bueno con respecto a los ship hay algunos en cuales tengo duda entonces por eso ocurre que en esta historia todo puede pasar jsjsj ojalá sigas leyendo y comentando.
mariacredenza02: UFFF todos odiamos a Nene sin duda alguna, ella es mala, está despechada quiere volver con Takuya a pesar de que sabe que ella fue la culpable de su ruptura lo quiere de vuelta ya que está confundiendo el "amar" con la "obsesión" por eso lo besa así como así y puede tocar todo tipo de temas ahora queda ver que hará Takuya con esa zorra. Rika nunca le ha gustado ver la clase social, ella a pesar de ser de clase alta siempre sintió soledad y pues yo creo que si Ryo hubiera intentado llegar a ella de la forma en que la hace Takato con sinceridad yo creo que la hubiera conquistado, porque, la clase social nunca fue tema para ella ya que para ella el dinero no hace la felicidad. En algún momento Kouji sabrá la verdad y pues a pesar de que se sentirá traicionado no podrá reprochar mucho, ya que, él no respeto la norma de la hermana del mejor amigo mientras que Takuya no respeto la de la novia, pero, cuando se entere de la verdad Kouji reaccionará y se dará cuenta de que debe dejar de dar tanta vuelta y centrarse en quien verdad quiere (creo que ya todos sabemos a que chica quiere jsjsj) Takuya siempre apoyará a su hermana como en Digimon Frontier que apoyaba a sus amigos hasta la muerte jsjsj ya vimos quienes supieron sobre el secreto de Mimi. Ojalá sigas leyendo y comentando. Te envió un abrazo a la distancia.
