—Llegamos.— Musitó la pelirroja Takenouchi mientras estacionaba su auto junto al parque donde se encontrarían con la hija de Mimi y su madre adoptiva.
Mimi sonrió nerviosa, tenía muchas ganas de ver a su hija.
Ambas chicas abrieron la puerta de sus respectivos puestos y bajaron.
Sora y Mimi caminaron por el parque y a los pocos metros se encontraron con una chica pelirroja de ojos chocolates y una niña rubia de ojos azules.
La Tachikawa sonrió al verla— Ahí están.— Le anunció a su amiga.
Sora sonrió y ambas se acercaron al lugar.
Alice al notar que la Tachikawa venía al igual que la última vez se acercó a su hija para susurrarle— Natsumi llegó la tía Mimi.
La rubia sonrió ante esto y dirigió su mirada las dos chicas que se dirigían hacia ellas.
—Natsumi.— Mimi llamó a su hija.
—¡Tía Mimi!— Exclamó la rubia antes de correr en dirección a la castaña.
La Tachikawa no lo dudo y también corrió hacia ella, cuando estuvieron frente a frente la tomó en sus brazos y le dió un cálido abrazo.
—¿Cómo estás preciosa?— Le preguntó Mimi sonriendo.
—Bien.— Respondió la niña sonriendo.
—Supongo que te has portado bien ¿no?
—Shi.— Contestó la rubia.
Mimi sonrió, la sonrisa de su hija era hermosa, le encantaba.
—Mimi...
Alzó la mirada en dirección a la madre adoptiva de su hija.
—Alice.— La nombró.
—Un gusto en verte.
—Igualmente.— Respondió la castaña.
Sora llegó al lado de su amiga y tanto la mirada de la rubia como la de su madre adoptiva se posaron en la Takenouchi.
—¿Quién es ella?— No pudo evitar preguntar la rubia.
Mimi sonrió y volteo hacia su amiga— Es mi amiga, cariño te presento a Sora.— Luego se dirigió a la pelirroja— Sora, te presento a Natsumi.
Sora observó atentamente a la niña era muy parecida a Yamato, tenía las piel pálida, ojos azules y cabello rubio, aunque, debía admitir que cierta facción en su rostro era muy similar al de Mimi.
—Y ella es Alice.— Señaló a la pelirroja de ojos chocolates.
La Takenouchi dirigió su mirada hacia la madre adoptiva de la rubia— Hola, mucho gusto, mi nombre es Sora.
—Mucho gusto.— Respondió— Mi nombre es Alice Amano.
—Ojalá te sientas bienvenida en la ciudad.
Alice sonrió— Muchas gracias.— Respondió y luego dirigió su mirada hacia Mimi, ya que, desde el primer minuto se dio cuenta de que Damar no había venido con la oji-miel— ¡Hey! Pensé que Damar vendría contigo.
Mimi hizo una mueca, le había mandado miles de mensaje a su hermana, también la había llamado, pero, no había contestado nada—Bueno, es que, estaba un tanto ocupada.— Exactamente no sabía que estaba haciendo, solo rogaba que no se metiera en problemas, no la había visto en todo el día, creía que la vería a la hora de ir donde Natsumi, pero, no había aparecido, ni siquiera respondía sus llamadas, así que, no tuvo más opción que ir sin ella.
Mientras tanto en el hotel.
—¿Dónde está el idiota de Ryo?— Preguntó Yamato molesto observando su reloj.
Kouji rodó los ojos y se cruzó de brazos— Como siempre, ese idiota va a llegar tarde.— Respondió fastidiado.
—Bueno, no todos somos fanáticos de la puntualidad como ustedes dos.— Musitó Ryouma.
—No es un tema de ser fanáticos de la puntualidad.— Habló Yamato— Es un tema de probar el sonido, afirnar los instrumentos y ver que todo esté bien para que no tengamos problemas cuando nos presentemos, cosa que ya deberían saber todos.
Kiriha rodó los ojos— Lo sabemos, pero, deberíamos tranquilizarte un poco, ya sabes como es Ryo, llega tarde, pero, llega.
Yamato respiró profundo intentando mantener la calma, era en estos momentos que pensaba seriamente en sacar a Ryo de la banda, no soportaba su irresponsabilidad.
—Teenages Wolves.— Una voz llamó la atención de los cuatro chicos y voltear se encontraron con un chico de cabello negro, ojos ambar y piel pálida.
—Shun.— El rubio reconoció al instante al primo de Sora.
El chico sonrió y se acercó para saludar a los cuatro chicos con un choque de puños— Tanto tiempo sin verlos.
—Eso mismo te iba a decir.— Habló Kouji.
—Al parecer las vacaciones en Estados Unidos estuvieron buenas.— Comentó Ryouma— Te quedaste allá por bastante tiempo.
—Si, bueno, tuve que atender algunos asuntos personales.— Respondió el primo de Sora— Pero, aquí estoy de vuelta.
—¿Cómo es eso de que ibas a contratar a otra banda para tocar antes que a nosotros?— Preguntó Ryouma— ¿No que "éramos tu banda privilegiada"?
—Bueno, le dije a mi hermano que organizara la fiesta y se le fue el detalle.— Respondió Shun— Pero, tranquilos, ahora que regresé les prometo muchos conciertos y buena paga.
Eso sonaba bien.
Yamato sonrió.
Era agradable tener de vuelta al primo de Sora en la ciudad.
—Damar...— Hikari tocó la puerta de la habitación de su amiga, pero, no obtuvo respuestas— Damar.— Nuevamente tocó— Por favor, sal, llevas todo el día ahí.— Hizo una mueca ante el silencio.
—Dejala, Hikari.— Rika habló— Evidentemente no quiere hablar con nosotras.
Hikari observó a su amiga pelirroja— ¿Por qué estará así?
—De seguro tuvo otra discusión con Takuya y por eso, no quiere salir.— Respondió la Nonaka.
—Pero ¿por qué no querría hablar con nosotras si es con él?— Preguntó Hikari.
—No sé.— Suspiró la Nonaka mientras tomaba asiento en un sofá— Pero, de seguro es momentaneo, ya sabes que a ella no le gusta estar mal con nosotras.
Eso era un buen punto, antes de irse Damar era así, no soportaba estar mucho tiempo enfadada con ellas, pero, ahora era diferente, su amiga había regresado con otra actitud, no podía predecir facilmente sus movimientos como antes, ya que, no era la misma, había cambiado.
Suspiró y se dirigió al sofá donde estaba RIka para tomar asiento a su lado.
—¿A qué hora es la fiesta?— Rika le preguntó a Hikari.
—Es a las siete.— Respondió la castaña.
—¿Y a qué hora pasarán los chicos por nosotras?— Preguntó la pelirroja intentando camuflar su interés por saber cuando volvería a ver a Takato.
—¿Los chicos?— Cuestionó Hikari— Sólo irá Takeru.
—¿Qué?— Preguntó Rika sorprendida.
—Si.— Contestó la Yagami— ¿Takato no te dijo que iba a ir a la casa de sus padres esta tarde?
Rika negó con la cabeza— No.— Respondió— No me había dicho.
—A pues, Takeru me dijo que Takato tenía que ir a la casa de sus padres por un emergencia que tenían.— Comentó Hikari— Por eso, no iba a poder ir a la fiesta.
—Entiendo.— Respondió la pelirroja y no pudo evitar tener sentimientos encontrados, iba a ser extraño salir sin él, quería verlo, aunque, si lo pensaba de otro punto de vista, su presencia la colocaba un tanto nerviosa, al menos podría estar por ese lado un tanto tranquila, sin embargo, eso no quitaba que se sintiera diferente estar sin él, ya se había acostumbrado a su presencia, aa su humor y a su mirada dul...¡Rayos!
Se mordió el labio inferior al pensar esto.
¿Qué cursilerías estaba pensando?
Esto no era algo propio en ella, al contrario, nunca en su vida había pensado cosas dulces y románticas con respecto a un chico. Pero, luego de...
Ese beso.
Era imposible no pensar en él.
Suspiró.
Debía admitir que ese chico le gustaba y mucho, pero, era difícil, ella nunca había sido como sus amigas, siempre había sido anti-amor, anti-chicos, anti-todo lo que tuviera que ver con ese tipo de cosas.
Nuevamente suspiró.
Debía de alguna formar resolver todo este lío que tenía armado en la cabeza.
Volteo hacia su amiga castaña.
Se mordió el labio inferior.
Nunca pensó que haría esto, pero, era necesario.
—Hikari...
—¿Si?— Preguntó la castaña.
Se detuvo un momento antes de preguntar, se sentía nerviosa e inquieta, pero, necesitaba un consejo sobre esta situación— ¿C-cómo supiste que estabas enamorada de Takeru?
Hikari alzó una ceja sorprendida, de todas las personas que conocía, Rika era la útima que hubiera imaginado que le haría esa pregunta, era extraño.
—D-digo ¿cómo tuviste la certeza que estabas enamorada y que no sólo era una amistad?— Preguntó nuevamente la pelirroja.
La castaña sonrió conmovida ante esto, ya se imaginaba, porque, la pelirroja le hacia esa pregunta— Bueno, pues, me di cuenta que era mucho más que una amistad, porque, nos besamos y en aquel beso sentí que lo nuestro era mucho más allá que un cariño de amigos.
—P-pero ¿cómo supiste diferenciar los sentimientos de amor con la emoción de dar tu primer beso?— Preguntó la pelirroja.
—Porque, aunque, era pequeña, escuché a mi corazón y me di cuenta que en verdad quería a Takeru más que eso.— Respondió la castaña.
Escuchar al corazón.
Rika suspiró, eso era algo que nunca había hecho.
—¿Puedo saber la razón por la cual me preguntas esto?— Preguntó Hikari interesada.
—¿E?— Balbuceo la pelirroja y no pudo evitar ruborizarse— E-es que y-yo...— Se detuvo unos minutos, estaba muy nerviosa.
—¿Sentiste algo más en ese beso que se dieron con Takato?— Preguntó Hikari y Rika volteo sorprendida.
—¿C-cómo sabes eso?— Cuestionó la pelirroja, no esperaba que su situación fuera tan predecible para la castaña.
Hikari rió— Bueno, porque, nunca me habías hecho este tipo de preguntas y justo ahora me las haces luego de haber dado tu primer beso.
Rika se mordió el labio inferior y bajó la mirada.
—Además, porque, te conozco demasiado bien, amiga, y he notado como tus interacciones con Takato han cambiado bastante.— Musitó Hikari— Sonríes con él, te sonrojas por su presencia y es muy evidente que te agrada su prensencia, no lo has mandado a volar como lo has hecho con otros.
Rika alzó la mirada un tanto avergonzada— A Takeru no lo mandé a volar.
—Luego de un año intentado ser tu amigo.— Respondió Hikari— Todo lo contrario a Takato, quién no lleva más de un mes aquí y es evidente que te agrada.
Rika nuevamente se mordió el labio inferior y bajó la mirada.
—Dime, Rika ¿es por él, cierto?— Preguntó Hikari intrigada.
La pelirroja suspiró, su amiga lo había notado y no podía negarlo, mucho menos ante ella.
—Bu-bueno, si.— Respondió la Nonaka— Cr-creo que estoy sintiendo cosas por él.
Hikari sonrió— ¿De verdad?
—O, bu-bueno, eso creo.— Contestó torpemente— N-no sé...— Balbuceo— Es primera vez que me pasa, nunca me había puesto tan nerviosa por un chico, nunca me había sentido atraída por uno y mucho menos me había besado con uno, pero, me da miedo.
—¿Por qué te da miedo?
—Porque, quizás, estoy confundiendo un sentimiento de amistad con algo más.
Hikari tomó las manos de su amiga— Rika, lo que estás sintiendo es muy hermoso, no debes tener miedo.
—P-pero ¿si simplemente me estoy confundiendo?
—Eso solo lo puedes saber tú.— Respondió la castaña— Solo tú, conectandote con lo que sientes podrás saber lo que en verdad ocurre.
—Pero ¿cómo hago eso?
—Dejando de pensar y dejandote llevar por lo que en el minuto sientes cuando veas a Takato.
—Mi niño.— Musitó Mie Matsuki mientras abrazaba a su hijo— Me alegra verte.
—Lo mismo digo, mamá.— Respondió Takato correspondiendole el abrazo— Disculpen si me tarde un poco, pero, el tren se demoró más de lo habitual.
—No te preocupes, lo importante es que ya estás aquí.— Contestó esta vez el padre del castaño.
La mujer dejó de afixiar a su hijo y el chico saludó a su padre con una reverencia (saludo típico de occidente)
—¿Cómo has estado?
—Bien ¿y ustedes?
—También hemos estado bien, extrañandote, es raro tenerte tan lejos.— Comentó Mie.
Toda su vida había estado con sus padres y ahora se había ido, lógicamente iba a ser extraño.
—Me sorprendió tu llamada mamá.— Esta vez se dirigió a Mie— ¿Por qué me llamaste?
Los adultos intercambiaron miradas ante esto.
—Toma asiento Takato.— Su madre le señaló el sofá— Necesitamos hablar de algo muy serio contigo.
Takato alzó una ceja y sin decir palabra, obecedió y tomó asiento en un sofá.
—Te llamamos porque necesitamos pedirte que...—La madre de Takato se detuvo unos segundos, lo que estaba apunto de decirle no era fácil, sabía que aquel chico se había esforzado por ganar esa beca para ingresar a la mejor preparatoria de Japón y a la vez poder optaar a la beca a alojamiento para quedarse en el Internado que quedaba en el mismo campus.
—¿Pedirme qué?— Preguntó el castaño.
Los dos adultos intercambiaron miradas, era difícil hablar de aquello, pero, debían decirle, porque, no era bueno que continuara en aquel lugar, solo diciendole la verdad podrían librarlo de lo que venía.
Takato observó a sus padres, ninguno decía palabra y eso le preocupó en cierta medida— ¿Por qué se miran así?
Takehiro hizo una mueca— Es que...—Suspiró— Lo que tenemos que decirte no es fácil.
—¿Por qué?— Preguntó Takato— ¿Ocurrió algo grave con algún familiar o con la panadería?
—¿E? No, no es eso.— Respondió su madre.
—¿A no?— Cuestionó el adolescente— Entonces ¿de que trata?
Nuevamente los adultos intercambiaron miradas y finalmente fue el hombre quién decidió comenzar a hablar.
—Takato, hijo...—Suspiró— Necesitamos que dejes el Internado y la preparatoria en donde estás estudiando.
El adolescente alzó las cejas sorprendido ante las palabras de su padre, debía ser una broma, de seguro escuchó mal— ¿Qué?
—Lo que escuchaste, Takato, necesitamos que dejes el Internado y todo lo que conlleva a estar en aquel lugar.— Respondió Mie.
—¿Por qué?
—Porque, no queremos que estés en ese lugar.
—¿Otra vez con eso?— Preguntó Takato— Pensé que habían cambiado de opinión y estaban de acuerdo que estudiara ahí.
Takehiro y Mie intercambiaron miradas, cuando su hijo había recibido esa beca no habían estado de acuerdo con que la aceptara, pero, finalmente habían cedido ante la petición del chico quién se había esforzado por optar a una mejor educación en uno de los mejores lugares de Japón, además, todo parecía indicar que lo que había ocurrido hace tres años había quedado en el olvido, así que, su hijo no estaba expuesto a ese tipo de cosas ¡Grave error! Lo que aparentaba ese lugar no era la realidad, ya que, las cosas internamente estaban peores, luego de hablar con ese agente de la DEA les había quedado más que claro que su hijo debía salir de ese lugar lo antes posible.
—Estábamos.—Respondió Mie— Pero, ahora no estamos de acuerdo con que sigas en ese lugar.
—¿Por qué?— Preguntó el castaño— Me ha ido bastante bien y no hemos tenido que utilizar nuestro dinero para que oueda estar ahí. Mi beca lo ha cubrido todo.
—Lo sabemos hijo.— Contestó su padre— Pero, no es por por lo que queremos que te salgas de aquel lugar.
—Entonces ¿por qué?
—Porque...—Mie tomó la palabra— Porque, no nos gusta ese lugar para ti.
—Con esa respuesta quedo donde mismo.— Admitió Takato— ¿Por qué no les gusta ese lugar para mi?
—Porque, no nos gusta el entorno en donde estás.— Respondió Mie— No es un lugar de nuestra clase social, ahí solo hay niños con dinero y tristemente nosotros no lo tenemos.
—¿No eran ustedes los que me decían que las clases sociales no importaban?— El castaño se cruzó de brazos.
—Eso fue antes de que fueras a ese lugar.— Contestó su padre.
Takato observó a sus padres sin entender ¿por qué le decían de un momento a otro aquello?
—Lo siento, pero, no lo haré.
—¿Por qué no?— Preguntó Mie.
—Porque, me esforcé mucho por estar ahí y ustedes me están diciendo que tire todo mi esfuerzo a la basura sin ningún argumento claro o válido.— Respondió el castaño.
Takehiro y Mie intercambiaron miradas.
—Hijo, por favor, obedecenos.
—Lo siento, pero, no puedo.— Contestó Takato— Son mis estudios, si renuncio a esta beca nadie me asegura que acepten en otro lugar como ese, mucho menos en estas fechas.
—B-bueno, la preparatoria que ibas antes no era mala.— Habló Mie.
—No, pero, no tenía el prestigio que esta tiene.— Respondió el adolescente.
Los padres de Takato intercambiaron miradas, su hijo verdaderamente parecía no querer dar su brazo a torser, eso era molesto, pero, lo entendían.
—Hijo, por favor, haz lo que te decimos.
—Lo siento, pero, no puedo hacerlo.— Contestó Takato— Salvo que me den un argumento válido para que renuncie a todo lo que he ganado.
Mie suspiró, sabía que terminaría diciendole la verdad a su hijo, mejor sería decirle todo de una vez— Hijo, no queremos que sigas en ese lugar, porque, no se viene algo bueno para las personas que están ahí.
—En ese lugar ocurren cosas que no están del todo bien, cosas que saldrán a la luz.— Respondió Takehiro.
Takato alzó una ceja sin entender.
—Takato, en ese lugar hay negocios ilegales.— Habló el padre del adolescente— Y la DEA se encargará de ellos.
—¿Qué?— Preguntó el adolescente sorprendido— ¿Cómo saben eso?
—Lo sabemos, porque, ellos nos contactaron.— Respondió Mie.
—¿Por qué?
—Por lo que ocurrió hace tres años con mi hermana.— Contestó la madre de Takato.
—¿Con mi tía?
Mie asintió.
—¿Qué tiene que ver su muerte en esto?
—Muchas cosas...
~Horas después~
—Nunca había visto a Mimi tan feliz jugando con una niña.— Sora no pudo evitar comentarle a Alice mientras observaba como su amiga jugaba con su hija.
Alice asintió— Bueno, con Natsumi siempre han tenido ese vínculo tan especial de madre e hija.
Mimi tomó en sus brazos a la rubia— Te atrapé.
—No.— Gritó la rubia— Otra vez, juguemos otra vez, pero, esta vez tu corres y yo te atrapo.
Mimi sonrió.
—Lo siento, creo que no podrán jugar.— Alice se acercó a ellas— Disculpa Mimi, pero, ya va siendo hora de irme al hotel.— Habló Alice— Hoy tengo un compromiso con mi novio y no puedo faltar.
—¿Novio?— Preguntó Mimi.
—Si.— Respondió Alice.
—No me habías comentado que tenías novio.— Musitó la Tachikawa.
Alice sonrió— ¡Je! Se me había olvidado.— Contestó— Pero, si, tengo novio, hace un tiempo conocí a un chico japones con el cual comencé a hablar, luego a salir, y pues, es en parte por él que estoy aquí, ya que, me ofreció un puesto de trabajo en la empresa de su familia para que estuvieramos más cerca.
—¡Genial!— Exclamó la castaña, la verdad era que esa chica había sufrido bastante con su anterior novio por la relación tóxica que tenían, y debido a aquello, la pelirroja había dejado de "creer en el amor" luego de la muerte de su hijo se sumergió en una depresión, pero, le daba alegría saber que estaba comenzando una relación nueva, con un chico que no fuera el chico con el cual estaba antes— Me alegro por ti, en verdad, ojalá seas feliz con él.
—Eso espero.— Musitó Alice— Por el momento todo va bien, ojalá, no sea otro patán como el anterior.
—Bueno, si llegara a serlo, entre Damar, Takuya y yo le damos una paliza, no te preocupes.— Comentó la Tachikawa.
Alice carcajeo ante esto— Bueno, ya me tengo que ir.— Dijo tomando su cartera y volteo hacia su hija— Natsumi, guarda tus juguetes.
—¡Hey! Alice, si quieres, nosotras te podemos llevar al hotel.— Le ofreció Sora.
—¿Enserio?
—Si.— Respondió la Takenouchi.
—Nosotras justo tenemos un compromiso importante ahí, así que, no tenemos problemas en llevarte.— Habló Mimi.
Alice sonrió— Bueno.
Takeru, Hikari y Rika ingresaron al hotel.
—Pensé que Damar vendría a la fiesta ¿qué paso?— Takeru le preguntó a Hikari mientras ingresaban al hotel.
—No.— Respondió la castaña.
—¿Por qué?
—No sabemos.— Contestó esta vez la pelirroja— No salió en todo el día de su habitación, al parecer está molesta, pero, no sabemos por qué, ni siquiera nos quiso hablar.
— Bueno, creo que por esta noche seremos solo los tres.
—¿Estás seguro?— Preguntó Rika.
—¿Por qué la pregunta?— Cuestionó el rubio.
—Porque, estuviste todo el día con tu amiga que pensé que hasta tendrías que traerla a la fiesta.— Contestó la pelirroja.
Takeru hizo una mueca— Solamente fui amable con ella, porque, tu madre me lo dijo, pero, tranquilas no vendrá a la fiesta.
Hikari suspiró, escuchar eso la aliviaba, porque, le hacia saber que Catherine no estaría aquí.
—Natsumi despidete de la tía Mimi.— Alice le anunció a la rubia.
La niña asintió y se acercó a la castaña— Adiós tía Mimi.
La Tachikawa se arrodillo para que la chica besara su mejilla— Adiós.
Alice sonrió y tomó a la niña— Un gusto en conocerte Sora.
—Igualmente.— Musitó la Takenouchi.
—Mimi apenas termine lo que debo hacer con mi novio te llamo para coordinar una fecha para que veas a Natsumi.
—Si.— Respondió Mimi.
—Bueno, me voy, adiós chicas.— Habló Alice antes de alejarse.
—Adiós Alice.
No habrán pasado más de dos minutos cuando la pelirroja desapareció ante sus ojos.
Sora volteo hacia su amiga quién evidentemente no se encontraba bien—¿Estás bien?
Mimi hizo una mueca— Siempre la separación es difícil.— Suspiró— Pero, estoy bien.— Dijo antes de observar su móvil— Yamato me envió un mensaje, la fiesta ya comenzó ¿te parece si vamos?
Sora asintió— Si.— Respondió— La fiesta será en el recinto de atrás, ya sabes, donde fue la fiesta el fin de semana.
—Está bien, vamos.— Con algo de suerte, Natsumi y Yamato no se encontrarían, aunque, si era sincera tenía cierta curiosidad de saber como actuarian si se encontraban.
Rika tomó un sorbo de su deliciosa malteada e Hikari no pudo evitar sonreír levemente.
—No puedo creer lo que estoy viendo.— Comentó la castaña.
Rika alzó una ceja— ¿Por qué?
—Porque, hay todo tipo de bebida alcoholica y tú estás tomando un jugo simple jugo de naranja.— Respondió Hikari— Sin duda, Takato te está moviendo el suelo en todos los sentidos.
Rika sonrió levemente— B-bueno, luego de que ocurrió encontre que Takato tenía razón en muchas cosas.— Suspiró, sin duda, necesitaba mejorar su calidad de vida como persona, no para los demás, no por su madre, no para aparentar ser una chica de sociedad, si no que necesitaba cambiar por ella misma, ya mucho había sufrido, ahora quería ser mejor para sentir bien consido misma, algo que había dejado de hacer hace mucho. Iba a costar, lo sabía, pero, lo intentar, aunque, fuera difícil.
Hikari sonrió, ese chico sin duda había llegado para hacerle bien a esa chica.
Rika recorrió el lugar con la mirada, había un gran escenario con instrumentos, una pista de baile que ya tenía personas, dos mesas largas con bebidas de todo tipo, comida y una gran barra. Pasó su mirada hacia la entrada y pudo divisar que por ahí ingresaba la hermana de su mejor amiga junto a Sora seguidas de otras personas que venían a la fiesta, la gran mayoría eran personas que no conocía o no recordaba haber visto.
¡Pero!
Abrió sus ojos a más no poder al divisar a una rubia de ojos azules.
—¿Esa no es Catherine?— Preguntó Rika sorprendida señalando la entrada e Hikari volteo rápidamente a la dirección quee indicaba su amiga.
Hizo una mueca.
Efectivamente era ella.
—¿Qué hace ella aquí?— Cuestionó la castaña.
Takeru le había dicho que no la había invitado.
¿Cómo rayos había llegado hasta ahí?
—No lo sé.— Respondió Rika.
Hikari suspiró.
Al parecer la fiesta no sería muy agradable.
¡Maldición!
Kouji no pudo evitar observar sorprendido a Hikari y Rika, no había visto en todo el día a Damar y pensaba que vendría con sus amigas a la fiesta.
Hizo una mueca.
—¡Esto es el colmo!— Exclamó Yamato— Ryo aún no llega.
El Minamoto dirigió su mirada hacia el rubio— ¡Hey! Tranquilo, tu sabes como es.
—Si, pero, me estresa que sea tan irresponsable.— Respondió el Ishida.
—A mi también me molesta, pero ¿qué le vamos a hacer?— Comentó Kouji y luego dirigió su mirada a su móvil, aún quedaba tiempo para que llegar, cosa que no le preocupaba, porque, ya habían tocado otras veces con una caja de sonido y era mucho más agradable que tocar el idiota de Ryo.
Yamato suspiró— Bueno, mientras llega iré a tomar algo.— Comentó— ¿Vienes?
—No.— Respondió el Minamoto.
—Está bien, nos vemos después.— Dijo el rubio antes de dirigirse a una de las mesas a tomar algun refresco, pero, antes de que pudiera tomar un vaso unas manos se posaron sobre sus ojos.
—¿Quién soy?
El Ishida reconoció al instante la voz de su novia.
—Mimi.
—Acertaste.— Las manos salieron de sus ojos y el chico volteo—Hola amor.— Mimi besó los labios del rubio quién no dudo en corresponderle.
Yamato la tomó de la cintura— Me alegra verte, princesa.
—Lo mismo digo.— Respondió la castaña mientras lo abrazaba.
—¡Vaya! ¡Vaya! Si es Mimi Tachikawa.— Una voz masculina llamó la atención de ambos y al voltear se encontraron con el anfitrión de la fiesta.
—Hola Shun.— Lo saludó Mimi— Tanto tiempo.
—Eso mismo iba a decir.— Contestó el peli-negro— No nos veíamos desde la fiesta de inauguración de uno de mis hoteles en Nueva York.
—Si.— Respondió la castaña— Me extraño no verte el otro día en la fiesta que hizo tu familia.
—A pues, ese día llegué muy tarde y estaba muy cansado como para estar en fiestas.—Contestó el primo de Sora.
—Bueno, creo que ese cansancio no duró mucho.— Comentó el Ishida.
—Claro que no, ustedes saben que amo las fiestas.— Respondió el chico— Además, debía ahcer una para darle la bienvenida a mi novia.
—¿Novia?— Preguntaron Yamato y Mimi.
—Si.— Contestó Shun— Tengo novia y se vino a vivir a Japón conmigo.
—¡Wow! No lo sabíamos.— Comentó el rubio.
—Nadie lo sabia, solo mis padres y mi hermano.— Respondió el peli-negro— Ni siquiera mis primos o mis tios sabían.
—Eso explica, porque, Sora no lo había comentado.— Mencionó Mimi.
—Muy pronto la conocerán, porque, me acabó de enviar un mensaje de que había llegado.— Comentó el chico observando su móvil.
—Mmm ¿Shun con novia?— Musitó el rubio— Eso suena a compromiso, tú nunca habías tenido algo serio con alguna chica.
—Mira quién lo dice.— Comentó el pelinegro— Antes de Mimi, eras igual o peor que...
—¿Shun?— Una voz femenina se escuchó en el lugar y los tres voltearon.
Mimi alzó una ceja sorprendida al cierta chica pelirroja de ojos chocolates.
—Amor.— Shun se acercó a ella y besó sus labios— Hola.
—Hola.— Respondió la pelirroja también sorprendida.
—¿Cómo estás?
—Bien.— Contestó Alice.
—Me alegra ver que llegaste.— Comentó Shun— Justo les estaba hablando de ti a unos amigos.— Señaló a Yamato y Mimi—Yamato, Mimi, les presento a mi novia...
—¿Alice?— Mimi alzó una ceja sorprendida.
—Hola Mimi.— Respondió la pelirroja.
Shun alzó una ceja— ¿Se conocen?
—¿E? Si.— Contestó la castaña.
—Nos conocemos de prácticamente toda la vida.— Respondió Alice— Creo que te había comentado que tenía unos amigos que iban al Internado donde asisté mi primo Yuu.
—¡Wow! Es pequeño el mundo.— Comentó el peli-negro.
—Si.— Contestó Mimi.
—Bueno, ya que se conocen, Alice te presento a Yamato.— Shun señaló al rubio.
Yamato y Alice intercambiaron miradas.
—¡Wow! En verdad el mundo es pequeño.— Musitó la pelirroja.
—Sin duda.—Respondió el rubio.
—Un gusto en verte otra vez, chico.— Alice saludó al Ishida.
Mimi alzó una ceja sorprendida— ¡Un minuto! ¿Ustedes se conocen?
—Si.— Respondió Yamato— Bueno, no de toda la vida como ustedes dos, pero, si de hace unos días atrás cuando vinimos a la fiesta, me encontré con una niña que estaba pérdida y la ayudé a buscar a su mamá.— Contestó Yamato— Quién justo resulto ser ella.
¿Qué?
Mimi abrió los ojos y la boca a más no poder.
¿Había escuchado mal?
No, claro que no, Yamato había dicho claramente que se había encontrado con la hija de Alice.
—¿Te encontraste con Natsumi?— Preguntó Shun sorprendido.
—¿E? Si...—Respondió Yamato— ¿Así se llama tu niña? ¿cierto?— Le preguntó a Alice.
La pelirroja asintió— Si.
Mimi comenzó a respirar con dificultad ante lo que había escuchado, su corazón comenzó a latir a mil, esto no podía ser real. Yamato y su hija se habían encontrado ¿y ella ni siquiera se había enterado?
Su corazón se aceleró al mil tan solo al imaginarse la escena, Yamato se había encontrado con su propia hija sin saberlo, habían intercambiado palabras sin saber que era sangre de su sangre.
—Si no fuera este chico no sé que hubiera ocurrido, Natsumi se me perdió y no sabía donde estaba, ya sabes Shun como es mi niña un tanto revoltosa.— Mencionó la pelirroja— Y terminó escapandose de la habitación sin que me diera cuenta.
—Bueno, salió revoltosa como la madre ¿no?— Comentó Shun antes de besar la mejilla de la pelirroja.
Alice sonrió, pero, no pudo evitar dirigir su mirada hacia Mimi— ¿Y este chico que es tuyo Mimi? ¿tu amigo? ¿compañero de clase?
—¿E?— Mimi salió de sus pensamientos— Yamato es mi...—Habló con dificultad— Mi novio.
—¿Novio?— Preguntó Alice sorprendido.
—Si.— Contestó Yamato.
Shun sonrió— ¡Wow! Me alegra saber que pudieron retomar su relación, no sabes todo lo que sufrió este chico luego de que te fuiste.
¿Irse?
Alice alzó una ceja.
¡Un minuto!
Rubio...
Ojos azules...
Piel pálida...
Novio de Mimi...
¿Podría ser?
—No es para tanto.— Comentó el rubio ruborizado.
—¿A no?— Preguntó Shun— Mimi, invitaba a Yamato a salir a fiesta y siempre rechazaba mis invitaciones. Le presentaba amigas y no podía mirar a ninguna, porque, solo pensaba en ti.
Mimi alzó una ceja y observó a su novio— ¿Eso es cierto?
—B-bueno, tal vez...— Yamato llevó una mano a su nuca.
—¿Tal vez?— Rió Shun— Ojalá fuera un simple "tal vez", Mimi podría detallarte todo lo que ocurrió con Yamato en este tiempo, pero, no lo haré, porque, debo presentarle mi novia a mis tios, primos y amigos.— Tomó la mano de Alice— Amor ¿vamos?
—¿E?— La chica no pudo evitar balbucear por la confusión que sentía ante lo que había descubierta hace unos segundos— E-está bien.— Luego tendría tiempo para hablar con la castaña— Los veo después chicos.
Mimi asintió.
Y sin decir más, Shun se alejó junto a su novia de la pareja.
Yamato volteo hacia la castaña y no pudo evitar notar que su chica no se encontraba bien.
—¿Estás bien?— Le preguntó— Te noto un tanto pálida.
—¿E? S-si estoy bien.— Respondió con dificultad la castaña.
—¿Segura?
—Segura.— Besó sus labios rápidamente para desviar su atención— Mira, Ryo llegó, deberían comenzar a tocar.
Yamato volteo en dirección al lugar donde señalaba la chica y efectivamente se dio cuenta que Ryo había llegado.
Suspiró.
Tenía ganas de regañarlo y eso haría.
—Esta bien.— Contestó el rubio— ¿Nos vemos después?
Mimi asintió y sin decir más, el chico se alejó en dirección al Akiyama.
Al ver al chico lejos, Mimi respiró profundo y cerró los ojos.
No podía creer lo que había escuchado.
Abrió los ojos y se encaminó hacia la barra sin creer aún lo que había escuchado, simplemente no caía, era demasiado increíble y que nunca pensó que hubiera ocurrido, mucho menos en su ausencia, siempre creyó que el día en que Natsumi y Yamato se encontraran sería, porque, ella los presentaría.
Observó atentamente lo que tenía en frente habían miles de bebidas alcoholicas.
Tomó una copa, por el aroma evidentemente era wisky, no lo dudo dos veces y se tomó todo el líquido de una vez.
Hizo una mueca, el alcohol no era lo suficientemente fuerte para olvidar todo ese lío.
Natsumi, su hija, se había encontrado frente a frente con su padre, Yamato, quién ni siquiera sabía de su existencia y ella ni siquiera había estado presente, daban ganas de lanzarse de un segundo piso al vacío.
El próximo capítulo se viene bueno.
atalia-san: jsjsjs hola jsjsj me alegra que comentarás y también me alegra saber que te gusten las escenas de Kouji y Damar son las escenas más "apasionantes" pero, a la vez dificiles de escribir, quizás, sean almas gemelas jsjsj ojalá sigas leyendo, comentando y te mando un gran abrazo a la distancia.
mimato bombon kou: si pobre chica saber ese secreto la va a ser sentirse más deprimida, porque, es su madre y de los Tachikawa era la más unida a ella, ya veremos que ocurre con ella y si hará que Rumiko o Ryo caigan jsjsjsj Kouji puede ser muchas cosas para Damar en esta situación y creanme amaremos al Minamoto con todo lo que ocurrirá jsjsjsj Ya veremos si es que en algún momento le dirá y como se lo tomará jsjsj ya veremos si se encuentran o no jsjsj que bueno que te hayas puesto al corriente jsjsjs ojalá sigas leyendo y comentando. Te mando un abrazo a la distancia.
AmiKarina: jsjsjsj el momento Takato y Rika sebía ser interrumpido jsjsj en algún momento tendremos un momento completo jsjsj Mimi no está decepcionada, está triste, cree que Yamato no la aceptará por eso que dijo jsjsj ya veremos que ocurre con ellos dos jsjsj Si, pobre chica, tristemente en este caso no puede, porque, no quiere darle más problemas a Mimi y con Takuya las cosas no están bien, pero, llegará un momento en donde se van a apoyar. Me alegra que te gustara el capítulo. Ojalá sigas leyendo y comentando. Te mando un gran abrazo a la distancia.
mariacredenza02: jsjsj sin duda, son tiernos jsjsj a diferencia de los otros van a paso lento, seguro e inocente jsjsj si nuestra Mimi va a quedar calva y sin uñas por el estrés jsjsj ojalá todo salga bien para ella jsjsj ya veremos si se encuentran o no jsjsj Takuya aprendió mucho de Taichi jsjsj pero, de a poco irá aprendiendo de Yamato, aún así, siempre lo he dicho, si Damar le dijera que esto viene de antes, quizás, Takuya actuaría mejor jsjsjsj Ya están todos los malos juntos jsjsj ojalá no hagan sus maldades jsjsj Rumiko es detestable, sin duda, ya veremos a quién llamó la castaña jsjsj Ojalás sigas leyendo y comentando. Te mando un gran abrazo a distancia.
