Cierto rubio de ojos azules, integrante de los Teenages Wolves se encontraba caminando de una manera tranquila a su clase, no iba atrasado, ni con apuro, al contrario, iba solo, si, pero eso no era problema, generalmente le gustaba estar así, finalmente Ryouma podía ser su amigo, pero era estresante, agradecía no tenerlo en su misma clase, ni a él, ni a Ryo, ni a los demás de la banda.
Mientras tanto a unos escasos centímetros una chica castaña de ojos morados lo observaba atentamente.
"Enamoralo y juega con él"
Recordó las indicaciones que le había dado el Akiyama hace unos minutos.
Si, sonaba a venganza y lo era, no lo culpaba, finalmente lo habían expulsado de su propia banda.
Al principio le había sorprendido la petición de ayuda y la propuesta, pero no se había podido negar, ya que Ryo era uno de los pocos amigos que tenía en ese lugar, además ese chico, Kiriha, no era para nada feo, al contrario, estaba bastante guapo.
Seria buena diversión.
Sin decir más se acercó sigilosamente a él en la dirección contraria, sin que se diera cuenta y cuando estuvo cerca.
¡Ups!
Chocó contra él provocando que tanto su bolso como el maletín del chico cayesen al suelo y ella "sin querer" cayó contra el rubio depositando sus manos en sus hombros y dejando sus rostros a muy corta distancia.
Kiriha en un acto reflejo sostuvo a la chica para que no cayese y literalmente se sumergió en una exótica mirada morada.
—¡Ups!— Exclamó la castaña— Disculpa.— Se apresuró a hablar.
El rubio no demoró mucho en reconocer a la castaña hermana de Yuu Amano, quién hace pocas semanas había llegado al lugar, pero que de manera inconsciente había llamado levemente su ateción.
—Lamento mucho haber chocado contigo, no quería hacerlo.— Habló la castaña.
—No te preocupes.
La castaña tomó su mochila, luego el maletín del chico y se la extendió— Toma.
El rubio la recibió.
—Nuevamente me disculpo, no quería chocar contra ti, pero anduve distraída.
—No te preocupes Nene.
—¿Nene?— La chica alzó una ceja— Así que sabes mi nombre.
Si, pues, de manera casi inconsciente se había interesado por saber quién era la nueva candente chica que había llegado al internado y había preguntado por su nombre.
—Si, lo conozco.
—Bueno, de todas formas me presentaré, digo, al menos algo de cortesía debo tener, mi nombre es Nene Amano.— La chica extendió su mano hacia el rubio— Mucho gusto.
Kiriha alzó una ceja y observó la mano de la castaña, generalmente no saludaba así a las personas, salvo que fueran chicas irresistibles como ella, así que le correspondió— Hola mi nombre es...
—No es necesario que me digas tu nombre, ya sé quién eres.— Dijo la chica acomodando levemente su cabello.
—¿A si?
—Si.— Respondió Nene— Eres Kiriha Aonuma, uno de los integrantes de los Teenages Wolves, todo el mundo te conoce.
Siempre se le olvidaba ese detalle.
—¿Sabes? Me causa mucha emoción al fin poder hablar contigo.
—¿A si?
Nene asintió—Me gustan bastante los Teenages Wolves. Desde que los escuché tocar por primera vez me...—Buscó la palabra adecuada— Llamó mucho la atención su banda y cuando mi hermano me dijo que estaban en este internado con más razón me quise venir.
—¿Tu hermano?— Cuestionó Kiriha— Yuu Amano ¿cierto?
—¿Lo conoces?
—Si.— Respondió el rubio— Es uno de mis amigos.
—¿Amigos?— Preguntó Nene— ¡Wow! No sabía que lo eran.— Fingir emoción estaba siendo muy fácil.
—Bueno no somos muy cercanos.— Contestó Kiriha, hablaban para traficar sustancias o para escaparse a fiestas de vez en cuando— Si fueramos probablemente hubiera sabido antes de que tenía una hermana.
—¿No sabías?— Preguntó Nene— ¿Acaso mi hermano nunca te habló de mi?
—No.— Respondió Kiriha— Nunca.
—Que buen hermano tengo.— Musitó la castaña y rodó los ojos.
—Bueno algunos te conocían como la ex loca de Takuya que se había enfrentado con Izumi, pero en persona no supe que eras su hermana hasta que llegaste aquí.
¿Ex loca?
Nene hizo una mueca, debió suponer que Izumi con su versión de la historia tenía convencidos a todos en ese lugar de que ella erala villana, bueno en parte tenía razón, pero no estaba loca.
—Que pena que me tachen de loca.— Musitó la castaña— Enserio es molestoso que me consideren como una sobretodo, un chico tan guapo como tú ¿Enserio? me hubiera gustado que mi guitarrista favorito no me conociera por esa característica.
"Guitarrista favorito"
Si ¿cómo no? Apenas conocía a los Teenages Wolves como para admirar a Kiriha. Aunque debía admitir que de haberlos conocido probablemente le hubiera gustado ese chico, porque en verdad era guapo y muy sexy.
Lo observó de pies a cabeza y se mordió el labio inferior, en verdad era irresistible.
—Porque loca no soy.— Pasó una mano por su escote de manera "sigilosa" poniendo en marcha sus técnicas de seducción.
Kiriha pasó su mirada por ella y se mordió el labio inferior, en verdad era sensual esa chica, ese escote en verdad era resaltante.
—Ya que no sabías de mi existencia supongo que no sabes que me gusta tu banda.— Nene jugó levemente con su cabello.
—Tampoco es como que hablara mucho con tu hermano.— Habló Kiriha— Pero no me lo hubiera imaginado.— Mentira, todas las chicas morían por los integrantes de los Teenages Wolves, así que no era una sorpresa— Aunque bueno, tampoco me hubiera imaginado que la hermana de Yuu era tan...
—¿Tan?— Preguntó Nene— ¿Tan qué? ¿Diferente a él?
—Iba a decir otra cosa, pero si, eres muy diferente a él.— El hecho de ser mujer la volvía llamativa y su figura, sensual— Al menos físicamente.
—En la forma de ser también lo soy.— Comentó la castaña— Pero claro eso no lo podrías saber, ya que no nos conocemos, o al menos tú no a mi, porque yo por tu banda te conozco muy bien.
—¿Eso es lo que crees?
—Si, pero no del todo, claro, al menos por lo que he visto y he leído al menos sé algo tuyo.— Comentó Nene— Aunque bueno ahora que te tengo en frente y en el mismo lugar podría saber más. Dime ¿no te molestaría darle unos minutos de atención a una de tus fans, cierto?— Guiñó el ojo.
Eso sonaba interesante.
Pensó Kiriha.
Si no fuera tan atractiva probablemente ni siquiera se acercaría, pero era todo lo contrario.
—Claro que no.— Respondió el rubio— Sería interesante.— Observó su reloj— Aunque en otro momento.— Hizo una mueca— Lamento terminar esta corta pero interesante conversación pero me debo ir a clases.
—No te preocupes y tampoco te disculpes, entiendo que tengas que ir a clases, pero me dio mucho gusto que al final pude conocer a mi guitarra favorito. Si quieres un día de estos podríamos seguir con esta conversación y quizás divertirnos un poco.— Habló Nene y nuevamente pasó su mano por su escote—Ya que, aún soy nueva, todavía me estoy adaptando y pues...— Sonrió— Me gustaría tener una amistad con un chico tan agradable y guapo como tú.
¿Agradable?
Era chistoso escucharlo, porque él no era de ese tipo de chicos, al contrario. Sin embargo, con mujeres como ella era todo un caballero.
—Claro.
Rumiko observó su móvil, pronto iría a hacer la denuncia de desaparicion de la castaña Tachikawa, pero Keisuke no respondía ¡En verdad era estresante! Le dejaba a ella los problemas de ¡su! hija.
¡Toc, toc!
El sonido de la puerta la sacó de sus pensamientos.
—Adelante.— Musitó y la puerta se abrió dejando ver a una de sus supervisoras.
—Señora Rumiko, aquí está Nanami.— Avisó Tally y no habrán pasado más de dos segundos cuando cierta chica rubia de ojos rosas.
—Permiso.— Musitó la chica ingresando a la oficina.
—Nanami.— Reconoció al instante a la chica que tanto esperaba ver ese día.
—Buenas tardes.— Saludó la chica— Tía Rumiko.
Rumiko sonrió, entre tantas cosas ¡al fin! Ocurría algo bueno. Nanami Nonaka, su sobrina, hija de su medio hermano paterno (en paz descanse) a quién siempre había querido, estimado y consentido, hoy regresaba de su intercambio en España, así que volvería a vivir en el Internado.
La madre de Rika no dudó en rodear el escritorio para ir directo hacia su sobrina y abrazarla, siendo correspondida.
—Las dejaré solas.— Musitó Tally al ver que sobraba en ese lugar y salió cerrando la puerta.
Literalmente Rumiko y Nanami ignoraron a la mujer, ya que continuaron con su alegre encuentro.
—Me alegra mucho verte.— Habló la mayor— Sobrina.
Nanami sonrió ante esto— A mi también me alegra verte, tía, te extrañé en mi estadía en España.
—Créeme yo te extrañé más.— ¿Cómo no? Si ella era su dupla, su más grande aliada, su copia— Ven sientate.— Señaló una silla de tercipelo.
La chica obedeció y tomó asiento en aquel lugar.
—Cuentame ¿cómo estuvo el viaje de vuelta?
—Agradable.—Respondió Nanami— Mi odiosa madre hizo algo bueno, me compró un vuelo en primera clase y fue interesante, no tedioso.
—Que bueno.— Comentó Rumiko.
—¿Cómo has estado tú, tía?
—Un poco estresada, con mucho trabajo, más que otras veces, pero lo he sabido sobrellevar.— Contestó la mujer.
—¿Rika te ha dado muchos problemas?
—Si, pero eso no es novedad.— Respondió la mayor— Tú sabes que ella es un tanto...—Buscó palabras— Difícil.
—Que mal que se siga comportando así, se supone que como hija de la directora debe dar el ejemplo ¿no?
Rumiko asintió— Si, pero ¿qué más puedo hacer? Ella es así.
Si, eso era verdad.
—Además no ha sido solo ella la que me ha dado problemas, han habido otros alumnos que me han dado más, pero no quiero darte la lata hablando de esto.— Habló la mayor— Al contrario, quiero celebrar que mi sobrina favorita regresó ¿te parece si vamos a almorzar juntas para colocarnos al día?
—Si, me parece.— Respondió Nanami— Pero antes ¿puedo ir a dejar mis maletas? Traigo mucho equipaje y me gustaría también cambiarme de ropa, si no es problema.
—Claro.— Respondió Rumiko y sacó de su escritorio una llave— Toma aquí están tus llaves y el número de tu departamento.
—¡Genial! Supongo que es el mismo que tenía antes de irme, para mi sola.
—Lamento decirte que no es ese.— Rumiko hizo una mueca—Y no estarás solas, tendrás compañeras.
—¿Qué?— Preguntó Nanami— ¿Debe ser broma? ¿no?
—Lo siento, pero no habían más departamentos desocupados, todos tienen una o dos personas.— Respondió Rumiko—Lamento mucho que tengas que tener que convivir con más chicas, ya que te gusta tener tu espacio, pero apenas pueda desocuparé uno para ti.
Nanami hizo una mueca frustrada y suspiró resignada— Está bien tía.
Rumiko sonrió.
—Tú ya conoces como es este lugar, sus reglas y horarios, sin embargo tú sabes que por ser mi sobrina no tienes que preocuparte.— Rumiko le guiñó el ojo.
Nanami sonrió, sin duda era un gusto estar de vuelta.
"Luego de todo lo que le hizo a Takeru, al igual que tú, Rika. Que no tuviste miedo de ofrecerles drogas en la maldita noche que murió Henry"
"no tuviste miedo de ofrecerles drogas en la maldita noche que murió Henry"
Esas palabras resonaban en la mente de Takato una y otra vez.
"Dime ¿acaso querías que él tambien muriera como lo hizo tu amigo?"
Esa pregunta de esa chica rubia provocó que una conversación que había tenido con Rika viniera a su mente.
~Recuerdo~
—¿Henry?— Cuestionó— ¿Quién es Henry?
Rika se mordió el labio inferior y simplemente mantuvo silencio, lo había dicho casi sin pensar, ni cuenta se había dado de que nunca le había hablado a ese chico sobre su amigo que había muerto hace años.
—Es...—Suspiró— Era.— Corrigió— Un amigo que falleció.
—¿Murió?— Preguntó el castaño— ¿Y por qué?
—Por exceso de drogas hace tres años.— Respondió Rika— En una noche maldita
~Fin del recuerdo~
Y fue en ese momento de otro momento de su vida vino a su mente.
~Recuerdo~
—Takato, en ese lugar hay negocios ilegales.— Habló el padre del adolescente— Y la DEA se encargará de ellos.
—¿Qué?— Preguntó el adolescente sorprendido— ¿Cómo saben eso?
—Lo sabemos, porque, ellos nos contactaron.— Respondió Mie.
—¿Por qué?
—Por lo que ocurrió hace tres años con mi hermana.— Contestó la madre de Takato.
—¿Con mi tía?
Mie asintió.
—¿Qué tiene que ver su muerte en esto?
—Muchas cosas...
Takato alzó una ceja sorprendido ante esto— ¿Qué cosas?
Mie tragó saliva— Pues...— Suspiró— ¿Recuerdas que te dijimos que tía había caido de forma injusta a prisión?
—Si.— Contestó Takato— Pero ¿eso qué tiene que ver?
Sus padres intercambiaron miradas y finalmente fue el padre del chico quién decidió hablar.
—A tu tía la acusaron injustamente de haber drogado a un alumno de ese lugar.
—¿Qué?— El menor no pudo evitar sentirse más que impresionado ante aquella declaración, ya que no se lo esperaba.
—Lo que escuchaste, hijo, tu tía fue injustamente acusada de haber drogado a un adolescente que...—Takeshiro Matsuki suspiró— Murió.
¿Murió?
~Fin del recuerdo~
Exceso de drogas, ofrecer drogas, murió por drogas ¡Drogas! Todo se resumía en esa palabra y en "muerte"
¡Un minuto!
A su mente vino la imagen de uno de los artículos que había impreso.
"Extraño acontecimiento ocurrido una noche el 3 de Abril en el internado Billonario de Odaiba, se cree que fue por exceso de drogas ingresadas al lugar, pero todavía no se sabe exactamente quién o quienes son los culpables, se sospecha de algunos funcionarios, pero también de los mismos habitantes de aquel lugar"
¡Rayos!
Todo esto lo llevaba a una sola pregunta.
¿Rika estaba involucrada en esta situación?
Mimi abrazó, mejor dicho estrujó con todas sus fuerzas a la pequeña niña rubia que se encontraba en sus brazos.
—Tí-tía Mimi.— Natsumi intentó artícular palabras— Me estás apretando.
La castaña ante esto no pudo evitar avergonzarse y soltó a la niña— ¡Ups! Lo siento Nat, pero me alegra mucho verte.— Acarició su mejilla— Te extrañé mucho.— Luego de decir esto desvió su mirada hacia la pelirroja madre adoptiva de su hija— Muchas gracias Alice por traerla.
La pelirroja sonrió levemente de lado en señal de respuesta, la verdad era que había luchado mucho consigo misma para tomar esa decisión, pero finalmente la había tomado, no sabía si había sido lo correcto o no, el tiempo se lo haría saber.
—Tía Mimi ¿qué te pasó?— Preguntó la rubia— ¿Por qué estás aquí? ¿Estás enferma?
La Tachikawa no pudo evitar conmoverse ante la notoria preocupación de la pequeña.
—No me sentía muy bien y por eso terminé aquí.
—¿Te dolía el estomago? ¿la cabeza? ¿te resfriaste?— Habló Natsumi— ¿Te vas a morir?
—No, preciosura, no moriré.— O bueno, eso esperaba— Simplemente no estaba bien, pero ahora estoy bien.— Acarició su cabello— ¿Y sabes por qué?
—¿Por qué?
—Porque tú ahora estás conmigo, mi bello angelito.— Unió sus frentes y besó la punta de su nariz.
Alice se mordió el labio inferior al ver esto, era agradable en cierto modo ver que estuvieran feliz la unica con la otra, pero Mimi no estaba en las mejores condiciones para estar muy cerca de ella.
—Te extrañe mucho tía.— Habló Natsumi para luego abrazarla.
—Créeme yo te extrañe más.
Mucho más.
Estar sin su hija era un suplicio, prácticamente un infierno en la tierra. Si no tuviera a sus hermanos probablemente se hubiera muerto hace mucho al estar lejos de su hija, la luz de su vida.
—Cuentame ¿cómo has estado?— Preguntó la castaña— ¿Has recorrido la ciudad con Alice?
—Shi.— Respondió Natsumi— Es más linda que Nueva York, sud padques son bonitosh, aunque no hemos ido a muchos, pero si me llevó a lugares con muchos niños.
—¿A si?— Preguntó Mimi.
—Dijo que quiede que yo estu...—Natsumi habló— Estu...—Le costó pronunciar— Estu...¿le?
—Estudie.— Corrigió Alice.
—¿Qué estudie?— Cuestionó Takuya esta vez.
La pelirroja asintió— Hemos buscado algún jardín para que Natsumi asista.
—¿Enserio?— Mimi preguntó— No nos habías comentado que ya estaba en edad.
—Bueno, tú deberías saber su edad ¿no? Con eso queda más que obvio que debe ir a un jardín.— Comentó Alice— Ya tiene tres años, tú y yo habíamos acordado que a esa edad iría al jardín para luego al prescolar y aquí en Japón el año estudiantil ya comenzó, así que no perdí tiempo.
¡Rayos!.
No había pensado en eso, por estar pendiente de sus problemas detalles importantes como ese se le iban.
Como Alice había dicho, ambas habían acordado que cuando Natsumi tuviese tres años iría a un jardín, ya que Mimi no tenía confianza de dejar a su pequeña en la guardería a tan corta edad d años y la madre adoptiva de Nat era de la misma teoría. Sin embargo, entrar a medio menor en el jardín era importante para tener buena base al entrar a prescolar.
La oji-miel no pudo evitar sentir un tanto de nostalgia, siempre había soñado con ser ella quién llevase a su hija a su primer día, pero por su situación dudaba que así fuera, algo que en verdad la hacia sentir mal, finalmente sería otra etapa que se perdería.
—¿Y cómo les ha ido en la busqueda?— Preguntó Mimi.
—Bien, pero aún no encuentro el indicado, hemos ido a dos, pero no me convencen.— Respondió Alice.
—¿A sí?— Cuestionó Takuya— ¿Por qué?
—Porque tienen muchos niños y sus infraestructuras no me han gustado.— Contestó Alice— No quiero sonar auna persona de la alta burguesía, porque ustedes saben que tampoco tengo la mejor situación socio-económica, pero me gustaría que fuera más privado.
Encontrar un jardín infantil con esas características era un tanto difícil, ya que habían pocos, pero aseguraban comodidad, buen aprendizaje y...
¡Un minuto!
—¿Y no has pensado en enviarlo a la Ciudad del Cominzo?— Preguntó la Tachikawa.
—¿Ciudad del Inicio?— Preguntó Alice— ¿Qué es eso?
—Es el jardín en donde estudiamos Mimi, Damar y yo cuando éramos pequeños.— Respondió Takuya— Es privado, está muy cerca de nuestro Internado, un poco caro, pero decente.
—¿A si?— Cuestionó la pelirroja— ¿Y es bueno?
—Super bueno.— Respondió la Tachikawa— Tu novio Shun estuvo ahí, también mi amiga Sora y muchos de nuestros conocidos.
Curiosamente ese jardín infantil había sido fundado por la abuela de los gemelos Minamoto-Kimura y Thomas, Noriko Kimura, luego había pasado a ser de Tomoko, ya que su hermana (madre del Norstein) murió, pero ahora era propiedad de Kousei, al igual que el Internado debido a la sociedad conyugal que habían disuelto cuando se divorciaron. Ahora eso era propiedad de los Minamoto y era administrado por la madre del ex mejor amigo de Mimi, Koushiro Izumi.
—Conocemos a la mujer que ahora es directora en ese lugar, si quieres podríamos hablar con ella y conseguirte una entrevista.— Comentó Mimi— Para que vayas, hables con ella y veas si es de tu agrado. Lo más probable es que si, ya que se posiciona como el mejor de la ciudad.
Eso sonaba interesante.
Privado, con buen prestigio, decente.
Aunque, que algo resonó en su mente.
"Está muy cerca de nuestro Internado"
¿Qué tan cerca sería eso?
El novio de Mimi bajó las escaleras de manera un tanto apresurada, se suponía que iría a ver a su novia, pero luego de ese inesperado encuentro con Nanami, había ido rápidamente a dejar su mochila que pesaba bastante por aquellos libros de economía que pesaban más que un ladrillo y sin querer se había demorado un poco. Ahora se había definitivamente a salir del lugar e ir directamente a la clínica.
Llegó al final de las escaleras y dio un par de pasos.
—Yamato.— Escuchó que una voz femenina lo llamaba, así que volteo para ver de quién se trataba y al hacer esto se dio cuenta que era la novia de su amigo.
—Sora.
—Hola.— La pelirroja se acercó rápidamente a él— Disculpa por interrumpirte, pero ¿vas donde Mimi?
El rubio asintió— Si, voy a la clínica a verla.— Respondió— ¿Por qué preguntas?
—Porque yo también voy, porque debo ir a dejarleunas cosas que me pidió y ayer tuve un pequeño inconveniente con mi auto.— Comentó Sora— ¿Puedes llevarme a la clínica? Si no es mucha molestia.
—Claro, no hay problema.— Respondió el Ishida, no tenía problemas en llevar a la Takenouchi finalmente en su tenía un asiento disponible aparte del suyo.
—¡Genial! Muchas gracias Yamato.
—No me agradezcas.— Contestó el rubio y señaló la puerta— Vamos.
Sora asintió, sin decir más ambos se encaminaron a la salida para disponerse a salir del lugar. Sin embargo antes de que atravesar el umbral la puerta de la oficina de Rumiko se abrió y de ahí salió tanto la directora como cierta chica rubia de ojos cobrizos.
—Espero que te sientas a gusto, Nanami.
—Muchas gracias tía Rumiko.— Respondió la chica.
La Takenouchi paró en seco al distinguir a aquella chica y literalmente se sintió impresionada al verla— ¿Nanami?
La nombrada al escuchar su nombre volteo y al distinguir a la pelirroja no pudo evitar sonreír— Sora.
—Sora Takenouchi.— Respondió la pelirroja sorprendida.
Unos segundos de silencio se hicieron presentes en el cual ambas intentaban analizaban a la otra y luego de la novia de Taichi cayó en la cuenta de que en verdad era Nanami quién estaba ahí, no un espectro, tanto ella como la rubia gritaron de emoción y se abrazaron.
—¡Vaya! No esperaba verte aquí.— Musitó la Takenouchi— No sabía que regresarías, nadie nos había dicho.
—Nadie sabía, era una sorpresa.— Respondió Nanami.
—Si en realidad es una sorpresa.— Comentó Sora.
—Espero que una buena.
—Claro.— Contestó la pelirroja.
Si había alguien en el mundo a quién consideraba de su círculo más cercano de amigas, esa era Nanami, se conocían desde pequeñas y siempre se habían llevado bien. Junto a Izumi y Mimi siempre la habían considerado parte de ellas.
—Me alegra mucho verte.
—Lo mismo digo.— Respondió Nanami— Mejor dicho, me alegra mucho verlos...—Dirigió su mirada hacia el rubio— A ambos.—Sonrió—Hola Yamato.
Yamato simplemente se quedó inmóvil y con el tono más seio respondió—Hola Nanami.— Y fue solo decir eso cuando una especie de tensión se hizo presente. Y fue en ese momento en que Sora cayó en la cuenta de algo que no había considerado antes.
¡Rayos!
La relación de amistad entre Nanami y Mimi podía cambiar de un momento a otro.
—Mimi.— Alice llamó a la oji-miel quién se encontraba haciendole un lindo peinado a la pequeña rubia quién -sorprendentemente- había dejado que la peinase.
—¿Si?
—Takuya me comentó que necesitabas hablar conmigo.— Respondió la pelirroja— Por eso también vine.
Mimi alzó la mirada hacia la chica y no pudo evitar recordar una de las razones porlas cuales estaba aquí.
—¿De qué sería?
La oji-miel se mordió el labio inferior un tanto nerviosa al ver la mirada intrigada no solo de la pelirroja si no de su hermano, ya que ni él sabía que le iba a decir.
Suspiró.
—Es sobre la pregunta que me hiciste el otro día.
La pregunta que le había hecho el otro día.
Fue en ese entonces que el recuerdo de su última conversación vino a su mente.
—Ya me habías dado la respuesta ¿no?
Mimi asintió—Si, pero ahora quiero darte una de manera definitiva.
—Entiendo.— Respondió Alice, pero antes que la Tachikawa continuara hablando dirigió su mirada hacia el mellizo de Mimi— Takuya ¿podrías llevarte a Natsumi afuera unos momentos?— Esta conversación era seria y delicada, la rubia era muy pequeña para presenciar algo como eso que sabía como podía terminar.
—Está bien.— El moreno se acercó hacia la niña.
—Natsumi, ve con Takuya.
—No quiero.— Exclamó la rubia y abrazó a la Tachikawa— Quiero estar con la tía Mimi.
La castaña sonrió, tampoco quería alejarse de ella, recién había lelgado, pero esta conversación era importante, era sobre y su futuro— Solo será unos minutos mi angel de cabello dorados.— Acarició su mejilla— Luego estaremos toda la tarde juntas.
—Pero yo quiero estar contigo ahora.
—¿Y conmigo no?— Preguntó esta vez Takuya llamando la atención de la niña.
—Si, pero prefiero a la tía Mimi.— Dijo la niña abrazando a la oji-miel.
Eso era razonable, aunque no lo supiera, Mimi era su mamá.
—Bueno, si vienes conmigo te compraré un helado.
Los ojos de Natsumi brillaron ante esto—¿Un helado?
—Si, un delicioso helao de avellana.
Alice hizo una mueca— Takuya, Natsumi no puede comer avellanas, es alergica.
—¿Alergica?— Preguntó Mimi sorprendida— No me habías comentado de eso.
Claro que no había podido, la Tachikawa parecía más preocupada de sus problemas que de su hija.
—El Sábado Nat tuvo que realizarse unos examenes porque su piel se enronchaba y el doctor luego de unos examenes llegó a la conclusión que fue por unas avellanas que comimos.— Respondió Alice— Quise comentartelo, pero estabas más preocupada en tus asuntos, así que no pude decirte.
¡Oh no!
Pensó Mimi.
Ese día Alice la había llamado, pero no pensó que fuera para algo tan grave, al contrario, ella le había dicho simplemente que no podría ir donde Natsumi porque estaba con su hermana, no pensó que quizás había ocurrido algo.
—Lo siento, Alice, no me imaginé que ese día me llamaras para hablarme de eso.
—Bueno una madre debe andar siempre al pendiente de su hija, pensé que ibas a querer saber, pero tus problemas fueron tu prioridad.
¡Rayos!
Eso en verdad sonaba mal y la hacia sentir terrible.
—¿E? Pu-pues, ahora lo sabemos y créenos, ahora que sabemos seremos más cuidadosos.— Takuya no pudo evitar hablar nervioso ante el evidente ambiente tenso que se estaba formando.
Eso esperaba.
Pensó Alice.
Aunque...
Si Mimi le daba la custodia completa seria mucho más precavida al momento de tener que relacionarse con ellos, si es que esto debía seguir siendo así.
—Bueno, Nat ¿te parece si te compro un helado de vainilla?
—¡Si!— Exclamó la niña ante esto.
—Y así fue co-como los...—Izumi tragó saliva— Los...—Titubeo— ¡Los encontré!— Exclamó antes de ponerse a llorar a mares.
¡Rayos!
Pensó Takeru al ver a su hermana llorar.
Depositó su copa con helado en la mesa de centro y abrazar a su hermana—¡Hey! Tranquila.
—No puedo estar tranquila, hermano, y-yo pensé que esta vez las cosas serían diferentes en-entre Ta-Takuya y yo pe-pero...—Izumi sentía un nudo gigante en la garganta, una amargura inmensa, así que tomó una cuchara con helado y tragó— Pensé que seríamos felices, por una vez, ya que creí que sentía lo mismo que yo.
—Eso era lo que decía.
—Y yo lo creí, pero parece que no es.— Izumi tomó un pañuelo y limpio su nariz.
—Bueno, no te sientas mal, diste lo mejor de ti en esto para que estuvieran juntos.
—Si, pero ¿a qué costo? Ahora Takuya y yo no estamos juntos.— Habló Zoe— Intenté dar todo de mi, sin embargo ahora me queda claro que no fue lo suficiente.
"Dar todo de mi"
Esas palabras resonaron en su cabeza, con eso se refería a muchas cosas, pero algo pasó por su mente.
—Disculpa que te lo pregunte, pero con dar todo de ti ¿te refieres a tu relación con Kouji?
Izumi hizo una mueca— No me refiero a solo a eso, aunque en parte fue algo que di por esta relación.
—¿Te arrepientes de haber intentado algo con Takuya y haber dejado a Kouji?— Preguntó Takeru.
—Pues...— Izumi analizó su pregunta, la verdad es que no se le había pasado esa pregunta por la cabeza, ya que al referirse a que dio todo no se refería a estar arrepentida, si no que a mencionar aquellas cosas que había dado por su relación con Takuya, como también lo era su integridad física al enfrentarse con la estúpida de Nene, cosas que por amor no había medido, pero que ahora le dolía, finalmente su relación con Takuya al parecer no funcionaría— No
—Pero ahora que estás en esta situación ¿Te arrepientes de haberlo engañado a Kouji?
—De engañarlo si.— Respondió Izumi— Pero no porque quiera regresar con él ni nada al respecto, si no que me arrepiento de haberle pagado de una pésima forma, finalmente ambos antes de ser novios eramos amigos, unos muy buenos y tú lo sabes.— Comentó— Y si te soy sincera creo que el error fue haber probado una relación, porque no supe gestionar la situación y perdí a un amigo, y pues...—Suspiró— Creo que ahora el destino me está devolviendo lo que hice, porque lo engañé y ahora yo fui la engañada.
—No creo que sea eso.
—Pues yo creo que sí.— Si analizaba todo a su alrededor y su situación en particular parecía que el karma si existía, ya que a todos se les devolvía en algún momento lo malo que hacian.
Sora no pudo evitar pensar en lo que había ocurrido hace unos minutos. Nanami había regresado ¡Nanami!
De estar feliz por su regreso pasó a tener cientos de sentimientos encontrados ¿por qué? Porque Nanami siempre había sido amiga de Mimi, Izumi y ella, a pesar de siempre tener sus amistades por su lado continuamente demostraba un gran aprecio por las tres, tanto así que hassta un tiempo ella había sido parte de su "grupo" casi inseparables las cuatro cuando estaban en sus primeros años de secundaria, sin embargo esto había cambiado por los diversos viajes que la rubia hacia por ser la "niña predilecta de los intercambios" siempre era escogida por el programa de intercambio del internado y viajaba a otros países. Aún así eso no quitaba que la consideraran una gran amiga.
Aunque...
Había algo que había hecho un tiempo y que a pesar de que era pasado (muy pasado) ahora podía traer consecuencias en su relación con la Tachikawa.
Ya que, la rubia había sido una de las chicas con las cuales había estado Yamato luego de que Mimi lo dejara triste, solo y abandonado (por la razón que ella conocía) Situación que en verdad había sido intensa, porque Nanami había sido un poco diferente a las demás, su "relación" con Yamato había sido bastante...Intensa. Según las palabras de Taichi, apasionada, divertida y todas esas cosas, que había terminado en el colapso nervioso de Jun en pleno embarazo.
Si, sonaba tetrico, pero así había sido.
Y pues...
En verdad no podía imaginarse lo que sentiría Mimi al enterarse que una de sus amigas estuvo con su actual novio.
—Llegamos.— Musitó Yamato luego de estacionar la moto.
Sora sacó el casco de su cabeza y se lo extendió— Muchas gracias por traerme.
—No hay de que.— Respondió tomando el casco y luego dejandolo en la moto.
Sora de manera cuidadosa salió de la moto y tomó el bolso de Mimi.
—¿Vamos?— Señaló la clínica.
Yamato asintió para luego bajar de su moto y avanzar en dirección a aquel lugar.
Ambos caminaron y Sora no pudo evitar fijar su mirada en el rubio, en verdad se sentía extraña ante esa situación o mejor dicho preocupada, luego de todo lo que había ocurrido no quería que Mimi se viera más afectada. Ya tenía mucho con el tema de su hija y ahora sus crisis de pánico como para tener más.
—Así que...—Titubeo levemente—Nanami regresó.
Yamato al escuchar esto no pudo evitar voltear rápidamente a ver a la pelirroja sorprendido, ya que no esperaba que ella le quisiera tocar ese tema, al contrario, él siempre se había llevado bien con ella, pero Sora siempre era callada.
—¿E? Si.— Respondió el rubio un tanto incómodo— Regresó.
Sora hizo una mueca, en verdad dudaba en tocar o no el tema. Se suponía que era pasado, sin embargo podía traer unas consecuencias al presente, finalmente esto era similar a lo que había ocurrido con Jun, sin embargo menos catastrófico y a Mimi podía no gustarle.
—No quiero ser entrometida, pero entre ustedes ocurrió algo antes de que ella se fuera.— Comentó la pelirroja.
¡Rayos!
—¿No te resulta extraña esta situación?— Preguntó Sora— Digo, sé que no fue algo muy interno en el ambito sentimental por parte tuya.— Ella sabía perfectamente que todo lo que había hecho al involucrarse con otras había ssido por su decepción amorosa— Sin embargo, fue intenso ¿no?
Si, lo había sido y no lo iba a negar, finalmente era parte de su historia, pero no era importante, al contrario, Nanami había estado con él porque quería superar el engaño de Thomas, su novio, pagandole con la misma moneda. Y él quería olvidarse de Mimi, quién se había ido de un día para otro sin explicación.
—Y pues, ahora estás con Mimi, quién para variar es su amiga...
Suspiró.
—Entiendo que quieras saber, pero si tu pregunta es si esto cambia mi situación con Mimi la verdad es que no.— Respondió Yamato decidido— Yo quiero estar con ella, recuperar el tiempo perdido por su vuelta.— Ya sabía que Mimi no se había ido por cuenta propia si no por el bien de su hermana, así que no la criticaría por eso, avanzaría con ella, si, porque la amaba— Nanami simplemente fue algo pasajero como lo fue Jun y yo sé que para ella también lo fui, después de todo ella regresó con Thomas, así que esta situación terminó con su intercambio y ahí se quedó.
—Me alegra saber eso.— Comentó Sora, ya que no quería que Mimi sufriera, Yamato y ella tenían una hija, merecían estar juntos, sin embargo Nanami era una chica de armas a tomar y no lo decía porque le desagradara, al contrario, pero había que tener cuidado, sobretodo con esta situación— Pero si fuera tú consideraría seriamente en abordar este tema con Mimi.
Lo sabía, sin duda esto era difícil, nada justificaría haberse relacionado con tantas mujeres, ni siquiera su desilución, en ese minuto no lo había pensado, pero ahora como consecuencia tendría que dar muchas explicaciones. Sin embargo de algo estaba seguro, no dejaría que su pasado fastidiara su relación con su novia, ni mucho menos que ocurriera algo parecido cuando ocultó lo de Jun.
Nanami fue buena compañía, pero ahora estoy con Mimi, ella es quién me importa en estos minutos.
Su amigo sonaba decidido y sus acciones demostaban que en verdad estaba enamorado de la Tachikawa, sin embargo, debían saber esto
—Porque ellas eran amigas, no lo olvides.
Hikari salió al patio de la preparatoria y observó a su alrededor. Se encontraba sola, Takeru no había asistido a clases, ya que estaba acompañando a su hermana Izumi. Damar no estaba y Rika tampoco había asistido a clases, ya que no habia quedado bien luego de su discusión con Catherine.
Suspiró.
No le gustaba estar sola, pero nopodía pedirles más a sus amigos, finalmente cada uno tenía sus propios asuntos.
—Hikari.— Escuchó que una voz la llamaba.
La castaña volteo y al hacer esto se encontró con cierto chico castaño—Hermano.
—Hola.— La saludó.
La chica no pudo evitar sonreír al verlo, sin duda, porque eran hermanos y a diferencia de cuando estaban en casa en el internado no siempre se veían.
—Hola.—Fue lo único que dijo antes de acercarse al chico y abrazarlo en señal de saludo— Me alegra verte, oni-chan.
Taichi sonrió y le correspondió el abrazo— Lo mismo digo, hermanita.— Dijo antes besar su cabello.
Hikari sonrió y volvió a abrazarlo— ¿Qué haces aquí?— Preguntó— ¿No tenías clases?
—Si, pero salí un poco antes y aproveché en venir a verte.— Respondió Taichi— Supuse que también estabas en tu receso.
La Yagami asintió.
—Pero no esperaba encontrarte sola.— Habló Taichi— ¿Por qué no estás acompañada de tus amigas o de tu novio?
—Damar y Rika no vinieron a clases, Takeru tampoco.— Respondió Hikari— Tuvieron unos problemas y no asistieron.
Ya se imaginaba a que se refería con el problema de Rika.
A su pelea con Catherine.
—Pero es solo un detalle, ahora tú estás conmigo.— Musitó Hikari— ¿Cómo estás?— Preguntó la chica— ¿Cómo ha estado tu día?
Intenso.
Muy intenso.
Debido a Catherine, quién solo lo fastidiaba, sin embargo no podía decirle eso a su hermana.
—Bastante bien.— Mintió— Mis clases no han estado muy pesadas, incluso nos dejaron salir antes.— Respondió— ¿Y tú?— Preguntó— ¿Cómo ha estado tu día?
Hikari se mordió el labio inferior, la verdad es que "bien" no era la palabra adecuada, al contrario, la francesa lo había arruinado todo, sin embargo, no tenía ganas de hablar de eso.
—Bien.— Respondió de una manera que ni a ella misma convencería.
—¿Bien?— Preguntó Taichi y tomó su rostro por el mentón— Eso no es lo que dice tu rostro.
¡Rayos!
¿Por qué no lograba conectar sus expresiones faciales con su mente?
—¿P-por qué no lo estaría?
—Tú sabes muy porqué.— Respondió Taichi—Vi que en la mañana tuviste un contratiempo con Catherine.— Comentó— Y pues, me preocupé por ti, sé que ambas no se llevan muy bien y quise saber como estabas.
¡Rayos!
Hikari hizo una mueca, no tenía ganas de hablar de eso, pero era evidente que su hermano estaba preocupado y quería saber de la situación.
Suspiró.
—Me gustaría estar bien, pero luego de todo lo que ocurrió me es un tanto imposible, Catherine enserio logró fastidiarnos a Rika y a mi.
—¿Qué ocurrió? ¿Qué les dijo para que tu amiga reaccionara así?
—Bueno, pues, todo comenzó porque ella tropezó conmigo.— Habló Hikari— O me hizo tropezar a propósito, ya ni sé como fue, tu sabes que mi relación con esa francesa no es buena, entonces dudó de su versión de la historia, sin embargo, ella aseguraba que fue sin querer, Rika se enojó y quiso defenderme, pero las cosas no salieron bien, ya que Catherine...—Bajó la mirada y suspiró— Nos terminó insultando a ambas.
¿Insultando?
Taichi apretó su puño, ya se imaginaba que aquella chica había hecho algo como eso, finalmente solo le gustaba fastidiar. Lo peor de todo era que molestaba a Hikari, su hermana, quién jamás le había hecho algo, ya que la castaña no mataba ni a una mosca de lo tan tranquila e inocente que era.
—¿Qué cosas te dijo?
—Muchas cosas feas y duras.— Respondió Hikari y levantó la mirada— Que soy una drogadicta, que guie a Takeru a que consumiera drogas, que soy horrible.
Taichi frunció el ceño molesto, esa chica en verdad estaba sobrepasando los límites ¿cómo se le ocurría insultar a su hermana?—Kari, no tienes que prestarle atención cuando te diga ese tip de cosas ¿si?— La tomó de los hombros— Tú eres mucho mejor que ella.
—Eso intento, hermano, pero me es imposible.— Musitó la chica— Todo lo que dice es verdad, soy una pésima influencia, mala amiga, fea...
—¡No!— La interrumpió— Tú no eres eso, al contrario, eres mucho mejor de lo que piensas.
—Esa noche del tres de Abril demuestra que si soy lo peor.
—No, esa noche cometiste un error, pero fue solo una vez y tu cambiaste.— Respondió Taichi— No tienes que culparte o sentenciarte solo por eso, porque haciendo eso no lograrás nada, hermana. Ahora tienes que mirar hacia el futuro e ignorar lo que pasó esa noche.— Vivir en el pasado no era algo bueno y por eso él ahora estaba sufriendo, por vivir siempre pensando en lo que ya fue, no quería que su hermana fuera como él en ese sentido. Prefería que mirase hacia adelante sin culpar a los demás y sin culparse a ella misma, porque si lo hacia terminaría cayendo en cosas bajas como él.
—Me es difícil hermano.— Habló Hikari— Todo lo pasado siempre vuelve y con esta chica que ahora está aquí.
—Ignorala ¿si?— Comentó Taichi— No le prestes atención, ni siquera la escuches, tú eres buena persona, no tienes porque escuchar a personas como ella.
—Como ella.— Hikari repitió esto— Ella es en muchos sentidos mucho mejor que yo.
Eso era lo que pensaba, pero Taichi sabía más que nadie que no lo era.
—Créeme, ella no es mejor que tú, en muchos sentidos es peor que la escoria.
Hikari alzó una ceja sorprendida— ¿Cómo puedes asegurar eso? Si en apariencia y forma siempre ha sido perfecta.
—Bu-bueno, yo lo sé, porque...—Buscó excusa— Si es capaz de sacarte todo esto en cara, significa que no es tan buena persona como ella dice ¿no crees?
Eso era un buen punto, pero, nada quitaría que ella lograse lastimar su autoestima. Sin embargo, que su hermano le dijese todo eso provocaba que se sintiera bien y más segura.
—Lo mejor que puedes hacer ahora es olvidarte de ella.
—Ojalá fuera tan fácil.
—Bueno, podrías empezar olvidando lo que pasó hoy ¿no?— Comentó Taichi.
—Ojalá fuera tan fácil.— Musitó Hikari— Pero tienes razón, mejor es olvidarlo. Ya bastante me amargó el día esa chica como seguir amargandome el día al recordar lo que ocurrió.— Quería de una vez por todas olvidar aquel inconveniente, en lo posible olvidarsede la existencia de aquella chica en lo absoluto, pero parecía que cada vez era más imposible, porque más fastidiaba— Mejor hablemos de mis problemas y hablemos de ti, hermano, dime ¿cómo estás con Sora?
Taichi se mordió el labio inferior ante esto y guardó silencio, ya que a esa pregunta tenía una respuesta bastante simple "bien" pero sin duda esa palabra estaba entre comillas, ya que en su relación con la pelirroja, él no estaba haciendo las cosas de una manera muy correcta, al contrario, iba de mal en peor.
—Estamos normal.
—¿Seguro?
El Yagami asintió— Si he logrado que vuelva a confiar en mi.— Comentó, sin embargo no pudo evitar sentirse fatal al recordar que él no era de fiar luego de todo lo que había hecho.
—Me alegra escuchar eso.— Musitó Hikari— Sora es una chica buena y te ama con todo su corazón, no merece sufrir de nuevo.
¡Rayos!
Esas palabras fueron como una patada en el estómago para el chico al escuchar eso, ya que tristemente no estaba haciendo las cosas bien.
—Ese día me pediste que tomara una decisión y pues, yo te dije que me quedaría con la custodia de Natsumi.— Habló Mimi.
—Si, lo recuerdo.— Respondió Alice— Pero me dijiste que todavía no.— En su minuto lo había entendido, pero ahora estaba preocupada, Natsumi crecía y necesitaba estabilidad emocional, y luego de saber todo el entorno que rodeaba a Mimi no podía exitar preocuparse.
—Exacto, eso dije, pero tu también me dijiste que querías formalizar algo con Shun y por eso necesitabas saber si Nat seguiría contigo o no.— Habló la Tachikawa— Porque tú las has criado y puedes darle una familia.
Si, eso era lo que ella le ofrecía a la pequeña Natsumi, su hija, quizás adoptiva, pero su hija al final y al cabo, porque así era, la había criado, la había amantado y había estado en muchos momentos importantes de su vida. No llevaba su sangre, pero esa niña era parte de su corazón.
—Bueno yo agradezco mucho la oferta, Alice, en lo absoluto, ya que es muy valiente de tu parte querer considerar a Natsumi en tu familia como lo has hecho hasta ahora y siempre estaré muy agradecido por como la has criado hasta ahora.— Mimi sonrió— A simple vista es notorio que ella es feliz y no ha sentido la ausencia de sus padres, ya que has cumplido tu rol de una muy buena forma.
En lo posible había hecho todo lo que estaba a su alcance para que no sintiera la ausencia de su madre, pero la figura paterna había sido algo difícil, por esto mismo ahora quería asegurar una vida con Shun, ya que él podía ser esa figura que la pequeña necesitaba.
—Pero ahora tu vida va a tener un gran giro, tendrás un hijo, formalizarás tu relación con Shun y entiendo que por esto mismo querías saber que ocurría con mi situación, y pues, luego de todo lo que me ha ocurrido, después de mucho pensarlo he tomado una decisión definitiva para ahora.
—¿Ahora?
Mimi asintió.
Alice se mordió el labio inferior, ojalá la Tachikawa le dijera lo que estaba pensando, finalmente luego de todo lo que la familia de la oji-miel estaba viviendo la mejor opción era ella ¿no?
—He decidido tomar de manera definitiva la custodia de Natsumi.
¿Qué?
La mandíbula de Alice no pudo evitar caer ante esta declaración.
—¡Vamos tío Takuya! ¡Sigueme!— Exclamó la pequeña rubia mientras corría de un lado a otro.
Takuya respiró profundo ante esto un tanto agotado, apenas había descansado anoche, tenía sueño y poca energía, todo lo contrario a la niña, quién parecía tener mucha, algo que posiblemente era heredado de él, ya que Mimi y Yamato eran tranquilos.
—Natsumi.— Takuya llamó a la niña quién corría— Natsumi.— Otra vez la llamó— NO corras te puedes caer.
¡Un minuto!
¿Él había dicho eso?
Eso sonaba a lo que le decía su madre cuando era niño, era chistoso, él odiaba que se lo dijeran y ahora lo estaba diciendo.
—¡No me voy a caer!— Gritó la oji-azul— ¡Vamos atrapame!— Continuo corriendo en dirección hacia la puerta.
—Natsumi, no te alejes.— Respiró profundo y luego de meditar unos segundos se dispuso a apurar el paso para alcanzar a la rubia, quién corría como si no hubiera un mañana.
Pero antes de que llegase hasta ella cierto chico rubio de ojos azules y una chica pelirroja aparecieron en el camino que transitaba la pequeña quién no se fijó de su llegada y chocó contra el rubio.
—¡Ouch!— Regañó la pequeña— Ten más cuidado por donde cami...—Alzó la mirada y se sorprendió— ¡Hey! Tu edes el niño que canto el otro día.
Yamato alzó una ceja sorprendido y observó a la niña que recién había chocado contra él.
¿Ella de nuevo?
¡Rayos, rayos, rayos!
Pensó Takuya al observar la escena. En verdad no se esperaba que llegaran a encontrarse en aquel lugar, ni siquiera sabía que Yamato vendría.
La expresión del Tachikawa también la tenía Sora, quién no se imaginaba que Yamato se encontraba con Natsumi ¡Su hija!
—¡Hey!— Natsumi volteo hacia la pelirroja— Tu edes la amiga de la tía Mimi ¿no?
—¿E?— Balbuceo Sora.
Yamato volteo hacia ella sorprendido— ¿Se conocen?
—¿E? S-si, nos conocimos el otro día.— Respondió Sora.
—A claro, ella es hija de la novia de tu primo Shun ¿no?— Yamato recordó.
—¿E?— Balbuceo. Si, era hija de Alice, pero ella no era quién las había presentado, al contrario, había sido Mimi.
Yamato volvió su mirada hacia la niña— Natsumi es tu nombre ¿no?
—Si.— Respondió la pequeña.
—¿Qué haces aquí?
—Vine a ver a la tía Mimi.— Habló Natsumi y luego volteo hacia la pelirroja— Pero aahora el tío Takuya me lleva a comer un helado.— Señaló al moreno.
Y tanto Yamato como Sora dirigieron su mirada hacia Takuya quién al sentir las miradas en él decidió avanzar.
—Hola Takuya.
—Ho-hola.— Saludó el moreno—Yamato, Sora.
—Hola.— Respondió esta vez la pelirroja y alzó el bolso— Traje lo que me pidieron, ropa para Mimi.
—Qu-que bien.— Contestó Takuya aún nervioso— Gracias.
—¿Cómo está Mimi?— Yamato le preguntó.
—Ella está mejor.— Respondió el moreno— Incluso más que ayer.
—Que bien.— Musitó Sora— ¿Podemos ir a verla?
—¿E? Cl-claro, pero ¿pueden esperar un poco? Es que ella está hablando en estos minutos con Alice.— Contestó el castaño.
Sora alzó una ceja sorprendida al escuchar esto ¿Mimi estaba hablando con Alice? Eso significaba que le estaba comunicando su decisión.
—¿Se demorará mucho?
—No estoy seguro.— Respondió Takuya— Quizás si lo haga y...
—Tío, tío.— Natsumi interrumpió al moreno tirando de su chaqueta— Vamos, me prometiste un helado y lo quiedo.
Takuya bajó la mirada hacia la pequeña— Si, si, voy altiro.
—¡Ahora!— Exigió la rubia.
El moreno alzó una ceja, por un minuto había visto una característica de Izumi manifestada en su sobrina, ser mandona y exigente.
—Si, si, ya voy, ya voy.— Respondió el moreno y observó a Yamato con Sora— Luego hablamos ¿si?
—Si.— Contestó Sora— Nosotros esperamos por mientras a que Mimi con Alice terminen de hablar.
Takuya asintió.
—Tío Taku, vamos corriendo, quiedo competencia.— Exclamó Natsumi.
¡Oh no! Otra vez.
Pensó el castaño.
Y sin decir más la niña se dispuso a correr, pero apenas hizo esto algo brillante cayó al suelo, cosa que solo Yamato notó.
El Ishida se acercó— ¡Hey! Natsumi, se te cayó esto.— Dirigió su mirada hacia el suelo pero cuando hizo esto aquel objeto que se le había caído a la rubia llamó su atención.
Era una cadena con una letra "Y" dorada.
Yamato alzó una ceja, la recogió y la observó detenidamente ya que era muy similar a la que le había dado a Mimi hace años atrás.
Disculpen por no actualizar antes, pero se me dio la oportunidad de tener un trabajo de verano y no me pude negar (necesito el dinero jsjsjsj) Avancé lo que pude y aquí está este capítulo.
En la noche del 3 de Abril puse el detalle de la cadena con la Y dorada, quizás muchos se olvidaron, pero siempre he dicho que en esta historia es importante tomar nota de todos los datos importantes.
Dato: Catherine y Nene eran compañeras de Suzie, pero ella se fue ya que quedó embarazada (Para que vean que no se me van los detalles que muchas veces pueden ser muy mínimos pero tienen repercusiones en el futuro)
También, si se dan cuenta ahora sabemos que Kousei le quitó otra propiedad a Tomoko (curiosamente todas las herencias que ella recibió tienen que ver con el ambito Educacional o relacionado con estudiantes como lo es el Internado) Esto principalmente se da para que entiendan cuan poderosa económicamente era hasta que su esposo le quitó todo. También con esto voy uniendo, ejemplo: El Internado fue fundado por su abuelo y padre fundó una secundaria que la unió a este, entonces ahí explico porque el internado se relaciona con un campus.
Yo en su lugar me imaginaría el Internado rodeado por muchos edificios, lo único que estaría dentro de una reja seria el gran edificio del Internado.
Respuesta a comentarios:
milrose: jajajaj si da miedo su nombre jsjsjsjsj Si, se vienen cosas peores para el Mimato y de una forma que no se imaginan. Si, Alice vino con todo por Nat, pero es porque la considera su hija y le preocupa, ahora a esperar su reacción. Taichi puede ser de todo, pero siempre defenderá a su hermana, si, ya merece su castigo, pero ya veremos cuando le va a llegar, si es que le llega, claro jsjsjsj Si, Takeru es un amor y pues, quise colocar un momento así ya que siento que eso es más natural, ya que Zoe le gusta comer y creo que es mejor que estar peleando nuevamente con Nene jsjsjsj Si, a Rika le dolió, a pesar de que se hace la fuerte, finalmente ha intentado cambiar, pero ella es consciente de que su pasado la condena, así que hará todo lo posible por cambiar ahora su futuro. Todos queremos ver que Rumiko tenga su castgio, sin embargo aún falta, estamos casi llegando al punto de colapso de toda la historia en donde todo comenzara a caer por su propio peso. Ojalá sigas leyendo y comentando. Te mando un gran abrazo a la distancia.
mariacredenza02: jsjsjsj si, valió la pena jsjsjsj Si, Ryo va de mal en peor y pareciera no ser consciente de que quedará más solo, pero todo esto debe ocurrir para su caida. Si, ella está así, porque ambos son importantes para ella jsjsj ya veremos como será ese momento cuando logre ingresar al cuarto de camaras jsjsjsj Ya leyeron su decisión jsjsjsj ahora esperaré sus reacciones como lectores. Catherine sabe donde le duele a Hikari y así seguirá, porque solo sabe hacer eso, fastidiar jsjsjsj todas amamos a Rika, pero por más golpes que recibe esa chica parece que no entiende, algo igual que Nene y Ryo, son tercos como mula. Tristemente Rumiko no es buena madre, pero aunque no lo demuestre, Rika es lo único que quiere de verdad, sin embargo, no sabe como actuar porque todavía desconfia de ella. Tranquila, Rika no va a decaer, le dolerá, pero ella es fuerte, puede seguir jsjsjsj No quiero dar spoiler de todo lo que hará Nanami, pero les sorprenderá su forma de actuar jsjsjsj Si, de un punto critico y maduro todos sabemos que tiene razón, pero Mimi quiere luchar y ya veremos que ocurrirá, finalmente ella es madre antes que todo y merecen estar juntas. Ojalá sigas leyendo y comentando. Te mando un gran abrazo a la distancia.
