Bueno pues nada, aquí dejo el segundo capitulo, poquito a poco la cosa irá mejorando, tngo muchas ideas en mi cabeza, pero ahora mismo no es el momento.
Gracias a Shino-Haibara, arashipotter, leeloXdeXsabbat y mi Fati hermosa, por vuestros revs, soys muy amables!
Por vosotros, cuelgo el siguiente capitulo!
Naruto pertenece a Masashi Kishimoto.
Kurenai.-
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Cap 2: IMPULSO.-
Llegaba la hora del almuerzo en la academia ninja de Konoha.
Los Genin, Chuunin, y demás rangos, se separaban a esa hora para comer algo antes de seguir el duro entrenamiento y las clases.
Algunos iban en parejas, otros iban solos, y otros en grupos.
Itachi buscaba con la mirada por los pasillos, a su amiga Sarah hasta que la divisó, le hizo gestos con la mano para que ella se acercase.
Sarah- ¡Ohayo, Itachi kun! - Sonrió alegre la chica mientras se acercaba corriendo a él.
Itachi- Me preguntaba si te apetecía almorzar conmigo, me gustaría hablar contigo. Vayamos al lago, si te parece - Era la primera vez que sentía un poco de vergüenza mientras hablaba con su amiga, ponía su mano tras su cabeza y miraba el suelo, de vez en cuando miraba sus ojos para volver a desviar la mirada poniéndose un poco rojo.
Sarah-Si por supuesto - Y volvía a dedicarle esa sonrisa maravillosa.
Se dirigieron a la sombra de un árbol, junto a el lago donde solía entrenar.
Recordaban ellos riendo divertidos, la prueba de los cascabeles, se sentaron en las raíces y miraban desde allí la panorámica y los tres troncos utilizados por los profesores.
Sarah- Dime, Itachi kun, ¿De qué querías hablarme? - Decía ella mientras habría el paquete con su comida, esperando una respuesta por parte de su acompañante - Esto tiene hoy buena pinta... ¡Que aproveche!
Itachi- Pues... Veras... Es sobre lo de anoche... yo - Pero ella le interrumpió.
Sarah- ¡Ah, No te preocupes por eso! Tenemos confianza suficiente, somos amigos, ¿No? - Sonriéndole, como le gustaba a él, sosteniendo sus palillos para comenzar a comer.
Itachi- Jeje... Si, bueno pero yo no lo hice con una intención de amigos, Sarah chan - Itachi decía esto mientras miraba el suelo, de reojo miró como ella paraba de comer para mirarlo con cara de no comprender nada.
Sarah- No se a qué te refieres, nosotros... nosotros... - Ella nerviosa, esperando la explicación de él a su respuesta.
Itachi- Sarah, yo te esperaré el tiempo que quieras, te comprendo perfectamente, quizá no sea tiempo todavía para esto... Pero si no te gusto o no tienes intenciones... dimelo y dejaré de tener esperanzas de un futuro contigo-
Sarah- Itachi... -
Itachi- Yo, yo quiero que estemos juntos siempre, si ahora no puede ser, y me dices que te espere... Yo no tengo prisas si consigo algun día estar contigo... que me veas ese dia como más que un amigo, Sarah - Itachi miró tiernamente los ojos de su amiga, y le sonrió levemente. Ella no tubo más remedio que contestarle lo primero que se le ocurriría.
Sarah- Yo anoche no pensé que tu le hubieras dado esa importancia, de todos modos... Tu me has gustado desde siempre, no hay nadie del clan, ni de la aldea al que admire y que me guste tanto como tú... Porque eres guapo, inteligente, amable y... - Quedó paralizada al sentir la mano de él tomar la suya sonriéndole, ella al ver su gesto, abrió sus brazos y lo abrazó tomándolo por el cuello, a lo que él respondió con otro abrazo cerrando sus ojos.
Decidieron terminar de comer, luego retomarían las clases y se encontrarían a la salida para marcharse juntos a sus respectivas casas.
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Se encontraron a la salida como acordaron, mientras caminaban para sus casas cada uno en su mente no dejaba de pensar lo que habían hablado anteriormente. No se dirigían palabra alguna el uno al otro... un extraño silencio durante casi todo el camino había entre ellos.
Llegando a casa de Sarah se encontraron con el padre de ella, y sonriendo les dijo a los dos jóvenes graciosamente "Hacéis buena pareja los dos" se sonrojaron los dos al escuchar eso.
El padre sonrió al ver sus caras, y con las mismas entró en la casa.
Quedaron otra vez solos los dos, Itachi iba a decir algo cuando Sarah le puso un dedo en los labios cortándole la palabra.
Sarah- Nos vemos mañana Itachi kun - y le dio un beso en la mejilla sonrió y se metió en su casa, Itachi siguió directo a su casa... sonriente. Camino a su casa no dejaba de tocarse la mejilla, como si nunca antes hubiera sentido un beso de Sarah...
Cuando estuvo muy cerca de la entrada a su casa se encontró con Kakashi que iba despistado mirando hacia delante.
Itachi- Kakashi! - El peligris dirigió su mirada a la persona que le saludaba y paró para hablar con él.
Kakashi- Ahh... Hola Itachi no te había visto. Estas muy sonrojado... que te ha ocurrido? - Kakashi le miraba cotilla, mientras que Itachi, sonrió.
Itachi- Yo?...pa...para nada.
Kakashi- Pues yo diría que sí te ha ocurrido algo...
Itachi- Pues...veras...
Dudo en un momento en contárselo puesto que no sabia si debería decirle algo por que a lo mejor a Sarah no le sentaría bien, rápidamente comenzó a pensar que decirle a kakashi sin que éste pudiera prever que hubiera pasado en realidad.
Itachi- Pues no es nada en realidad, vengo colorado por que he estado toda la tarde entrenando...
Kakashi- Seguro? No t creo la verdad...- Arqueando su unica ceja visible.
El instinto cotilla de Kakashi intentó averiguar por un momento si eso era cierto y en el caso de que no lo fuera sacarle la verdad, se había convertido en un cotilla en muy poco tiempo.
Kakashi- ¿Umm? - Kakashi esperó respuesta del Uchiha...
Itachi- Es la verdad no te miento - dijo intntando retomar la compostura poniéndose serio.
Kakashi- Bueno Itachi, es cosa tuya, de todos modos nose porqué algo me dice que pronto las chicas de la aldea van a enfadarse mucho contigo... - Dijo Kakashi poniendo el cara de "piyo" intentando sacarle de una vez por todas la verdad - Bueno, Me voy... ¡Nos vemos! - sonriéndole se apreciaba bajo su máscara levantando su mano de espaldas a Itachi retomando su camino.
Itachi respiró aliviado dándo gracias por que kakashi se hubiera ido. Se fué corriendo para su casa para que nadie más le interrumpiera y tampoco averiguaran el por que él se encontraba así...
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En casa de Sarah, bien entrada la madrugada solo había silencio... excepto en su cabeza, que resonaba un eco con la especie de confesión que Itachi le había dado a la hora del almuerzo.
Se preguntaba qué era esa nueva sensación, quizá él había despertado en ella el sentimiento que no había tenido hasta ese momento.
¿Y si ella siempre hubiera sentido algo más por él y por tenerlo tan cerca, tan familiarmente no se hubiera percatado de ello?
Al fin y al cabo, ella si creía sentir sino lo mismo, algo especial... Pero necesitaba tiempo para asimilarlo, porque era la primera vez que le ocurría semejante cosa y no quería precipitarse lanzandose a sus brazos, ella se veía muy joven para llegar a algo como una relación.
Recordaba como sus padres y los de Itachi siempre bromeaban entre ellos haciendo sonrojar a los niños diciendo que cuando se hiciesen mayores se comprometerían y que serían consuegros... Ese tipo de cosas...
A ellos no les sentaba mal del todo, solo se miraban y se sonreían ruborizándose levemente.
La noche iba a ser larga; pensaba Sarah tendida en su cama mirando la ventana.
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Mientras en casa de Itachi, el pobre tampoco podía conciliar el sueño... Muchas ideas le venían a la cabeza.
Su padre siempre le decía que con el tiempo, uno va adquiriendo responsabilidades, tambiém problemas así como historias nuevas en su vida, y "qué cierto es" pensaba éste.
A su corta edad ya soñaba con tener ciertos planes de futuro, entre ellos estaba o quería que estuviese "ella".
Luego pensaba que, la vida de un ninja era muy inestable, hoy estas aquí mañana allí... y pones tu vida en juego a cada momento.
Aunque el era muy bueno, nunca se sabía lo que podría pasar, ¿Si ellos llegaran a comprometerse en un futuro, o incluso a casarse y a él le pasara algo... que ocurriría con Sarah?... Esto era demasiado pensar, solo sabía dar vueltas en la cama.
Ella también estaba entrenando en la academia...Sarah, ella quería llegar a ser Anbu y ese si era un trabajo peligroso, el de cazador... Todo era tan complicado...
Al final sin quererlo él mismo, sus ojos decayeron hasta que por fin se quedó dormido.
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Al dia siguiente se dirigieron caminando a la academia, su rutina diaria. Al llegar a la entrada se separaron y tomaron caminos diferentes.
Sarah entró en la sala donde se reunían los chuunins, le llamó la atencióm porque había un poco de revuelo, decidió interesarse por lo que ocurria.
Sarah - Buenos días. ¿Ocurre algo hoy? Tan temprano y ya discutiendo... -
Kurenai - Llegas a tiempo, Hokage sama quiere hablar contigo y conmigo, estaba esperándote para ir a verle - Se dirigió a la puerta y la abrió esperando que pasase su compañera.
Sarah- Y, ¿Qué es lo que ocurre? -
Kurenai - Ahora te lo contará, seguramente sea por lo del feudal que vino de la aldea de la catarata, por eso estábamos todos comentando sobre el tema - La chica de ojos rubí se paró frente a una de las aulas - Entremos un segundo, él también ha sido llamado por el Hokage - Abrió la puerta y la clase se quedó en silencio mirando quien había entrado en ese momento, Iruka estaba sentado haciendo el payaso armando jaleo con un compañero.
Jounnin- Ah, Kurenai, Sarah... Pasad - Las chicas pasaron mirando a los pequeños que comenzaban a hablar entre ellos y a formar escándalo al ver que se había parado la clase.
Kurenai- Iruka tiene que venir con nosotras, hemos sido llamados por el Hokage, seguramente por lo del feudal que llegó esta mañana temprano -
Jounnin-Está bien - Se lo comentaron a Iruka y éste se levantó de su sitio para salir de clase con ellas.
Ya caminando por los pasillos, buscando la oficina del Sandaime.
Iruka- Me pregunto que querrá, ¿Qué es lo que ocurre con ese feudal del que habláis? -
Sarah- Espera a que él te lo cuente, no seas impaciente.
Kurenai- Aquí es - Se pararon ante las puertas de la oficina, y hablaron con uno de los jounnin y éste entró para avisar al Hokage y al momento dejó pasar a los tres chuunins.
El tercero estaba de pié de espaldas, mirando por el gran ventanal, con su atuendo blanco, su sombrero blanco - rojo y la pipa, el lugar estaba inundado de humo y de olor a tabaco.
Hokage- Ah! Buenos dias chicos, sentaos sentaos, no os quedéis parados ahí, pasad... - Les indicó las tres sillas del despacho y él tomó asiento en la suya sonriéndoles - Veréis, el motivo por el que os he mandado llamar es el siguiente - Aspiró un poco de tabaco y volvió a soltar el humo, para seguir hablando - Esta mañana muy temprano, ha llegado uno de los señores feudales de la aldea de la catarata, de lo que habréis escuchado hablar seguramente - Los chicos asintieron, afirmando y Sarutobi continuó - Pues este feudal, es amigo de Konoha nuestra aldea, desde hace mucho tiempo, nos hace favores, y nos ha ayudado en innumerables momentos al igual que nosotros a su aldea. Pero, ahora él tiene un problema: Al tener tanta comunicación con nuestra aldea, otras se han molestado, por decirlo de esa manera, y debido a esto, unos cuantos han hecho correr el rumor, de que nuestra aldea y la de la catarata tenemos negocios sucios.
Iruka- ¿Y que quiere que hagamos con eso? -
Hokage- Como siempre tan impaciente, Iruka - El susodicho miró a Sarah y ésta le sonreía por que ella se lo había dicho un momento antes - Veréis, necesita protección. Al haber soltado ese rumor, muchos contrabandistas y mafias, muchos otros grupos querrán acabar con él y lo que es mas importante, quedarse con la información que lleva en unos pergaminos que le hemos facilitado para su aldea, y eso será fatal para la Catarata. Ustedes seréis su escolta -
Kurenai- Un momento, Hokage sama... ¿Porqué nosotros? Esto podría ser una misión de rango B o superior, ¿De verdad cree que nosotros podremos hacer este trabajo? ¿Que hay de los jounnins? -
Hokage - Kurenai, es como dices, una misión arriesgada, los jounnins están ocupados en otras misiones y algunos no tienen mas remedio que quedar en la aldea. Sois un buen equipo, por ejemplo Iruka tiene su kage bushin y es bueno en ninjutsu, tú eres una de las mejores en genjutsu de la aldea, y por ultimo tenéis un sharingan en el equipo y un cerebro de grupo: Sarah.
Podeis hacerlo. Confío en vosotros, sed lo más discretos que podáis y llegad lo antes posible, no os demoréis - El hokage hizo una señal a uno de sus ayudantes y éste dejó pasar al señor feudal - Os presento a la persona a la que deberéis escoltar, Anzai-sama señor feudal de la aldea de la Catarata -
Kurenai Iruka y Sarah, hicieron una leve inclinación al presentarse a la persona en cuestión. Era un muchacho joven, de unos 22 años aproximadamente, para las chicas atractivo, para Iruka un coñazo...
Feudal Anzai- Sois muy amables chicos, espero que no haya demasiados problemas en la vuelta a la catarata -
Hokage- No se preocupe por eso, ellos son fuerte, y ahora podéis salir, coged lo que necesitéis y comenzad la misión -
Iruka - Si Hokage sama! Hasta luego - Y se despidió alegremente siendo el ultimo que salía del despacho, Sarutobi los miraba sonriente hasta que cerraron la puerta, y éste siguió a lo suyo.
Cada uno de ellos fueron lo mas pronto posible a sus casas a coger lo necesario para realizar la misión, mientras tanto el feudal Anzai-sama se dirigia a la entrada principal de Konoha escoltado por dos ninjas y allí los esperaría a los tres. Fueron llegando poco a poco, primero Sarah, luego llego Kurenai y por último Iruka.
Sarah- Oye! Iruka por que has tardado tanto?-
Iruka- Pues verás... Es que como tardaremos unos días en llegar a la aldea de nuevo pues... Fuí a comerme mi ultimo ramen Jejeje
Sarah- Tu eres tonto chaval...! - Golpe por parte de Sarah en la cabeza del chuunin - Mira que hacernos esperar todo este tiempo...! Esto no és una jodida excursión, maldita sea! -
A Sarah se le estaba empezando a dibujar cara de pocos amigos, para apaciguar un poco el ambiente intervino Kurenai.
Kurenai- Bueno vámonos, no perdamos más tiempo, comencemos la misión.
Los tres ninjas de Konoha comenzaron su andadura hacia la aldea de las catarata junto con el joven feudal.
Caminaban tranquilos... hablaban unos con otros y al feudal de vez en cuando le preguntan alguna que otra cosa de su aldea ya que nada más habían escuchado algo sobre ella, no habían estado allí ninguno de los tres ninjas. Pasaron unas tres horas cuando iban por un bosque el cual hacia rato que estaba muy tranquilo. No se escuchaba ni un pájaro...ningún insecto con la calor... sólo los pasos de ellos.
A Sarah esto empezó a preocuparle, era la que estaba más atenta mirando a todos sitios con la mirada inquieta, puesto que este prolongado silencio era síntoma de que podría pasar algo muy pronto y puso entre aviso a sus demás compañeros con una mirada furtiva.
Las caras de todos cambiaron de estar riéndose a estar serios... atentos a todas partes, pero intentando estar traquilos...
No caminaron ni 50 metros más, cuando efectivamente se encontraron con lo que Sarah pensaba... la primera "piedra del camino", 3 ninjas subidos en un árbol riéndose muy bajito como si hiciera rato que los estuviera esperando, como si supiera que pasarían los chicos por ahí.
Los cuatro se pararon en seco cuando se dieron cuenta de su presencia, tomaron posición defensiva alrededor del feudal.
Sarah- Quienes soys? Responded..!
Ninja- Buscábamos a la persona que tenéis detrás vuestra... el joven feudal Anzai de la aldea de la catarata, vais a entregárnoslo por las buenas o por las malas! -
Sarah- Eso habrá que verlo! No lo conseguirás tan fácilmente como piensas -
Ninja- Entregadme a ese hombre ahora, solo lo busco por que recibiré una gran recompensa si lo llevo a la persona que me contrato, ya sea vivo o muerto... Eso no és de mi incumbencia, pasaré por encima vuestra, niñatos que os haceis pasar por ninjas de Konoha! Y de camino nos divertiremos con vosotros... -Los tres enemigos se reian maliciosamente disponiendose a atacar.
El ninja hizo un gesto brusco, que siguieron los otros dos, que no pasó desapercibido por los chicos, que se prepararon uniendose más entre ellos para que el feudal no recibiera daños.
Kurenai : Anzai-sama póngase detrás nuestra por favor.
-Feudal: S-si-
-Ninja : Ohh! Veo que estáis dispuesto a perder la vida por salvar a una persona no conocerés, ¡Pues seré yo quien os dé muerte!
Iruka- Serás...! No subestimes a los ninjas de Konoha! -
Sarah- Iruka no seas imprudente, recuerda que debemos mantener la calma, no te djes llevar por tus impulsos o moriremos todos por tu culpa, joder! - El chuunin estubo apunto de saltarse encima del enemigo para atacar pero Sarah lo detubo en seco antes de que cometiese una locura.
Ninja- No me hagas reir enclenque! -
Quedaba ya poco tiempo de sol, iba a empezar a oscurecer muy pronto y quedarían sin luz antes de tiempo puesto que se encontraban en un bosque muy frondoso y eso sería aun más peligroso.
Soplaba una brisa muy suave y delante de ellos comenzó a caer las hojas de los arboles agitados por el viento que crecía en fuerza, el ninja enemigo hizo su primer movimiento dirigiendose el primero al frente de un salto tremendo, y los otros dos corriendo uno a la izquirda y otro a la derecha.
Eran demasiado rápidos comenzó uno de ellos a hacer sellos a la vez que el cielo comenzaba a tomar un color oscuro y a llover, pero no era agua, este agua que caía se sentía caliente al contacto... No, no era calor era una especie de ácido... Kurenai miró pensando que sería una tecnica ilusoria intentando deshacerla, pero era imposible no se trataba de ilusión sino de una técnica más, además el enemigo era tan rápido que no era capaz de seguirlo con la vista, Iruka lo seguía a duras penas apretando sus dientes y empuñando el kunai con las dos manos no podia quitarse del lugar en el que estaban por que sino tendrian ocasion de llevarse a la persona a la que protegian, solo había una solución para eso, Sarah... ella tenía su sharingan, con el cuál seguramente vería sus movimientos y atacar en consecuencia.
Así hizo, sus ojos verdes se transformaron en los color rojo que ven todo movimiento copiando el movimiento del adversario, ella ya habia entrado en accion.
Ninja- Oh! Que gran honor pelear contra un miembro del clan Uchiha... ¿Sharingan, eh? - Se burlaba mientras la ira de Sarah crecía en ella, aparentando estar serena sin mediar una palabra concentrándose en sus ataques.
Mientras tanto los otros dos ninjas cada vez estaba mas cerca de su objetivo uno de ellos saco varios shuriken de su bolso, los tres de Konoha estaban preparados con sus respectivos kunais, era sarah la que estaba ocupada con uno de ellos.
Kurenai- Joder, no podemos estar asi mucho tiempo, terminaremos con el cuerpo destrozado por el ácido, tenemos que actuar rápido... -
Uno de los shinobis enemigo lanzó sus shuriken directamente al feudal, que se tapaba como podia con sus ropajes la cara, al ninja parecía como si no le importara que estuviesen los demás por medio.
Sarah aviso a Kurenai avisándola del ataque de los shuriken lanzados y ésta los derribó al suelo con su cuchillo, mientras tanto ella e Iruka se acercaban cada vez más al enemigo.
Se adelantó primero Sarah hacia uno de los ninja como pudo, sintiendo las quemaduras en su cuerpo, éste saco su kunai también y empezaron ellos dos una lucha cuerpo a cuerpo con los cuchillos, se movían a una velocidad endiablada, Sarah estaba aguantando muy bien esos ataques, hasta que sin darse cuenta por la fuerza del ataque, ella tropezó con un trozo de rama, la cual, hizo que se cayera al suelo quedando sentada, dándole la oportunidad al ninja a lanzar un ataque con su kunai que iba directo a su torso... quería acabar pronto con ella para tener eleccion de atacar al feudal, Iruka que estaba atento a la situación nada más caer ella, fue directo para protegerla, cuando alcanzó Iruka a Sarah, el ninja estaba apunto de darle con el arma...
Pero en ese mismo instante su compañero se metió por medio agarrando a Sarah y el kunai se clavó en su brazo izquierdo provocándole una profunda herida... Al menos pudo ayudar a la Uchiha.
Otro de los ninjas, al ver que Iruka había despejado el lugar intentó aprobechar para atacar al feudal, pero de repente de entre la espesura del bosque salireon tres replicas más de Iruka y estubieron aguantando el cuerpo a cuerpo con el ninja, el tercero de los ninja enemigo estaba tan atento a ellos dos que se olvido completamente de Kurenai, que fue tras la espalda del ninja creando una técnica ilusoria, haciendo que dejara de ver a Iruka y dando oportunidad a Sarah a anular su tecnica de ácido con una patada tumbándolo al suelo, y quedando el otro atrapado de pies y manos por grandes ramas que salían del suelo del bosque gracias al genjutsu de Yuuhi.
Ocurrió en ese instante en que los tenian agarrados, que Kurenai habia aguantado demasiado pero se desmayó por culpa de inhalar tanto vapor del ácido que caia del cielo al estar quieta tanto tiempo respirando quieta, Sarah se percató de que el enemigo pudo escapar de la ilusión, Iruka aprobechó el momento para sacar rápidamente de alli a Kurenai despistando a los otros con las replicas que desaparecian por culpa de los golpes de los ninjas que eran buenos en taijutsu, y por los ataques de ácido que lanzaban, tomó a Kurenai y al feudal antes de que se quemara mucho más el cuerpo y se refugiaron tras un gran árbol al que quedaban pocas ramas debido al ácido, pero pensó que aguantaria lo suficiente anteponiendo su cuerpo sobre el del feudal y Kurenai con una mueca de dolor su ropa desgarrada dejaba ver la piel del moreno.
Sarah mientras tanto se alejó un poco de él sentía como su cuerpo le dolía tremendamente por las quemaduras pues fue la que estubo más expuesta en la lucha cuerpo a cuerpo pensó que había que acabar con el encuentro lo antes posible, asi que esperó a que viniesen los tres a atacarle cuando, comenzó a realizar rápidamente sellos sin dar tiempo a los enemigos a cambiar de dirección para esquivar su ataque, llevándose su mano a los labios sopló con fuerza las llamaradas "Katon Gokakyuu no jutsu!", el ácido hizo que fuera más dañino y fuerte ese fuego, dejándolos practicamente incinerados, y en ese instante cesó la tormenta ácida.
Cuando se dio cuenta solo habia acabado con dos de ellos, y el otro no lo divisaba por ningún sitio, estaba un poco cansada pues habia utilizado demasiado el sharingan para terminar cuanto antes, los ninjas eran persistentes.
Iruka- ¡¡¡Cuidado Sarah, por detras! - Iruka gritaba desde el sitio que se encontraba, pues pensó que la capacidad de reflejo de su compañera no sería lo suficintemente rapido para esquivar al ninja que se aproximaba furioso por la muerte de sus compañeros con intenciones de acabar con ella.
Ninja- ¡Muereeee Uchiha!
Iruka tomó un kunai, con el dolor que tenia en el brazo debido a la herida ocasionada en la pelea, intentó apuntar y acertar en el blanco que se movía rapidamente lleno de rabia, sin darse cuenta de lo que Iruka trataba de hacer.
Lanzó el cuchillo lo más fuerte que pudo, y acertó en la sien del ninja atravesándosela cayendo éste a un lado de Sarah, muerto.
Ella miró asustada a su compañero pues no lo esperaba y se levantó para ir a su lado, para ver como se encontraban, a Iruka comenzó a vendarle el brazo, porque no dejaba de sangrarle, y tubieron que parar a descansar un poco, esperando que Kurenai se reanimase.
Sarah- He usado demasiado mi Sharingan, me siento muy cansada descansemos un poco - Se sentó junto a sus compañeros -¿Se encuentra bien, Anzai sama? -
Feudal- Si, gracias por protegerme, aunque habeis salido mal parados por mi culpa...-
Iruka- No se preocupe señor, así es el trabajo de un ninja... Los de Konoha somos duros, no se preocupe! -
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Kurenai se despertó, aunque a duras penas podia levantarse, le costaba trabajo respirar bien y se cansaba con facilidad, por lo que Iruka decidió subirla a su espalda para caminar un poco de trecho.
Llegaron a una bifurcación de caminos con unos senderos, tomaron uno de ellos y a unos metros encontraron un claro con un pequeño manantial de termas y una pequeña catarata que caía.
Feudal: Esto es señal de que estamos llegando a la aldea , cada vez mayor número de cataratas y termas, podríamos descansar por aquí, ya que estais heridos. Mañana podríamos continuar andando -
Sarah: Buena idea, descansemos refugiados debajo del manantial, seguro que hay algun hueco donde ocultarnos y hacer guardia -
La Uchiha se acercó por el borde aproximandose a la catarata y haciendoles una señal de que se acercasen entró dentro viendo que estaba la pequeña gruta vacía y no habia problemas de espacio.
Iruka se aproximó yendo detrás del feudal, con Kurenai a sus espaldas que tosía muy a menudo.
Iruka- Aquí dentro hay demasiada humedad, quizá deberíamos hacer una fogata un poco más alejados de la entrada por donde está el agua, para caldear un poco la humedad, Kurenai no está en condiciones de ponerse peor -
Sarah -Tranquilo, Yo me encargo - Salió del lugar y se dirigió al camino, donde pudo encontrar algunos trozos de troncos y ramas secas, y volvió a donde estaban los dmas, los depositó en el suelo a una distancia prudencial y los encendió con la técnica de fuego que usara con los ninjas.
Estubieron comiendo las provisiones que llevaban en sus mochilas, repartiéndolas entre ellos, Kurenai era la que menos hambre tenia, pues no se encontraba nada bien, sus compañeros estaban muy pendientes de ella.
Sarah usaba sus medicinas para limpiar la herida a Iruka, cosiéndosela para que no volviera a brotar la sangre.
Sarah- Intenta no forzar el brazo, podría volver a abrirse y entonces será peor - El chico asintió con la cabeza y miró a Kurenai.
Iruka- Será mejor que Kurenai descanse, le abriré su saco de dormir, necesita descansar - Se levantó y ayudó a su compañera para que pudiera descansar, ofreciéndole su saco y ésta se metió dentro.
Kurenai- Gracias, mucho mejor así - Le dijo sonriéndole, y él también le sonrió.
Sarah- Anzai Sama, ¿Se encuentra bien? Debería descansar, nosotros estaremos turnándonos para vigilar, de todos modos... - La rubia se levantó y fué hasta su mochila, sacó varios papeles de sellos y tras haberse realizado un pequeño corte en uno de los dedos comenzó a escribir con su sangre numerosos kanjis e inscripciones, después de eso, los pegó como pudo rodeando la entrada a la pequeña gruta - Así podremos dormir más tranquilos, no nos molestará nadie con esta barrera que he levantado en la entrada, nadie puede entrar, aun así nunca hay que bajar la guardia, buenas noches - Se dirigió a su saco y se sentó encima apoyando su espalda en una de las paredes , observando la pequeña fogata -
Feudal: Buenas noches, sarah san - Y se tumbó como pudo, algo incomodo por no estar acostumbrado a dormir en lugares como esos, hasta que el cansancio hizo su trabajo y pudo con él haciéndole dormir.
Sarah seguia sin poder dormirse, estaba un poco preocupada, porque no había encontrado a Itachi para despedirse de él, y ya hacía casi dos días fuera de la aldea, escuchó la cremayera de uno de los sacos y volvió la cara para ver.
Kurenai: ¿No puedes dormir? - La joven de ojos rubí se sentó de la misma forma que su compañera.
Sarah: Tu sí deberías estar dormida, yo estoy haciendo guardia-
Kurenai: A mi no me engañas, sé en lo que estás pensando, o más bien en "quién" estás pensando, y no te preocupes, ya nos queda menos para volver - Tomó una manta que Iruka le puso encima del saco, y se la colocó por los hombros.
Sarah: Seguramente no le haya sentado bien que yo me haya ido sin decirle nada, ha sido muy precipitado, en sus misiones él siempre se despide de mí... -
Kurenai: Bah no te preocupes por eso mujer, él lo comprenderá, mañana será otro dia y te sentirás mejor, despierta a Iruka y tu duerme un poco, debes estar agotada -
Sarah: Sí será mejor, por lo menos un rato... -
Iruka dormía a pierna suelta, casi roncaba, lo despertaron y tubo q estar la mayor parte de la noche despierto vigilando.
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Al otro dia, se levantaron y se asearon un poco en el pequeño manantial de la Catarata, Kurenai ya estaba mucho mejor, y se encontraban todos con fuerzas de seguir su camino.
A medio dia, llegaron a su destino, cansados de caminar, el Feudal Anzai les indicó donde podrian tomar unos baños para relajarse y les preparó un festín para ellos solos, no solo para que recuperasen fuerzas, sino también en señal de gratitud por regresarlo sano y salvo a su aldea.
Bien entrada la tarde, y trás despedirse, el feudal también les proporcionó un transporte, los llevarian a todos en una especie de carro a su aldea, para que no tubieran que volver caminando, cosa que ellos rechazaron pero viendo el camino que les quedaba por recorrer, decidieron al final aceptar su ofrecimiento.
Partieron de alli, el camino se les hacía largo, Sarah observaba el cielo con la vista perdida en ningún punto concreto, pensativa.
Los demás contando cosas sobre la comida, sobre las termas, y sobre el mismo feudal.
Iruka: Supongo que ahora que ha llegado a su aldea, deberá reconciliarse con las demás que se pusieron en su contra, me pregunto como lo hará -
Kurenai: No lo sé yo tampoco... Ahhh! Que ganas tengo de llegar a Konoha... No he pasado ni tres dias fuera y ya hecho todo de menos... ¿Tu no, Sara chan? - Los dos muchachos quedaron en silencio esperando una respuesta de su compañera, que seguía perdida sin volver la mirada, al poco tiempo rompió el silencio.
Sarah: Ah... Si si, le echo de menos -
Iruka: ¿Le? ¿A quien? - Kurenai le dio un codazo y le dijo al oído que luego de llegar se lo contraría.
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El joven Itachi, entrenaba en un claro de uno de los bosques de Konoha, practicando con sus armas, cuando comenzó a escuchar que algo se dirigía hacia donde él se encontraba.
Itachi: ¿Un transporte? -
El carro pasó por su lado y alguien conocido sacó la cabeza saludándole efusivamente -
Sarah: Itachiiiiiiii! He vuelto, Itachiiiii! - El joven cambió su expresión tornándose serio y continuó su entrenamiento haciendo oídos sordos a su amiga - Oye! Voy a hablar con el Hokage luego te veo! - Y se alejó de allí adentrandose en la aldea.
Una vez se hubo presentado ante el Hokage, éste les felicitó por su trabajo, entonces los chicos se marcharon cada uno para sus casas, Iruka por supuesto se fué a comer ramen, Kurenai a descansar, y Sarah a buscar a Itachi.
Volvió al lugar donde lo encontró al llegar, pero ya se había ido, después se pasó por el lago donde muchas veces habían almorzado juntos, y más tarde, despues de dar algunas vueltas por la aldea preguntando por él, fué a buscarlo a su casa.
Éste se encontraba en la entrada del territorio del clan, apoyado en una pared, con las manos en los bolsillos y mirando al frente como se acercaba ella.
Sarah: Llevo buscandote un buen rato ¿Dónde es -
Itachi: Yo también estube buscandote un buen rato cuando te fuiste -
Sarah: Itachi... Lo- lo siento mucho, debería haberte avisado pero no me dió tiempo, teníamos que salir rápidamente asi que... -
Itachi: Cállate. No tienes que darme explicaciones, despues de todo tu y yo no somos nada - La cara de ella cambió por completo, Itachi se separó de la pared, y le dió la espalda a ella caminando dentro de las calles del clan Uchiha, Sarah corrió tras de él poniéndose de frente de nuevo.
Se miraron a los ojos, ella le miraba apenada y él indiferente... Su mirada era totalmente fría, seguramente ha estado muy preocupado, pensó la chica.
En un alarde de rabia con los ojos llorosos, ella dió un salto y se encaramó a su cuello plantandole un beso en los labios que ni Itachi se lo esperó, se quedó casi sin respiración pero no cambió su mirada. A los pocos segundos se separó de él y lo miró muy seria, le dió la espalda,corrió en dirección a su casa abrió la puerta entró y la cerró sin despedirse ni mirar ni tan siquiera al muchacho.
Éste quedó depié en el comienzo de la calle, sintiendo como el aire le mecía el cabello, un silencio por un momento, no habia nadie en la calle a esas horas de la noche en el clan, todos estaban recogidos, así que él aún con las manos en los bolsillos, comenzó a caminar direccion a su casa también.
Bueno ya me contareis que os ha parecido! Quizás un tostonazo, quizás me he esmerado más... Ya me ireis contando, dadme algun consejillo que no viene mal! Saludos espero vuestros comentarios
Hasta Pronto.-
