Crisis en Tierras Infinitas Naruhina
Capítulo 27 El Temporada de Huevos de Pascua
Volveremos a un momento en el tiempo en que Riki hacia lo suyo y pues Shiori se aburrió de estar en Hogwarts porque no había WiFi. El mundo mágico es pésimo si consideras que viven en el año del caldo y son ingleses, de verdad que no era lindo un internado.
Sin embargo, algo curioso le ocurrió en su estadía y es el hecho de que una bruja llegó al sitio y quería su ayuda. No era una clásica maga inglesa con capa sino que era una madura gótica con un traje revelador y de peinado estrafalario ochentero.
—Señorita diosa Kumiho, necesito su ayuda—.
—¿Ah, quien le dijo de mi identidad? Eso es un secreto—.
—Soy una bruja poderosa del multiverso. Vivo como Elvira en el mundo terrenal, tuve mi propio show en Estados Unidos—.
—No sé de qué habla, tal vez mi madre sepa de usted—declaró la pelirroja sin entender.
—Como sea, solicito su protección a mi y a mi acompañante. Hay alguien que desea mi cabeza y no quiero morir—le solicitó la mujer su asilo político.
—¿Eh? No veo un acompañante, espera. Siento una presencia maligna, me recuerda al idiota del amante de mamá—.
En ese instante, una especie de humo salió del cuerpo de Elvira y este era un alma sin cuerpo alguno que delataba total violencia. Sin embargo, el aura de Shiori no dejaba que esa malicia se expandiera más.
—Ella es la diosa, así que decías la verdad. Bruja gótica, pídele que me devuelva mi cuerpo—se oyó una voz diabólica con un acento rumano.
—¿Quién eres tú? ¿Qué pasa con él? Es un alma muy maligna—.
—Mi acompañante es quien se le conoció como Vlad Draculea II de Rumania, pero llámalo Alucard de cariño. Parece que apenas sobrevivió a un altercado contra el doctor Abraham Van Hellsing—contó la bruja gótica.
—Una variante poderosa de Drácula. Wow, adoro a los vampiros menos a los de Crepúsculo. Uf, que bueno que no me topé a los estreñidos pálidos—.
—Se necesita una sangre poderosa de una virgen pelirroja de ascendencia divina para revivir por completo a Alucard a su máximo esplendor. Si Alucard se recupera, él estará a tu servicio como agradecimiento—.
—¿Como se que no es una trampa? Pueden ser aliados de alguien malvado—les dijo seria la niña.
—De ser malvados habríamos intentado robar tu sangre a la fuerza—aseguró la bruja.
—Cierto, si es ese el caso ayudaré al vampiro—.
Era noche de Luna Llena y Elvira preparó un ritual especial Wicca para resucitar al vampiro más famoso de todos y Shiori se pinchó el dedo para insertarlo en un pentagrama pero tuvo efectos colaterales.
—¡Aaaaaaaah, quema, quema!—se retorcía el alma del dolor espiritual mientras una cantidad terrible de energía negativa salía al cielo en forma de humo negro.
—Guau, se está purificando. Que poderosa es la sangre que tiene esta diosa—mencionó la bruja a sus adentros.
El cuerpo del vampiro se reconstruyó luego de eso y ahora Alucard volvió a la vida por completo. Sin embargo, había cierto detalle que no previó y Shiori se sonrojó muchísimo porque era la primera vez que miraba a un hombre desnudo.
—¡He vuelto!—exclamó el sujeto celebrando.
—¡Kyaaaaaaaaaa!—gritó la chica y se revolcó en el suelo porque un trauma no se le borraría de la cabeza.
—Oye, no le muestres tus miserias a la chica—le pidió la bruja haciendo aparecer ropa al vampiro.
—Ups, debiste avisarle. Se siente estar vivo—.
—¡Mis ojos, mis ojos!—se seguía rodando la niña en el suelo.
—No te quejes tanto, ¿Acaso jamás habías visto a alguien desnudo?—le dijo Alucard en tono burlón.
—¡Voy a matar a mamá por ocultarme de ese tema!—se quejaba Shiori con los ojos rojos del coraje.
Después de terminar el asunto en ese mundo, todos regresaron al Reino Cero donde Riki se hallaba feliz de la vida ya que pudo reclutar con éxito a Harry Potter y Ginny Weasley pero notó que Shiori se veía mal.
—¿Qué pasa, cariño? ¿Todo bien?—.
—¡Nada de bien! ¡¿Por qué me ocultas te algo tan importante como el nepe?!—reclamó la chica furiosa.
—¡¿Quién te dijo de eso?!—se espantó Riki de que alguien corrompió a su bebé.
—Que lugar tan bonito, es un sitio muy bello—se oía a Elvira pasear en la casa.
—¡¿Tu que haces acá?! ¡Ni siquiera eres del mundo de Harry!—.
—Un lugar tan encantador, la sangre de la niña me hace tolerar la luz del sol—mencionó Alucard con la luz solar pegando a su brazo.
—¡¿Shiori, que fue lo que pasó?!—.
—Señora Senryaku, quería hablar con usted sobre cierto asunto. Vine huyendo de mi universo natal por una amenaza. Apenas logré escapar de un tipo raro que quiso secuestrarme—explicó la bruja gótica sería.
—¿Puedo llamarte Elvira? Estoy enterada de tu show—.
—Sí, no me gusta mi nombre humano americano. Reúnan a sus generales, les voy a contar de mi mala experiencia—.
Así los generales fueron reunidos y Elvira se presentó ante ellos como la Señora de la Oscuridad, un nombre adecuado para ella. ¿Cómo se entero de ellos si su existencia era desconocida?
—Dices que una hermosa rubia de acento soviético apareció en un sueño para advertirte de la amenaza y que buscaras en el universo de Harry Potter—preguntó Chusai recapitulando lo contado.
—Sí, era fría como la nieve de Siberia—.
—Sí, fue Mariska—mencionó Sora ante eso.
—Y dices que un gordo vestido de héroe te quiso atrapar por una extraña razón—seguía Nageru la recapitulación.
—Sí, tenía acento americano. Era un friki comiquero sudoroso y olor a patas—.
—¿Por qué te quería secuestrar?—.
—Porque dijo que me quería coleccionar. De hecho se hacía llamar el Coleccionista del Caos como nombre de villano—.
—No es mal nombre. Si es un Coleccionista de personajes, debe estar secuestrando a distintas personas en distintos mundos. Sora, busca en el GPS del multiverso a un gordo friki cosplay de héroe de comic—le pidió Konran a su amiga.
—Esos hay muchos en la existencia. Podría ser cualquiera—.
—Que hayan devorado una semilla del caos—.
—Eso es más raro, listo. Ahora se dirige al mundo de Xena, la Princesa Guerrera—.
—Veamos que pasa—.
En el mundo de Xena, ella regresó a la vida por un extraño motivo ya que había muerto en Japón y frente a ella estaba un sujeto raro con un traje aún más raro, por lo que sacó su chakram.
—¿Quién demonios eres?—.
—Tú nuevo dueño, jajajaja—.
—¿Tu fuiste quien me devolvió a la vida? Debí suponer que un hechicero lo hizo, siempre me pasa esto—.
—¡Soy el Coleccionista y te agregaré a mi colección!—.
Una especie de electromagneto llegó al lugar y la jaló debido a su armadura de pecho que era de hierro, por lo que no podía liberarse.
—Maldita sea, debí quitarme mi peto—intentaba ella zafarse pero habían aldeanos cerca que la oyeron y andaban de morbosos—Nah, mejor no—..
De vuelta al reino cero, todos entendieron la referencia y ahora sabían donde estaba el escondite por lo que iban a actuar ya.
—Bueno, iremos todos. Si es cierto que ha secuestrado personajes, vamos a disfrazarnos de funcionarios de Hacienda y lo embargamos sin orden judicial—determinó Shiro a todos.
—Solo tengo una pregunta, ¡¿Por qué no me dijeron nada de los nepes?!—reclamó Shiori aún traumada con el tema.
—Uy, espera a que sepas de donde vienen los bebés—le mencionó Elvira a la pelirroja.
—Eso es fácil, los kitsunes reparten bebés a los reinos. Eso me lo enseñó mamá—le respondió muy inocente la chica y todos vieron con enojo a Riki que no quería ensuciar la mente de su hija pero sus métodos eran extremos.
Luego de eso, Xena estaba encerrada en una especie de plástico aislante mientras que en el sitio habían millones de personajes de animes y cómics americanos dormidos bajo el mismo embrujo que se usaba para One Piece.
—Sácame de aquí, loco desquiciado si no quieres que te mate—se veía furiosa a la mujer.
—Ahora nos vamos a casar y serás mi mujer, ¿Qué te parece?—sonreía el villano ante ello.
—Sueña con eso, malnacido. Cuando salga de aquí te haré sufrir mucho—.
En ese instante, una explosión se llevó a cabo y el Coleccionista se hallaba preparado para la llegada de los llamados generales. Alguien le había pasado el tip de ellos y tenía un arma secreta contra todos.
—¡No podrán contra mí arma secreta!—exclamó el gordo con una rockola.
—Esa canción es… zzzzzzzzzzz—intentó decir Nageru pero se quedó dormido como todos ahí.
—¡Jaja, One Piece nunca me falla!—.
—Sigo de pie, tarado—se oyó a Ryoku dirigiéndose en su contra.
—¿No te afectó?—.
—No, amo One Piece—.
—Serias un buen aliado. Únete a mi y seguiremos coleccionando cosas valiosas—.
—Depende, ¿hay lolis?—preguntó el General Dragón serio.
—No—.
—Entonces no me interesa tu oferta—.
—Tú si que estás enfermo—.
En ese instante, Ryoku se dispuso a atacar cuando fue encerrado en una celda de energía directa de Star Wars con el fin de retenerlos ahí.
—Bueno, eso es todo. Ahora si me disculpas me casaré con mi querida Xena—se volteó el gordo.
La griega pensaba en como zafarse después de casi quedarse dormida por esa música somnífera hasta que se le ocurrió un plan aprovechando un descuido.
—¿Por qué me quieres a mí como esposa? Tienes a más mujeres al fondo—.
—Me gustas más, eres una heroína real—alegó el comiquero.
—Tal vez seamos el uno para el otro, nunca he tenido un romance con un hombre como tú. Tal vez sea feliz a tu lado, bésame amado mío—le sedujo ella y este cayó queriendo darle un beso—¡Te atrapé!—.
Ella comenzó a golpearlo en la cara a punta de puñetazos y luego le dio un cabezazo que lo hizo irse para atrás y después de eso se logró zafar del plástico mientras le dio una patada digna de una serie de los 90s.
—Maldita, caí en un truco tan viejo que sonrojaría a Chabelo—.
—¡Ayayayayyayayaaaaaah!—dio su grito de guerra Xena y comenzó a patearle el trasero al villano sin ayuda.
La verdad es que el sujeto no era muy fuerte en un mano a mano y bastaba con ver su físico para notar que apenas y podía con su alma. El resto de los que se quedaron dormidos se despertaron rápido y notaron que Xena se estaba despachando al sujeto.
—Mujer fuerte y que nos podría arrancar las pelotas. Que se la quede Riki—declaró Shiro a todos.
—Amén—asintieron todos.
—¡Oye, no me dejen lo que ustedes no quieren! Bueno, Xena no es mala elección para mi. Quiero más Puño de hierro en mi reino—admitió la general Kitsune su deseo.
Luego de eso, el Coleccionista abrió una espada láser de Star Wars para enfrentarse a Xena que esquivaba como una profesional los ataques y Riki rompió la prisión con la chancla.
—¡No podrás con mi sable de luz de doble filo de la Amenaza Fantasma!—exclamó confiado el villano.
—¡Lo sacaste de su empaque!—le dijo Riki desde lejos.
—¡No, ya no es coleccionable!—dijo el gordo arrepentido de su acción.
—¡Ahora!—.
Todos lanzaron un ataque en conjunto al sujeto que fue vaporizado en un segundo y una semilla del caos cayó al sueño mientras que Konran se la comió ya que no le haría nada a ella.
—Una menos—.
—Gracias por la ayuda, ese sujeto era intolerable—decía la mujer con un marcado acento griego antiguo que la caracterizaba.
—De nada, hay que liberar a los prisioneros—comentó Ryoku preocupado por eso.
—¿Para que es ese botón?—preguntó Shiori con la voz de Dee Dee y eso trajo mala espina.
—¡Espera no lo toques!—.
Ella lo presionó y los prisioneros fueron abortados y cayeron como meteoros pequeños a todo los reinos del planeta los cuales eran muchos. Ese fue un evento demasiado llamativo y se creyó que era un fenómeno natural según los ciudadanos.
—¿Dime que ese fue el menor de los problemas?—preguntó Chusai teniendo un mal augurio.
—Mira, esta es una maquina del doctor Doofensmitz—leyó Shiori sonriente.
—¡Corran todos, vámonos a la verga wey!—les ordenó apurado Shiro a todos.
Apenas salieron todos de ahí y el sitio explotó en miles de pedazos mientras que ardía tanto que un piromaníaco tendría un orgasmo visual.
—¡A la próxima que vean un invento, vean que no sea un inador!—.
Luego de eso, llegaron al castillo donde encontraron a Sora y Elvira dormidas ya que oyeron la música de Juan Pis y eso les dejó una gota de sudor en la nuca. El asunto se había tornado serio porque ahora habían regados personajes de otros mundos en el reino y no sabían que intenciones podrían traer.
—¿Es tan grave esto?—preguntó Chusai curioso.
—Bueno, no es que sea una amenaza nivel Vengadores. El tema es que al ser metidos a este mundo sí tienen un nivel divino puede que afecten a la misma historia de este universo—.
—En español, please—le pidió Nageru que le dijeran que pasaría de forma más fácil.
—Sí es un dios, puede que su fuerza altere el espacio-tiempo generando que su historia se mezcle con nuestro mundo. Por ejemplo, cuando Aqua llegó a este mundo todos empezaron a adorarla como diosa del agua como si siempre hubiera existido. En los humanos si no pasaron por nuestro filtro, ellos siempre recordarán a este mundo como el suyo, excepto por los Isekai—.
—Entonces damos por finalizó la Temporada de Caza de Waifus y Husbandos a otros mundos. Ahora será la temporada de búsqueda de huevos de pascua en nuestro mundo—declaró Konran a todos los presentes.
—Sí llegan a hallar a alguien, invítenlo a su equipo. Vamos a estar ocupados estos días—.
—Sí, ¿ya invitaste a Xena a tu team?—preguntó Ryoku a Riki.
—No pero esta esperando afuera para ver nuestra decisión. Parece que no tiene de otra más que aceptar—explicó la pelirroja ante ello.
—¿Qué tal de la bruja Elvira?—.
—Es parte de mi team, la reclamó como mi nana personal a partir de ahora. Será el nexo entre mi madre y yo si estamos lejos—declaró Shiori al fondo.
—Buena idea, ella fue conductora. Tal vez sepa más de cantantes que nosotros—.
—Por cierto, registro a Alucard como otro miembro más. Hicimos un pacto de sangre cuando lo reviví—.
—No es muy mayor para ti, es un hombre de pasado turbulento—se preocupó Riki ante eso.
—Mira quien habla, señora Riki Morningstar—.
—¡Oye, ni siquiera somos algo para empezar y soy una adulta!—alegó ella al respecto.
—Lucifer te lleva billones de años, eres una niña a sus ojos—.
—Que turbio suena eso si lo ves desde ese punto de vista—.
—Hmp, solo pon a Elvira que este cerca de ti. No me agrada la idea de que él esté cerca—suspiró la mujer ante eso.
—No se preocupe, suegra. Su hija está a salvo conmigo—se oyó a Alucard en el lugar.
—¡¿Dónde estas, chismoso?!—.
—En la sombra de Shiori. Es un lugar acogedor, así siempre su hija estará a salvo—.
—No me confío de ti, eres un hombre muy mañoso y lleno de malicia—.
—Señora, si mi ama no quiere nada no le haré tal cosa. Para eso está nuestro trato—.
—No te preocupes, mamá. Estaré bien, los que se deben preocupar son los que quieran hacerme daño—alegó la Kumiho.
—Bien, ustedes ganan. A la primera que me enteré de una barbaridad los separo—.
—Descuide señora, no me gustan las lolis. Esperaré hasta que cumpla la mayoría de edad. ¿Siguen siendo los 16 años?—preguntó Alucard serio.
—¡Ni se te ocurra, siempre será una niña para mí y los 16 es muy pronto!—reclamó furiosa la general Kitsune.
—Creo que Riki tendrá un yerno problemático—profetizó Sora su destino.
Luego de eso, Shiori se fue a su cuarto al llegar a casa y Alucard salió de la sombra divertido porque la misión que observó fue de lo más graciosa. El final fue muy cómico y era mejor que cualquier otra cosa en su larga vida.
—Hora de cumplir mi parte del trato—.
—Sí, adoro esta parte del trato—.
El cuello de la chica era lindo y se podía ver con claridad la yugular palpitando mientras le clavaban los colmillos en esa zona. La sangre de Shiori se recuperaba muy rápido por su regeneración veloz y era tan dulce como adictiva para un vampiro.
—Por eso es que mueren tus víctimas, mi regeneración ayuda a no morir—comentó Shiori que se cubría el cuello que ya había sanado.
—Para mí es como beber agua helada en un desierto caluroso. No pude elegir mejor trato, ahora yo cumpliré mi parte del trato—.
—No le vayas a decir a mamá, le va a dar un infarto si me viera así—.
—Bien, esto quedará como un trato entre los dos—.
El trato amo-siervo venía de dos partes: A cambio de beber la sangre que quisiera, el siervo se vería obligado a cumplir algo constantemente cada noche. Sin embargo, el deseo de Shiori fue algo inusual en el mejor de los casos.
—Papi, dime que soy una niña buena—.
—Eres una niña muy buena, la mejor—le acariciaba la cabeza el vampiro en tono paternal.
—Dime que soy la mejor—.
—Eres la mejor—.
Este fue el deseo de Shiori: Alucard fingiría que sería el padre de ella ya que en el fondo siempre tuvo esa espina de no contar con una figura paterna constante y Lucifer era en el mejor de los casos otro niño grande que no llenaba el vacío un poco.
—Papi, te quiero mucho—.
Alucard pensaba que esta niña estaba bien traumada con ese detalle como para pedirle eso y era bastante incómodo esto pero era un hombre de palabra y lo tenía que cumplir. Era extraño esto y recordar a sus propios hijos que murieron hace siglos en paz y no recordaba del todo sus rostros.
—No vayas con el chisme a mamá o me voy a enojar mucho. Esto es algo vergonzoso que no deseo que sepa, desde que el tío Shiro no me visita me siento sola—admitió ella ese detalle.
—¿Hablas del rey?—.
—Creo que es lo más cercano a un padre que tengo. Mamá es muy buena y gentil siempre que no se enoja. Sin embargo, siento un vacío cuando pienso en eso—.
—No lo pienses mucho, a lo mejor ya no es tan importante en el fondo—.
—Mamá dice que no quiere que tenga novio tan pronto. Sabes algo, creo que soy de novios muy mayores. Tal vez soy algo gerontofilica como mi madre. Los chicos del último año de mi escuela me parecen más atractivos que los de mi edad. Estoy loca—admitió la adolescente comenzando a entender sus sentimientos.
—A mi me casaron en matrimonio dos veces. No me fue bien cuando era niño, fue la peor época de todas. A diferencia tuya, no viví en paz. No te preocupes demasiado, duérmete porque si te ven ojeras, la loca de la chancla te va a regañar—.
—Gracias, es bueno hablar con alguien que me escuche mis tonterías—fue lo último que dijo antes de quedarse dormida.
—Estos adolescentes de ahora. Ya estoy viejo, debo pedirle a la bruja gótica que investigue a los intereses románticos de la ama—.
Luego de que amaneciera, Xena fue presentada a todo el squad de Riki con mucho gusto y todos los recibieron con mucho gusto. Yuna notaba curiosa como es que el nombre de Xena sonaba casi como Kushina pero no dijo nada más.
—Me llamo Naruto Uzumaki, mucho gusto—.
—Hinata Uzumaki, soy su prometida y esposa... Es una larga historia—.
—Soy Yuna, mano derecha de Shiori, hija de ellos dos—saludó la niña ojiazul de cabello rojo.
—Soy Harry Potter, antiguo estudiante de Hogwarts en Escocia, un gusto conocerla—saludó educadamente el mago.
—Ginevra Weasley, llámame Ginny—.
—Y soy... Soy el capitán Jack... Sparrow—saludó un pirata al fondo bien ebrio.
—Mucho gusto... Espera, ¡¿Qué hace aquí él?!—exclamó en shock Riki ante la visita inesperada.
—Me encontré a un ebrio vagabundo en la calle y le estamos dando caridad—explicó Hinata sonriente.
—Que burdel tan elegante es este, son los de Nipon sin duda. ¿Serán la nombradas Geishas? ¿Como llegué hasta allá?—se preguntó medio confundido el pirata.
—Amigo, creo que tenemos que hablar de eso—le comentó Xena al respecto.
—Hmmm, ese acento. Griego, uno muy arcaico sin duda. Constitución fuerte, tienes cara de que sabes de barcos para ser mujer—analizaba Jack a la pelinegra.
—Nada mal, si eres un pirata—.
—Una acróbata por esas piernas fuertes y una espadachina. Esos chakram, la India me gusta por las especias. Te haré mi primera oficial si aceptas ir en mi nave, si pudiera liberarla por supuesto—enseñó el pirata un Perla Negra encogido en una botella de vidrio mágica.
—Bueno, ya que estamos en el camino. ¿Aceptas ser mi corsario a cambio de todo el ron del reino?—preguntó Riki en modo negociante.
—¿Desde cuando hay emperatrices en Nipon? Bueno, no pregunto. Si no me dan un uniforme estúpido tal vez acepte la oferta—.
—Iré por las doncellas—se fue Inari ya que conocía como tratar a este tipo de personas.
El espacio-tiempo se estaba volviendo loco en el reino y la historia conocida se iba modificando poco a poco hasta que fue demasiado tarde para revertirlo.
Una gyaru universitaria estaba en una autopista de Japón pidiendo un aventón para ir a Tokio e ir a ver a un primo que quería mucho cuando el paisaje cambió de la nada. Cabello negro y largo, ojos castaños rasgados y una cara muy hermosa, muy linda, cuerpo envidiable, esas eran las características de la japonesa Tenshi que se hallaba de vacaciones fuera del país.
—Ara, nani—veía ella que el universo cambió de un parpadeo de una carretera normal a un sitio con unicornios.
Los caballos con un cuerno en la frente se alejaban de ahí mientras que hadas volaban en el sitio mientras que esta caminaba en el sitio.
—Ay no, estoy en un Isekai. Pero Camion kun no me atropelló. Que raro—dedujo ella rápido su situación.
El celular de ella curiosamente si tenía señal y llamó a una persona en sus contactos. La llamada salió y le contestó alguien conocido.
—¿Tenshi, como demonios llegaste aquí?—.
—¿También te fuiste a un Isekai? Uf, estaba en la carretera yendo a Monterrey cuando llegué aquí. ¿Tienes idea de qué pasó?—.
—Sí, esto será pesado. Pon tu ubicación, mandaré Uber—se oyó la voz del sujeto.
—¿Hay Uber en los Isekai? Que mundo tan raro—.
—Estas en el reino de criaturas mágicas, te lo explicaré todo—.
La mujer esperó hasta que un sujeto con gorra de Joseph Joestar apareció en un carruaje moderno jalado por energía limpia.
—¿Usted debe ser Tenshi? Mucho gusto, soy el Comandante de las Fuerzas Imperiales de los reinos—se presentó el hombre a la gyaru.
—Tu sola presencia es una Jojo Referencia. Soy Tenshi, ¿Qué es este sitio? Estaba en México de vacaciones y ahora estoy aquí—.
—Hay unas perturbaciones en el hilo del espacio-tiempo. Usted estará cómoda en el castillo, el Rey dijo que la atendiéramos bien—.
—¿Rey? Si solo hablé con mi primo—.
—¿Espera, como apellida usted?—.
—Yoku, ¿por qué?—.
—No, por nada. Es un conocido mio—.
—Oh, entonces mi primo es importante en un Isekai. Que envidia, quería ir a un Isekai con él. Mientras esa perra de Konran no esté, es mejor—alegó la gyaru en un tono de desprecio por esta última.
Hageshi se quedó callado porque no quería meterse en problemas y siguieron su camino al castillo que era gigantesco. Tenshi se sorprendió de que todo era como la película de "El diario de la Princesa".
—Que buen sitio, espero llegar a ser una de esas valientes guerreras del reino. ¿No es un reino machista?—.
—No—.
—Espero que haya un príncipe guapo y ser la heroína de la historia. Pff, sería genial eso—.
El comandante simplemente no quiso dar el chisme ya que estaba nervioso y entraron al castillo donde el sujeto mandó a la sala de espera a la gyaru. Esta se quedó esperando en el sitio y los generales entraron después de una junta con Shiro sobre que iban a hacer con el asunto de las perturbaciones en el universo.
—¡Es una gyaru verdadera!—exclamaron los hombres apenas la vieron.
—Aja, una gyaru. ¿Alguien tiene hambre?—.
—¿Hablan japonés en este reino? Que bueno, apenas sé español. Soy Tenshi—saludó la chica en el sitio.
—Riki, somos los supremos generales de todos los reinos—se presentó la pelirroja ante ella.
—Una formidable secundaria de aspecto maternal. Que hermoso traje, sin duda es una máxima general—.
—Siiiii clarooooo, la suprema chancleadora del reino tal vez—pensaron todos.
—La pelirroja está muy bien pero el resto.. Que feos están, creí que serían galanes bishonen. Me hice ilusiones—alegó seria la gyaru.
—¡Eso duele!—reclamó Nageru enojado.
—Morra, la belleza es interna—declaró Ryoku desencantado de la gyaru.
—Eso mismo dicen los feos para motivarse—.
—Que lengua tan venenosa, se parece a cierto sujeto—recordó Chusai a Shiro y su modo edgy.
—¿Dónde hay muchachos guapos? Tal vez debí ir a un gremio, deben haber protas reencarnados ahí—.
—Esa chica me recuerda a alguien, ¿Dónde la he visto antes?—se preguntó Riki viendo de reojo a la presente.
En ese instante, Shiro entró para avisar algo a los generales y se topó a Tenshi que se lo quedó sorprendida porque traía ropa muy elegante.
—¡Primo, hace años que no nos olemos!—saludó ella con cariño.
—Hola, Tenshi. No creo verte de nuevo—dijo Shiro con algo de aburrimiento.
—Sigues igual de serio que antes, siempre te resististe a mis encantos femeninos—.
—No soy de Monterrey—.
—¡¿Son primos?!—exclamaron y notaron cierto parecido en sus rostros aunque la mujer era muchísimo más linda.
—Que bueno que llegaste, con tu ingenio y mi belleza podemos conquistar este mundo. Dime, ¿conoces al rey que me presente a uno de sus hijos? Así puedo aspirar al trono—.
Shiro tenía una gota de sudor en la nuca porque su prima era la misma avariciosa de siempre y no había cambiado nada. Todos veían que esa chica en verdad era muy trepadora, una verdadera gyaru sin duda.
—Shiro, se me acabaron los perfumes. Vamos por más—se apareció Konran en el lugar y miró a Tenshi con sorpresa y luego furia.
—¡Tuuuuuú!—.
—¡¿Tú que haces aquí, Fred?!—.
Todos en el lugar podían ver a dos abejas reinas en el sitio como Stands y se miraban con odio en sus ojos de forma que el espíritu gyaru se sentía en el ambiente.
—¿Conoces a Konran?—preguntó Ryoku queriendo el chisme.
—¿Qué si la conozco? Es mi archienemiga de la preparatoria. La abeja reina y mi competencia—alegó la prima del rey.
—¿Acaso no superas que jamás me pudiste sacar de mi titulo de la perra máxima de la escuela?—sonrió Konran sonriendo como villana de drama escolar.
—Jamás necesité superarte, zorra. ¿Acaso sigues metiéndote con los profesores? Oh si, dudo que hayas cambiado—.
—No seas hipócrita que siempre ibas de puta con los populares—.
—Esto es mejor que un drama cliché—sacó Riki sus palomitas.
Shiro recordaba el fastidio que fue la preparatoria con esas dos aunque fue de ahí donde surgió la inusual amistad entre él y Konran. Tenshi estaba furiosa porque nada había cambiado entre su rivalidad escolar.
—Cambio de tema. Shiro, vamos a planear nuestro dominio del reino. Es un mundo donde podemos hacernos dioses—alegó Tenshi y Konran se reía.
—Uy, pobrecita. ¿Qué no te han dicho nada?—preguntó la reina que notó ese detalle.
—¿Qué cosa? Este plan lo he hecho desde que los Isekai están de moda. No estas incluida en esto—dijo muy digna la chica.
—Tenshi, Konran es mi esposa y yo soy el rey de todos los reinos—reveló Shiro a su prima.
—Jaja, ya en serio. No estoy para bromas—.
—Eeeh, Shiro es el rey—señaló Riki seria.
—¡No es cierto!—.
—Su alteza, el precio del limón subió de nuevo. ¿Qué hacemos?—se vio llegar a Sora inclinándose a su rey.
—Investiga si no hay fraude, tengo otro problema que resolver—.
—¡Guau, esta caliente esta paladín! ¡¿Cómo le hiciste para ser rey?!—.
—Majestad, ¿quién es la gyaru?—.
—Mi prima—.
—Oh, alguien de la familia real secundaria—.
—Shiro, ¿no te he dicho que te has puesto más guapo últimamente?—abrazó Tenshi a su primo.
—Oye, morra. Aquí el norteño soy yo, no permito que nadie me quite el título que me he ganado, huerca—se puso el sombrero el Fierro Kun Dragón.
—No es algo que presumir, Ryoku—susurró Sora ante ello.
—Óyeme, no seas interesada—le dijo Konran algo ofendida por la acción de la chica.
—¿Verdad que quieres mucho a tu primita?—le dijo la mujer en un tono seductor.
—Shiro, no entres en terreno del norte, pariente—le aconsejó Ryoku en su posición.
—Tenshi, te quiero solo como una prima normal—alegó el rey serio.
—¡Vamos Shiro! ¿A poco no quieres experimentar una relación norteña?—.
En ese instante, Sora le metió una cachetada a Tenshi y todos se llevaron una mano en la boca porque nadie se espero esto y llevó la cabeza de Shiro a sus pechos.
—Ah no comadre, aquí yo soy la que manda con Konran. ¿Verdad que si?—se veía muy celosa a la albina por primera vez en mucho tiempo.
—¡Shiro, ella me golpeó!—reclamó la prima enojada.
—Voy por Sora—dijo Chusai queriendo ver lucha en lodo.
—Voy por la prima incestuosa—apostó Nageru al respecto.
—Sora, no te ensucies las manos con ella. Para eso estoy yo—se metió Konran jalandole las greñas y la prima empezó a batallar en el suelo.
—¿Alguien tiene gel?—preguntó Nageru pero Riki les metió un chanclazo a todos en el lugar.
—Quietos, aquí es paz y amor. Todos ustedes no hagan un alboroto, si hay rivalidad resuelvanlo como gente civilizada—les regañó la pelirroja.
—Sí, señora—dijeron los presentes.
—Escúchame bien, Konran. Cuídate mucho porque voy a destronarte aunque me tarde todo el día de hoy, o mañana, o pasado mañana, o el siguiente, o el siguiente, o el siguiente, o el siguiente…—advertía Tenshi muy seria mientras se iba de ahí del castillo.
En ese momento, el teléfono de Shiro sonó y al contestar le pasó la llamada a su esposa ya que era para ella.
—O el siguiente, o el siguiente, o el siguiente…—.
—Ya entendí, loca—le cortó la llamada ella.
—Sí, es la prima de Shiro. Lo de las referencias es de familia—mencionó Ryoku curioso.
En cuanto a la familia Uzumaki ahora tenía un problema peliagudo porque no pensaron que alguien aterrizara como meteorito en el patio de su casa.
—¿Esa es otra versión tuya, mamá?—preguntó Boruto preocupado.
—Parece que si, tiene mi chakra antes de ser mutado por el poder de Hamura—comentó la Hyuga.
—Pero es mucho más joven—mencionó Yuna que notaba que la otra versión era una chiquilla de 17 años aproximadamente.
Era de noche y el ruido generó un escándalo que alarmó a la familia. La otra versión de Hinata Hyuga era sin duda muy parecida pero esta no tenía un fleco y el corte era más como el que traía Hanabi en su edad adulta. Traía un uniforme ninja oficial de la aldea con chaleco táctico y Naruto entendió que está se hallaba en la Cuarta Guerra Ninja de seguro.
—Ya está despertando—miró Hima con atención.
La adolescente abría los ojos y notó a la familia viéndola raro, a lo que se paró y está sacó un kunai en alerta.
—¡¿Dónde estoy?! ¡¿Quiénes son ustedes?!—exigió respuestas la kunoichi.
—Aaaah, esa si es una pregunta difícil—se rascó la cabeza Yuna que no sabia como responder sin sonar raro.
—¿Madre, eres tú?—alzó la ceja la Hinata alterna al ver a su yo adulto.
—No, soy tú… Bueno, tu yo adulto de un mundo distinto—le dijo la verdad la peliazul.
—¿Eh? No bromeen, no estoy para juegos estúpidos. Díganme la verdad—.
—Hinata, soy Naruto, Naruto Uzumaki—se presentó el rubio ante ella.
—No conozco a ningún Naruto. Aunque… Me recuerdas a Menma, ese infeliz… —.
—¿Menma?—alzó la ceja Boruto.
—De hecho el niño de ahí se le parece mucho, y también la niña de cabello azul. La pelirroja se parece a Kushina. ¿Dijeron que son Uzumaki? Esto se puso confuso—.
La Hinata alterna quería escapar y Naruto no la dejó porque quería preguntas, así que sacó una de las cadenas de Diamantina para que no se fuera de ahí.
—Esa cadenas, ¿Cómo es que…?—.
—Mencionaste el nombre de mi madre Kushina Uzumaki. Parece que ella puede responder algo—.
—Iré por ella—.
Kushina y Minato llegaron rápido, notando a la otra Hinata que los veía asombrada porque hasta donde recordaba ellos murieron recientemente en la guerra.
—Imposible, deberían estar muertos. Ya no entiendo nada. Menma, su hijo los mató—.
—¿Menma? Ese nombre le quería poner a Naruto cuando iba a nacer. Si vienes de otro mundo, entonces ese tal Menma es Naruto con otro nombre—comentó Minato ante ello.
—Sí, era ese o Shinashiku—recordó Kushina pero Hinata se enojó porque ese nombre era uno de los hijos bastardos de Sakura Otsutsuki que le clavó a Naruto y ni eran suyos.
—¿Entonces en donde estoy realmente? ¿Cómo llegué aquí?—.
—Yo soy tu versión futura en un mundo alterno. Tengo 40 años y vivo con Naruto como mi marido y amante—le explicó la peliazul mayor a su contraparte.
—Entonces si Menma es el guapo rubio de allá. ¡Aaaaaah, me case con Menma!—exclamó ella en shock.
—¿Qué pasa? ¿Acaso no amas a mi otro yo?—preguntó Naruto curioso.
—No es eso, es que Menma se volvió malvado y provocó la Cuarta Guerra Ninja. Casi muero ante uno de sus ataques. Realmente no sé cómo llegué viva acá—contó rápido la chica.
—Oh oh, una versión malvada de papá. Eso es interesante—.
—¡Espera, ellos son…!—señaló la Hinata adolescente en shock.
—Una versión malvada del Séptimo, me cuesta imaginarmelo malo—mencionó Kawaki muy serio.
—Igual a mi, papá es amoroso y tierno. Nunca sería malvado—sonrió Himawari.
—¿Por qué se volvió malvado nuestro padre?—preguntó Boruto curioso.
—Ejem, bueno. No sé, siempre fue un genio orgulloso. Tenía mal humor, no necesitaba ayuda pero era ambicioso. Quería dominar todos los jutsus y de la nada llegó a Konoha con el cabello negro y largo—.
—Creo que entendí, Menma debió caer bajo el influjo del odio de Kurama. Naruto es cariñoso y amoroso por naturaleza. Aunque fue creció solo, no cayó en el odio porque valora los lazos. En cambio Menma es un genio en su esplendor. Eso lo hizo arrogante y todas las alabanzas fueron impulsando su ego. Eso lo hizo presa del zorro—.
—Hmp, ese niño Menma es un don nadie si cayó tan fácil ante mi odio. Naruto a pesar de ser un cabeza hueca, se las arregló para confrontarme—se vio salir a Kurama en forma de chakra dorado.
—¡Es el zorro!—se alarmó la Hyuga alterna con miedo pero nadie hizo algo al respecto.
—Si la Hyuga de otro mundo vino, entonces tu versión malvada está cerca. Puedo sentir su odio a muchas millas de aquí—le comentó Kurama al rubio.
—Ya sé, me encargaré de este asunto—.
—¿Son amigos del zorro?—preguntó consternada la Hyuga.
—Kurama es nuestro amigo desde hace tiempo. Menma y su versión del zorro no son afines como mi Naruto y su Biju—alegó Hinata Uzumaki.
¿Por qué todo era tan diferente aquí? ¿Por qué ese hombre que era Menma sonreía, se portaba bien y se veía tan seguro sin caer en la arrogancia? Se veía guapísimo con el cabello corto y estaba mamadisimo. Menma no la amaba, nunca la amó como quiso. El que la haya querido matar sin dudar la hacía pensar que su versión de Menma era sin duda un ser humano horrible para ser pareja.
—Hinata, puedes quedarte con nosotros. Estarás a salvo si viene Menma por tu vida—le invitó Naruto amablemente.
—Ah, gracias. Supongo—decía algo avergonzada la chica porque no estaba acostumbrada a que el rubio en su mundo fuera gentíl.
—Iré por el futón de invitados—se fue Yuna de ahí.
Hinata Hyuga, como le diremos a la versión alterna ya que era soltera, antes de la guerra era una mujer ruda y voluntariosa, de un pésimo carácter, todo por llamar la atención de Menma Uzumaki que siempre la ignoraba desde que tenía memoria y se hacía el digno.
El ver a Naruto siendo un padre amoroso y un esposo devoto a su otro yo que era una mujer muy buena y calmada, todo eso le daba una sensación de vacío y envidia total. Cuanto hubiera dado para que Menma fuera igual a él, si estuviera soltero iría por Naruto sin duda. Era bueno, tierno, maduro, algo tonto pero muy amoroso. Mimaba a su esposa y daba cariño a todos. Lo era grosero, se le daba por ser generoso ante todos y tenía un carisma único del que Menma carecía.
—¿Te sientes cómoda, Hina?—le llamó su otro yo adulto de forma acortada.
—Es raro saber que soy yo—.
—Aunque somos la misma persona, no nos hemos fusionado. Somos incompatibles por nuestras personalidades distintas—.
—Entiendo, aún me cuesta entender el concepto del multiverso. ¿Puedes decirme como es que le hiciste para que Naruto se fijara en ti?—preguntó la Hinata RTN a la peliazul adulta.
—Hmmm, se dio sólo. Naruto fue huérfano a diferencia de Menma. Siempre lo amé porque me daba fuerza. Ambos nos reconocimos y admiramos el uno al otro. Cuando crecimos vimos cuanto nos amábamos, Naruto fue el que se me declaró—.
—A mi nunca se me declararía Menma. Es un sujeto que no sabe amar o se le olvidó. Quiso matarme apenas me vio la última vez—.
—Sí Menma es Naruto, el destino de ustedes dos es conocerse y amarse. Puede que apenas sea el inicio de su historia. Menma seguro que está sumido en su odio y ego, hasta que alguien le dé una lección de humildad no va a aprender. Eso me recuerda al Neji de mi mundo, puede que tu Menma sea solo un estirado que necesite unas nalgadas estilo Uzumaki—.
La seguridad de alguien calmada como su otro yo le daba mucha tranquilidad. Le tenía una fe extrema a su marido y eso es lo que hubiera querido que pasara. Aún así estaba preocupada de que Naruto fuera asesinado por Menma.
—Menma se acerca, puedo sentir su chakra maligno a kilómetros de acá. Prepárate, Naruto no quiere ayuda, ni la necesita. Así estará más parejo este asunto—le invitó la peliazul adulta a la menor.
—Menma es muy poderoso. Fusionó a los Bijus dentro de su versión del Nueve Colas. Es invencible—.
—Cariño, confía en Naruto—fue lo último que dijo la mujer ante ello.
Todos estaban reunidos afuera de la casa y Naruto se puso su capa Hokage porque era asunto oficial familiar. Este esperaba a que su otro yo llegara y efectivamente este llegó con su atuendo azul maligno salvaje.
—Así que el zorro tenía razón. Este mundo debe ser subyugado a mis pies. Jajaja, que asco. Tú eres mi yo de este universo. No, uno de nosotros debe morir. No soportó verte, eres débil—sonrió el adolescente malcriado lleno de maldad y odio.
—Yo solo oi: Pegame, pegame y sigue pegándome. Te lo diré una vez, rindete o te esperará la peor humillación de todas, de veras—le avisó el Hokage.
—Ja, no eres nadie en mi contra. Si tanto te haces el poderoso, intenta vencer a mis secuaces—.
Las 9 Bestias Enmascaradas de Menma fueron a atacar a los presentes y eran tan poderosos como un Biju pero estos se encogieron para la sorpresa del villano.
—Ataca limpio, esta es un sparring del clan Uzumaki a partir de ahora—declaró Hinata Uzumaki con su ojo izquierdo dorado lleno de Dharma.
—¿Desapareció mis bestias? ¿Esa es la estúpida de Hinata? Ahí esta la que yo conozco sin duda, debe ser su otra versión. No importa, la mataré acabando con mi yo débil—pensó el Uzumaki maligno.
Menma no perdió el tiempo y sacó a un gigantesco Kurama de su ser que era mucho más grande que el normal y de un color más oscuro. Este rugió ante la familia Uzumaki y Naruto le dio una poderosa patada activando el Modo Barión Perfecto de golpe.
—¡¿Qué fue eso?!—maldijo Menma viendo esa transformación que desconocía.
—¡¿Qué le pasó a Naruto?!—dijo la Hinata alterna en shock.
—Es un modo muy difícil de alcanzar para los jinchurikis. Por eso dije que Menma no tiene una oportunidad contra Naruto—sonrió la Uzumaki peliazul.
—¡Tú puedes papá!—alabaron Yuna y Hima ante la pelea.
—¡Maldito!—rugió el Kurama malvado pero apareció un Kurama rojo de chakra del Modo Barion.
—Ni con el chakra de los demás Bijus tienes oportunidad contra mi—declaró el Kurama original.
—Ahora somos tú y yo, nadie te va a defender, Menma—se paró Naruto con su voz gruesa por el efecto del poder Biju.
—¡Maldito, no te vas a burlar de mi!—.
Menma no entendía porque estaba perdiendo, tenía el poder de todos los Bijus, absorbió todo el máximo poder, aprendió a controlar la energía natural y combinó el Modo Sabio ahora y no así.
—¡Maldita sea, Dai Raseringan!—lanzó el pelinegro un poder que destruiría el área.
—Imprudente—.
Naruto simplemente tomó el poder usando el chakra de sus colas y lo desvió al cielo ya que conocía tan bien la técnica que nada lo sorprendía.
—Te pasaste de listo, esto podría haber dañado a mi familia. Ya perdí la paciencia—.
Hinata Hyuga veía como es que Menma estaba recibiendo la peor paliza de su vida a manos de su yo adulto bad ass. Su antiguo ídolo no era invencible, lo peor del caso es que el uso de cobardes tácticas eran neutralizada una y otra vez por Naruto.
—¡Ora ora ora ora ora ora ora!—empezó a dar puñetazos el rubio a un Menma que estaba escupiendo sangre por tanto golpe.
—Estoy perdiendo, no puede ser. ¿Cómo es que alguien tan débil me está haciendo esto?—pensó muy alarmado el pelinegro con odio y rencor.
El pelinegro logró zafarse apenas y el Kurama malvado desapareció para este huir por medio del Hiraishin no Jutsu que dejó lejos de ahí solo para no caminar demasiado de vuelta.
—Se escapó como cobarde, esas heridas no van a matarlo. Va a querer vengarse de seguro—mencionó Hinata Uzumaki a todos.
Mientras tanto, Menma estaba sanando a duras penas en algún lado oculto del reino Kitsune sin poder salir de ahí ya que debías tener un permiso especial para teletransportarse.
—Maldita copia débil, ¡me las vas a pagar apenas me recupere!—reclamó al aire el jinchuriki malvado.
En ese instante, había una kitsune en forma humana jugando en un columpio como niña chiquita a pesar de una apariencia mayor y Menma se acercó a ver que efectivamente era una Kitsune de 9 Colas.
—Tal vez si robamos su poder, podamos vencer a esos infelices—se oyó la intención de Kurama en la mente del rubio.
El Uzumaki fue tras la Kitsune pelirroja que apenas lo vio y sintió un instinto maligno de su lado así que se evaporó en humo.
—Maldita, tiene Ninjutsu Espacio-Tiempo—.
El Uzumaki no estaba recuperado pero tardaría poco en recobrar su potente chakra que robó de todos los Bijus. El Kurama malvado se sentía enormemente humillado que su versión fragmentada estándar lo haya derrotado así de fácil, así que tuvo que tragarse su orgullo para hacer algo.
—Mocoso, te daré más de mi verdadero poder. Sólo así podrás ganar—declaró el zorro en su interior.
—Así que guardabas un as bajo la manga. Muy bien, estoy listo—.
Una semana después, sintieron llegar a Menma de nuevo con su nuevo Modo Kurama de color naranja oscuro y se había vuelto más poderoso. Incluso usaba ahora el Modo Sabio en conjunto para tener más posibilidades de vencer. Nada podía salir mal, ¿verdad?
—Esta vez me encargaré de ti, papi no tiene tiempo para ti. Soy Yuna Uzumaki, tu hija en una línea temporal alterna y te detendré, de veritas—se presentó la pelirroja.
—Una hija mía, interesante. Tal vez te deje vivir, un emperador necesita un heredero. A menos que seas débil, no te tendré piedad por ser hija de mi yo débil—.
—¿No eres tu la versión débil?—.
Menma enfureció al oír que esa mocosa insolente lo llamó débil y la atacó sin piedad pero ella activó un ojo muy raro que jamás había visto y un tatuaje en medio rostro y brazo derecho de color morado.
—¿Te gusta el Kung Fu? Pues prepárate para una paliza—le desafío la niña deteniendo su golpe.
La mocosa era buenísima en Taijutsu, literalmente estaba sellando cada punto de chakra que tenía y apenas podía destaparlo a tiempo por el chakra del zorro. ¿Qué es ese sello que recorría su cuerpo?
—Maldita, ¡nadie es más fuerte que yo!—.
Este atacó con brazos de chakra de Kurama pero Yuna respondió con brazos de chakra de color azul que provenían de Kaguya en su sello.
—¡¿Qué demonios?!—.
—No voy a usar los huesos especiales o lo mataré. Intentaré con los cabellos de conejo—pensó la Uzumaki pelirroja.
La chica le clavó bastante cabello endurecidos de forma que lastimó a Menma bastante y ni siquiera el chakra de Kurama le ayudó.
—¡Huye rápido, esta niña es la reencarnación de la madre del viejo sabio!—le avisó Kurama a Menma.
—¡¿De que hablas?!—.
—¡Huye ahora!—.
—¡Recibe la técnica especial que me enseñó el señor Hageshi!—exclamó Yuna en el aire que hizo aparecer algo.
—Pero que...—.
—¡Rodadora aaaah!—.
Una apisonadora aplastó a Menma y este comenzó a golpear el aparato para evitar ser dañado mientras que Yuna seguía con la escena.
—¡Ora ora ora ora ora!—se oía a Menma en el lugar.
—¡No podrás escapar ahora! ¡Muda muda muda muda muda muda!—.
—¡Ora ora ora ora ora ora!—.
—¡Muda muda muda muda! ¡Esto acabó para ti!—.
Todos veían con una gota de sudor la escena y Hinata tenía una chancla con el nombre de Hageshi escrita para él ya que no se hablaba de Jojos.
—¿Esto se terminó?—preguntó Boruto a ellos.
—Sí, miren—señaló Hima a todos.
Menma estaba tumbado en el suelo con el cabello rubio de nuevo ya que Yuna absorbió un chakra maligno que lo tenía poseído y nublaba sus pensamientos.
—Finish him—se oyó al narrador de Mortal Kombat en el ambiente.
Hinata Hyuga RTN notó el cambio del cabello de Menma y no sabia que pasaría ahora. Por si las moscas sellaron el chakra de Kurama de forma tan fuerte que no se manifestaria hasta que se lo permitieran.
—Le pusiste sellos hasta en los sellos—le dijo la Hinata adulta a Naruto.
—Sé como es Kurama, va a intentar querer salir de nuevo. El sello de Menma estaba muy roto y débil, por eso fue poseído—declaró el rubio ante el asunto.
—Ya veo—.
—¿Se va a quedar con nosotros?—.
—No, irá a prisión—.
Así fue como Menma amaneció en la municipal con Kitsunes delincuentes y ahí estaban los policías zorros que vigilaban a los delincuentes.
—Mierda, ¿donde estoy? ¿Qué es este lugar?—se preguntó este para intentar escapar pero su chakra estaba sellado bien fuerte y no podía oír a Kurama.
—Tranquilo güero, no saldrás de aquí en mucho tiempo—se oía a un policía que se parecía a los judiciales de la Hora Pico.
—¡No saben con quien se meten!—.
—Díselo al juez, rubiecito—se fueron los polis de ahí.
