Capitulo 1
Recuerdos del pasado
Era de noche, y la luz de las estrellas caía sobre los tejados de las cuadradas casas de
Privet Drive. El calor, aun de noche, era sofocante, por lo que sus habitantes se veían
obligados a dormir con las ventanas de sus casas abiertas. Bueno, no todas las
ventanas estaban abiertas, había una excepción. Una de las ventanas del número 4 de
Privet Drive permanecía cerrada. En el interior de esa habitación, un muchacho de
pelo negro azabache, ojos verde intenso, gafas, y una extraña cicatriz con forma de
rayo en la frente estaba tumbado boca arriba en su cama, con la mirada perdida en la
oscuridad.
Harry Potter no lograba conciliar el sueño. Cada vez que se conseguía dormir, a la
media hora le despertaban las horribles pesadillas sobre la muerte de su padrino,
Sirius Black, en el Departamento de Misterios del Ministerio de Magia. Le veía caer
en el velo, y la horrible expresión de triunfo en la cara de la mortífaga Bellatrix
Lestrange.
Harry miró el reloj. Faltaban 15 minutos para las 12 de la noche, 15 minutos para que
cumpliera 16 años.
Sabía que en cuanto dieran las 12, le llegarían las cartas de todos sus amigos, pero
eso no le hacía ninguna ilusión. La carta que más le gustaría recibir sabía que nunca
más le volvería a llegar: la carta de su padrino.
Su mente voló hasta el año pasado en Grimmauld Place, y recordó lo contento que se
había sentido Sirius al volver a estar acompañado por Navidad. Nunca había estado
de tan buen humor, incluso le recordaba cantando villancicos.
Luego pensó en su tercer año en la escuela, cuando Harry pensaba que Sirius fue
quien entregó a sus padres a Voldemort, y como había estado dispuesto a matarle
cuando se encontrón con él en la Casa de los Gritos. Recordó también la propuesta de
irse a vivir juntos que le había hecho su padrino. Le dijo que cuando quedara
demostrada su inocencia, Harry podría dejar a los Dursley. Si hubieran sabido como
acabaría todo…
Volvió a mirar el reloj. Faltaban ya tan solo 5 minutos para las 12.
Harry se levanto y fue hacia la ventana, la abrió y dejo que el aire le diera en la cara.
Sabía lo que seguramente dirían las cartas de sus amigos: que tratara de no
deprimirse, que la muerte de Sirius no fue su culpa, que él no querría verle llorar.
Pero eso no le animaba, porque sentía que sí fue su culpa. Que si no se hubiera
tomado tan en serio aquel sueño, Sirius ahora seguirá vivo. No sabia que era
exactamente lo que quería que sus amigos le dijeran, no sabia si en realidad quería
que le dijeran algo.
Miró de nuevo el reloj para tratar de alejar de el los pensamientos sobre su padrino.
Ya eran las 12.
Se volvió hacia la ventana, esperando ver en cualquier momento aparecer las
lechuzas con sus cartas.
Pero no apareció ninguna lechuza.
-¿No hay ninguna lechuza? –murmuró Harry -¿No se habrán… olvidado de mi
cumpleaños?
Harry permaneció un rato más frente a la ventana, con esperanza de que solo se
hubieran retrasado un poco. Pero no, las lechuzas no llegaban.
Entonces, un grito lo saco de sus pensamientos, dándole un susto de muerte.
-¡HARRY POTTER!
Esa era la voz de Tío Vernon. ¿Qué querría a estas horas?
Para felicitarle por su cumpleaños seguro que no era.
Harry salio de la habitación y bajó las escaleras algo asustado. No era normal que su
tío le llamara a las 12 de la noche, y tan enfadado como su voz dejaba notar.
Cuando llegó abajo, pudo ver a sus tíos y a su primo Dudley frente a la entrada.
Si Tío estaba rojo de la ira, su tía Petunia tenía una cara de gran asombro mezclado
con miedo e ira, y Dudley se agarraba al brazo de su madre como si quisiera que le
protegiese de algo.
Pero entonces Harry fijó su vista en al puerta, y lo que vio hace que casi se desmaye.
En la puerta estaban sus dos mejores amigos: Ron Weasley y Hermione Granger.
Bueeeeeno... Hola!
Aquí esta este primer capítulo... Espero de verdad que os haya gustado. Esta es la primera hsitoria que publico en Fan Fiction. Ya tengo escritos hasta el capítulo 5, pero quiero reviews! xD Plis!
Venga, Chao!
Raquel-52
