Capitulo 3
Ya había salido de la tina de baño dispuesta a marcharse directo al Sengoku, pero haría algo primero, se coloco el pantalón que usaba normalmente para entrenar, de color blanco y con termino en campana, una playera de tirantes blanca, tenis se recogió el cabello en una coleta alta, saco de su armario una maleta y comenzó a poner ropa dentro de ella, la igual que objetos que pudiera utilizar, recordando con alegría como lo hacia cuando tenia sus aventuras en el Sengoku al terminar salio del templo, caminando por las calles de Tokio, ya comenzaba a atardecer, pues los tonos anaranjados en el cielo se lo indicaban, acelero el paso hasta llegar al dojo de la familia Fujimori, el cual era el hogar de Yoshino y lugar de entrenamiento para ambos, prácticamente su segundo hogar.
Entro sigilosa ya que no planeaba dar a conocer su visita, mucho menos entretenerse, el tiempo, como si de molestarla se tratara avanzaba rápido, camino hasta una de las paredes del dojo y ahí como esperándola se encontraba su espada, regalo de su abuelo el año antepasado, aunque parecía que hubiera sido apenas ayer.
Flash Back
La fiesta en si era normal, globos, comida, regalos, pastel… bueno en si una fiesta normal, trascurría el tiempo pero parecía como si nadie se quisiera marchar, todo era muy divertido, pronto llego el momento de abrir los regalos, el primero fue el de Yuca, el cual era un portarretratos en forma de flor con la foto de las cuatro de unos dias después de la graduación, el de Ayumi una conejo rosado de felpa, Eri unos aretes de estrellas, Yoshino un collar del cual dentro extrañamente se encontraba su fragmento de Shikkon, el collar era muy fino con acabados en oro, tenia de dije un ovalo de cristal rodeado de oro y en el centro se veía el fragmento puro en su totalidad, sonrió y se lo coloco, nunca se hubiera esperado eso…ni mucho menos quiso imaginar como consiguió su fragmento, pero no era momento de preguntar, paso rato y todos comenzaron a irse a sus casa, pues ya pasaban de las 9 y al día siguiente tenían clases, recogió los pocos trastes y el desorden de la fiesta, recordando que su madre le dijo que su regalo la esperaba en su cuar5to, asi que termino de recoger con ánimos, deseo por un segundo que sus amigos estuvieran con ella, que la acompañaran aunque fuese por un segundo, descarto la idea y siguió con lo que hacia , al terminar se dirigio a su cuarto cuando su abuelo se le atravesó impidiendo seguir, sus palabras aun eran claras
Abuelo que ocurre? –pregunto imaginado cualquier historia que su abuelo le contaría
Deseo darte tu obsequio de, pues no creí necesario dártelo en la fiesta además había muchas gente y…
Cual es abuelo?...no me digas que es uno de tus amuletos por que…
No, no es eso…mas bien es una herencia, que te pertenece
Me pertenece?...a que te refieres abuelo?
Mejor tómala, se que te gustara- le dijo extendiéndolo una caja rectangular con extraños símbolos en ella, al parecer nombre, uno de ellos le llamo la atención, quito el poco polvo de sobre ella y la sorpresa la confundió
Mi..Midoriko? abuelo..ella es..
Si tu tatara tatara tatara etc. abuela creo, en pocas palabras eres su descendiente directa- las palabras del abuelo permanecieron en su mente hasta llegar a su cuarto y tirarse en la cama, que acaso el destino le jugaba una mala broma, pero no, asi no era, parecía que nunca se libraría de su pasado, se acerco a la caja la cual había dejado en su escritorio al entrar y la abrió, dentro su encontraba una espada, con perfecto filo, en su mango un dragón tallado en el, y sonrió, tal vez no era tan malo ser su descendiente….
Fin del Flash Back
Sonrió al momento que tomaba la espada con su funda y la enfundaba, dio vuelta, aun mirando su espada al levantar su vista sus ojos se abrieron de la sorpresa, allí en la puerta, se encontraba Yoshino recargado, con los brazos cruzados y un pie recargado en la pared, contuvo las lagrimas al recordar la vez en que ella se despedía de su madre e Inu Yasha la esperaba en la puerta del templo del pozo, siguió su camino pasando de largo al joven…
asi que te marchas…?- susurro, a lo que Kagome se detuvo dándole la espalda, no deseaba verlo, si lo hacia sabia que no tendría las fuerzas para irse
asi es….tengo asuntos que atender
si es asi….por que entras como ladrón, en vez de tocar y avisarme?
Ambos sabemos que no me dejarías dar un paso fuera del dojo Yoshino…además no tengo mucho tiempo
Es que acaso no lo entiendes?- se desespero, si lo hizo, no deseaba que ella volviera a ese lugar, sabia que si lo hacia no la volvería a ver, o temía verla de nuevo triste vacía, sin ganas de vivir, como el día cuando la conoció
Crees que no? eso crees?- se giro para enfrentarlo, ahora si derramaba lagrimas pero de coraje, coraje al saber lo que el pensaba,- no confías en mi? ya no soy una niña! Ya no caeré de nuevo…eres tu el que no entiende cual es mi lugar Yoshino…- susurro de nuevo calmada
…..-silencio, eso fue lo que hubo entre ellos, grandes amigos, ahora solo dos personas que ocultaban sus sentimientos, uno de amor el otro de confusión…(adivinen quien es quien) sin saber lo que les esperaba a ambos
Adiós…-se giro y comenzó a marcharse Yoshino la vio alejarse como sabiendo que no la volvería a ver…
Corría lo mas que podía, ya era muy tarde las estrellas ya empezaban a verse en el inmenso azul oscuro del cielo, algo dentro de ella gritaba de emoción al ver ya cerca el templo, pero otra parte la aterrorizaba con dolorosos recuerdos, subió de dos en dos las escaleras del templo, entro hasta su casa y directo a su cuarto, oyendo tras de si las palabras confusas de su madre, se saco la ropa que traía puesta, tomo una mini-falda negra, con un top de tirantes gruesos y con escote en "V" se coloco un cinturón en donde coloco su espada, su puso sus botas, tomo un pedazo de hoja y una pluma explicando lo sucedido, tomo la maleta que preparara antes de marcharse con Yoshino y salio directo al pozo, tomo la perla entre sus manos y una pregunta se formo en sus mente ¿Cómo era que kikyo sabia que el pozo estaba sellado? O ¿Por qué le entrego la perla si ella sabia que poseía aun el fragmento de la perla, salto sin duda al interior del pozo, lo averiguaría al llegar, las luces violáceas la rodearon, sonrió nostálgica y en pocos segundos ya estaba del otro lado del pozo, lo supo al levantar su cabeza y ver el hermoso cielo bañado de estrellas que tanto adoraba ver con Inu Yasha, salio del pozo con agilidad, y se quedo virando el cielo, sin importarle si la vieran o no, solo mirando, sin percatarse de la presencia que se acercaba tras de si.
Tu eres?...- esa voz la hizo estremecerse, y sentir su corazón latir rápido, no esperaba que fuera tan rápido el encuentro, sonrió y se giro quedando de frente con aquella persona…
