Capítulo Seis: La Aventura Comienza

Como ya se menciono antes, la bruja Hiwatari, vivía en una de las ciudades de los alados. Ella es la hija de Helios, consejero de Melbu Fragma. Sin embargo también es la dama de honor y compañía de Charles Fragma, la hermana del gobernante de los winglies. Ella vivía con su esposo y con sus tres hijos. Además de algunos magos que fueron refugiados por esta familia. Los hijos de Rowena recibían clases en una especie de colegio, junto a los chicos descendientes de winglies. Los Hiwatari eran respetados, por la cercanía que tenían a los líderes de su raza, pero eran, en cierto modo, repudiados, simplemente porque este trío sobresalían con sus aptitudes en hechizos, el buen manejo de las armas y en magia realizada con el simple hecho de pensarla.

El día que a Rowena le había llegado la carta de Helga, los chicos se encontraban en su escuela. Era el receso. Perseguían sigilosamente a una chica de cabello platino.

– ¿Listos? –les preguntó su hermana, quien engalanaba un vestido blanco con celeste. Poseía el cabello gris azuloso, al igual que ellos.

– ¡Listos! –le contestaron los jóvenes, uno de ellos vestía un traje albo, pero con tonalidades negras y marinas. El otro, mucho más alto que su hermano, nívea su vestimenta, con tonalidades grises y verdes. No podían usar túnicas, puesto sólo los humanos lo hacen. Tenían que utilizar ropas winglies.

– ¡Demaius! –dijeron los chicos al unísono, mientras su hermana realizaba un conjuro para alejar a las personas del lugar. La joven a la que perseguían se desmayó.

– ¡Rápido, no sé cuanto tiempo podré resistir más¡Llévenla a un salón!

Hicieron lo que les ordenó. (N. A.: Ya quisiera que mis verdaderos hermanos me obedecieran). Al cabo de unos minutos, ella ingresó al aula. Cerró, roció en la puerta una sustancia verdosa.

–Sostenla Alan. –ella sacó una varita de su bolsillo, larga, de madera de caoba. La colocó en su sien, rápidamente, unos hilillos de plata se pegaron a ésta.

–Iris¿para qué necesitamos sus recuerdos? Nos meteremos en problemas, es la sobrina de Fausto, la mano derecha de Fragma.

–Kai, dame el frasco.

–Toma. –le dijo con indiferencia.

–Respondiendo a tú pregunta Al, en ella se encuentra algo de nuestro interés. Hace unos días, en los servicios de las chicas, oí sobre las sospechas que se han levantado en todo Ululara. Muchos han fijado que dentro de la sociedad winglie hay traidores…

– ¿quieres saber si están detrás de nuestros padres? –comentó Kai, algo sorprendido por la noticia.

– Sí, por eso necesito esto. –Muestra el frasco, pero ahora lleno de un líquido plateado. –Podríamos dejarla aquí, sin embargo, hay que volverla a su estado normal. –sale del salón.

–No comprendo a tu hermana. –dijo Alan, moviendo la cabeza en forma de negación.

–Muy gracioso, para tu desgracia, también es la tuya. –expresó, él fue a la puerta. –Iris ya volvió a hacer el hechizo, rápido.

Los chicos sacaron a la joven, le aplicaron el encantamiento a cierta distancia, (¡Enevarte!), se levanto y siguió como si nada estuviera pasando. Había acabado el receso. Alan volvió a su clase, al mismo tiempo que los gemelos regresaban a la suya.

–Iris, es la primera vez que te arriesgas demasiado, nunca lo pensé de ti.

–Creo que es hora de terminar con esto, Kai, en casa hablaremos de esto. –mencionó si ver a su hermano.

–Hum… -fue lo único que le contestó.

Pasaron a la clase de Historia. Como siempre, aburrida, sin embargo se forzaron a si mismos a copiar los apuntes. El maestro era un winglie mayor, por lo que debería tener unos 3,000 años, (N. A.: esta especie es muy longeva, por eso, los padres de ellos, no envejecen), sin embargo solamente hablaba y hablaba, (N. A. ¿se le es conocida la escena?). Finalizó la clase al cabo de una hora.

Ahora se dirigían a Esgrima. Esa asignatura les encantaba. Aparte que se impartía en el patio, era emocionante para ellos, en especial, cuando ambos se enfrentaban. Al término de ésta, el sujeto que la impartía, les comentó sobre un arma que se había fabricado hace unos días, la Dragon Búster, capaz de exterminar a los Dragoons. Eso les causó dentro de sí un nerviosismo, pero disimularon al no mostrarlo ante los demás. Entraron de nuevo al edificio.

–Que bien, lo único que nos faltaba, un arma que pueda destruir a los caballeros dragón. ¿Qué puede ser peor?

–Cálmate, Iris.

–Está bien, por suerte sólo nos resta la clase de Encantamientos.

Al concluir el horario escolar se reunieron con su hermano. Se dirigieron al transportador, un círculo de verde fosforescente, cuando se activó, dos haces de luz, en forma diagonal los rodeó. Una luz vertical del mismo color, los hizo desaparecer. En otro transportador, se realizaba la misma acción. Ahí reaparecieron. Caminaron las calles pavimentadas de mármol gris y blanco. Llegaron a su casa. Entraron a la biblioteca.

–Tengo algo que comentarles –mencionó Alan, al mismo tiempo que su aspecto cambiaba al original. Era un chico de 17 años, que se podría decirse que era la viva imagen de su padre, a excepción que su cabello es de un tono más claro y es más largo, siempre lo trae amarrado en una coleta. Como se ha visto, es un joven justo, inteligente, leal, tranquilo, sereno, caritativo, aunque esta apariencia puede modificarse si se le hace enfadar, podría causar daño a la persona que lo irritó.

– ¿Eh? –contestaron al unísono los gemelos. También volvieron a su semblante natural. Ambos poseen 16 años, son idénticos hasta el último detalle, con excepción claro que la chica tenía un pelo lacio y largo, como el de su madre, con un flequillo plateado, mientras el chico, su cabello era alborotado, eso sí, bicolor como el de ellas. Ambos tenían ojos escarlatas, carácter frío, un poco antisociales, no demuestran con facilidad sus sentimientos, como se ha observado.

–En la clase de Artefactos Mágicos, nos informaron que fabricaron la Dragon Block Staff, obstruye el poder de los Dragoons y de los dragones.

– ¿Y decías que no podría irnos peor, eh Iris? –mencionó con ironía Kai, mientras se recargaba en la pared y cruzaba los brazos.

–Muy gracioso, me muero de la risa. –contestó con sarcasmo. –Al, antes de la linda interrupción de nuestro hermano –lo miró con cierto enojo, a lo que él respondió con un simple "Hum", y desvió su mirada. –En Esgrima nos comentaron acerca de la Dragon Búster… –le empezó a contar.

–Melbu Fragma ha ideado la manera de contrarrestar los poderes de los dragones. Debemos advertirle a nuestro tío. ¿Iris que haces? –le cuestiona al ver que saca algo de una vitrina.

–El Pensadero¿Qué otra cosa? –traía en sus manos un caldero con una piedra con escritos rúnicos, adentro de éste había una sustancia parecida a aire licuado, de tonalidad plateada. Lo puso sobre una mesa. –Kai, dame el frasco.

–Hum. –se lo entrega. –Te lo repetiré de nuevo, hoy tomaste un riesgo demasiado alto.

– ¡Exacto, por primera vez estoy de acuerdo con Kai, sé que lo hacías por nuestros padres, pero ¿y si nos descubrían?

–Entonces no me hubieran ayudado. –les expresó cortadamente, al mismo tiempo que echaba los pensamientos de la winglie al pensadero.

–Eres nuestra hermana, "por desgracia" somos tu familia, así que no nos quitarás de encima mientras te apoyemos ¿Cierto Kai, –movió su cabeza en modo afirmativo –mira, hasta el amargado está acorde conmigo.

–Eh… Gracias. –detonándose una sonrisa en su rostro. Ella posa sus dedos en sus labios. –hace tiempo que no sonreía. –pensó. Saca su varita y empieza a remover el contenido del caldero. –volviendo a esto, escuchen y vean.

Tocaron la sustancia. Sintieron que se trasladaban a otro lugar. En él, se veían unas imágenes dentro de una habitación, en la cual se encontraban unos winglies adultos con esta chica, deben ser sus padres. Se nota que discutían de algo…

–Muchos humanos se están organizando, según nos menciona El Gobernante Fragma, ha ordenado que reforcemos la seguridad en cada ciudad, en especial en Kaadessa…

– ¿Han encontrado a los iniciadores? –inquirió la mujer

–Por ahora, lo único que sabemos quien los dirige se hace llamar "Emperador Díaz". Sin embargo, existen los rumores que aún hay magos…

–Imposible, papá, fueron exterminados ¿no, a causa de la tonta leyenda de los guardianes…

–Muchos piensan que puede ser cierta, Cidene, habría los astutos que lograron escapar. Incluso, puede que haya entre nosotros los organizadores…

– ¿por ejemplo?

–Hay winglies que respetan a la familia de Helios y a la de Vhartel, pero algunos, apuntan directamente a sus hijos, pero no hay pruebas suficientes, además que esos clanes son de un linaje de alados, y de los más poderosos, después de los soberanos.

Iris no quiso permanecer un minuto más. Retornó a la biblioteca. Lo que sospechaba era cierto, entonces sus padres estaban en riesgo. Su progenitor era descendiente directo de Vhartel, aunque jamás había simpatizado con su abuelo, sabía que él era una alado, mientras su abuela, Angelina, era una hechicera. Debía advertirles a Rowena y a Charlie.

– Sabemos que estás preocupada. Es la primera vez que no te muestras tan fuerte. –le mencionó su hermano mayor, una vez que los chicos también salieron de los recuerdos de Cidene. Ella no le hizo caso, abrió la puerta, pero al no fijarse, se tropezó con alguien que había querido entrar a donde ellos estaban.

–Hey, deberías fijarte por donde vas, ángel mío. –La sostuvo justo a tiempo, antes que ella cayera al suelo. Era su padre.

–Lo siento, mi mente estaba en otro sitio.

–No hay cuidado. He venido a buscarlos, su madre y yo queremos conversar con ustedes. A propósito¿qué están haciendo? –preguntó al ver el pensadero.

–Eh… un proyecto del colegio, eh… una poción. –mintió rápidamente Alan

– ¿los tres? –cuestionó con el entrecejo fruncido.

–Eh… si, yo les estaba enseñando como hacerla…

– ¿con el pensadero?

–Yo lo utilice, padre. –Murmuró la joven –nosotros también debemos decirles algo.

–En fin, vamos al estudio.

Se trasladaron a esa habitación, la cual se encontraba en el mismo piso. Dentro de ella, Rowena los esperaba, con la caja abierta y las respuestas de sus amigos sobre la mesa. Su ave ya no estaba. Se había quitado los anteojos, vio a sus hijos con cierta tristeza.

–Como saben, muchos de nosotros hemos participado en esto de la rebelión…

–Madre, algunos winglies…

–Lo sé, mi niña, por eso, dentro de poco será el fin de mi rol en esta guerra. ¿Recuerdan que les mencioné acerca de los guardianes?

–Sí –respondieron al unísono los jóvenes.

El Tigre, El Dragón y La Tortuga, han seleccionado a sus elegidos. El Ave de fuego, decidió no sólo tener uno, sino que será dominado por aquellos que posean la mirada del elemento al que pertenece este espíritu, el Ángel cuidará de los protegidos de Dranzer y de Driger, además del suyo, mientras el Hechicero tendrá afinidad con los dragones, resguardándolos a ellos y a sus predestinados. Además de la tortuga.

– ¿Entonces, ya están los guardianes…?

–Alan, solamente faltaban los tres primeros, más aparte los de Dalia Fairywood y Strata Dragoon. Hace 10 años, el Fénix, seleccionó a nuestra familia, por así decirlo. El Ángel eligió a su predestinado, cuando ésta tenía 8 años. El Mago, su guardián tenía 9 cuando se decidió por él.

– ¿Quiénes son?

– ¿Aún no lo adivinas, mi joven alquimista? –se acercó a él– ¿Recuerdas algo?

– Alan y yo estábamos aquí, jugando. Nos escondimos de Kai. Era un atardecer. Los amuletos estaban sobre el escritorio. Algo sucedió…

– Fuimos envueltos en ráfagas de luz y oscuridad, Iris. Escuchamos voces, se dirigieron primero a ti… "Iris Meridell, cambiarás tu apellido a Hiwatari, será tu nombre de hoy en adelante, aunque puedas manejar a mi protegido, Dranzer, la luz y del sol necesita una guardiana de un poder extraordinario, en mi lugar te brindaré mis dones y mi cuidado. Contrarrestarás el poder del astro de plata, creando un equilibrio. Búscame en Denigrad, La Ciudad de la Vida"

–Exacto, después se refirieron a ti: "Alan, descendiente del Águila Sabia, poseerás el mismo apellido que tus hermanos, aún cuando no puedas manejar al ave de fuego. La oscuridad y la luna, dispensan de un ser de altísimo poder, pero que también un excelso grado de fuerza de voluntad, debido al gran peligro que ronda al usarlo. Encuéntrame en Dead Malfyl, la Metrópolis de la Muerte"

–Esperen¿ustedes son los elegidos? –dijo sorprendido Kai

–Mi dulce fénix¿por qué crees que los he llamado así?

–Mamá significa que él también…

–Lo vuelvo a repetir, ángel mío, Dranzer, hace 10 años, tomó su decisión. –la miró dulcemente.

–Pero si yo no he tenido contacto con el dije…

– ¿En serio? Cuando tenías 6 años, estabas en mi regazo, tú me lo quitaste por accidente… -le dirigió una sonrisa.

–Cuando un tornado de fuego nos encubrió a ambos… diciéndonos…

– "El más joven de tus niños, Kai Meridell, ahora Hiwatari, será mi guardián por toda la eternidad, una y otra vez que reencarnemos, nos volveremos a encontrar. Todos los poseedores de ojos de mi elemento, podrán utilizar mi poder, si llegan a ganar mi confianza. El fuego y poderes del sur te serán brindados, con ayuda de tu hermana y el Ángel, guíate a Serdio, en la zona volcánica"

–Sí eso fue.

– Ahora es el tiempo que vuelvan a sus manos. –saca los tres talismanes de la caja, en ese momento, brillan intensamente, uno de rojo, otro de blanco y el último de azul marino. Se los entrega –y el momento para empezar su travesía.

– ¿Qué? –gritaron al unísono

–Le harán un favor a su madre, irán a la tierra de los elfos. Rivellwood

–Padre, pero eso se encuentra…

–Lo sé en las tierras adyacentes a Serdio.

–Pero además, se dirigirán a Tiberoa. Deberán entregar lo que la gente hermosa les dé.

–Volverán para dentro de tres meses a Serdio, en el Bosque, adyacente a un lago, los demás elegidos los esperarán, de preferencia en la madrugada, cuando la niebla empieza alzar.

–Sin embargo, nos llevará más tiempo en dirigirnos a esos lugares…

–No, Alan, contarán con trasporte. Iris toma esta flauta de plata, cada vez que la toques, dicho trasporte aparecerá. Llegarán justos de tiempo con los otros chicos. No se pierdan del camino.

– ¿cuándo nos vamos? –preguntó Kai

–Mañana al amanecer

– ¿Mañana? -contestaron al unísono los jóvenes

– Así que comiencen a preparar sus cosas. Un favor más, Alan te encargo este cofrecillo. Contiene los amuletos restantes, sin embargo, no están forjados. Una hechicera se les reunirá, aunque lo duden en un principio, ella terminará mi trabajo. Duerman pronto.

Salieron del estudio, subieron al tercer piso, rumbo a sus habitaciones. En el pasillo, se detuvieron en seco, se vieron unos a otros. El silencio era incómodo, hasta que alguien habló:

–Bueno¿se esperaban esto, quiero decir, ser los predestinados? –preguntó Alan

–Por mi parte es grandioso, al menos las sospechas se acabarán, eso espero. Por otro lado, me alegra que… ustedes vayan conmigo, si voy a discutir con otros, por lo menos tendré quien me apoye. –le responde Iris, a ambos les da un beso fugaz en su mejilla y entra a su habitación.

– ¿Qué mosca le pico?

–No me preguntes. Pero estoy de acuerdo con ella. Será fascinante cambiar de modo de vida, para variar. No volver a ver al montón de winglies que tengo como compañeros, eso será lo bueno. –le expresó Kai, el también ingresó a su cuarto.

–Así que se van –dijo una voz

–Hola Lavitz. –le mencionó a un joven rubio de cabello al estilo corte militar, facciones duras, ojos verdes, tez entre blanca y morena. Vestía una capa verde oscuro, camisa gris, unos pantalones café y botines blancos. Tenía la misma estatura que él.

– ¿También Kai e Iris? –mencionó una voz fría.

– Yuriy¿tú también estabas escuchando¿Hay alguien más que falta por aparecer? –se sorprendió al ver a un joven de la misma edad de sus hermanos, pelirrojo, ojos violetas, tez blanca. Lucía una túnica blanco con tonos naranjas, una sobretúnica azul marino, zapatos negros.

–Solamente nosotros dos, fue por accidente¿a dónde vas Yuriy? –pero no le respondió. –En fin, queremos ayudarlos a empacar aunque solamente seamos sir…

–No lo son, al menos para mí. Son nuestros amigos y tiene derecho a saberlo. ¿Dónde están los demás?

–Dimitri (hermano de Yuriy, se parecía a él, con excepción que tenía 10 años, sus ojos eran verde azulados, y su cabello era mucho más corto) e Iván (pelo morado, chaparro, nariz de pinocho), en las cocinas, Sergei (rubio, alto, tosco) y Boris (cabello y ojos lavanda, alto), buscando armas para ustedes…

–No deberían hacerlo…

–Es un favor que le debemos a la Hechicera Rowena, ella nos hizo pasar por muggles cuando nuestros padres fueron asesinados por los winglies, además de acogernos en su casa.

–Gracias. Necesitaremos algunas pociones, ayúdame a traer algunas.

Mientras tanto, Yuriy había ido con Kai. A pesar que el bicolor lo negara, entre ellos había una especie de amistad, por así decirlo.

–Así que se van¿eh? –le cuestionó con indiferencia

–Sí, -contestó fríamente

–Bueno, al menos no tendremos aquí al mandón de Kai.

–Muy gracioso. Ustedes deberán entrenar mientras no estemos.

–Con la ayuda de Rowena y de Charlie, mejoraremos. Serán generosos, pero son muy estrictos en cuanto a entrenar ¿Cómo lo ha tomado, Iris?

–Piensa que es grandioso este asunto. –Miró al pelirrojo– ¿la extrañarás?

–Eh… yo… este… –de pronto se puso nervioso ante la pregunta, acompañado de un leve sonrojo.

–Kai, necesitaremos un poco de mandrágora, -entró la chica al cuarto. -lleva por… ah, hola Yuriy. –lo saludo al darse cuenta de su presencia.

–Ho… la… Iris –se sonrojó aún más.

–Hermano, Alan está trayendo algunas pociones, deberías ir por unas.

–Sí, en un momento. –le mencionó cuando ella salía de la habitación. –Vaya es la primera vez que noto que actúas extraño cuando mi hermana está presente. –le comentó al pelirrojo con el entrecejo fruncido.

–Cállate, son alucinaciones que te estás creando. –dijo en tono molesto.

–Si como no. –comentó con sarcasmo.

–Mejor iré a ver a los demás, si por acaso requieren mi ayuda. –se marchó de ahí.

–Le gusta –pensó Kai –Sin embargo, ella lo trata como un amigo, y no estoy seguro que pueda tratarla.

En la noche ya estaba todo listo. A la mañana siguiente, los tres jóvenes se levantaron temprano. Salieron de la residencia, en eso sus amigos salieron a despedirlos, muy a su manera, con un simple apretón de manos. Cuando Yuriv le tocó despedirse de Iris, la abrazó, cosa que sorprendió a todos, más aún, cuando ella respondió el gesto. Kai sintió un poco de celos al ver tal escena.

Sus padres los acompañaron hasta las lejanías de la ciudad, en el desierto. Aún se admiraban estrellas, se veía La Luna que Nunca se Oculta, su resplandor azul eléctrico con blanco, su parte oscura, cinco "satélites" que la rodeaban. Se notaban algunos rayos del sol. El lugar estaba tranquilo, frío, por lo cual, los cinco traían capas oscuras.

–Iris, toca la flauta. –le ordenó su madre.

De este instrumento, salió una dulce melodía. Pasaron varios minutos, hasta que en el cielo observaron que algo se acercaba a gran velocidad. Aterrizó frente a ellos, era una especie de manta raya de color celeste, con tonalidad café y dorada. Tenía dos grandes ojos rojizo-castaño, la parte inferior color crema. Les sorprendió a los chicos, pero aún más cuando habló:

–Espero que ya estén listos para el viaje.

–Hijos, les presentó a Coloon, el "ser alado" de Saban, encargado de la ciudad de Aglis. Coloon, ellos son mis descendientes, Iris, Alan y Kai. –Se quedaron sin habla. Sin embargo aceptaron subirse. Antes se despidieron de sus padres.

–Sujétense bien. –les expresó Coloon, mientras se elevaba. Cuando se alejaron, Charlie preguntó a su mujer:

– ¿Crees que estarán bien?

–Estoy segura de eso¿qué me querían decir los chicos?

–Sobre las sospechas que hay contra nosotros. Además de las nuevas armas winglies.

–Melbu Fragma quiere ganarnos la batalla, pero los guardianes y los Dragoons no se dejarán vencer tan fácilmente.

– ¿Sabias que usaron el pensadero para eso?

–Sí, aunque gracias a tu Legeremancia, hemos podido enterarnos como. Regresemos. –una lechuza posó en su hombro –Artemisa… es la carta de Syuvel.

Todo está bien, no te preocupes, ya alerté a todos sobre las armas. Investigaré formas de evadirlas.

– ¿Por qué siempre lo llamas hermano, si él es de mi familia?

–Por el simple hecho que es mi cuñado. –mira hacia un punto lejano. –buena suerte mis niños –pensó –empiezan las pruebas más difíciles de su vida.

Ambos regresaron a su casa. Rowena aguardaba el momento de reunirse con Godric, Salazar y Helga, dentro de tres meses, tres semanas.


Lechucería Hiwatari

Por fin, ya empieza la aventura con este trío, aunque solamente vayan a recoger y entregar ciertas cosas. El momento de reunión de los chicos está cerca, la búsqueda comenzará, y los elegidos restantes se unirán a ellos.

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