-Hola, ¿cómo están?- preguntó, pero al ver la cara de espanto de ambos, se extrañó -¿a ustedes que les pasa, parecieran que acaban de ver a un ogro, o algo así...
"En ogro se convertirá Wakabayashi si es que Lily se pone tan pesada como hace un rato" pensó Taro, rogando con todas sus fuerzas que Tsubasa no se fuera...
-Oye, Tsubasa, Sanae te espera en el cuarto de nosotras...- dijo Lily, mirando a Ozora con una sonrisa y con ojos de "ya vete de una buena vez, desubicado"
Tsubasa miró a Misaki, quien le rogó con la mirada que no se moviera de la habitación... no supo que hacer. Sabia que debía ayudar a su amigo en problemas pero si no iba con Sanae, el que iba a tener problemas era el...
-¿Qué te parece si llamas a Sanae y conversamos los cuatro?- dijo Taro de pronto, sonriendo nervioso, Lily lo miró suspicaz
-¿Te ocurre algo, has estado extraño conmigo...- le dijo ella
-¿Yo extraño, nah, no empieces con eso...- dijo Misaki, intentando pensar en algo para salir de esa nueva incomoda situación
-Ya, Tsubasa, si no te vas, Sanae se molestará contigo- dijo Lily, ya comenzando a correr a Ozora, quien miro a Taro pidiéndole ayuda... pero Misaki no alcanzó a hacer nada, puesto que cuando reaccionó, Lily ya había cerrado la puerta tras de ella y lo miraba de manera muy provocativa
-Por fin solos.- dijo ella, con voz seductora, acercándose a Taro moviendo muy provocativamente las caderas, cosa que lo hizo a él sudar.
-Este... ¿No crees que nos divertiremos más si salimos con Tsubasa y Sanae?.- Taro se hizo hacia la pared lo más que pudo, hasta chocar con ella.- ¡Ya sé! Vamos a espiar a Alisse y a Waka... a Misaki...
-Ya déjate de tantas tonterías.- lo cortó Lily, algo enfadada.- Todo el día has estado de lo más raro conmigo y ya me cansé.- Lily cambió nuevamente su actitud hacia la parte seductora.- Pero ya sé cómo quitarte esa indiferencia...
Lily se abalanzó sobre Taro y empezó a besarlo con mucha pasión. Taro se la quería quitar de encima, pero Lily era más fuerte de lo que él pensaba. Y mucho más rápida también. La chica empezó a quitarle la camisa a él y después sus manos recorrieron el abdomen y el pecho de Wakabayashi (es el cuerpo de él, no lo olviden). Taro no hallaba ni qué hacer, no quería seguir besándola pero le estaba resultando imposible el poder zafarse del ímpetu de Lily.
-No, Lily, espérate.- dijo Taro, cuando Lily lo soltó para tomar aliento.- No creo que sea prudente...
-¿Por qué no?.- inquirió Lily, ácidamente.
-Pues... Porque alguien puede entrar y vernos... .- Taro sudaba frío y buscaba desesperado una excusa.
-Naaa, Taro está con Alisse y Tsubasa con Sanae.- replicó Lily.- ¿Quién más podría venir?
-Este... ¡Es que puedes quedar embarazada!.- exclamó Taro, esperando que eso detuviera a la mexicana, pero salió peor.
-Me encantaría tener un lindo bebé, que fuese idéntico a ti.- sonrió Lily, feliz.- Deja ya de poner pretexto, no sé que te pasa hoy, en situaciones normales ya me tendrías tumbada sobre la alfombra...
"¡Ay, válgame!", pensó Taro. "Lily y Genzo son un par de conejos en primavera. ¿Por qué tengo que pasar por esto? ¡Quiero mi cuerpo de vuelta!".
Lily no admitió más réplicas. Esta vez, con una técnica diferente, una actitud mucho más suave e irresistible, hizo que Taro se acostara sobre el suelo. Lily se recostó sobre él y empezó a besarlo otra vez.
"¡Que alguien me ayude a liberarme de esta loca ninfómana!", gritó Taro, en su interior.
Por otra parte, la cita de Genzo y Alisse estaba de mal en peor, y para ambos no podía ser mas incomodo. Iban en silencio caminando por la calle...
Al poco rato llegaron a la feria esa y comenzaron a recorrerla, mirando distraídamente los puestos que iban pasando
-Oye, Alisse- dijo Genzo de pronto -¿en donde estaba la tienda esotérica esa que vieron ayer con Lily y Sanae?
-¿De verdad que quieres verla?- le preguntó Alisse –pensé que no te interesaban esas cosas, Taro... sobretodo por lo que dijiste hoy en el desayuno
-Solo quiero ver que tienen y que tan efectivos son los muñequitos vudú esos- dijo Wakabayashi, de manera despreocupada –me causan curiosidad
-Ah, claro... es por acá cerca...
A pesar que Genzo sabia muy bien donde quedaba la tienda esa, debía disimular, puesto que Farfán habría sospechado mas aun si se hubiera enterado que el día anterior habían entrado en esa tienda para esconderse precisamente de ellas
A los minutos llegaron, pero para desesperación de Wakabayashi, estaba cerrada. Miró con pesar a su alrededor...
-¿Te ocurre algo?- le preguntó Alisse, mirándolo con sorpresa ante la cara que había puesto al notar que la vieja de verdad se había ido
-No... es solo...
-¿Solo que, Taro?- insistió la chica
-¿No te dijo la vieja ayer a que lugar se iban?- le preguntó
-Que yo recuerde, no... ¿por qué te interesa tanto?
-Por nada- gruñó Genzo, pensando en su mala suerte. Ahora debía estar en el cuerpo de Misaki quien sabe por cuanto tiempo... –volvamos al hotel
-¿Qué te pasa, ¿te enojaste por algo?
-No me pasa nada, ¿quieres dejar de preguntar eso?- le dijo él, ya molesto por la mala noticia –sólo estoy cansado, pero si sigues preguntando tanta estupidez de verdad voy a tener motivos para enojarme
-¿Por qué me hablas así?- le dijo también molesta Alisse –nadie me saca de la cabeza que a ti algo te pasa, en serio. Y mas en cima, tu no ayudas a que se me quite esa idea...
-Deja de decir eso, volvamos al hotel, que ya es tarde
-Como quieras- le dijo ella, comenzando a caminar sin esperarlo –ah, y otra cosa, cuando tengas algún tiempo para mi te tengo que decir algo importante
Los dos caminaron de regreso al hotel a una distancia prudente, cual mas molesto. Cuando llegaron, se encontraron a Tsubasa, que llevaba unas bebidas en sus manos
-¿En que andas, ¿y Sanae?- le preguntó Alisse. Ozora miró a su amigo y comprendió perfectamente que la salida había sido un completo desastre
-Sanae esta en su cuarto- contestó Tsubasa –sólo bajé a buscar unas bebidas...
-¿Y Lily?- volvió a preguntar Alisse
-Eh... bueno...- Tsubasa dudó unos momentos, sobretodo cuando vio la cara que Wakabayashi estaba poniendo al suponer donde estaba
-Esta... en el cuarto de nosotros... con Mi... Wakabayashi...- se corrigió a tiempo
-¡¿Qué cosa!- gritó Genzo, Alisse lo miró sorprendida -¡¿por qué los dejaste solos!
-Oye, Taro, ¿por qué te enfadas tanto?- le preguntó Alisse
Pero Genzo no contestó, al contrario, dio media vuelta y se fue lo mas rápido que podía al cuarto. Alisse miró a Tsubasa, que se encogió de hombros, y luego, siguió a Wakabayashi casi corriendo
-Esto se va a poner feo...- murmuró Tsubasa –le avisare a Sanae que no podré ir de inmediato e iré a ver que pasa...
Wakabayashi iba echando maldiciones por todas partes, mientras avanzaba lo mas rápido que podía... si Misaki le tocaba un solo pelo a Lily lo mataba...
Después de lo que le pareció una eternidad, por fin llegó a su cuarto, momentos después llegaba Alisse e intentó detenerlo cuando comenzó a abrir la puerta
-Taro, no seas ridículo, déjalos solos...- le dijo, pero Wakabayashi la apartó
-Deja de molestar Farfán, no voy a permitir que estén solos
Alisse ya no dijo nada. Cuando por fin abrió la puerta, Wakabayashi encontró a Lily y Taro acostados sobre el suelo, besándose. Bueno, mejor dicho, Lily estaba sobre Taro y lo besaba a él con pasión, aunque Taro tenía cara de querer que se lo tragara la tierra o de que alguien llegara y le diera un tiro para liberarlo del sufrimiento.
-¡¿Qué demonios están haciendo!- les gritó, Taro lo miró con cara de pánico y Lily confundida
-Taro, ¿qué te pasa?- le preguntó Del Valle
-¡¡No pensé que ibas a traicionarme de esa forma!- le gritó Wakabayashi a Taro
-Pero...- comenzó a decir Misaki, pero Genzo no lo dejó terminar
-¡¡Cállate, no tienes como defenderte, ¡¡¡Te vi!
-Pero...
-¡¡No tienes como defenderte!- repitió -¡¡te pedí que no lo hicieras!
-Pero... espera, deja explicar...
Genzo se fue, sin querer escuchar nada. Taro miró a Alisse, que parecía no entender nada, lo mismo que Lily. Farfán, sin decir palabra, siguió a Wakabayashi
-¿Qué rayos le pasó a Misaki?- preguntó Lily, pero notó que Taro también iba tras de el -¿Dónde vas, Gen?- pero Taro tampoco dijo palabra
Lo único que Wakabayashi deseaba en esos momentos, era tener a Misaki frente a el y romperle la cara... o, al menos, se conformaba con dejarle la nariz sangrando
-¡Taro!- escuchó, era Alisse, que ya lo había alcanzado y se puso delante de el -¡¿qué diablos te pasa, ¿por qué les dijiste eso?
-¡Es algo que no te importa!- le gritó de vuelta
-¡Por supuesto que me importa!- le gritó la otra -¡estoy cansada de tener que andar tras tuyo para que me pesques, ¡dime de una maldita vez que es lo que te pasa!
-¡¡¡Que no te quiero, eso me pasa!- le gritó, sin pensar -¡que me tienes harto!. ¡Estoy enamorado de Lily, ¿cómo no te das cuenta!
Lo siguiente que sintió fue la mano de la chica en su mejilla, y recién en ese momento se dio cuenta de todas las cosas que le había dicho... ya las cosas no podían estar peor...
Ah, se equivocaba, en esos momentos, Taro llegaba
-¡Puedes pudrirte con tu Lily!- le gritó Alisse –lo que es yo no quiero volver a tenerte cerca...
Alisse se fue, y ni siquiera vio a Taro cuando paso cerca de el. Misaki miraba la escena confundido, sin comprender bien lo que había pasado antes
-¿Qué pasó, Wakabayashi?- le preguntó, acercándose a el
Por unos momentos, Genzo dudó en lo que debía decirle...
-Le... le dije a Alisse que estaba enamorado de Lily...- murmuró
Taro se quedó unos momentos mirando a Genzo
-¿Hablas en serio?- le preguntó, mirándolo. Al ver que Wakabayashi no contestaba, comprendió que no bromeaba -¡¿Cómo fuiste tan idiota para decirle eso!- le gritó, con deseos de golpearlo por su falta de cuidado
-¡Lo siento, pero es que también es tu culpa
-¡¿Mi culpa, ¿y ahora que hice?
-¡Si no hubieras estado solo así con Lily no me habría enojado tanto!- le gritó de vuelta
-¡Ya te dije que no fue mi culpa, ¡¡Lily fue la que fue a buscarme al cuarto!. Ahora, ¡vas a ir con Alisse e intentaras arreglar las cosas con ella!
-No
-¡¿Qué cosa, ¡¡¡vas a ir, Wakabayashi!- gritó Misaki, enojado y agarrando a su amigo del cuello de la polera, haciendo que chocara la espalda de Genzo contra la pared
Para suerte de Wakabayashi, en esos momentos llegó Tsubasa, que se apresuró a separarlos a ambos
-¡Déjalo ya, Misaki!- le dijo a Taro, haciendo que soltara al otro -¡¿Qué diablos les pasa a ustedes dos!
-¡Que el estúpido de Wakabayashi le dijo a Alisse que estaba enamorado de Lily!- dijo Taro, aun con rabia –imagínate como ha de estar ella...
-Debemos pensar bien que será lo siguiente que haremos- dijo Tsubasa, preocupado porque todo se les estaba yendo de las manos
Por otra parte, Alisse llegó al cuarto que compartía con las otras dos pateando todo lo que se le cruzaba. Al entrar, Sanae la miró con sorpresa al notar que estaba llorando
-Alisse, ¿qué te pasó?- le preguntó, acercándose a ella -¿estas bien?- insistió, la otra negó con la cabeza.
-Coqueta facilita.- murmuró Alisse, enojadísima.- Maldita...
Alisse, con la furia de un huracán, se dirigió a la habitación de... Sabe, no recuerdo qué habitación era, el chiste es que fue a buscar a Lily. La mexicana aun se encontraba tratando de adivinar qué había pasado. Se estaba abrochando la blusa y acomodándose el cabello cuando la chilena entró, encarándola.
-¡Maldita traidora! (¿se han fijado que cuando hago que alguien se enoje, siempre dice esto?).- gritó Alisse.- ¡Mala amiga!
-¿Qué te pasa, Alisse?.- Lily cada vez entendía menos.
-¡Tú! ¡Eres la peor arpía que conozco! ¡Eres una resbalosa ofrecida!.- Alisse seguía gritando, con los ojos llenos de lágrimas.- ¡Todo por tu maldita manera tan provocativa de vestir! ¡Lo embrujaste con tus minifaldas de teibolera y tus escotes de sexoservidora!
-¡Óyeme!.- gritó Lily, ofendida por el comentario.- ¿Quién te crees que eres para hablarme así?
-¡Me quitaste a mi novio, traidora!.- Alisse seguí gritando, sin escuchar a su amiga.
-¡Yo no te he quitado a tu novio!.- gritó Lily.- ¿Por qué fregaos me estás diciendo esas cosas?
-¿Qué por qué te lo digo? ¿Quieres saber por qué te lo digo?
-¡Sí!
Alisse iba a soltarle una retahíla a Lily, pero entonces llegó Súper Sanae a salvar la situación.
-¡Chicas, cálmense!.- pidió la japonesa, interponiéndose entre las dos.- ¿Qué rayos les pasa a ustedes?
-¡Es que por culpa de ésta he perdido a Taro!.- Alisse no hallaba la manera de controlarse.
-¿Qué cosa? ¿Y yo qué hice?.- Lily estaba sorprendida.- ¡Te juro que nunca he hecho nada para querer quitarte a tu novio! ¡Tú bien sabes que yo solo quiero a Genzo!
-Eso es verdad, Alisse.- Sanae apoyó a Lily.- Lily nunca ha hecho nada que no sea demostrar cuánto quiere a Wakabayashi. ¿Por qué dices esas cosas sin sentido?
-Es que... .- de repente, al recordar la tienda de ropa de bebés, Alisse se derrumbó.- Ay, no...
Alisse agachó la cabeza y no dijo nada. Lily y Sanae se miraron una a la otra y después abrazaron a su amiga.
-¿Qué te pasa, Alisse?.- inquirió suavemente Sanae.
-Bien sabes que, sea lo que sea, puedes confiar en nosotras.- murmuró Lily.- Tranquila...
-Es que... Chicas, hay algo que debo confesarles... .- Alisse miró a sus dos amigas y suspiró...
