En el segundo tiempo la cosa pareció mejorar un poco. Con Ken en la portería, a los europeos les costó trabajo anotar, pero aun así lograron colarle a Wakashimazu un par de goles más. Genzo comenzó a jugar más mal a propósito, para que el entrenador no tuviera más remedio que cambiarlo. Y efectivamente, a los diez minutos de haber comenzado el segundo tiempo, se hizo el cambio e Izawa entró por Misaki.
-Jugaste fatal, Misaki.- le dijo el entrenador.
-Lo sé.- bufó Genzo, tomando una toalla y sentándose en la banca a un lado de Misaki, quien lo miraba con enojo.- Ya estamos a mano.
Sin embargo, el daño ya estaba hecho, y a pesar de todos los esfuerzos de Japón, terminaron perdiendo 5 goles a 1. Karl y Pierre no resistieron la tentación de hacerles señales de burla a Genzo y a Taro, los cuales querían responder con señales obscenas.
Después del penoso partido en contra de un combinado de otros países, los chicos de la selección japonesa se quedaron bastante rato lamentándose...
Habían perdido con un marcador muy parecido a la humillación, sobretodo para Wakabayashi y Misaki, puesto que sus eternos rivales se lucieron durante el juego, para tristeza y desesperación de los otros dos
-Y justo tenía que ser este partido.- gruñó Genzo.
-Hubiese preferido perder contra Brasil que contra un equipo en donde estuviese Pierre… .- gruñó Misaki.
-Te comprendo, compañero…
Todos estaban bastante silenciosos, a excepción de Genzo, Taro y Tsubasa. Los dos primeros parecían discutir por cualquier cosa, cosa extraña, puesto que normalmente se llevaban bastante bien
-¿A ustedes que les pasa?- les preguntó Matsuyama, ya harto
-Nada- contestó Genzo de mala gana –no tienes por que meterte
-Ya, pero no es para que te enojes tanto, Misaki...- le dijo Hikaru, mas extrañado aun, puesto que Taro nunca contestaba de manera tan violenta
-Creo que lo mejor será que regresemos al hotel- dijo Misugi, con tono conciliador –ha sido un día bastante agitado y algo difícil, así que mejor será irnos a descansar
-Oye Misaki- dijo Aoi -¿qué paso con Alisse que no vino?
-No se- gruñó Wakabayashi, ya de muy mal humor, porque con la sola mención de la chica y Misaki se ponía inmediatamente alerta –y bien poco que me importa
Todos lo miraron sorprendido. ¿Misaki hablando de esa manera de Alisse?. Algo MUY malo les debía haber ocurrido para que se expresara de esa forma. Por otra parte, Misaki tuvo que aguantarse las ganas de decirle algo, aunque mucho que le costaba
-Ayer los oí discutir- continuó, para desgracia de Wakabayashi, Mamoru, que se llevaba bastante bien con la chica -¿acaso terminaron?
Esta vez Genzo no contestó, no sabia que decir, en realidad. Ella había terminado con él, pero se suponía que Misaki debía arreglar ese asunto ese día por la tarde
-Sólo discutimos- contestó luego –nada importante...
Momentos después Tsubasa decidió sacar lo antes posible de ese lugar a sus dos amigos, puesto que los dos estaban perdiendo la paciencia muy rápido, y parecía que en cualquier momento explotarían
A la salida del estadio, se encontraron con Sanae
-¿Y Lily?- le preguntó Wakabayashi
-Dijo que tenia que ir a hablar con el doctor antes de irse al hotel- contestó Sanae, luego sonrió a medias –no jugaron tan mal... piensen que pudo ser peor
-Al menos Wakashimazu salvo un poco la situación- dijo Misaki, encogiéndose de hombros
-En todo caso, si seguías en la portería quizás cuantos goles nos hubieran encajado...
-¿Y que piensan hacer ahora?- les preguntó Sanae a los otros dos, puesto que ya no tenia duda sobre lo que le había dicho Tsubasa
-Sanae, necesito pedirte un favor- le dijo Taro –necesito que entretengas a Lily durante un rato, por favor
-¿Qué harás tu?- le preguntó Nakazawa
-Iré a hablar con Alisse- contestó Misaki –tiene que saber la verdad, se arruinaron mucho las cosas... ¿cómo estaba esta mañana?
-No la vi muy bien- contestó Sanae –pero no era sólo por lo de ayer...
-¿A no, ¿entonces que le pasa?
-Tiene que decírtelo ella, Taro- le contestó Sanae –yo creo que te va a agradar lo que tenga que decirte- sonrió Sanae, Taro la miró con confusión
-¿De que hablas?- le preguntó Misaki, pero Genzo lo interrumpió
-Ahí viene Lily- dijo –Misaki, ya vete, le diremos que tenias que hablar con el entrenador, o algo así...
-Podrían ir a la feria- dijo Taro, mientras comenzaba a alejarse –a ver si pueden averiguar algo de los gitanos esos, para ubicar a la vieja esa
-Veremos...
Taro se fue casi corriendo, minutos después, Lily llegaba con ellos
-¿Y donde está Genzo?- preguntó, buscando a su novio con la mirada
-El entrenador quería hablar con el- mintió Tsubasa –así que se va a demorar. ¿Qué te parece si vamos a dar una vuelta a alguna parte?
Lily dudo... y los demás se dieron cuenta de ello...
-Anda vamos, Lily- dijo Wakabayashi –vamos, si será solo un ratito...
-Esta bien, como quieran...
Por otra parte, Taro estaba llegando al hotel y se encontró con una casi desagradable sorpresa: Alisse hablaba animadamente con... Napoleón
No era que se pusiera muy celoso, pero había algo que no terminaba de convencerlo por su "amistad". A la chilena Louis no podía caerle mejor, le encantaba hablar con el porque sabia perfectamente decir lo justo para hacerla reír; Napoleón, por otra parte, le simpatizaba la chilena y siempre intentaba hacérselas de galán en frente de ella... y eso era lo que mas le molestaba a Taro, sobretodo cuando Alisse le seguía el juego, con lo coqueta que era lo hacia enojar mucho
Se acercó a ellos con paso seguro. Ambos estaban sentados en un sofá del lobby del hotel, conversando
-... y el tipo demás que estaba muy, pero muy asustado por la guagua que salió corriendo y que tenia los dos dientes de oro gigantes- contaba animada Alisse. Taro se había olvidado que normalmente se contaban chistes y leyendas –entonces le cuenta al amigo y...
-Alisse, ¿podemos hablar?- le interrumpió Taro, y los otros dos lo miraron con cierta sorpresa
-¡Wakabayashi!- dijo animadamente Napoleón -¿y como te sientes después que les pateamos el trasero?
-Ha de sentirse igual que Misaki- dijo de forma burlesca Alisse, con un tono que hizo que a Taro le dolieran sus palabras –después de todo, jugaron peor que mal...
-¡Ni yo lo pude haber dicho mejor!- apoyó Napoleón
-Alisse, ¿puedo hablar contigo, por favor?- insistió Misaki, ignorando la risa de los otros dos
-¿Y de que quieres hablarme, Wakabayashi?- le preguntó ella –es que estoy hablando con...
-Es importante...
-¿Mas importante de lo que yo le estoy diciendo?- lo interrumpió el otro –no lo creo...
-Pues créelo, es muy importante, Alisse, por favor- insistió Misaki, ya molestándose
-Pero es que iba a salir a tomar hela...
-¡Después te llevo a tomar todo el helado que quieras, pero ven a hablar conmigo, ahora
Farfán miró a Napoleón y ambos se encogieron de hombros, mientras se ponían de pie
-Entonces estamos hablando- dijo Napoleón, en forma de despedida –ya sabes, para que salgamos alguno de estos días... ya sabes, como Misaki...
-Tu no saldrás con ella a ninguna parte- gruñó Taro, tomando a Alisse del brazo y alejándola de el –así que anda olvidándote. Ven, vamos al cuarto...
Por unos momentos, Alisse sólo se dejó llevar, puesto que la actitud de "Wakabayashi" le había extrañado sobremanera. ¿Parecía que estaba celoso?
-Oye, no es necesario que me lleves a rastras- gruñó Alisse, soltándose –además, ¿dónde es que vamos a conversar?
-En mi cuarto- dijo Taro, puesto que se aseguraba que en caso que los otros llegaran de la feria, Lily no los vería
Caminaron en silencio y de manera rápida. En esos momentos, Taro continuaba pensando en como contarle todo ese embrollo a Alisse, además que se estaba molestando que ella estuviera conversando con Napoleón. Mientras, la chica se iba sintiendo cada vez mas molesta por la forma de actuar del otro, sin contar que le parecía sospechoso que también el día anterior el también intentara hablar con ella
-Ya, estamos aquí, así que...- comenzó Alisse, pero Taro no pudo evitar interrumpirla
-¿Qué estabas haciendo con Napoleón?
-¿Qué?- Alisse le preguntó, ella no tenia que estar dándole explicaciones a nadie, menos a Wakabayashi
-Eso, ¿así que ya estabas planeando citas, eh, ¿tan poco te importó lo de ayer?
-¿¡Y qué te importa a ti eso?- le gritó ella –tú no tienes que meterte, si a Misaki le importa un bledo lo que a mi me pasa...
-¡Es que me importa mucho!- le interrumpió Taro, ella lo quedó mirando confusa -¡Por eso... es que si me importas, Alisse!
-No... Wakabayashi...- ella se alejó –ya basta de bromas, ¿si?
-No es broma, Alisse... es sólo... yo soy Taro
-¿Qué?- preguntó Alisse, incrédula
-Es la verdad... yo nunca te diría cosas como las de ayer...- Taro se acercó a ella, pero Alisse inmediatamente se alejó muchos pasos –debes creerme
-Ya, y de paso tú me crees que también estoy enamorada de ti, Wakabayashi- dijo Alisse, sarcástica –ya he aguantado demasiadas estupideces, partiendo del pastelito con que me salió tu amigo, así que yo mejor me largo...
