Prologo

Una noche tormentosa y obscura; como aquellas en la que la luz se va, y lo único que quedan son los rayos que caen del cielo esperando darle felicidad eterna a alguien que la buscase.

Esa noche, un carro oscuro se estaciono enfrente de mi tenebroso castillo, la verdad no me importaba mucho, ya que lo había visto varias veces llegar, y todas la veces mi hermano me mando a mi alcoba. Esta se encuentra en una de las puntas del castillo pero se puede ver muy bien el exterior.

Mi cuarto es muy grande y tiene espejos por todos lados y una ventada, la ventana es demasiado grande. Por ella veo llegar al carro; de el se bajan 2 personas; una de ella es una joven de cabello largo y rojo, ojos verdes y una estatura considerable; el sujeto que la acompaña es casi de la misma estatura de cabello negro y siempre porta unas gafas negras sobre sus ojos. Los dos se me hacen sujetos muy raros y realmente no me daban un buen presentimiento, pero lo ignore ya que solo iban a ver a mi hermano como de costumbre.

Ohh si… mi hermano, en realidad no es realmente mi hermano, es como mi hermanastro ya que el y su padre me encontraron una noche parecida a esta. Me invitaron a vivir con ellos. Mi hermano es muy guapo, tiene una piel morena y ojos café obscuros; el apenas consta con 20 pobres años de su existencia, es mas grande de edad comparándolo con migo, pero eso es lo de menos, aunque seamos diferente nos compartamos como tales hermanos, hay veces que se puede decir que nos queremos.

Eso es lo de menos en ese momento; ya que después de unos cortos minutos después de la entrada de esos sujetos escuche un ruido… con solo eso supe que algo no andaba bien. Baje las escaleras corriendo lo mas rápido que mis piernas me lo permitían, peor no pude acercarme mucho justo cuando escuche otro sonido, este era de una pistola…. ¡habían disparado! Eso me asusto mas y apresure mi paso.

Cuando llegue a la puerta entre abierta del estudio en donde recibíamos a los visitantes, pensé que nada en el mundo me hubiera preparado para lo que estaba viendo en ese momento… fue una imagen de lo mas repulsiva que nunca se me va a olvidar, y la única reacción que no pude contener fue gritar. Me había delatado pero para cuando me había dado cuenta de eso ya era muy tarde. Ellos me habían descubierto. Ahora solo que daba hacer lo que mi hermano me gritaba… "corre" y eso fue lo que hice. Corrí pero no sabia para donde, en un momento de desesperación se me ocurrió voltear a mi espalda y observe a la tipa de cabello rojo persiguiéndome, lazando una especie de cosa viscosa de color verde, no sabia que hacer…Lo único que se me ocurrió fue salir corriendo a mi habitación, siempre fue un lugar seguro para mi, así que no lo dude dos veces.

Cuando llegue a ella estuve apunto de cerrar la puerta pero fue muy tarde, ella ya me había alcanzado y estaba entrando a mi habitación. Lo único que pude volver hacer fue gritar antes de que uno de mis grades espejos cayera sobre mi haciéndome unos cortes muy profundos en partes claves de mi cuerpo.

La muchacha de cabello rojo se acercaba a mí con una sonrisa triunfante, hasta que de un momento a otro una figura enorme entro por mi ventana haciendo que llovieran vidrios. La figura que había entrado, ahora se encontraba encima de la muchacha, esta intentaba luchar, pero era inútil, esto era mucho más grande que ella. No podía distinguir muy bien lo que era hasta que la luz de un rayo entro por mi ventana y me permitió ver lo que era esa figura…

Era un dragón, pero no cualquiera, era el dragón que estuvo sin falta mis sueños durante el último mes, me quede tan asombrada y más cuando el último acto que hizo el dragón fue comerse a la joven de un solo bocado.

Yo no sabia exactamente lo que pasaba nada tenia sentido, todo era confuso, justo cuando iba a preguntar algo, el dragón se acercaba muy lentamente, en ese momento clave, mi visión empezó a hacerse borrosa y lo único de lo que m e acuerdo de cuando estaba consiente, era de haber escuchado el ultimo grito de mi hermano…

En ese momento caí desmallada pero no volver a saber nada de mi vida... de esa vida.