(Llegá Mitsuki después de ver los review) S U G E E! Tantos reviews para mi fic T-T! Arigato gosaimazu! Nunca pense que llegara a gustar tanto nOn. En agradecimiento, intentare ser rápida subiendo los capitulos. Si nade lo impide, intentare subir mínimo una vez a la semana nwn.

Disclaimer: Los personajes de Naruto para mi desgracia no me pertenecen T-T. Pero algún día me haré con los derechos de Kiba. Muajaja! òOó

Después de ahorrarme las demandas judiciales, a leer onegai! nOn!

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Capitulo 1. Decisión tomada.

"La misión consiste en asesinar a uno de los traidores de la villa más peligroso, considerado como criminal de rango S" Un intenso sentimiento de miedo se empezó a agolpar en su pecho, mezclándose con sus aceleradas pulsaciones y su rápida respiración.

"Debes asesinar a Uchiha Sasuke" Pronunció con la frialdad que ya le caracterizaba a Hyuuga Hiashi, dejando a una atónita Sakura al borde del llanto.

Por unos instantes había tenido la corazonada de que se trataría de Uchiha Itachi, uno de los traidores de la hoja más peligrosos y buscados. Pero al escuchar el nombre de su tan amado Sasuke-kun, el mundo se le vino abajo. Todo había sido calculado al milímetro para que aceptara sin rechistar. De eso no tenía ninguna duda. Pero le escamaba que su sensei hubiese permitido tal acto.

Su mirada llena de lágrimas se cruzó con las tristes orbes marrones de la sannin. Aguantó estoicamente sin siquiera sollozar, en silencio, esperando con impaciencia a que los presentes le dieran permiso para irse. No había marcha atrás. Simplemente, la habían engañado para que aceptara una misión a la que se negaría durante el resto de su vida.

Realizó de nuevo otra pequeña reverencia y se marcho de allí a paso lento y forzado. Cuando sintió como la puerta de roble se cerraba tras de sí, echo a correr con toda la fuerza de sus piernas. No quería llorar, odiaba demostrar su debilidad. Sus pasos la guiaron con inercia propia por los laberínticos pasillos del edificio. Cuando logró dar con la salida, tras unos minutos de carrera, se apresuró en marcharse de rama en rama a algún lugar solitario donde poder dar rienda suelta a su llanto.

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La inmensidad del cielo, antes de un azul brillante e impecable, se veía contagiado por el silencioso llanto de la Haruno, cubriéndose con negros nubarrones que amenazaban tormenta. A lo lejos, los primeros rayos se divisaban, seguidos de estruendosos truenos, auguraban que aquella lluvia se convertiría en instantes en un copioso aguacero.

Pero aquello no inmutaba en lo más mínimo a la pelirosada kunoichi, quien sin siquiera dirigir su vista al cielo, observaba a través de un velo de dolor y sufrimiento, como las primeras gotas de lluvia se entremezclaban con sus lágrimas. Un hipar nervioso se hizo con su garganta, al tiempo que los sollozos acongojados se escapaban de sus labios.

La tormenta empezó a cebarse con la dolida joven, que arrinconada contra el tronco de un árbol abrazaba sus rodillas, escondiendo sus ojos enrojecidos entre estas. No sabría decir cuando fue, pero la lluvia dejo de ser meras gotas finas como agujas, para pasar a ser un verdadero diluvio. Ella, empapada por las lágrimas y la lluvia, permaneció inmóvil, con un solo pensamiento en su cabeza. Cuan cruel podía llegar a ser el destino…

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Silencio. Tan solo silencio roto por numerosos golpes que cortaban el aire con gran precisión. En un claro, un joven de dorada cabellera y ojos azules como el cielo de verano, entrenaba arduamente en el arte del taijutsu. Nunca se consideró un experto, ni mucho menos, pero a sus diecisiete primaveras era un gran conocedor de aquel arte ninja.

Su rostro, perlado por las cristalinas gotas de sudor, expresaba con claridad el cuantioso esfuerzo y gasto energía que requería el llevar entrenando desde primera hora de la mañana. Pero, tal y como le había dicho Tsunade-baachan, un buen hokage requería conocer más de mil jutsus de todo tipo, además de controlar el taijutsu a la perfección y el genjutsu en su justa medida.

Su mirada, invadida por la alegría que tanto lo caracterizaba, se desvió por unos instantes de sus invisibles objetivos, para posarse sobre el inmenso cielo de Konoha. La repentina falta de luz solar en aquel día tan veraniego le escamaba. Comprendió lo que ocurría al ver como espesos y negros nubarrones invadían la tranquilidad del cielo de la hoja. No le tomó mayor importancia. Si más no, un ninja debía saber luchar en cualquier circunstancia meteorológica.

Decidió entonces dirigir sus golpes y combos contra el fuerte tronco de un nogal. Éste aguantó todos y cada uno de los golpes que recibía por parte del Uzumaki, quien empezó a aminorar la velocidad y fuerza en ellos.

Estaba seguro de que no eran sus alucinaciones. Había oído algo. Incluso podría asegurar que había sido un sollozo. Desistió en su intento por seguir entrenando. A parte de que no estaba concentrado, un fuerte aguacero había empezado a descargar contra el bosque. Optó por concentrarse en aquellos sollozos, pues la voz le resultaba extrañamente familiar

A pesar de que el aguacero y los truenos producían un impresionante estruendo, su fino sentido de la oída no le falló. Guiado por este, empezó a caminar, sintiendo cada vez más cercano el llanto. Siguió caminando unos minutos más, que se le hicieron eternos. Un frío repentino empezó a invadirle. Entonces cayó en la cuenta de que estaba empapado hasta los huesos. Un estornudo a lo lejos le hizo volver a su cometido.

Y cuando estaba a punto de darse por vencido, pudo vislumbrar una empapada cabellera rosada, perteneciente a la kunoichi que sollozaba con desesperación. Por unos instantes no supo si dejar que la Haruno se desahogara bajo la lluvia o acercarse y hablar con ella. Le pareció más apropiada la segunda opción, así que se acercó en silencioso sigilo a la chica.

"¿Sakura-neechan?" Una estúpida pregunta se escapo por sus labios, haciendo que la joven se sobresaltara. Después de estar allí un buen rato sin que nadie la disturbara, pensando que se encontraba sola, la voz de Naruto la había sorprendido.

"Na…Naruto…kun" Alzó su mirada, mientras entre sollozos pronunciaba su nombre. Su mirada verde, enrojecida por el llanto, se encontró con los dos cielos que residían en los ojos de Naruto. Se quedaron por unos instantes en aquella posición. Ella sentada, abrazando sus rodillas. Él de pie, ligeramente inclinado.

El Uzumaki, con una parsimonia innata, se sentó junto a la kunoichi pelirosada. Suavemente, pasó el dorso de su mano por las cálidas y sonrojadas mejillas de ella, borrando los rastros de sus últimas lágrimas. Ella agradeció el gesto en silencio, dibujando una triste sonrisa en sus rojos labios. Apretó con rudeza la tela de su falda, antes de volver a estallar en llanto y abrazarse con desesperación a su querido onii.

"Po…por que…? Naruto-kun… yo… no quiero…" Sollozando, la kunoichi se aferró más al pecho del jinchuriki, estrechando entre sus finas manos la tela naranja de su sudadera. Sintió como el aguacero que antes arremetía sobre ella, cesaba tan rápido como había empezado.

Agradeció a los cielos que fuese él y no otro quien la hubiese encontrado. Tras la partida de Sasuke-kun, Naruto-kun había logrado olvidarse de aquel enamoramiento infantil que sentía por la kunoichi más inteligente de su promoción. Así, lograron ambos forjar una sólida y grata amistad. Se mostraban una estima mutua que llegaba a igualar los lazos que unían a dos hermanos. No de sangre, pero si de corazón.

"Venga Saku… cálmate y dime que te ha pasado" Naruto, demostrando su recién adquirida madurez, acariciaba los cabellos húmedos de Sakura, mientras esta intentaba calmar su llanto. Cuando al fin lo logró, se quedó por unos instantes apoyada en el pecho del jinchuriki, escuchando los rítmicos latidos de éste. Una sensación de calma y bienestar que tan solo él podía proporcionarle la rodeó.

Se incorporó levemente, quedando algo apartada del Uzumaki, lo suficiente como para ver con claridad la cara de éste. Inspiró profundamente, aspirando con fuerza el aroma a tierra mojada que el bosque ofrecía tras la lluvia. Y con la misma calma que Naruto había sido capaz de transmitirle, le explicó detalladamente lo ocurrido en apenas media hora. Un hecho corto que la marcaría por siempre.

"¡No entiendo como esos desgraciados, a sabiendas de que aún mantienes esperanzas en que vuelva, te mandan una misión como esta!" Exclamó el rubio, seguido de una sarta de comentarios no muy agradables contra todos y cada uno de los miembros del consejo. Incluyendo al que podría convertirse en su futuro suegro. "Y lo que menos entiendo es como Tsunade-baachan los ha dejado hacer ¡Por Kami-sama! Si eres su alumna… ¿Quien más que ella te va a comprender!"

Un incomodo silencio se cernió sobre ambos. La pelirosa, cabizbaja, no se atrevía a pronunciar palabra alguna. Por su parte, el hiperactivo rubio no sabía que decir para animar de algún modo en la que se había convertido en su mejor amiga y confidente.

"¡Podrían haber mandado mil shinobis antes que a ti! Incluso yo estoy dispuesto a suplirte, Sakura-neechan" Sonriente por su, según él, gran ocurrencia, vio como la expresión de su neechan no cambiaba ni un ápice.

"No es por echarme flores, pero si me han mandado a mi la misión es por ser alumna de una de los sannins. Además, a ti Naruto-kun no te envían por que es peligroso. Piensa que aún tienes a Akatsuki detrás del Kyubi" Pronunció con su conocida elocuencia la shinobi pelirosada.

"Un razonamiento así es propio de la ninja más inteligente de su promoción." Una voz en la oscuridad resonó con fuerza entre robles, nogales y sauces. Ambos shinobis, sabiendo de sobras a quien pertenecía, no se inmutaron en lo más mínimo.

"¡Pero Tsunade-baachan, no es justo! Sabes de sobras que Sakura-neechan está colada por Sasuke-baka!" La furia de Naruto estaba a flor de piel. Le enrabiaba tener que ver a su casi hermana sufriendo de esa manera.

"Tienes todo el derecho a enfadarte conmigo. Pero no dudes que puse todos los medios que estaban en mi mano para cambiar de opinión al consejo." Sakura al escuchar las palabras pronunciadas por la Godaime comprendió a la perfección lo ocurrido. Simplemente habían utilizado sutilmente a la Hokage para poder tomar la decisión que creían oportuna para aquella misión.

"Naruto-kun, Tsunade-sama tiene razón. Ha sido una maniobra más del consejo. No la culpes." Sakura se veía incapaz de cambiar la tristeza de su rostro. Aunque en su interior se sentía mucho más aligerada. Quizás al darse cuenta de que su sensei no había tenido ni voz ni voto en aquella decisión, a pesar de ser la Hokage.

"Se que es difícil ver la misión desde otro punto de vista, teniendo tan presente el amor que sientes por el Uchiha. Pero si eres capaz de tan siquiera enfrentarlo, estarás mucho más cerca de olvidar el amor que has sentido siempre por él" La Godaime se pronunció de nuevo, con sabias palabras que dejaron a la Haruno divagando en sus pensamientos durante unos minutos, poniéndolos en orden, intentando llegar a una conclusión satisfactoria para ambas partes.

Durante los cinco largos años de ausencia del moreno, se había tratado autoconvencer centenares, miles de veces de que él no le convenía. Pero a su pesar, su corazón siempre había prevalecido ante la razón. Ahora había tomado una decisión, y nada ni nadie la harían cambiar de parecer. La voz de la razón había logrado superar a los desesperados ruegos de su amor incondicional. Olvidaría al Uchiha, aunque eso le costara la vida. La suya o la del Uchiha.

"Naruto-kun, Tsunade-sama. He tomado una decisión. Olvidaré a Uchiha Sasuke y realizaré la misión con éxito. Os lo prometo." Con determinación, miró a los anteriormente nombrados, poniéndose en pie, apretando sus manos hasta el extremo de emblanquecer sus nudillos y sentir como su perfecta manicura se clavaba en las palmas de sus manos.

"Pero neechan…"

"Lo siento, Naruto-kun. Ya he tomado la decisión" Una escurridiza lágrima rodó por su mejilla. E interiormente se juró a si misma que sería la última,…la última que derramaría por su amado Sasuke-kun.

"Bueno, no se si es algo que se pueda celebrar, pero de todos modos, os invitó al Ichiraku" Una Tsunade algo más animada al ver el semblante de su alumna predilecta, ofreció la invitación. A pesar de saber que aquello le podría causar una bancarrota irremediable.

"Pues ya estamos tardando¡datte bayo!" Como si de un resorte se tratará, Naruto al escuchar cualquier palabra relacionada con su comida predilecta, se emocionaba irremediablemente, dejando a un lado su tan envidiable madurez.

"Siento decirlo, pero Tsunade-sama, invitar a Naruto a Ramen es equiparable a buscarse la ruina" Sakura dibujo en sus labios una sonrisa divertida. Por unas horas sería mejor olvidarse de todo. Al menos su última noche en Konoha la pasaría junto a su sensei y su onii.

Mientras el trío se alejaba del bosque en dirección al Ichikaru, una sombra se alejaba en dirección contraria, esbozando una sonrisa en sus labios. Una de sus típicas sonrisas llenas de superioridad.

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Por fin he terminado! Realmente me ha costado de escribir. Es difícil hacer madurar a Naruto sin hacer que pierda esa inocencia que tanto les gusta a sus fans (me incluyo -babeando- juju…). De hay la idea de meter al final el Ichikaru's ramen xD.

Y pss sin nada más que decir, contesto los reviews. Mi más sentido agradecimiento. Me ha alegrado saber que el fic ha tenido tan buena aceptación (Michi: o eso creemos - -U).

Arashipotter: Primer review. ¡Muchas gracias! Sinceramente, más de una vez mataría yo misma a Sasuke-lendo (michi: para que dejarle el trabajo sució a Sakura? xD). Pero… sobre el fic no puedo revelar nada xD. Teóricamente tengo todo el fic en mi cabeza, todo puede ser que tenga un cambio repentino de humor o que me venga una idea mejor a la mente. De todos modos, thanks por los animos nwn

Gaby Uchiha: Waaa! Gaby-sempai (ya tengo dos sempais xD). Mil gracias por los ánimos. Y aunque ya hemos hablado por el Messenger, si, mi sempai es haruno-chan XP. Y pss nada, no me importa el discurso xD jajaja! Sayo, y pss cuidate! nwn

Kotoko Hyuuga: Onee! Tu estas metida en todo xD. A ver si menos fanfiction y mas Messenger, que no te veo nunca T-T. Yo tambien quiero ver Sasu vs Saku. No se si estaré a la altura del fic... xDDD. Muchas gracias, siempre tan atenta! ;) Mi tambien te quiere muxio! Arigato onee!

Nay-san: Pss aquí la continuación. Gracias por los animos:)

Sabaku no Drea: Me alegra saber que el fic te gusta y te parece hasta interesante (michi: eso ya es mucho! ;)). Ya esta la continuación. Espero volver a leerte! Sayo nwn.

Marion Asakura: Arigato! Me alegra que te parezca sugoii mi fic, apenas empezado XP. Y pss lo de dejarlo asi son consejos de mis onees. Y yo agradecida les hago caso xDDD. Chau, cuidate! Y thanks ;).

Maylu-chan: Oneee! Arigato T-T. Tu has sido la primera en leer este capi, thanks xD. Tu trankila, puedes seguir llamandome Sakura-xiaaan. Es la costumbre, ne? xDDD. Ves, lo sigo hoy. Y he tenido tiempo de ir a la playa y hacer de canguro y todo XD. LODVG RLZ! Ahí te llevo la razón ;). Sayo onee! Thank you! (como diria Naruto xD) (PD: Sigue con Historia real T-T, datte bayo! XD)

Mis specials thanks de este capi para Maylu-chan, que me ha ayudado a decidir lo que pasaría y pss se ha leido el capi (o parte xD). Arigato!

Y aqui se acaba! Os espero en el próximo capi de Dulce traicion (michi: eso sono a comercial) sie... - -U. Dejar reviews onegai! Acepto opiniones de todo tipo nOn.

Besitos! Baibai!

Mitsuki Haruno