Capítulo 22

Un Poder Oculto

En el capítulo anterior:

Katsumi la besó en la mejilla y fue a ver la prueba. Volvió para cargarla y besarla apasionadamente.

-Katsumi?

-Estás embarazada, mi amor…

Aneko lo abrazó con fuerza y lo llenó de besos.

…………………………………..

Mientras Kagome intentaba dorarle la píldora a Inuyasha, escucharon unas sirenas, al llegar al interior de la casa, descubrieron que Aneko se había desmayado en las escaleras, rodando por las mismas.

Katsumi apretaba su mano libre con todas sus fuerzas. Cuando los minutos pasaron y nadie les decía nada, Katsumi cedió. En silencio, contra la pared y los puños cerrados, sus ojos se inundaron de lágrimas. Kagome se le acercó.

-Katsumi…

-Tengo miedo… tengo miedo por ella y por mi hijo…

Salieron con Aneko en la camilla. Katsumi quiso seguirlos pero un doctor lo detuvo.

-Doctor, qué pasa?

-La vamos a llevar a cirugía…

-Pero… pero está embarazada!

El doctor subió al ascensor. Katsumi se sentía morir. Kagome lo abrazó con fuerza permitiéndole llorar.

-Me quiero morir, me quiero morir!

-No, Katsumi, no digas esas cosas…

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Continuación…

Inuyasha y Katsumi se marcharon. Como habían ido en un solo carro, Inuyasha fue por la ropa primero. Al bajar las escaleras, encontró a Katsumi con lágrimas en los ojos mientras sostenía unos papeles en su mano.

-Katsumi…

Inuyasha leyó el papel con fecha de ese mismo día, y hora de la madrugada, donde abajo tenía los resultados de una prueba de sangre y decía que la prueba de embarazo era positiva. Se sentó a su lado.

-Katsumi…

-Estaba tan feliz… Kami, se pasó toda la noche hablando de ello… decía que si era varón le pondría Inuyasha… y que si era hembra se llamaría Rin… me decía que aunque usted es un cascarrabias, no se resistiría a los encantos de su nieto…

Inuyasha se bufó. Le dio una palmada en la espalda.

-Yo sé que sientes que es el fin del mundo… deseas haberte muerto tú…

-No tiene idea de lo que siento…

-Sí la tengo… después de Aneko… después de que Aneko naciera, Kagome volvió a quedar embarazada… Aneko ya tenía poco más de un año… yo estaba de viaje… y cuando volví, encontré a Aneko llorando al lado de Kagome inconsciente, tirada en el piso… cuando eso vivíamos en un cuartucho al sur de Tokio… llamé una ambulancia… yo no sabía que estaba embarazada… tenía un golpe en la cabeza y aún no despertaba… le tomaron radiografías y una tomografía… Cuando despertó, el doctor veía su placa… comenzó a llorar pidiéndome que le dijera que no era de ella… yo le dije que sí…

Inuyasha cerró los puños.

-Fallo de cierre del tubo neural… se lo diagnosticaron a las 14 semanas… le practicaron un aborto… no tenía riñones… su corazón estaba malformado… y su carita estaba incompleta…

Inuyasha no hacía nada por controlar sus lágrimas.

-Era un niño… le hicieron un cariotipo… Nos recomendaron no volver a tener más hijos… yo lo sabía… las posibilidades aumentaban… Kagome se desmayó por el golpe que le había dado un ladrón al entrar en la casa. Yo dejé la medicina y comencé a trabajar… mi padre nos daba dinero, pero no el suficiente para salir de ese lugar. Cuando compré esta casa, entonces me volví a dedicar a los estudios… ya Aneko tenía 5 años… entonces mi padre murió… pasaron 8 años antes de que decidiéramos arriesgarnos. El resultado es Amaya… y Tohru… bueno, Tohru aún no deja de sorprenderme…

Inuyasha le volvió a dar unas palmadas.

-Mi punto es… que no te dejes vencer… Aprenderás a vivir con éste dolor. No te dejarás de preguntar si tal vez… pero… no puedes desplomarte frente a ella.

-Inuyasha-sama…

-Ahora mismo eres su pilar y fortaleza. Te imitará. Tú tienes que sacarla de su oscuridad. No hay nada peor para una mujer que perder un hijo…

-Pero y yo? A mí también me duele…

-Verás… que cuando sus heridas sanen… cuando su corazón sane y la veas sonreírte con la verdadera felicidad reflejada en su rostro. Las heridas tuyas habrán sanado mucho antes.

Inuyasha le dijo que si quería, podía quedarse con ellos. Katsumi asintió, fueron por Amaya y Tohru a la casa de Sesshoumaru. Rin les abrió la puerta.

-Inuyasha…

Rin lo abrazó. Al ver a Katsumi lo abrazó también.

-Katsumi, nosotros también somos tu familia…

-Gracias, Rin-sama…

Se quedaron sólo unos minutos. Llevaron a los niños a la clínica a ver a Aneko. Amaya la abrazó.

-Nee-chan!

-Hola, enana!

Aneko la abrazó con fuerza.

-Me asusté mucho cuando te caíste… ya estás bien?

-Sí… me lastimé un poco, pero voy a estar bien…

-Nee-chan… te quiero mucho…

-Y yo a ti, Amaya…

Aneko sonrió eliminando las lágrimas de su pequeño rostro.

-Si te pones llorona, yo también…

Amaya le sonrió y dejó que Tohru se acercara.

-Nee… ya no vas a tener un bebé?

Aneko se sorprendió.

-Tohru, cómo sabes que iba a tener un bebé?

-No sé… hueles igual que tía… y tía va a tener un bebé…

Aneko sonrió aún extrañada.

-Ya no voy a tener un bebé…

Tohru la abrazó y la besó en la mejilla. Inuyasha y Kagome salieron de la habitación con los niños. Katsumi se acercó a Aneko.

-Te amo, mi amor…

-Te amo, Katsumi…

-Dime por favor que te vas a casar conmigo…

-Sí, mi amor, claro que sí…

Katsumi la besó con ternura.

-No te preocupes, pequeña, todo va a salir bien…

………………………………………………

Rin veía a sus hijos dormir y sonrió, salió de la habitación de Ryu, luego de apagar la luz y mientras se acariciaba el vientre, fue a la cocina. Allí encontró a Sesshoumaru, sentado, con un vaso de agua en las manos.

-Mi amor…

-Preciosa…

Sesshoumaru la abrazó con fuerza y la besó en la mejilla.

-Sessh, estás bien?

-Te amo, preciosa…

-Yo también te amo, mi amor…

Sesshoumaru se aferró a ella y bajó su cabeza hasta su vientre, quedando su oído contra el mismo.

-Rin, tienes que cuidarte, mi amor, yo no sé vivir sin ti…

-Sesshoumaru…

-Kami, no pude evitar pensarlo… lo frágil que es la vida… y pensar que yo, sobre todo, lo había olvidado…

Rin lo abrazó y lo besó en la cabeza.

-Mi amor…

-Aún recuerdo cuando la cargué por primera vez… era tan chiquita y frágil… me destrozó verla así, sin ser capaz de hacer nada por ella…

-Sesshoumaru…

-Te amo, Rin… como nunca pensé amar a alguien… como nunca pensé amar…

-Sessh, yo también te amo, mi amor, pero cálmate…

Sesshoumaru la continuó abrazando con fuerza y la llenó de besos.

-Te amo tanto, cariño… te amo…

-Mi amor, vamos a acostarnos… necesitas descansar.

Subieron a la habitación y luego de estar acostados, Sesshoumaru la abrazó hasta quedarse dormido.

………………………………………

Rin celebraba el cumpleaños de Ryu con bombos y platillos. Sesshoumaru le tomó una fotografía cargando y besándolo en la mejilla, y luego la besó mientras lo cargaba él. Rin notó a Aneko, quien la miraba insistentemente. Se acercó a ella.

-Aneko…

-Hola, tía…

Rin se sentó a su lado.

-Me acompañas?

-Está bien…

Rin y Aneko entraron a la casa y hasta la habitación de Rin. Rin acarició sus mejillas y se sentó a su lado.

-Aneko…

-Dime…

-Dime, qué pasa? Cariño, sabes que te quiero mucho y me duele verte así…

-No es nada, tía…

-Si no fuera nada, no me preocuparía nada… Aneko…

-Es que… a veces te veo… cuando te veo pienso que… tía, no dejo de pensar en mis bebés… y yo no quiero…

-Es normal que pienses en ellos, porqué no quieres?

-No es eso… yo lo que no quiero es sentir celos de ti… tía, no quiero… pero no puedo dejar de sentirlos… y yo sé que cuando Katsumi se entere, me va a dejar…

-No, Aneko, no es así… primero que todo, no es para que sientas celos de mí. Porque ni estás enamorada de Sesshoumaru, ni es hijo de Katsumi…

-Lo sé… pero…

-Lo que sientes es la falta. Me ves y te imaginas que pudieras estar igual o más grande, dado el hecho de que eran dos…

A Aneko se le aguaron los ojos al escuchar las palabras de Rin.

-Aneko, amo a mis hijos. Cada uno ha sido una bendición y un regalo de Kami. Y no me puedo imaginar mi vida sin ninguno de ellos. Ni siquiera de éste. Sabes por qué?

-No…

-Porque precisamente éste bebé, eliminó un problema que iba a estallar entre Sesshoumaru y yo. Algo que posiblemente nos llevara a la separación.

Aneko bajó la cabeza.

-Aneko, yo sé que te culpas de la enfermedad que sufrió Kagome… pero, no tienes la culpa… no tienes la culpa de nada. Y además, mi amor, es normal que te sientas así. Pero debes superarlo…

-No puedo… Kami, tía… yo estaba dispuesta a todo por mi hijo…

-Aneko, nunca vas a borrar el recuerdo de esto… pero ser feliz, es aprender a superar el dolor. Si no lo superas, no serás verdaderamente feliz. No fue algo que pasó porque no te cuidaste, fue algo que pasó porque tenía que pasar. Yo también tuve problemas con la implantación de Ryu. Y sufrí mucho y tuve mucho miedo…

-Por qué?

-Porque sabía que Sesshoumaru no lo soportaría. Sesshoumaru se desvive por sus hijos… ve a través de sus ojos… y estaba tan emocionado…

-Tía…

-Todas sabemos lo que es… lo que es dormirse cada noche rezando por la salud de un hijo… lo que es llorar cada noche por sus quebrantos… pero cariño…ahí está la fortaleza de una verdadera madre. Encontrar sólo en el amor, la fuerza para levantarse a media noche a ver por qué lloran… La fortaleza para amarlos aunque sientas que te desquicien con sus travesuras…

-Pero qué hago yo? Qué hago?

-Esperar… cuando menos te lo pienses estarás embarazada… yo te recomiendo esperar a que al menos estés casada…

-Tía… desde ese día… Katsumi no… Katsumi no me ha vuelto a tocar…

-Tú le has dicho que ya puedes hacer el amor?

-Mamá!

Aneko se tapó la cara con las manos. Kagome se acercó sonriendo y acarició su cabellera.

-Los hombres son unos cobardes… o más bien… no es que sean cobardes, pero comprenden tan poco a las mujeres, que si tú no le dices que el doctor ya te dijo que puedes retomar tu vida, si tú no le demuestras que estás física y psicológicamente lista para hacerlo, él no te lo exigirá. Y mucho menos Katsumi.

Kagome la abrazó.

-Aneko…

Aneko vio a Kagome.

-Mamá… papi le dijo a Katsumi que ustedes perdieron…

-Sí, es verdad…

-Y cómo…

-Es algo diferente, mi amor… yo te tenía a ti.

-Mami…

-Tú te subías a la cama y me abrazabas. Buscabas al bebé debajo de las sábanas. Me decías que no me pusiera triste, que tú eras mi bebé… Aneko, yo me pude recuperar por ti… pero mi vida…

Kagome la besó en la frente.

-Aneko, tienes un hombre maravilloso a tu lado. No menosprecies su cariño. Como Katsumi quedan pocos por no decir ninguno.

-Lo sé… mami, lo amo tanto… lo amo tanto que no sé qué hacer. Kami, ustedes no lo vieron, estaba tan emocionado, se pasó la noche pensando en nombres… Kami, al día siguiente quería casarse…

-Y qué hay de malo en todo eso? Tu papá te declaró a las dos horas de nacida y te hizo una prueba de ADN y no se cuántas cosas más hizo para asegurarse de que no te alejaran de él. Mi punto es… es normal que se emocionaran…

Después de un rato, volvieron a la fiesta. Katsumi se acercó a Aneko y la besó con ternura. Kagome mantenía a Inuyasha a raya.

-Pero es que lo hace frente a mí!

-Acaso es ilegal o qué? Déjalos en paz!

Aneko sonrió al separarse de Katsumi.

-Katsumi…

-Dime, mi amor…

-Katusmi, puedo ir al apartamento esta noche?

-Claro que sí, mi amor…

………………………………………………

Inuyasha y Kagome llegaron a la casa con Amaya y Tohru. Luego de que Kagome los bañara, los mandó a despedirse de Inuyasha, quien estaba con un humor de matar. Los pequeños se acercaron a él tímidamente y lo besaron en la mejilla de buenas noches. Amaya se fue a su habitación. Tohru se quedó a su lado, Inuyasha lo vio.

-Qué pasa?

-Papi, tú y mami pelearon de nuevo?

-Tohru…

-Papi, mami está triste otra vez. Qué no te acuerdas que por eso se enfermó? Yo no quiero que mi mami se enferme otra vez.

Inuyasha sonrió y abrió los brazos.

-Ven aquí…

Tohru se subió a sus piernas.

-Papi, porqué mami se pone triste y tú bravo cada vez que Aneko no está?

-Tohru, no hemos discutido.

-Pero no le hablas a mami.

-Ella te ha dicho algo?

-Yo le pregunté… pero ella me dijo que tiene que pedirte perdón, porque fue su culpa.

Inuyasha se quedó pensativo.

-Vamos, es hora de dormir…

Inuyasha lo llevó a su cama y lo arropó. Se despidió con un beso en la frente.

-Dulces sueños, hijo…

Inuyasha fue hasta la habitación. Kagome se ponía su pijama.

-Kagome…

-Inu…

-Kagome, perdóname… no es mi intención herirte y mucho menos que los niños se enteren de nuestros problemas…

-Inuyasha, por qué lo haces? Por qué me haces esto?

-Es que… Kami, Kagome, es mi hija… es mi bebé…

-No, ya no lo es… Inuyasha, Aneko es una mujer adulta…

-Kagome…

Kagome se acercó.

-Yo te pido perdón… porque ese dolor que sientes… el dolor que le causé a mi hija, yo nunca me lo voy a perdonar…

-De qué hablas?

-Si yo… si yo te hubiese escuchado… si no le hubiese permitido seguir… si no le hubiese alentado a usar anticonceptivos… no sabes lo feliz que sería ella… libre de ese vacío… por Kami, Inuyasha, por mi culpa, mi hija quedó embarazada y así mismo perdió a sus hijos!

Inuyasha la veía con el rostro lleno de lágrimas. Acarició su rostro y la besó en la frente.

-No es tu culpa, Kagome… No es tu culpa, mi amor...

-Sí lo es...

-No, Kagome, mi amor…

Entonces Inuyasha comprendió el daño que le hacía.

-Mi amor… tú no eres responsable de lo que Aneko decidiera hacer con Katsumi…

-Entonces deja de culparme. Kami, me estoy volviendo loca!

Kagome se recostó en su hombro. Inuyasha la abrazó con fuerza. Luego de unos minutos, se calmó. Inuyasha acarició su rostro.

-Eres hermosa, mi amor… eres simplemente hermosa…

-Inuy…

Inuyasha la besó apasionadamente mientras la mantenía pegada a su cuerpo.

…………………………………………………

Aneko y Katsumi estaban sentados en el sillón, tomados de la mano.

-Katsumi…

-Sí?

-Katsumi, quiero que seas sincero conmigo…

-Qué pasa?

-Katsumi, estás conmigo porque me amas, o porque no encuentras salida después de perder a nuestros hijos?

Katsumi comprendió el mar y la turbulencia que debía haber en la mente de Aneko. No tardó en responderle.

-Te amo. Te amo tanto que me duele que dudes de mi amor… te amo…

Aneko se refugió entre sus brazos.

-Si me amas tanto, porqué no me has vuelto a buscar?

-Porque tengo miedo… no quiero volverte a herir…

-Katsumi… mi amor, cómo me puedes herir?

-No- no lo sé… pero tengo miedo…

-Mi amor…

Aneko acarició el rostro de Katsumi.

-Hazme el amor, mi amor…

Katsumi la besó apasionadamente mientras la tomaba en brazos y la llevaba hasta la habitación. Después de haberla llenado de besos y caricias, se dispuso a penetrarla, lo hizo con cuidado. Una vez dentro de ella, se fijó en sus ojos.

-Estás bien, mi amor?

-Sí…

…………………………………………………………

Aneko despertó, aún era de noche, vio el reloj. Las 12:30, sintió el abrazo de Katsumi cerrar sobre ella.

-No me vas a dejar sólo…

-Pero mi amor, tengo que ir a mi casa…

-Tú eres mi mujer y ésta es nuestra casa…

Aneko sintió un beso en su hombro. Escuchó su celular timbrar.

-Déjame responderlo…

-Está bien…

Katsumi le soltó su posesivo abrazo y le permitió alcanzar el celular.

-Bueno… estoy en el apartamento… con Katsumi… Papá!

Katusmi se sentó en la cama de golpe al escucharla llamar a Inuyasha.

-Papá… sí, no! Papá… escucha… sí, pero… escúchame… sí… está bien… yo también…

Aneko cerró la llamada y besó a Katsumi en la mejilla.

-Qué pasó, mi amor?

-De verdad era tu papá?

-Sí.

-Y se imagina que tú y yo…

-No! Le dije a mamá que vendría a hablar contigo… ella sabía lo demás… papá cree que sólo estamos hablando… creo que en el fondo espera que te deje.

-Tú crees?

-A veces se le aflojan unos tornillos en la azotea. Pero él te adora.

-Sí… siento el cariño…

Aneko rió y se lanzó sobre él llenándolo de besos.

-Te puedo decir algo, mi amor?

-Qué cosa, mi cielo?

-Me encantó la forma en la que me hiciste el amor…

Katsumi rió y la abrazó nuevamente.

………………………………………………………

Rin despertó, eran las 3 de la mañana.

-Sesshoumaru…

-Hm…

-Sesshoumaru, boté el tapón...

-Kami, Rin, compras uno mañana...

-Sesshoumaru, voy a romper fuentes…

-No las rompas…

-Sesshoumaru, el bebé va a nacer!

Sesshoumaru se sentó como impulsado por un resorte.

-Rin, no bromees.

-No bromeo, Sesshoumaru, tengo contracciones…

-Estás segura? No es algún tipo de indigestión?

-Tengo 3 hijos, ya sé diferenciar entre indigestión y parto… Sesshoumaru, pero no estoy en tiempo…

Sesshoumaru ya se estaba vistiendo. Tomó el celular de Rin y se lo llevó a Daisuke.

-Dai…

-Papi…

-Dai, voy a llevar a Rin a la clínica. Quiero que cuides a tus hermanos cuando despierten. Voy a volver lo más rápido que pueda o mandaré a Inuyasha a que venga.

-Mami está bien?

-El bebé va a nacer. Dai, todo va a estar bien. Sólo necesito que los cuides. Lo puedes hacer?

-Sí.

-Puedes volver a dormirte.

Sesshoumaru lo besó en la frente y fue con Rin a la clínica. En el camino, llamó a Inuyasha. No contestaba, lo intentó varias veces pero no contestó. Continuó remarcando hasta que lo contestó. Se escuchaba agitado.

-Bueno?

-Inuyasha… perdona si interrumpo algo, necesito que vayas a la casa, llames al celular de Rin y le digas a Daisuke que te abra…

-Qué pasa? Dónde están ustedes?

-Rin tiene contracciones, voy llegando a la clínica. Los niños están en la casa.

-Está bien, ya voy…

-Gracias…

Sesshoumaru estaba junto a Rin, los médicos la revisaban y le conectaban monitores. Sonó el celular de Sesshoumaru.

-Sí?

-Ya estoy con Daisuke. Cómo está Rin?

-La están examinando, cualquier cosa, yo llamo.

-Sessh, los niños…

-Inuyasha ya está en la casa. No te preocupes, preciosa…

Sesshoumaru la besó en la frente.

………………………………………………

Inuyasha estaba acomodado en el sillón de la sala, Daisuke se quedó parado frente a él.

-Qué pasa, Daisuke?

-Tío… porqué estás usando pintura de labios?

Inuyasha se puso de pie como un resorte y corrió al baño, rió al verse en el espejo, lleno de maquillaje, se lavó la cara para removerlo.

-Por qué tenías maquillaje, tío?

-Porque… estaba besando a tu tía y se me pegó.

-Tío, tú y tía estaban haciendo el amor?

Inuyasha dejó caer la toalla con la que se secaba la cara.

-De dónde sacas esas cosas?

-Papi me dijo que para tener un bebé hay que hacer el amor. Tú y tía no van a tener más bebés?

-No…

Daisuke notó la tristeza en el rostro de Inuyasha.

-Tío…

-Dai, recuerdas cuando Kagome enfermó?

-Sí…

-Pues después de eso, ya Kagome no puede tener más bebés.

-Pero tío, y si le dicen a otra mamá que tenga el bebé?

-No… hacer eso, hiere a Kagome… además, yo no quiero más bebés si no son con ella…

-Pero tío…

-Daisuke, parte de estar casados, parte del amor, es ser fiel. Eso quiere decir que todo lo que haga, debe ser con mi esposa, tener hijos, darse besos… todo.

Daisuke se acomodó al lado de su tío.

-Yo quiero una esposa…

-Sí? Porqué no intentas tener una novia primero?

…………………………………………………

El doctor decidió hacerle una cesárea a Rin. Sesshoumaru, vestido con la ropa de quirófano que le dieron, permanecía a su lado y la acompañaba. El doctor sonrió al verlos, sus ojos permanecían conectados. Sesshoumaru creyó que nadie lo veía y se bajó la mascarilla para besarla en los labios.

-Te amo, preciosa… ya verás que pronto tendrás a otro carlanco más…

-Sessh…

-Hm?

-Sessh… algo me dice que no es niño…

Sesshoumaru sonrió tras la mascarilla.

-Ya el doctor comenzó…

-Sí, lo siento…

-Lo estás sintiendo? Doctor, la anestesia…

-No te preocupes… no siente dolor.

-Preciosa…

-Es verdad, mi amor. Sólo siento el movimiento…

Rin notó la curiosidad de Sesshoumaru.

-Ve a ver, mi amor…

-En serio?

-Sí, ve…

Sesshoumaru se acercó un poco más y vio toda la cirugía.

-Veo al bebé! Kami, qué grande! Es más grande que Ryu!

-Entonces me alegra que sea cesárea…

Sesshoumaru rió.

-Por como me dejaste la mano, yo también… eso es el líquido amniótico?

-Sí.

El doctor comenzó a sacar al bebé con cuidado.

-Y qué es eso en su cuello?

-El cordón umbilical… lo tiene enredado…

-Kami, va a estar bien?

-Sí… es una niña…

-Niña? Es una niña, mi amor!

El doctor le removió el cordón y lo selló con unas pinzas.

-Papá, nos hace los honores?

Sesshoumaru cortó el cordón y se llevaron a la bebé para limpiarla, Sesshoumaru besó a Rin.

-Es preciosa, mi amor! Es realmente hermosa! Se parece a Sakura, pero rubia…

Rin sonrió.

-Me alegro…

……………………………………………………

Rin despertó en la habitación al escuchar un llanto, vio a Sesshoumaru con un pequeño bulto entre sus manos. Mientras se movía con una botella en las manos.

-No le des brinquitos… nunca les gustan…

-Preciosa!

Sesshoumaru se acercó a ella y la besó en la frente.

-Es nuestra hija, mi amor…

-Es hermosa… le estabas dando comida?

-No… bueno, la trajeron para que tú se la des…

Rin se abrió la blusa y se acomodó para amamantarla.

-Qué nombre le pondremos, mi amor?

-Aiko…

Rin sonrió.

-Es un nombre precioso…

………………………………………………..

Ryu fue corriendo a la habitación de sus padres y al no verlos, recorrió la casa, encontró a Daisuke e Inuyasha dormidos en la sala y continuó buscando, como no los encontró, comenzó a llamarlos a voces.

-MAMA! PAPA!

Inuyasha despertó.

-Ryu…

-Tío, y mama y papa?

-Están en la clínica, el bebé nació anoche…

-El bebé?

-Sí… bueno, la bebé, tienes una hermanita, Ryu…

………………………………………………..

Rin sonreía al ver a la pequeña mamar con afán.

-No te molesta?

-No te imaginas… pero vale la pena…

-Kami, te admiro, preciosa… yo nunca sería capaz de pasar por tales cosas…

-Para eso somos las mujeres, para sufrir los momentos más hermosos de tener un hijo…

Sesshoumaru sonrió y la abrazó.

-El doctor te preparó. Y dice que ésta vez es la segura.

Rin sonrió.

-Mira de lo que casi nos perdemos, mi amor…

Sesshoumaru sonrió.

-Es realmente hermosa…

……………………………………………

N/A: Qué les pareció? Me da cosita decir que ya esta muy cerca el final de Vuelve a Mi.

Para quienes me han preguntado, sí soy Dominicana. Tengo 21 años y estudio medicina en UNIBE.

Carlanco, significa niño travieso.

Sin más y cayéndome del sueño, Mizuho se despide de todas y se desliza en su camita para dormir con Sessh.

Besitos

Mizuho (bostezo)