Cuando te crees en las puertas de la locura, que puedes hacer para sostenerte del fragil hilo de cordura.

Capitulo XIV Locura

Tonks saco la valentía gryffindor y camino hacia la habitación de Snape, preparándose mentalmente para lo que pudiera pasar.

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En cuanto la extraña mujer salio, Severus se levanto y empezó a examinar mas profundamente la habitación donde se encontraba, tratando de encontrar alguna pista que le diera esa respuesta, pero no encontró nada que se lo indicara, la única conclusión a la que pudo llegar, fue que ese no era su hogar, ya que estaba demasiado descuidado y de serlo, no hubieran tenido por que llevarle sus cosas. Lo que le recordó el paquete envuelto que le había entregado la mujer.

Lo tomo y lo examino sin abrirlo, no se le ocurrió nada que pudiera caber en aquel paquete, con curiosidad pero con demasiado cuidado quito la envoltura, encontrando que la caja no tenia ninguna indicación que le dijera que contenía, así que procedió abrirla.

-Esto debe ser una broma- se dijo en tono irónico, al ver el contenido de la caja. - aun que no imagino cual seria la broma en una varita de madera.- cerro la caja y la dejo al lado de su cama.

Se dirigió al baúl que la mujer le había traído, posiblemente encontraría cosas que le digieran mas de él mismo, pero cuando se disponía a abrirlo, alguien toco la puerta de su habitación.

-Adelante - dijo mientras se volvía a recostar en la cama.

La puerta se abrió y entro Tonks con la bandeja del desayuno en sus manos.

-Buenos días - dijo rápido y seriamente, mientras buscaba donde acomodar la bandeja para poder salir tan pronto como le fuera posible.

Snape no pudo contestar, miro a la chica con bastante intriga, estaba seguro que la había visto antes, pero no lo graba recordar donde, "sera posible que este recordando mi pasada" pensó Severus, mientras sin darse cuenta endurecía su mirada hacia Tonks.

-Le traigo el desayuno, la señora Weasley lo preparo – dijo sonrojándose ante la inquisidora mirada de Severus.

Severus se dio cuenta del sonrojo de la chica y desvió su vista, pero guardando silencio absoluto para no descubrirse, con algún comentario erróneo, pero asintió con la cabeza en forma de agradecer el desayuno.

Tonks coloco la bandeja en la cama y por alguna extraña razón no pudo abandonar la habitación como lo había pensado, tenia la sensación de que debía disculparse con Snape, pero el silencio de este no le ayudaba a decir nada, por lo que se quedo de pie frente a él.

Severus se acomodo para poder empezar a comer el desayuno, pero noto que la chica seguía de pie frente a él, mirándolo extrañamente.

-Supongo que no se quedara ahí parada viéndome comer – dijo en un tono que demostraba su incomodidad por la presencia de la chica.

-No... claro que no, yo... yo ya me iba, solo que...- Tonks fue interrumpida.

-¿Solo que que?- dijo molesto, no se había percatado del hambre que tenia hasta que tuvo la comida frente a él.

-Siento haber arruinado su misión. -dijo mirando al suelo.

Severus se quedo pensando a que misión se refería la chica, pero no tardo mucho en recordar de donde había visto a la chica, fue la chica que choco con él y la misión debe ser la misma que le comento entonces, aun que se veía diferente supuso se debía al tiempo que paso inconsciente.

-No tiene importancia ahora.- dijo al fin para que la chica se fuera de una vez por todas, por que no sabia como decirle que en realidad le había salvado la vida.

-Si puedo encomendar mi error de alguna forma solo dígame y lo haré.

-Ya le dije que no importa.

-Entiendo no quiere mi ayuda, no hay problema, pero solo quiero que de verdad sepa que siento mucho lo que le paso.

Severus por un segundo estuvo tentado a gritarle a la chica que solamente se fuera y lo dejara solo, sin embargo la insistencia de esta y su comportamiento solo le dejaron entender que lo que sentía era culpa por lo que había pasado.

"Supongo que puedo aprovecharme de su culpa, no pensara nada extraño al pensar que me esta pagando lo que hizo", pensó Severus.

-De acuerdo, si puede hacer algo por mi.- dijo maliciosamente.

-¿Si¿que?- cuestiono Tonks un tanto preocupada por el tono que Severus había usado.

-¿Cuanto tiempo estuve inconsciente?.

Tonks no sabia que era mejor que le gritara a que le preguntara eso, sabia que a Snape no le gustaba estar enfermo, así que el confesarle que lo habían dormido para asegurarse que sanara bien, no le gustaría.

-Bueno en realidad fueron como dos días.- contesto Tonks, pero por la cara que puso Snape supo que si le había molestado, mas sabiendo que era un maestro en pociones y sabría que estuvo bajo efecto de una, así que explico de quien fue la idea para que no se desquitara con ella.- La señora Pomfrey le recomendó a Dumbledore suministrarle la poción para que pudiera sanar bien y él acepto hacerlo, yo solo le daba la poción como me lo indico ella.

Severus se molesto, seguramente la chica suponía que se creería ese cuento, lo habían herido eso lo recordaba muy bien y al revisarse no tenia ni una seña de esa herida, quería decirle que en 2 días su herida había sanado, si como no.

-Pues estoy perfectamente, no tengo cicatriz, supongo debe ser una excelente maga- dijo sarcásticamente, queriendo expresar que no creía que solo en 2 días hubiera sanado.

-Lo es, puede estar seguro.- dijo Tonks molesta por las palabras del Profesor, -así que con su permiso- termino diciendo y se retiro azotando la puerta del cuarto.

Severus se quedo petrificado, repasando la conversación si se le podía decir así, que había tenido con la chica.

-Creo que estoy loco – miro a un lado y encontró la caja que guardaba la varita de madera – o solo tratan de enloquecerme.

Comió un poco del desayuno el hambre había menguado y con la idea de despejarse un poco se baño, al salir de él, reviso el baúl buscando que ponerse, había decidido que tendría que salir de donde estuviera y averiguar si estaba loco o no.

Se vistió con las prendas que encontró en el baúl, cuando termino se miro en el espejo.

-Ya se por que Fiona dijo que parecía un sacerdote, esta ropa negra ayuda a ello. - volvió a verse en el espejo y su mente se fue con Fiona.

-Tengo que saber que es real o no, por que si lo de ella es real, su vida esta en peligro.

Se dirigió a la puerta y la abrió con determinación de salir de aquel lugar y saber respuestas.

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Cuando Tonks salio de la habitación de Snape, estaba tan molesta por que como siempre el profesor Severus Snape se creí único, que no vio nada mas allá de eso.

Entro a la cocina sumamente enojada y diciendo pestes de Snape, Molly, Arthur y Remus (que ya se había enterado de la noticia) la esperaban.

-¿Y bien¿que te hizo?- pregunto Remus al ver el estado de Tonks.

-Sigue siendo un ególatra de primera.- contesto Tonks.

Los tres magos se miraron, sabían que Tonks no era una de las personas favoritas de Snape y conociendo a Tonks, probablemente habría hecho algo que prendiera la furia del profesor.

-No le des importancia, siempre ha sido así.- le consoló Remus.

-Si supongo tienes razón, no se que esperaba de él de todas formas- dijo una Tonks mucho mas tranquila.

Escucharon unas voces en las escaleras, a lo que Molly salio corriendo para llamar a los chicos a desayunar, ella había visto los regalos y sabia que había demasiados dulces ahí, si los chicos los abrían antes de desayunar, ya no comerían los alimentos más importantes del día.

-¡Buenos días niños, feliz navidad.

-Buenos días mama, e igualmente.- contestaron los chicos Weasley.

-Buenos días señora Weasley, feliz navidad.- contestaron Harry y Hermione.

-El desayuno estará listo en un segundo si ustedes me ayudan.- dijo la Molly

-Claro iremos en cuanto veamos los regalos.- dijo Ron.

-¡Ron Weasley, podrán abrir los regalos después de desayunar!.-le grito Molly a Ron, pero mirando a Ginny en señal de que la orden era para los dos.

-Vamos niños, es hora de desayunar.- hablo cariñosamente dirigiéndose a Harry y Hermione, que viendo la situación de sus amigos no se atrevieron a desobedecerla y fueron juntos a la cocina a preparar el desayuno.

Ayudaron rápidamente a preparar el desayuno, el cual comieron mas rápido aun. Salieron en tropel de la cocina dispuestos a ver sus regalos de navidad, los adultos acompañaron a los chicos y juntos abrieron sus regalos correspondientes. En aquellos momentos se podía percibir en el aire la alegría que aquellos momentos les estaba dando a todos.

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Severus salio de la habitación, no le costo trabajo encontrar las escaleras, solo siguió el lugar donde se veía la casa en mejores condiciones. Con precaución de no encontrar a nadie, bajo las escaleras, lo único que podía saber hasta este momento era que la casa donde se encontraba estaba medio abandonada y el piso donde el se encontraba era el que estaba aun mas abandonado que los de abajo.

Entre mas fue bajando las escaleras, el sonido de voces y risas llegaban con mas claridad a sus oídos, al llegar a la planta baja, supo que las voces y risas venían únicamente de lo que podría ser la sala, al otro extremo de lo que el suponía era la puerta de salida de aquella casa.

Suspiro seria libre pronto, entre su libertad (la puerta) y él no había ningún obstáculo, se dirigió a la puerta y puso la mano sobre la manija para abrirla, pero algo lo detuvo.

-¿Te iras así¿como el traidor y cobarde que eres? - dijo una voz dentro de su cabeza.

-No soy ni cobarde ni traidor – se contesto.

-Tienes razón, lo de O'Toole tal vez no existió, así que nunca lo traicionaste y no estas huyendo de lo que podría ser tu vida real.- Severus se molesto con el mismo.

-De acuerdo no perderé nada si veo como son, si no me agrada puedo irme, soy libre¿no?.- razono y soltó la manija de la puerta para dirigirse a las voces y risas.

Viendo desde las sombras, logro ver como unos chicos estaban sentados en la alfombra rodeados de envolturas de regalos, unos adultos sentados en los sillones, no puso atención a lo que se decían o de lo que se reían, solo verlos así hablando y riendo en lo que podría pensar era una familia; hijos, padres, hermanos, primos y tíos, la idea de verlos así le hizo pensar si él no tendría una familia así en algún lado, que esa familia lograra darle un poco de aquella felicidad que compartían los de esa casa y ¿si él de alguna forma era parte de esa familia, con esos pensamientos inconscientemente una sonrisa de esperanza se poso en sus labios.

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Tonks había dejado de poner atención a las ocurrencias de Ron para ver a la persona que los observaba desde las sombras y del que nadie mas se había percatado. Estuvo tentada, tal vez por las consecuencias del enojo que le había ocasionado hacia poco, el pedirle que se marchara, él no tenia derecho de estar con ellos, pero un gesto de su profesor la dejo perpleja.

No estaba segura si lo que veía era real, pero podría jurar que se había dibujado una sonrisa en el rostro del profesor de pociones Severus Snape, el ser que no sabia sonreír, por que no tenia corazón. Pero lo había hecho por que creía que nadie lo miraba.

-¿Cuantas cosas mas puede esconder en esa mascara de amargura profesor? o ¿es que en realidad es usted realmente?.- fue la pregunta que se le vino a la mente mientras lo seguía mirando fijamente.

-Creo que tendré que vigilarlo para poder saber realmente quien es usted.- concluyo.

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Severus empezó a repasar con la mirada a cada persona de esa escena, si tenia que irse quería recordar esto, cada detalle, por que si no podía recuperar su vieja vida, llenaría la nueva de momentos así.

Cuando llego a donde estaba Tonks, sus miradas se cruzaron, ambos sostuvieron la mirada.

Tonks comprobó la habilidad que tenia Severus que al saberse observado podía poner de inmediato una cara de frialdad y odio, su mascara de siempre.

Severus se sorprendió al toparse con la mirada de Tonks, no sabia que alguien lo había visto, pero se molesto con el mismo, al pensar que tal vez si estuviera loco, por que juraría que era la misma chica del desayuno la que veía, pero ahora tenia otro color de cabello y otro color de ojos y eso era imposible a menos que esas cosas fueran producto de la locura.

Antes de que a la mente de Severus llegaran otras opciones lógicas, como el que tuviera una gemela o algo así, un ruido de objetos al caer al piso, hizo que rompiera el contacto visual que seguía manteniendo con Tonks. Nada mas para voltear a ver el origen del ruido como todos los demás.

-¡Profesor Snape?.- dijo una muchacha de cabello castaño y algo revoltoso con una mirada entre sorprendida y temerosa, la cual había sido la causante del ruido al haber tirado sus cosas al verle.

A las palabras de Hermione el ambiente de alegría que reinaba se esfumo, los otro chicos voltearon a verle y Severus pudo ver como las expresiones de sus rostros pasaron de la sorpresa producto de las palabras de aquella muchacha a odio, principalmente del chico de gafas, no sabia la causa pero la mirada de ese chico lo incomodo y solo se le ocurrió combatir fuego con fuego, él también lo vio con odio.

El ambiente se volvió seco, frió y silencioso, pero lo silencioso fue solo hasta que la mujer pelirroja, la que parecía ser la madre de los chicos pelirrojos, le hablo.

-Profesor Snape, que alegría verle bien. Creo que aun no debería andar por ahí, debería de descansar aun se le ve algo pálido...- Molly siguió hablando mientras intentaba guiar a Severus de regreso a su habitación.

Severus no vio conveniente el negarse a ser regresado a sus habitaciones, eso solo podría causar alguna discusión con la señora y el pretender intentar salir de la casa ahora seria imposible con todos ellos viéndolo.

Antes de irse del lugar su mirada se volvió a cruzar con Tonks, esta vez ella ponía suma atención a las reacciones del profesor, ella solo noto que aunque su rostro mostraba odio, su mirada estaba perdida él no estaba ahí, algo que le causo mas curiosidad.

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Severus llego a su habitación sin saber que mas le había dicho aquella mujer, excepto por la insistente repetición de que lo mejor seria que no saliera de su cuarto, hasta que un tal Dumbledore hablara con él.

Cuando estuvo solo en su habitación, solo una cosa invadía sus pensamientos¿Que cosas pudo haber hecho para provocar la mirada de odio de aquel joven?. Esa mirada de odio solo la había visto en O'Toole y a él lo había traicionado.

Empezó hacer planes para poder averiguar entre otras cosas, por que aquel chico lo odiaba y lo mejor ya tenia en mente quien podría informarle, solo tenia que saber como se llamaba, diferenciarla de su hermana gemela que ahora pensaba era la chica que estaba abajo y desde luego seguir manejando su culpa, para que no sospechara mucho de sus preguntas.

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Cuando la señora Weasley subió con Severus, en la sala una discusión se llevo a cabo en la sala, o mejor dicho una serie de preguntas respecto al profesor Snape, su regreso y cosas que los chicos querían saber, pero como única respuesta fue que eso a ellos no le concernía y que no dijeran nada de él hasta que el director Dumbledore lo autorizara. Los chicos a regañadientes, tuvieron que dejar de preguntar y fueron mandados a sus cuartos.

Lo que no imaginaron que un miembro de la orden del fénix, llamado Mundungus, había entrado por la puerta justo para ver subir por las escaleras a lado de Molly, al supuesto fallecido Severus Snape y que al escuchar el alboroto en la sala no creyó oportuno entrar ni hacerse presente y tal como entro se retiro del cuartel, pensando que miembro de la orden podría invitarle un trago si les contaba la identidad del misterioso huésped del cuartel.

continuara...

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Pues ya esta otro cap de este fic, espero les siga gustando, si tienen algún comentario bueno o malo, sera igualmente agradecido.

Gracias por seguir leyendo y gracias a las personas que han dejado review anteriormente.

Saludos.

Nocrala