Cerezos en flor: AU

- - - -

Kasumi: Misty

Satoshi: Ash

Hiroshi: Richie

Takeshi: Brock

Nanako: Casey

Hanako: Sra Ketchum

Sakura: Daisy

Capitulo 02

- - - -

- Esto es inadmisible!. Una completa deshonra a mi hija y a nuestra familia!. El honor de Kasumi ha quedado manchado a causa de la irresponsabilidad de ese muchacho!-

- Lord Yawa, calmese. Lo entiendo, siento una completa vergüenza por el comportamiento de Satoshi… Es una afrenta terrible para su familia, pero…-

- Terrible es poco!. Es una falta de moral!. De principios!. Una injuria!-

- No lo tome asi, Lord Yawa. Conozco a mi hijo… Satoshi se disculpara frente a la muchacha. Reinvindicará este hecho vergonzoso y…-

Kasumi suspiró mirando sus manos inmóviles en la falda. Desde el lugar en el que estaba podia oir las voces de su padre y las de su futuro suegro discutiendo acalarodamente en el salón al que se habian retirado discretamente para que ella no los oyera.

Pero sus palabras, sobretodo el volumen de voz de su padre, parecia flotar atravesando las paredes hasta sus oidos.

Se miró las manos otra vez, sintiendose extremadamente ridicula con su vestido bordado azul y la hilera de perlas diminutas que recogian su cabello rojo al mejor estilo de una princesa occidental. Las yemas de sus dedos tocaron el delicado collar que enlazaba su cuello, identico al brazalete que ahora veia brillar en su muñeca.

Volvió a sentirse ridicula…

Pero Nanako habia insistido en vestirla de ese modo para el compromiso. Para que pudiera causarle un gran efecto a su prometido. Recordó sus palabras mientras le ceñia los lazos del vestido 'Lord Sekai se quedará en una pieza apenas la vea, Milady…' Ella se habia reido.

Solo que su prometido no estaba allí. Nunca apareció. Habia cumplido al pie de la letra su parte para que ese matrimonio no se efectuara. Con el desaire de no presentarse a la reunión formal, le daba a ella meritos suficientes para disolver el compromiso.

Kasumi volvió a suspirar y paseó la vista por la habitación. Era elegante y a pesar de las extrañas circunstancias, descubrió que le agradaba. Ese castillo parecia tener algo que el suyo habia perdido hacia mucho tiempo.

Una mesa larga estaba tendida llena de bocados dulces y demas entremeses. Ella no se sentia capaz de probar algo.

Levantó la taza y al instante, una doncella se materializó a su lado para servirle te. Adivirtió que la miraba con simpatia y pena.

- Lo siento tanto, querida…-

Kasumi alzó la vista al oir esa voz preocupada. Una bella mujer morena estrujaba las manos.

- Soy Hanako, la madre de Satoshi…-

Ella inclinó la cabeza en una sorprendida reverencia. Ninguna dama de sociedad ( a menos que estuviera muy desesperada) daba a conocer su nombre a una niña, o a alguien inferior que ella.

- S- su gracia…-

- Dime Hanako- la interrumpió mirandola firmemente – Eres muy hermosa, tal y como mi esposo y yo siempre imaginamos fuera la esposa para nuestro unico hijo…-

Kasumi sonrió –Creo que su hijo no busca la belleza en una esposa…-

- Oh, ese muchacho es muy tonto! –dijo la dama con rapidez –Pero no es malo!. Tiene un corazón inmenso y será un excelente padre…- cuando la joven, sonrojada, dejó la taza vacia sobre la mesa aprovechó para tomarle la mano –Por favor, no anules el compromiso… dale otra oportunidad a ese muchacho atolondrado…-

- Creo que él no quiere conocerme, Su gracia- murmuró con suavidad recordando la visita que su criado le habia hecho tiempo atrás. Por supuesto trataba de enfocarse en sus palabras y no en el beso (su primer beso…) que aquel atractivo descarado le habia robado.

La dama apretó su mano –Por favor… por favor…-

Kasumi no pudo negarse. De alguna manera envidiaba a aquel hombre que contaba con una madre dulce y comprensiva que intercediera por sus errores. Ella habia perdido la suya hacia mucho tiempo, y la actitud maternal de esa mujer no hizo mas que recordarle lo sola que se encontraba en el mundo.

Asintió suavemente.

- - - -

- Y solicitas el perdón de rodillas!-

Satoshi estaba apoyado contra la pared escuchando los gritos enfurecidos de su padre. Tras una pequeño vistazo a la comida intacta, las miradas de desaprobación de la servidumbre, el silencio mortal de su madre y la ira de quien en ese momento vociferaba, supo que su desplante habia hecho mas de lo necesario. No pudo evitar sonreir al imaginarse libre por fin de aquella prometida indeseable. Libre de pedir la mano de la doncella de cabellos de fuego. O de raptarla, tal vez. Lo mas probable es que la pobre no tuviera familia…

- …Quizas y la joven todavía acepte tu propuesta de matrimonio…-

Satoshi volvió a la normalidad –Perdón padre?- preguntó perplejo – Creo que no lo he oido bien…-

- Iras ahora mismo a ofrecer tus disculpas a Lady Yawa y a toda su familia-

- Desde luego- se inclinó.

- …Y a suplicarle que se case contigo-

- QUE?. Yo no haré eso, señor! –exclamó antes de pensar lo que estaba diciendo. Entró a calmarse –La muchacha debe estar furiosa conmigo, padre. Que le ofrezca matrimonio otra vez seria la peor humillación que puedo hacerle… Seguramente ya ha quebrado el compromiso frente a su familia-

- No lo hará, hijo- su madre habló por fin rompiendo el largo silencio –Es una buena joven, me prometió que no lo haria. Por favor comportate como un caballero y cumple tu palabra desposandote con esa niña. Eres el unico que puede borrar la vergüenza que has puesto sobre su nombre y sobre el tuyo…-

Se incorporó de la pared con rabia –Lo siento, mamá…- Satoshi sacudió la cabeza –Padre, no puedo hacer eso…-

- Que…?-

- Le rendiré mis excusas a la muchacha, pero no me casaré con ella-

- Que demonios estas diciendo?-

Satoshi miró el rostro airoso de su padre finalizando en la triste expresión de su madre –Quiero tener la posibilidad de ser yo quien elija a mi futura esposa…- ellos no atinaron a decir nada, él continuó – Quiero que mi matrimonio sea como el de ustedes, sin acuerdo nupcial…Quiero enamorarme de una mujer como mi padre se enamoró de usted, mamá…-

- Como sabes que no te enamorarás de tu prometida?- preguntó esta con suavidad.

Él cerró los ojos resoplando –Lo sé…- hizo una pausa diplomatica antes de soltar lo demas – Lo sé… porque ya he encontrado a esa mujer especial…-

Esperaba que una nueva tormenta de gritos y lagrimas se desatara, pero en lugar de eso solo hubo una tensa quietud. La calma que precede a la tempestad. Satoshi se preparó para salir.

- Lo siento…- murmuró inclinandose incomodo frente a esa extraña situación.

La señora Hanako salió de la habitación sin decir palabras. El silencio notorio en sus acciones. Era el viejo metodo de castigo que solia usar con él, ignorandolo por completo como si no existiera.

- Espero que sepas…- dijo el hombre mayor lentamente –Que has herido de muerte a tu familia…-

Satoshi solo inclinó la cabeza, sin fuerzas para decir algo mas –Lo siento…-

- - - -

- Retirate!-

Satoshi observó a la nueva joven que habia tomado el lugar de la mucama.

- Lady Kasumi Yawa?-

Esta hizo una mueca de horror –Por Dios, no!. La tonta de mi hermana menor no tiene punto de comparación conmigo!. Yo soy mucho mas bonita!-

Satoshi reprimió una mueca, divertido.

- Soy Sakura- la mujer le tendió la mano –Kasumi es mi hermana- él se la besó cortésmente –Y usted, Milord?. Quien es?-

Satoshi sintió un escalofrio rondandole la espalda. Algo que esperaba le pasase apenas le pidieran su identidad. Reprimió un suspiro.

- Soy Satoshi Sekai, el… el prometido de su hermana…-

La joven parpadeó sus enormes ojos verdes y estos se llenaron de ira -¿Usted?. ¿C-como se atreve a aparecerse aquí luego de la humillación que…?-

- Espere milady…- la interrumpió – Solo quiero ofrecerle mis disculpas…-

- Callese!-

Ella echó a caminar metiendose en un inmenso salón. Él la siguió todavía rogandole que lo oyera.

- Padre…- la muchacha se detuvo ante un hombre mayor que leia un periodico. Tenia un aspecto serio y a la vez, bondadoso- Lord Sekai esta aquí-

El nombrado tragó saliva varias veces e inclinó la cabeza en una reverencia –Buenas tardes, Su Gracia…-

El caballero lo miró fijamente – Venir aquí no ha sido facil para usted, o me equivoco?-

- No, milord-

- Ha venido a ofrecerle las excusas pertinentes a mi hija?-

- Si, milord- Satoshi inclinó la cabeza otra vez –Ha sido un agravio terrible de mi parte…-

- Muy bien- el caballero se quitó los anteojos masajeandose la frente –Sakura ve a buscar a tu hermana-

- Pero padre…- la joven interrumpió mirando furiosa al recien llegado –No merece el perdón de Kasumi… ni que ella siga adelante con el compromiso!. ¡Se merece la horca!-

- ¡Sakura!-

La muchacha echó su ondeado cabello rubio tras su hombro y tras dirigirle una ojeada asesina, salió presurosa por una puerta que una mucama acababa de abrir atonita.

Satoshi observó con horror sus manos. ¿Esa joven habia dicho que su prometida lo perdonaria y que encima mantendría intacto el compromiso con él?. ¿Qué clase de loca era esa…?. El sabia que ninguna mujer en sus cabales aceptaria seguir con los planes de una boda cuando su prometido la hubiera expuesto a desplantes y humillaciones. No. Una mujer sensata tenia orgullo y obviamente odiaria caer en los chismes de la gente.

De alguna manera debia lograr que ese matrimonio fuera disuelto.

Los minutos transcurrieron, sin que ninguna de las dos mujeres hiciera su aparición. Lord Yawa volvió a concentrarse en su periodico, haciendole una que otra pregunta cortes al visitante. Satoshi sentia que el panico aumentaba dentro de si con cada tic-tac del reloj de pie.

- Espere aquí, por favor- el Sr Yawa se levantó con impaciencia desapareciendo luego por el mismo lugar por el que lo habia hecho su hija.

Satoshi, tan impaciente como era, esperó solo unos pocos segundos. Una nueva idea en su cabeza. Una locura. Encontrar a la doncella de los cabellos de fuego. Se incorporó rapidamente dispuesto a cumplirla.

¿Pero donde hallarla en ese inmenso caserón?. ¿Y que es lo que iba a hacer una vez que la encontrara?. ¿Raptarla…?. Y por la expresión determinante que mostraban sus facciones, era lo que pensaba hacer.

Sin importarle el lugar donde se encontrara ahora.

Estaba sonriendo, sin duda su mente se hallaba muy lejos de la situación actual.

' Conseguir un sacerdote… esperar que los animos de la familia se calmen antes de presentarla en sociedad…Se que a mamá le va a gustar…'

Caminó hacia uno de los costados de la habitación y abrió una puerta. Salió por esta sigilosamente y anduvo por un angosto pasillo que desembocó en otra sola tan grande como la anterior. La cruzó, consciente del poco tiempo que pudiera quedarle. Estaba desierta. Siguió por otro pasillo que lo condujo hacia algo parecido a un jardin.

Una figura solitaria cruzaba el sendero y él permaneció sorprendido e inmóvil al ver de quien se trataba.

El cabello de la doncella llameaba como fuego aun a pesar de la distancia que estaba de él. El viento lo alzaba en el aire como si fuera un abanico de seda roja. Suspendiendolo apenas unos segundos, para caer y luego volver a elevarlo con renovado brio.

Satoshi estaba tan contento de haberla encontrado, que ni por un momento reparó de que estaba en la casa de su actual prometida y que todavía no habia roto aquel compromiso.

Sus piernas empezaron a moverse hacia la joven sin pensarlo. Ensayaba mentalmente la apasionada confesión de amor que le haria, tras la cual, solicitaria su mano ofreciendole el anillo mas hermoso que ella hubiera visto en su humilde condición.

Pero la doncella volvia sobre sus pasos y entraba en el castillo (seguramente alertada por los gritos que su ama daria al enterarse que su novio estaba alli para rendirle una explicación. Pobre ilusa! No imaginaba que esa seria la primera y unica vez que lo viera en su vida…)

Entró de nuevo en la casona, oyendo un ir y venir de zapatos femeninos. Alli estaba esa belleza otra vez. Era su oportunidad de ir a hablarle.

- Kasumi- la voz de la joven rubia, de Sakura o como sea que se llamase, se oyó desde un costado del salón.

Satoshi se detuvo detrás de una columna, sin ser visto.

- Que quieres Sakura?- la joven habia ladeado la cabeza respondiendo al llamado.

Satoshi contuvo el aliento. Las ideas empezaron a dar vueltas en su mente.

'Ella es kasumi?'

- Kasumi!-

- Que?- la muchacha reiteró con una nota de fastidio en la voz.

Él la observó levantar el ruedo de su falda de seda y echar a caminar hacia donde provenia el llamado. Tardó varios segundos en relacionar lo que habia oido a lo que estaba pasando.

- Tu prometido está aquí. Papá solicita tu presencia-

- Lord Sekai esta aquí…?-

- Si, el muy canalla viene a 'ofrecerte sus disculpas' como si nada hubiera pasado. No entiendo porque no quiebras ese compromiso de una vez por todas, hermanita. Eres joven y linda, no será la unica propuesta que recibiras… Al diablo con ese sujeto-

- No puedo hacer eso, Sakura. Le di mi palabra a su madre de que no romperia el acuerdo-

- Eres una tonta sentimental!. El sujeto busca romper contigo, no te das cuenta?. Ni siquiera tenia un rasgo de culpabilidad en la cara!. El muy cobarde…-

- Sakura basta!. No juzgues a las personas sin conocerlas…-

- Santa Kasumi ha hablado!. ¿Y entonces que?. ¿Le digo a papá que vendras o me daras el gusto dandole un desaire a ese sujeto?-

- Ire. Solo necesito retocarme un poco… En unos minutos estaré ahí-

- Realmente eres una estupida-

Satoshi oyó los pasos que se alejaban y luego un pequeño suspiro procedente de quien se habia quedado allí. Sacó la cabeza de atrás de la pared para observar a su prometida. Su prometida al fin…

La expresa resuelta de su rostro de porcelana se perdia en un aire de triste meditación. Sin duda las palabras de la otra mujer todavía continuaban danzando en su cabeza. Confundiendola mas de lo que estaba. Deseó que su 'cuñada' hubiera mantenido la boca cerrada, él era demasiado consciente de su culpa…

Ahora no pudo evitar sonreir al pensar en aquello. Sus padres le habian arreglado el matrimonio con la mujer mas hermosa de la tierra e iba a estarles agradecido de por vida. Las cosas no podian ser mejores. Sin embargo, sus sonrisa murió un poco al recordar –otra vez- lo que habia hecho para que esa boda se disolviera. Se mordió el labio con frustración. Gracias a Dios que no habia permitido que sus estupidos impulsos fueran demasiado lejos.

Ella iba caminando hacia él 'Necesito retocarme un poco' habia dicho a su hermana, y sin duda se dirigiria a su habitación. Satoshi la veia tan o mas hermosa que la noche que la sorpendió. Ahora a la luz del dia, sus rasgos delicados eran mas suaves y acentuados.

Se mantuvo oculto tras la pared y cuando la joven pasó junto a él, la tomó del brazo atrayendola hacia su cuerpo. Ella hizo ademan de defenderse, el cual cesó al reconocerlo.

-Lady Kasumi?- preguntó buscando la afirmación de lo que ya sabia por medio de los labios de ella.

Esta asintió – Su señor me está esperando en la sala… Me permite?-

Él no dejaba de mirarla. Se preguntó si ella ya se habia dado cuenta. Todo en esa niña era hermoso, hasta la manera natural con que parpadeaba, enseñando sus pestañas largas y oscuras. Satoshi observó su ropa. Habia sido estupido de su parte creer que una mucama podria vestirse asi. Pero entonces?. Esa noche…

- Por favor, señor…- Kasumi murmuró bajando la vista sonrojada. Aquel individuo la hacia sentirse extraña, incomoda. Necesitaba estar bien para enfrentarse a su prometido y ese encuentro no la estaba ayudando.

Él parecia renuente a soltarla, y ella se preguntó si acaso intentaria besarla otra vez.Ahora que ya sabia quien era, seria descabellado intentarlo. Moriria antes de curzar la puerta.

- Debo irme…- musitó presionando su mano izquierda en el pecho del joven. Escondiendo la vista de esos ojos color almendra que la estudiaban con intensidad.

Satoshi observó el anillo en su dedo, era emblema de que estaban comprometidos. De que todavía habia esperanzas.Y de que esa adorable jovencita seria suya muy pronto.

- Kasumi!-

La voz de la inconfundible rubia sonó otra vez, y antes de que Satoshi se diera cuenta. Caminó hacia donde estaban ellos.

- Kasumi!. Kasumi, que se supone que…?- al verlo se puso palida –Lord Sekai?- se volvió a la sorpendida expresión de su hermana menor –Kasumi!. Ya se conocian?-

La nombrada parpadeó perpleja observando a su sonriente captor.

- Mi padre estaba buscandolo, Milord –Sakura alzó las cejas en un gesto ironico –Creyó que se habia arrepentido de su decisión y se habia marchado-

- Estoy aquí, Milady. Estaba a punto de ofrecerle mis disculpas a su hermana- Satoshi observó la expresión vacia de esos hermosos ojos verde-azul.

- Kasumi?-

La muchacha alzó la vista. Sus rosados labios se habian convertido en una linea apretada y tensa, y ahora un azul profundo predominaba en sus verdes irises. Se alejó de él casi respirando con dificultad.

- Usted…?. Ustdes es… es mi prometido…?- preguntó con voz queda.

A Sakura le pareció que estaba desilusionada. ¿O era enojada?.

Él asintió sonriendo –A sus pies, Milady…- e hizo una galante reverencia.

Ella cerró los ojos por un momento y de pronto le entraron grandes deseos de llorar.

- ¿Cómo se atreve a aparecerse por aquí luego de lo que hizo?- Lo miró – Pero yo satisfaceré su pedido, Milord…- con tranquilidad se quitó el anillo sosteniendolo en alto frente asi, entre los dedos pulgar e indice. Ajena a la expresión alarmada que apareció en el rostro del joven. Volvió a cerrar los ojos mientras despegaba los dedos y la alianza caia en camara lenta hacia el vacio –Yo quiebro todo compromiso que pudiera unirme a usted-

- ¿Qué?-

Sakura sonrió.

- Lamento haber roto la promesa a su señora madre. Pero esto se acabó…-

La pequeña argolla hizo un leve tintineo al chocar contra el suelo.

- - - -

Continuará…

Nota:

Perdón por tardarme tanto en actualizar, pero tenia fiaquita n.nU. En fin, el proximo capitulo es el autoconclusivo. Muchas gracias a quienes me dejaron sus reviews, y agradezco sus comentarios a favor sobre los AU. (no hay muchos de ellos, parece que a no todos les gustan !)

En fin, esta idea daba para mas, lamentablemente mi cerebro se negaba a extenderla mas allá de los tres capitulos, lo siento!. Pero quizas haga otro fic basandome en la epoca medieval (la cual me encanta) y en el cual me explaye un poco mas, bueno Uds ya me conocen :D

Gracias otra vez!

Se lo dedico a Lys, Psy y Julian. Chicos gracias por dos años de amistad! (dos años! O.O). Bueno, Lys con vos son cinco años! Huh!. Felicitaciones, chica! O.O. Ah, y mi msaje para Uds tres… Terminen sus fics!

Sumi chan