Capitulo 2: La Sangre Derramada
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Al ver la lluvia caer mi corazón palpito,
y es que no podía aguantar la dicha,
de ver la lluvia limpiar, la sangre esparcida.
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"¿No es peligroso hacer eso Noyeres?" pregunto el hombre de edad adulta
Con su túnica azul turquesa resplandeciente, el anciano hombre se puso de pie "Seremos prudentes Albus" tercio Noyeres con su suave y dulce voz
"Estoy completamente de acuerdo con Albus" reprocho Maia McGonagall "Sabemos que debe de haber un intento de paz con los franceses pero, ¿traerlos aquí? Noyeres es peligroso"
"Las señoritas Artois han sido muy amables y los chicos las adoran" dijo el anciano sonriendo
Maia arrugo la nariz "Pues los míos no están muy contentos"
Noyeres sonrió afablemente "Los…merodeadores querrás decir, han puesto a esos chicos en su lugar"
Maia alzo la barbilla altivamente, mientras Albus reía suavemente "Son chicos muy picaros" comento Albus
"Traer gente de Francia a Hogwarts hará que se note la confianza que ambos países se tienen" afirmo Noyeres "Y que no estamos envueltos en esas disputas políticas"
Maia y Albus le miraron con expresiones alarmantes, para ellos era dejar que el enemigo se metiera en el territorio y fisgoneara todo a su antojo. "Noyeres, siempre he pensando que tus decisiones son sensatas, sin embargo esta vez me temo estoy en desacuerdo" comento Albus tranquilamente
El director fue de su escritorio hasta ambos profesores, se coloco enfrente de Albus como dando a entender que estaba dispuesto a escuchar sus teorías.
"La tensión entre ambos bloques se ha disipado hasta el borde la locura" comento Albus "Traer Franceses a Inglaterra es una locura, el Ministro…"
"Los problemas franceses deberán quedarse allá, aquí vienen a estudiar" dijo Noyeres lentamente "Además son alumnos"
"Las fricciones Inglesas y Francesas ya se han vuelto a destacar Noyeres" insistió Maia "Tienes los ataques a los puertos Southampton, Portsmouth, Steyning, Hastings…"
"Maia, son estudiantes los que traemos a Hogwarts, no potenciales terroristas" afirmo
"Artús seria peligroso" continuo Albus "Quizás ellos no nos hagan algo, pero que tal que por accidente algo les sucede a los jóvenes, tendríamos graves problemas"
"¿Por qué habrá de sucederles algo a ellos?" pregunto Artús
"Los chicos juegan pesado, y…son jóvenes, orgullosos de sus raíces" murmuro Maia
"Quieren decir que podrían iniciarse disputas por la diferencia de naciones" inquirió Artus "Eso es tonto, además hablamos de nuestros estudiantes, nuestros jóvenes a quienes estamos educando"
"Precisamente porque los conocemos, preferimos prevenir" instigo nuevamente Maia
"¿Hablas por todo el colegio o solo por esos alumnos tuyos Maia?" pregunto Artús "No quieres que comentan alguna tontería por esos ataques de gloria que aun no logran controlar"
"No son los únicos" tercio Albus "Los alumnos han crecido en la incertidumbre de las asperezas de diversas naciones, seria natural"
"Quieren decir que mis alumnos son nacionalistas obsesionados" bramo Artús
Maia y Albus se miraron fijamente, no, los alumnos no eran unos nacionalistas obsesionados, pero podían ocurrir millones de percances y lo que menos deseaban era iniciar una guerra en aquel lugar.
"Artús, pueden suceder millones de cosas, no queremos problemas" sincero Maia finalmente
La expresión de Artús se suavizo completamente "Si esto sale bien Maia, puede que ayudemos a restablecer la paz"
La mujer asintió con la cabeza dubitativamente, millones de cosas podrían suceder.
"Mañana llegaran a Hogwarts" les anuncio Artús "Anuncien eso a sus demás compañeros"
Maia y Albus Dumbledore salieron del recinto en silencio, sabiendo que aquella era la peor decisión que Artús Noyeres, director de Hogwarts había tomado para ayudar a ambos territorios, algo extraño recorría sus venas gritando escandalosamente "Tragedia"
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Desde que inicio el día la rutina de Hogwarts cambio por completo, todos los alumnos fueron levantándoos a las seis de la mañana obligados a alistarse y bañarse en tan solo una hora, para que puntualmente a las siete de la mañana todos estuvieran desayunado en el gran comedor.
"Alumnos antes de que inicien el desayuno quiero anunciarles la llegada de ocho nuevos alumnos a Hogwarts, quiero que sean bienvenidos entre nosotros y no se guarde rencor alguno en sus corazones a causa de los recientes altercados con su país" anuncio el director desde su silla de oro macizo
Los alumnos comenzaron a cuchichear por lo bajo.
"Ellos vienen de la academia Beauxbatons, Francia" hizo resonar su voz
Varias caras de indignación se vislumbraron en el gran comedor, Artús trato de calmar los murmullos sin conseguirlo satisfactoriamente y es que claramente sus alumnos estaban disgustados, franceses en Hogwarts como invitados especiales, era como llevar a judíos a la mesa de Hittler en al segunda guerra mundial y encima servirles.
Dichas molestas se silenciaron hasta que Albus Dumbledore hizo un suave movimiento con su varita y esta emitió un fuerte pitido que acallo cualquier murmullo.
"Gracias Albus" le dijo Artús "Por favor hagan a un lado las diferencias que el mundo de haya fuera les esta imponiendo, recuerden que de preferencia las disputas muggles no deben afectar nuestro mundo"
El silencio en el gran comedor siguió hasta que poco a poco los alumnos volvieron a hablar rezongando sobre aquella decisión de su director.
"Franceses, ¡Aquí!" chillo Lilian molesta
"Algún intento de ayuda desesperada" comento Lucius indiferente
"Las disputas muggles no deben interferir en nuestra vida" sentencio Severus
Lily metió su cuchara de forma demasiado brusca en la avena haciendo saltar pedacitos de esta "Sabias que los franceses han matado a diversas gentes de los puertos"
"Lilian no creo que sea buena idea discutir eso, son cosas muggles" murmuro Malfoy
"¡Había magos en el puerto Lucius!" chillo Lilian
"Además si quieres culpar a alguien no deberías culpar a los franceses, si no a los ingleses" dijo Snape firmemente "Ellos aceptaron a esos refugiados franceses"
"Todo por alimentos" gruño la chica
En la época que les había tocado vivir, se vivía en una constante lucha por alimentos y agua, la demografía había aumentado por las nubes y la escasez era natural de aquella época, cada país tenia sus problemas, sin embargo en Francia comenzaron a suscitarse una serie de rebeliones socio-políticos que evolucionaron en conflictos armados, masacre entre el mismo pueblo y una barco con cuatro ladrones de las reservas alimenticias del estado, encontrando así un barquito con poco mas de una mercancía que podía alimentar reciamente a todo un condado por toda una semana enteran.
Bajita la mano y tras una firma de diversos tratados, Gran Bretaña se adueño del barquito, Francia protesto por aquella ofensa, los anglosajones pagaron la ofensa con miles de libras esterlinas.
Poco después Gran Bretaña hizo reclamo de las propiedades de los cuatro ladrones con lo cual tuvo derecho a saquear parte de las cosechas de Francia, aunque prometió pagar altos impuestos por lo que llevara a su país, naturalmente Inglaterra podrían permitirse cualquier lujo y derrochar el dinero, sin embargo a Francia de poco le servia aumentar las galeras de oro ingles cuando no tenia con que alimentar a su pueblo.
Invertir en traer comestibles de mas haya del mar atlántico era una empresa demasiado cara, que ni siquiera la misma Gran Bretaña podía soportar, por tanto y como único recurso, Francia inicio batalla abierta contra Gran Bretaña por el saqueo de sus alimentos.
En conclusión Francia y Gran Bretaña estaban en disputa por agua, alimentos y riñas pasadas que sacaban corajes guardados desde las guerra de los cien años.
"Da igual si son francesas, checoslovacas o musulmanas, con que sean hermosas me basta" dijo Sirius jugando con la copa de su jugo de calabaza
Todos los presentes pusieron los ojos en blanco "Tenias que pensar primero en tus bajos instintos" gruño Liliana
Sirius se encogió de hombros "Así me quieres bonita"
Liliana sonrió "No me hacen gracia los franceses"
"¿Por qué?" pregunto Remus
La joven torció los labios "Ideas" murmuro finalmente
Los chicos se miraron los unos a los otros, aquello no era una buena excusa
"Yo no tengo porque odiarles, me dan igual" sincero James indiferente "Mientras no quieran pasarse de listos aquí, a mi me da igual"
Peter, Remus y Sirius asintieron, estaban de acuerdo con James, para ellos no existía rencor, y se les hacia bastante tonta la disputa.
"¿Y que hora se supone que llegan?" pregunto Peter acostándose sobre la mesa
Liliana se encogió de hombros "Por mi que ni lleguen"
"Supongo que muy pronto por algo nos lo han anunciado" comento el joven mientras comía un par de ciruelas
James alzo el brazo para tomar una manzana del frutero cuando este desapareció de inmediato, pensando que era una broma pesada para él miro a su alrededor en busca del candidato, sin embargo observo que todos los demás platos y cubiertos del desayuno se había esfumado.
"¿Qué demo…?" bramo el chico pero las manos de Liliana le cubrieron la boca
"En veinte minutos nuestros invitados llegaran hagan favor de esperar pacientemente y cuando lleguen pongan su mejor cara" exclamo el director
Nuevos abucheos y murmullos de disgusto inundaron el gran comedor, el director salio por el pasillo principal a lado de Maia McGonagall y Albus Dumbledore quienes eran sus profesores mas allegados, se decía que antes de ser director, cuando fue profesor de Runas Antiguas, el profesor Artús Noyeres tuvo como alumnos a ambos profesores, naturalmente en diferentes años y desde entonces les profesaba suma confianza.
Durante cuarenta minutos los jóvenes estuvieron encerrados en el gran comedor cuchicheando por lo bajo diversas cosas, pues no tenían mas opción que esperar.
"Crees que se tarden mucho Gea" pregunto Lilia impaciente
La joven de ojos entre gris y azul parpadeo varias veces antes de encoger los hombros y seguir mirando a su alrededor, lo mas notable de ella eran sus ojos permanentemente abiertos como los de una lechuza, tan grandes que le daban la apariencia de ser la viva imagen de una caricatura japonesa, su cabellera era rubia opaca, como si una ligera capa de ceniza la hubiese bañado, sus cejas y cutis estaban visiblemente descuidados, el escudo de Ravenclaw brillo dos veces bajo la presencia de Lilia, antes de que la joven decidiera hablar.
"Creo que Bellatrix esta enamorada" susurro por lo bajo
Lilia miro a una de las hermanas Black que estaba sentada al final de la mesa de los Ravenclaw, miraba a su alrededor con la típica superioridad de un Black, dos chicas le hacían compañía y la veían como si fuera una diosa.
"De si misma" murmuro Lilia
Gea negó con la cabeza "No deja de mirar a Sirius"
Lilia río por lo bajo, todo el mundo sabia que esos dos eran como agua y aceite, muchos los comparaban con la pareja, Lilian/James, siempre odiándose hasta la muerte, únicamente que había una diferencia en las chicas, Lilian era amable con la mayor parte de la gente, Bellatrix por el contrario era despreciable, una Ravenclaw demasiado escalofriante.
Todo el mundo se preguntaba porque Bellatrix se encontraba en Ravenclaw y no en Slytherin como su primo, algunos especulaban que se debía a que se odiaban tanto que cuando Sirius fue elegido para Slytherin ella prefirió irse a Ravenclaw, que es superior a Gryffindor y Hufflepuff según las ideas de su sangre, la única verdad es que una serpiente tan maliciosa como ella en la casa de los inteligentes y supremos eruditos Ravenclaw, daba mas que miedo. Inteligencia, belleza y crueldad, terrible combinación.
"Creo que busca la manera de cómo declararle su amor" opino Lilia sonriendo
Gea miro a Lilia a través de sus grandísimos ojos como si Lilia hubiera descubierto la cura para el cáncer "Tienes toda la razón"
Lilia iba a replicar aquella frase cuando las puertas se abrieron nuevamente, todos los alumnos se colocaron de pie, optando por la típica cara fría de un ingles. Artús paso por entre sus alumnos pidiéndoles que sonrieran, sin embargo pese a que él mismísimo director lo pedía nadie lo hizo. Albus y Minerva entraron por los pasillos laterales del lugar hasta colocarse en sus asientos reservados en la mesa de los profesores.
Quienes guiaban al pequeño grupo de Beauxbatons eran nada mas y nada menos que Nasya y Nahimana Artois.
Fugazmente por la cabeza de los jóvenes pasaron las imágenes de la noche en la torre de adivinación, James tuvo que agarrarse de la mesa para no caer del sobresalto al ver pasar las túnicas de azul claro con capas blancas que estos portaban, de inmediato el sabor a hiervas volvió a su boca, el vértigo de la carrera a caballo le sacudió todo el cuerpo y el intenso rayo apareció sobre el techo de Hogwarts cayendo justo por encima de la cabeza del director, James dio varios pasos hacia atrás tratando de controlar el súbito mareo que le había acometido, Liliana y Sirius se apresuraron a colocarle de nuevo en su lugar.
"¿Te sientes bien?" pregunto Liliana preocupada
James asintió suavemente "Me ha faltado comida" se excuso tontamente
Sirius miro a su hermano sumamente inquieto, preguntándose que le estaría sucediendo, él nunca había tenido ataques repentinos.
"¡Bienvenidos a Hogwarts!" les saludo el profesor extendiéndoles los brazos
La expresión en la cara de los franceses era de nerviosismo, como si temieran que los chicos ingleses saltaran de pronto sobre ellos y los devoraran como los leones a los cristianos en la época de Nerón.
Una joven de cabellos blancos brillantes, tez albina y ojos profundamente negros salió al encuentro del director.
"Beauxbatons, le da las ggacias a Hogwagts pog habegnos invitado a este integcambio estudiantil" hablo la joven firmemente "En ggatitud a la invitación en estos tiempos de discogdia entge ambas naciones, Beauxbatons quiege que Hogwagts geciba un pgesente"
Entre dos jovencitas y dos jóvenes apuntaron sus varitas al cielo las movieron gracialmente antes de hacer aparecer una enorme copa de plata brillante, formada por un decágono, en cuatro lados se vislumbraban diversas figuras de un lado una copa al revés, dos espacios en blanco, una extraña figura formada por una especie de U invertida semi-cuadrada, con dos rayas verticales en el centro, a su lado derecho una cruz se vislumbraba, un espacio en blanco seguido, una segunda copa al revés, dos espacio vacíos, una especie de ocho significativamente raro pues el circulo de arriba era mas largo y grande que el abajo además de ir coronado por una rayita muy similar a la de la Q, en esta figura también se vislumbraba una cruz al revés.
Todos los presentes admiraron el valiosísimo objeto que no paraba de emitir luz, cuya luminosidad se parecía al Cáliz de Fuego que tenían en la sala de los trofeos, con una placa a nombre de Hogwarts y del mítico Harry James Potter.
Artús la tomo entre sus manos con sumo respeto haciendo resonar el segundo trueno seguido de un intempestuoso rayo que cayó por arriba de las cabezas de los franceses desatando una incontrolable lluvia.
Los gritos que soltaron los franceses hizo tambalear la gran copa de las manos de Artús cayendo sobre la mesa al revés, Gea Lovegood abrió sus ojos al máximo haciéndola ver aun mas rara de lo que era.
"La copa invertida" murmuro sumamente asustada agarrando a Lilia por un brazo "Es la copa invertida"
Lilia asintió suavemente dándole unas palmaditas, a Artús se le había caído la copa y había caído volteada, no había nada de raro en ello.
"Mira el dorso es la Kad, con una cruz"
Lilia miro la copa poniéndose de puntitas, lo que veía era la figura conformada por la U semi-cuadrada con dos rayas verticales en medio y una cruz al revés. No veía nada que similar ser una Kad, aunque tampoco sabia lo que era una Kad.
Gea se volvió a la mesa sacando del bolsillo de una compañera el lápiz labial de color rojo intenso así como saco de entre sus bolsillos un trozo de pergamino viejo, dibujando la figura sobre este, seguida de la otra figura rara.
"¿Que te parece que es?" pregunto la chica mirando su trozo de pergamino
Lilia observo la figura, le parecía…un seis mal hecho con una bolita debajo, Gea comenzó a rotar la figura lentamente, hasta que quedo completamente invertida.
"Un gato, sin orejas ni bigotes" contesto Lilia para que Gea dejara de ver la figura.
Sin embargo eso pareció alentar a la chica quien tomo el lápiz y rayo el circulo mas pequeño "¿Ahora que te parece?"
Lilia miro de reojo la figura "Una Q"
Gea asintió contentan "Es la figura del mono, que da origen a la Qof" Lilia parpadeo suavemente, ¿un mono? Bueno, Gea había tenido mas imaginación que ella, pues ciertamente desde aquella posición la figura parecía un monito, solo que sin orejas ni brazos, ni pies "En el alfabeto proto-semita la Qof que significa mono da origen a la Q"
"Interesante" comento Lilia antes de volver su atención de nuevo a la mesa en donde Albus movía su varita y hacia flotar la copa por encima del director y los chicos de Beauxbatons.
"Antes de que se unan a la rutina laboral de Hogwarts, deben ser seleccionados para cada casa" anuncio el director sonriéndoles para que sintiera confianza
Los chicos se miraron los unos a los otros, preguntándose como serian seleccionados, el sombrero seleccionador apareció en medio de un lindo taburete, contrastando gravemente con sus raídos y deslavados colores que pedían a gritos una renovación.
"¿Qué crees que signifique la cruz?" siguió insistiendo Gea
"Unión" soltó Lilia quien observaba como Lady Sprout les miraba fijamente, pues ambas estaban cuchicheando mas de lo necesario
Gea frunció el ceño ignorando las miradas de Lady Sprout "No la cruz no es unión, espera Francia es católico en su mayor parte, puede que si, aunque ahora es una estado laico, además la cruz en tiempos antiguos significaba…" pero Lilia no escucho lo siguiente pues la mesa de Hufflepuff estallo en forzados aplausos al recibir a la primer francesa, Gea seguía hablando con la mirada fija en el papel, Lilia temía que en cualquier momento Lady Sprout bajara de la mesa y la llevara hasta su lugar en la mesa de Ravenclaw, sin embargo cuando la mesa de Ravenclaw recibió a su francés parecía que Lady Sprout puso su atención en ellos, después de quince minutos, cada casa tenia por lo menos un francés menos cohibido, pues varios comenzaban a entablar amistad con sus compañeros de mesa.
Cuando el director aplaudió sonoramente supo que era su hora de participar así que dejo a Gea con sus cavilaciones sobre los dibujos, se arreglo la capa sutilmente y se puso de pie enfrente del director a quien le hizo una pequeña referencia, le guiño un ojo al simpático profesor Dumbledore y dio media vuelta. A pesar de querer mantener fija la mirada en los estudiantes, su vista se clavaba cada dos por tres en la copa de plata que tenia por encima de la cabeza
"Una muestra de nuestro arte en Hogwarts" dijo el directo señalando a la joven
Lilia sonrió a todos los presentes, respiro profundamente y cuando Albus hizo sonar una música cuyo origen se desconocía la chica comenzó a cantar fuertemente haciendo resonar u voz por todos los recovecos del gran comedor
La copa giraba suavemente mostrando todos sus hermosos bajos relieves de figuras sin sentido, excepto para Gea "Hogwarts, Hogwarts, Hogwarts" ¿Por qué tenia dos copas invertidas? . ¿Por qué no dibujarlas normales? "Enséñanos algo, por favor" "La Kad y la Qof" resonó en su mente la voz de Gea "Aunque seamos viejos y calvos" La Kad y la Qof, "La Qof da origen a Q" y ¿la Kad? "O jóvenes con rodillas sucias" ¿Seria acaso K? no…imposible "Nuestras mentes pueden ser llenadas" K y Q, ¿Qué significado tenia? K y Q "Con algunas materias interesantes" dos palabras, K y Q ¿nombres? No…ni siquiera estaba segura de que en el alfabeto francés utilizara la K "Porque ahora están vacías y llenas de aire" ¿Inglesas? Probablemente, K y Q juntas, pero dibujadas una la contraparte de la otra "Pulgas muertas y poco de pelusa" K..K..K…King (Rey) y Q, Queen (Reina) una la contraparte de la otra, juntas pero opuestas "Así que enséñanos cosas" La cruz, cerca de ellos, ¿Por qué una cruz? "Que valga la pena saber" No, no era cruz, si era un rey una reina, llevaría la cruz en el pecho o en una tiara "Haz que recordemos lo que olvidamos" De lado derecho…en guardia, ¡Una espada! "Hazlo mejor que puedas" Rey y Reina con espada, dos de copas "Nosotros haremos el resto" Rey y Reina de espadas, dos de copas, todas invertidas "Ya aprenderemos hasta" ¡Arcanos menores! Eso significaba….significaba… "Que nuestros cerebros se consuman" su voz tembló al final mirando a los jóvenes francés sumamente asustada, miro al profesor Dumbledore con cierta desesperación, mientras sus manos y su cuerpo entero temblaba sin control.
De nuevo estaba en la torre de adivinación, "Le Maison Diev" el olor de la avaricia, la locura del poder, el sentimiento de la traición, Rey y Reina de espadas invertidos, dos de copas al revés, su respiración se hizo sumamente agitada, no podía controlar su miedo, "De aquí a un año" la voz resonó en su cabeza "Que la mano del destino sea mi testigo, de aquí a un año, todos estarán muertos" El aire se le acabo, el mundo comenzó a darle vueltas mientras que las entrañas le quemaban, sentía como las venas se le rompían una a una, diversos espasmos le sacudieron el cuerpo, la garganta se le cerraba.
Tosía descontroladamente, su mano se poso sobre la mesa de cobre "Uus…Uste… ¡Ustedes nunca conocerán a su hijo!" y el mundo se apago por completo.
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Caía y caía en un pozo sin fin, ecos de voces a los lejos resonaban en su cabeza, todo le daba vueltas, sintió como el corazón se le inflaba y se el inflaba, se le inflo tanto que creyó que pronto se le saldría del cuerpo y estallaría, sin embargo su corazón solo se inflaba sin detenerse ni estallar, aquello le resultaba sumamente doloroso, su corazón estaba lleno de odio, rencor, traición, tristeza, melancolía, apatismo, abatimiento, tenia tantos problemas y tan pocas fuerzas que pedía a gritos la muerte.
"Lilia" llego su nombre como un lejano susurro "Lilia" de nuevo le llamaban "Lilia"
Con un fuerte tronido despertó sobresaltada de la cama.
"¡Es mi hermana también!" bramo la chica furiosa
"Pues no lo parecía cuando en vez de ir directamente con ella, te largaste con tus amigos" grito la pelirroja mas cercana a ella
La mandíbula le tembló fuertemente a la pelirroja del fondo "¡No quería hacer el ridículo como tú!"
La reacción de su otra hermana no se hizo esperara "¡Ridículo!" vocifero indignada "¡Ridículo el que hago al tenerte como hermana!"
Liliana perdió la compostura totalmente, avanzo hacia Lilian dispuesta a todo abalanzándose sobre ella.
"No peleen por mi" susurro
Ambas pelirrojas fijaron su vista en la recién despierta y se hincaron en la cama a la vez
"¿Te encuentras bien?" pregunto de inmediato Lilian
"Déjala respirar" gruño Liliana
Lilia puso una mano entre ambas chicas antes de que iniciaran una nueva disputa "Mejor" contesto tocándose el rostro sintiendo como húmedos surcos empapaban su piel "¿Qué me sucedió?"
Lilian y Liliana se miraron meditando si contestarle o no "Te desmayaste en pleno gran comedor, después de terminar tu actuación" hablo Lilian
"Nos espantaste mucho, gemías y llorabas sin control, creímos que algo te había hecho daño, sin embargo no había marca de hechizo o maleficio alguno" prosiguió Liliana "Creen que fue ataque por la tensión"
"¿Solo gemí y llore, no dije nada?" pregunto Lilia nerviosa
Ambas pelirrojas fruncieron el ceño desconcertadas "No" respondieron en el mismo tomo y al mismo tiempo
"Son tan similares" murmuro Lilia sonriendo, provocando reacciones de enfado en ambas chicas "Creí que…había gritado algo"
"Quizás, tuviste una pesadilla en tu inconciencia" comento Lilian encogiéndose de hombros
Sin embargo aquellas palabras no convencieron a la mente de Lilia, mas que nunca supo que no era producto de su imaginación.
"Fue una visión terrible" siguió Lilia alzando la vista dándose cuenta de que no estaban solas en el lugar se encontraban, los merodeadores, el dúo de la muerte, Gea y Keara, dudo un momento, pero entonces recordó que ellos también estaban el día de la torre de astronomía, excepto Gea, pero…ella nunca le llamaría loca ni nada por el estilo "Vi…muchas cosas, cosas terribles, cosas que creo sucederán" dejo caer las palabras lentamente
"¿Hablas de una premonición?" pregunto Sirius
Todas las miradas se concentraron en él, dándole a entender que su comentario había estado de mas.
"No lo se" respondió Lilia poniéndose de pie, pese a negativa de sus otras hermanas "Quizás, no se como explicarles, me es difícil" la llama de las velas del lugar crisparon suavemente para si mismas "Creo que iniciare cuando comencé a verlos" murmuro mientras se paseaba cerca de Lucius y Snape "Ese día en la torre de adivinación" las palabras tensionaron a casi todo el mundo, sacando de todos una mueca de disgusto "Antes de que llegara la profesora Nahimana Artois, encontré una carta, que me hizo tener sensaciones horribles ¡Yo se que les es difícil creerme!" estallo la joven soltando lagrimas mientras apretaba sus vestiduras con las manos "¡Pero tienen que hacerlo! Después de ver la carta ustedes comenzaron a pelear y…y…"
"Fue solo un mal momento" le corto rudamente Lucius "Nosotros siempre peleamos"
La mayoría estuvo de acuerdo con ello, sin embargo Lilia negó con la cabeza "¡Yo lo vi! Mientras luchaban entre si vi….vi la muerte, el dolor, el sufrimiento, y después, después…la profesora"
"Fue aterrador" afirmo Liliana "Pero la tía esta loca, con que imparta adivinación se sabe que no tiene bien la cabeza"
"Pensaba lo mismo de eso" afirmo Lilia "Pero, pero…hoy cuando los franceses presentaron la copa, ¡Esa copa esta maldita, es la perdición!" exclamo Lilia firmemente "Tiene gravada la discordia"
"Son dibujitos sin sentido" afirmo Remus
"No, no, no…tiene un Q y K the Queen and King, con dos espadas a su lado, ¡al revés!" soltó la joven fuertemente
"¡Eso es!" exclamo Gea atrayendo la atención de todos "Rey y Reina de espadas, dos de copas, ¡Ella tiene razón!" Aquellas palabras crearon aun mas incredulidad entre los chicos, sabia perfectamente que Gea Lovegood esta loca.
"Eso no significa nada" insistió Severus
"Claro que significan algo, ¡Son los arcanos menores!" protesto Gea "Dentro de la lectura del Tarot…"
"¡Buf! La adivinación, es la rama mas difícil de la magia, ¡Nada es exacto!" inquirió una vez mas Remus
"Pero…pero, si ustedes lo vieran….¡Se siente como un sueño pero es real! . ¡Muy real!" afirmo Lily sacando un respingo por parte de James
"Lo sabia, lo sabia, lo sabia" dijo Liliana molesta "Juntarte con esa Lovegood solo a aumentado tu imaginación, si, siempre he estado en contra de que dejes volar esa cabecita tuya, sin embargo es hora de que pongas los pies sobre la tierra Lilia" sentencio la joven fríamente
"¡No lo imagine! Crees que me gusta ver lo que ¡vi! Gente muerta" bramo al borde de la histeria
Liliana negó con la cabeza frenéticamente "Tus propias invenciones te están llevando al borde la locura" sostuvo la joven "Gente muerta, ¡Toda le gente muere!"
"¡Pero no a causa de una maldición!" grito fuertemente Lilia
Aquella frase repercutió gravemente entre todos los presentes, como si hubieran sentido la extensión de la misma.
"¿Maldición?" pregunto Lilian temerosa
A Lilia la invadió el pánico repentinamente, esta segura de haber presenciado una maldición, sin embargo, había algo inquietante en su visión y hasta no comprobarlo seria mejor no tocar el tema, lo mas que pudo hacer fue asentir con la cabeza.
"Lovegood no te acerques mas a mi hermana ya le has dañado el cerebro" le ordeno Liliana severamente
"Liliana" hablo Lilian
"¿Qué? . ¡No voy a permitir que la vuelva loca como ella!" chillo Liliana
Lilian se encogió de hombros y se sentó en la cama de Lilia "Es que…"
"¿Es que? No me digas que estas de acuerdo con su amistad" se quejo
Lilian asintió con la cabeza "Ella puede tener los amigos que desee" contesto Lilian, sacando un gruñido de exasperación por parte de Liliana "Pero no me refería a eso" Liliana la miro fijamente "Es que…puede que tenga razón"
Aquella palabras cayeron como un balde de agua fría sobre Liliana "¿QUÉ?"
"Lo que has escuchado, puede que tenga razón" sostuvo la joven, Lilia le miro perpleja desde su lugar
"Lo digo muy en serio Lilian, no es un juego, no quiero que juegues a tratar de desmentir lo que digo" sentencio Lilia
Lilian negó con la cabeza velozmente "Antes de entrar al curso, tuve un sueño, un escalofriante sueño en donde ejecutaban a dos personas en la hoguera, entre el suplicio que fueron obligados a soportar uno de ellos gritaba entre las llamas una maldición" comento la joven firmemente "¿Es la misma maldición?"
Lilia fijo la vista en su hermana, sabia que no mentía y por algún motivo sentía que los hechos estaban relacionados "Si" Lilian se estremeció hasta la medula al oír aquellas palabras
"¡Genial, dos al manicomio!" soltó Liliana indignada
"En mi sueño, había un soldado de armadura negra y el otro de cota roja" prosiguió Lilian "De acuerdo a su vestimenta, creo que era soldados ingleses"
James suspiro lánguidamente al escuchar aquellas palabras estaba comenzando a pensar que… tonterías, puras y netas tonterías.
"Ajap, luchaban contra soldados con armadura o de casaca azul claro y un tira blanca cruzada" agrego Lilia
Aquellas palabras erizaron los vellos de la nuca de James "¿Cómo?" exclamo el chico casi sin evitarlo, todos le miraron fijamente.
"Soldados, soldados que luchaban en campos de batalla con casacas azules con tiras blancas cruzadas" repitió Lilia
"¿Utilizaban caballos?" pregunto dubitativo el chico
Lilia se encogió de hombros "No los que yo vi, estos batallan en la tierra" James suspiro
"Pero cualquier ejercito de aquella época contaba con caballos" afirmo Lilian "Azules con blanco y las armaduras…¿Cómo eran?"
"No tan ornamentadas como la de los negros con rojo" respondió Lilia
"Franceses" soltó Lilian
El joven se quedo completamente helado, utilizaban caballos, era de la edad del caldo con casacas azules con blanco ¡Eran como en su sueño…o visión o lo que fuera! Además…¿Qué había dicho esa voz? "No vayas, los fra…" esa chica quiso decir ¡Franceses! . ¡Todo concordaba!
James cayó pesadamente al suelo armando gran alboroto.
"¿James te encuentras bien?" pregunto Liliana desde su lugar
Remus y Sirius se encargaron de recogerlo y sentarlo en una cama, Lilia avanzo hacia él y lo miro fijamente "Tu, también…tú también los has visto" sentencio la joven llena de jubilo
Remus y Sirius se separaron de su amigo como si tuviera una enfermedad contagiosa, el chico aun en un ensueño asintió.
"¿Qué viste?" pregunto deseosa la joven
James sacudió su cabeza volviendo a la realidad "Pero es solo un sueño" protesto
"Mientras mas rápido lo aceptes mejor" sentencio Lilian "¿Qué viste Potter?"
El joven miro el suelo "Me vi en una caballeriza, montaba un hermoso caballo y salía del lugar con un rumbo fijo en mi cabeza"
"¿A dónde?" interrogo Lilia
"No lo se" se encogió de hombros el joven "Se que era un lugar conocido porque…porque…no se sencillamente tenia esa impresión"
"¿Y después?" pregunto Lilian
"Después comenzaron a perseguirme unos tipos de casacas azules y tiras blancas, armados con espadas y un arco" contesto el chico recordando las imágenes "Se notaba el odio en sus caras, querían atraparte, pero yo conocía el lugar"
"No te des aire de grandeza con nosotros" chillo Lilian
"Es la verdad" insistió James "Después no se que paso, desperté en la enfermería" termino de contar
El silencio impero en el lugar perpetuamente, una cosa era que Lilia y Lilian creyeran tener las mismas visiones, a que James afirmara tenerlas.
Vamos la lógica era simple, Lilian podía estar apoyando a Lilia en aquella locura, sin embargo que James Potter se les uniera era….¡ilógico! es decir si James se llevaba medianamente bien con Lilia, pero…de eso a hacer buenas migas con Lilian, había un gran trecho en lo único en lo que ambos estaban de acuerdo en que se odiaban mutuamente.
"Muy bien, supongamos" hablo Liliana "Solo supongamos que es real, ¿Qué van hacer?"
Los tres jóvenes se miraron entre si, aquella era una buena pregunta, aun si fuera real, ¿Qué iban hacer? Ni siquiera conocían el significado de todo aquello.
"Hablar con el director" sentencio Lilia
"¿Bromeas no?" se mofo Liliana "¿Qué la vas a decir? Ey director adivine que, dos compañeros y yo hemos soñados que franceses del pasado nos atacan, puede que este relacionado con este evento…¡Los franceses nos mataran!"
Lilia se encogió de hombros sin saber que decir o hacer y es que Liliana tenia razón, lo único que tenían era vagas especulación y sueños dispersos. No podían construir una teoría de conspiración contra Hogwarts a base de sueños.
"Alguien lo debe saber" comento Lilian "Debemos buscar ayuda, es decir…por algo lo hemos visto"
"Hablas como si llevaras años viendo aquellas cosas" exclamo Liliana "Solo lo has visto una vez"
Lilian se encogió de hombros, Liliana tenia razón, viéndolo desde el lado lógico lo que ellos decían sonaba a disparate.
"Tal vez debemos investigar mas" sugirió Lilian
Gea negó con la cabeza frenéticamente "¡Que tal que sucede algún accidente!"
Lilian la miro fijamente "No tenemos nada con que comprobar algo, solo nuestra palabra"
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Durante tres días los estudiantes de Hogwarts se fueron acostumbrando poco a poco a los nuevos estudiantes, al principio les fue difícil aceptarlos pues había ciertos roces y fricciones poco agradables, sin embargo como en cualquier lugar, los jóvenes se acostumbraron a ellos y los franceses a la frialdad inglesa.
Los ocho franceses de la academia de Beauxbatons, cuatro eran de séptimo grado mientras que los restantes eran de sexto, el primero en la lista era Arcondegui Sylvan de sexto año quien había ido a parar a la casa de Hufflepuff, seguida por Burthe Ursule de séptimo año perteneciente ahora a la casa de Ravenclaw, Campagne Fabienne Marine de sexto año quien entro a Gryffindor, Dubarry Jean de séptimo año la casa de Gryffindor, Etchevest Palmyre de sexto año de Hufflepuff, Larrat Pietro Bernardine sexto año de Ravenclaw, y Lioncourt Angelo T. de sexto perteneciente a la casa de Slytherin, finalmente Redlid Thomas Morovla, séptimo año Slytherin.
Los merodeadores se paseaban por el pasillo del sexto piso antes de entrar a su siguiente clase de encantamientos, desde la noche en la enfermería no se había dirigido muy bien la palabra, les costaba mucho aceptar todas aquellas ideas locas sobre las "visiones" de problemas entre franceses e ingleses, sonaba mas a historia sacada de una pésima novela muggle.
"Sirius deja de dar vueltas sin sentido" le pidió Remus
El joven de ojos grises paro en seco "Es que…no se que mas hacer"
"Molesta a Jawhar o Snape" dijo James desde su lugar
Sirius torció los labios por completo "Todo este ambiente raro y tenso es lo que me tiene así"
James se encogió visiblemente y se oculto tras el pergamino que fingía leer, Remus suspiro pesadamente mientras que Peter intento entablar conversación con Liliana quien había estado bastante distante.
La puerta del salón se abrió repentinamente, aquello indicaba que la clase estaba por comenzar, todos los alumnos entraron en completo silencio, los chicos se sentaron en su lugar habitual hasta el fondo del salón de lado izquierdo.
"Seguiremos practicando los hechizos convocadores no verbales" dijo el profesor "Aquí tengo diversos cojines para que practiquen"
Claramente desanimados los jóvenes fueron por sus instrumentos de practica.
"Creo que…hoy pasare de practicar" murmuro James acostándose sobre su cojín
Peter lo coloco al final del escritorio apuntándole con la varita "Creo que hoy lo lograre"
Sirius agito la varita haciendo que el cojín diera unas cuantas piruetas en el aire, Remus se dispuso a ayudar a Peter con sus practicas.
"Sirius" susurro James
El joven dejo caer el cojín al escritorio pesadamente "¿Cuándo es el primer partido de Quidditch?" pregunto Sirius repentinamente
James parpadeo varias veces "Pues, hasta después de Halloween, eso ya lo sabes Sirius" respondió lacónicamente el joven
"¿No crees que deberíamos entrenar ya? Es decir eh escuchado que Evans a puesto a trabajar a su equipo" siguió Sirius
James suspiro "Pero nuestro equipo es formidable, Slytherin a ganando la copa de Quidditch el año pasado"
"Pero el anterior lo gano Gryffindor" respondió Sirius
James frunció la nariz "Y el anterior a ese lo ganamos nosotros"
Sirius asintió "Y en tercer año la gano Gryffindor"
"¡Pero en segundo ganamos nosotros!" chillo James
"Según las estadísticas le toca a la casa de Gryffindor ganar" comento Remus haciendo cuentas
"¡Sobre mi cadáver!" bramo James "Este es mi ultimo año y no dejare que una niñita como Evans me gane la copa" afirmo el joven
"Son buenos propósitos señor Potter" hablo una voz frente a ellos
"Hola profesor Dumbledore" dijo James sonriendo ampliamente "¿Cree que tengamos posibilidades?"
El profesor sonrió afablemente "Pues, quizás tenga mas posibilidades de ganar la copa que de pasar mi materia si sigue así señor Potter"
La punta de orejas de James se colorearon fuertemente "Es que…ya se hacerlo" afirmo el chico
Albus se puso un dedo en la barbilla "¿Podría mostrármelo?"
James asintió, miro a su alrededor, agito la varita…
"¡Ay!"
Un cojín de color morado salio volando de las manos de un chico hasta la cabeza de Lilian Evans.
"Creo que aun me falta controlarlo" murmuro maliciosamente el chico
Albus suspiro pesadamente "Dos puntos menos señor Potter"
James rió triunfantemente a ese hombre nunca se le escapaba ni una "¿Sorbete de limón?" le ofreció el joven
"Tomare dos, uno para mi y el disculpa para la señorita Evans de mi casa" anuncio el venerable hombre
James frunció el ceño "Utilice mejor sus habilidades señor Potter"
"Si, abre tu ojo interno a la vista del pasado" se mofo Sirius cruelmente
James miro a su amigo enfadado, Albus miro a ambos jóvenes seriamente
"La videncia es un don reservado para pocos" sentencio el anciano
Sirius y James fijaron su vista en el profesor "Profesor Dumbledore…es, mm posible que tres personas diferentes, con conexiones…no muy profundas, puedan ver un mismo acontecimiento" pregunto James
"¿Por qué lo preguntas James?" le interrogo Albus
James miro a Sirius de reojo "Mmm…hace poco leí en una revista el suceso" mintió el joven "Tres personas que se conocía, vieron cosas similares"
"¿Cómo que cosas?" insistió el hombre
"Digamos que…fragmentos de siglos pasados"
"Es decir, tres personas conocidas…"
"No muy conocidas" interrumpió el chico "O sea se conoce y han charlado…un par de veces, pero no son los grandes amigos ni regulares compañeros"
"Conocidos a secas" se intento explicar Dumbledore y James asintió "Ven los mismos fragmentos…"
"No exactamente los mismo, pero los fragmentos estas ligados" corrigió de nuevo el joven
"Conocidos que ven casi los mismos fragmentos de una época pasada" murmuro Albus meditando aquella hipótesis
"¿Es eso posible?" pregunto James impaciente
Su profesor de encantamientos se paso un dedo por los labios antes de contestar con una voz lerda "Tal vez"
James hizo una mueca de insatisfacción ¿Tal vez?
"Bueno no he escuchado de algo similar, pero los campos y las posibilidades del don de la visión son tan inesperados y desconcertantes como la naturaleza de una tormenta" asevero Dumbledore
"O sea que puede ser posible" inquirió James
El hombre asintió firmemente "Sin embargo, seria un hecho insólito"
El cojín del joven Redlid comenzó a volar por toda la estancia rebotando entre la cabeza de cada uno de los alumnos del lugar, iniciando el caos total en el salón. Albus dio media vuelta agito su varita y el cojín se detuvo en medio del aire.
"Tenga mas cuidado señor Redlid" le reprendió Albus "Comience de nuevo" le ordeno el profesor dándole otro cojín al joven y sentándose a su lado.
En cuanto termino la clase los alumnos tomaron rumbos diferentes.
"¿En que estas pensando?" le cuestiono Peter
Liliana miro al joven ligeramente molesta "Nada" contesto secamente
"Has estado muy callada" comento Sirius
La joven torció los labios molesta "Tu también lo has estado" apunto la chica
Sirius sonrió "Yo estoy desconcertado, cuesta admitir esas cosas sobre el pasado, a mi me suena a disparate"
"Ya somos dos" murmuro Liliana
James paró en seco y miro a ambos jóvenes "¿Creen que estoy loco?" gruño
Sirius y Liliana se miraron por unos segundos "No es fácil creerlo" susurro Liliana
"Ponte en nuestro lugar James" tercio Sirius "Si yo te viniera a contar un complot contra el príncipe Carlos XIX creado a base de visiones de tres adolescentes con antecedentes mentales poco fiables ¿Qué pensarías?"
"Me estas llamando loco" insistió el chico
"James nadie aquí cree que este loco" afirmo Remus "Pero tampoco se puede decir que seas alguien muy cuerdo"
James se miro las uñas de las manos encontrándoles el punto interesante mientras meditaba las palabras de Sirius "Lo siento" susurro lo mas bajo posible "Creo que tienen razón, yo tampoco lo creería"
"Eh ahí lo desconcertante" comento Liliana "Si solo lo dijeran mis hermanas, pensaría que es un juego de Lilia y Lilian le sigue la corriente, pero tú"
Sirius asintió suavemente
"Tal vez podrías prestarte a los juegos de Lilia, no hablas mucho con ella, pero nunca han tenido graves problemas" medito Remus "Sin embargo, aceptar jugar la misma treta que Lilian…eso jamás lo harías"
Todos los jóvenes parecieron estar de acuerdo en ello, incluso James
"Además, creer en ello es aceptar que una escalofriante y macabra puerta a lo desconocido a sido abierta y no quiero vivir eso" dijo Liliana firmemente
Hasta ese momento James no había pensando claramente lo que significaba aceptar todas aquellas ideas locas de Lilia. Seria aceptar un complot en contra de Hogwarts, quizás hasta de Inglaterra misma, así mismo adentrarse en un mundo desconocido regido por según ellas una supuesta "maldición" y la única conexión que él tenia con ellas eran los soldados franceses, él de maldiciones, muertes y desolación no había visto ni oído nada.
Reanudaron su marcha como si los sucesos que les preocupaban nunca hubieran existido.
"¿Vamos a comer?" pregunto Sirius "O molestar Gryffindors"
Aquella pregunta tenia una respuesta sumamente fácil y es que entre comer y molestar Gryffindors había una delgada pero importante diferencia que inclinaba la balanza.
"Y que mejor que molestar a nuestro dúo favorito numero dos" dijo James señalando a dos jóvenes que parecían discutir a base de manotazos.
"¡Ey! . ¿Qué tal el día queridos compañeros?" les saludo Sirius alegremente
Un joven de cabellos negros brillantes a causa de las grandes plastas de gel que siempre se peinaba hacia atrás miro a los chicos a través de sus enormes y redondas gafas.
"¡Ustedes!" chillo el joven de su lado apretando los puños
James sonrió ampliamente ante aquellas palabras
"¿Acaso te ha vuelto a dar el no Evans?" se mofo Remus
El chico lleno de granos y cabellos castaños lacios alzo los puños hacia los chicos altivamente
"¿Intentaras pegarme?" pregunto James alzando una ceja
"¡Creí en ustedes!" bramo furioso
Todos los Slytherin rieron sardónicamente
"Nunca te pedí confianza" apunto James
"Sucio, bajo, cruel y rastrero Slytherin" sentencio Jawhar
"¡Ey! Al menos se te han pegado los insultos de Evans" hizo notar Sirius
"Porque es lo único que puede obtener" completo Peter
Una nueva risa inundo el lugar, el joven que se encontraba a lado de Jawhar se acomodo los lentes con el dedo índice.
"¿Por qué hoyo te habías caído Tristán?" pregunto Peter
El compañero de Jawhar tardo en reaccionar a las palabras y cuando las comprendió se asusto tanto que se encogió en su lugar.
"¿Por qué no puedes ser como tu amigo Jawhar? hace menos ridículo que tú" sentencio James avanzando hacia el joven "Están dócil, creo que si tuviera orejas puntiagudas, piel terracota y dedos mas largos podría trabajar en mi casa como elfo domestico"
La sonrisa de Liliana resonó por el lugar "Seria una buena adquisición"
Tristan se pego a la pared y jalo a Jawhar por la manga de su túnica en un intento desesperado de decir "Vámonos de aquí"
Jawhar sabia perfectamente que nunca, de los nunca podría superar a los merodeadores, ellos eran cinco y aun si fuera uno solo, todos ellos eran muchísimo mejores que él, sin embargo aquella vez no peleaba por él, si no por la ofensa hacia Lilian.
"Pagaran por lo que intentaron hacerle a Lilian" bramo el chico sacando su varita entre temblores de su brazo.
"¿Qué piensas hacer con eso?" le cuestiono James "¿Acaso picarme un ojo?"
Jawhar sintió que la sangre se le a galopaba en el rostro ante aquella burla tan baja, era bastante claro que él era un inútil con la varita, pero de eso a tildarlo de squib había una gran diferencia.
Jawhar movió su varita fuertemente y apunto a James, por sus propios movimientos la varita salió despedida centímetros adelante del chico, siendo una vez mas la burla de los jóvenes.
"Eres peor que un troll con deficiencia mental" se mofo Peter entre carcajadas
Jawhar avanzo hacia su varita cautelosamente temiendo que en cualquier momento los merodeadores le atacaran, se agacho sin quitarles un ojo de encima, estaba apunto de tocar la varita cuando James dio un paso hacia delante dejando caer el pie fuertemente, produciendo un ruido seco.
Jawhar dio varios pasos hacia atrás tan velozmente que se enredo con sus propias piernas y cayó de sentón al suelo, James volvió a reír escandalosamente ante la gran torpeza del joven.
"Sabes Jawhar eres tan torpe que creo que cuando saliste del vientre de tu madre te equivocaste te camino y por esa razón la mataste" soltó James
Los sentimientos se le subieron a la cabeza al joven, no supo ni como ni cuando ni donde sencillamente se abalanzo sobre James Potter como un rinoceronte.
James sintió la embestida entre carcajada y carcajada, le bastaron dos segundos para colocar a Jawhar lejos de él, con una mano sobre la cabeza viendo los inútiles esfuerzos del joven por golpearle con sus brazos.
"No, no, no…creo eso" le tranquilizo el joven "Fue muy cruel de mi parte, lo admito" dijo James "Eres un buen objeto de burla Jawhar"
Jawhar se separo de James velozmente y le aventó el primer objeto que tuvo al alcance
"Oye que agresivo" ironizo el chico
"James ya me canse, vayamos por Malfoy, Snape y Evans" dijo Sirius "Son mas divertidos"
James se encogió de hombros "Tendrás que mejorar tus actos patéticos Jawhar"
"¿Mas estupidez es posible?" pregunto Peter
Liliana y Remus soltaron una gran carcajada, Jawhar volvió a lanzarles un objeto
"Si quieres golpear a alguien afina tu puntería" gruño Sirius
"Vamos a ayudarle" dijo Lily sonriendo
La joven giro su varita delicadamente ante de apuntarle al chico, en cuanto Jawhar sintió los efectos de este, dio media vuelta y le lanzo el casco de una armadura a Tristán.
"Alguien viene" anuncio Remus
Los jóvenes virotearon a Liliana antes de partir quien les agradeció con una reverencia, mientras observaban a Tristan huir de su amigo que le lanzaba diversos objetos a diestra y siniestra.
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Cerró la puerta de su cuarto sumamente molesto, se dirigió velozmente al baño y abrió el grifo de agua fría, bajo el chorro de agua, se limpio de los restos de la poción que el muy gracioso de James había hecho explotar de la mano del francés, cuando sintió su cabellera limpia tomo una toalla y comenzó a secarse.
A pesar del baño aun sentía el olor de la poción y la sensación de aturdimiento que la ola de expansión les había provocado a todos, su cabello aun olía a alcanfor y belladona.
Abrió los doseles de su cama tirándose sobre de esta, cerró los ojos dejándose arrastrar por el repentino sueño que le acometía.
Se acomodo el saco de botones de oro y bordados de hilos de plata, abrió la cortina del carruaje al sentir como este se detenía lentamente, reviso una vez mas la cinta que sostenía su cabello, lustro sus zapatillas y bajo del carruaje procurando no pisar el barro del lugar.
Miro el enorme castillo con gran satisfacción, le gustaban sus raras y tocas curvas, dos sirvientes se apresuraron a recibirle como si fuera el dueño del lugar.
"¡Bienvenido amo!" dijo la mujer rechoncha que olía a sudor
"Avisa a tu amo que estoy aquí" le dirigió la palabra altivamente "Y tú, sirve tú vino mas refrescante"
El hombre desdentado y anciano asintió firmemente haciéndole una profunda reverencia saliendo del lugar precipitadamente, camino con gran pompa por los suntuosos hermosos jardines muy bien arreglados del lugar. Alzo la vista hasta la punta de la torre mas alta del castillo observando la bandera de la cruz roja ondear al ritmo del viento junto con la de los leones azules.
Inflo el pecho sumamente orgulloso, se ciñó una vez mas el traje a su atlético cuerpo, y avanzo hasta el final del camino en donde las puertas de madera fina y cristal se le abrieron de par en par, tres sirvientes le hicieron una gran reverencia mientras un cuarto le ofrecía una copa llena de vino.
Él la tomo como todo el caballero que era, tomando la copa únicamente con el dedo índice y pulgar, era postura de todo noble tomar el objeto de dicha forma, pues las manos sucias de los inestables y mugrosos sirvientes ya las habían manoseado.
"Querido" le recibió afectuosamente una mujer de cabellos tan negros y tan largos como la noche, piel blanca como la de todo sajón y ojos claros "Es un placer recibirte" las manos de la mujer le acariciaron la mejilla con tesura
"Es un placer volverla a ver mi Lady"
La mujer rió fingiendo avergonzarse y ruborizarse "Tan galante como siempre, ojala mi hijo aprendiera eso de ti, y dejara de ser menos osco"
"¡Bah!" exclamo él joven con vaguedad "Tiene a la mitad de las jovencitas de este reino a sus pies"
"Pero sigue siendo un chiquillo berrinchudo" afirmo la mujer
Sintió los músculos de su cara moverse para formar una sonrisa "Yo también aun lo soy"
La puerta se abrió en un estampido portentoso, dos trompetas repiquetearon estridentemente anunciando que entraba el señor de la casa.
"Mocoso insulso" bramo el hombre fuertemente
Sintió que el cuerpo se le inclinaba en una gran reverencia ante aquel ser, era un persona terrible alta, de espaldas anchas, manos enormes músculos fuertes, cabellera negra plomiza hasta los hombros, barba impecablemente cuidada, la fuerza de sus pisadas y movimientos inspiraba respeto.
"Eh venido hasta aquí porque mi padre me a informado de una empresa interesante" sincero el chico
El gran hombre se coloco enfrente de él mirándolo a través de sus castaños ojos brillantes "Llegas tarde" anuncio firmemente
"Oh venís de caza, ¿esta vez no a huido el ciervo?" pregunto maliciosamente el joven
El hombre meneo la cabeza vigorosamente "Nunca me lo perdonaras" replico el gran hombre
El joven soltó una gran carcajada iluminando el lugar de alegría.
"Ese viejo zoquete te a enviado a hacer de cartero" gruño el señor de la casa "Pero me caes mejor tú que tu zalamero padre"
El chico se encogió de hombros "Comento algo de gran ayuda para ambos"
"Ya tendré tiempo de platicar con él pero tu y mi hijo tiene una gran oportunidad" afirmo el hombre
"¿Se puede saber cual?" pregunto una voz
Enfoco su vista en el joven, sin embargo su faz no lograba verla con claridad, a pesar de que el sol entraba por las grandes ventanas y la luz se reflejaba en el interior del grandioso vestíbulo, no lograba reconocer aquella figura.
"Has tardado" le regaño su padre
El joven hizo un gesto desdeñoso con la mano y avanzo hasta ellos con las botas llenas de barro.
"Habla" ordeno el chico
El hombre lanzo un gran manotazo a su hijo con las claras intensiones de pegarle en la cabeza, sin embargo este le esquivo con facilidad.
"Enrique III a tenido la grandiosa idea de atacar al débil Philippe VI" comenzó a decir el hombre, la mujer de la estancia se llevo una mano a la boca "Tenemos que ir a apoyar al rey, además que no se les olvide que tenemos tierras en Flandes, Calais y Aquitania"
"Ya han vencido en Sluys" protesto la mujer
El hombre le ordeno salir del lugar inmediatamente con un gesto "Mujeres" gruño el señor "Emprenderemos una gran marcha en donde honraremos al rey Eduardo III y añadiremos uno que otro territorio" propuso el hombre
Ambos jóvenes se miraron fijamente, honor, gloria, sangre y muerte "¡Partamos a la guerra!"
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"Buenas noches Maia" saludo Liliana sentándose en la ultima silla de la izquierda
La mujer pasó su mirada severa por cada uno de los jóvenes
"¿Dónde esta el señor Black?" pregunto Maia
"Dormido" respondió James indiferente "Él no tuvo nada que ver con la pelea"
Maia asintió suavemente, cuando James decía eso antes de que se le preguntara algún detalle sobre el hecho significaba que era verdad.
"Alguien quiere empezar a comentar" dijo Maia
Remus se acomodo la corbata verde y sonrió "Artús nos dijo que deberíamos contener nuestras varitas sobre los jóvenes franceses"
"Lo mismo opino Albus" añadió Peter
"¿Albus estaba con el director Artús?" pregunto Maia repentinamente quitando su expresión severa
Los chicos asintieron "Presencio el discurso" dijo Liliana
"¿Por qué debemos tratar a los franceses con "suma" delicadeza?" pregunto James
"Han demostrado ser de dura coraza" comento Remus "Él chico al que…"
"¡No lo volverán hacer!" bramo Maia mirando fieramente a todos sus alumnos
"Ajap, pero ¿Por qué?" insistió James
"No son asuntos suyos señor Potter, solo estarán advertidos, un broma por muy leve que sea en contra de los franceses y serán suspendidos hasta el próximo año" gruño Maia
Todos los jóvenes reclinaron sus espaldas en los respaldos de la silla sumamente sorprendidos, nunca había escuchado una acusación tan seria de Maia.
"Esta bastante clara la advertencia señores"
"Tendrás que soportarme un año mas" jugueteo James
"Sep, tendrás que soportarnos otro año mas" le apoyo Liliana
El color de la cara de Maia se esfumo por completo, todos pensaron que la profesora se había puesto así de la furia sin embargo cuando se dejo abatir en su silla de caoba pudieron ver en su rostro la preocupación que el acometía.
"Creo que están bastante enterados de la situación con el país de Francia" dijo Maia suavemente
James no podía dar crédito a lo que sus oídos le anunciaban, Francia, franceses, era lo único que atormentaba su cabeza desde hacia poco.
"¿Lo están?" pregunto Maia
Los chicos asintieron en silencio
"El director trajo a estos chicos por…para demostrarle al mundo mágico que no hay discordia entre ambos países" continuo la profesora
La mirada y atención de todos estaban clavadas en Maia
"¿Qué hay de las profesoras Artois?" pregunto Remus "Ellas también son francesas"
"Residieron en Francia hasta la edad de diecisiete años, después viajaron a Inglaterra y han vivido aquí desde entonces" les aclaro la mujer
Los chicos exclamaron un suave ¡ooh!
"Tienen que entender que si algo les sucede a los chicos franceses, las relaciones con dicho país se tensionaran mas de lo debido" les explico Maia "Si algo grave les sucede el prestigio y la seguridad de Hogwarts podría verse sometida a duros problemas"
"Es solo cuestión de imagen" murmuro James
Maia negó "Es asunto entre países Potter, solo imagina que algo grave le sucede a uno de ustedes en la academia Beauxbatons, ¿Cómo creen que reaccionarían sus padres? Los jefes del ministerio"
"Como viejas histéricas" respondió Liliana sonriendo "Se armaría gran alboroto"
Maia asintió "No podemos permitir que algo le suceda a ellos, solo por algún juego de ustedes"
James miro a la mujer no muy convencido de ello
"Tiene razón Maia, James" dijo Remus suavemente
"Si algo le sucede a los franceses, no solo quedara con un descuido garrafal de Hogwarts si no que…"
"Podría provocar ataques hostiles al país" sentencio Liliana
James asintió en silencio, ligeramente molesto "Lo se, no soy tonto" gruño "Pero me preguntaba que…¿Qué sucedería si ellos son los que nos atacan?"
Maia negó con la cabeza "Son apenas unos alumnos James, no podrán hacernos nada"
"A ustedes no, pero…¿Qué hay de nosotros?" insistió el chico "A nosotros si pueden lastimarlos, inclusive quizás vengan aquí con ideas de envenenar a los ingleses en contra de su país y pronto tendremos traidores a la patria"
Todo el mundo miro a James desconcertado, el nunca había demostrado mucho orgullo a su país, además desde cuando le tenia tanta inquina a los franceses.
"Eso no sucederá señor Potter, vaya a descansar señor" afirmo Maia convincentemente
"Cuando algo malo suceda a mano de los franceses, vendré a recordarle estas palabras" le advirtió James
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"Señor Aunay me temo que tendrá que ser castigado" dijo la profesora Artois de cabellos negros
"Pero…pero" murmuro el chico "No quería herirle"
"Vaya con el director Noyeres" le ordeno la mujer "Él le impondrá el castigo, la contraseña es Rex"
El chico suspiro suavemente avanzando por los solitarios pasillos del castillo de Hogwarts con la cabeza agachada.
"Pobre chico" dijo la mujer
"Nahimana" susurro la profesora
"Tendrá que esperar un buen rato" comento Nahimana "Entre a la sala común de Slytherin por encargo de Maia, descubrí a los mismos chicos peleando contra sus propios compañeros"
"Yo creí que este chico era tranquilo, pero lo descubrí golpeando a su propio amigo" le hablo Nasya "¿Puedes creerlo?"
Nahimana se encogió de hombros "Aquí todo puede ser posible" sincero la joven
"¿Qué quieres decir Nahimana?" le cuestiono su hermana
Nahimana avanzo por el pasillo meciendo su largo vestido gris pálido "Hay un circulo sobre la luna, las nubes temerosas se escabullen ante ello"
"Nahimana, ¿crees que algo raro sucederá?" inquirio Nasya
"Esta mañana me he levantado temprano e visto un sol rojo al amanecer"
Nasya miro a su hermana fijamente "Sangre derramada, alguien a derramado sangre inocente"
"Francia ataco el sur de Surrey" afirmo Nahimana "Temo por este lugar"
"Bueno hermana estamos muy al norte, no creo que la guerra nos llegue tan pronto" sincero Nasya "Por eso escogimos trabajar en este lugar"
Nahimana parpadeó suavemente sintiendo la brisa nocturna tocar su pálida piel "Las cartas han anunciado peste y devastación"
Nasya se llevo una mano a la negra cabellera rizada "Deberías hacerles menos caso, ya sabes lo dijo nuestra abuela, algunas veces las cartas pueden equivocarse"
"Y otras tantas pueden decirnos el camino correcto" protesto Nahimana
Nasya se recargo en el alfeizar de la ventana mirando el desolado negro paisaje que se extendía a su vista.
"Ya no sientes a los espíritus" le cuestión la mujer de cabellos plata
Nasya se abrazo a si misma sonriendo al ver pasar dos pájaros "No, creo que nunca estuve muy en contacto con ellos"
"Tu eres mas terrenal" afirmo Nahimana
Nasya sonrió "La verdad lo prefiero así, no deseo ver cosas que los demás no…"
"Es un don" le corto Nahimana repentinamente
"A veces es mas una maldición" afirmo Nasya "Nunca he gustado de lo inexplicable y lo intangible"
"Lo se" murmuro
"No me agrada tu mirada ni tu silencio" dijo Nasya repentinamente
Nahimana volvió su vista hacia las estrellas "Marte brilla con mucha intensidad"
Nasya miro al cielo esperando ver un planeta rojo sin embargo para ella todas las estrellas eran iguales
"¿Marte? Que raro yo solo veo puntos blancos"
Nahimana observo atentamente todo el mapa celestial en silencio "Observa las estrellas con este brillo intenso por ultima vez" Nasya frunció el ceño "Pronto el terror y la desdicha cubrirán el castillo"
Mas que nunca Nasya tuvo la certeza de que su hermana sabia algo que ella no "¿Qué has visto?"
"Nada" afirmo Nahimana "Ni las cartas, ni la bola de cristal, ni las estrellas quieren decirme algo, todo esta envuelto en una espesa niebla"
"¿Qué tan grave es?" pregunto Nasya desconcertada
Nahimana se abrazo a si misma "Es tan fría como una ventisca de invierno, desolante como las cadenas oxidadas y tan mortal como la tierra árida"
Nasya se separo del alfeizar de la ventana "Tenemos que avisarle al director entonces"
Nahimana le detuvo "¿Qué podemos decirle?"
"¡Eres la profesora de adivinación!" estallo Nasya "Por algo te contrato"
"Fui la única que presente carta" murmuro Nahimana "No había nadie mas"
"Conoces las mancias como nadie mas ¡Alguna credibilidad debes tener!"
"Solo tengo tu palabra Nasya, y eso no me servirá de nada" afirmo Nahimana "Tienes que comprender"
"Alguien deberá creernos, has pronosticado el tiempo durante toda tu vida y nunca te has equivocado" chillo Nasya
Nahimana asintió sonriendo suavemente "Aun así no se que es lo que pueda suceder, solo es un mal presentimiento" hablo la mujer "Quizás un terrible presentimiento"
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Albus Dumbledore miro su reloj era media noche, había olvidado comentado decirle al director de las precauciones que se tomarían para los partidos de Quidditch y las salidas a Hogsmeade.
"Rex" dijo firmemente para que la fea gárgola que custodiaba la entrada a la oficina del director se abriera. Esta se movió velozmente para dejar al descubierto la escalera de caracol.
El alto y viejo hombre subió en esta y desenvolvió el dulce de sorbete de limón que James Potter le había dado en disculpa por haber golpeado a una de sus alumnas favoritas, sonrió dulcemente como si aquello fuera un chiste, se llevo el dulce a la boca cuando se encontró con la gran aldaba vieja y desgastada que tantas veces con anterioridad había tocado ya.
La puerta estaba ligeramente entre abierta, ni un solo rayo de luz de vela salía de la estancia, el profesor alzo una ceja creyendo que probablemente el director ya estaba en su habitación, sin embargo un suave chillido como la de un sollozo llego a sus oídos como un suave susurro, quizás el director había olvidado apagar alguno de sus humeantes artefactos, abrió la puerta con la punta de sus largos y delgados ojos.
Efectivamente el director no se encontraba presente, al menos no estaba en su silla, lo que chillaba desde el interior era una tetera que anunciaba con su "Zu, Zu, Zu" agudo y chillante que el agua ya estaba hirviendo, apago el fuego y retiro la tetera del lugar.
Giro su cuerpo suavemente, algo brillaba intensamente en el fondo de la estancia, dos puntitos blancos refulgoreaban terriblemente en la esquina opuesta del lugar, Albus saco su varita con cautela e ilumino la estancia.
Un joven de cabellos castaños y ojos negros tenia las manos sobre la boca con una expresión de terror infinito, había marcas de lagrimas sobre sus mejillas, claramente llevaba mas de una hora en aquella posición, Albus avanzo hacia su alumno, intentando descubrir lo que provocaba su miedo.
Bajo la vista poco a poco, tras la mesita que mostraba muñequitos de porcelana un gran manchón carmesí se extendía poco a poco, apresuro su paso y jalo la mesa con la fuerza de un hombre en sus veintenas, el joven lanzo un grito desgarrador al aire.
El cuerpo inerte de Artús reposaba sobre el suelo con una expresión de sorpresa inaudita, la sangre había estado saliendo por su pecho, pues alguien le había clavado una espada por la espalda que le salía por el pecho.
El anciano trato de tranquilizar a su alumno mientras convocaba a todos los profesores con un antiguo hechizo, sin poder dar crédito a aquel hecho, alguien había asesinado al director de Hogwarts a sangre fría y traición.
La espada de plata brillaba intensamente en toda su extensión, en medio del filo se podía leer antiguas runas que decían, Libertad, Fraternidad e Igualdad sus ojos se abrieron inmensamente al ver en la empuñadura, era una figura que en su diseño incorporaba fascículos y las ramas de roble y laurel, una especie de pergamino se encontraba en medio cuya punta norte estaba coronada por lo que podía ser un hacha, en medio y enfrente de este había un blasón en con forma de especie de luna creciente que en el medio se formaba un piquito hacia arriba pues dos letras encimadas se acuñaban en el centro.
"Imposible" se dijo a si mismo tratando de meditar en alguna otra explicación, sin embargo la prueba era contundente, pues aquel emblema no era otro que, el escudo de la Republica Francesa.
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Las Confesiones de Kirsche:
Holas! Aquí en un capi mas de esta interesante historia, ¡Woa! . ¡Woa! . ¡Woa! . ¿Qué sucederá en el siguiente capitulo? . ¿Habra guerra? XDDDDDD weno para saberlo tendrán que leer el siguiente capi vale ;) nos vemos.
Reviews:
Marta Evans, Gerulita Evans, Dunachan y Darame: os e contestado por vía reply si no les llega mi respuesta avisarme
Tomoe: XDDDDD si lo se es todo un relajo los chicos sly tres lily ¿Qué lio no? Pobre James! XDDDDD, en cuanto a Lucius…O.o imagínate lo mosqueda que estaba yo acostumbrada a escribir a Lucius como el tirano, u.u….weno, weno, pero creo que ya he aprendido a jugar con las diferentes personalidades de los personajes, asi que…no me pierdo aunque cuesta escribir a James gritando ¡Venzamos a los Gryffindor! XDDDD, espero tu comentario de esta historia, que tanto insististe en que actualizara.
SakuraPinkPrincess: XDDDD sep, fue raro…al principio pensé nombrarlas diferente, pero me dije no…y luego me dije va, una Liliana otra Lilian ¿y la otra? Pus Lilia XDDDDD ¡Genial! Fue genial XDDDD, en cuanto a morder ¡Si seguiré! . ¡Claro que si!
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¡Nos vemos en el siguiente capi!
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MOS
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