Perdonen por haber dejado este proyecto a inicios de su corrección, pasaron cosas entre la cuarentena y la locura que esto causo, pero estamos de vuelta pretendo terminar de publicar

Agradezco el review de Sr. X, y efectivamente, así damos inicio a la era de los muertos vivientes

Nuevamente me ayudaría mucho que pudieran darme su opinión acerca de esta historia, me gustaría mucho leer sus reviews

Sin más por el momento, los dejo con el capítulo 3 de esta historia

Descargo de Responsabilidad: Los personajes de Resident Evil que aquí aparecen pertenecen a Capcom, solo la idea original de la historia y personajes originales que aquí aparecen son de mi autoría (y algunos prestados para trabajar aquí)

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CAPITULO 3

10 de abril de 1998

Wesker había comprobado en persona las habilidades mencionadas por el reclutador, aun así no le precian nada fuera de este mundo. Sin embargo, durante los entrenamientos de combate cuerpo a cuerpo había podido notar el anillo que Luna Zafiro Engel traía consigo.

Durante esos días la había observado, si bien no portaba el anillo a la vista de todos, podía notar la cadena que estaba en su cuello y se perdía dentro de su blusa la mayor parte del tiempo.

Creía haber visto un anillo como ese muchos años atrás, cuando solo era un asistente en el centro de Formación de Umbrella de las montañas Arklay. Si, su mentor, James Marcus tenía uno similar. Los fundadores de Umbrella tenían anillos como esos. Spencer guardaba el de Marcus como un trofeo. Pero jamás había encontrado el de Maximus Engel para reclamarlo.

No recordaba la existencia de esos anillos, hasta que lo vio en el entrenamiento días antes.

Y todo este tiempo la nieta de Engel lo ha tenido consigo

Podría ser esa la clave que estaban buscando. "Vigílala de cerca, y averigua si ella posee lo que estamos buscando", esas habían sido sus órdenes dadas directamente por Spencer. El maldito viejo debía de estar frustrado después de 10 años de no poder averiguar que investigaba realmente su "socio y amigo".

Un rotundo fracaso, sin duda alguna.

Le había informado a William Birkin de sus sospechas acerca de la nieta de Engel, de ser verdad estaban más cerca de conseguir lo que deseaban.

— Si es verdad lo que dices, ¿cómo piensas quitárselo? ¿Por la fuerza? ¿Asesinándola? — pregunto Birkin

— Puede que aún nos sea útil, te recuerdo que es la preciada hija de Andrew Engel— respondió el — además hay métodos menos... agresivos para conseguir ese anillo

— Eso no sería algo de extrañar en ti... ¿la usaras también para conseguir lo que quieres?

— Podría usarla, si, para conseguir lo que Umbrella desea, no solo lo que yo quiero.

Wesker observo momentáneamente el vaso de whisky que sostenía en su mano, considerando si de verdad debería entregarle directamente a Spencer los resultados de la investigación de Engel.

Eso solo lo decidiré con el tiempo

08 de mayo de 1998

Llevaba un mes en Raccoon y no había muerto de hambre, eso ya era un logro digno de admiración. Además, había convertido su departamento en un lugar cálido y habitable, y mantenerlo limpio no le costaba tanto, a fin de cuentas, casi no estaba en casa.

Poco a poco se acostumbraba a su rutina, incluso tenía una motocicleta de carreras YZF R1 que usaba cuando se le hacía tarde para llegar a la estación, o para ir al bosque Arklay los fines de semana para correr un poco, incluso para salir a pasear por las carreteras que atravesaban las montañas.

Se había integrado completamente al equipo y a sus rutinas, las cuales incluían atiborrarse de comida después de los entrenamientos semanales, beber café y comer donas en el Moon Donut´s que estaba a unas calles de la estación, Jill juraba que se trataba de las mejores donas de todo Raccoon, y quizá del estado, y vaya que tenía razón. También se había acostumbrado a salir de juerga los fines de semana con los del equipo, generalmente al Bar J´s., un pequeño bar ubicado en Jack Street, a un par de calles de su departamento. Noche de chicas con Rebecca y Jill.

Llamaba a casa cada semana, durante un par de ocasiones su padre trato de convencerla de volver, cosa que ella rechazo rotundamente, de verdad estaba comenzando a tener una vida por su cuenta, no quería dejarlo todo ahora. Victoria la alentaba a seguir adelante cuando, a veces, sentía que no podría hacerlo. Su desempeño en sus entrenamientos mejoraba, estaba cerca de la marca personal de Chris en cuanto al Tiro, y podía sostener un combate cuerpo a cuerpo incluso con Barry o Enrico.

Había participado en un par de misiones que la policía no pudo mantener bajo control, una de las cuales había sido un asalto con toma de rehenes en un banco de la ciudad, fue ese mismo día entendió porque a Brad lo llamaban "Chicken Heart",y también fue herida ligeramente por el roce de una bala cuando iba en persecución.

Rebecca había insistido que descansara para que su herida sanara, pero Zafiro insistió en que estaba bien, y en un par de días la herida había sanado completamente sin dejar cicatriz, siempre había sido así desde que tenía memoria, sus heridas sanaban en un par de días o menos cuando se trataban de simples raspones como aquel.

Pero aún había algo que no podía hacer, lograr un merecido reconocimiento de parte de Wesker en los entrenamientos. Había intentado derribarlo, o al menos plantarle un golpe como la última vez y tratar de quitarle sus gafas de sol de nueva cuenta para ver sus ojos, pero desde aquel primer día, no había vuelto a hacerlo de nuevo.

Podía durar más en combate, y presentar un poco más de batalla, pero tomar al capitán de los S.T.A.R.S. con la guardia baja, era algo que requeriría poco más que suerte.

— Ríndete con eso Zaf — le insistió Chris — vamos si llegases a plantarle un golpe a Wesker y tirarle las gafas de nuevo, yo te pagaría la cena de una semana con Emmy

— ¡Bueno entonces eso me motiva más a hacerlo! — respondió Zafiro divertida

— Ocuparas tener mucho más que suerte, Wesker no volverá a bajar la guardia

Se planteaba una estrategia para lograrlo mientras cocinaba algo de pasta en su apartamento. No era buena cocinera, pero era de las pocas cosas que podía hacer sin incendiar el departamento.

— Tal vez si... — murmuro su plan mientras luchaba para abrir un bote de salsa para pasta — debería de... comprar salsa...en cajita — se quejó haciendo fuerza, logro abrirlo finalmente, pero la inercia hizo saltar el pote de sus manos cayendo volcado en la barra de la cocina, salpicando su jersey favorito. — Ahora tendré que lavarlo— suspiro quitándose la prenda sucia — bien... no tengo nada de jabón para la ropa, y tampoco nada de salsa. — suspiro con frustración revisando debajo del fregadero sonde solía guardar el detergente

Fue a su habitación por un jersey sin mangas limpio y una chaqueta. Se dirigió a una tienda de conveniencia 24 horas cerca de casa.

Compro lo que necesitaba y un paquete de golosinas para después de la cena, sabía que debía dejar ese mal hábito, pero simplemente no se había resistido. Salió de la tienda para volver a casa.

— Es muy noche para que un oficial este fuera de casa ... — escucho a sus espaldas, un leve escalofrío la recorrió momentáneamente al reconocer la voz del capitán de los S.T.A.R.S.

— Creo que puedo decir lo mismo... Capitán — respondió amablemente, girándose para ver a Wesker

— Espero no esté fuera a estas horas causando problemas — agrego Wesker acercándose a ella — Raccoon City aún es una ciudad pequeña, y no se olvidará muy rápido a la oficial de S.T.A.R.S. que fue herida de bala hace poco.

— No creo que comprar insumos y gomitas sea problemático ¿o sí? — respondió levantando una ceja

— Supongo que no lo es... solo no se meta en problemas oficial Engel

Zafiro sonrió de medio lado, divertida, se dio vuelta para marchar a casa, observo a Wesker por sobre su hombro. La sola presencia del capitán bastaba para hacer estremecer su cuerpo, pero no era miedo en absoluto, había algo en aquel frio y atractivo hombre que la hacía sentir de manera extraña, deseaba poder prolongar un poco más aquellas sensaciones que la recorrían.

¿Tendrá algo de malo invitarle un trago? — se preguntó a sí misma, lo había visto beber en un par de ocasiones en el bar J´s,

— ¿Le gustaría tomar un vaso de whisky, Capitán? — pregunto justo cuando este había comenzado a caminar para marcharse — tengo un poco en el departamento que traje de casa... whisky escocés genuino — trato de permanecer en calma, no sabía cómo es que siquiera se había atrevido a realizar aquella invitación, Wesker solo la observo unos pocos segundos que le parecieron eternos

— Creo que… podría aceptar su oferta, oficial Engel.

— No es necesario llamarme por mi apellido todo el tiempo— murmuro apenada

— Por esta ocasión que no estamos en servicio, está bien, Luna

Zafiro camino de regreso a su departamento, quito el cerrojo de la puerta e invito a pasar a Wesker, la salsa aún estaba esparcida sobre la mesa. Se apresuró a limpiar.

— Lo siento, tuve un accidente hace un momento — se disculpó limpiando de inmediato, se dirigió a la alacena para sacar la botella de whisky y un par de vasos de cristal. — ¿Hielo?

— Solo un poco — respondió Wesker retirándose las gafas de sol

Regreso a la barra de la cocina con ambos vasos con un poco de hielo, abrió la botella y sirvió la mitad de los vasos.

— ¿Qué hacía tan noche fuera? — pregunto Wesker tomando el vaso

— Solo comprando insumos faltantes — respondió Zafiro dando un trago al vaso — y unas golosinas, no mentía en ello, ¿qué hay de usted capitán?

— Reportes que debía entregar en horas extras, ese maldito obeso puede ser molesto cuando quiere serlo.

— Creo que es molesto todo el tiempo — rio dejando el vaso en la mesa — yo… lo siento, creo que dije eso en voz alta — se disculpó apenada, después de todo Irons seguía siendo el jefe de policía de Raccoon.

— No eres la única en la estación que piensa eso — respondió con una ligera sonrisa dibujada en su rostro — ¿cocinabas acaso?

— Algo de pasta, puedo ofrecerle un poco, aunque debo advertir que no soy buena cocinando

— No creo que seas tan mala como he escuchado que es Chris

Zafiro sirvió un par de platos, comieron en silencio, no estaba tan mal como había pensado que estaría. Trato de calmarse, tratando de encontrar un tema de conversación, de lo contrario, dejaría que su nerviosismo tomara el control de la situación y comenzaría a decir estupideces. Pero el capitan fue el primero en romper el silencio.

— ¿Llevas ese anillo todo el tiempo? — pregunto señalando el anillo que colgaba de la cadena en su cuello, Zafiro lo tomo en su mano — Lo he notado incluso en los entrenamientos

— Desde que mi abuelo falleció en el accidente que incendio su mansión — murmuro con voz queda

— Un anillo de Umbrella por lo que puedo ver — agrego Wesker mientras comía un poco más — Pero no he visto que los empleados tengan esa clase de joyería, tampoco sabía que tuvieras nexos con la empresa

— Los empleados no los tienen hasta donde yo supongo, solo los fundadores — respondió Zafiro

— Ahora que recuerdo, el apellido Engel lo tenía uno de sus fundadores ¿no es así?... sinceramente no lo asocie de inmediato, pero tu apellido me sonaba familiar de algún sitio, y no es que el apellido Engel sea muy común en América — murmuro mirándola a los ojos fijamente — Raccoon le debe lo que es actualmente a Umbrella... la empresa brinda la mayoría de los empleos de los ciudadanos, y el crecimiento de la ciudad es en gran medida gracias a ellos — agrego — supongo que Raccoon bien podría ser un pequeño pueblo olvidado en las montañas si Umbrella no hubiera llegado ¿podría? — pregunto señalando la mano donde Zafiro sostenía el anillo

— Yo... lo siento — murmuro agachando la mirada — no puedo... no he permitido que nadie lo toque desde que mi abuelo falleció... es... una especie de reliquia para mí... discúlpeme — agrego guardándolo dentro de su jersey

Aquella mentira le había salido de manera tan natural, que ella misma se sorprendía.

10 años atrás, después de la muerte de su abuelo, su padre le había advertido que no dejara que absolutamente nadie se acercara al anillo, su abuelo se lo había dejado antes de morir, como si sospechara su muerte y no quisiera que nadie lo encontrara. A Zafiro le había parecido exagerado aquella manera de actuar de su padre, el anillo no tenía nada de especial, ningún número sospechoso, solo una frase en latín que su abuelo repetía mucho. Solamente eso.

Sin embargo, durante el funeral y los meses posteriores, Zafiro se sorprendió de la cantidad de personas que estaban interesadas en aquella única pertenencia que tenían como recuerdo de Maximus Engel.

Opto por obedecer a su padre y no dejar que nadie tocara el anillo, habían justificado su comportamiento como un capricho infantil, ya que ella era muy unida a su abuelo y su muerte había supuesto un enorme trauma para ella, o al menos esa era la mentira que le habían contado a todos. La había repetido tanto que estaba por terminar de creérsela.

— Entiendo — respondió Wesker terminado su cena de manera tranquila

Zafiro suspiro terminando su porción de pasta, podría asegurar que Wesker la tomaría por una niña mimada, o al menos más mimada de lo que de por sí ya era.

Terminaron la cena tranquilamente, y bebieron un poco más, el alcohol se le había subido un poco a la cabeza, los nervios que antes le estrujaban el estómago se habían ahogado en el whisky.

Wesker parecía muy interesado en la relación que ella tenía con su abuelo antes del accidente. Zafiro no mintió al decir que de verdad era muy unida a él y le tenía mucho cariño, era un gran hombre y un gran científico.

Observo fijamente los ojos azules del capitán Wesker, sosteniendo su mirada, había hecho que se quitara sus gafas de sol sin salir herida, ¿eso podría contar como que había ganado la apuesta de Chris?

— ¿Sucede algo? — pregunto confundido al ver como ella sostenía su mirada

— Nada realmente — respondió sonriendo de medio lado — supongo que…el alcohol se me subió un poco

— No será bueno que un oficial se presente con resaca en la mañana — murmuro levantándose y tomando sus gafas de sol — Me gustaría quedarme para otra ronda, pero es algo tarde

Zafiro acompaño a Wesker hasta la puerta del departamento.

— Espero la cena haya sido de su agrado

— Fue una excelente cena y un excelente licor — respondió Wesker agradecido, colocando sus gafas de nuevo. — nos veremos mañana en la estación, oficial Engel — se despidió acariciando los labios y mentón de Zafiro.

de mayo de 1998

— Pareciera que no dormiste muy bien — le comento Chris con burla

— ¡Calla! — respondió recargando la cabeza en el escritorio

Tenía razón, se había acostado demasiado tarde, limpiando la cocina, lavando su jersey favorito, rodando en la cama pensando idioteces, por dios estaba segura de que estaba completamente ebria, que otra razón habría para alucinar tales cosas.

— Necesitare una soda o un café, lo que sea, quizá un par de donas

— Pensaba ir por un café en estos momentos, porque no te levantas de ahí y me acompañas, me asegurare que no caigas dormida por las escaleras

El trayecto a Moon Donut´s jamás le había parecido tan largo, al menos agradecía que a esas horas el lugar estuviera vacío.

Regresaron a la estación justo a tiempo para ver cuatro patrullas salir a toda velocidad del estacionamiento y avanzando por Ennerdale Street hacia el oeste

Aquello era poco habitual, pero lo que no esperaban era ver a demasiados oficiales dando vueltas como locos. Y a Marvin dando órdenes para coordinarlos.

— ¿Qué está sucediendo? — pregunto Chris aproximándose a el

— Llego un reporte del bosque Arklay— respondió tratando de mantener la calma, pero Zafiro podía observar que estaba haciendo demasiado esfuerzo para lograrlo — lo siento Chris, no puedo darte más detalles por ahora hasta que los oficiales que envié lleguen a la escena. — agrego antes de seguir repartiendo ordenes

Chris y Zafiro se miraron confusos, era la primera vez desde que ella había llegado a Raccoon que veía una situación similar en la estación. Ni siquiera durante la toma de rehenes en el banco había habido tanto caos. Entonces ¿Qué clase de reporte habían recibido para poner a Marvin Branagh en ese estado?

— ¡Hey! ¿qué sucede aquí? — pregunto Jill, acaba de llegar a la estacion — ¿que es todo este alboroto?

— Ni siquiera nosotros lo sabemos — respondió Zafiro — solo sabemos que hubo un reporte del bosque Arklay, pero nada mas

— Es la primera vez que veo que se ponen locos en este lugar, al menos a este grado

— En fin, si es algo que no pueden manejar, nos llamaran a nosotros — suspiro Chris — Bien señoritas, sigamos nuestro camino

Fue un día aburrido por la espera, los oficiales iban y venían sin dar mayor información. Wesker fue llamado a la oficina del jefe Irons mas tarde.

— ¡Estar a la expectativa no es lo mío! — gruño Barry — ¿por qué rayos ninguno de los oficiales tiene información de lo que sucedió? ¿o es que acaso no nos quieren decir?

— Tal vez Wesker nos traiga más datos cuando regrese — respondió Jill levantando la vista del libro que estaba leyendo — Nos estamos haciendo ideas, tal vez no es nada tan malo como queremos creer, o nos hubieran metido de lleno al caso.

Wesker regreso momentos después acompañado de Enrico, este último tenía cara de pocos amigos.

— ¡Capitán! ¿Qué sucedió? — pregunto Chris, pero Wesker no respondio en ese momento

— Chris y Joseph, llamen al resto del equipo, los quiero aquí en 10 minutos o menos — ordeno

— ¡Si, Capitán! — respondieron ambos saliendo de la oficina de inmediato

El resto intercambio miradas silenciosas entre ellos, ¿qué demonios estaba pasando? ¿Por qué tenían que reunir al resto del equipo? Zafiro pensaba que las cosas eran más serias de lo que habían creído en un principio.

Cuando el resto del equipo se reunió, la oficina parecía más pequeña. Wesker tomo su posición frente a todos ellos, mirándolos fijamente por debajo de sus gafas de sol. Enrico se posiciono a su lado.

— Ha ocurrido un asesinato en el Bosque Arklay — anuncio con voz tranquila, los murmullos de los miembros de S.T.A.R.S. apenas eran audibles — Una chica de aparentemente 20 años que acudía periódicamente a correr por el bosque todas las mañanas

— ¿Por qué presiento que no es todo? — pregunto Jill confusa, colocando un mechón de su cabello castaño detrás de su oreja, le seguía pareciendo demasiado misterio para un asesinato, si bien no era común que eso pasara en Raccoon como sucedía con ciudades más grandes como Chicago, California o Nueva York, tampoco estaban completamente exentos de ese tipo de crímenes

— El detalle es la forma de asesinato — respondió Enrico tomando la palabra — según los informes preliminares del cuerpo forense, la víctima fue atacada y asesinada a mordiscos de lo que pareciera ser un animal salvaje, posiblemente un lobo, o algún canido. Parte del cuerpo fue devorado.

— ¿Qué piensa hacer la policía con esto? ¿Les ayudaremos a dar caza a la bestia? — pregunto Richard

— No, Irons me ha ordenado específicamente que los S.T.A.R.S. no interfieran en absolutamente nada del caso — respondió Wesker, Barry soltó un bufido de molestia

— ¡¿Qué demonios piensa esa maldita morsa?! — exclamo en un gruñido

— Lamentablemente trabajamos bajo jurisdicción de la morsa, así que no tenemos más que obedecer las órdenes ¿quedo claro? — respondió Wesker en un tono algo amenazador — Dejare las cosas claras para todos, no intenten investigar por su cuenta o tendré que suspenderlos, y manténganse lejos de la escena del crimen, solo fue un ataque de un animal, dejen que la policía se encargue de esto, si se acostumbran a que siempre estaremos ahí para salvarles el trasero, se volverán una bola de inútiles, ¿Entendido?

— Si capitán — respondieron todos a unisono

— Enrico, encárgate de tu del equipo Bravo, que no hagan ninguna estupidez, y Engel...

— ¿S.…si capitán?

— Busca otro lugar lejos del bosque para ejercitarte por las mañanas... al menos durante algún tiempo, si alguien te ve cerca, Irons tomara represalias en contra de los S.T.A.R.S.

— Como diga, capitán — respondió agachando la mirada, esa mañana se había quedado dormida y no había tenido tiempo de salir a correr.

¿Qué hubiera pasado si lo hubiera hecho? Si no hubiera tomado demasiado la noche anterior y hubiera pasado demasiado tiempo dando vueltas en la cama como para dormir poco tiempo.

¿Pude haberlo evitado? ¿Hubiera podido ver al animal que ataco a esa chica?

— Bien, es todo — anuncio Wesker — Continúen con sus actividades normales, y repito, no se metan en este caso ¿entendido? — dijo bastante amenazador, antes de salir de la oficina.

El resto del equipo permaneció en silencio unos momentos. Aquel silencio era demasiado incómodo y solo aumentaba la tensión que de por sí ya había en el ambiente.

— Jamás había escuchado de un lobo que se acercase tanto a la ciudad — murmuro Rebecca

— No sabemos a ciencia cierta qué tan cerca fue el ataque ... pudo ser más adentro en el bosque — murmuro Jill

— Como sea, de nada sirve sacar suposiciones — gruño Chris — ¿por qué se niegan a que participemos en la búsqueda?

— Vamos chicos, dejemos que los polis también hagan su trabajo, no podemos quedarnos con toda la acción siempre — dijo Richard tratando de animarlos un poco, aunque por el tono de voz con el que lo había dicho, tampoco parecía estar muy convencido

— — —

Wesker encontró a Birkin vigilando los monitores esa noche, como llevaba haciéndolo desde la noche anterior y la anterior a esa. Aquellas pantallas les permitían ver lo que sucedía en el interior del centro de formación de Umbrella.

— ¿Algún cambio? – pregunto tomando asiento a su lado, viendo aquellas mismas imágenes a blanco y negro que no mostraban absolutamente nada

— Ninguno Albert, ¡Es una estupidez! — se quejó — ¡Lo que mató a esa chica pudo ser un maldito oso!

— Dudo que un oso haya desmembrado y devorado a su víctima y después desaparecer en las montañas

— Hay demasiados animales en las montañas Arklay — bostezo restándole importancia

— Y aun así no has tenido contacto con los del laboratorio del centro de formación — afirmo con total seguridad

— No, y los del laboratorio subterráneo de la mansión Spencer dijeron que tuvieron un accidente, pero que estaba "controlado" — agrego haciendo comillas en el aire con sus dedos

¿Controlado?, la sola palabra le causo gracia a Wesker, si de verdad había habido fugas en ambos laboratorios, jamás podrían controlar la infección ellos solos. Además, ese pequeño accidente pudo ser la fuga de uno o dos sujetos experimentales.

— Por cierto, ¿cómo vas con el asunto de la chica Engel? — Pregunto Birkin Cambiando repentinamente el tema

— Intente conseguir el anillo anoche, pero parece que es muy apegada a el — respondió Wesker con algo de fastidio — O al menos finge que se trata de algo invaluable para ella, supongo que Andrew la enseño bastante bien a no dejar que nadie ajeno a los Engel se acercaran a ese anillo

— ¿De verdad piensas que la clave pueda ser ese maldito anillo? Por lo que recuerdo, incluso el Doctor Marcus tenia uno — respondió Birkin con aburrimiento

— No veo otro motivo por el que la chica no permitiría que nadie más lo tocara

— Pensé que con tu inteligencia ya lo tendrías en tu poder — se burló con sorna — ¿Por qué demonios no te acuestas con ella y ya? Te sería tan fácil obtenerlo de ese modo

— No suelo meterme con cualquiera solo por trabajo, al menos prefiero disfrutarlo un poco — respondió restándole importancia

— ¿Qué? ¿Acaso la princesita no es tu tipo? Creí que tenía las "curvas" que te gustaban

— Me agradan un poco más... maduras — murmuro estirándose un poco — Pero sí... ahora que lo mencionas, si tiene ciertas características que me son bastante agradables a la vista

— ¡Deja de perder el tiempo Albert! Si de verdad crees que la clave está en ese anillo ¡Consíguela de una vez! — reclamo dando un golpe en el tablero de mandos — Cualquier cambio en los malditos monitores te avisare

20 de mayo de 1998

Los policías aún no habían podido dar con el animal salvaje que había asesinado a esa chica, y para colmo esa misma mañana habían encontrado otro cadáver más.

Una mujer de veintitantos años, desembrada y llena de mordiscos del mismo animal desconocido, además de mordiscos humanos.

La prensa se había enterado y hablaba de ambos asesinatos en el bosque, si las cosas continuaban así, el pánico se apoderaría de las personas. Sin embargo, Irons se negaba a dejar que los S.T.A.R.S. participaran en el caso, y sin embargo convoco a una rueda de prensa para aclarar las dudas de los ciudadanos.

9 de junio de 1998

Las cosas empeoraban conforme pasaban las semanas, ocurrieron más ataques, con las mismas características que los primeros, la prensa comenzaba a llamar a los causantes "Asesinos Caníbales". Los oficiales creían que se trataba de un grupo de locos con perros extremadamente agresivos, sin embargo, no habían podido encontrar pistas de su paradero.

Habían acordonado y prohibido a entrada al bosque Arklay por seguridad, sin embargo, los grupos de curiosos, o los jóvenes buscando riesgos eran el problema principal. Incluso realizar un picnic en las zonas destinadas a ello era considerado peligroso.

— ¡Miren esto! — exclamo Rebecca entrando de prisa con una revista en la mano — aquí dice que las personas que viven en las zonas colindantes al bosque han visto criaturas enormes deambulando la zona.

— Puede ser parte de la histeria colectiva de la gente — chasqueo Jill —ha pasado casi un mes, y las victimas no han hecho mas que aumentar, incluso los muy sínicos han comenzado a atacar a la luz del día

— Pero Irons sigue en la misma posición ¿no? — pregunto Zafiro — Hasta que esa morsa no ceda ante la presión, estamos atados de pies y manos, mientras dejamos que un asesino serial atemorice a la ciudad.

Las últimas semanas, sus entrenamientos se habían visto suspendidos, sin nada para concentrarse, el equipo se volvía loco por la tensión. Aunque trataran de atiborrase de comida en el restaurant de Emmy, ninguno podía sentirse realmente cómodo con la situación, notaban el temor en los ojos de los ciudadanos allá a donde fueran, y ninguno de ellos podía brindar una respuesta satisfactoria para calmar aquel creciente miedo.

— Esto no apunta para nada bueno — murmuro Zafiro mordiendo el extremo de un bolígrafo, durante aquellos días, había tomado la decisión de mantener oculta aquella situación de sus padres, tratando de mantener la calma cuando llamaba a casa cada semana.