Les dejo aquí la nueva actualización de esta historia, pasamos a un pequeño periodo entre los eventos de Resident 1 y Resident 3 que cronológicamente inicia antes del 2), aquí aparecerán algunos personajes originales, que se volverán recurrentes en la historia a partir de este momento, y que ayudaran tanto a nuestra protagonista como a nuestros héroes.
Gracias a los que me brindan su apoyo en esta historia, nuevamente me ayudaría mucho que pudieran darme su opinión acerca de esta historia, me gustaría mucho leer sus reviews
Sin más por el momento, los dejo con el capítulo 6 de esta historia
Descargo de Responsabilidad: Los personajes de Resident Evil que aquí aparecen pertenecen a Capcom, solo la idea original de la historia y personajes originales que aquí aparecen son de mi autoría (y algunos prestados para trabajar aquí)
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CAPITULO 11
Irons se dirigió a su automóvil escupiendo maldiciones ¿qué demonios pensaba esa estúpida chica? Ya se las pagaría, se haría cargo de que destrozaran a los S.T.A.R.S. y ella regresaría suplicando que hiciera algo para detenerlos. Y entonces se las cobraría todas.
Saco las llaves de su auto tan aprisa que cayeron en el piso haciendo eco en el solitario estacionamiento, maldijo agachándose por ellas con dificultad. Se levantó completamente empapado de sudor por el esfuerzo, fue entonces que sintió que alguien lo sujetaba del cuello y apuntaba con un arma a la altura de sus riñones.
— Jefe Irons, si intenta correr y alertar a alguien terminará con una bala en la entrepierna, o en el trasero — le dijo una voz ronca, como si la estuvieran alterando con algo, el jefe de policía no se movió en absoluto — bien ya ve que no le miento, usted no me conoce pero yo sí, y sé que tiene varios juicios pendientes por acoso y violación, así que si desea conservar sus genitales y su carrera va a hacer la vista gorda y dejar a todo el personal femenino en paz, incluido al personal de S.T.A.R.S. — hablo firmemente, Irons estaba pálido sin poder moverse — A la primera queja de acoso que escuche lo va a lamentar, si intenta buscarme lo mató, si despide a alguien lo mató, si amenaza a alguien, lo mato, y si comenta con alguien acerca de este encuentro… bueno creo que ya fui bastante claro — agrego burlón —deberá seguir trabajando y olvidar este asunto por su bien, asienta si comprende
Irons asintió sin decir palabra alguna
— Muy bien, ahora abra la puerta trasera del auto, usted saldrá de aquí y conducirá al distrito comercial de Raccoon, si hace algo raro, o intenta dar alarma de esto le disparare, y si menciona algo una vez que yo me vaya, hare publica la información. — agrego enterrando aún más el cañón del arma en el grasoso cuerpo del jefe de policía
Irons obedeció abriendo la puerta trasera del coche, las amenazas de aquel sujeto no eran apra tomárselas a juego, después de todo había logrado amenazarlo a el, justamente en la estación de policía, estaba claro que aquel sujeto era un profesional condujo sin dar rodeos hasta el distrito comercial de Raccoon, avanzando por Flower Street.
El desconocido se bajó del auto en un área demasiado concurrida, recordándole la amenaza, Irons permaneció unos minutos con el auto estacionado, sudando frio, se sentía vigilado por todos lados.
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Zafiro se observaba en el espejo de cuerpo completo de su habitación, recién salía de tomar una ducha, se había puesto unos pantalones cortos, y había permanecido con la toalla en el cuello, con ambos extremos cubriendo sus senos. Se giró para observar las heridas rojizas que cubrían su lado izquierdo del torso y atravesaban parte de su espalda. Habían pasado solo unos días, y aquellas mortales heridas estaban cicatrizando a un ritmo bastante acelerado, a diferencia de las de Barry.
Paso sus dedos por los bordes de las irregulares y aún abiertas heridas, sus lesiones nunca habían sanado a esa velocidad tan vertiginosa, pero se repitió que tendría que acostumbrarse a ello, eran los efectos secundarios del virus que su abuelo hizo el favor de entregarle.
Llamaron a su puerta un par de veces, Zafiro se extrañó, era casi media noche, y no esperaba a nadie, de tratarse de alguno de los miembros del equipo la hubiera llamado antes, a menos que estuvieran en problemas, o los estuvieran siguiendo.
Arrojo la toalla a la cama y se puso una blusa de tirantes algo holgada. Se colgó el anillo al cuello por costumbre. Quiso tomar su arma del cajón de su mesita de noche, pero recordó que la había dejado en su estuche en la oficina de S.T.A.R.S.
Como sea, me queda el cuchillo
Se acercó a la puerta, y la abrió lentamente, no era ninguno de los S.T.A.R.S., tal vez si hubiera sido uno de ellos no la hubiera sorprendido tanto como la persona que estaba en ese momento de pie ante ella. Un hombre alto de cabello profundamente negro y ojos azules.
— ¿Qué haces aquí… papá? — pregunto con sorpresa, sentía la necesidad de echarse a su cuello y llorar como una niña asustada, había pensado que jamás volvería a verlo cuando estuvo en la mansión, pensó que jamás saldría de ahí.
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Andrew Engel estrecho a su hija en sus brazos, había temido que Umbrella, que Spencer intentara capturarla al estar tan lejos de casa.
Había recibido una llamada del teniente Nathaniel McCabe, informándole que su hija había sido enviada por Albert Wesker a una misión en la mansión Spencer días antes, se sospechaba que Albert estaba muerto al igual que la mayoría de los S.T.A.R.S., aun así, le preocupaba la sola idea de que su hija le hubiera proporcionado la clave de la investigación de su padre a Umbrella, y todo por un error de adolecente hormonal de su hija supuestamente adulta. Dejo todo el trabajo en manos de su esposa, y se apresuró a preparar todo para salir rumbo a Raccoon City.
Había considerado todo lo que le reprimiría a su irresponsable hija, pero al verla de frente solo pudo estrecharla en sus brazos, había temido que la perdería, que, si Umbrella no averiguaba nada de sus poderes, terminarían por matarla en aquella misión.
— ¡Creí que no volvería a verte!... La mansión Spencer, Wesker, ¿cómo demonios terminaste metida en toda esa mierda?
— Yo… lo siento papá — trataba de no sollozar — también tenía miedo de no volver a verlos ni a ti ni a mama, creí que iba a morir ahí
— Te advertí que tuvieras cuidado de en donde te metías y con quien te relacionabas — la riño mirándola severamente — Luna, no puedes subestimar a Umbrella, y además… también sé que fuiste tú la que le entrego la contraseña de la investigación a Wesker
— Ahh… yo — respondió su hija mordiéndose los labios
— Sé que ya eres una mujer adulta, pero te sigues portando como una niña, y por una aventura que tuviste, pusiste en riesgo todo, le entregaste a Umbrella los datos de la investigación de mi padre
— ¿La investigación sobre mí? — protesto — ¿Y cuándo esperabas decirme que lo que Umbrella buscaba realmente era a mí? ¿Que no soy más que otro de sus experimentos? Dejaste que usaran a tu única hija como conejillo de indias
— Luna, entiéndelo, era la única opción que quedaba para salvarte
— ¿Y dónde estuviste tu todo ese proceso? — le reclamo — Jamás estuviste conmigo, ni tu ni mamá, ambos me dejaron para morir sola
— Escucha, lo siento, ¿está bien? — respondió Andrew tomando el rostro de su hija entre sus manos — Cuando el médico dijo que no podía hacer nada, tu madre se sumió en depresión, yo... decidí alejarme, no quería ver a mi única hija morir delante de mí, no quería tener esa imagen… cuando tu abuelo dijo que trataría de salvarte no quise hacerme ilusiones, las probabilidades de éxito eran muy bajas.
— Pero al ver que resulto ¿Por qué no hiciste nada para evitar que volvieran a inocularme con ese virus?!
— Entiende esto, ese virus te mantenía con vida, y aunque no me agradara, gracias a él estabas con nosotros… jamás espere que desarrollaras esas habilidades, mientras tu abuelo se concentró en enseñarte a dominarlas, yo solo quise erradicarlas con el suero — confeso apenado — después de que mi padre fue asesinado, tome la decisión de mantener inactivo el virus, cada tiempo te inyectaba el suero desarrollado por la doctora Collins para disminuir la potencia del virus.
— Pues parece con los años se fortaleció — chasqueo — Y ahora que no tengo ese suero, se manifiesta ocasionalmente, y no tengo control sobre el realmente
— Y es por ello que Umbrella te perseguirá — le recalco — tienes que volver a casa
— ¡La mansión Spencer exploto con todos los datos! — protesto su hija en un intento de defenderse — Umbrella lo perdió todo cuando la mansión voló en miles de pedazos — agrego paseándose por la sala, Andrew suspiro con resignación
— No es así — respondió mirando la cara de sorpresa de su hija — Luna, escucha, que me haya mantenido lejos de Umbrella durante toda mi vida, no quiere decir que no sepa cómo funciona, en estados de emergencia, las bases de datos de los laboratorios son enviadas a la U.M.F.- 13, en otro centro secreto, todos los datos que hayan sido recabados en los laboratorios de la mansión, están ahora a resguardo en otro ordenador, y a estas horas Umbrella podría estar buscándote
— ¡Y al resto del equipo! — protestó Zafiro completamente pálida — no voy a volver a Londres, ¡no puedo dejar al equipo ahora!
Andrew suspiro, esperaba poder convencer a su hija de que regresara con él, donde pudiera mantenerla segura de la compañía que su padre había fundado. Pero no había sido así, su hija estaba decidida a permanecer ahí, justo en la boca del lobo. Luna siempre había sido así de caprichosa. La famosa terquedad de los Engel.
— Entra — dijo inclinando un poco el rostro a un pequeño micrófono que tenía en la solapa del traje
Su hija lo observo con sorpresa, retrocedió un par de pasos vigilando la puerta con miedo y desconfianza, pudo notar como sus ojos cambiaban a ese aspecto felino dorado rojizo que hacía años no veía. Luna tenía razón, parecía que el virus no había hecho más que fortalecerse.
— ¡Luna Zafiro Engel, Tranquilízate! nadie va a hacerte daño
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Lo vio entrar justo después de que su padre lo llamo, se trataba de un hombre alto y atlético, de cabello negro y ojos verdes, una barba poblada del mismo color que su cabello, vestía ropas militares. Observo a su padre y al desconocido fijamente, lucharía, sin importar lo que trataran de hacer con ella, no se los dejaría tan fácil, al menos daría batalla antes de ser llevada a Londres en contra de su voluntad.
— Ya está arreglado el otro asunto señor Engel — respondió el hombre con un ligero acento irlandés
— Me tranquiliza un poco escucharlo, por lo menos eso me dejara un poco más de paz… en cuanto a Luna
— Me hare cargo de ella — Respondió mirándola a ella de reojo
— ¡No voy a regresar! Antes tendrían que matarme, ¡o llevarme arrastrando! — gruño
— Antes que nada, permíteme presentarme, soy el teniente Nathaniel McCabe
— Luna, escucha, necesito que te relajes — su padre trataba de sonar calmado — McCabe no viene para llevarte a ninguna parte, viene para cuidar de ti
— No necesito de una niñera — mascullo, sus ojos emitían un destello rojizo
— De eso no estoy seguro, te he cuidado desde poco después de que tu abuelo fuera asesinado, y jamás te diste cuenta de ello — respondió el teniente con un tono de voz lleno de orgullo — además desde que llegaste a Raccoon y estuviste por tu cuenta, has cometido una serie de errores, abusando de la libertad que tenías y cometiendo un error tras otro, como tener sexo con un hombre que apenas conocías, eso puso en peligro tu integridad física y tu vida
— ¿Es broma cierto? — sus ojos volvieron a la normalidad — es suficiente, me voy a dormir, no quiero que me den un sermón
— McCabe no está aquí para darte un sermón — reprendiéndola con la mirada
— Así es, a final de cuentas, es tu vida — el teniente se encogio de hombros restándole importancia —Aun asi no deberías de volver a hacerlo de manera tan descuidada — agrego el irlandés de manera seria — Y si lo haces toma — agrego colocando una caja de preservativos en su mano. — Asegúrate de protegerte bien y, de que tu compañero no tenga intención de matarte.
Su rostro se sonrojo completamente. ¡¿Qué demonios le pasaba a aquel sujeto?!, Observo de reojo a su padre esperando una explicación, pero pudo notar como el también miraba con severidad al teniente por su "amable consejo".
— Muchas gracias, pero Albert está muerto — gruño arrojando los preservativos al sofá — Así que no creo ocuparlos por ahora — estaba por encerrarse en la habitación, pero vio a Nathaniel de reojo — ¿dices que me has cuidado durante estos años sin que me diera cuenta no? ¿Y lo seguirás haciendo mientras este en Raccoon?
— Mi escuadra ha no solo ha cuidado de ti, sino de toda la familia Engel, estamos bajo sus órdenes y protegemos su integridad e intereses.
— ¡¿Una escuadra completa?! — Exclamo sin contener la sorpresa, trato de recobrar la compostura — Si ese es el caso, y tu y tu escuadra están bajo las ordenes de los Engel, demuéstrame que eres digno de confianza
— ¿Cómo quiere que lo demuestre señorita Engel? ¿A quién quiere que elimine?
— A nadie… todavía, aunque la idea podría ser tentadora — respondió Zafiro tosiendo un poco ¿de verdad aquel sujeto eliminaría a alguien si ella se lo ordenaba? Sacudió la cabeza, tratando de centrar sus ideas — Un compañero de equipo necesita protección para él y su familia, quiero brindarle esa proteccion… Umbrella ya le causo demasiado daño en la mansión, y me siento culpable ya que es la empresa que mi abuelo fundo.
— Como ordene señorita Engel, ¿qué hay de los demás miembros del equipo? ¿Requerían protección también?
— ¿Podemos brindársela? — pregunto mirando al teniente y a su padre, este ultimo solo asintió — ME gustaría protegerlos también, pero por favor… que no se den cuenta de su presencia, o creeran que es Umbrella la que los sigue para deshacerse de nosotros de una buena vez
— Entendido señorita Engel — respondió McCabe — le aseguro que no notaran la presencia de ninguno de nuestro escuadrón
— Solo, llámame Zafiro, o Zaf — respondió algo incomoda, el teniente solo se limitó a asentir
— Luna — la llamo su padre — antes de que te encierres en tu habitación, quiero que tengas esto — dijo entregándole un maletín, al abrirlo encontró dentro una M91, muy parecida a su Samurai Edge que dejo en la oficina, solo que esta era completamente platinada, casi blanca, con detalles en azul en la empuñadura. — Supe de la suspensión, y no quiero que estés desarmada mientras tanto, no quiero que tengas problemas con Umbrella solo por estar vulnerable.
— ¿De dónde…?
— Quería que fuera un regalo para cuando ingresaras a Scotland Yard — respondió — Fue un poco complicado conseguir la autorización de manufactura del arma, después de todo las leyes de portación de armas en Inglaterra son demasiado estrictas — confeso, ella sabía que no podía portar un arma de fuego como oficial de Scotland Yard a menos que tuviera un permiso especial — Después de que viniste aquí, le mande a hacer unas modificaciones, no solo estéticas. Al menos las leyes que regulan las armas de fuego en América son más laxas — suspiro — Cariño, a partir de ahora, tienes que ser muy consciente del peligro que correrás … Umbrella sabe de ti, además… querrá deshacerse de los S.T.A.R.S. ahora que saben demasiado. Tendrás… — Andrew suspiro haciendo una pausa — Tendrás que aprender a controlar el virus en tu cuerpo para poder protegerte a ti misma.
— Lo tendré en cuenta, y cuidare mis espaldas — respondió cerrando el maletín — Lo prometo — susurro abrazando a su padre
08 agosto de 1998
Estaba atardeciendo cuando Zafiro bajo de su motocicleta a unos kilómetros de la planta depuradora de agua abandonada al norte de Raccoon City, había visitado frecuentemente esa zona de la ciudad, la única zona lejos de las barricadas de la policía, y lo suficientemente lejos de la población para que ella pudiera practicar con calma.
Después de la orden de suspensión, los policías se habían hecho cargo del caso, o eso había anunciado el imbécil de Irons para justificarla falta del escuadrón S.T.A.R.S. Parecía querer esconder todo lo sucedido como si se tratara de polvo debajo de un tapete.
Para su sorpresa ni Chris ni ella habían sido despedidos como esperaban, pero lo ideal era no pararse por la estación para absolutamente nada, a pesar de ello, la prensa no se había tentado el corazón para destrozarlos, los tacharon de alcohólicos, drogadictos e incompetentes, amargamente descubrieron el enorme poder que Umbrella tenía en la ciudad, la empresa brindaba más de 3 partes de los empleos totales en Raccoon City, ¿A quién iban a creerle más?
Salir de día se había vuelto incomodo la mayor parte del tiempo, Chris se había aislado en su departamento, tratando de encontrar la manera de sacar a la luz las investigaciones de Umbrella, pero que podría hacer una simple persona frente al gigante corporativo.
Nada, por ahora no podemos hacer nada
Al menos eso le había dicho Nath, apenas llevaba una semana de conocer al irlandés, y eso había bastado para darse cuenta de que, además de ser un alcohólico, mal hablado, también era un buen elemento, el sabía cosas que ella ignoraba por completo, y después de su sesión de entrenamiento para controlar al virus, venían las lecciones de vida, la hizo entender que además de su fuerza física, podía otro gran poder, el poder de su apellido, si había pensado que su amenaza en contra del jefe de policía solo había parecido un truco barato, estaba sumamente equivocada. La familia Engel no era algo que se pudiera subestimar, su abuelo había fundado Umbrella en la década de los 60, por derecho, el 25% de la empresa le pertenecía a su familia. Era de los accionistas mayoritarios inmediatamente después de Spencer.
En un principio no había querido saber nada del asunto, pero Nathaniel insistió en que lo pensara detenidamente, su abuelo la había nombrado a ella como su heredera, cuando Ozwell Spencer asesino a su abuelo, hizo una declaración pública de que él se encargaría de administrar Umbrella debido a que la heredera de su socio y "amigo" Maximus Engel aún era menor de edad. Si ella lo deseaba, podría reclamar la parte que le correspondía de la empresa, y usarla para chantajear a Spencer ya fuera para sacarle el doble de su valor, a cambio de entregarle todo el control, y dejarlo en paz, o para que ella interfiriera en todos los planes a futuro de la empresa y de Spencer, solo había dos posibles finales para eso, que la mataran o que el anciano cediera. Zafiro considero que la primera sería la más probable, y si quería evitar ese destino tendría que controlar sus habilidades físicas, al menos, para incrementar un poco sus posibilidades de supervivencia.
Además de las clases de historia de su familia, también estaban las clases de recolección de datos para usarlos a su favor, sus entrenamientos para dominar el virus en su cuerpo, y, si las cosas seguían a ese ritmo acabarían viviendo bajo el mismo techo y tendría clases hasta de cepillado dental.
Afortunadamente para ellos, los ataques en la ciudad habían cesado, Zafiro sospechaba que Umbrella había mandado a alguien a limpiar el desastre, además de que habían justificado la explosión de la mansión Spencer como "meramente accidental".
Se quitó su chaqueta de cuero y la arrojo sobre la motocicleta, tenía que concentrarse en lo que habia ido a hacer, y eso era practicar, esos días había conseguido un avance al poder activar el virus a voluntad y mantenerse plenamente consciente durante el proceso. Se acostumbró a las sensaciones de su cuerpo, a percibir como si el mundo a veces se moviera más lento a su alrededor mientras estaba en esa fase, pero no conseguía habituase a ver sus ojos rojizos en un espejo… y procuraba no tener que hacerlo.
Saco su cuchillo de combate de su bota y visualizo su objetivo justo delante de ella, un tronco lleno de marcas que había hecho con anterioridad, tenía como objetivo hacer una marca en el tronco y poder detenerse enseguida, en los últimos intentos no había logrado detenerse a tiempo, y había ido a parar contra otro árbol más adelante, su hombro tenía varios raspones recientes que lo demostraban, y muchos otros que ya habían sanado, algunas otras veces perdía el cuchillo en el intento de dejar un nuevo arañón. Y todavía le resultaba muy complicado correr por los alrededores sin tropezar con los árboles.
Tomo un descanso después de un par de horas y se quedó de pie observando las primeras estrellas aparecer en el cielo, comenzó a abrir y cerrar la palma de su mano, respirando profundamente, sintió su corazón latir más a aprisa mientras sus ojos sufrían el tradicional cambio de color, observo hacia delante, fijando un punto entre los árboles, es milésimas de segundo, estuvo en ese lugar, con las hojas aun volando detrás de ella a cusa de la corriente que había provocado.
Se sentía más ligera, había sentido como si se pudiera mover a mayor velocidad, decidió probar suerte, corrió de un lado a otro, comenzaba a dominarlo, o eso creía. Se mantuvo delante de su árbol de prácticas, respiro profundamente y le planto un fuerte golpe con el puño cerrado, la madera salto hecha astillas y se fragmento por la fuerza del golpe.
Zafiro sonrió satisfecha mirando su mano, poco a poco aumentaría su fuerza, de eso estaba segura.
Una extraña sensación recorrió su columna, sentía como si algo o alguien la estuviera observando y se aproximara a ella, pero no escuchaba el sonido de pasos alrededor, permaneció en silencio, escuchando únicamente los sonidos del abandonado bosque. Lo percibió, como un objeto se aproximaba por detrás, cortando el flujo del aire. Salto hacia un lado justo a tiempo, solo para ver una sombra negra pasar deprisa por donde momentos antes ella había estado de pie.
La figura encorvada comenzó a erguirse, riendo con satisfacción, los ojos de Zafiro emitieron un destello rojo como la sangre, aquella risa, ella la conocía.
— Que maravilloso poder — murmuro el hombre delante de ella
— ¿Cómo…cómo es posible que sigas con vida? — gruño — ¿cómo es posible que estés aquí? El Tyrant... el Tyrant te atravesó completamente ¡yo lo vi! — agrego — ¿Por qué estas con vida Albert?
— Y mi plan funciono por completo, ustedes creyeron que estaba muerto — respondo girándose lentamente para mirarla — Fue una herida algo dolorosa, pero era necesaria... fui yo quien programo el sistema de autodestrucción de la mansión poco después de que se marcharan. Aunque como era de esperarse tuve que buscar otra salida de ahí, ya que ustedes estaban en el helipuerto encargándose del Tyrant — su voz era tan profunda, le parecía estar hablando con un fantasma — ¿Y qué me dices de ti? ¿También sobreviviste al ataque del T-002 no es así? Por lo que pude observar... realmente tienes un talento interesante... un poder maravilloso
Zafiro no terminaba de entender qué diablos estaba pasando, había estado ahí cuando Tyrant lo había asesinado, ¿entonces por qué? ¿De verdad era Albert Wesker el hombre que tenía enfrente? ¿Cómo era siquiera posible que pudiera estar ahí frente a ella?
Apenas y tuvo tiempo de reaccionar cuando él se lanzó contra ella de nuevo, incluso con sus nuevas habilidades le costó esquivarlo, Albert se movía a una velocidad superior a la suya.
— ¿Que eres? — le pregunto atónita — ¿Cómo es posible que puedas...?
— Luna, cariño, Considerando tu situación... ¿aún me preguntas que soy? — se rio quitándose sus gafas de sol, que siempre llevaba encima, dejando a la vista aquella mirada que ella aún no se acostumbraba a ver en sí misma, aquellos ojos rojizos con apariencia felina, fue entonces que lo entendió, si Wesker no murió ese día en el laboratorio, había sido simplemente porque él también estaba infectado.
— ¿Cómo demonios paso eso? — pregunto — ¿cómo es posible que tú también estés infectado?
— Me aplique una variante del virus a mí mismo poco antes de que Jill bajara al laboratorio — dijo Wesker rodeándola como un depredador lo hace con una presa — sabía que dispondría de poco tiempo para poner en marcha mi plan y fingir mi muerte ... no esperaba que Burton y tu llegaran justo en el momento menos indicado y estuvieran por echar a perder todo! — gruño un poco — Afortunadamente para mí, las cosas salieron bastante bien, y desperté segundos después de que se marcharan y el Tyrant hubiera abandonado el laboratorio, escuche las alarmas de emergencia zona que habían activado Chris y Barry, simplemente decidí iniciar la secuencia de autodestrucción de la mansión... y estas habilidades fueron muy útiles para salir — clavo la mirada en ella — Por lo que veo... apenas estas familiarizándote con tus habilidades recién descubiertas — susurro antes de atacarla de nuevo
Zafiro interpuso los brazos para detener el ataque, el choque levanto las hojas a su alrededor.
— Muy bien, parece que ahora si tengo un rival digno — dijo Wesker sonriendo
Zafiro apenas y tenía tempo de esquivar los golpes, eso ya no era un entrenamiento como meses atrás, si no hacía algo ya, Albert la mataría, de eso estaba segura.
Comenzó a contraatacarlo, los golpes provocaban corrientes de aire que arrojaban hojas y tierra por todos lados, se sentía al límite, si seguía de ese modo perdería el control que tenía sobre su poder, o acabaría por desmayarse, pero si mantenían ese ritmo, Albert terminaría por demostrar cuál de los dos era superior, gruño de frustración y lanzo un golpe, dirigiéndolo a su rostro al tiempo que observaba aquellos ojos que antes eran tan azules como el cielo.
—
Wesker detuvo el golpe, sosteniendo el puño de Luna, pudo observar claramente su rostro, sus ojos similares a los suyos, el virus les había hecho perder su humanidad, pero a pesar de su fuerza y su velocidad, a pesar de los cambios que el virus estaba haciendo en ella, aun así, Luna parecía temerle a su poder. Se dedicaba principalmente a bloquear sus ataques o esquivarlos, pero no estaba haciendo nada para contraatacar.
— Parece que no eres capaz de estar a mi altura — dijo de manera burlona — realmente jamás lo has estado Luna
— yo debería de estar furiosa porque aun estas con vida — susurro quedamente — pero… no puedo, no puedo estar furiosa, creí… creí que no te volvería a ver jamás — sollozo bloqueando un golpe
— Sigues siendo débil... — gruño arrojándola a un lado — Aun no eres lo que estuve buscando — agrego acomodándose las gafas de sol — madura y haz crecer tu poder... ¡déjate de tonterías, y haz tus estúpidos sentimientos de adolecente enamorada a un lado! ... tu y yo somos seres superiores, Luna... pero está claro quién de los dos es mas fuerte.
Wesker le planto una fuerte patada en el estómago, lanzándola hacia atrás, estaría aturdida un rato, pero sobreviviría, aun no valía la pena enfrentarse como iguales, o tal vez Maximus Engel había cometido un error con el experimento.
O yo los he superado a todos
Sonrió con satisfacción colocándose las gafas de sol aproximándose a ella, la chica tosía frenéticamente, efectivamente era ella lo que había estado buscando por años, tomo una jeringa de aluminio de su bolsillo y la clavo en su cuello, extrayendo una muestra de sangre, una muestra del virus que ella poseía, se marchó desapareciendo en el bosque.
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Tosió tratando de recuperar el aliento, observaba la tierra entre sus dedos, su boca sabia a sangre, tenía que ponerse de pie y volver a casa, había sido estúpida al confiarse, y más al haber dicho todo aquello.
Asesino a tus compañeros, y trato de matarte...
Y estaba segura que volvería a intentarlo, se incorporó un poco, estaba completamente debilitada por haber mantenido tanto tiempo el virus activo, se llevó la mano al cuello, sintiendo el ardor del pinchazo, no había podido evitarlo, apenas y podía moverse, y había dejado que Albert obtuviera lo que quería, ella era un experimento, era obvio que querría una muestra del virus que había en su cuerpo.
Y ahora que la tiene... ¿porque no me mato?
Que importaba, debía regresar a la ciudad ya, Wesker no se contentaría con cazarla solo a ella, a menos que no le importara realmente el resto del equipo, Umbrella lo creía muerto también, entonces... ¿qué hacía aun en Raccoon? ¿Solo por una muestra de su sangre?
Se tambaleo hasta llegar a su motocicleta, el temblor de su cuerpo estaba pasando poco a poco. Condujo de regreso a casa, debía advertirles a los demás cuanto antes.
Nathaniel la recibió en su departamento, esta vez no tuvo deseos de reclamarle como había entrado, paso de largo entrando al cuarto de baño, el golpe y su paseo en moto le habían provocado nauseas. Afortunadamente no vomito.
— ¿Zaf? ¿Te encuentras bien? ¿Tan poca tolerancia tienes al alcohol? Debería enseñarte a beber — dijo de manera burlona
— ¡No estoy ebria! — le reclamo quejándose del dolor — tengo... tengo que contactar con los demás... — murmuro, saliendo para tomar el teléfono.
Nath la detuvo, mirándola con extrañeza, Zafiro cayó de rodillas al piso, sus piernas no la podían sostener más. El la ayudo a ponerse de pie, y la dejo en el sofá, revisando sus brazos y sus piernas, había estado usando un pantalón corto por el calor, y una blusa sin mangas.
— ¿Qué sucedió? — pregunto tranquilamente notando los raspones en su brazo y pierna derecha
— ¡Debo contactar con el resto de los S.T.A.R.S.! — insistió
— ¿Porque es tan importante? Mis hombres los están vigilando, ya te dije que Umbrella no se acercara a ellos
— ¡Nath no lo entiendes! — exclamo — ¡Wesker está vivo!
— ¡Eso es imposible! …No puede estar...
— ¡Escúchame! ¡Yo lo vi! ¡Lo vi mientras entrenaba! — rezongó — Wesker sobrevivió gracias al virus que se inyecto el mismo! No tienes idea de lo poderoso que se ha vuelto
— Me imagino que más que tu si te puso una paliza — respondió poniéndose de pie — ¿qué más sucedió? Aparte de la golpiza que aparentemente te dio, tienes sangre seca en el cuello
— Tomo una muestra de mi sangre y desapareció en el bosque — murmuro Zafiro — no pude hacer nada para evitarlo
— Y eso paso por que intentaron inactivar el virus todos estos años — gruño Nath — como supuse, no fue tan buena idea — suspiro pasando los dedos por su cabello — hazme un favor y no le digas de esto a absolutamente nadie...
— ¡Pero...!
— Llamare a mis hombres y los pondré bajo aviso, pero dudo que Wesker aparezca cerca del resto del equipo... tiene lo que quiere, o lo que yo supongo que quiere.
Zafiro se mordió el labio inferior, debatiendo consigo misma si debía o hacerle caso a Nath, finalmente asintió, pero si había más avistamientos de Albert Wesker cerca de los S.T.A.R.S., entonces se lo diría al resto de los chicos.
14 de agosto de 1998
Albert Wesker no había vuelto a aparecer en la ciudad como Nath se lo había dicho, Zafiro quería creer que había sido un mal sueño, y a veces lo lograba, al menos hasta que recordaba el pinchazo de su cuello, eso no lo olvidaría. Nath iba y venía sin darle mayores informes, el resto del equipo estaba bien, pero Chris seguía aislado, y eso le preocupaba.
Se puso una sudadera con capucha y salió de casa, paso por algo de comida china, pidió dos porciones para llevar y fue al departamento de Chris, esperando que siguiera vivo y no se hubiera desmayado de inanición. Llamo a la puerta un par de veces, Chris abrió la puerta, por lo menos estaba con vida aún.
— Pasa, estaba revisando unas cosas — dijo dejándola pasar, Chris cerro la puerta en cuanto entro
— Solo quería asegurarme que aun vivieras — le dijo quitándose la capucha — te traje algo de comida china
— Menos mal, no he comido en un par de días, estuve ocupado — respondió tomando la comida, Zafiro pudo notar que llevaba su arma encima. — nunca está de más algo de protección ¿no crees?
— ¿Hace cuánto no sales de aquí? Ni siquiera has abierto las cortinas
— No lo sé... ¿que día es hoy? — pregunto comiendo un poco — he estado investigando, reuniendo información para poder culpar a Umbrella, si encuentro algo gordo te garantizo que los hundiríamos
— ¿Has trabajado en ello tu solo? — pregunto preocupada viendo el desorden de la sala, Chris era un hombre soltero, desordenado por naturaleza, pero ahora, el lugar estaba completamente descuidado.
— Así es — respondió a la defensiva — Zaf, lo siento mucho, pero es algo que debo hacer...
— ¿Por qué te disculpas conmigo? — pregunto extrañada
— Sé que tu abuelo fundo Umbrella ... debe de ser extraño que un compañero intente destruir ese trabajo
— Mi abuelo murió hace 10 años, Umbrella lo asesino, así como trato de asesinarnos a nosotros — respondió de manera fría — Y también te recuerdo que me hicieron uno de esos monstruos...
— ¿Cómo vas con eso? — pregunto tragando un bocado — Rebecca me dijo que tratabas de controlarlo
— Mejorando... o eso creo — murmuro sintiendo un escalofrío al recordar el enfrentamiento con Wesker — Chris, ¿aun querrías destruir Umbrella aun si yo estuviera directamente implicada?
— ¿Hablas de ... trabajar para Umbrella? ¿Por qué querrías implicarte directamente?
— Solo es mera curiosidad, no quisiera trabajar para ellos, pero soy la dueña del 25% de la empresa, es todo — respondió encogiéndose de hombros — pensaba en que sucedería si reclamo mi derecho sobre esa parte de la empresa
Zafiro se sentó frente a Chris, la cara de asco que puso le había respondido claramente que estaba loca por pensar así. Pero de verdad pensaba en si no habría modo de frenarlo desde dentro Reclamar lo que le pertenecía y que Spencer le había arrebatado, pero no quería implicarse demasiado, quedaría atrapada en sus redes y se hundiría con ella cuando salieran todas sus investigaciones ilegales a la luz.
— ¿Creo que tu familia saldrá afectada no es así? — pregunto Chris viendo el plato de verduras que tenía enfrente
— La familia de Barry ya fue afectada por esto — respondió Zafiro — Nos encargaremos de deslindarnos de Umbrella antes de que algo peor pase
— Zaf, estoy pensando en ir a Francia, a las oficinas centrales — dijo de manera seria —tratare de tomarlos con la guardia baja, no sabrán quien los golpeo.
— Chris, no tienes que hacer esto solo... por favor no nos apartes... — le suplico
— Soy el pointman del equipo ¿recuerdas?... iré a reconocer el terreno de batalla... y ustedes llegaran después
Zafiro apretó los puños, se sentía impotente, sabía que no podría detener a Chris, y si seguía así acabaría muerto, pero parecía que no le importaba, y ella no podía hacer nada para que cambiara de opinión... ¿y si se lo pedía Jill? ¿la escucharía a ella?
Se despidió de Chris después de terminar de comer y volvió a su casa, Nath la recibió con una botella de ron medio vacía, a veces consideraba de qué manera estaria más segura, si con el ebrio, o sin él.
— ¿Qué tal esta tu amigo Chris? — pregunto
— Aún esta con vida, ya es algo ¿no? — respondió asomándose a la nevera, ese hombre había acabado con su reserva de cervezas en solo 2 días
— Me alegro, mis hombres se aseguran de que Umbrella no intente matarlo, pero si él se mata solo no podemos hacer nada — dijo llenando su vaso
— Es bueno saberlo — respondió Zafiro con sarcasmo juntando un paquete vacío de ositos de goma — ¿te los comiste todos?! — le reclamo
— Quedaban unos pocos, no quería dejarlos vivir en soledad — respondió mirándola con fingida inocencia, al menos los ojos de la chica seguían siendo tan azules como una playa del Caribe, entonces no había mayor peligro aún para él.
Zafiro recogió las latas vacías y el paquete de ositos y los puso en una bolsa negra, de por si pensaban que era una alcohólica y drogadicta, ahora cuando vieran esa cantidad de latas de cerveza. Observo a Nath a punto de reclamarle, pero lo noto más serio que de costumbre.
— ¿Qué pasa?
— Recibí unos datos que estuve confirmando durante la mañana — murmuro señalando una carpeta en la mesa, Zafiro se aproximó para examinarla — es acerca de un tal Virus G que Umbrella investiga en un laboratorio subterráneo, justo por debajo de Raccoon City.
— Pero eso solo quiere decir que...
— Su pesadilla aun no acaba, según esto, el G es más inestable que el Virus T, no tenemos muchos datos porque es información altamente clasificada y secreta, incluso para la mayoría del personal de Umbrella, solo sé que el encargado de la investigación es William Birkin, y por si no lo sabías, él también estuvo presente cuando Spencer asesino a tu abuelo.
Zafiro permaneció atónita leyendo el informe que sostenía entre sus manos, un virus más peligroso e inestable que el virus T, criaturas más letales.
— Lamento informarte que tu amigo Chris también sabe de esto — murmuro Nath — Ha contactado al FBI y ha estado recopilando los datos para poder enviarlos, lo peor de todo es que estos le respondieron, y también descubrió que Irons ha estado recibiendo sobornos de parte de Umbrella, por eso pueden hacer lo que quieran con la policía, jamás les echaran el guante.
Zafiro gruño paseándose por la sala, Umbrella, el virus G, y lo peor, Chris lo sabía, ¿por qué no se lo dijo? ¿No confiaba en ella acaso? ¿Pensaba que tal vez interferiría por salvar a su familia? ¿Por salvarse ella?
— Nath — murmuro aun dudosa de lo que iba a decir — Quiero — suspiro — Quiero que encuentres el medio de contactar a Ozwell Spencer
— ¿Contactar al asesino de tu abuelo directamente? — le pregunto levantando una ceja, ella lo miro de reojo
— le informaremos que estoy dispuesta a tomar posesión de lo que, por derecho, me pertenece... — murmuro mordiéndose el pulgar — si se niega a aparecer y a hablar conmigo directamente, lo hare público en los medios
— Que ¿piensas lograr? — le pregunto incrédulo — ¿hundirás tu familia por causa de Umbrella?
— No — respondió tranquila — Voy a negociar — agregó — le ofreceré entregarle mi parte de la empresa a cambio de una buena remuneración, deslindare a mi familia completamente de la empresa, y no interferiré con ella
— No eres tan tonta como pensé — respondió Nath levantando el vaso que sostenía en señal de brindis — sabes que esto solo puede acabar de dos maneras ¿verdad? O acepta... o te mata
— Y esperemos que sea la primera... ¿cuánto tiempo crees demorar?
— Tal vez un par de semanas... entrena hasta entonces, no quiero que te vuelvan a dar una paliza como la de hace días — dijo Nath tomando la botella de ron — oh por cierto... tu amigo Irons decidió sustituir a los S.T.A.R.S. por el S.P.F. la fuerza policial selecta o Raccoon SWAT... son solo un grupo de policías de niveles bajos que entrenan horas extra
— Que selecto suena eso — bufo Zafiro, sinceramente no esperaba que los regresaran a sus puestos... pero aun no los habían dado de baja, lo cual, si era extraño.
—
Jill acudió a casa de Chris, justo como este le había pedido, eran medianoche, que podría ser tan urgente para no esperar?
Desde que los habían suspendido, Chris se había aislado de todos, apenas y hablaba con alguien, incluso con ella, mantenía todos sus movimientos en secreto, como si esperase que Umbrella los estuviera vigilando, ella había temido lo mismo, pero tenían mas de 15 días desde que habían regresado de la mansion, y aun nadie los había molestado, además de los ciudadanos y el acoso de la prensa. Pero ella podía vivir si solo era eso.
Llamo a la puerta un par de veces, Chris entreabrió la puerta y la invito a pasar, vigilando antes de cerrar de nuevo.
— ¿Qué es eso tan importante que querías mostrarme? — le pregunto en voz baja
— Esto — dijo tendiéndole un par de hojas, parte de un informe acerca de la investigación de un nuevo virus denominado simplemente como G — la pesadilla está lejos de terminar Jill
— ¿Y qué piensas hacer con esto?
— Nadie en Raccoon ayudara — respondió — Filtrare los datos al FBI e iré a la sede principal de Umbrella a investigar más a fondo por mi cuenta
— Pero Chris, ¡eso es peligroso! — exclamo preocupada
— Y por ello iré solo — respondió — no pienso decirle nada a Claire tampoco, se preocupará y se meterá en líos, la conozco
— Dejará de ser tu hermana — bufo dejando el informe sobre la mesa
— Debemos estar preparados Jill, seguir luchando aquí
— Chris... — murmuro
— ¿Lucharas conmigo? — le pregunto tomando sus manos entre las suyas, casi era una suplica
— Hasta acabar con Umbrella — respondió — o que ellos acaben con nosotros
24 de agosto de 1998
— ¡Despierta en este momento! — le ordeno Nath quitándole la cobija de encima
— ¡¿Qué?! — protesto adormilada, volteo a mirar el reloj sobre su mesita de noche, aun no daban las 8 de la mañana — Por Dios Nath ¡déjame dormir!
— Redfield se marcha a Europa... en.… unas horas — dijo Nath viendo su reloj
— ¡¿Que Chris qué?! — se levantó de un salto y comenzó a buscar ropa limpia. Se apresuró a cambiarse y salió de su departamento.
Llego en poco tiempo al departamento de Chris, llamo insistentemente la puerta, hasta que este abrió, se sorprendió de verla ahí.
— ¿Que estas planeando? ¿Cómo que piensas largarte solo a Europa?
— ¿Cómo es que tu...? en realidad no importa — dijo dándose vuelta para terminar de empacar
— Chris estás loco ¡Harás que te maten!
— No pienso meterme de cabeza en la boca del lobo, investigare... cuando tenga algo con que comprobar los delitos de Umbrella contactare con ustedes...
— ¿Quien más sabe de esto? — pregunto resentida de que no se lo hubiera contado
— Solo Jill y Barry — respondió sin mirarla — Brad no se implicaría jamás, y no quise implicarte ni a ti ni a Rebecca — agrego — Barry se irá a Canadá con su familia para mantener a sus hijas a salvo, Jill permanecerá aquí para seguir con la investigación, ambos prometieron reunirse conmigo en un mes, para entonces, espero tener algo...
— Chris — susurro — ¿Porque no.…?
— ¿Por qué no te lo dije? No quería que te implicaras... Tu familia está ligada con Umbrella, la verdad no sé qué tanto...
— ¿No confías en mí? ¿no confías en tu compañera de equipo? — pregunto directamente — ¿De verdad piensas que por que mi familia está relacionada con Umbrella no los ayudaría?
—
Chris quería confiar en ella, buscaba desesperadamente confiar en Zafiro, pero desde que los habían suspendido, había comenzado a actuar extraña, en un principio había pensado que era por que trataba de controlar su poder, Rebecca le había comentado algo de eso, y la misma Zafiro lo había corroborado días antes, asegurando tener mejor control. Pero había algo más, también ella se había aislado del resto, no como el obviamente, pero Zafiro tampoco tenía mucho contacto con los demás. Como si estuviera ocultando algo.
Paso sus dedos por su cabello despeinado tratando de alejar las ideas que se le venían a la cabeza, Zafiro no podría estar trabajando con los de Umbrella, era estúpido siquiera pensar eso, hasta hace poco ella no sabía de su poder, tampoco sabía lo que pasaba en la mansión, al contrario del maldito de Wesker.
Tal vez solo sabe que la estabilidad de su vida hasta ahora se fue al cuerno
Pese a todo ella siempre les aseguraba que estarían bien, y que Umbrella no se acercaría a ellos, para no parecer obvios, pero, si Umbrella quería podría desaparecerlos y hacer como si ellos se hubieran marchado, entonces, ¿cómo es que ella estaba tan segura de que no los dañarían?
— Lo siento — respondió — Aun... no puedo confiar del todo Zaf, has estado actuando raro desde que nos suspendieron, Jill me contó lo sucedido con Irons, y quise pensar que eso te había hecho aislarte más de nosotros, eso y tú... situación con el virus — agrego incomodo — pero aun creo que hay cosas que no nos has dicho...
Pudo notar cómo ella se mordía el labio inferior, ¿Acaso estaba nerviosa? ¿Había adivinado entonces y de verdad les ocultaba información? ¿por qué?
Zafiro cerró los ojos un momento, mientras apretaba los puños, parecía como si se debatiera internamente en si debía decir lo que estaba pensando o no.
— Bien... ¿qué quieres saber? — dijo finalmente
—
Sabía que Nath la mataría por esto, pero lo que menos necesitaban en esos momentos era que el resto de los miembros de S.T.A.R.S. comenzaran a desconfiar unos de otros. Solo se aseguraría de no mencionar nada de Wesker hasta saber que planeaba esta vez.
— Siento que algo nos ocultas — murmuro Chris mirándola directamente a los ojos
— Lo siento, pero tenía que hacerlo — suspiro — Cuando nos suspendieron, recibí la visita de mi padre — agrego — No te contare todo el sermón para no aburrirte, pero si me dijo que todos los datos de la mansión, incluidos los de los experimentos de mi abuelo, fueron transferidos a una computadora en otro laboratorio, y hasta hace poco me entere de que ese laboratorio posiblemente este debajo de Raccoon City
— Averigüe algo de eso, y de lo que investigan, un tal virus G, más agresivo que el virus T
— También se acerca de ello — suspiro — Chris, Umbrella tiene todos los datos acerca de mí, acerca de lo que soy, decidí que tenía que controlar mis poderes al menos para tener una oportunidad de defenderme si Umbrella venia por mí, no quería implicarlos y ponerlos en peligro
— Sabes que Umbrella nos perseguiría de todos modos — respondió cortante — nos relacionemos contigo o no, Umbrella nos quiere muertos a todos.
— Lo sé, y tuve que tomar medidas para evitarlo — respondió desviando la mirada, Nathaniel la mataría, de eso estaba segura — Busque la manera de mantenerlos a salvo de Umbrella, pero no quería decirles nada porque no quería incomodarlos — confeso
— ¿Por qué dices que no querías incomodarnos?
— Mi familia ha estado bajo protección todos estos años, mi abuelo sabía que Spencer lo mataría, así que contrato un grupo de agentes para que nos protegieran cuando él no estuviera — susurro entrecortadamente — Solo … yo solo destine parte de esa protección para ustedes, pero no quería que se enteraran de ello, ya que pensé que les molestaría que los trataran como si fueran niños vulnerables. — lo miro con algo de culpa — Ellos escoltaran Barry hasta Canadá para asegurarse que este a salvo, y seguirán cuidando de su familia cuando él se reúna contigo y Jill en Europa.
— ¿Me estás diciendo que tu familia tiene una guardia privada? ¿Y que destinaste parte de esa guardia para protegernos? — pregunto Chris levantando una ceja, incrédulo — ¿qué clase de princesa eres? ¿de verdad son guardias eficientes?
— Ni los protocolos de seguridad de la Reina están tan bien planeados — respondió Zafiro rascando su mejilla
— Definitivamente eres una princesita... su alteza
— Deja eso — respondió incomoda
— Lamento haber dudado de ti — se disculpó apenado — Pensaba que... estabas trabajando con Umbrella o algo así...
— Al menos fuiste honesto al decirme eso — suspiro — Y, aun así, planeas irte ¿verdad?
Chris asintió, Zafiro se alejó unos momentos, mientras sacaba un pequeño comunicador de su bolsillo, se lo coloco en su oreja y lo acomodo.
— Me reclamaras después — dijo seriamente, sabiendo que Nath estaría preparando un sermón — Necesito que prepares todo, Volveré a casa a terminar con todo este asunto. Y llevaremos compañía.
Guardo el comunicador de nuevo, y se giró para ver a Chris, él la miraba con sorpresa.
— No te puedo dejar en Francia directamente, pero te dejare más cerca — dijo sin inmutarse — ningún amigo mío viaja en clase turista si piensa salvar el mundo.
— ¿Pero de verdad piensas volver a casa? Creí que no querías regresar a Londres
— Tengo negocios que atender antes de dar los siguientes pasos — respondió — tu encárgate de destruir Umbrella desde fuera, yo me encargare de deslindar a la empresa de mi familia... así también tendría libertad para actuar.
— De verdad vas a...
— Destruir lo que Spencer hizo con el trabajo de mi abuelo... — respondió — nos veremos más tarde, termina de empacar y aféitate, o no podrás pasar desapercibido en ningún lado con esa pinta de vagabundo que te cargas en estos momentos
Regreso a su departamento, comenzó a empacar parte de sus cosas, no necesitaría mucho, aún tenía una buena cantidad de ropa en Londres. Termino más rápido de lo que había esperado. Decidió esperar mientras bebía una cerveza fría. La brisa de verano soplaba ligeramente a través de las ventanas abiertas. Sentía un nudo en el estómago, regresaría a casa, enfrentaría cara a cara al poder máximo de Umbrella. Y no sabía si siquiera estaba preparada para ello.
Esto debe terminar cuanto antes...
Nath entro al departamento, vaya que tenía una cara de pocos amigos, Zafiro bebió un trago de cerveza, mirándolo de reojo. Espero, pero el irlandés no dijo palabra alguna.
— Saldrás a las 20:00 horas — dijo seriamente — un avión privado obviamente, para ti y el señor Redfield
— ¿Estas molesto? — pregunto, no había nada más desesperante que esperar un regaño que jamás llegaría.
— No fue tu movida más inteligente, pero supongo que era lo que tenías que hacer — respondió tomando una cerveza — nos veremos a las 20:00 horas en el aeropuerto, aún tengo cosas que arreglar, y tu padre llegara en unas horas más. Necesitarás lecciones intensivas antes de enfrentar a Spencer en un terreno que desconoces.
— ¡¿Espera... lecciones de qué?! ¿Cómo que mi padre viene en camino?
— Nos vemos... suerte con papi cuando llegue — le dijo en un tono burlón, saliendo del departamento después de terminar su cerveza
—
Chris esperaba viajar en un vuelo comercial, no en un avión privado, se acomodó la mochila, había volado en toda clase de aeronaves militares, pero no en el avión privado de un empresario. Aún seguía cuestionándose si no se había equivocado de hangar.
Zafiro se aproximó a él acompañada de un hombre alto y bien vestido, de abundante cabellera negra algo larga. Le noto algo de parecido con Zaf. Ambos venían custodiados por un par de hombres de complexión atlética y ropas militares.
— Chris, creí que te habías perdido
— Yo mismo creí que estaba perdido cuando vi el avión — respondió Chris rascando su mejilla
— Ya ves que no — sonrió — quiero presentarte a mi padre, Andrew Engel — agrego señalando al hombre que la acompañaba
— Es un gusto conocerlo al fin, señor Redfield — respondió muy cortésmente tendiéndole la mano, dios cuantas horas de clases de etiqueta tenía que haber tomado.
— El gusto es mío señor Engel — respondió Chris estrechando la mano del padre de Zaf
— Permítame agradecerle por cuidar de mi hija durante su estancia en Raccoon City — le dijo de manera educada — espero no haya causado demasiados problemas
— No hay nada de que agradecer — respondió Chris apenado — queríamos que se sintiera como en familia
— Señor, todo está listo — le indico uno de sus acompañantes, un hombre alto de cabello negro, y poblada barba del mismo color, la cual resaltaba sus ojos verdes.
— Gracias teniente McCabe — respondió — Muy bien, pongámonos en marcha — indico Andrew
— Las damas primero — dijo Chris, Zafiro abordo el avión seguida por ambos
Chris tomo su lugar, estaba sorprendido del lujoso interior, tal vez en serio debería de empezar a llamar su Alteza a Zaf. El avión despego minutos después, bebieron algo de vino y comieron un poco, Chris y Andrew charlaban del desempeño de Zafiro como agente, pero fueron muy pertinentes en dejar de lado todo lo referente a la desastrosa misión en la mansión y los problemas que ahora tenían con Umbrella.
Chris se quedó dormido a mitad del vuelo, llegarían a Londres en 6 horas más aproximadamente, Zafiro sabía que cada minuto que pasaba se encontraba más cerca de las fauces de su enemigo.
Despertó un par de horas después, Zafiro estaba sentada frente a él, leyendo unos papeles en una hoja, parecia agotada y frustrada.
— ¿Que sucede? — pregunto Chris tallándose los ojos
— Esto y yo, no nos llevamos bien —gruño cerrando la carpeta que sostenía en sus manos
— ¿Que tan malo puede ser?
— La economía y la administración son cosas de las que me aleje desde que tenía 11 — suspiro reclinándose en su asiento — Necesito ositos de goma — murmuro — o una soda, o ambas
— Luna Zafiro, a este paso no podrás aprender a tiempo, ¿cómo esperas enfrentarte cara a cara al magnate corporativo de Umbrella, si no puedes resolver un simple problema de administración de mesada?
— Esto no es cómo administrar una mesada — lloriqueo
— Luna, Necesitas conocer el valor real de tu parte de las acciones de la compañía, y el valor real total de la compañía, incluidas las investigaciones clandestinas. Spencer tratara de engañarte y sacarte del juego, y quedarse definitivamente con el control de la empresa.
— ¿Cuánto tiempo tengo realmente?
— 72 horas — respondió el hombre de la barba
— ¡¿72 horas?! — exclamo Chris, sí que las cosas eran tan complicadas para ella como para él.
