Ichigo se encontraba en los jardines de la mansión Kuchiki, con su kimono tradicional. Era una ceremonia pequeña solo con familia y amigos … amigos quienes hicieron una tremenda escena al llorar cuando Rukia se presentó ante él. Pero si le preguntarán que había pasado, sinceramente no podría responder.
No
En el momento que sus ojos cayeron en Rukia todo lo demás había desaparecido. Por un momento las líneas se volvieron confusas. Los planes, los porqués, las amenazas, todo lo que había llevado a ese momento se había esfumado de su cabeza.
Porque Rukia estaba frente a él.
Con un kimono tradicional lila con blanco que combinaba perfecto con sus ojos.
Con su cabello recogido y algunas flores adornando su coronilla.
Llevaba maquillaje y era la primera vez que la veía de esa manera. Fijo su mirada unos segundos en sus labios pintados de rojo carmín. Su corazón estaba como loco en su pecho y no pudo evitar sentir electricidad por todo su cuerpo.
Ers casi como … si todo fuera verdad.
Y cuando Rukia le sonrió, cómo para darle ánimos.
Tuvo este loco deseo de inclinarse hacia ella y solo …. Besarla.
No solo como lo había hecho la última vez.
No. Quería besarla realmente.
Sentir su pequeña figura contra la de el.
-Ichigo - llamo Rukia - es tu turno - lo dijo en un susurró. Ahí fue cuando se dio cuenta que la ceremonia había empezado. Ni los gritos de su padre. Los claros lloriqueos de algunas cierta asociación de mujeres shinigamis o incluso mirada asesina de Byakuya nada había captado su atención. Porque estaba tan inmerso en el momento, tan inmerso en Rukia. Que bien podrían estar solos.
Terminaron los clásicos rituales ceremoniales, el intercambio de argollas e incluso cuando todos había coreado beso. Ichigo se acercó a su mejilla y depósito un suave roce de sus labios.
Todo había salido bien. Incluso la intervención de los ancianos los cuales habían asegurado que era bienvenido … y que no podía esperar para conocer al próximo Kuchiki.
Todo eso fue quizás demasiado para el. necesitaba tomarse un momento.
Y ahora, en ese momento se encontraba apartado de todos, en los jardines Kuchiki, escuchando a lo lejos los sonido de celebración. La música, la charla, los constantes gritos de los borrachos de sus amigos.
Pero no estaba de humor para todo eso.
Una parte de el pensaba…. Que quizás si todo hubiera Sido real, ese podría calificar como uno de los mejores de su vida.
Si Rukia no estuviera en esa posición. Si El no estuviera escondiendo mucha información a la que ahora era su esposa.
Quizás, habría vivido ese momento con…. Felicidad.
-Oe - Rukia interrumpió sus pensamientos. -. ¿Estás bien ? - pregunto preocupada.
-Si - contesto el. - te ves hermosa por cierto - dijo sencillamente con un sonrojo en las mejillas.
-G…gracias.
-Entonces…. Estamos casados.
-SiEs extraño pensar en eso.
-Creo que la situación por completo es extraña. Pensé que …Que me sentiría diferente. Cómo si algo cambiará el día de hoy, pero…Me siento igual.
-Te entiendo. - dijo él- pero nuestra vida no tiene porqué cambiar. Me aseguraré de que no suceda.
-Yo igual.-Se quedaron en silencio apreciando el cielo.
-Ichigo.
-¿Si?
-Está noche…. Tu… tu … esperas . .. - Rukia estaba balbuceando peleando por qué sus palabras salieran. Cuando Ichigo se dió cuenta de que trataba de decir de sonrojo igual.
-No… no yo…. Yo sé que no….. digo…. No espero…. Yo…
Ambos se quedaron callados por un momento, no muy seguros qué hacer. Hasta que Rukia rompió en carcajadas por lo absurdo de la situación. Ichigo solo se limitó a sonreír.
-Esto es tan incómodo - dijo ella.
-Mm- musitó. - yo…. Nada tiene que cambiar Rukia.
-Lo sé. Solo…. Necesito que seamos honestos Ichigo. - Rukia lo miró a los ojos pero Ichigo desvió la mirada. - ichigo….
-Si. - contestó. Rukia estaba a punto de hacer otro comentario cuando Rangiku apareció ebria con su atuendo desarreglado y balbuceando
-
¡Ahí está la feliz pareja! Rukia-chaaaan me alegro mucho por ti
-Gracias Rangiku-san.
-Escúchame - dijo tomándola de los hombros extrañamente sería. - si has encontrado al hombre de tu vida, tienes que aferrarte a él. - y por un momento los ojos de Rangiku-san estaban inundados de lágrimas contenidas. Rukia pudo ver cuánto sufría. Así que se limitó a abrazarla sus ojos cayeron en Ichigo quien se veía consternado por Rangiku.
- Lo haré Rangiku-san
- bien - inmediatamente cambio de humor, algo que preocupo a Rukia . -Entonces no hay que perder el tiempo. Que están haciendo aquí. ¡Deberían estar gozando su noche de bodas !
Rangiku aventó a Rukia obligandola a pegarse a Ichigo así como tomar un brazo del chico y pasarlo por la diminuta cintura de su ahora esposa. Los dos se quedaron así un momento viéndose incómodos pero Rangiku no prestaba atención a eso. Seguía haciendo comentarios de como tendrían que disfrutar estar casados y haciendo hincapié que ya podrían verse todos acaramelados en frente de las personas. Ichigo mantuvo a Rukia presionada hacia el en lo que Rangiku continuaba sus comentarios y al ver cómo Rukia no sé apartaba, la apretó con un poco más de fuerza hacia el.
Y fue sorprendete cómo ese pequeño gesto voluntario, ese pequeño movimiento hizo que ambos se sintieran emocionados. Cómo si el que la apretara más hacia él hubiera inducido algún tipo de droga en ellos.
El cuerpo de la shinigami era pequeño a comparación de el. Su rostro quedaba directamente en sus pecho pero no pudo evitar pensar que, era lo adecuado.
"Me preguntó" pensó Ichigo "si se dará cuenta que mi corazón late demasiado."
Rukia por otro lado se sentía abrumada.
El toque de Ichigo se sentía cálido en todos su cuerpo. Algo completamente nuevo.
-Ven, les dije que harían una pareja perfecta. Ahora a su habitación. - ordenó completamente emocionada por ver a sus amigos por fin entregarse a los sentimiento que obviamente tenían entre ellos.
-Rangiku-san - dijo Rukia - creo que sería mejor volver a la fiesta. Disfrutar con nuestros amigos.
-No sabes lo que te estás perdiendo - contestó ella. - cuando lo sepas, vas a pensar, "porque no goce de mi noche de bodas antes"
A pesar del sonrojo y de que la sensación del cuerpo de Rukia pegado al suyo se sentía bien, Ichigo la dejo ir.
-Regresamos a la fiesta - dijo tratando de salir ya de esa situación
La velada paso, de forma amena. Tuvo que lidiar con su padre haciendo una escena. Con sus amigos y compañeros muy borracho y un Renji Abarai triste.
Nadie hizo un comentario de ello.
Todos lo dejaron ser. Y no pudo evitar sentirme mal porque, estaba seguro que estaba así por Rukia. En un punto de la velada se acercó a él. Cuando parecía ya estaba desmayado. Le sorprendió lo que susurró.
-Ese debió haber sido mi lugar.
Ichigo no dijo nada. No sabía qué decir.
Cuando rukia se acercó a ellos, ella de limito a golpear en la cabeza a Renji y regañarlo por beber tanto.
-Idiota, no conoces tus límites, el que puedas soportar algo no significa que sea lo mejor para ti, imbecil- dijo Rukia. Ichigo sabía que ese comentario estaba cargado de otro significado.
Renji se limitó a bajar la cabeza y perderse en la inconsciencia.
Ichigo por otra parte, trato de convencerse de no sentir culpa. El que Rukia tuviera que casarse con él, no significa que Renji habría tenido oportunidad. A menos que …. Ella estaba interesada en Renji. Recordó como en la plática con Byakuya, lo había traído a colación.
-Creo que iré a acostarme - dijo Rukia cansada.
-Yo igual. - dijo el igualmente exhausto de todos los acontecimientos de ese día.
Ya habían hablado y acordado que ambos tendrían habitaciones separadas, estaban en la misma ala pero un poco alejadas por lo que se dirigieron a la misma dirección pero fueron abordados por un sirviente de la familia Kuchiki.
-Mis señores - dijo cortésmente - por favor siganme para acompañarlos a sus aposentos. Ya está todo preparado. - Ichigo y Rukia se voltearon a ver algo confundidos.
-Nuestras habitaciones están de este lado - dijo sencillamente el pelinaranja.
-Me temo que hubo un cambio al respecto - contesto el. - el consejo de ancianos está de acuerdo en que tomen una habitación del alas Oeste, ya que son más grandes y tienen una hermosa vista al estanque. Ellos insistieron que sería más adecuado por su nuevo matrimonio.
Los ojos de Rukia se agrandaron entendiendo lo que quería decir. No era opcional.
-Eso no era lo que nosotros planeábamos - contestó sencillamente Ichigo enojado.
-Lo sé pero los ancianos …- el sirviente se veía nervioso no muy seguro de que contestar.
-Está bien - dijo Rukia sabiendo que no dependía del chico - por favor llévanos a nuestra habitación.
Ichigo quería protestar, pero mantuvo la calma hasta llegar a su destino.
La habitación era enorme. Tenía 2 futones pegados, así como el acceso a un baño. 2 armarios dónde claramente habían sido acomodadas sus ropas. El sirviente salió de la habitación muy rápido.
-Maldita sea - dijo Ichigo - esto no era lo habíamos planeado.
Probablemente los ancianos están viendo por nosotros como pareja. - dijo Rukia no muy convencida. - no debería ser problema recuerdas, ya hemos compartido habitación.
-Era diferente Rukia, tú estabas en el armario. Teníamos cierta privacidad.
-Será igual, en cuanto dejen de prestarnos atención Podemos cambiar a dos habitaciones y listo. No seas un llorón Ichigo.
- A quien la dices llorón enana - le contesto tratando de pelear. Era algo muy particular en ellos. Las peleas con Rukia siempre eran de cierta manera liberadoras. El Kurosaki pensaba que era lo mismo para ella.
-¡Qué mal! El bebé Kurosaki tiene miedo de no poder dormir - Rukia hizo ese tono de voz que tanto odiaba
-Cállate enana odiosa. Y deja de hablar así.
-Kurosaki-kun no te enojes
Ichigo la tomo del brazo pero Rukia, como siempre fue más rápida, lo golpeó en el estómago y con una patada lo arrojó al piso.
Antes de siquiera recuperarse de Todo Rukia se subió sobre el y aprisionó sus brazos con tra el pecho de el para evitar que hiciera algún movimiento.
-Idiota - dijo ella orgullosa - bajas la guardia y eres un enclenque
Esa escena era algo regular. Todos sus conocidos, amigos y familiares lo habrían presenciado alguna vez. Rukia golpeando a Ichigo, ambos peleando era inofensivo. Algo así como los niños chiquitos queríendo reafirmar su superioridad de algún modo físico. En general nunca había sentido que fuera algo peligroso. Tanto Rukia Con sus golpes así como la forma en la que Ichigo la sujetaba era juguetón. No usaban su fuerza completa. Ichigo siempre de aseguraba que no lastimarla. Y aunque los golpes de Rukia eran constantes, ni siquiera podría quejarse de ellos.
Así que está vez Rukia hizo lo mismo que hacía siempre. Se sentó en su abdomen, tenía ambos brazos sujetando los de Ichigo y se había ayudado con un poco de Kidoh para mantenerlos ahí.
Ichigo por otra parte estaba consciente del contexto. Rukia estaba sentada sobre el. Su kimono se había desarreglado, sus piernas estaban descubiertas en sus costados. Podía sentir el calor en cada parte que Rukia estaba tocando a pensar de sus ropas. Aún así Rukia se movía sobre él hablando de como claramente lo tenía dominado.
El corazón de Ichigo empezó a latir como loco. Su estómago sentía esa sensación de emoción caliente y no era idiota como para no saber que estaba pasando más al Sur. En su momento de adolescente había explotado su cuerpo y había entendido un poco del placer …. Individual.
Pero esto era diferente.
Se sentía excitado por tener a Rukia sobre él. Se sentía muy vivo. Cómo si estuviera a punto de iniciar algo grande. Había cierta anticipación. Y no pudo evitar pensar que si Rukia bajaba un poco, su excitación estaría acariciando directamente a Rukia en su partes más privadas.
Pensar en eso eso solo hacia que su cabeza diera vueltas.
¿ Y que haría Rukia ? ¿Se frotaria sobre el? ¿Subiría su kimono ? ¿El quería que lo hiciera?
Antes siquiera de seguir por esa linea de pensamiento noto que Rukia Se había detenido. Que empezaba a notar que ya no estaba jugando.
-Ichigo - dijo ella un poco sorprendida.
"Por supuesto que no haría nada de eso" pensó Ichigo, seguro que las fantasias que estaba teniendo habían salido de algún vídeo de los que tanto era fanático Keigo. No. Rukia se asustaría y eso la haría sentir. Incómoda. Probablemente lo golpearía ahora en serio por tal pensamiento.
Así que en vez de hacerla pasar por eso, aprovechando que aún no notaba las partes "animadas" de su anatomía, huyó. Se levantó ocasionando que Rukia se golpeara al ser quitada tan bruscamente. Deshizo el kidoh de forma rápida y eficiente y salió de ahí con shumpo.
