La
Era de la Luz:
El Alma del Fénix
VI. El Ataque
Lita se había colocado frente a Amy para recibir el impacto del monstruo.
- ¡Lita!-
exclamó Amy asustada.
- ¡Corre Amy, yo... lo...
detendré- dijo Lita con voz entrecortada.
- No puedo
dejarte sola- respondió Amy.
- ¡Amy!
La bestia empujaba a Lita cada vez con más fuerza. Ella trataba de contenerla pero era muy fuerte. Entonces se escuchó como si algo se rompiese. Lita gritó de dolor, pero aún así continuó sosteniendo al monstruo.
Inesperadamente Lita tomó uno de los brazos de la criatura con ambas manos, giró con agilidad y la arrojó por los aires. Después se dejó caer sujetándose el brazo derecho.
- ¿Lita
estás bien?- preguntó Amy angustiada.
- Creo que
me rompí el brazo- dijo Lita casi sin aliento, mientras la
criatura volvía a levantarse.
- Debo hacer algo-
pensó Amy y se levantó de un salto- ¡Por
aquí¡ven!- gritó agitando los brazos.
-
¿Qué rayos estas haciendo?- preguntó Lita
sorprendida.
El monstruo corrió enfurecido hacia donde estaba Amy, quien se apartó justo a tiempo para no ser arrollada. La criatura se estrelló contra una pared, restos de esta volaron por todas partes, uno de ellos golpeó a Amy con violencia en la cabeza y ella cayó al suelo desmayada.
- ¡Amy!- gritó Lita angustiada corriendo a su lado, ella no respondía.
El monstruo
comenzaba a incorporarse de nuevo, aunque algo aturdido. Lita lo
miraba con ira, de pronto el símbolo de Júpiter
brilló en su frente, sin poder contenerse se levantó.
- ¡POR EL PODER DEL CRISTAL DEL
PLANETA...!- comenzó a decir Lita.
-No, no lo
hagas- la detuvo una voz.
Un remolino apareció justo frente a ellas y de él salió un chico de cabello negro.
- ¡Dunkel!- exclamó Lita aliviada.
La criatura se preparaba para atacar. Dunkel la miró con expresión seria. El monstruo también lo miró y se avalanzó contra él. Dunkel alzó su báculo y una luz negra salió de él. Esta pegó de lleno en la criatura y la desintegró en unos segundos.
- ¿Se
encuentran bien?- preguntó Dunkel preocupado dirigiéndose
hacia donde estaban Lita y Amy.
- Amy está herida,
debemos llevarla a un hospital lo antes posible- dijo Lita
visiblemente asustada.
Dunkel levantó
a Amy con cuidado.
- Vamos. Pon tu mano en mi hombro- dijo
este y los tres desaparecieron.
- Interesante- dijo un hombre sonriendo con malicia. Después también desapareció.
- ¿Estarán bien?- preguntó Serena asustada, al llegar al hospital. Y su miedo aumentó cuando vió a Dunkel frente al cuarto de hospital. No vestía sus ropas de Centinela, sino un pantalón de vestir negro con una camisa gris.
- Cálmese
Princesa. Están bien. Lita tiene un brazo fracturado y Amy
un golpe en la cabeza. En este momento estan practicándole
estudios para asegurarse que no sea nada grave- dijo Dunkel para
tranquilizarla.
- ¿Qué fue lo que sucedió?-
preguntó Rei angustiada.
Dunkel dudó
por un momento.
- Fueron atacadas- respondió al fin.
-
¿Qué?- dijeron al mismo tiempo Serena, Rei y Mina.
- No sé qué sucedió realmente. Sentí
que alguien necesitaba ayuda, aunque no lograba localizar donde se
encontraban. Cuando me transporté las hallé heridas,
una extraña criatura iba a atacarlas de nuevo, hice lo que
pude- dijo Dunkel con tristeza- Pero ahora lo único que
importa es que estan bien.
Serena, Mina y Rei voltearon a ver a Lita que era atendida por una enfermera, estaba dormida.
- Tuvimos
suerte¿no creen?- dijo Mina con tono sombrío,
mirando a su amiga quien descansaba frente a ella.
- Mucha-
concluyó Serena con lágrimas en los ojos.
Al día siguiente, Serena llamó a Haruka y Michiru. Haruka colgó el teléfono bruscamente.
- ¿Sucedió
algo?- preguntó Michiru.
- Amy y Lita fueron atacadas
ayer- respondió Haruka temblando de furia.
- ¿Se
encuentran bien?- preguntó Michiru alarmada.
- Están
en el hospital. Lita tiene un brazo roto y Amy un golpe en la
cabeza, pero parece que no es nada grave.
- ¡Rayos! El
enemigo se está acercando- dijo Michiru cerrando los puños
con fuerza.
- Debemos ir por Setsuna y Hotaru, no quiero que
les suceda algo- dijo Haruka con urgencia.
- Vayamos pues.
Un hombre
vestido con una gabardina verde oscuro caminaba lentamente por una
calle, cuando vió pasar a dos personas en un auto.
-
¿Qué será esa aura?- se preguntó y
decidió seguirlas. Tomó un saco de piel del bolsillo
interno de su gabardina y se roció con un extraño
polvo, en unos segundos quedó convertido en un cuervo. Y
comenzó a seguir a Haruka y Michiru desde lo alto.
El auto se detuvo unos 30 minutos después, frente a una elegante mansión. De donde salieron una hermosa mujer de cabello largo y una niña de unos 13 años, quienes abordaron el coche.
- Ellas también tienen una poderosa aura- pensó el hombre, ya en su estado natural, que estaba recargado en un poste de luz, revisando sus bolsillos- Tengo suficiente sustancia para un par de monstruos. Tal vez sea alguna de ellas.
En el camino al
hospital.
- Pero ¿están bien verdad?- preguntó
Hotaru asustada. Haruka asintió.
- Al parecer Dunkel
les ayudó.
- Ahora sabemos que la actividad del enemigo
se ha intensificado- dijo Setsuna.
- Será mejor estar
en grupo el mayor tiempo posible. No debemos correr riesgos
innecesarios- dijo Michiru.
Cuando faltaba poco para llegar, se encontraron con una extraña criatura a mitad de la carretera. Tenía cabeza y garras de tigre, cuerpo humano y estaba cubierto con un grueso pelaje color anaranjado.
- ¡Pero qué demonios!- exclamó Haruka, virando el volante y frenando justo a tiempo para no impactarse con la criatura. Esta saltó al cofre del auto - ¡Salgan rápido!- gritó Haruka.
Setsuna tomó a Hotaru del brazo y la sacó del auto. Michiru y Haruka salieron de un salto, un instante después la criatura comenzó a despedazar el coche.
- ¡Corran!- les gritó Michiru a Setsuna y Hotaru. Pero otra criatura salió de la nada cercándolas.
La segunda criatura tenía cabeza de serpiente y cuerpo humano, su piel era de un verde brillante.
- ¡Rayos¡estamos atrapadas!- exclamó Setsuna.
- Son
hábiles. Pero quisiera medir su fuerza- dijo un hombre alto
y delgado que apareció detrás del primer monstruo.
- ¿Quién eres?- gritó Haruka.
- Mi
nombre es Stoff, Maestro de la Materia. Y ustedes pronto formarán
parte de la colección de mi señor Krieg- dijo el
hombre. Tenía piel ceniza y cabello verde claro y sus ojos
eran completamente blancos.
- ¿Colección¿acaso crees que no nos defenderemos?- preguntó
Haruka desafiante.
- Eso es lo que quiero ver. Demuestrenme su
fuerza- las retó Stoff- Vayan Odigur y Onenev, atrápenlos.
Las dos bestias atacaron al mismo tiempo, las Scouts apenas y pudieron esquivarlas. Haruka se encargó de la bestia mitad serpiente y Michiru de la otra.
La pelea comenzó. El monstruo serpiente era rápido, pero Haruka lo era aún más. La criatura embistió a Haruka, quien la esquivó y provocó que se estrellara contra lo que quedaba del auto.
El monstruo con el que se enfrentaba Michiru era demasiado fuerte. Pero aún así Michiru se las arregló para contenerlo. Sin embargo, no podría seguir así por mucho tiempo.
- ¡Cuidado Michiru!- gritó Setsuna angustiada. Haruka volteó a donde estaba Michiru.
La bestia con cabeza de tigre había logrado herir a Michiru, quien se encontraba en el suelo intentando incorporarse. El monstruo la atacó de nuevo.
Setsuna y Hotaru gritaron al mismo tiempo, pero ya era tarde, Michiru no podía defenderse. Inesperadamente, Haruka apareció frente a Michiru y recibió el ataque.
La criatura
clavó sus enormes colmillos en el hombro derecho de Haruka,
quien cayó violentamente de espaldas. A su alrededor
comenzó a formarse un charco de sangre.
- ¡Haruka!-
gritó Michiru aterrada sin poder creer lo que veía.
Michiru se acercó lentamente a Haruka, pero, en su angustia, no se dió cuenta que el monstruo mitad tigre se preparaba para volver a atacar.
- ¡No¡Haruka¡Michiru!- gritó Setsuna desesperada, sin su cetro no había nada que pudiera hacer.
La impotencia que sentía Setsuna llegó a su límite. De pronto el símbolo de Plutón brilló en su frente.
- Vaya, vaya. De nuevo esa luz- pensó el hombre.
- Haruka, Michiru- dijo Hotaru casi sin voz, con lágrimas en los ojos.
Un remolino apareció frente a ella y de él salió Dunkel.
- ¡Dunkel!- exclamó Stoff sorprendido. Dunkel lo miró primero con asombro y después con ira.
Sin decir una palabra, Dunkel levantó su báculo y dos poderosos rayos negros salieron de él y se impactaron contra las bestias, que quedaron reducidas a polvo en un parpadeo.
- Por ahora has ganado, pero regresaré- dijo Stoff y desapareció.
Dunkel se quedó
mirando el lugar donde se había encontrado Stoff.
- Así
que por eso no pude detectar que ellas estaban en peligro-
pensó, después reaccionó y corrió
hacia Hotaru- ¿Están bien?- preguntó
preocupado.
- Haruka... está... - dijo Hotaru con los
ojos arrasados y temblando. Dunkel la tomó de la mano y la
levantó con delicadeza. Ambos se dirigieron a donde estaban
Haruka, Michiru y Setsuna.
Haruka sangraba mucho. Michiru intentaba desesperadamente detener la hemorragia pero era inútil, la herida era muy profunda. Setsuna y Hotaru solo podían observar impotentes.
- Permíteme- dijo Dunkel tomando la mano que Michiru tenía en la herida de Haruka y retirándola con suavidad. Él puso su mano derecha en el hombro herido y una luz tenue empezó a brillar debajo de ella. La sangre dejó de fluir poco a poco- He detenido la hemorragia, pero deben atenderle esa herida lo antes posible. Lamento no poder hacer más.
Michiru asintió mirando fijamente a Haruka y rezando con todas sus fuerzas porque resistiera.
UFFF! VAYA QUE CONTRARIEDAD. SALDRÁ HARUKA DE ESTA? BUENO A DECIR VERDAD NO QUERRÍA MATARLA YA QUE ES DE MIS FAVORITAS ASÍ QUE PUEDEN ESTAR TRANQUILOS. ESPERO LES HAYA GUSTADO EL CAPÍTULO Y PROMETO MÁS ACCIÓN PARA LOS SIGUIENTES. SALUDOS.
