Hola a todos, que dijeron no va a actualizar este especial de temporada? Pues pensaron mal aunque si que me tarde mucho en acabarlo pero en mi defensa debo decir que tuve muchas cosas que hacer y por eso lo termine hasta ahora, y como se que no les interesan tanto mis explicaciones agradezco a quienes han dejado un review y ellos son
angelmoronix4, Alex-Flyppy, alexzero, Kevin Rolando614, bladetri, Jonathan486, Ronaldc v2, Zafiro9, MISA47, , arcanine9407, Tsuna Dragneel, atila234, uzukage, Akuma no Ryu, zer0-sama, Guest, REGIS MARK 5, marcouzukage, Wildboy, Takeshi Jagerjaquez, trollmemex, lord hentai
Muchos reviews que me animan bastante ahora, marco Uzumaki por haber dado un review adelantado, este capítulo va dedicado a ti
Renuncia de derechos: todos los derechos de los personajes lugares y posibles jutsus y artículos tienen dueño, no soy yo y eso es triste espero que santa e regale los derechos de al menos una cosa
Advertencia: como siempre aquí viene algo de lemon asique disfrútenlo
Misión de rango N… las consecuencias
Capítulo 5: Una clase privada
Kurama era tantas cosas, un demonio cuando están a molesto y eso era casi siempre, un amante de la pereza, apasionado de las batallas encarnizadas, maestro de la manipulación de mentes débiles y desde luego el huésped permanente de cierto rubio que terminaba de jalar aire , todo por cosa de la pelirroja , Kurama recapitulo todo lo que pasó desde que Naruto había caído ante los encantos de Samui, cosa que no le pareció nada mal, después se todo Samui era preciosa y tenía un cuerpo sublime, si por ahí no había ninguna de queja de parte del zorro, incluso se podía decir había un deje de orgullo, luego estaba la pelirroja de lentes, Karin como le llamo Naruto, era una auténtica pervertida amante de las fantasías los disfraces e incluso, el zorro juraría de las correas o collares pero no le constaba, aún, y así fue como recordando llegó a ese punto, donde Samui clamaba por la semilla de su contenedor con mucha fuerza, Samui con su eterna seriedad resultó toda una fiera en la cama según el, justo como con la Hyuuga, las calladas eran las mejores, pero entre tanta sama diversión Karin en el departamento de Naruto despertó atraída por los gemidos y súplicas de Samui, así fue como llegó a su casa y se metió como buena ninja para encontrar a Samui en la cama, en cuatro con Naruto vaciando su semilla dentro del trasero de la rubia, — Naruto_kun que estás haciendo?! — el gritó de la pelirroja detuvo el encuentro más no el orgasmo, al final tras vaciar todo dentro de Samui, la serena rubia, sin nada de ropa se puso de pie lanzando una analítica mirada a Karin quien seguía inmóvil en su sitio — eres una de mis hermanas y viniste a complacer a nuestro futuro marido? Porque me vendría bien algo de apoyo ya casi no tengo fuerza y el parece muy dispuesto a seguir — las palabras de Samui trajeron un singular brillo a los ojos de Karin quien sólo dijo "ya verás Naruto Uzumaki lo que te espera" y salió de ahí a toda prisa seguida del rubio aludido, sólo dijo a Samui que debía detener a Karin de hablar con alguien sobre eso, la idea de que le fuera con el chisme a Tsunade no era nada alentadora, Naruto casi se veía a si mismo volando hasta quien sabe donde, y sería sólo peor si en lugar de la rubia de ojos color miró se con Sakura, sólo pensar en eso ponía a Naruto azul del miedo.
— Ya… al fin… al fin llegue — el rubio bañaba todo el aire posible tratando de recuperar el aliento, había recorrido casi toda la aldea a una velocidad que haría al mismo Lee o Gai verse como tortugas, el miedo sin duda era un aliciente poderoso.
— Yo sigo pensando que estás exagerando, digo que más da que ella le diga a todos que eres una máquina sexual, eso sin duda te hará aun más popular, es más con suerte eso anima a la Senju a probar tus habilidades — Naruto no respondió a las palabras del zorro, estaba congelado en su sitio con esa imagen mental de el en una cama, encadenado y condenado a complacer a todas las mujeres de Konoha hasta la muerte.
— Porque me mandas esas visiones zorro degenerando! — gritó el rubio a la nada, era una suerte que nadie estuviera ahí en ese momento o se habría ganado más de una mirada de duda por tal escena en ese sitio.
— Dos cosas, primero yo no te mande esa visión, fue todo cosa de tu cerebrito pervertido y caliente — recitó el zorro mientras alzaba una cola, sólo para alzar una segunda enumerando lo que decía a su rubio anfitrión, — y segundo… no te hagas que esa visión te gustó, esa si sería una gran manera de morir a que si? — Naruto no dijo nada, sólo siguió caminando en busca de detener a la pelirroja o en el peor de los casos, que la ira de Tsunade lo salvará de Sakura.
Dentro de Naruto el zorro de las nueve colas aún se preguntaba como era que el rubio le tenía tanto miedo a la chica de cabello rosado, cuando el fácilmente era más fuerte que ella, rayos podría vencerla cualquier día de la semana, por eso no entendía el terror de Naruto hacia Sakura y seguramente nunca lo haría, otro de esos misterios de la vida seguramente, casi tan grande como la primera vez del rubio, Kurama dejó de poner atención al mundo exterior sólo para concentrarse en su proyecto personal, frente al zorro había un pizarrón gigante con nombres y posibles momentos en los que Naruto pudo tener esa primera vez, que se volvía poco a poco una obsesión para el pensante zorro quien meditaba a frente a su pizarrón de "sospechosas" , Kurama sin duda estaba muy entretenido mientras en el exterior Naruto estaba de pie frente a Shizune quien no entendía que estaba pasando — como que Karin y tu tienen un juego de retos? Eso es para niños pequeños Naruto_kun además desde cuando eres tan buen amigo de Karin y como sabes que llegó a la aldea — Naruto había inventado la excusa más inverosímil de todas, ese juego que se suponía acabaría cuando uno de ellos no pudiera cumplir el reto y por eso Naruto estaba ahí, según el había desafiado a Karin a provocar la ira de la rubia ,Shizune estrecho sus ojos, eso era tan peligroso , pero cuando escucho el como Karin dijo que la haría enojar pero contra el con un gran y escandaloso rumor todo tuvo sentido… que va no tenía sentido por ningún lado que se le buscará, y lo peor había expuesto a Naruto a su relación con Karin, no era un secreto que ambos eran Uzumaki y que se trataron un poco en la guerra pero fuera de eso no sabía que fueran tan íntimos amigos, — ahhhh Naruto_kun vas crecido y hasta amigas tienes ahora, pero sigues jugando como un niño pequeño, es tan dulce me dan ganas de estrujarte y jamás soltarte — Shizune sonreía, ese cariño de hermana que tenía por Naruto era de lo mejor que el rubio tenía en la aldea, pero con los recientes eventos, las hormonas a mil por segundo y claro su recién descubriera imaginación triple x Naruto interpretó eso por su cuenta, paso de la Torre al departamento de Shizune donde la desnuda pelinegra dormía negándose a soltar a su amante rubio quien seguía dentro de ella desde la noche anterior, — pero que estás haciendo Naruto_kun?! — Shizune se alarmó un poco al ver como Naruto tomaba un pisapapeles y se daba con él en la cabeza, todo para sacar la imagen de su mente y más esas palabras "vamos Naruto_kun muéstrale a tu neechan cuanto la amas"
— Ok… no se que me perdí pero es interesante, también la quieres a ella? Ni siquiera mostró ese interés en ti y dándote de golpes no lo conseguirás idiota — las palabras del zorro detuvieron al rubio, que dentro de su mente sólo gritó, el no buscaba eso de Shizune por todos los cielos.
— Naruto deja eso ya te lastimaste ven acá — con gentileza y ternura Shizune atrajo al rubio de frente herida a sus pechos donde lo colocó amorosa mientras limpiaba su frente, —a veces eres tan tonto, necesitas que alguien te cuide no siempre estaré yo por más que me gustaría — y la sonrisa dulce de Shizune apago el sentido común de Naruto, no era claro como si lo tuviera muy encendido últimamente.
— Retiro lo dicho, si funcionó y creo que si te desea de ese modo, carajo creo que ni Rikudo en sus días de juventud era tan exitoso con las chicas con todo y eso de ser casi un Dios — Kurama ya no dijo nada, sólo se dedicó a ver a Naruto jugando con fuego, pues veía fijamente a Shizune quien estaba tan callada como el, casi como si hubieran olvidado quien estaba detrás de la puerta frente a ellos.
— ¡QUE CARAJOS HACEN! — y si, la puerta se abrió, Tsunade apareció y Naruto se quemó con el fuego que despedían los ojos de la ahora furiosa y en extremo celosa gondaime, todo mientras el zorro tomaba una bola de palomitas par a ver con suma diversión la ejecución inminente.
Al tiempo que Naruto encaraba su inminente destino en otra parte de la aldea, más específico en la casa de Samui rubia ya con ropa había abierto la puerta por la cual entró una conocida pelirroja de lentes, que cargaba en ese momento una gran bolsa que lanzó el suelo mientras movía sus ojos de un lado a otro como si buscara a alguien —Naruto_kun no está en cuanto te fuiste él salió disparado a buscarte creo que tenía miedo de que le dijeras a alguien lo que estábamos haciendo— las palabras de la rubia de la aldea de la nube fueron bastante serenas por no decir frías, aunque para la pelirroja de Karin ese tono de voz no le afectó en lo más mínimo de hecho la hizo sonreír bastante mientras sus ojos brillaban de ese modo tan singular, — Eso es perfecto ahora tenemos mucho más tiempo para prepararnos para cuando Naruto_kun regrese — Samui inclino un poco su rostro aún lado al ver como Karin vaciaba aquella bolsa dejando caer algo de ropa y… un par de orejas de conejo? Samui parpadeo un poco confundida por lo que estaba haciendo la pelirroja que se colocó esas orejas de color negro antes de jerarquías de ella y ponerle un par sin siquiera pedir permiso, eso antes de lanzarle los que parecía una especie de muy ajustado leotardo — cuando Naruto_kun regrese sus hermosas conejitas para estarlo esperando para hacerlo como si fuera Primavera toda la noche! — gritó Karin con esa sonrisa digna del difunto sanin de los sapos y un brillo en sus ojos que sólo anunciaba lo "grande" que sería ese evento, por su parte Samui sólo le veía con ese rostro serio preguntándose si eso le gustaría a Naruto después de todo el no había mostrado esa clase de gustos, pero ella no lo sabía pues su relación apenas había iniciado y aún tenía muchas cosas por aprender, como el que Naruto estaba descubriendo que tenía un lado en extremo activo cuando se trataba de chicas y que esos disfraces en verdad lo iban a poner como poco, pero lo sabría cuando el momento llegará, si es que eso pasaba pues ahora mismo el rubio estaba encarnado a su destino con la forma de una molesta rubia quien exigía saber desde cuando Naruto y Shizune se "entendían" a sus espaldas, por un segundo a la pelinegra le pareció notar un deje de celos en la voz de su maestra.
— Yo no se porque te pones así, Shizune_neechan siempre me ha tratado así desde los 13 años — una de las cejas de Tsunade tembló ante la idea de que de hecho su alumna tenía sus deberes con el rubio desde esos días.
— Desde los 13? Y cuando me lo ibas a decir Shizune, cuando fueras madre? — la manera en que la Senju estaba sonriendo no le daba ninguna buena espina a la pelinegra, de algún modo ella parecía creer que Naruto y ella… se puso roja al pensarlo.
— Mamá? Desde cuando neechan sale con alguien? porque soy el último en saberlo —Naruto no se dio cuenta, pero con esas palabras logró serenar un poco a la rubia mujer quien lo veía ahora, con una mezcla de enojo y duda, o Naruto fingía no saber de que hablaba o en verdad era un genuino tonto.
— Yo no salgo con nadie y lo sabes Naruto_kun, si ese fuera el caso te lo diría — y ahí fue cuando Shizune entendió que había cometido un error, pues los puños de su maestra se apretaron casi como si estrujaran algo, curiosamente veía fijamente a su asistente… o mejor dicho a su cuello.
Como fue que la rubia se logró controlar era un verdadero misterio, después de todo últimamente se sentía tan celosa, quizá eso fue lo que la detuvo, pues de manera distraída Naruto dijo que ella casi parecía una novia muerta de celos, Shizune se puso blanca ante semejante insinuación pero se puso aún más blanca al ver a si maestra calmarse de golpe y… ¿con un sonrojo en las mejillas? Por un segundo la pelinegra creyó estar dentro de un genjutsu, pues lo que vio después era poco menos que increíble, — bueno yo tengo que buscar a alguien antes de que meta la pata, nos vemos neechan y por cierto, te ves muy bonita con las mejillas rojas Tsunade_sama — Shizune no sabía que fue mas extraño, que Naruto le hablará con respeto a la rubia de ojos color miel o que ella no estallara en un arranque de irá, pero viéndola bien sus mejillas se pusieron un poco más rojas cuando el rubio dijo esas cosas antes de irse, si, era claro que eso era lo más increíble de esa situación tan inusual, Naruto regreso sólo un segundo asomando la cabeza por la puerta para dirigir sus palabras a la pelinegra " te veré en la tarde para hacer lo nuestro Shizune_neechan" le sonrió y desapareció finalmente, tan pronto se fue el aire de la oficina se volvió gélido y peligroso, despacio Shizune dirigía su mirada a su maestra quien perdió ese color rojo para dirigir una mirada más que siniestra a su primer alumna, — y dime Shizune, que se supone que van a hacer tu y Naruto en la tarde? — Shizune trago saliva bastante nerviosa eso se estaba poniendo espeluznante, pues pese al aura intimidante de su mentora le dirigía una sonrisa amable y comprensiva, algo estaba muy mal con la última Senju pero por su seguridad Shizune no diría una sola palabra sobre su salud mental so pena de acabar en el hospital; Tan pronto como Naruto salió de la oficina suspiro un tanto aliviado, por lo visto su creencia de que Karin lo echaría de cabeza con la rubia líder estaba por completo mal, aunque eso no ayudaba a que se dejará de preguntar con quien lo acusaría y la idea lo golpeó, como no pensó en ella antes, sólo una persona en toda Konoha lo mataría sin darle tiempo de explicar como fue que terminó teniendo relaciones con dos increíbles mujeres, pensándolo un poco si sonaba como un motivo para golpearlo — sólo un par? Debo recordarte a la del pelo morado, la Yamanaka, la rubia de suna y a la "tímida" Hyuuga? Sólo por eso te van a castrar… y no hablo de la rosadita — las palabras del zorro en la mente de Naruto causaron una visión aterradora.
Estaba atado a una silla en una habitación oscura donde un tétrico, muy tétrico Hiashi aparecía sosteniendo su espada… recién oxidada? No entendió eso, hasta que el hombre dijo algo sobre tratar s su hija mayor como una mujer del montón y deshonrarla, lo que siguió fue tan aterrador y horrible que el mismo Kurama cerró los ojos para no ver, — Santo Rikudo! Sabía que tenías una mente retorcida para algunas cosas, pero una esterilización de ese modo… por mis colas Naruto no fantasees con eso nunca más — comentó el zorro sintiendo escalofríos por lo gráfico de la pequeña divagación del rubio, Naruto lo sintió, una presencia un tanto inquietante a su espalda, la idea de que quizá se trataba de Hiashi le hizo tener terror y con un grito de piedad salió huyendo a toda velocidad dejando tras de sí a un Shino que no entendió que ocurrió pues el sólo quería decirle al rubio que traía una araña en la ropa, pensó que quizá el rubio le tenía fobia a esos animales de ahí su gritó, tomo nota de averiguar mas sobre eso después y prosiguió con su audiencia con la Hokage, era algo relacionado con una misión de recuperación de un objeto de valor de la aldea de hierba, aunque no entendía porque ese algo estaba en una licorería y necesitaba confirmar el dato; Naruto finalmente dejó de correr de su verdugo según el claro está, no supo como fue pero de pronto estaba en el peor lugar de la aldea, —hay no, está es la calle de Sakura_chan! — se dijo con terror justo antes de ver a la mencionada chica caminando por la calle sosteniendo una bolsa de compras, dentro de su mente el zorro le deseó una muerte rápida antes de guardar silencio para ver el espectáculo claro, con unas palomitas, Naruto no se movió un cm cuando el rostro de Sakura se desvío del puesto de frutas hacia donde el estaba congelado, su vida paso a toda velocidad antes de que por obra de kami o la ocurrencia de alguien (-el autor del la historia estornudo-) una compañía de mudanza entró en escena cargando un pesado librero que ocultó la visión del rubio de la ojiverde sólo para que un segundo después una mano jalara a Naruto dentro de una tienda antes de que los tipos de la mudanza pasarán y Sakura avanzará por donde estuvo Naruto suspirando al tener que volver a ese hotel en lo que se terminaba de arreglar su departamento, — bien esto va a la lista de veces que el tarado ha escapado de la muerte por su suerte, dos más y me ganare ese delfín mágico que sortea el Shinigami — murmuró Kurama dentro del rubio marcando una tarjeta que sostenía con sus colas, lo interesante era que en cierta parte decía "reúne un millón de sellos y gana el mejor premio" por lo visto el mismo dios de la muerte era dueño de una casa de apuestas y sorteos, pero sin duda lo extraño era el para que usaría el zorro un delfín mágico.
Dentro de aquel local Naruto veía pasar a Sakura salvando el pellejo, sólo entonces se dio cuenta de donde estaba metido, había un cierto aroma en el lugar, estaba exageradamente limpio y había un par de posters de a animales, de una agencia protectora y claro de una agencia de adopción de perros, estaba dentro de una veterinaria, — me da mucho gusto verte Naruto_kun — y el rubio dejó de apreciar el lugar para dirigir sus ojos a su salvadora, una bella chica de marcas en las mejillas y cabello castaño que le estaba sonriendo mi y dulce, — Hana_chan? Vaya muchas gracias por eso — la aludida parpadeo un segundo, no supo el porque de la gratitud y la verdad no pregunto pues tenía otras cosas en mente, necesitaba algo de ayuda y Naruto sería perfecto para eso,, el rubio aceptó sin dudar ayudarla, siempre era así, un rasgo muy atractivo a ojos de la hija mayor de Tsume, Hana explicó su asunto, aquel cachorro que Naruto encontró días atrás se había enfermado, probablemente por comer algo que no debía mientras estaba en la calle, Naruto sabía de eso, ella claro que podía ayudarlo el problema era que el pequeño estaba atrincherado debajo de la mesa de consulta, mesa que dicho sea de paso estaba unida al suelo y Hana no lo podía sacar, no quería que el pequeño cachorro le tuviera alguna clase de repulsión a los humanos o a loa veterinarios por culpa de un procedimiento forzado, y ahí entraba Naruto, según hablo con Kuromaru el compañero de Tsume, el pequeño había quedado con una buena impresión de Naruto, seguramente si el se lo pedía saldría de su escondite para recibir atención, Naruto sonreía, ahora hasta los animales confiaban en el, era extrañamente enorgullecedor, — bueno ese pequeño travieso está justo aquí por favor sácalo Naruto_kun — pidió ella con sus bellos ojos fijos en el rubio quien asintió a sus palabras dándose cuenta al fin de lo parecida y a la ves diferente que era Hana de su madre, compartía esa belleza propia de una Inuzuka aunque un poco mas suave , quizá por eso mismo nunca compitió con su madre por el título de líder del clan, pero aún así era tan bella, sus pechos de buen tamaño escondidos debajo de esas ropa, esas curvas cada una en su sitio, y un redondo trasero de nalgas duras que ahora mismo le estaba ofreciendo a Naruto mientras se ponía en cuatro… que?
— Alerta de apareamiento repito, alerta de apareamiento, una perra se le esta ofreciendo al cabeza hueca, todos a sus puestos, inminente apareamiento, preparen las "armas"… donde están las palomitas? — la voz del zorro dentro de Naruto se o Yo tan lejana mientras sus ojos se perdían en ese trasero tan sensual y cierta parte de su cuerpo cobraba vida.
— (pero que está haciendo Hana_chan? Maldición que trasero tiene) — fue todo lo que pensaba Naruto luchando contra sus impulsos que la verdad, eran mucho mas fuertes que el pues poco a poco comenzó a moverse.
— Ese pequeño está justo aquí, aunque no quiere salir de…. N…Naruto_kun — y la voz de Hana se perdió dentro de ella cuando se dio cuenta de que las manos del rubio la estaban tomando de las caderas suavemente.
Dentro de la mente de la Inuzuka una conversación con su madre llegó de golpe haciendo que entendiera que había pasado, desde hacía un tiempo tenía esos impulsos cerca de cierta persona, impulsos que había logrado mantener a esta, pero últimamente estaban comenzando a volverse demasiado intensos y tenía miedo de perder el control, no era el típico celo de las Inuzuka, después de todo ellas siempre estaban de ese modo aunque en las noches de luna llena su verdadero celo empezaba y bueno, por eso mismo en esos días las Inuzuka sin un compañero no salían del complejo so amenaza de violar al primer prospecto, de un hecho así salió Kiba pero ese no era el asunto importante en esos momento a, Hana acudió con su madre para hablar de esa situación, pues la luna llena era inminente y no sabía que le estaba pasando, la ocasión anterior que hubo una luna llena sus Haimanus tuvieron que detenerla, por eso despertó en el jardín de la casa semidesnuda y sin recordar nada de lo que pasó, en opinión de Tsume todo eso fue comprensible, pues cuando una Inuzuka conocía a su pareja perfecta entraba en "celo" ante su presencia que sumado a la luna llena… bueno Hana comprendió muy bien lo que su madre le sugirió que hacia esa vez, no lo quiso creer, su propio cuerpo e instintos la estaban comenzando a traicionar por buscar la aceptación de su "macho" ideal, y ahora mismo la razón de su reciente locura la estaba tomando de las caderas mientras ella estaba en cuatro en el suelo, sólo en ese momento Hana se dio cuenta en verdad de lo que hizo por impulso, se ofreció descaradamente a Naruto y el la estaba aceptando, los impulsos animales de Hana afloraron desde su interior, "someterme a mi macho" era lo que sus instintos le estaban gritando mientras sus piernas se separaban un poco y una escena bastante gráfica llegó a su mente, de su ropa desgarrada y un rubio sobre ella empujando su miembro dentro de su flamante mujer, no se resistiría, eso era lo que Hana había estado buscando estos últimos meses sin saber que hacer con esos deseos, se había recriminado el desear de ese modo a alguien mas joven que ella pero por lo visto, Naruto se sentía igual, la mente racional de Hana se apagó y dirigió una mirada a Naruto, sus ojos bellos eran un poco más oscuros por el deseo dentro de ellos , se toparon y Hana gruño ansiosa, movió un poco su trasero invitando a Naruto quien cedía mas ante sus impulsos, sus manos tomaron la ropa de Hana listo para atacar sin piedad… cuando la campana de la entrada sonó en el aire.
— Buenas tardes! — saludo la amigable voz de una mujer quien acompañada de su hija acudían a revisar el estado de salud de la mascota de la niña, esas palabras rompieron la "magia" del momento y la cara roja de ambos ninjas fue señal de que estaban en sus cinco sentidos de nuevo.
Dentro de Naruto, Kurama sólo podía maldecir su suerte, ahora que había encontrado sus palomitas y vería al fin a una "perra" en acción llegaba esa mujer a arruinar todo, alguien lo odiaba estaba seguro de ello, Naruto sacó al cachorro de su escondite , lo puso en una jaula para que no se escondiera de nuevo , saludó a la mujer, le dio un autógrafo a la niña y salió de ahí casi tan rápido como el hirashin de su padre, Hana no dejaba de reprenderse por tal descuido, estaban en su lugar de trabajo y por poco se entrega a Naruto sin dudarlo, algo estaba tan mal con ella, — oh Hana_chan, lamentamos haberte interrumpido con tu novio, pero hay cosas que no se hacen en estos lugares — la mujer rio un poco, la niña no entendió y Hana se puso roja, aunque no estaba segura si era por eso del novio o porque ella sabía lo que casi hacen en su consultorio, seguramente era un poco de ambos; Por su parte Naruto finalmente había logrado calmar sus impulsos gracia as al aire frio de la aldea, aunque se seguía preguntando como paso eso, o bueno casi paso , su mente era un mar de dudas y preguntas que como siempre el zorro respondía con lo mas simple, sólo eran sus instintos Uzumaki tratando de salir a flote de nuevo, eso era todo, pero lo que le hacía más daba mas curiosidad a Kurama era el hecho de que ciertas mujeres sacaban esos impulsos con mas facilidad que otras, como fue el caso de Anko, Hinata y la misma Karin que incluso lo hizo entrar en ese divertido juego amo/esclava, ahí había algo que el zorro pasaba por alto, pero la pregunta era que , en el exterior Naruto seguía caminando sin rumbo por la aldea su mente era un mas de dudas y lo único que se le ocurrió fue ir a entrenar un poco para mantener su mente ocupada.
En los bosques del país del fuego, un carruaje avanzaba en dirección de la aldea de la hoja escoltado por un grupo de samurái traídos desde el país del hierro para este simple deber, y pese a ser sólo una escolta ya habían acabado con siete grupos de bandidos que buscaban secuestrar a quien viajaba en el carruaje, se decía que poseía un gran poder y que aquel que logrará tomarle se quedaría con eso para si mismo, o eso se decía pero esos rumores eran siempre iguales cuando se hablaba de una Miko, o eso pensaban los samurái que por enésima vez terminaron luchando contra otro grupo de criminales de poca monta, lo que fuera que esa mujer buscaba en Konoha tenía que valer mucho la pena para exponerse de ese modo son solicitar una escolta ninja; De regreso a la aldea de la hoja, Naruto estaba satisfecho con su entrenamiento ligero, pelear por casi dos horas contra un regimiento de poco más de 1000 clones era siempre un buen ejercicio, dentro del rubio Kurama se preguntaba que entendía Naruto por ligero, — en algunas ocasiones estoy seguro de que tu cerebro no funciona bien, si te das cuenta de que nadie entrena con tantos clones en una batalla campal, casi parecía una guerra de una sola persona, no veía algo así desde esa vez con el clan Fuma… eso es! — el rubio se quedó dudoso, por que de la nada el zorro parecía tan feliz, casi como si se hubiera enterado de algo muy revelador, — por eso todo el clan Fuma quería despellejarte… Naruto pequeño pervertido, por eso no daba con el recuerdo, si lo hiciste a los 13 años… eres un cachorro precoz eh, pero fue buena elección digo a esa edad esa chica Sasame era muy linda según me dejan ver tus recuerdos — Naruto parpadeo confundido un segundo, no entendía porque el zorro estaba citando a Sasame como si fuera un descubrimiento increíble y contrario a todo sentido común, Naruto tuvo que preguntar a que se refería, — eres un idiota verdad, hablo de tu primera vez, porque otra razón todos esos tipos trataron de matarte, si no fue porque robaste la inocencia de la pequeña del clan — el kitsune tenía una sonrisa un tanto… no, mas bien muy pervertida pues como dio con la susodicha y Naruto pensaba en ella ahora tendría acceso libre a ese recuerdo y podría ver todo lo que ellos hicieron.
— (yo nunca estuve de ese modo con Sasame_chan zorro degenerado, los animales del clan Fuma querían matarme sólo porque ella y yo compartimos una bolsa de dormir, no paso nada) — y ahí la gran teoría de Kurama se fue directo a la basura.
— Oh por favor, si ella era muy linda y eras un mar de hormonas, en verdad piensas que me voy a creer eso de que no hubo nada entre ustedes — Naruto guardo silencio, si paso algo, pero no fue nada de lo que el zorro estaba pensando.
— (bueno… Sasame_chan estuvo rara esa noche, dijo cosas raras sobre que sus reglas de clan dictaban que debía darme su primera noche como muestra de gratitud o que se yo, al final bueno… no me resistí) — los ojos de Kurama se abrían con emoción, finalmente había hallado a quien tomó la "pureza" de Naruto; — (me da vergüenza pero… no me resistí y bese a Sasame_chan antes de irnos a dormir) — admitió Naruto dejando al zorro tan callado.
A esas alturas Kurama comenzaba a pensar seriamente en dos cosas, quizá nunca daría con esa primera chica en la vida de Naruto pues las opciones y años de vida del rubio disminuían, y también que era un perfecto imbécil que no entendía cuando las mujeres querían algo mas que su amistad, no podía dejar de preguntarle a Rikudo si esa era alguna clase de castigo por haber destruido sin querer uno de sus templos, todo mientras Naruto se quedaba "solo" en ese claro destruido por sus clones y si guerra privada, o bien se suponía que estaba sólo pues la fresca brisa invernal trajo un suave aroma de un perfume que Naruto recordaba muy bien de su infancia, — aún después de tantos años sigues vigilándome Neko_nesan — dijo el rubio antes de que una anbu, en su traje típico y ajustado apareciera ante el rubio, con esa inconfundible máscara felina sobre su rostro, desde siempre la anbu Neko había sido designada como una de las guardianes del rubio Jinchuriki junto a un anbu con máscara de perro, que curiosamente siempre leía un libro y llegaba tarde, quizá por eso fue que Sarutobi la designó a ella como la escolta principal de Naruto, y después de eso los ataques al rubio bajaron mucho de intensidad pese a lo joven que era ella en esos días, pero ahora mismo el rubio la veía y admitía que había crecido mucho , unos redondos pechos acentuados por la armadura anbu, seguramente una copa c casi d, se volvía un experto en eso, figura esbelta largas piernas y redondas caderas todo acentuado sin más por ese traje, como era que no tenía frío si sí solo usaba eso, Naruto no lo entendía , la anbu le miró fijamente por la máscara con una duda en su mente — como sabias que estaba aquí Naruto_kun, mi chakra era indetectable y se que no hice ruido alguno — era un hecho que ella se enorgullecía de ser la mejor anbu cuando de infiltrarse se trataba y por eso, que Naruto la hallara así de fácil fue tan llamativo, — cuando no estás en misión usas tu perfume, de vainilla por cierto huele muy rico, cuando el viento sopló lo pude oler — y sin más la mujer de la máscara de gato se quedó callada y en silencio , acaso había olvidado algo tan básico como disfrazar su aroma, Neko sólo negó, se estaba oxidando un poco y debía entrenar como era debido pronto o acabaría perdiendo su estatus de anbu, el rubio por su parte admiraba a la bella mujer frente a el, claro había una máscara entre ellos pero aún así el rubio sabía muy bien que debajo de ella había una de las mujeres mas bellas de Konoha, algo dentro se el se removió inquieto y secretamente insulto insultó al zorro quien dentro de el estaba demasiado callado, no era buena señal y estaba seguro de eso.
— Debo tener cuidado con esas cosas, pero y tu? Normalmente alguien no entrena con esta clase de clima, menos un héroe consumado como lo eres ya Naruto_kun — el rubio se llevo una mano a su nica en una expresión de vergüenza, un rasgo que parecía lo acompañaría por el resto de sus días.
— Estaba algo aburrido y tenía muchas cosas en la mente, necesitaba pensar un poco — tan pronto dijo eso el zorro dentro de el hizo aparición "tu no piensas, no tienes con que hacerlo ", fueron las palabras de Kurama logrando un nuevo ""cierta el hocico" del rubio en su mente.
— Ya veo, supongo que debo dejarte sólo a menos que requieras un oponente de entrenamiento— Naruto guardo silencio, si bien estuvo en una guerra en realidad nunca había peleado contra un verdadero anbu, la oferta fue irrechazable.
Yugao bajo su máscara, se alistó para una pequeña pelea contra el rubio y tomando su espada corta atacó a toda velocidad, era rápida si, pero Naruto lo era aún mas con sus reacciones, pues antes de que ella logrará siquiera acercar la espada a su cuerpo el ya sostenía un kunai en su mano, desvío la espada de Yugao a un costado antes de girar sobre ella colocándose a su espalda con el arma contra su cuello — ero_senin me dijo que nunca es bueno atacar de frente a alguien más rápido que tu — los ojos de Yugao estaban llenos de asombró, sabía que era rápido pero no a esa altura, sin duda mas rápido que el mismo Gai, y por ese pequeño fallo de su estrategia ahora había sido derrotada en cosa de nada, estaba muy segura de que se gana oxidado demasiado, Yugao negó mentalmente antes de acercarse a Naruto, — que me tengas así no significa que me hayas ganando Naruto_kun — la anbu ronroneo el nombre del rubio con tal suavidad que un escalofrío corrió por la espalda de Naruto justo antes de sentir como ese duro y bien formado trasero se repegaba demasiado a su cuerpo, el Uzumaki trago saliva nervioso, sentía esa parte de ella demasiado cerca y haciendo uso de su fuerza de voluntad el rubio trataba de detener la reacción obvia de su cuerpo, por primera vez en toda su vida, la voluntad de Naruto no fue suficiente, pues Yugao sintió como "algo" crecía contra su trasero, hubo silencio entre ellos antes de que la anbu llevará su mano a su máscara retirándosela con calma para ver al rubio a los ojos, al verla el rubio sólo pudo pensar en una cosa "es preciosa", — que me vas a hacer ahora Naruto_kun? — la pregunta fue tan dulce e inocente, mientras ella empujaba mas su trasero contra el que la mente de Naruto casi se apago antes de ver esa sonrisa en el rostro hermoso de Yugao quien tomó la mano del rubio y la hizo bajar antes de empujar su espada en el cuello de Naruto, que reaccionó al fin cuando ella sonreía triunfal "yo gane" dijo con orgullo antes de que Naruto oyera las incesantes carcajadas de cierto zorro que se revolcaba en el suelo en un ataque colosal de hilaridad.
— Jajajajajajaja el idiota perdió por pensar con la "cabeza" jajajajajajaja eres un imbécil jajajajajajaja oh por Rikudo que divertido jajajajajajaja — las risas histéricas de Kurama eran una tortura, Naruto sabía que el zorro jamás olvidaría eso.
— Naruto_kun entiendo que me quieras dar una oportunidad par a que no me sienta mal, pero si no te conociera juraría que no sabes lidiar con las técnicas de seducción de una kunoichi — dijo la mujer al bajar su espada haciendo al rubio quedarse callado; — espera… Naruto_kun de verdad no sabes lidiar con eso? — y en ves de responder Naruto sólo se puso rojo.
Como fue que terminó de ese modo en realidad Naruto no tenía la más mínima idea, eso lo sabía que la anbu, de nombre Yugao, le mencionó que una importante parte de su entrenamiento no podía estar tan incompleta, pero decirle a la Gondaime que el gran héroe no sabía cómo resistirse a las tácticas de seducción era mala idea, sabía que Tsunade exigiría una explicación de ello y claro mandaría manejar todo como un secreto, quizá Naruto era un héroe pero aun había personas por ahí que harían lo que fuera por ser famosas y de paso arruinar un poco a alguna aldea, que mejor manera que matando al gran salvador del mundo ninja con una bella mujer que lo engatusara hasta dejarlo en charola de plata para su asesino, eso no podía pasar y por eso mismo ahora Naruto estaba justo aquí, en el departamento de Yugao que dicho sea de paso era ordenado, demasiado ordenado —lo diré yo está bien, esta mujer tiene un serio problema con el orden— dijo el zorro dentro del rubio, si bien Naruto ya había estado ahí la noche de Navidad o mejor dicho la madrugada, en realidad no prestó mucha atención al sitio que ahora veía bien, y le daba algunos escalofríos, todo estaba en su sitio, nada fuera de lugar, las armas anbu estaban en el muro en sus perchas respectivas, había un soporte para su uniforme anbu, el árbol de Navidad estaba aún en su sitio con cada adorno en su lugar justo, cielos inclusive los listones que tenía parecían estar en un orden específico sobre el mismo, los sillones estaban en una formación perfecta, los cojines estaban tan bien acomodados que casi parecían haber sido fijados a los sillones para no moverse, incluso la mesita de centro estaba perfecta con todo y esas flores dispuestas de una manera tan simétrica que Naruto comenzó a tener un tic al notar eso, en definitiva si Yugao llegaba a visitar su casa sufriría de un infarto al ver su caos hogareño, o quizá sólo lo obligaría a acomodar todo, cualquiera de las ideas le daba escalofríos a Naruto, — muy bien Naruto_kun dado que no se mucho de tu entrenamiento quiero que me hables un poco de ello — la mujer volvió de su recámara ya sin el uniforme anbu, usaba un pans celeste y una sudadera morada como su cabello, hacia mucho por su figura resaltando sus piernas y caderas, Naruto agitó la cabeza alejando la duda de si ella era pariente de Anko por su color de cabello, y mas aún alejando la idea de si ella sería como Anko en ciertas "cosas", el rubio relato su entrenamiento con el sanin de los sapos de manera rápida centrándose sólo en sus rutinas de ejercicio y combates de práctica, omitió claro los intentos de su fallecido maestro de meterlo a una casa de citas de vez en cuando, no necesitaba que alguien supiera de eso.
— Sin duda Jiraiya_sama te enseño bien, pero yo habría esperado que te metería a algún burdel al menos una vez — Naruto acabó con una gota en su nuca, la fama de su maestro era más grande de lo que el mismo creía; — pero ese es justo el problema, dime Naruto_kun eres virgen aún o has estado ya con alguna mujer? — de nuevo Naruto no supo que responder.
— Oh mujer no tienes idea, este idiota se ha estado "tirando" a cuanta belleza se le ha cruzado en el camino los últimos días, si fuera tu tenía cuidado jajajajaja — dentro de la mente de Naruto las risas del zorro simplemente no se clamaban.
— Por tu silencio debo suponer que si, es natural que no te de pena, no es como si te estuvieras acostando con media konoha jijiji — Yugao rio y Naruto sólo sonrió, no era media konoha aunque si eran bastantes.
Naruto se relajó un poco cuando la mujer dejó de lado el tema de su vida íntima, no deseaba explicaciones y Naruto agradeció tanto eso, — Voy a seducirte Naruto_kun — el rostro del rubio perdió la forma reflejando un completo shock ante sus palabras, mientras dentro de él un zorro tenía la quijada tan abierta que llegaba al suelo, seguramente ambos habían escuchado completamente mal, ella no pudo haber dicho eso, verdad? Yugao tomó un poco de aire antes de hablar de nuevo — habrá enemigos Naruto_kun que no van a pelear directamente contra ti, es decir una kunoichi bien entrenada puede doblegar a cualquier hombre usando su belleza y dado lo que paso hace rato y tu aseveración de que nunca se te entreno en eso, he decidido ayudarte para que no caigas en manos de una kunoichi hábil y seductora— Naruto trataba de decir algo pero su cerebro se había trabado en la parte donde dijo que lo seduciría, por su parte el zorro dentro de Naruto volvía a preguntarse de donde provenía la increíble suerte de su contenedor como para lograr que una chica tan hermosa le dijera semejantes palabras y con una razón tan justificada que incluso lograba hacer lo que proponía como lo correcto, el rubio trato de negarse cuando logró reaccionar, el zorro lo insultó por semejantes ideas que tenía pero claro Yugao no pensaba aceptar eso de ningún modo, la anbu le dedicó una mirada fija y algo helada, Naruto sintió escalofríos, negarse no era una opción que pudiera tomar, — no te preocupes Naruto_kun, no vamos a hacer nada malo, sólo te mostraré algunos de los trucos de las kunoichis para que estés preparado esta bien — el rubio asintió preguntándose si lo que estaba a punto de pasar era de hecho lo correcto, —oh Naruto_kun eres tan maravilloso — y el color rojo inundó el rostro del rubio, la voz de Yugao se había vuelto tan dulce y melódica que por un segundo no estuvo seguro de si ella era quien estaba a su lado, esa era la primera lección, una kunoichi podía ser muy aduladora y dulce, además de que ayudaba algo se chakra en las cuerdas vocales para hacer su voz más encantadora.
Como fue a terminar de ese modo, en realidad Naruto no tenía idea, pero ahora mismo estaba en la sala del departamento de Yugao con la hermosa anbu demasiado cerca de el, estaba firme como una estatua incapaz de moverse mientras ella estaba a su lado, una de las manos de Yugao lo estaba acariciando en el torso mientras ella se acercaba demasiado a su oído, — sabes Naruto_kun, he oído que los Uzumaki tienen una resistencia sobrehumana, quisieras demostrármela — pidió Yugao con esa vos dulce y deseos, la mente de Naruto casi se había apagado de nuevo cuando vio ese hermoso par de ojos y trago saliva, tenía que salir de ahí cuanto antes o… mejor no pensar en ello, —sabes esto no funciona soy muy fuerte como para caer en eso mejor me voy Yugao_chan — y Naruto se puso de por, la anbu sonrió orgullosa, muchos hombres habrían caído y le estarían siguiendo el juego pero no Naruto, su fuerza de voluntad era tan férrea que ya estaba tratando de huir, una gran manera de lidiar con todo la de salir huyendo, una técnica patentada por Jiraiya obviamente, pero una kunoichi no se rendía con eso, menos en una misión de seducción y Naruto debía entender eso, — ohhh pero Naruto_kun apenas estábamos iniciando, ah ya entendí… soy muy vieja y lo te gustó, es eso verdad? — los ojos de Yugao se pusieron húmedos y Naruto se atornillo en su sitio, su mayor debilidad después del ramen era ver a una chica herida y sufriendo, no podía dejar a Yugao sola y así, ese no era su estilo, — estas jugando, tu no eres vieja, eres una joven y hermosa mujer, una kunoichi en toda la regla, cualquier hombre estaría orgulloso de decir que tiene tu corazón, yo sin duda sería feliz si tu llegarás a sentir algo por mi Yugao_chan — y Naruto le dedicó esa gran sonrisa que sólo logró hacer aparecer un tenue sonrojo en las blancas mejillas de Yugao, Naruto dijo todo eso de corazón o solamente le estaba tratando de voltear el juego, seguramente era eso y la hizo sentir orgullosa, el rubio había entendido que la mejor manera de lidiar con una kunoichi era jugar el mismo juego, seducirla, si el rubio estaba dispuesto a seguir de ese modo entonces ella estaba bien con eso, jugarían el juego de la seducción para ver quien sería el primero en caer ante los encantos del otro, — me pregunto si ésta mujer se dará cuenta de que el idiota del cachorro se trago todo su numerito— se preguntaba el zorro dentro de Naruto ya con una nueva bolsa de palomitas delante de el pues estaba seguro que esto iba a terminar de una sola manera.
— Pero Naruto_kun no soy una chica de tu edad para que digas esas cosas, estas bien con eso — una vez mas la voz dulce y cariñosa se Yugao se dejó escuchar junto con un ligero movimiento de sus brazos que estrecho bajo sus pechos haciéndoles resaltar un poco más.
— Es una broma no? Esas cosas no me importan nada, he estado sólo mucho tiempo como para que algo así me detuviera en estar con quien yo quiero — Naruto no se dio cuenta de cuando paso, pero de pronto estaba de nuevo junto a Yugao en el sillón, demasiado cerca.
— Pero así está bien que nuestro futuro Hokage diga esa clase de cosas, uno podría pensar que eres un pervertido Naruto_kun — una de las piernas de Yugao se movió acomodándose sobre la rodilla del rubio en una clara invitación.
Naruto pareció no comprender eso del todo pues una de sus manos fue a la rodilla de Yugao que acarició suavemente antes de que sus propios instintos le hicieran mover la mano un poco hacia abajo, sitio por sobre ese pans abrigador la torneada pierna de la anbu quien seguía en su papel, aunque viendo se cerca a Naruto podía decir que creció tanto y no se había dado cuenta de cuando fue que eso paso, había dejado de ser el niño escandaloso para ser ya todo un hombre con el que cualquier mujer podría ser más que feliz, — no soy un pervertido Yugao_chan pero, si por estar con una mujer como tu me tacharan de uno, lo aceptaría con gusto — y le dedicó otra de sus grandes sonrisas sinceras, algo en la anbu se estremeció haciéndole moverse despacio hacia el rubio quien se acercó a ella despacio, el zorro dejó de comer palomitas esperando que el show de verdad iniciará ya, y ocurrió, los labios de Naruto se unieron a los de Yugao en un beso suave casi ingenuo donde sus labios se presionaban con delicadeza antes de que se separan tras unos segundos, Naruto estaba bastante rojo y se disculpaba por su atrevimiento, no había notado la posición en la que estaba con ella hasta ese momento, pues cuando se acercaron para el beso la pierna de Yugao quedó sobre el presionando cierta parte de su cuerpo con el muslo y Naruto sentía que debía salir de ahí antes de perder su poco control, Yugao claro que sentía eso contra su pierna, se sentía orgullosa de que sus habilidades de seducción funcionarán incluso en el gran héroe de la aldea, pero había algunos puntos que Naruto debía conocer antes de poder irse, — creo que debería mostrarte como una kunoichi vuelve loco a un hombre Naruto_kun — y le guiño un ojo, Yugao mentiría si dijera que no le interesaba estar en la cama con el rubio, después de todo era un héroe además de apuesto, sin contar claro con su manera de ser, cualquier mujer caería enamorada de el, excepto ella claro esta; Naruto trato de detener a Yugao cuando la anbu se coloco delante de el de rodillas en la alfombra haciéndole abrir un poco las piernas facilitando el acceso para la bella mujer quien sonreía — no tengas miedo Naruto_kun, esto es algo que debes conocer además es mejor que sea con alguien de confianza o acaso habrías preferido que alguien más, como Tsunade_sama hiciera esto contigo — el rubio se quedó tan callado, dentro de el, el zorro se estaba aguantando la risa después de todo esa era una de las fantasías recurrentes del rubio.
— Bueno vamos a ver que tienes para mi Naruto_kun — y antes de que el rubio dijera nada los dedos de la hermosa anbu comenzaron a acariciar su hombría por sobre la tela de su ropa dirigiéndose hacia la cremallera.
Naruto cerró sus ojos luchando con sus instintos cuando el sonido de sus pantalones abriéndose lleno el aire antes claro, de sentir como unos ágiles dedos comenzaban a acariciar su miembro, aún estaba la tela de la ropa interior en medio pero aún así Yugao sentía esa parte de su cuerpo, —ohh pero si ha estás muy duro Naruto_kun, verdad que vas a ser bueno y dejar que te enseñe esas cosas no es así? — todo era una demostración de Yugao, de como una kunoichi podía manipular a un hombre con sexo y el rubio estaba cada segundo mas atrapado en el juego de la hermosa anbu, no pudo decir nada sólo se le quedó viendo incapaz de decir una sola palabra, eso les Yugao fue un claro si y con esa seductora sonrisa en sus labios decidió que los pantalones de Naruto tenían que irse, el Uzumaki era por completo manejable en las manos de la hábil mujer quien con facilidad y calma le despojó del pantalón dejando sólo el bóxer, naranja por cierto, había un prominente bulto bajo esa tela y relamiendo sus labios Yugao procedió a jalar de la última prenda de tema haciendo "saltar" el miembro de Naruto frente a su rostro, — … kami que grande es — susurro Yugao haciendo a Naruto sentirse de nuevo orgulloso, ya comenzaba a creer que de hecho era como las chicas decían, pero para Yugao en su posición lo normal sería decir eso del miembro que fuera, pero en este caso si lo era, trago algo de saliva, había pasado tiempo desde la última vez que tuvo un miembro ante sus ojo a, mucho más desde que fue uno de ese tamaño, — bien, sin duda eres grande no sólo en poder eh Naruto_kun, pero ahora vas a conocer de que es capaz una kunoichi — y los dedos de Yugao comenzaron a pasearse sobre su miembro palpando cada milímetro del mismo, con cada toque parecía ponerse más duro y grande para la admiración de Yugao, quien no daba crédito a ello, una idea apareció en su mente, a que sabría? La anbu reprimió un sonrojo en sus mejillas al ver el miembro del rubio quien lo tenía idea de que estaba pasando por la mente de Yugao, pues se había detenido por completo cuando su pene quedó a la vista, — tal vez deberíamos detenernos Yugao_chan — mencionó el rubio sacando a la anbu de su estado congelado, cualquier otro habría aprovechado para hacer un movimiento sobre ella, era lo común en la mayoría de los hombres, pero claramente Naruto no era esa clase de persona.
Naruto dejó salir un ligero gemido de sus labios cuando los dedos de Yugao comenzaron a delinear todo el largo de su pene que latía mas y mas ansioso ante cada una de sus caricias, — no seas impaciente Naruto_kun, apenas estamos empezando — la anbu le guiño un ojo antes de que sus dedos subieran hasta la punta de su miembro donde presionó suavemente sacando un gemido aún más fuerte que los anteriores, el rubio apenas y podía creer que sólo con el roce de sus dedos Yugao lo estuviera haciendo sentir tan bien, sin duda tenía un gran talento para esas cosas, aunque quizá también ayudaba que ella fuera la instructora de las kunoichis en ese campo al entrar al anbu, Naruto desconocía por completo ese hecho y ahora mismo no le importaría de saberlo, pues los dedos de Yugao no dejaban de moverse dándole un exquisito masaje a su hombría que sólo parecía endurecer más y mas ante cada segundo que pasaba, los ojos de Yugao no perdían detalle de lo que pasaba pues en menos de un minuto sus caricias llevaron al miembro del rubio a su máximo esplendor, de manera inconsciente Yugao paseo la lengua por sus labios justo antes de acercarse al pene de Naruto, — está es mi especialidad Naruto_kun — le guiño un ojo y decidió atacar al Uzumaki, Naruto no pudo evitar deber salir un gemido cuando los labios de Yugao llegaron a su miembro, fue un beso suave casi inocente el que ella le dio justo en la "punta" haciendo que esa descarga de placer corriera por todo su cuerpo, sólo pudo decir el nombre de Yugao en respuesta a esa acción, la anbu sonrió aún tenía el toque Lara hacer a un hombre volverse loco con un solo beso, pero aún así había muchas cosas que debía enseñarle al rubio para que estuviera preparado para las kunoichis, con deseo y una sonrisa un tanto pervertida Yugao abrió sus labios y su lengua se asomó desde el interior comenzando a moverse sobre la hombría de Naruto subiendo desde la base hasta la cima, — aarggg Yugao_chan! — de los labios de Naruto el nombre de Yugao sonó como el más erótico cumplido para la anbu quien no se detenía con nada, su lengua subió hasta el máximo antes de bajar recorriendo cada cm del duro miembro del rubio quien a piernas abiertas solo se dejaba manejar por esa hábil mujer.
Naruto no estaba seguro de cuanto tiempo paso Yugao en esas caricias que lo enloquecían, sólo sabía que se sentía asombroso, — hora del plato principal Naruto_kun — dijo la anbu con esa sonrisa deseosoa en sus labios antes de acercarse a la cima del miembro, los ojos de Naruto sólo se abrieron al máximo cuando sintió los labios de Yugao abrazando su miembro, el rubio no pudo evitar gemir de gustó cuando su miembro comenzó a ser devorado, los labios de Yugao se movían sobre su pene tratando poco a poco del mismo haciendo a Naruto gemir más y más fuerte, cada movimiento de la mujer era sólo para que el lo disfrutará más que antes, su lengua estaba trazando formas sobre su pene al tiempo que lo tragaba haciendo que las manos de Naruto se sujetaban al sillón tratando de darle más agarre al rubio quien se sentía al borde de caer del mismo, el sonido húmedo y pervertido de los labios de Yugao era todo lo que acompañaba a los gemidos de Naruto pues cada movimiento servía sólo para que la mujer tragara un poco más del rubio quien ya no luchaba por contener sus gemidos — aahhh Yugao_chan eres aahhh eres genial no te detengas — suplico el rubio empujando un poco sus caderas, Yugao sintió como el miembro de Naruto entró un poco más en su garganta haciendo que fuera un poco difícil respirar, pero aún así no se detuvo, esto básicamente era una "pelea" con el rubio y ella ganaría por cualquier medio, sus manos entraron en juego acariciando los testículos del Uzumaki, frotaba con ambas manos suavemente mientras sus labios subían y bajaban sobre el miembro del rubio quien en ese punto gemía sin dudar, el sabor de su miembro llenaba la boca de Yugao quien movía la cabeza arriba y abajo sin dejar de chupar, con cada movimiento era como si se pusiera mas duro que antes y su sabor era por demás inesperado — ( cielos que tanto aguantas Naruto_kun, cualquiera ya se habría venido en este punto… y porque tu pene tiene este sabor, es exquisito) — eran los pensamientos de Yugao mientras seguí a en su tarea autoimpuesta, sus labios estaban abrazando el miembro del rubio con fuerza mientras Naruto sentía como poco a poco su resistencia minaba y su pene comenzaba a hincharse dentro de la boca de Yugao, la anbu lo supo entonces, Naruto estaba casi al límite, una sonrisa triunfal apareció en la mente de Yugao cuando atacó con su mejor técnica, sus labios se abrieron un poco y de un solo impulso trago todo el miembro del rubio —aaggg Yugao! — gimió con fuerza Naruto cuando sintió su miembro dentro de la tibia boca de la anbu, la cabeza de Yugao comenzó a subir y bajar a gran velocidad haciendo que con cada movimiento Naruto sintiera como casi le "arrancaba" el miembro con la succión que daba, Naruto sentía que no podría aguantar mucho y así fue, de la nada y con un gemido que sonó mas al gruñido de un animal el rubio explotó, un disparo de semen espeso lleno la boca de Yugao, su sabor inundó su mente y trato de alejarse —bébelo todo Yugao_chan! — ordenó Naruto tomando de la nuca a la anbu quien fue ahora quien abría sus ojos impactada.
— (es mucho… es demasiado y no deja de salir, por kami Naruto _kun cuanto puedes dar, es tanto y tan espeso mmmmm sabe increíble) — pensó la anbu justo cuando se resignó, Naruto no la dejaría ir hasta hacerla beber cada gota de su semen.
Naruto no estaba seguro de cuanto tiempo duro descargando, pero sabía muy bien que fue de los mejores orgasmos de su vida, había vaciado una descarga monumental dentro de Yugao a quien soltó finalmente dejándole saborear los restos de su semilla, dentro del rubio un muy conocido zorro tomaba una lista con sus colas mientras escribía con una sonrisa digna del mismo Jiraiya, "la mejor boca de Konoha, Uzuki Yugao" era claro para el zorro quien había demostrado ser la mejor usando los labios; De regreso al exterior Naruto respiraba un poco agitado pero con una gran sonrisa mientras Yugao terminaba de beber su semilla, nunca probó algo así y seguramente no volvería a tener una sustancia igual a su alcance, se relamió los labios y sonrió, le había mostrado a Naruto como una kunoichi de verdad luchaba contra alguien superior en fuerza y sin duda estaría listo para cuando lo atacaran de ese modo, — pero que…— Yugao fue sacada de su tren de pensamientos cuando al abrir los ojos se topo con el miembro de Naruto, aún duro como la roca y a la espera de mas atención — vaya alguien tiene demasiada resistencia jijiji, se nota que serías la "pesadilla" de cualquier kunoichi que trate de seducirte verdad Naruto_kun — el índice de Yugao acarició el miembro del rubio a todo lo largo, se sentía incluso mas duro que antes, una idea apareció en la mente de la anbu pero la desecho, había demostrado su punto y no tenía porque ir más allá de ese punto, los ojos de Naruto estaban fijos en la sensual mujer entre sus piernas, "sólo hazla tuya" esas palabras resonaron dentro de su mente, no era el zorro estaba seguro y lo que era más extraño, sentía que tenían razón, —segundo round! — ahora si fue Kurama el que hablo dentro de la mente del rubio quien tomó la iniciativa en esta ocasión, Yugao trato de preguntar que estaba haciendo pues con facilidad subió a la anbu al sillón colocándola en cuatro ofreciendo una gran vista de su trasero al rubio quien sonreía un tanto malicioso — es mi turno de mostrarte lo que se hacer Yugao_chan— y antes de que ella pudiera decir nada el rubio atacó, si bien había algo de tela entre el cuerpo de la mujer y el rubio es una verdad no pareció importarle mucho a Naruto quién decidió demostrar sus habilidades acariciando el sólido y deseable trasero de Yugao, la anbu trato de demostrar que con ella no se podía jugar del mismo modo por lo que se aguantó los deseos de dejar salir un gemido de placer cuando los dedos de Naruto comenzaron a amasar su trasero con suavidad, el rubio dio esa resistencia como un reto y decidió pasar a ser más directo pues se acercó a ella dando un beso directamente en la tela que cubría la feminidad de la anbu, Yugao finalmente fue incapaz de contener sus gemidos dejando salir un ligero quejido inicial cuando los labios del Rubio comenzaron a morder por sobre la tela buscando llegar a su dulce recompensa, Naruto no dejaba de atacar a la mujer mientras su lengua presionada contra la entrada cubierta que poco a poco comenzaba a humedecerse bajo sus labios y sus constantes atenciones, también comenzaba a emanar la dulce humedad del interior de la vagina de aquella mujer que solamente podía comenzar a gemir más y más ante cada caricia —aahhh Naruto_kun qué trata de lograr con esto aaahhh con eso no vas a lograr sacar nada de míaaahhh — la mujer de cabello morado dejó salir un dulce gemido negarse a admitir que se sentía demasiado bien lo que Naruto le estaba haciendo.
— No es bueno decir mentiras Yugao_chan, alguien debería enseñarse modales— Por un segundo en la mujer parpadeo pues juraría que las palabras de Naruto habían cenado un tanto perversos pero eso claro no podía ser de ese modo.
Los dedos de Naruto comenzaron a deslizarse sobre su intimidad presionando suavemente contra la tela haciendo que los labios de Yugao se abrieron para dejar salir un ligero gemido que solamente lo graba hacer sonreír a Naruto pues estaba logrando justo lo que deseaba, — vaya parece que a alguien le gusta lo que le están haciendo no es así? — y el rubio presionó con dos dedos contra la intimidad de Yugao haciendo que la mujer apretar a sus puños sobre la tela de su sillón mientras sus jugos comenzaban a salir con un poco más de fuerza ante la presión que el rubio estaba ejerciendo contra la tela que en esos momentos comenzaba a volverse el objeto más odioso del mundo , Naruto no dejó de atacar a la mujer con sus pedos mientras su mano libre amasada sin ningún reparo el duro trasero de aquella experimentada kunoichi quién seguía tratando de resistirse lo más que podía pero era un hecho que cada caricia de Naruto simplemente la hacia encenderse aún más, cuánto tiempo pasó Naruto torturándola de ese modo en realidad no tenía la más remota idea pero después de lo que le pareció una eternidad fue cuando el rubio decidió darle algo de verdadero placer, — bueno veamos qué es lo que tienes reservado para mí Yugao_chan — una vez más la mujer fue incapaz de oponer alguna clase de resistencia cuando Naruto sujeto su ropa y suavemente retiró la prenda de su cuerpo reglando poco a poco la blanca y hermosa piel de Yugao, justo como lo esperaba su trasero redondo y a falta de una mejor término perfecto sus nalgas eran grandes y suaves y justo en su entrepierna el rubio podría alcanzar a ver una pequeña línea rosada qué señalaba la entrada de la intimidad de esa mujer que en esos momentos estaba goteando grandes cantidades de dulce y tibio jugo femenino, Naruto una vez más usó los dedos deslizándolos sobre la intimidad de aquella mujer quién una misma dejó salir un delicioso gemido cuando la punta de los dedos de Naruto comenzó a insertarse dentro de su cada vez más sensible vagina, el rubio comenzó a mover sus dedos adentro y afuera suavemente mientras su mano libre seguir acariciando ese duro y suave trasero arrancando poco a poco los gemidos de la boca de Yugao, ella apretaba sus labios lo más fuerte que podía pero cada vez que los dedos de Naruto entraban en ella le era imposible contener esos dulces gemidos que subían de intensidad poco a poco — ahhhh Naruto_kun no deberías de estar haciendo esto aaahhhh— fueron las palabras que salieron de los labios de aquella mujer que de manera increíble lograron detener a Naruto quien retiró su mano de aquella húmeda zona haciendo que el rostro de duda apareciera en Yugao, había estado sintiendo un placer increíble y de la nada se había esfumado sólo por lo que ella dijo?
— Tienes mucha razón Yugao_chan , hay una mejor manera de hacerte sentir mejor — Yugao no se pudo o poner una vez más pues usando una inesperada fuerza de rótula giro sobre el señor haciéndola caer sobre el sofá mientras él la tomaba de las piernas y la alzaba en el aire.
— Espera Naruto_kun que vas a… aaaahhhhh — la espalda de Yugao se arqueó cuando sintió como los labios de Naruto se unieron a su intimidad depositando un dulce y deseoso beso que arrancó aquel gemido de la anbu.
Los labios de Naruto estaban besando la intimidad de aquella kunoichi mientras su lengua comienza a asomarse entre ellos recorriendo los labios vaginales suavemente desde abajo hacia arriba trazando una línea que derramaba aún más los jugos de Yugao, — aaahhhhhh Naruto_kun que aaahhhhhh donde … donde aprendiste a aaaahhhh cielos sii — la duda de la hermosa mujer de cabello morado se desvaneció en el aire cuando sintió como la lengua de Naruto comenzaba a clavarse dentro de ella, me estaba dando suaves estocadas adelante y atrás cada una más veloz y fuerte que la anterior sacando más y más aquellos besos gemidos de los labios de la mujer mientras ahora ambas manos comenzaban a acariciar el redondo trasero de Yugao quien solamente podía gemir sin descanso pues finalmente se había rendido ante el ataque del rubio, ella misma comenzaba a lanzar sus caderas contra el rostro de Naruto buscando que su lengua entrar aún más en ella para brindarle aún más placer de que ya había experimentado hasta ese momento, una idea un tonto traviesa apareció en la mente del rubio quien con uno de sus dedos recogió algo del dulce y tibio jugó vaginal de Yugao antes de deslizar su dedo entre las nalgas de la mujer presionando contra el pequeño agujero trasero —aaahhh espera… ese es mi aaahhhhh — Yugao sólo pudo reunir con fuerza cuando sintió como Naruto comenzaba a bombear su dedo dentro de su trasero mientras su lengua seguía empujando contra su vagina sin detenerse entrando y saliendo cada vez más rápido sacando más y más de aquel jugo que no dejaba de emanar desde el interior de la caliente y estimulada vagina que solamente comenzaba a presionar la lengua de Naruto invitándolo a entrar aún más en ella cosa que él no pensaba regresar pues seguía lanzando su lengua contra ella en esas fuertes y decididas embestidas —aaahhh si más no padres se siente genial aaaahhhh cielos eres increíble aaahhhh —Yugao comenzaba a gemir más y más fuerte ante cada embestida del rubio quién seguía lanzando aquel ataque inmisericorde contra ella haciendo que su respiración se volviera a cada vez más rápida y agitada, la lengua de Naruto salió por completo y entró realizando una firme embestida que le permitió clavar su apéndice aún más dentro de la bella mujer que apretando sus manos contra el sillón dejó salir un fuerte gemido señal clara de que se estaba aproximando a un inminente clímax, el rubio sabía muy bien lo que estaba a punto de pasar pues había estado en situaciones parecidas con varias mujeres como para saber que los movimientos de aquella humeda intimidad implicaban un estallido próximo, con más velocidad Naruto volvió a atacar a la mujer con toda su fuerza mientras su dedo índice seguía moviéndose dentro de su trasero y su lengua buscaba el rincón más sensible dentro de Yugao, —aahhh…yo…yo ….ahhh Naruto_kun yo…AHHHH— y los ojos de La bella kunoichi Se abrieron como platos justo cuando sintió como su intimidad esta llamada con todas sus fuerzas derramando un caudal de dulces y deliciosos jugos que salpicaron el rostro de Naruto quien sin dudar verían cada gota dulce del elixir que emanaba del interior de la orgásmica Yugao.
La anbu apenas y podia creerlo, el rubio que pensó no sabía nada de como lidiar con las kunoichis le había brindado uno de los mejores momentos de su vida, sin duda Naruto estaba lleno de sorpresas, y aún faltaba la más grande, — bien Yugao_chan, lista para el plato principal? — la pregunta de Naruto sacó a la anbu de su mundo de ideas personales, volteó un segundo antes de que Naruto una vez más la moviera sobre el sillón casi como si no pesara nada, Yugao quedó tendida sobre el mismo viendo claramente al Uzumaki, el miembro de Naruto estaba demasiado sólido en esos momentos pese a haberse vaciado hacia poco, el rubio le dirigía una mirada gentil y deseosa mientras la tomaba de las piernas, separó suavemente las mismas al tiempo que se colocaba justo sobre Yugao, claro que Naruto deseaba acabar con aquella sesión de la mejor manera, pero de ningún modo el forzaría a una mujer de ningún modo por lo que si Yugao le pedía que se detuviera lo haría aunque se quedará con deseos de haber llegado al final, pero ella no lo hizo, no pidió que parará por lo que pudo continuar, despacio la punta de su miembro se acerco a la aun húmeda entrada de la anbu quien veía como la hombría de Naruto se acercaba demasiado a ella, debía detener esto? Después de todo era su culpa que Naruto estuviera así de "animado" y se iba ahora mismo ser la blanco de cualquier chica que le ofreciera un desahogo a sus deseos, quien sabía lo que eso podría acarrear en el futuro próximo, no podía permitir eso, su deber y honor como kunoichi le impedían permitirlo y le obligaban a culminar sus lecciones con el rubio del modo más obvio, — ahhh Naruto_kun — Yugao no tuvo tiempo de decir nada pues la punta del miembro comenzó a rosar su entrada como si estuviera pidiendo permiso para ingresar en ella, Yugao pronto descubrió que de hecho Naruto si tenía mucha experiencia en lo que se refería a mujeres, pues estaba presionando su pene contra ella suavemente haciendo que los labios vaginales se abrieran sólo un poco dejando salir los dulces gemidos de la kunoichi quien sentía como con cualquier movimiento el rubio entraría en ella, ahí no habría marcha atrás, estaba segura de que muchas cosas cambiarían una vez que Naruto la tomará, y el simplemente no lo hacia, sólo estaba paseando su pene a todo lo largo de su entrada buscando sólo estimular más y más a Yugao quien en ese punto no dudaba en demostrar lo bien que se sentía todo lo que Naruto le estaba haciendo pues sus gemidos no dejaban de salir de sus labios mientras el rubio seguía moviéndose contra ella hasta que la punta de su pene hallo cierto botón que no dudo en presionar arrancando un fuerte gemido de labios de la anbu.
— Dime Yugao_chan cuando sea Hokage vas a ser mi escolta personal verdad? Vas a hacer lo que yo diga, todo lo que diga? — pregunto el rubio con una sonrisa un tanto malvada, sólo estaba siguiendo otro juego impulsado por sus deseos.
— Yo… aahhh yo lo haré aahhh hare lo que me mande Naruto_samaaaaaaa — los ojos de Yugao se abrieron un poco cuando uno de los dedos de Naruto presionó su clítoris mientras la punta de su pene empujaba contra ella, por un segundo casi entró.
— Así va a ser Yugao_chan, quiero oírlo, quiero que me jures tu obediencia total justo ahora y te daré un buen premio — Naruto deslizó sus manos sobre el cuerpo de la anbu sin dejar de mover su pene contra ella, la despojó de la última prenda que aún usaba y entonces se pudo enfocar en esos grandes y deseables pechos.
Quizá no eran los pechos más grandes que el rubio habría visto esos días, menos cuando podía presumir que estuvo con Anko, Samui y Hinata, de las cuales se preguntaba si aún iban a crecer más, pues Anko había llegado a su madurez y a las otras dos aún les faltaba algo de desarrollo, dejo eso de lado cuando Yugao dejó salir un gemido arqueando su espalda casi como si le ofreciera sus pechos, Naruto no rechazó la oferta, de dejó caer sobre la bella mujer de cabello morado sujetando con sus manos esos suave a pechos, los apretó y amado suavemente arrancando aún mas gemidos de Yugao quien abría sus ojos cada vez un poco más, Naruto estaba demostrando ser un verdadero experto pues sentía su cuerpo al rojo vivo mientras el rubio seguía acariciándola, la lengua de Naruto salió de su boca y suavemente se deslizó sobre uno de sus duros pezones, de nuevo un gemido de éxtasis salió de labios de Yugao quien seguía atrapada debajo del ninja rubio, las caderas de Naruto no se habían detenido, seguía presionando su miembro contra ella sin animarse a entrar en la anbu quien ahora sentía como comenzaba a chupar sus pechos con deseo, sorbía con fuerza uno de sus pezones antes de soltarlo con un húmedo "plop" para sonreír y saltar al otro imitando aquella caricia que sumia a Yugao en un nuevo mar de placer, su cuerpo estaba encendido como nunca antes, incluso juraría estar al borde de otro orgasmo y eso que Naruto aún no entraba en ella, no necesitaba ser una genio para saber que en cuanto Naruto la tomará no habría manera alguna de detenerse, una vez unidos seguirían hasta caer rendidos uno sobre la otra, y de algún modo aquella imagen que se formó dentro de la mente de Yugao fue suficiente para terminar de romper sus intentos de resistencia —Naruto_sama yo aaahh yo sólo te soy leal a ti aaahh sólo tú me mandas y aaahh soy tu más leal kunoichiiiiii — dijo al fin Yugao haciendo sonreír a Naruto pues finalmente ella había entrado al juego, Naruto solamente puedo sonreír al escuchar las palabras de aquella hermosa mujer quién se rendía ante sus caricias y justo como había prometido no había llegado el momento de darle un merecido premio, — aaahhhhhh — Yugao sólo pudo dejar salir un fuerte gemido desde sus labios cuando sintió como con un solo golpe en punta del miembro del rubio se había colgado en el interior de su vagina separando los húmedos en labios externos que ahora mismo están abrazando la punta de aquella hombría , Naruto dejó salir un suave gemido desde sus labios pues la operación de aquel interior tibio y húmedo era demasiado agradable como para retroceder en ese punto, el rubio solamente pudo empujar un poco más dentro de Yugao sacando un nuevo y más fuerte gemido de aquella bella mujer puede ser miembro de Naruto comenzaba a deslizarse dentro de ella más y más, las paredes vaginales de la hermosa kunoichi apretaban con fuerza duro miembro del Rubio quien dejó salir un gemido de placer antes de retroceder ligeramente, puedes sentir como las paredes del interior de Yugao lo apretaron con fuerza negándose a dejarle ir mientras la mujer simplemente lo abrazaba con sus piernas impidiendo que se alejara aún más de ella, el rubio dejó salir un gemido más semejante al rugido de un animal antes de embestir contra ella con más fuerza hundiendo su pene lo más que pudo dentro de aquella mujer, Yugao desde luego que habías dejado de ser virgen hacía mucho tiempo pues una de sus primeras misiones fue algo relacionado con la seducción pero aún así lo que estaba sintiendo en ese momento en sin duda muy superior a cualquier otra cosa.
— aaahhh más adentro, más adentro Naruto_kun lléname toda! — dijo suplicando la hermosa mujer mientras el rubio buscaba a sus labios para unirse a ella en un apasionado y desesperados beso donde su lengua domina en cuestión de segundos a la de Yugao.
Naruto permaneció inmóvil un par de segundos antes de retroceder de nuevo y clavar su miembro más adentro que se podía en aquella hermosa mujer, Yugao volvió a gemir con fuerza cuando sintió como Naruto entraba a un más que antes llegando lo más profundo que nunca nadie había llegado dentro de ella su respiración se volvió más y más fuerte mientras Naruto seguía moviéndose sobre ella adentro y afuera haciendo que la vagina de aquella mujer devoraba con hambre su duro miembro, los movimientos de las caderas de Naruto simplemente aumentaban de fuerza mientras el sillón sobre el que estaban comenzaba a sacudirse ante cada uno de los golpes que el rubio lanzaba — aahhh estas tan adentro me encanta aaahhh más Naruto_kun más aaahhhh — decía suplicando la hermosa mujer mientras el rubio se aferraba con sus novios a uno de sus pezones que mordía con fuerza sin dejar de mover sus caderas contra ella una y otra vez, el Duro miembro del Rubio entraba y salía de la mojada intimidad de Yugao, los líquidos internos de la mujer comenzaban a emanar con fuerza ante cada uno de los golpes de aquel rubio, el Duro pene de Naruto entró y salió de ella más y más con cada golpe mientras la mujer de cabello morado simplemente gemía ante cada uno de sus embates, nunca hasta ese momento Yugao había llegado a pensar que el rubio sería tan bueno a la hora de la intimidad justo como lo estaba demostrando en esos instantes, dio un fuerte tirón con sus labios a uno de sus pezones arrancando un fuerte gemido de la mujer quién lanzó sus propias caderas contra Naruto mientras sentía como su miembro llegaba a presionar la entrada de su vientre que comenzaba a empujar con cada uno de sus golpes —aahhh estás tan adentro aaahhh vas a… vas a… ahhhh — y Yugao dejó feliz un fuerte alarido de placer cuando el miembro de Naruto finalmente logró vencer la última pieza de resistencia que ella presentaba colando la punta de su miembro dentro de su vientre haciendo que los ojos de Yugao Se abrieron enormes al sentir como el pene de Naruto se deslizaba tan adentro que nunca más volvería a sentir algo del mismo modo de eso ella estaba muy segura, de los labios de Yugao salió un fuerte gemido de placer mientras su vagina estallaba en un fuerte caudal de jugos tibios y calientes que dejaban en claro que el solo hecho de que ya no te hubiera entrado tanto en ella le había causado un delicioso orgasmo, Naruto se quedó inmóvil un par de instantes mientras sentía como todo el cuerpo de la mujer se estremecía debajo del placer que el mismo le había causado y tras verla cerrar sus ojos un par de minutos el rubio decidió que era el momento perfecto para continuar.
— Aaahhh Naruto_kun espera acabo de aaahhhh —Yugao no fue capaz de completar aquella frase Pues el rubio estaba empujando con cierta insistencia dentro de ella empujando su miembro dentro de la matriz de Yugao.
— Lo se Yugao_chan pero… yo aún no acabo — dijo en un susurro Naruto directo al oído de la hermosa mujer que solamente abrió sus ojos al comprender que de hecho Naruto aún no había terminado por lo que podía deducir el tenía pensado seguir hasta que finalmente estallara dentro de ella.
Los gemidos de Yugao una vez más comenzaron a resonar dentro de su departamento pues Naruto había comenzado a empujar contra ella con gran fuerza entrando y saliendo de su abierta y muy mojada intimidad con gran facilidad pues cada vez que se movía hacia atrás la mujer dejaba salir un gemido de cierta molestia que era rápidamente reemplazado por uno de satisfacción cuando el rubio entraba lo más posible en ella, cada golpe de las caderas de Naruto, el Uzumaki salía y entraba de Yugao con fuerza sacudiendo todo el cuerpo de la hermosa mujer quien sólo podía gemir más y más ante cada uno de los golpes del rubio, la punta de su miembro entraba sin problema alguno en la matriz de Yugao, reclamando con cada golpe sus nuevos dominios, — grrr que estrecha eres Yugao_chan — susurro el rubio al oído de la mujer de cabello morado sin dejar de moverse, sus manos se deslizaron sobre la suave piel de la anbu avanzando por sus caderas hasta sujetar su trasero, Naruto lo amaso con algo de rudeza separando esas duras nalgas sin dejar de empujar contra ella — aahhh Naruto_kun aahhh más, no te detengas… aahhh— Yugao apenas podía creer que ella misma estuviera diciendo esas cosas, nunca había suplicado a alguno de sus que siguiera y no se detuviera, pero aquí estaba ahora pidiéndole a Naruto que no se fuera a detener, el rubio retrocedió lo más que pudo sintiendo como las piernas de Yugao lo sujetaban negándose a dejarlo ir más allá de donde estaba, sólo la punta de su pene quedó dentro de ella, con un gruñido digno de un animal en celo Naruto empujó dentro de ella yendo hasta el fondo del camino, Yugao debo salir un fuerte gemido de placer cuando todo el miembro de Naruto entró en ella haciendo que una sacudida de placer la envolviera, había tenido un pequeño orgasmo con ese golpe, sus ojos casi se pusieron en blanco cuando Naruto repitió el golpe, de nuevo Yugao sintió esa explosión en ella — aahhh si así más Naruto_kun me estás matando aahhh no te detengas no pared aaaahhhh — suplico ya casi gritando Yugao mientras el rubio volvía a besar sus pechos sin dejar de moverse contra ella, cada golpe era más fuerte y veloz que el anterior, Yugao sólo gemía vemos mas y mas con cada golpe sintiendo como poco a poco el miembro de Naruto comenzaba a hincharse dentro de ella haciendo más delicioso y difícil cada golpe de sus caderas, — hazlo… hazlo dentro de mi… dame toda tu semilla Naruto_kun... dámela toda aahhh — pidió Yugao mientras el rubio buscaba sus labios, una vez más se habían unido en un largo e intenso beso repleto de deseo donde la lengua de Naruto tomaba el mando antes de que sus caderas empujaran lo mas posible dentro de Yugao liberando al fin su orgasmo.
— YUGAO/NARUTO! — dijeron a la vez ambos amantes justo cuando sus cuerpos llegaron al clímax, el semen de Naruto explotó derramándose dentro del vientre de Yugao quien gemía en un placer inconcebible para ella, la sensación de Naruto derramando semejante cantidad de semen en su interior era algo que jamás creyó posible.
Naruto seguía abrazando a Yugao sobre el sillón mientras su semen era vertido en la mujer que con esa expresión de placer sólo podía pensar en una cosa —( es demasiado por kami Naruto_kun me va a terminar preñando, voy a darle un hijo a Naruto_kun) — curiosamente la idea de acabar siendo la mujer del rubio era algo bastante atractivo para la anbu sumida en el éxtasis, que se prolongaría durante todo el tiempo que Naruto durase vaciando dentro de ella; Mientras Naruto seguía en sus "clases" privadas con Yugao en otra parte de la aldea una muy conocida mujer de ojos color miel estaba sentada muy tranquila tomando el te acompañada de otra mujer hermosa de cabello castaño y marcas en las mejillas, — no debes tomar literal lo que dicen esas revistas, están hechas para kunoichis principiantes no para mujeres como nosotras Tsume— fueron las palabras de rubia Gondaime a su acompañante, momentos atrás Tsunade había salido, por no decir escapado, de sus deberes en la Torre aprovechando que Shizune tenía una ronda en el hospital, le pareció buena idea buscar a Naruto para aclarar ciertas cosas que habían pasado entre ellos desde aquel beso, tenía que entender que era un ninja y ella su Hokage, no le podía dar favores especiales, no era profesional, también debía entender que no era bien visto eso de que anduviera por ahí con Shizune, se podía prestar a malas interpretaciones y por último, debía entender que era suyo y si iba a hacerlo con alguien sin descanso era con ella, — eso ya lo se Tsunade_sama, sólo estaba buscando a mi hija en esa tienda, no comprendo porque compra esas ridículas revistas… así como tampoco entiendo porque te esta sangrando la nariz Tsunade jejejeje — la rubia Senju salió de sus pensamientos par a tocar su nariz y si , estaba sangrando, Tsume no pregunto pero por la sonrisa que tenía sabía muy bien cuál era la causa de esa hemorragia nasal que por un segundo avergonzó bastante a la mujer rubia, — finalmente un hombre digno a aparecido y nuestra Hokage quiere ser su perra, que orgullosa estoy de ver este día — un pequeño temblor apareció en uno de los ojos de Tsunade, ella sabía muy bien que el término "perra" para los Inuzuka era un halago, aunque no dejaba de ser extraño oírlo, la rubia dejó salir una risa mas falsa que un Uchiha de pelo blanco, ella no estaba ingresada en nadie, o eso dijo Tsunade pero claro, Tsume no le creyó absolutamente nada de lo que decía.
— Oh vamos no es tan malo, sólo quieres que alguien te ame y te atienda por las noches mientras satisfaces sus deseos con tu cuerpo, sólo deseas un compañero es eso tan malo? — Tsunade parpadeo, Tsume tenía razón hasta cierto punto, no era malo en verdad que ella buscará su felicidad, lo malo era quizá que la buscaba con cierto rubio.
— Bueno, supongo que tienes razón en eso, pero no estoy interesada en nadie! — por un segundo la guardia de la ojimiel cayó haciendo aparecer la sonrisa astuta en Tsume, no iba a dejar pasar la oportunidad de avergonzar un poca a la legendaria sanin.
Tsunade de pronto se hallo halló en una interesante conversación con Tsume sobre la vida de la mujer soltera, más aun la de las kunoichis de su calibre, era un hecho que si bien la Inuzuka no estaba al nivel de la rubia, si era considerada como una de las mas fuertes mujeres de la aldea y de un modo u otro, eso espantaba a los hombres, y los pocos valientes para intentar algo eran sólo presumidos que buscaban decir que se habían metido entre sus piernas, la mujer de mejillas marcadas gruño un poco al recordar al último de esos tipos que terminó muy mal gracias al genio de la mujer, y a su fiel compañero canino, ese hombre nunca podría tener hijos, aunque se había ganado eso, — entonces me vas a decir quien es el Alfa que te pone en celo? Porque se puede oler tu estado desde un kilómetro — Tsunade se sonrojo y apretó el puño amenazando a Tsume quien sólo pudo reír, sólo una nariz refinada podría percibir eso desde tan lejos por lo que Tsunade no debía preocuparse de que alguien del clan Inuzuka notará su estado, una vez más la Senju no admitió nada, pero por la mitad que le lanzaba la Inuzuka era claro que no le creía nada de lo que decía, Tsunade suspiro al final, si estaba interesada en alguien "lo sabía! " fue todo lo que Tsume dijo cuando la Senju lo acepto, habría deseado saber quien era el tinte que le quitaba el sueño a la hermosa mujer pero pese a ser conocida por ser la mujer más instintiva de su clan, Tsume sabía que no debía presionar a Tsunade a terminaría invadiendo Suna vida aérea, fue extrañamente liberador para la rubia admitir que estaba interesada en alguien, según Tsume era normal pues debía estar orgullosa de hacer hallado al hombre ideal para ella, la rubia sonrió aún más, nunca creyó que ella podría ser tan centrada y sería, — entonces, ya te ha sometido o aún no pruebas su hombría? — bien quizá ella no era tan sería como pensó, pero era un hecho que Tsume sabia muy bien de que estaba hablando pues pese a sus bromas, la conversación era bastante reconfortante ara la Senju quien dejando de lado todos esos chistes e insinuaciones directas a su intimidad con el rubio que aún no había ocurrido era agradable hablar con ella; — bienvenida a la aldea de la hoja, esperamos que disfrute su visita y que no sea problemático… un segundo, usted no es la Mizukage? — preguntaba Shikamaru a la mujer delante de él, esa pelirroja era inconfundible y por cómo estaba babeando su compañero de vigilancia en la puerta este, sin duda era la mujer en cuestión, — ex mizukage por favor, cedi mi título y he llegado a esta aldea e busca de mi destino, con tu permiso — Shikamaru la vio entrar preguntándose a que había llegado esa mujer, por cómo estaba sonriendo y suspirando al entrar a la aldea le daba un mal presentimiento al Nara quien solo pudo murmurar "problemático" antes de volcar su atención en su compañero quien seguía babeando como si no hubiera un mañana.
— Por alguna razón siento ganas de matar a alguien — murmuro Tsunade dentro del café aquel en el que estaba junto a la Inuzuka quien si bien no lo dijo, también había tenido la misma sensación dentro de ella.
— No lo sé, quizá alguien está tratando de robarte a tu alfa Tsunade — la rubia de ojos color miel se le quedo viendo a la mujer de rasgos caninos, eso ya había comenzado cuando cierta chica de la aldea de la arena apareció con una petición de matrimonio, asunto que aún tenía que arreglar.
— De eso nada, ninguna lagartona me lo va a quitar, es mío y quien trate de alejarlo de mí se las verá con mi puño — la mano derecha de Tsunade se alzó mostrando el puño cerrado causando escalofríos en más de una mujer en la aldea de la hoja.
— Así se habla, y para que no te sientas sola yo también iré por mi alfa, seré la perra más feliz de la aldea! — Tsunade tuvo una pequeña gota en su nuca cuando Tsume dijo aquello, esa mujer era demasiado singular pero tenía razón, era tiempo de que ambas tomaran la verdadera iniciativa y fueran por el hombre que deseaban, al mismo tiempo las tres mujeres, la rubia, castaña y pelirroja pensaban en el mismo Uzumaki con la misma idea en mente "inicia la cacería"
Dentro del departamento de Yugao, el rubio estaba tendido en el sillón de la anbu, con la misma recostada sobre el mientras seguían unidos por el miembro del rubio que se negaba a perder su fuerza, no sabía porque pero de la nada, el rubio había sentido bastantes calofríos casi como si su vida estuviera en "peligro"…uno bastante agradable?
Y se termino el capitulo. No tienen que señalarlo se que solo hay un lemon en este capitulo pero eso es porque ya era demasiado grande digo, son 20 hojas de Word, eso si que es extenso además de que cubrió varias cosas nuevas, como la estrecha relación de Naruto con Shizune, y claro su casi acto con Hana que nos deja un poco mas claro lo que esta pasando con ella, me pregunto si se ira a unir a esta locura, porque Yugao lo hizo y ella no apareció en el capítulo original, lo que abre muchas posibilidades, pero no quiero decir mas o acabare dando un spoiler y tengo ciertas cosas planeadas que creo les van a gustar pero no se los diré hasta que lo vean llegar ;D y como no tengo nada mas que decir, los vere luego
Hasta la próxima
atte: Kurai-sho quien como siempre presenta solo este especial
pd: que tal la pequeña "clase" de Yugao
pd2: FELIZ Y PROSPERO 2018 A TODOS