Chemicaloids

Ciudad Academia, hora 12:16 pm, Hospital Hiroya

El grupo de Railgun salió para el hospital del distrito 15 para recoger a la amiga de Haruue, (¡Barney el dinosaurio morado!) Banri Edasaki (¡Ah… no perdón! Me disculpo), quien fue finalmente dada de alta ese día; la mañana anterior fueron a visitarla para regalarle el uniforme escolar que usará, no solo ella, Haruue también. La secundaria Sakugawa aceptó a las dos telépatas sin inconvenientes, aunque Edasaki tiene que recuperar sus estudios por el coma inducido en el que estuvo. Qué más habría querido Uiharu, que sus nuevas amigas estuvieran en su mismo salón, pero no todo se puede.

Sin embargo, la mañana anterior resultó en un enfrentamiento entre Anti-Skill, que escoltaría un paciente al hospital del reclusorio, el grupo del delincuente que se las ingenió para entrar en el hospital y sacarlo por helicóptero, naturalmente el plan no salió como esperaban y tomaron como rehén a la inocente Haruue, que nada tenía que hacer en los pasillos del hospital en ese preciso momento que la tomaron como rehén.

Railgun, la querida de muchos, saltó al rescate de la chica, los delincuentes soltaron a Haruue, empujándola contra la castaña electromaster, provocando que ella se desconcentre y suelte el helicóptero que estaba imantando al techo. En el calor del momento, la joven telépata lanzó la bolsa que llevaba el uniforme de su amiga, dentro del helicóptero; eso se convirtió en una persecución aérea de la Railgun y Kuroko tras los delincuentes… destrozar el motor del helicóptero con su disparo fue fácil .

— ¿Qué les parece? — Edasaki preguntó modelando el traje Sailor blanco de manga corta con el cuello marinero azul marino y falda del mismo azul.

— Preciosa. — Ruiko contestó con una sonrisa.

Uiharu no se quedó atrás, y Misaka le entregó un ramo de flores; una felicitación de su dada de alta y reintegración al mundo, ¿Que puede ser mejor que dos amigas finalmente reunidas y que asisten a la misma escuela? pues una celebración en un restaurante con el grupo completo de amigas. El resto del día fue tranquilo hasta que se tuvieron que despedir, donde las chicas más emotivas, Uiharu y Haruue, rompieron en llanto por su amistad y porque dejarán de compartir apartamento… en retrospectiva; mientras Haruue se parece a Uiharu, Edasaki se parece más a Ruiko.

Esa misma tarde en otro distrito, un ladrón intentó robar un bolso de una estudiante, siendo detenido en frío por un golpe directo a la cabeza propinado por el Aero Hand de Mitsuko Kongou; una chica con frente amplia con dos flecos, de cabello negro largo bien cuidado, una chica atractiva y bien dotada, 2cm menos altura que Ruiko, pero con 2cm más de busto. Si bien la chica fue elogiada por sus actos de valor, un chico nivel 0 en uniforme verde no tardó en estropear el momento, un estudiante de la Academia Seiin que forma parte de STUDY, una "compañía" medico-tecnológica que apoya a Anti-Skill; el chico se retiró creyéndose la gran cosa al final de su sermón estrecho.

Detrás de Kongou, Kinuho Wannai, una chica de cabello castaño claro semi-ondulado hasta los hombros, y Maaya Awatsuki, una chica de cabello oscuro lacio algo más largo que el de su mejor amiga; ambas chicas son amables, compasivas, comprensivas y respetuosas, pero ese chico nivel 0, aunque sea algún tipo de senpai para ellas por su edad, se ganó el rencor de las chicas que tienden a perdonar fácilmente. Ambas animaron y consolaron a su amiga y líder, Kongou, sintiendo coraje contra el sujeto.

Una mujer alta con uniforme de oficina azul marino, cabello chino negro, y ojos con estrellas doradas; está sentada al lado de una niña rubia de ojos morados en traje lolita gótica negro y blanco, no mayo años. La escena es extraña de ver, pero el parque en el que están, si se le puede llamar así, está solo, el olor de las flores que están al medio acompañan bien al sonido de pájaros y la esporádica brisa. El grupo Railgun decidió tomar un atajo a sus dormitorios por ese parque, y se detuvieron ante la escena escalones abajo sin entender bien qué es lo raro de eso; Repentinamente la mujer se levantó y señaló a las chicas, la niña no tardó en asentir, correr hacia las chicas, y pegarse a Misaka.

— ¿Misaka Migoto? — La niña preguntó con una sonrisa radiante. — La no mama dijo que ehas tu… So~ Febrie. — La pequeña Febrie se presentó chupando una paleta verde.

— Ho- Hola Febrie… — Misaka se agachó nerviosa por la niña, pero la mujer que estaba con ella ya había desaparecido. — ¿Y quién es tu madre? —

— Mama dijo que no es segudo, mama y papa están haciendo algo… — Febrie contestó cambiando su paleta de cachete.

— Y entonces… ¿Quién la cuida? — Ruiko preguntó, y Kazari no tardó en aceptar a la niña.

Uiharu aprovechó la noche para buscar a la niña Febrie pero al parecer ella no existe; sin embargo puede buscar más sobre ella en la sucursal… La hacker tampoco quiere extrañar el bulto que hacía Haruue. La noche para Ruiko y Uiharu fue bastante buena; hasta que a la nivel 0 se le ocurrió probar una de las paletas que Febrie siempre está chupando, una mala decisión. Para Misaka, la noche fue normal, con los desvaríos de Kuroko que son comunes desde que se conocieron, o desde que comparten habitación; pero la sensación de que algo se le escapa la mantiene incómoda, además, la niña Febrie le recuerda a esa telépata.

— ¡Hey Per-B! ¿Qué pasa? — Touma contestó la llamada de Issei, que parecía demasiado calmada para ser solo una llamada de saludo.

— ¿Realmente quieres saber qué me pasa, o quieres ir al grano? — Issei preguntó sin aparente ánimo.

— Venga, suéltalo, me servirá de distracción también. —

— Pues~ ¿Te acuerdas de mis compañeros/amigos, Matsuda y Motohama…? ¿No? Bueno no importa… El punto es que esos dos llegaron a quejarse por llegar a la escuela acompañado de la presidenta… Según que están preparando algo contra mi nueva popularidad~ El día fue… inusualmente largo… —

— Sí, bueno… Créeme que no eres el único… La ventaja que tú tienes es que casi no hay varones para fastidiarte la vida en tu escuela… Yo si tengo que batallar con bastantes. — Touma imitó el tono de su amigo. — ¿Y qué es lo importante? —

— Bueno; son dos cosas… No hace mucho soñé con una especie de dragón rojo que se supone que conozco… Incluso me llamó compañero; Creo. Pero no he vuelto a encontrarme o escuchar su voz. —

— Ya… Oye… ¿Recuerdas cuándo estaba meditando en medio de la piscina? —

— ¿Y toda esa explosión de poder? ¿Qué con eso? —

— Lo mismo… Intenta meditar o dormir concentrándose solo en ese dragón… Si te llamó compañero, seguro tiene algo que ver con tu Sacred Gear; intenta meditar sobre eso. Ah; e intenta descubrir su nombre por tu cuenta, eso te dará puntos a favor con la criatura. —

— Siempre sabes que decir ¿No? Gracias… — Issei supuró recargándose en una barda de camino a casa. — Bueno… Anoche nos encontramos con un demonio que según era un alquimista de monstruos, dijo algo de haber hecho lo que debía… Al final nos enfrentamos a una planta que hace crecer pechos en sus vainas para hacer que todas las chicas tuvieran pechos grandes. ¡Puedes creer que me dejaron enterrado al final de todo y me abandonaron ahí! — Issei se quejó intensamente con amargura momentánea.

— Si lo creo… si… ¿Recuerdas que te dije algo sobre no ser descarado en público y guardarlo para la intimidad…? Pues sí lo dije antes de comenzar esos 10 días de entrenamiento. — Issei se volvió a quejar. — Escucha Per-B, intenta no hacer tantos comentarios sobre senos grandes al día, eso te dará puntos con otras chicas… Ah, e intenta disculparse con Koneko y Asia… —

— Sí, claro… —

— Por cierto… Ya que llamaste y antes de que se me olvide. Si un hombre Ángel Caído de cabello negro y amarillo se presenta como Azazel; es líder de los Grigori. Hay una tregua entre demonios y caídos, así que quédate tranquilo; solo… no le digas a nadie de esa tregua todavía. No sé que están planeando los líderes. —

— Creo… Que ya lo conocí… — Issei contestó algo incómodo por la revelación de que lo más probable es que la persona con la que ha estado platicando durante la noche es ese líder Grigori.

— ¡Jaja! Repito; no sé en qué piensan los líderes, pero sé que quieren evitar otra guerra. —