— Nunca creí hacer equipo con un Esper. — El líder Amakusa dijo saltando a la izquierda del Dragón, casi estando espalda con espalda.

— Sí Kanzaki puede pelear al lado de uno ¿Porque ustedes no? — Touma respondió aventando una corriente de escarcha alrededor de ambos, para mantener distancia con las católicas. — Touma Kamijou. —

Saiji Tatemiya. — El hombre larguirucho hizo un tajo descendente con ambas manos, creando una corriente de viento que salió de su flamígera, retrasando el asalto de un grupo de monjas. — Un honor luchar a tu lado. — Comentó el líder Amakusa como si estuvieran en una película de acción, deteniendo la alabarda de una monja para patearla y girar, continuando el asalto en el ala oeste del santuario.

Touma se impulsó de nuevo dejando una corriente eléctrica a su derecha para sacar del combate a las católicas, no quiere que le adjudiquen muertes a él en un conflicto religioso cuando solo intenta ayudar… El problema está en que su cerebro no parece registrar lo disonante que ese pensamiento es respecto a su moralidad y actitud en general.

Y aunque no lo parece desde el punto de vista actual, los Amakusa de hecho están teniendo problemas al enfrentar a las denominadas Fuerzas de Agnese, viéndose obligados la gran mayoría de Amakusas a luchar a la defensiva, donde son irónicamente más fuertes. Touma no puede ver la situación general, pero sí siente que algo no está bien, y que necesitan acabar todo rápido, o estarán en grandes aprietos en muy poco tiempo.

— Tch… A este ritmo bien podemos tirar las armas. — Stiyl rezongó por lo bajo, y con un ceño fruncido que parece ser su expresión más normal, al menos su segunda expresión más común.

— No seas pesimista, Magnus… — Casualmente el sacerdote de los Amakusa estaba lo suficientemente cerca de él para escucharlo. — Nosotros los Amakusa somos expertos en esconder a plena vista y pasar desapercibidos. —

Con todos luchando en una especie de formación amorfa que se retuerce, con El Guardián de la Biblioteca Prohibida siempre dentro, y los Amakusa moviéndose en grupos para dispersar y repeler a las Fuerzas de Agnese; El área de combate dividida en dos grandes zonas, esta épica batalla campal puede reducirse a un "Corre que te alcanzo", donde los papeles se intercambian dependiendo del número de aliados a tu alrededor.

— Si tan expertos son en moverse sin ser notados… — Stiyl saltó hacia atrás repeliendo a tres monjas con una llamarada tan grande como él mismo. Saiji cortó el suelo frente a él antes de saltar para crear una barrera temporal, una pared de guijarros y polvo; quedando espalda con espalda con el mago de fuego. — Seguro pueden esparcir cartas alrededor del edificio… — De su túnica, el pelirrojo entregó bastantes de sus cartas al líder Amakusa.

Tatemiya sonrió tomando las cartas, escondiéndolas en un bolsillo de sus pantalones cortos; ahora solo necesita entregar estas cartas a suficientes compañeros para crear un círculo mágico tan grande como todo el terreno del Santuario de Orsola.


Mientras el combate continúa en el patio, dentro de la iglesia; un resplandor intenso engulló a Orsola cuando ella terminó de descifrar el Libro de la Ley por "segunda vez", el resplandor engulle a la mujer de expresión y ademanes suaves, como si cayera sobre ella, pero brillara desde su interior. El resplandor fue como un faro, pero nadie sabía cómo interpretar algo tan repentino; y debido a que los únicos registros de personas descifrando Grimorios, son por lo general personas volviéndose locas, o efectos secundarios sólo visibles días o meses después… El corto resplandor toma a todos con la guardia baja.

— ¿O-Orsola…? — Index preguntó a la mujer, que en ese momento desprende un aura divina diferente a la de un ángel, ciertamente diferente a Gabriel.

— Está bien pequeña Index… déjalo en mis manos. — Orsola habló en su tono pacifico, maternal, pero su voz se sentía… diferente. Algo que la niña de cabello platinado no era capaz de procesar, la entonación es diferente, pero la voz de Orsola no ha cambiado nada.

Ella sacó el llavero que recibió pocas horas atrás, un llavero que Index reconoció al instante, y se molestó mucho al verlo en manos de otra mujer. Tomando el llavero en una mano y las llaves en la otra; la monja concentró magia en sus manos, y en el llavero. — Decrypt783. — Orsola arrancó el Varja cambió el flujo de la magia para expandir el Dorje a un tamaño manejable con una mano.

Tomando su ahora instrumento, su "amuleto", su arma; con su mano derecha, esta Orsola Aquinas golpea el libro que descifró dejándolo completamente en blanco… La bella mujer de piel tersa solo una vez se le conoce el uso de magia, cuando fue portadora del Bastón Loto. Orsola abandonó el bastón de 1.50 m por ser un arma que no iba con su personalidad, ni su dedicación; y cuando la pequeña pelirroja fue nombrada como monja, el bastón cambió de usuario… Pero desde que abandonó esa vara de metal con punta redondeada y una interpretación de serafín en la parte superior, la madura monja no demostró sus habilidades mágicas de nuevo…

No hasta este preciso momento, en que reveló su nombre mágico, por lo que su labor como evangelizadora y desencriptadora, la convierten en alguien que, de refinar su maná y convertirse en una manga hecha y derecha, sería casi tan peligrosa como una santa, al contar con un repertorio de información desencriptada y seguro de utilizar en su mente.

Con su estatus como maga "graduada" tras anunciar su nombre mágico, Orsola selló votos que no pronunció, como una promesa hecha a sí misma después de superar una situación, un aprendizaje desgastante y difícil de digerir… pero que la hace sentir completa. Y con todo estabilizado, ella transformó su Dorje, en una pulsera.

El repentino intenso resplandor debutó a todos en seco, especialmente a las fuerzas de Agnese, y aprovechando la confusión, los Amakusa aprovecharon de formar el círculo mágico para que Stiyl pueda llamar a Innocentius; no será el poder definitivo, pero será suficiente para amedrentar la moral de las monjas.

— Parece que funcionó después de todo, — Una mueca arrogante apareció en los labios del Dragón. — Orsola ha descifrado ese viejo libro y planea destruirlo… ¿Qué harán ahora, Católicas? — Una niña rubia con el cabello en dos trenzas lanzó cuatro saquitos que brillaron en diferentes colores y desarrollaron alas; y una rubia alta estrelló su rueda de madera en el suelo, haciéndola estallar contra los Amakusa.

Una reacción algo desesperada, "patadas de ahogado" como algunos dicen. Claro que esa reacción puso los cerebros de las monjas a trabajar, recomenzando el asalto contra los Amakusa. Innocentius apareció haciendo una gran entrada explosiva, y al tener que lidiar con un ser de fuego que se regenera mucho más rápido de lo que las fuerzas de Agnese pueden dañarlo, la única opción qué queda es atacar al invocador… quien está convenientemente rodeado de Amakusas, en una posición que le permite ver cualquier ataque de las monjas.


— Tsuchimikado… ¿Qué rayos fue eso…? — Kanzaki preguntó sin comprender lo que ocurrió realmente, solo sabiendo que muy probablemente será algo malo, si su experiencia durante Angel Fall tiene algo que contar.

— No~… El Libro de la Ley que se trajo aquí es falso. — Motoharu apareció detrás de la santa en una camisa hawaiana, ordenando sus pensamientos a cada paso. — El libro original está muy profundo en la biblioteca del Vaticano… Es posible que, por ser una réplica exacta, haya algún tipo de conexión por el sistema del Ídolo… no se que pudo generar esa luz, ni lo que significa. — Naturalmente a alguien como él, un agente múltiple leal a su corazón y no a las organizaciones a las que trabaja, no le gusta el "no saber qué ocurre" a su alrededor, ni los efectos de aquello que llegue a ocurrir.

El espía solo puede sentir que hay un patrón que no puede ver… Desde que Kamijou dejó Ciudad Academia por primera vez, eventos peculiares han estado ocurriendo alrededor del pelo pincho de su amigo; el mismo Kamijou es algo diferente, no es solo su amnesia, es casi como si aquel Touma de secundaria estuviera regresando… Desde su punto de vista, es casi como si su buen amigo estuviera caminando de regreso a aquellos no tan agradables momentos…

'¿Qué te hicieron realmente Kami-yan?' Si su puntiagudo amigo de algún modo regresa a… no; si esa parte reprimida de Kamijou resurge… 'Esto puede ser un problema… O algo muy divertido de presenciar' Motoharu… tiene fe en su amigo.

— ¿Por qué Orsola quería entrar en Ciudad Academia si estaba ya con ustedes? — Touma congeló el suelo y los pies de las católicas para hablar mejor con Tatemiya, el pelinegro está de poco a poco enfadándose más con la situación, a pesar de que no son sus emociones.

— Por el mismo motivo que ella nos pidió ayuda. — El sumo sacerdote de los Amakusa contestó lanzando un par de monjas con sus tajos de viento. — Ella desconfió en nuestra neutralidad, ¡somos Amakusa! nos basamos en permanecer anónimos, estar ocultos a plena vista. — Otro par de monjas fueron lanzadas muy lejos. — ¡Un poder como el que se cree que ese libro tiene no nos sirve! —

A menos de un kilómetro, la anterior Gran Sacerdotisa de los Amakusa sonrió con algo de ternura y nerviosismo, sintiendo gran alivio en su interior.

— ¿Y por qué mi ciudad? — Touma lleva bastante tiempo refiriéndose a Ciudad Academia como su ciudad; ¿está mal intentar mejorar y defender la ciudad donde ha vivido la mayor parte de su vida? A pesar de que no recuerda tanto realmente.

Itsuwa por allá, comentó que el guardián de la Biblioteca Prohibida vive dentro de Ciudad Academia, y que nuestra anterior sacerdotisa le respeta. — Tatemiya concluyó repeliendo el ataque de otra católica.


EXTRAS

¡Hola gente! ¿Todos bien?

¡El arco de Orsola está por acabar y yo sigo alterando las fechas y tiempos en la cronología! Pero nimodo, es lo que tiene hacer un Toma que si recibe "puntos de experiencia".

Por otro lado, las Reinas Telépatas siguen moviendo influencias y haciendo alianzas.

¿Quizás tardé un poco en subirla? Bueno, una disculpa si es así