Mientras los comensales del yate devoran unas estrellas de mar rellenas, pan campesino relleno de crema de almejas, o tacos de manatí; con la peor demostración de modales, en una habitación dentro del yate que está adaptada con una cama de dentista fija, y un gran foco de operaciones, la Coneja Amarilla está aún atada sufriendo los efectos post-extracción de su "Néctar".
— Bien… Ya están todos sintonizados; mi habilidad puede mantener los dispositivos corriendo un mes por sí mismos, y con la habilidad de Sou-chef será fácil recolectarlos. —
Finalmente Mami recobró la conciencia, jadeando con fuerza mientras se quita la mordaza. — Tu Néctar es sólo de rango "B" pero haré buen uso de el. — Chef cerró una cajita de aluminio con varios tubos de ensayo del Postre de Conejita. — ¡Ahora, a trabajar! —
Para el jefe cocinero, todo debe ser perfecto, tan perfecto como es posible, por lo que el descanso es algo que sólo existe después del trabajo, y todos deben dar el máximo de sí al trabajar, no importan huesos rotos o músculos atrofiados, si puedes trabajar, trabajas. Y Mami, con todo y su cuerpo debilitado y mareado, se levantó del asiento para seguir tambaleante a su jefe de regreso.
En la cocina, todo el personal está prácticamente corriendo de un lado a otro para tener todo listo para las más de 600 personas a bordo. — Aperitivo, abre uno de los tapetes para Sous-chef. — Chef ordenó entrando en la sala de recepción de ingredientes con un tiburón que tiene segundos de muerto… Al menos no hacen el procedimiento con el animal vivo.
Mami extendió uno de los rollos con jeringas vacías que el joven alto y gordo no tardó en clavar por toda la parte superior del tiburón de 2 metros, y de inmediato las jeringas comenzaron a llenarse con los fluidos del pescado. — Sous-Chef ¿Que están haciendo aquí? — Mami preguntó intrigada.
— Es Tao. — El joven contestó.
— Él necesita aprender a comunicarse, y rápido. — Chef se dirigió a Mami para que lo siguiera, y es que el nombre de Sous-Chef es Tao. — La habilidad de Sous-Chef es Aqua Navigator; le permite controlar la dirección de un líquido. —
— 5 días… eso es extraño. — Misaki dijo por teléfono.
— Lo único que se me ocurre es que Azazel y el Superintendente están detrás de esto… Pero no logro ver el por qué. — Touma respondió caminando con una bolsa de víveres de regreso a su departamento.
— A mí tampoco se me ocurre algo mejor, sobre todo por lo repentino de eso… ¿Qué hay de ella? — Misaki no está muy conforme con Index, pero entiende las circunstancias para que esté en la ciudad bajo cuidado de él.
— Index se lo tomó mal, pero ya se tranquilizó… — Touma suspiró decepcionado. — Y yo que quería una cita contigo mañana. —
— Jiji. Cariño, eso sería fabuloso~, pero el examen de rendimiento para el festival será ajetreado, en especial ahora que se rumorea que el 1.º participa. —
— Jejaja, Ya me imagino la cara de Yushi tras escuchar eso. — Ambos rieron un poco para cambiar de tema. — ¿Ayu fue a ver a las niñas? —
— Sí~ y se encontró con las dos amigas de Sakugawa de la Railgun. — El tono de Misaki al referirse a Misaka sigue siendo áspero, pero no tan molesto como lo era antes.
— Oh, entiendo… Y a mí me tocaba en la siguiente semana ¿Verdad? — Se supone que él es el padre biológico de las niñas, independientemente de su origen, pero no parece haber cumplido con su labor como debería… Pero ¿Quién y cómo se define eso? ¿Es el tiempo que el pelinegro pasa con ellas? ¿O es la convivencia y el aprendizaje?
— No te sientas mal, siempre podemos sacar a las niñas a un paseo nosotros tres… o cuatro si Index se agrega~. —
— Lo más probable… Pero, la verdad es que quiero pedirles un favor… — Touma cambió a otro tema igual de importante.
— ¿Es sobre lo que ocurre con Dark Matter y lo ocurrido con ese edificio? — Misaki se adelantó, teniendo una conexión mental tan fuerte entre los tres, son pocos los secretos que se pueden tener; es cuestión de tiempo para que las Reinas conozcan a Ryuujin.
— Sí~. Se supone que uno de los integrantes fue amigo mío, junto a la hermana de Yumiya-san, forman parte de su grupo… —
— Quieres asegurarte que todo esté bien con ellos ¿Verdad? — Misaki concluyó por él.
— Si~. — Touma contestó con un suspiro largo.
— Tranquilo~ Soy Reina de Tokiwadai, puedo hacer eso y más~ Pero… Quiero una buena remuneración~. — La voz de Misaki fue pícara en todo momento, sensual si se quiere.
— Cuenta conmigo-. — Touma fue interrumpido por dos chicas siendo molestadas por un grupo de delincuentes. — Perdona amor… tengo que dejarte. —
— ¡No hay problema~! ¡Nos vemos en una semana~! — Misaki colgó y Touma guardó su celular dejando los víveres detrás de un letrero en la banqueta, y se dispuso a interrumpir a los matones de turno. Las chicas eran delgadas y de la escuela femenina Eileen; una de cabello negro corto con las puntas curvadas hacia arriba, y la otra de cabello achocolatado sujeto en coletas esponjosas largas hasta la cintura.
Ciudad Academia, hora 1:34 pm, Distrito 13
— ¡Mamá Ayu! — Janie y Febrie recibieron a su segunda madre con alegría, llamando la atención de todos los otros niños, ganándose los celos de estos por tener no solo una, sino dos madres.
A pesar de que las niñas llevan 10 días viviendo en el orfanato junto a los otros niños, de los que solo tres tienen edades cercanas a ellas, las gemelas ya pulieron considerablemente su habla. Las niñas corrieron a recibir a su segunda madre, quien no tardó en abrazarlas, y detrás de Ayu, Ruiko y Kazari entraron en el kinder. — ¡Uiharu-nee! — Respingó Febrie. — ¡Saten-nee! — Continuó Janie.
— Hola Febrie, Janie. — Ruiko saludó sonriendo y agachándose a la altura de las niñas. — ¿Cómo han estado? —
— Estamos bien. — Febire contestó mientras Janie se acerca a Kazari.
— Hola Janie, ¿Quieren tú y tu hermana salir un rato con nosotras? — Kazari preguntó tan dulcemente como solo ella puede hacerlo; las gemelas asintieron con un pujido y corrieron con la directora Kazuko: Una mujer madura de cabello negro ondulado sujeto detrás de su cabeza; para avisar que saldrán con Mamá Ayu, Uiharu y Saten; justo después ambas corrieron de regreso.
— Volveremos antes del toque de queda. — Ayu confirmó a la directora para retirarse del instituto cuando ella accedió.
Kazuko Shigenomori es una mujer madura no más alta que Ayu y su metro setenta y dos, cabello ondulado negro y ojos cafés; ella comenzó su vida de educadora en dos diferentes centros para huérfanos, a ella nunca le gustó llamar a los niños "Child Error", pero fue en estos centros donde descubrió su pasión por los más pequeños, Pedagogía. Lo que aún no entiende la directora, es porque las niñas llevan el apellido "Kamijou"; ¿acaso ese revoltoso decidió dar su apellido a las niñas a modo de tutor? Independientemente de lo que Kazuko crea, las niñas son sanas y felices.
— Entonces, ¿Qué quieren hacer? — Ruiko preguntó a las gemelas, que no sueltan a Ayu.
— ¡Vamos a comer! — Janie y Febrie contestaron al mismo tiempo.
— ¡Oh! Conozco un buen lugar en el Distrito 5. — Ruiko saltó emocionada. — Y luego podemos ir a los parques del Distrito 9. — La pelinegra se agachó mirando a las gemelas con una sonrisa amplia. — Se rumorea que en uno de esos parques, si pides que te hagan un retrato, serás tratada como una modelo… —
— Bueno, alguien está emocionada. — Ayu comentó con una leve risita; Ruiko se avergonzó y miró a otro lado, Kazari usará esto para burlarse de su mejor amiga. — Entonces vamos a comer primero, tenemos todo el día.
Febrie y Janie vitorearon y las chicas tomaron un camino para dirigirse a un restaurante abierto cerca de una gran tienda de ropa; las chicas no esperaron mucho para ser atendidas por un mesero alto de unos 17 años. — Bienvenidas a Mariscada de Tomoka, ¿Listas para ordenar? — El chico sacó una tableta.
Ruiko pidió sashimi mientras Kazari pidió ceviche; las gemelas pidieron dedos de pescado y camarones empanizados para mezclar ambos platillos. — ¿Y para la hermosa? — El mesero cometió un gran error.
— ¡No coquetees con mamá Ayu! — Febrie exclamó llamando la atención de las mesas vecinas. — ¡Le diremos a papá y te irá mal! — Janie concluyó compartiendo el sentimiento de su hermana.
Uiharu se sorprendió con algo de pena por la reacción de las gemelas, mientras Ruiko rió ligeramente por lo repentino de su reacción, intentando no llamar más la atención ya que las mesas vecinas se callaron por un momento. — Jaja. Tráeme tacos de pulpo. — Ayu ignoró la insinuación. — Por cierto, Saten-chan, ¿Me ayudas con los vasos? —
Ruiko asintió, y ambas féminas dejaron a Kazari a cargo de las gemelas, que visto desde lejos, parecen niñas que van a la misma primaria. — Saten… Ruiko-chan; ¿Puedes ser sincera conmigo? — Ayu preguntó cuando se alejaron lo suficiente de la mesa. — ¿A ti y a Kazari-chan les gusta Touma? —
Ruiko se detuvo y casi palideció por la pregunta, incluso el tono suave de Ayu le dió un escalofrío a la nivel 0. — ¡Eh! Yo… —
Ambas llegaron a la barra de aguas naturales de sabor y Ayu no perdió tiempo en tomar 5 vasos de vidrio. — Está bien Ruiko, no te estoy juzgando… — La peli-chocolate encaró a la pelinegra con una expresión tranquila. — Lo que quiero es que seas sincera conmigo. Contigo misma… —
— Es que… — Ruiko se trabó sobándose el cuello suavemente… — No sé… Él es… ¿Atractivo? supongo. To-Kamijou-san es divertido… confiable… —
'Es esa persona que se puede admirar… Misaka-san también es admirable, pero… Sus maneras a veces son algo… Además que Touma-san sabe pedir ayuda, y reconocerla… O felicitarte…'
— Se que se tratan de nombre… — Ayu sirvió agua de naranja para las niñas con una sonrisa difusa; la telépata no puede leer mentes sin utilizar su habilidad, pero algunos pensamientos son muy fuertes. — ¿Te gusta Touma-chan? — Ayu sirvió jamaica para ella y para Kazari.
— Si~ Bueno… — Ruiko suspiró derrotada, realmente es difícil competir contra ESPERs de mayor nivel. — Yo… —
