Star Wars y la peste negra
Capítulo 4: Las ratas infectadas
Narrador Obi-Wan:
Al llegar al departamento de Satine, vimos que ella estaba haciendo la cena, bueno...al menos, poniendo la mesa, al verla que estaba tarareando un canto mandaloriano, no pude evitar sonreír y quedarme paralizado, tratando de admirar toda su belleza y contemplar cada uno de los sonidos de su voz angelical. Estaba tan concentrado en verla, que ni siquiera me fije en qué momento, ella volteó a vernos.
Satine: - ¿Maestro Kenobi, Fernanda? - eso, me sacó de mis pensamientos angelicales, pero recordé en seguida que Fernanda estaba aquí con nosotros; a lo que tuve, que aclararme la garganta y volteé a ver a Fernanda, la cual, ya me imaginaba que me estaba observando pero disimuló haberlo visto - Me da gusto verlos de nuevo, pero me pregunto ¿por qué vinieron los dos juntos? - me dijo viéndonos a ambos.
Fernanda: - Lamento haber venido sin avisar, Satine, pero tu querido caballero jedi...me ofreció cenar con ustedes - lo dijo levantando una ceja y sonriendo al mismo tiempo - pero si es mucha molestia, regresaré a tra... - la interrumpí abruptamente.
Obi-Wan: - No, no, no, no...Fer, yo te metí en esto, deja que yo aclare las cosas - Satine, volteó a verme confundida - duquesa, lamento haberla traído sin avisar, pero por cuestiones de que ella, se la ha pasado trabajando arduamente, sin comer ni descansar - ella, vio que Fernanda tenía ojeras y la cara casi demacrada, por la falta de sueño - por lo que, me tomé el atrevimiento de invitarla a cenar y a descansar - y al voltear a verla, le di una mirada de "lo siento, pero si no no iba a descansar jamás" y ella, lo tomó bien, para ser sincero...aunque me sentía mal, porque quería estar a solas con ella; para haber dejado pasar veinte años de estar lejos de ella, ella conoce muy bien, las cosas que me gustan y sobre todo, sabe como hacerme sentir más relajado, es como si hubiera tocado las estrellas cada vez que ella me consciente.
Satine: - ¡Ah, es por eso!, entonces, no es ninguna molestia, maestro Kenobi, Fer, querida, Obi-Wan, tiene razón...sabemos que es mucha presión y que estás intentando salvarnos a todos, pero no puedes excederte...también sé, que estás haciendo lo más posible por encontrar al responsable de todo esto, pero también eres humana y mientras estés en nuestra casa...eh, quiero...de..ecir - al decir nuestra casa, se puso nerviosa y yo, por igual porque eso era lo que me temía, sobre todo tratándose de ella - que Courusant, es nuestro hogar, a pesar de que yo viva en Mandalore, pero mientras tú estés aquí compartiendo un lugar con nosotros...nosotros te vamos a cuidar, así como tú cuidas de nosotros.
Fernanda: - (Ay, qué divertido es esto, ellos no tienen ni idea de que yo ya sé sobre su relación secreta; pero yo creo, que ya es tiempo de quitarnos las máscaras de la cara) Gracias, Satine y Obi-Wan, ¿pero les puedo pedir un favor? - preguntó tranquila, pero siento que ella ya intuyó algo.
Obi-Wan: - Lo que sea - dije seguro.
Fernanda: - ¿Podrían dejar de fingir que no son pareja, que a kilómetros puedo ver que aquí huele a romance? - al escuchar todo su comentario, nos quedamos paralizados y debo decir, que incluso sentí cómo mi rostro se puso rojo de la sinceridad de esta jovencita.
Obi-Wan: - Eh..eh...no sé, de qué me estás hablando Fernanda, la duquesa y yo, sólo somos amigos - y ella, nada más sonrió todavía más con una ceja levantada y cruzándose de brazos, ¡arrgg, Dios, con esta mujer no se puede fingir!
Fernanda: - Ajá, claro y puedo suponer que la duquesa, puso la mesa nada más para ella y para mí y que, ¿tú no vas a cenar Obi-Wan? - ambos nos miramos con pena, jamás pensé que fuéramos tan obvios - Si ustedes creen que me pueden engañar, pues se equivocaron de persona, desde hace una semana que vi un aura diferente entre ustedes dos, así es que no era de esperarse que pronto ambos estarían juntos - dijo volteando hacia el ventanal.
Satine: - Un momento, no era de esperarse, ¿ya...ya...lo sabías? - dijo viéndome preocupada.
Fernanda: - Anakin y yo, somos los únicos que nos dimos cuenta de cómo se comportaron los dos en el Corodell, yo nunca dejé de pensar en que ustedes seguían enamorados y siempre di fe, a que tarde o temprano ustedes iban a terminar juntos - dijo sonriendo y al terminar de decir eso, no sabía si estar feliz o angustiado por esa razón - ja, descuida Obi-Wan, ninguno de los dos va a revelar su secreto y menos, en estas circunstancias.
Satine: - ¿Por qué lo haces, Fer, por qué no delatarnos ante los demás, sabiendo que a pesar de amarnos estamos cometiendo un crimen? - sentí horrible cuando lo dijo, pero de alguna forma tenía razón, para los jedis formar lazos era casi, como crear un crimen, por eso tendríamos que escondernos.
Fernanda: - Porque yo considero, que el amor es la única forma de vencer esta guerra... - dijo volteando a vernos, recargándose en la ventana - ustedes los jedis, consideran al amor como una forma de pasarse al lado oscuro y una forma de traicionar a su código jedi...pero yo les dijo, amando y respetando, es la única forma con la que podrán terminar con toda violencia y sobre todo, con el odio que tiene el Universo.
Obi-Wan: - Perdona mi escepticismo, pero ¿cómo es como algo como el amor, puede destruir toda una guerra llena de odio y que lleva al lado oscuro - ella, giró sus ojos con sarcasmo y se acercó a nosotros sonriendo.
Fernanda: - Hombres de poca fe, que no tienen ni la menor idea de lo que en verdad significa el amor...Obi-Wan, estás iniciando una relación con el amor de tu vida y todavía no te das cuenta de lo que tienes, ¿por qué no le preguntas a ella, creo que ella sabe incluso un poco más sobre lo que hablo? - me quedé callado y volteé a ver a Satine, sabía que yo la amaba desde el inicio, pero me da miedo perderla - ¿Por qué crees que ha logrado mantener la paz entre los sistemas neutrales? No creo que el dinero le haya servido para calmarlos a todos, ¿o sí? El dinero se acaba, así como el fluir del agua o de la Fuerza, las cosas materiales se acaban, las flores, las casas, el agua incluso, nosotros tarde o temprano terminaremos muertos, en una tumba que se pudrirá con nosotros, sin ofender, pero es una realidad...y ¿saben qué es lo único que se quedará de toda esta amargura? - ambos estábamos callados y atentos a su lección - El amor, ni siquiera el odio es tan duradero como para rebasar el verdadero poder del amor, porque ése, ése si es poder de verdad, no para conquistar planetas enteros...bueno sí, pero no con guerra de violencia como la conocen, pero a lo que me refiero es a que ella por amor a su gente, es capaz de sacrificarse por salvarla de la violencia y eso, vale más que cualquier batalla ganada en una guerra, porque en una guerra hay odio inigualablemente, no importa de qué lado estés, para entrar en violencia siempre se necesitan dos y sobre todo, que ambos lados, siempre buscan los intereses de los que provocaron la guerra.
Obi-Wan: - Es cierto, pero nosotros estamos luchando en esta guerra por la paz - que es una buena contradicción, desde el punto de vista de Fernanda, que tiene mucha razón.
Fernanda: - Obi-Wan, ¿desde cuándo, una guerra trae paz? Lo único que provoca, es que la gente esté más alterada, con miedo, no te permite ver con claridad las cosas - eso último, no lo había pensado - están tan distraídos luchando contra droides, que ni siquiera se dan cuenta de hay muchos intereses por delante, aquí no hay ganador ni perdedor, todo aquél que esté luchando en una guerra, siempre sale perdiendo indefinidamente; por la cantidad de muertes que tienen no sólo de sus hombres en batalla, sino de la gente inocente que atacan, sus consciencias no quedan limpias, porque saben que se ha derramado toda la sangre posible, sino es que más y al final, se terminan dando cuenta, de todo lo que han hecho...porque el odio y el miedo, los ciega, no pueden ver con claridad, que hasta te puede terminar llevando a acabar con la vida de un ser querido sin darte cuenta, hasta que ya es tarde - me quedé pensando profundamente y abrí los ojos de verdad, no sólo físicamente, sino que finalmente comprendí lo que estamos haciendo, esta guerra nos está afectando a todos por completo que ya ni siquiera sabemos para quién luchamos - ustedes jedis, están luchando por una causa sin fin, que no los va a llevar a ningún sitio, más que a su propia destrucción.
Satine: - ¿Cómo...que destrucción? - preguntó tomando mi mano.
Fernanda: - ¿No lo ven?, esta guerra, fue hecha para distraer a los jedis de lo que hacen los sith - me quedé boquiabierto, no lo podía creer, toda una guerra para distraernos...¿cómo es eso posible? - y es tan real lo que digo, que es por eso que han perdido tantos miembros, Obi-Wan, ustedes no nacieron para luchar en una guerra, ni siquiera eran militares antes de todo esto - asentí triste - se les escogió precisamente, para que ustedes confiaran en sus tropas, para que a la mera hora, ellos fueran su perdición - ambos, abrimos los ojos con miedo de lo que oímos - no vean así, ¿acaso, nunca se preguntaron como por qué les llegó de la nada, un ejército y sin tener que pagarlo al principio? Los clones, son buenas personas, tienen sentimientos y anhelos, al igual que nosotros, pero la guerra no les permite verlo, porque para eso les sirven, para seguir órdenes que casi casi, parecen más droides que humanos, idénticos todos pero humanos y todavía cínicamente, los mandan a luchar como si fueran juguetes reemplazables de porcelana, que ni la porcelana es reemplazable, también se rompe - dijo seria y con algo de enojo, para hacernos ver, la gravedad del asunto; tiene razón, no me he puesto a pensar en que ellos también son humanos, al igual que nosotros, que no son droides que se pueden reparar para seguir luchando, ellos son de carne y hueso.
Obi-Wan: - ¡Diablos! ¿Cómo es que nunca me di cuenta de eso? - dije exasperado.
Fernanda: - Porque estás tan concentrado en la guerra, tratando de mantener tu plan en marcha para obtener la victoria, que no ves que estás arriesgando más vidas de lo que parece, incluyendo la tuya y en segundo lugar, estás tan adentrado en no crear lazos, según el código jedi, que no te das el lujo de pensar, que todos ustedes, necesitan ser queridos por alguien que los respete, nunca se habían dado cuenta de que las emociones naturales que ustedes tienen y sienten, al no ponerlas en práctica, los destruye por dentro - tomó aire - estoy de acuerdo, que el miedo, lleva al odio y el odio al sufrimiento, pero eso no quiere decir que ése es el final del camino - ambos la vimos confundidos - porque mientras haya amor...siempre habrá esperanza, de llegar a la redención, ya lo dijo nuestro Señor Jesucristo, todos somos hijos de Dios, seamos iguales o diferentes, lo que nos une es el poder del amor, que tarde o temprano, siempre nos jala; así como el poder del odio está siempre presente, para tentarnos y hacernos caer, a pesar de nuestros errores y desgracias, el amor es la vocecita que nos llama desde la oscuridad, para llegar a la luz de nuevo. Eso, es lo que no comprenden, ni los sith, ni los jedi todavía...pero los sith, saben que el amor es fuerte, que incluso niegan de su poder, porque le tienen miedo; porque no quieren aceptar, que lo que hacen está mal y matan a quien sea, para desquitarse de lo que no pueden ni podrán alcanzar a ser - ella, se fue acercando a nosotros lentamente, se quitó los guantes y nos tomó de la mano.
Satine: - El amor, es más fuerte de lo que parece - dijo con ciertas lágrimas.
Fernanda: - Es más fuerte, de lo que pudieran imaginarse...que es capaz, de derrumbar el muro más grueso y grande que se haya conocido y tan voraz, que es capaz de hacer cambiar de opinión a la mente más cerrada de un hombre o una mujer - y unió nuestras manos, al hablar, me di cuenta de que su voz se engrueso un poco, porque esa voz, sólo la escuchado en una sola persona.
Obi-Wan: - ¿Tú eres, la Diosa de la Creación, no es así? - ella, sin voltear a ver más que nuestras manos unidas, sonrió con satisfacción.
Fernanda: - Finalmente lo comprendiste, Obi-Wan Kenobi, te tardaste mucho tiempo en descubrir quien soy - dijo sonriendo como si nada, yo estaba confundido, tanto tiempo que nos habló sobre su "prima" y sus obras, que nunca me imaginé que la tuviéramos tan cerca y tan lejos a la vez - siempre tenemos que estar así, Obi-Wan, porque si nos presentamos así como somos desde el principio, lo único que buscarían, sería sacar ventaja de la guerra con nuestros poderes y nunca entenderían, el verdadero propósito del porqué vinimos...además, si hubieran sabido quiénes éramos desde el principio, jamás hubieran creído por los hechos y obras, sino por lo que representamos; seres extraordinarios, con capacidades inigualables, que todo el mundo desea obtener y que si fallamos, en ese momento, todo el mundo se decepcionaría y no serían capaces de entender, que no dependen de alguien para lograr que el bien salga adelante...sólo necesitan tener fe y amor en sus corazones - volvió a tomar nuestras manos unidas.
Satine: - ¿Cómo le hiciste? ¿Cómo es que de una niña tan linda, puede sacar una madurez tan grande, que puede hacer cambiar los corazones de los demás? - ella sonrió con ingenuidad, como cuando una niña está totalmente feliz.
Fernanda: - Los años te hacen crecer con el tiempo y más la pérdida de una familia - eso, no lo esperábamos - eso, más la fe que tengo en Dios, cuya voz utiliza mi boca para hablar, me permiten entrar en los corazones más necios y duros que existen en toda la galaxia, ahí tienes al Conde Dooku, de no ser porque Caspian habló con él, en este momento, habría diversas invasiones en todos los planetas - los dos, nos quedamos impresionados y sonreí por escucharla segura de sí misma - ahora, Obi-Wan y Satine, en base a lo que acaban de escuchar y de lo que me han visto hacer desde hace, 3 años, ¿ustedes creen que es posible, que el amor sea lo que termine con esta guerra? - al pensar en la pregunta, vi mi mano que estaba unida a la de ella, pensé en todos los momentos juntos que pasamos en Concordia, huyendo de todos los bandoleros que querían matarla y sentí que mi amor por ella, era lo que me mantenía en pie para salir adelante un día más, sin importarme el riesgo. Y en ningún momento, sentí correr dentro de mí, al lado oscuro, tal vez tenía razón y el amor, es algo más grande que el simple hecho de crear apegamientos.
Satine: - Sí - dijo segura, cuando volteamos a vernos a los ojos.
Obi-Wan: - Sí - yo también dije con seguridad y le apreté un poco más la mano.
Fernanda: - Muy bien, ustedes serán de las personas que nos ayuden a demostrar que todo es posible con amor - dijo volviendo a unir nuestras manos, para que ambos estuviéramos de frente y viéndonos a los ojos - su amor, es más grande de lo que parece y se sorprenderán de todo lo que pueden hacer con él, lo que el mal hace, es sólo alterar el orden y impide ver con claridad, porque sólo es una trampa para atacarnos los unos a los otros; pero el amor, es la fuerza que nos une en la desesperación, que nos permite respetarnos a pesar de los errores...sobre todo, que a pesar de que el odio se empeña por separarnos, siempre habrá una puerta o un camino para regresar a la libertad del amor, lo más importante que deben saber, es que a pesar de que el miedo del odio, termine con nuestras vidas, el amor siempre sobre saldrá...porque les dará un ejemplo a los demás y un soporte, para que de ahí todos se sostengan y sólo así, de uno sólo que sienta amor en su corazón, se irá expandiendo a todos los corazones y es lo único, que formara una resistencia ante las trampas del mal y a pesar de que puede matarnos a todo, tarde o temprano, las víctimas que sufren de las redes del odio, se darán cuenta que no tienen nada y que se quedarán con nada.
Obi-Wan: - Porque empezaron vacíos y terminarán vacíos - al ver el bello rostro de Satine, me di cuenta, que no estoy sólo, tengo una familia con mis amigos y mis seres queridos, sobre todo que al estar con ella, me siento en mi hogar; ahora, ya no tengo duda alguna, de que tenemos que cambiar nuestras leyes, ahora más que nunca.
Fernanda: - Exactamente, ahora, pregunto ¿Obi-Wan, tú amas a Satine con toda tu alma? - volteé a verlas con una sonrisa y sonreí más, al ver los ojos con lágrimas de mi alma gemela.
Obi-Wan: - Sí, con toda mi alma - su sonrisa se ensanchó todavía más y le cayeron más lágrimas a sus mejillas.
Fernanda: - Y tú, Satine, ¿amas a Obi-Wan, con todo lo que tienes en esta vida? - ella, asintió con éxtasis.
Satine: - Sí y mil veces sí, lo amo desde el primer momento que lo vi en Mandalore y lo seguiré amando hasta después de la muerte - ambos sonreímos con mucha felicidad y finalmente, después de años, sentí una paz abrumadora en mi alma.
Fernanda: - Pues como no soy sacerdote, no puedo declararlos marido y mujer - los tres reímos por la ironía de las cosas - pero sí puedo asegurarles, que voy a apoyar su relación hasta el final y que todo aquél que intente juzgarlos o lastimarlos, tendrá que vérselas conmigo primero para que después pueda decir todo lo que tenga que decir - Satine, me vio con alegría y me abrazó con fulgor.
Satine: - Gracias, gracias, por fin puedo disfrutar de estar contigo - la abracé con la misma euforia y la giré con energía, luego la dejé en el suelo y ambos, abrazamos a Fernanda.
Obi-Wan: - Gracias a ti por todo, de no ser por tu carisma e insistencia, jamás hubiéramos llegado hasta esto - y ambos, hicimos una reverencia en su presencia y ella, rió un poco cansada - le agradecemos, alteza - ella, respondió igual con una reverencia ligera y con elegancia.
Fernanda: - Oigan, pero no me vayan a estar llamando a cada rato, alteza...no me esforcé tanto, para que tuvieran la confianza de llamarme por como soy y no, por lo que represento nada más - dijo sonriendo levemente y ambos, accedimos a su petición.
(Durante toda la conversación)
Doctor Primus: - XX-34, ven acá - exigió sin remordimientos, mientras observaba el progreso de su epidemia en Courusant.
XX-34: - ¿Sí, doctor? - respondió tranquilo.
Doctor Primus: - ¿Qué reportan los droides de Courusant, sobre nuestro pequeño plan? - preguntó con disgusto.
XX-34: - Según los datos, durante una semana, la gran mayoría de los habitantes de Courusant, se han mantenido en cuarentena - la noticia, no le agradó para nada al doctor - pero, resumen que cerca de la mitad, de toda la población está enferma y en mal estado - de alguna forma, eso lo calmó algo.
Doctor Primus: - Eso no es suficiente, el hombre que lastimó a mi hija, puede estar en cualquier parte de la galaxia y si no lo elimino, podría lastimar a más de los nuestros - dijo serio y enojado a la vez, formando en su cabeza cómo llevar a cabo la segunda parte de su plan.
XX-34: - Lamentablemente, los Tres Dioses, ya tienen asegurados cada uno de los planetas de la galaxia, incluso tienen más vigilancia de lo normal, cualquier movimiento externo de nuestra parte...podría arriesgar más la misión, doctor, ya que ellos ya están más al pendiente de que no haya intrusos o movimientos fuera de lo usual - el doctor, suspiró con agitación - lo único que se podría hacer, es alterar todavía más la poca estabilidad que hay en Courusant, para después movernos hacia los otros planetas.
Doctor Primus: - Lo sé, pero tampoco, puedo arriesgarme a perder todo mi material en un sólo planeta - dijo desesperado - esa Fernanda Sánchez, junto con sus otros amigos, me están colmando la paciencia...son más rápidos de lo que parecen - pero justo en eso, se le ocurrió una idea - XX-34, manda a la ratas de inmediato a Courusant.
XX-34: - Doctor, sólo tenemos una cuarta parte de la ratas procesadas, no serían suficientes para contaminar a todos los habitantes del planeta - Primus, volteó enojado e impaciente, por la terquedad del droide.
Doctor Primus: - NO TE ESTOY PIDIENDO TU OPINIÓN, además yo sé lo que hago, sé que a penas tenemos una parte de las ratas con el virus puesto, pero las pulgas se dispersan de un lado a otro sin cesar, hasta que se les agota su tiempo de vida...al igual que cuando los síntomas de la peste negra, se terminen de desarrollar en los cuerpos de la gente, se esparcirá por otras parte de la ciudad y así, con la desesperación de descubrir el origen de su problema, más atender a los millones de pacientes que hay allá, permitirá que todo el mundo en la galaxia, esté tan preocupado por esos detalles, que ni siquiera tendrán tiempo de concentrarse en nada más - dijo sonriendo malévolamente.
XX-34: - Entiendo, doctor, meteré la carga rápidamente...e iré con varias provisiones de comida, para hacer parecer que estamos mandando ayuda - él, asintió con seriedad - ya que ahora, están registrando todos los contenidos de las cajas, para cerciorarse que no hayan productos contaminados...por fortuna, la nave tiene una salida frontal, que nos permitirá sacar a las ratas sin tener que pasar por el registro - mientras decía eso, el doctor no pudo evitar sonreír con malicia, justo antes de que se fuera el droide, llegó un mensaje importante - ¿doctor?
Doctor Primus: - ¿¡Qué!?
XX-34: - Llama el senador Fliss, quiere hablar con usted inmediatamente sobre el avance del proyecto - la cara del Doctor Primus, se puso de nuevo serio, pero con un toque de preocupación, el congresista, por fuera es un hombre caritativo y eficiente, pero por dentro es un hombre malvado y ambicioso, que exige demasiado la perfección de las cosas...a lo que, si pide resultados, resultados es lo que debe escuchar para que siga invirtiendo en su causa. Cuando se enteró de la posibilidad, de la destrucción masiva de los seres extraterrestres, le entró un interés muy fuerte, que no pudo rechazar su oferta. El congresista, es el mayor y único, accionista que apoya los ideales de Primus, pero no por el hecho de apoyar la venganza de su hija, sino para asegurarse que ninguno de los invasores, entre de nuevo a la Tierra.
Doctor Primus: - Gracias, puedes retirarte y haz lo que te pedí - el droide se fue y él, contestó la llamada - ¿Congresista Fliss? - hizo una pausa, para escuchar la demanda del hombre en el teléfono - Sí, ya estamos por iniciar la fase 2.
(De regreso a Courusant, en el cuarto de huéspedes con Fernanda)
XX: - Los de su clase son débiles, pequeña - dijo azotando otra vez a una jovencita con un látigo, cuyo rostro, no se podía identificar por estar debajo de una máscara - pero, de esa forma, me sirven para desquitar mi coraje - la imagen, proyectaba un lugar oscuro y silencioso, lo único que se escuchaba, era el sonido del látigo lastimando a la joven y después, la imagen cambió a un lugar rocoso, que contenía todas o la mayoría de las herramientas, de la Santa Inquisición.
x: - ¡DOCTOR!, Salve a mi hija se lo ruego - la imagen cambió en un hospital, un hombre desesperado con su hija toda herida, que estaba al borde de la muerte...ya no había nada que hacer, pero el hombre, todavía tenía la desesperación y la esperanza de salvarla. Después, volvió a cambiar la imagen, a una investigación después de la autopsia, el rostro del hombre no se observaba todavía, pero sí podía percibir su enojo y su odio - descuida hija, pronto todos los que te causaron daño, pagarán por lo que te hicieron.
Fernanda: - ¡NO! - gritó despertándose de la pesadilla, al darse cuenta de que estaba de regreso en el cuarto de huéspedes de Satine, se puso a pensar en la relación que tiene su visión con lo que tiene que ver ahorita - Tal vez, esta enfermedad...tiene que ver con una venganza - en eso, llegaron corriendo Obi-Wan y Satine de su cuarto.
Obi-Wan: - Fernanda, ¿qué pasó? - preguntó angustiado.
Fernanda: - Tuve...tuve, una visión, que posiblemente, tenga que ver con el origen de esta crisis - dijo cansada pero agitada a la vez.
Obi-Wan: - ¿En serio? - pausó por un momento, para tratar de analizar lo que dijo - ¿Cómo, a...a qué te refieres? - preguntó angustiado.
Fernanda: - Tal parece, que todo esto fue producido por una venganza - dijo volviendo a recostarse, Satine le ofreció su vaso de agua, que estaba en su buró.
Satine: - ¿Una venganza? - dijo espantada - ¿Pero quién y de quién quiere vengarse? - preguntó algo molesta, ya suficiente uno tenía, con las dichosas "venganzas" entre mundos.
Fernanda: - Eso, todavía no lo sé, pero sí sé, que tiene que ver con la Edad Media...porque, en la visión, pude apreciar a un hombre que torturaba a una niña o jovencita, con los instrumentos que se usaban en la Santa Inquisición...luego, vi a un hombre que lloraba porque la salvaran, tal parece que la joven, no sobrevivió, porque al final, vi que el hombre decía que pronto, los que le causaron daño, pagarían por lastimarla.
Obi-Wan: - Pero, ¿eso qué tiene que ver con nosotros? Nadie, conoce las técnicas de tortura que usaban en ese tiempo, en la Tierra...según lo que estoy entendiendo - Fernanda, asintió concordando con él.
Fernanda: - No lo sé todavía, pero al menos, ya es una pista más concisa para saber en dónde buscar y poder relacionarlo con un crimen no resuelto...por lo que veo, esta dichosa venganza, se trata de hacer justicia, ante un crimen que no se resolvió lamentablemente...pero seguramente, algo tiene que ver con nosotros o la gente de aquí, por lo que se atrevió este hombre a crear una plaga como esta - dijo pensando - debe haber algún lugar aquí, donde esté escondido alguna cueva secreta, donde pudieran hacer torturas - todavía no puedo sacar conclusiones fijas, no tengo pistas claras todavía, pero puede servirme de algo - en eso, sonó el comunicador de Fernanda - aquí Fernanda, ¿qué sucede?
Rex: - General, hay un problema - ella, giró los ojos con molestia - al parecer, hay enfermos en la zona este de la ciudad, cerca de los orfanatos - ella, abrió los ojos con miedo y desesperación.
Fernanda: - ¿¡QUÉ!? ¿Pero cómo es posible? Si a todos los enfermos, los hemos aislado en la zona central, para evitar la esparción del virus - dijo levantándose y vistiéndose con su traje protector, Obi-Wan y Satine, hicieron lo mismo.
Rex: - No lo sé, general - dijo preocupado - pero estuvimos haciendo inspección y de repente, varios de los ciudadanos empezaron a toser con brusquedad, así como varios de mis hombres y del comandante Wolff.
Fernanda: - Ok, Rex, no sé muevan, que la gente no se acerque y que nadie se quite ni el cubre-bocas o el traje protector...puede ser, que la sepa se haya mutado y ahora, corramos el peligro de que se haya vuelto aéreo - dijo con seriedad, tratando de mantener la calma, pero por dentro, temblaba de miedo.
Obi-Wan: - ¿De verdad, ya empeoró la situación? - dijo angustiado.
Fernanda: - No lo sé, Obi-Wan, pero hay algo seguro, que este señor, no está dispuesto a detenerse ante nada, hasta obtener su venganza, de quien sea que se quiera vengar...y a lo que conmueve, es que es capaz de atacarnos hasta con las uñas y los cabellos y no descansará hasta obtener lo que quiere - y con eso, los tres salieron en busca de la causa, de la siguiente parte del martirio.
