Hola a todos! He aquí Tsubasa y yo traemos un nuevo capítulo de esta historia. Ufff la cosas empiezan a ser complicadas para nuestros héroes… y para mí también no miento jeje. Como sea, esperamos que les guste y vaya que muchas cosas se vienen, así que prepárense mentalmente, y los sádicos que esperan castigos ya casi llegan, así que sin más qué decir… COMENZAMOS!
….
Capítulo 14.
Planes inesperados.
Zoe se había despertado temprano, no quería ir a la escuela pero tampoco podía simplemente quedarse escondida en el barco toda la vida, así que se dedicó a estudiar mientras tanto. Escuchó que alguien subía a cubierta y vio a Luka que bostezaba y se rascaba debajo de la camiseta. Ella sonrió y desvió la mirada un poco sonrojada ante la muestra de piel que había visto.
-Buen día, Luka.
-Ah, buen día Zoe.- le sonrió algo incómodo.
-No parece que hayas pasado una buena noche. ¿Todo bien?
-Sí, todo bien.- respondió de inmediato. Por supuesto que nada estaba bien. Su estúpido corazón estaba comenzando a crear una melodía con el nombre de Zoe. No es que ya hubiese olvidado a Bridgette, eran amigos y siempre pensó que un día podrían volver a ser novios, más ayer se dio cuenta que se estuvo engañando todo este tiempo y ahora le resultaba un poco incómodo saber que Zoe estaba en el mismo lugar que él, durmiendo a un camarote de distancia...
«Sabes siempre estar en control Luka, no pienses las cosas de más, ni siquiera sabes si Zoe podría a sentir algo por ti así que como diría mamá: Baja el ancla»
Notó que ella le miraba con una sonrisa, una sonrisa dulce y sincera y su corazón saltó chocando contra su pecho.
-¿No vas a la escuela?- preguntó curiosa y él respondió alzando sus hombros.
-No de forma convencional.- tomó su guitarra para intentar distraerse un poco.- Me mandan las lecciones en línea y presento un examen cada semana con lo aprendido, aunque voy demasiado adelantado.
-¿Y por qué no vas a la escuela como Juleka?
-Digamos que me aburro en clases.- se sentó a su lado recordando sus primeros años de escuela.- Siempre terminaba antes las cosas y por eso ocupaba mi tiempo extra escribiendo notas o melodías. A los maestros no les hacía gracia y eso molestaba a mi madre. Una vez una profesora rompió mi libreta porque terminé mis notas y me puse a escribir una canción, esa fue la gota que derramó el vaso y mi madre no se quedó callada.- dijo recordando como su madre le gritó a la profesora y el director:
'Si termina sus deberes no le veo lo malo a que dibuje o escriba lo que quiera. ¡NADIE DEBE OPRIMIR LA CREATIVIDAD DE UN NIÑO Y MENOS DE MI NIÑO SABANDIJAS!'
Ese día la escuela perdió a un estudiante brillante y la oportunidad de ir a las nacionales de matemáticas, su madre no se tocó el corazón cuando le rogaron que lo devolvieran a la escuela.
-Desde entonces mi madre decidió que, puesto que era más listo que el promedio, podría tomar clases en el barco sin que nadie me dijese qué hacer.
-Vaya, admito que me da algo de envidia. Entonces… ¿puedes ayudarme a entender matemáticas? Las ecuaciones no me entran con nada y los métodos de la señorita Mendeleiev son confusos.- se acercó a Luka con la tableta en mano pero apenas y Luka sintió su espacio comprometido se levantó de un salto.
-Acabo de recordar que debo hacer algo. ¿Estaría bien si te explico más tarde?- Zoe asintió, ignorando la leve punzada que sintió cuando este se levantó de forma tan abrupta.
-Vale, es una cita, digo, una cita de estudio.- Luka rio un poco, tenía que admitir que era adorable y…
-Hola hijo.- los dos voltearon y vieron a la estrella Jagged Stone vistiendo un atuendo de abrigo, gafas y sombrero negro.- ¿Me echas una mano?
-¡Papá!- Luka se acercó a su padre que comenzó a quitarse su disfraz.
-No te puedes creer la locura que he tenido que pasar para salir a verlos. ¡Dios, que me estoy asando!
-¿Cómo saliste del hotel?
-Tuve que salir disfrazado. No sabes como la hay de reporteros que buscan la exclusiva de la hija del alcalde.- Zoe desvió la mirada incómoda.- El ambiente en ese lugar es tan sofocante como este atuendo, ¡hasta tuve que hacer pasar a Fang como un equipaje de mano!- el cocodrilo estaba abajo, entretenido en salir y entrar en el Sena a su antojo.- Necesito un lugar donde pueda estar tranquilo y componer mis próximas canciones.
-Bueno, ya sabes que eso depende de mamá.
-¡Y ni loca pienso aceptarlo!- gritó Anarka que recién regresaba del mercado.- Jagged Stone, si crees que vamos a vivir en el mismo techo estás pero que bien operado de la cabeza.
-Nanarki, por favor, pido asilo tras una desesperada huida.- rogó hincándose en el suelo y con las manos unidas.
-Mamá, ¿por qué no le dejas quedarse? Después de todo tenemos espacio en el barco.- Anarka vio a su hijo a punto de refutar pero al final no pudo y gruñó masticando las palabras entre dientes.
-Bien. Pero sólo será por un tiempo, ¡pero ayudará en las labores del hogar si es que quiere vivir aquí!- dijo marchándose al interior del barco y dejándolos solos. Zoe miraba la escena divertida pero a la vez incómoda. Todavía una parte de ella se sentía culpable por no haber previsto lo de Chloe o lo que su padrastro y madre estaban haciendo con Ladybug y Chat Noir… un mensaje le sacó de sus pensamientos y al ver de quién era no sabía si sonreír o no. Su padrastro era el único que no dejaba de comunicarse con ella, ni su madre o hermana parecía siquiera importarles… ¿cuándo sí? Ni siquiera su padre la había llamado desde que vino a vivir a Francia. El señor Bourgeois le preguntaba cómo estaba, si había comido bien, entre otras cosas dándole un sentimiento de calidez y cariño por esa persona. Le escribió que estaba bien, que ya había desayunado, que estaba estudiando y que esa tarde iría a los ensayos del desfile.
¿Entiendes todo? ¿Te gustaría un tutor para tus clases?
No gracias, puedo arreglármelas sola, además no es como si nunca fuese a regresar. Me gustaría intentar volver mañana.
Si necesitas algo házmelo saber.
Por supuesto, muchas gracias.
El alcalde vio los mensajes de Zoe, tenía un par de emoticones para animarle pero eran cortos. Le preocupaba que Zoe quisiera regresar al instituto por lo sucedido. Quizás debiera mandarle un guardaespaldas, pero también tenía un problema con Chloe que no parecía siquiera querer salir, al contrario, se había acomodado bien en su nueva recámara con montones de revistas de moda y su celular. No podía dejar las cosas así, se acercó a Audrey que había permanecido inmutable en el elegante comedor mientras revisaba en una tableta su próximo artículo de moda.
-Cariño, he estado pensando que sería bueno que Chloe regresase al instituto.
-¿Qué? ¿Por qué consideras siquiera eso?- preguntó como si este hubiese dicho algo estúpido.- ¿No ves cómo está afuera? Los reporteros se la comerían viva.
-Puedo contratar a un guardaespaldas, pero… si Chloe sigue ocultándose en el hotel, la gente creerá que de verdad es culpable y eso pondría en duda todo lo que hemos dicho para desmentirlo.- Audrey suspiró con ceño fruncido y se levantó de su asiento.
-Bien, haz lo que quieras. Sinceramente no me importa, pero si vuelve a ensuciar el nombre de esta familia de verdad la enviaré lejos esta vez.
-Claro, claro que sí mi amor, lo que tú digas.- le dio la razón y cuando ella se fue suspiró con pesar. Audrey nunca había sido del todo amorosa pero sabía cuándo estaba de verdad enojada, no por los constantes gritos o amenazas de despido, no, eso ni siquiera era la media de su molestia, esa ira se iba acumulando poco a poco y sabía muy bien que si Chloe hacía algo más estallaría como un globo en su cara y no quería que Audrey le dijese algo que de verdad no sentía y que pudiese lastimarla. También sabía que sus palabras no iban en balde. Si Chloe hacía algo más estaba seguro que Audrey quería enviarla a un internado al otro lado del mundo. Necesitaba que todo volviese a la normalidad, pero hasta él sabía que lo más probable era que nunca fuese a pasar.
…
Félix entró al baño jalando a Nino, un par de chicos estaban allí y apenas vieron al rubio este los fulminó con la mirada.
-Fuera, AHORA.- los dos chicos obedecieron y salieron corriendo del lugar. Félix entonces miró a su amigo que había permanecido con la mirada abajo todo el tiempo.- Muy bien, habla.
-No sé de qué quieres que hable.
-Bridgette, tu mentira de estar en los casilleros, y el por qué le diste esa puñalada.
-No dije ninguna mentira y no sé por qué estamos aquí, debemos ir a clases, la campana va a sonar.- dijo intentando pasarlo pero Félix no le dejó.
-¿Y desde cuándo te interesan las clases? ¿Sabes lo que hiciste? A Bridgette ahora la creen una terrorista y la han expulsado. Y todavía me vengo enterando sobre lo que fueron a hacer a la cafetería, lanzando huevos y amenazas. Habla ahora Nino, porque créeme que no quieres verme más enojado de lo que ya estoy.- el moreno no parecía dispuesto a hablar, o siquiera a mirarlo y eso comenzaba a exasperarlo.- Muy bien, no me dejas otra opción. Medidas desesperadas requieren de soluciones desesperadas.- dijo tomando su celular.
-Espera, ¿qué vas a hacer?
-Voy a enviar un video al chat escolar.- Nino de inmediato se enderezó.
-No lo harías… no ESE video.
-¿Quieres probarme?- dijo poniendo la pantalla ante sus ojos para que viese que no estaba jugando.- Dime ahora qué pasó o todo el mundo sabrá que eres fanático de bandas coreanas y hasta te pones su mercancía, incluyendo las diademas de corazones.
-¡NOOOOO! Félix, ¡ten piedad!- se arrodilló tomando sus piernas pero el rubio no estaba para sutilezas.
-Habla. O todo el mundo sabrá quién es tu bias.
-E-E-Es que no puedo.- vencido se apoyó en el suelo casi a punto de llorar.- Si te digo algo ella podría matar a mi familia.
-¿Quién?
-Mort Rouge…- Félix se sorprendió y se arrodilló frente a su amigo para tomarlo de los hombros y que este le viera y Nino comenzó a soltar todo lo que tenía atorado en su pecho.- Mort Rouge vino el día del evento, me atrapó cuando estaba solo y me amenazó diciendo que si no dejaba que Lila se saliera con la suya mataría a mis padres y hermanito… no podía dejar que eso pasara, Félix. Y también amenazó a Alya cuando estaba a punto de revelar la verdad sobre las mentiras de Lila. Nos tiene en la mira y amarrados a su malvado meñique rojo.
Félix apretó la mandíbula furioso. Esa mujer había hecho de las suyas y les había dado un revés del que no se recuperarían. Nino entonces se levantó primero.
-Lo siento, Félix. No quiero ponerte en peligro, no quiero que digas o hagas algo. Si ella sabe que te dije de seguro cumplirá su promesa y también te lastimará. Sólo has como que no escuchaste nada.- iba a salir del baño pero Félix se interpuso y cerró con seguro la puerta.
-No, yo te puedo proteger. Sólo tienes que confiar en mí tal y como hiciste cuando me dijiste que eras Carapace.- Nino comenzó a negar con la cabeza.
-No viejo, ni con tu súper sistema de seguridad podrás protegerme a mí y a tu familia y no tengo un miraculous. ¿Ya viste además lo que esa loca puede hacerles a Ladybug y Chat Noir? Nadie puede detenerla.
-¡¿Quién dijo que te protegería así?!- preguntó gritando y fue que dejó salir a Plagg.- Plagg, Transfórmame.- en un segundo apareció Chat Noir frente a Nino.- Puedo protegerte de otras formas.
Nino quedó con la boca abierta y su cerebro tardó en reconectarse nuevamente y al fin poder ligar algunas palabras.
-Vale. Te escucho.
Entraron al salón en el último segundo, incluso la señorita Bustier se veía extrañada ya que Félix siempre estaba en el salón cuando llegaba. La profesora se acercó a sus alumnos con una expresión calculadora tras lo que el director le había dicho esa mañana.
-Buenos días chicos, quisiera aprovechar estos momentos para hablar un momento con ustedes. Como ustedes deben saber lo que hicieron a la cafetería de la esquina no fue nada agradable. Por eso los implicados serán castigados después de clases con limpiar la escuela.- todos comenzaron a quejarse, los únicos que no lo hacían eran Félix, Nino, Alya y Lila que apretó sus labios en claro disgusto.- Suficiente. No pueden hacerle eso a su compañera. ¿Es que acaso no les da vergüenza?
-Ella ya ni es nuestra compañera.- escupió Alix con desprecio pero la profesora se cruzó de brazos.
-Yo no diría eso. La policía vino hoy temprano.- dijo captando la atención de los presentes.- Al parecer alguien manipuló las botellas que Bridgette trajo y encontraron varias huellas digitales que no correspondían a las de ella, por lo que abrirán una investigación y en los próximos días se les llamará a sus padres para su consentimiento en la toma de sus huellas digitales.
-¿Nuestras huellas digitales?- preguntó Iván confundido y Mylene también habló.
-¿Creen que fue un estudiante?
-Es lo que quieren averiguar. Por ello a partir de mañana su compañera regresará a clases y espero que todos se disculpen.- algunos parecían más que contrariados ante lo que les acababa de comunicar, tanto que nadie notó a Lila que comenzó a morder la uña de su pulgar y envió un mensaje rápido a su nueva socia por debajo de la mesa.
La policía vino a la escuela. Si descubren que fui yo la que hizo lo de las botellas estoy acabada.
Esperó un momento y pronto recibió su respuesta.
No te preocupes por ello, encanto. Tu hada madrina se encargará de todo.
Envió el mensaje con el emoticón de un hada. Haciendo sentir más segura a Lila. Luego recibió otro mensaje de ella.
Por cierto, necesito que traigas de camino lo siguiente en la lista si quieres que termine tu vestido lo más pronto posible.
Lila ocultó su sonrisa tras su mano. Mort Rouge era fantástica, le había dado un miraculous, el cual no tenía idea ni le importaba cómo lo consiguió, le escuchaba, hablaban mal sobre Ladybug y la idiota de Bridgette, y también estaba dispuesta a hacerla quedar bien ante todos. Era fantástica, no tenía que ver con Shadow Moth que no le había contactado desde hacía meses. Y ella sí quería ver sufrir a los héroes.
Otro mensaje llegó.
Suerte con lo de hoy, cariño. Lo harás fantástico.
Claro que lo haría fantástico. No podía aguardar a que la escuela terminase.
…
Decidió tomarse un descanso y se dejó caer en la cama con el teléfono en la oreja.
-Te lo juro Kagami, no sé qué hacer. No quisiera regresar pero al mismo tiempo no quiero dejar a mis amigos atrás.
-Y tampoco a Félix, supongo.- dijo Kagami con una media sonrisa. La japonesa había pedido permiso para atender la llamada y bueno, igualmente ya había resuelto el problema de algebra que el profesor puso en la pizarra.
-¡Exacto! Me encanta Félix, incluso en estos días se ha comportado de lo más amable conmigo y quisiera pensar que al fin estoy logrando algo, pero Lila sigue poniendo minas en cada paso que doy que no me siento segura en la escuela. Pero tampoco quiero darle la satisfacción.
Kagami lo pensó, la verdad era que ella tampoco querría darle la satisfacción a una perra como ella, sin embargo a diferencia de Bridgette que era un malvavisco rosa, Lila no tenía una pizca de consideración por otros que no fuesen ella y seguro que la destruiría. Lo mejor sería guardar distancia y atacar desde allí.
-Te entiendo, sin embargo debes pensar en lo siguiente Bridgette, ¿qué ganarías estando en el mismo campo de batalla de Lila? Tal como me cuentas ahora ella tiene a toda la escuela en su mano, no sabes en quién confiar además de nosotros tus amigos, y es tan buena mintiendo que hasta los directivos la tienen en alta estima.
-Eh… bueno, no lo sé.- su mechón comenzó a moverse de un lado a otro mientras pensaba.- Pero debo hacer algo, es decir, debe haber una forma…
-Bridgette, no podrás vencerla en su territorio.- le cortó.- La única forma será retroceder y buscar otro ángulo de batalla. Incluso las más grandes batallas se ganan a distancia.
-Vaya, qué profundo.
-Mi madre me leyó el Arte de la Guerra desde pequeña. Te prestaré el libro para que lo leas.
-Gracias, me gustaría mucho. Oh, cierto, debo ir esta tarde con el señor Agreste a discutir lo del desfile.
-Te deseo suerte. Y si necesitas hablar… por favor hazlo cuando salga de clases.
-Jeje, lo siento. Muchas gracias Kagami, eres genial.
Colgó y Kagami pensó en lo que Bridgette había estado pasando. Esa chica Lila era de lo peor. No podía creer que alguien así existiese de verdad y no fuese una villana de película. Si Bridgette necesitaba apoyo estaría dispuesta a ayudarle.
-Creo que le dejaré el libro esta tarde.- se dijo haciendo una nota mental.
Mientras tanto, muy lejos de allí en el apartamento de la familia Rossi, alguien aprovechaba la soledad del lugar tomando una taza de té y leyendo su libro favorito, El Arte de la Guerra. Sonrió ampliamente y dio vuelta a la página.
…
La campana del receso al fin sonó. Algunos hablaban sobre la investigación, otros parecían ansiosos ya que eso demostraría su errado juicio sobre su compañera, más otros como Lila estaban demasiado tranquilos.
-Lila, ¿tú qué opinas de esto? ¿Crees que la policía arrestará al culpable?
-Sé que la policía hará un trabajo correcto ya que estoy más que segura que Bridgette sigue siendo culpable, ojala esto le ayude a recapacitar.- dijo con una seguridad férrea que asombró a todos. Félix al escucharla se mantuvo en silencio pero atento.- Es decir, sus cosas estaban en su casillero, no creo que alguien haya podido forzar el casillero además… Nino dijo que estuvo allí casi todo el tiempo, ¿verdad Nino?- todos miraron al moreno que así como Alya apenas y había levantado la cabeza de su mesa. Las manos del DJ comenzaron a temblar. Desvió la vista y antes de decir algo que terminase por ser contraproducente, Félix intervino.
-Como él dijo, estuvo CASI todo el tiempo en el lugar. Pero dejaremos que la policía sea quien revele las pistas, después de todo, ellos ya averiguarán quien fue el culpable en dado caso.
-Sí, eso es verdad.- dijo Max como siempre de forma analítica.- Si hay un culpable este será atrapado y expulsado por lo sucedido.
-Sí, es verdad.- asintió Kim.
-Nino, vamos.- le instó Félix a salir del salón, ese asintió y los dos salieron rápidamente aunque el moreno le dedicó una mirada llena de culpa a su novia que se quedó atrás.
-No me hace nada de gracia que Bridgette regrese.- dijo Allegra.- Lila tiene razón, Bridgette estuvo por completo resentida por lo de los accesorios y es la única que pudo hacer todo eso.
-Pero igual pudo ser una mala broma de alguien más.- dijo Mylene intentando reflexionar sobre ello pero Allegra giró su rostro de forma despectiva.
-No es bueno confiarse en ella. Si llegamos a creerle de seguro hará otra de las suyas. No podemos hacer eso.
Alya apretó los dientes y sus manos en el escritorio. Aguantó las ganas de llorar y de gritarle a Allegra lo idiota que estaba siendo, pero también furiosa por su propia estupidez ya que de no haber hecho la investigación ella estaría igualmente de lado de Lila y lanzando basura a Bridgette, la chica que recordaba el cumpleaños de todos, la que siempre sonreía, y siembre ayudaba a quien de verdad lo necesitaba aunque fuese de una forma algo loca. ¡Quería decir que todo era una trampa de Lila! Pero la seguridad de su familia le hizo callar. Lila se apoyó en su mesa y le sonrió ampliamente.
-Vamos todas a la cafería a comer algo, Alya. Se nota que lo necesitas, te ves algo pálida.
La morena se mordió los labios hasta casi sangrar para no escupirle sus verdades. No tenía hambre, sólo quería vomitar.
…
Félix había intentado comunicarse con su otro yo para informarle sobre lo sucedido pero este no respondía. Al contrario, sonaba un mensaje de Fuera de Servicio.
-Viejo, ¿crees que esté bien?- preguntó Nino ya enterado de la situación.
-No lo sé. Pero ya me estoy poniendo nervioso.- Nino miraba a Félix con una nueva luz. Su amigo, su siempre serio amigo y un tanto malhumorado era Chat Noir, el héroe de cuero negro que decía chistes de gato; y Bridgette, la dulce y exageradamente entusiasta chica era Ladybug, la valiente e ingeniosa heroína. Quería preguntarle tantas cosas…
-¡CHICOS! Me alegra verlos aquí.- Claude apareció detrás de ellos rodeando sus cuellos con sus brazos.
-¡Claude!- se quejó Félix.
-Oye, viejo. ¿Por qué no estabas en clases en la mañana?- Claude se separó de ellos con una sonrisa.
-Eso se los explicaré luego, por ahora…- de su mochila sacó un par de sudaderas.- Pónganse esto.
Nadie vio con extrañeza a los chicos que salieron con la cabeza cubierta, pero por si acaso alguien les vigilaba era mejor prevenir que lamentar. Corrieron hasta cruzar el parque hasta llegar al metro donde al fin se detuvieron y Félix y Nino se sentían demasiado acalorados por las prendas.
-Subamos al metro.- ordenó Claude.
-¿Y a dónde vamos?- preguntó Félix.
-El gato y la tortuga no deben preguntar, sólo confíen.- dijo con una seriedad nada propia de él, pero asustándolos un poco al saber que él ya sabía sus identidades.
…
Bridgette llegó a la mansión Agreste con una sonrisa y sintiéndose un tanto ansiosa. Estaba esperando sola en la estancia de la mansión, sintiendo sus manos sudorosas, mirando con detalle el lugar que pocas veces ha visto, y por unos momentos miró el retrato de toda la familia Agreste. La madre de Félix definitivamente era una mujer hermosa, Félix y Adrien habían adoptado muchos de sus rasgos aunque Félix guardaba un poco más de cierto parecido con su padre. Hizo una leve reverencia a la pintura y fue que escuchó la puerta del estudio abrirse.
-Ah, señorita Dupain-Cheng. Una disculpa por la demora.
-B-Buen día señor.
-Espero que mi llamada no haya sido un inconveniente.
-Para nada.
«Menos con tanto tiempo libre»
Se recordó a sí misma.
-Quisiera hablar con usted sobre su modelo y el desfile. Lamentablemente la modelo que iba a usar este diseño ya no se encuentra disponible, por lo que al parecer me he quedado sin opciones en tan poco tiempo.
-Oh, vaya…
-Por eso me preguntaba si usted quisiera ser la modelo de su propio diseño.- Bridgette parpadeó un par de veces antes de comprender sus palabras.
-¡¿YO?! P-Pero no sé absolutamente nada de modelaje, incluso me he caído con mis propios pies.
-Eso no será un problema. Incluso Félix podría darle unos buenos consejos.
-Eh… yo…
-¿Qué dice?- Bridgette se mordió el labio inferior. Esta era su oportunidad de brillar, necesitaba que su modelo se diese a conocer y así callarle la boca a Lila de una vez por todas. Y Félix le estaría ayudando, ¡era casi un sueño! Y él le había dicho que todo estaría bien y Chat Noir le había dado el coraje para seguir. No podía desilusionar a ninguno de los dos.
-Me parece bien. Acepto entonces.
-Perfecto. Pasemos a mi oficina para que firme el acuerdo de modelaje, nada más por esta ocasión. No pasa nada.
-Por supuesto.
Bridgette estaba confiada en que podría hacerlo, sin embargo no notó la leve sonrisa del señor Agreste cuando ella firmó ese papel, sin saber que había perdido más de lo que creía.
…
Se habían alejado demasiado de la ciudad, habían salido de la capital parisina hasta llegar a Asnieres-sur-Seine, una zona de residencias y departamentos que contaba con pocas tiendas. Apenas se bajaron del metro tomaron el autobús y de allí hasta un restaurante de comida rápida. Al entrar al interior vieron a Juliet que les saludó desde una mesa de fondo.
-Me alegra que vinieran, ¿fue complicado?
-Nadie nos siguió al parecer, como sea estuvimos en el abastecido transporte público.- respondió Claude.
-Bien. Al menos esperemos que estemos seguros.
-¿Qué pasa aquí? Porque te juro que no entiendo nada.- dijo Nino completamente confundido en cambio Félix se sentó en frente de Juliet. Nunca había tenido interacción directa con la joven, pero rivalizaban demasiado en calificaciones.
-Supongo que cómo Claude ya sabes quienes somos, ¿no?- preguntó y Juliet asintió.
-Sé eso y mucho más.- dijo poniendo sobre la mesa un pequeño diario negro.- Claude, ¿podrías pedir algo mientras hago la introducción, por favor? Vamos a estar aquí durante un rato.
-Vale. Invito yo la primera ronda.- dijo yendo al mostrador para pedir.
-¿Alguien me puede explicar qué ocurre?- preguntó Nino comenzando a perder la paciencia y Juliet suspiró.
-El día de ayer recibí este diario junto con unos miraculous en el que se me pedía apoyarles debido a que la versión futurista de Chat Noir, o sea Félix, ha sido descubierto y temía que le atrapasen.- Félix abrió grande los ojos. Era por eso que no podía contactarse con él, de seguro se deshizo de su teléfono y todo lo que lo conectara con él.- En este diario aparecen todos los pormenores y completa información sobre lo sucedido en el futuro y presente hasta el momento. Hay incluso cosas muy personales pero se me pidió que en dado caso fuese descubierto le diese a Nino esto.- pasó por la mesa el miraculous de la tortuga que Nino tomó de inmediato.
-¿Cómo…?
-No es el miraculous de esta época, sino del futuro. Me pidió que te lo diera a ti o a Félix. Que cualquiera de los dos le debía dar un buen uso.
-Nino, tómalo tú.- le instó Félix.- Ahora más que nunca debes tener un as bajo la manga por si las cosas van mal.
-Gracias.
Claude se unió a ellos con la charola llena de hamburguesas, refrescos y patatas fritas, se sentó a lado de Juliet y vio el miraculous en manos de Nino.
-Yo tengo por el momento al pavo real. Al parecer somos el plan de contingencia, ¿ya les dijiste lo demás?- ella negó con la cabeza.
-Sólo la primera parte.
Félix se apoyó en la mesa, inclinándose un poco hacia ella y mirando el diario cada tanto.
-Quisiera saber qué tanto sabes de la situación.
-Sé todo. Incluso datos del futuro que perturbarían a cualquiera y que me imposibilitaron dormir, ya que tenemos mucho qué hacer.- charlaron un poco actualizando la situación, Nino confesó lo sucedido y Claude se disculpó con él por el golpe que le dio y sobre lo mal que había hablado de Alya. Félix en cambio estaba pensando en demasiadas cosas como para ignorar ese diario.
Juliet puso su libreta en la mesa y comenzó a escribir algunas cosas para llevar una lista y cronología.
-Como todos sabemos ahora, Lila hará lo que sea, y repito, lo que sea para hundir a Bridgette y hacer que vaya a la cárcel por un intento de homicidio. Este intento de homicidio se realizará el día del desfile, pongámoslo como el día X, el cual sucederá dentro de cinco días.
-¿Intento de homicidio?- preguntó Nino apenas tragó.
-Mi otro yo dijo que Lila culparía a Bridgette de un intento de homicidio en pleno desfile.- confesó Félix.
-Sería contra Kagami.- dijo Juliet señalando el diario.- Al parecer Lila le habría hecho creer que Kagami y… lo siento Félix, no sé cómo describirlo sin confundirlos.
-¿Qué tal si usas un apodo?- sugirió Claude.
-Oh, eso es bueno. Muy bien, el caso es que en esa línea del tiempo, Lila hizo creer a Bridgette y a todos los relacionados que Kagami y… Témpano estaban juntos.- Claude y Nino casi escupen su comida por la risa pero supieron controlarse, en cambio Félix comenzaba a tener un tic nervioso.
-¿Por qué Témpano?
-No niegues tus orígenes, hermano.- logró decir Nino. Juliet era la única además de Félix que no se reía, sino que aguardó a que terminaran.
-Prosigo. Con ese rumor circundante, Lila hizo de las suyas para atentar contra la vida de Kagami en pleno evento, parte del set caería sobre ella y un brazalete de Bridgette sería encontrado en la escena junto con evidencia de que estuvo allí, cosa que fue verdad a excepción de que Bridgette había dejado el lugar poco antes. El juicio es lo que la condenaría, encontrando pruebas en su contra, y ya que Kagami terminaría en coma durante un tiempo eso agravó su situación.- Félix frunció el ceño ya que no estaba enterado de todos los puntos.- Siendo las familias Agreste, Tsurugi, Bourgeois y Rossi quienes la terminarían por hundir y enviar a prisión durante 15 años usando a los medios y sus influencias para que como menor fuese juzgada como adulto. Ya dentro de prisión experimentaría los horrores que Lila, gracias a la influencia y dinero de sus padres, haría padecer durante años.
Félix se llevó una enorme sorpresa al escuchar eso. Su padre también había tenido que ver, eso le hacía sentir mucho peor por la situación. Y Lila, a pesar de que la envió a prisión, prácticamente la seguiría torturando por el mero placer de verla hundida y convertirla en lo que era ahora.
«Aunque ella no fue la única en crear ese monstruo»
Juliet suspiró presionando entre sus cejas.
-Para evitar que esa malvada Bridgette siga haciendo de las suyas debemos salvar a nuestra Bridgette de terminar en una prisión, completamente demente y con sed de sangre.
-Y para eso debemos detener a Lila, a esa versión psicópata suya y también a Shadow Moth.- declaró Félix serio. Juliet suspiró.
-Pero… tenemos un problema grave.- dijo con la mirada abajo.- Hasta ahora han frenado a Lila y ayudado a Bridgette, ¿qué hace falta para que desaparezca?- preguntó a los presentes con seriedad.- Es la misma pregunta que se hace en este diario. Se me fue dado el miraculous del conejo por si acaso fallamos en la misión. El plan es simple, proteger a Bridgette de Lila, evitar que todas las desgracias que la llevaron a convertirse en Mort Rouge se eviten y así poder proteger nuestro futuro… y sin ofender pero creo que este plan no funcionará.- sus palabras fueron como un balde de agua helada para todos.
-¿Por qué dices eso?- preguntó Nino.
-Según Témpano…
-Deja de usar ese nombre por favor.- pidió Félix sintiendo la vena de su cabeza hincharse en un segundo.
-Vale. Según nuestro futurista amigo, si evitamos que todo esto suceda las cosas mejorarán. Pero veo que hasta el momento han protegido a Bridgette, han luchado, han ganado, incluso ahora Bridgette tiene un lugar en la pasarela que le correspondía, pero eso no ha habido ningún cambio en el futuro inmediato.
-¿Qué quieres decir?- preguntó Félix y ella se apoyó en el respaldo del asiento y sus dedos jugaban con una patata que estaba dentro de un aderezo.
-He visto el futuro.- declaró mirando a los presentes con mirada seria.- Y no ha cambiado nada.
-¿Cómo es eso posible?- preguntó Claude.
-Viajé al futuro para ver si ha habido algún cambio en este. Pero lo único que encontré es un escenario post apocalíptico tal y como lo menciona el diario. No interactué con el escenario, tampoco busqué a alguno de sus aliados. Pero con ver eso me di cuenta que su plan no funcionará. Si evitamos esos eventos Lila creará otros nuevos, quizás incluso peores mientras siga libre. Debemos cortar el problema principal de raíz, de forma definitiva.
Todos se quedaron en silencio y Nino tragó duro.
-Q-Quieres decir… ¿matarla?
-¿Qué? ¡No! ¡Claro que no!- respondió escandalizada.- Pero la gente debe saber la verdad y también saber que ella no está en sus cabales.
-Eso será difícil.- admitió Félix pasando su mano por su cabeza.- En parte es por nuestra culpa. Bridgette y yo acordamos no revelar sus mentiras al principio porque pensamos que nada más quería atraer la atención, nunca pensamos que escalaría de esa manera o al menos no quisimos verlo. En la pelea contra Oni-Chan, vi que Lila era capaz de mentir con tal de alejarme de Ladybug, pensé que solamente le tenía resentimiento pero nunca pensé que fuese un odio desmedido y que fuese alguna especie de sociópata.
-Recuerdo también en el día de los héroes la ilusión de Ladybug acabando contigo.- mencionó Claude tras comer una hamburguesa con queso.- En ese momento nadie dijo nada, pero yo siempre tuve sospechas de ella.
-Lila ha demostrado tener ciertas actitudes que distan mucho de una persona sana.- asintió Juliet.- Por eso debemos demostrar que ella es peligrosa.
-¿Y cómo haremos eso ahora?- preguntó Nino.- Es decir, Al está creando una vida entera sobre las mentiras de esta y todo el mundo le cree. Es más, tiene incluso tantos seguidores como Jagged Stone.- dijo mostrando en su celular la cuenta de Instagram de Lila.- Y sigue aumentando.
-Y tiene a toda la escuela en contra de Bridgette, contando a profesores y directivos.- dijo Claude.
-Y eso sin contar con su conexión en la embajada.- dijo Félix.- Porque si bien no es del todo rica como Chloe o yo, sus padres seguro que sí tienen influencias.
-Primero lo primero.- dijo Juliet.- El diario dice que el día de mañana Bridgette será culpada de empujar a su profesora de las escaleras, lo que provocará que pierda al bebé.
-¿Cómo?- Nino se puso pálido y Claude le pasó una soda para que bebiera y recuperase azúcar.
-La profesora dijo que mañana Bridgette volverá.- respondió Félix.- Todos debemos estar atentos a cualquier truco que Lila haga.
-Tú y Nino estarán a cargo de proteger a la profesora y a Bridgette.- dijo Juliet.- Si eso ocurre y Lila culpa a Bridgette su estadía en la escuela terminará definitivamente, así como la poca fe que todavía tienen algunos por ella y la vida de un inocente.- Félix asintió y Nino más recuperado habló.
-¿Y qué pasará con Mort Rouge?
-Si hacemos las cosas bien, no deberemos preocuparnos por ella. Pero Claude les apoyará en las batallas desde lejos y yo seguiré investigando y planeando los siguientes movimientos junto con Félix. Lo siento Nino, pero tú ya estás comprometido y nada más te di el miraculous por tu propia protección, pero no lo uses a la ligera a menos que sea absolutamente necesario.
-Vale. Capto.
-¿Qué tipo de investigación piensas hacer?- preguntó Félix y Juliet suspiró.
-Una de la que seguro me va a costar parte de mi estabilidad emocional… voy a investigar más de esta Bridgette. Este diario me dice mucho, pero a la vez no me dice todo.
-Bueno, quizás yo podría…- estiró la mano para tomar el diario la joven no dejó que lo tocara.
-Lo siento, pero hay cosas aquí escritas que incluso para mí fueron difíciles de digerir y todavía no lo termino, cuando termine te lo daré.- a Félix no le gustaba para nada este secretismo de parte de su otro yo y ahora de Juliet. Quería saber, saber qué tan malo fue el futuro para todos y así poder cooperar más. Pero antes de siquiera decir algo, el celular de todos sonó y vieron la noticia del momento.
Noticia de última hora. Chat Noir y Ladybug han sido captados en vivo robando el museo de Louvre. Han robado joyas y pinturas invaluables. ¿Qué ocurre con estos héroes? ¿Serán ellos o alguien más está tomando su lugar?
-Mierda.- musitó Nino y Félix entonces logró ver la imagen de sus copias robar el museo yéndose a toda prisa. Frunció el ceño profundamente.
-Tal parece que necesitamos rectificar nuestro nombre también. Y me apuesto a que esto es obra de Shadow Moth. O tal vez Volpina ha vuelto a hacer de las suyas. Sea como sea, los juegos han terminado desde hace tiempo.
Había mucho que hacer, mucho por hablar, y mucho que planear, pero nadie se iría de allí hasta que hubiesen hecho un plan que pudiese ayudarles a sabiendas que tenían el tiempo contado.
…
Bridgette maldijo a lo bajo cuando vio entrar a Félix, Lila y como tiro de gracias Chloe, aunque eso explicaba de dónde venía ese sonido tan extraño y molesto, era su voz. No había querido que le viesen pero tal parecía que era imposible evitar un enfrentamiento.
-No me lo puedo creer.- dijo Lila acercándose a ella.- Es increíble verte Bridgette, más en este lamentable estado aunque… no recuerdo siquiera alguna vez que te vieses bien.
-Lila.- frunció el ceño midiendo la distancia entre ellas, ella estaba demasiado lejos para estrangularla. Lila tenía una asquerosa sonrisa que le decía la satisfacción que le daba verla así de "acabada".
«Espera un poco y verás mi verdadera cara tras esta fachada de víctima, perra»
-¿Qué carajos haces aquí?- la pregunta de Chloe fue tan grosera que lentamente se volvió a ella no deseando responder a tanta falta de educación.
-Un poco de lenguaje. Y estoy aquí disfrutando un café.
-¿Y psicóticas como tú pueden entrar a este lugar? Voy a ordenar que te echen de aquí. No mereces siquiera estar en esta ciudad.
-Ya no eres la maldita hija del alcalde.- habló Claude que había sido ignorado por las féminas.- Así que bájate de tu nube que das pena.- el castaño se concentró en el rubio que parecía congelado en su lugar.- ¿Por qué no te llevas a tu séquito de brujas a otra parte, Agreste? Están haciendo un escándalo que de seguro no quieres en primera plana.
-Justo ya me iba.- dijo dedicándole una mirada breve a Bridgette que le miraba con esos mismos ojos cansados y faltos de vida. Le hacía sentir incómodo.
-Oh, pero Félix. No debes de tener esa clase de consideración y menos con alguien como ellos.- dijo Lila con total superioridad.- ¿O es que tienes miedo de que ella intente algo de nuevo?
-Si quieres hablar de la empresa, vamos a otra parte.- habló en tono bajo y severo.- O bien puedes darle a la gente más motivos para verte como la vergüenza de la moda al meterte con una persona que no te ha dirigido la palabra en medio de una cafetería.- Lila apretó los labios. Bridgette tenía que admitir que por un momento se había sorprendido, pero este sentimiento fue fugaz al saber que este lo hacía no por defenderla, sino para evitar otro escándalo.
Todo parecía que iba a quedar así cuando Chloe tomó la taza de té de un cliente cercano y lo lanzó a Bridgette en su pecho y rostro. Estaba ardiendo y ella se quejó intentando alejar la tela caliente de su piel sensible. Félix le arrebató la taza y la sujetó con furia.
-¿Por qué hiciste eso?
-Por favor, Félix. Aún ahora ella no es nadie y no vamos a ir a ninguna parte. Ellos son los que tienen que irse con la cola entre las patas después de todo lo que ella hizo.- Claude estaba intentando ayudar a Bridgette que estaba comenzando a sufrir de la quemadura. Félix soltó a Chloe y se acercó a ella pero ni siquiera puso tocarla cuando la mano de Claude golpeó la suya.
-No te atrevas, Agreste. Ya has hecho demasiado daño…
-Claude.- habló Bridgette soportando el dolor y este la tomó de los hombros.
-Te voy a llevar al hospital, vamos.- el gerente del lugar les abrió la puerta amablemente. Félix se quedó mirando cómo cruzaban la calle y entraban en un auto azul. Luego miró donde antes estuvieron sentados. Sus tazas estaban allí junto con restos del té cuyo calor todavía se sentía.
-Félix.- le llamó Chloe exasperada por no tener su atención, más bien hubiese deseado no haberlo hecho, ya que la mirada del rubio destilaba ira pura.
-La única demente aquí eres tú. Pensando que puedes todavía hacer tu maldita voluntad cuando eres tú quien no es nadie.- Chloe se sintió intimidada, pero también ofendida por sus palabras.
-¿Cómo puedes hablarme así? ¡Bien sabes quién soy!
-Y no sabes qué maldición es. ¿Es que acaso una persona cuerda le lanza una bebida caliente a otra? No quiero saber nada de ti. Nunca me ha interesado saber algo de ti, así que olvídame, y olvídate de siquiera contratarte en la empresa.- caminó hacia el gerente y pagó por el estropicio que habían generado. Lila fue tras él, ya que Chloe no se había atrevido a seguirlo más que a la salida y luego irse frustrada.
-Uff, vaya que Chloe sabe hacer un espectáculo. Da pena, ¿no lo crees?
-¿Por qué mierda me estás siguiendo?- le miró de la misma manera.- Tampoco quiero saber nada de ti, no hoy, ni mañana, porque he tenido que lidiar desde la mañana con tu propia incompetencia al no hacer un buen trabajo.
-Félix, sabes bien que he estado ocupada…
-¿Ocupada con los inversionistas?- este rio entre dientes.- Sí, ya nos hemos enterado de que tan ocupada estás con ellos. Por cierto, deberías hablar con ellos y preguntarles a quién deben sus lealtades ahora.
Lila boqueó como pez fuera del agua, Félix se fue caminando a otra dirección esperando poder calmarse antes de regresar a la oficina. Esperando que Claude haya llevado a Bridgette al hospital porque no quería pensar en otra marca en su piel…
Por suerte la quemadura era tratable con ungüentos. Bridgette salió del hospital con Claude que, a pesar de que el diagnóstico fue bueno, tenía muy mala cara.
-Hey.- le habló Bridgette.- Sé que viene de profesión pero… ¿por qué tan callado?
-Estoy furioso. Apenas y supe controlarme para no ir contra esos tres.- subieron al auto y Claude sujetó el volante con fuerza. Bridgette sonrió, su fiel amigo, su dulce confidente. Tomó su mano y le sonrió.
-Tranquilo. No te metas en problemas o Juliet se va a enojar contigo.
-Oh, no creas. Ella de seguro se hubiese sumado a darles una paliza a ese par.- Bridgette rio y Claude le miró confundido.
-¿Por qué no estás enojada? Yo estaría furioso.
-¿Cómo ahora?- Claude gruñó y Bridgette intentó no reír.- Lo siento, Claude. Pero estoy así porque dentro de todo ya no tendré que preocuparme por ciertas cosas, eso incluye a ese par.
-¿Qué quieres decir?
-Digamos que mi jefe se la tiene jurada a esas dos. Y me dijo que dentro de poco ya no iban a ser un problema en el mundo de la moda. Nada más tengo que interpretar mi papel y listo.
-¿En serio?- Bridgette comenzó a decirle sus planes, por supuesto, Claude no tenía que saber que todo eso fue planeado por ella. Su jefe era el perfecto chivo expiatorio en la situación, y con esa chica reportera de su parte todo iba de acuerdo a su plan.- ¿Has pensado en despertar a Tikki?- preguntó él de repente.
-Me gustaría mucho…- dijo acariciando sus orejas.- Pero prefiero hacerlo cuando esté lejos de aquí. En una bonita casa, completamente establecida y viviendo bien. No quiero que me vea a como estoy ahora. Este lugar ya no es mi hogar… a pesar de todo lo que hice por protegerlo, mi familia… ustedes… yo… todos hemos pagado un precio por culpa de ciertas personas y no quiero vivir así. Me gustaría en serio poder despertar un día y no preguntarme si veré a alguien de mi pasado mientras me lavo los dientes.
-Sabes que te queremos, ¿verdad?
-Lo sé. Yo también los quiero a ustedes.
Claude siguió manejando, sin saber que por dentro, Bridgette tenía otra forma de pensar.
«Que la gente disfrute de sus últimos momentos de paz. Voy a quemar a esa perra de Chloe Bourgeois, ella va a conocer el infierno que le tengo reservado así como todos los demás. Ya verán… todos aquellos quienes me hicieron daño a mí, a mi familia y amigos perecerán y yo bailaré sobre sus cuerpos deshechos»
Escondió su sonrisa de su amigo. Ya era hora de ejecutar la otra parte de su plan.
Al otro día, Madame Rouge miró con completo desinterés a Chloe que le había dado su libro de modelaje. Desde su debut estelar todos querían modelar para ella y por supuesto, las fotos de Chloe eran buenas, pero tampoco nada del otro mundo. Ese día llevaba puesta un antifaz oscuro con tintes rojos en las orillas, una blusa roja de cuello alto color negro sin mangas, pantalones oscuros con líneas rojas al final y tacones. El maquillaje obraba maravillas en cubrir las cicatrices de su cuerpo, agradecía a Juliet, que le había dicho cómo hacerlo.
-¿Por qué quiere ser mi modelo señorita Bourgeois?- preguntó paseando por la habitación.
-Obviamente porque sus modelos son preciosos, son casi como un sueño y en mí estoy segura que se verían de maravilla. Además, he visto que está contra Lila Rossi. Yo odio a Lila Rossi y quiero verla destruida.
-Sus razones, por favor.- dijo tomando su vaso de café helado con extra de crema, Chloe hizo una mueca al ver aquella bebida llena de calorías pero se recompuso de inmediato.
-Lila Rossi ha sido una molestia desde que le conozco. Se cree que tiene talento pero no es más que una sanguijuela que se aprovecha de todos los que están a su alrededor aprovechándose de su fama para elevar la suya. Patético en serio.
Madame Rouge dejó su carpeta en su escritorio.
-Señorita Bourgeois, para ser una de mis modelos debe cumplir con tres especificaciones. Número 1. Su actitud debe ser por completo profesional, cooperar con los fotógrafos y dejar su arrogancia encerrada en una caja de pandora que nunca deberá abrir en público. Número 2. No hablará de lo que hacemos aquí. Necesito absoluto secretismo y más con tantos buscando copiar o destruir nuestro estilo. Y número 3. Su nombre aquí no es nada, usted no es nadie, se le tratará igual que a los demás y no habrá favoritismo alguno y si usted hace algo que avergüence a la firma será despedida irremediablemente. ¿Ha entendido todo?
-Ugh, pero ¿cómo voy a estar a la par de unos perdedores? He modelado para grandes firmas y en pasarelas del mundo.
-Al igual que sus compañeros. Usted no es especial para mí.- dijo recordando lo que esas palabras hacían en el ego de Chloe y tal como esperó la vio saltar de su asiento.
-¿Cómo puede decirme eso? ¿No sabe quién es mi madre?
-Su apellido le respalda. Pero dígale a su madre que conmigo su nombre no tiene el peso necesario si no puede actuar como una profesional.
-¡Yo SOY una profesional!
-Pues actúe como tal. Ya le llamaré para darle mi decisión.- Chloe gruñó.
-¡Se va a arrepentir de esto!- se marchó con aquella prepotencia que bien recordaba. Limpió algo de crema batida que resbaló de su dedo y tiró a la basura su carpeta. El diseñador en jefe apareció poco después.
-¿Estás segura que fue lo correcto rechazarla? Su madre nos ha hecho demasiadas y de seguro con esto acabará por hundirnos más.
-En primera no la rechacé, sólo le dije que sería como todos los demás a lo que para la orgullosa Chloe Bourgeois fue como si le hubiese lanzado un balde de grasa a la cara. Y le aseguro que mi contacto tiene lo necesario para hundir a ese par y que no puedan mostrar sus rostros por un tiempo.
-Eso espero… este negocio es mi vida. Si Audrey vuelve a dar una crítica igual de desastrosa que la última vez sería el acabose de nuestra colección.
-Usted tranquilo. Que no tardará en vez caer a ese par de víboras junto con Lila Rossi antes de nuestro desfile principal. Después de eso debería tomarse unas vacaciones, le hacen falta.- el hombre asintió cansado y se marchó. Bridgette no podía esperar hasta mañana cuando la siguiente bomba estallara.
Desde temprano por la mañana todo el mundo desayunaba o se arreglaba para salir a un nuevo día. Bridgette estaba desayunando con Tikki que comía los alimentos dulces que ella le había preparado. Las noticias anunciaban sobre los por menores del espectáculo cuando comenzó la noticia que tanto esperaba.
Y la noticia del momento, gracias a una fuente anónima se ha descubierto que Audrey Bourgeois, la famosa crítica de moda, ha chantajeado y recibido sobornos durante los últimos años. Según cuenta las fuentes la crítica de moda ha chantajeado a las pequeñas casas de moda exigiendo exorbitantes cantidades de dinero a cambio de una buena crítica y mención en su revista. Tenemos un video que lo demuestra y lo pasaremos en unos momentos. Además con ello, su hija, Chloe Bourgeois, modelo profesional, también ha chantajeado y amenazado distintas casas de moda, incluso nos comentan testigos que ha hecho daño físico a modelos y fotógrafos y que estos son cubiertos por una cuantiosa cantidad de dinero por su abogada Sabrina Raincomprix, hija del actual comisionado de la policía, y de la que también se tienen pruebas de que ha ejecutado en nombre de las Bourgeois demandas contra modelos y diseñadores que han perdido sus trabajos. Seguiremos con las noticias y los videos correspondientes.
Tikki miró a Bridgette que sonreía complacida por lo que estaba pasando.
-¿Cuándo te vas a detener? ¿No crees que ya has hecho suficiente daño?
-Por favor, Tikki. Esto apenas y es la punta del iceberg. Cuando termine con la primera fase, todos, incluyendo a Chat Noir, sabrán cuánto se equivocaron y seré yo quien les condene esta vez.- se levantó de la mesa y fue a servirse más café, ignorando la mirada preocupada de la kwami que deseaba que todo eso terminara.
Lejos de allí, en un elegante departamento, Lila veía la noticia con completo desinterés ya que poco le importaba lo que le pasara a Chloe. De repente recibió un mensaje y respondió la llamada.
-¿Hola?
-Señorita Rossi. Tengo lo que me pidió.
-Perfecto.- dijo con una amplia sonrisa.- Déjalo en mi buzón esta tarde. Te dejaré el dinero antes de irme y ni una palabra de esto, encanto.
-Como usted diga.
Lila comenzó a tararear una canción mientras tomaba una manzana.
-Vete preparando para tu mayor desastre Madame Merde*, porque tu momento al estrellato se transformará en tu monumental fracaso.
…
Después de salir de la mansión Agreste pasó directamente a recoger a su hermana, y vaya sorpresa que se llevó cuando Marinette apareció con lágrimas en sus ojos y corrió hacia ella.
-¡BRIIIIIIIID!
-¡Mari! ¿Qué pasó?
-¡Hoy todos fueron malos conmigo!- lloró más fuerte aferrada a sus piernas y su profesora apareció.
-Una disculpa, hubo una pelea con algunos de sus compañeros. No sabe lo apenada que estoy, debí haberlos vigilado.
-¿Cuáles compañeros?- fue que tanto Etta, Ella y Noel aparecieron detrás de la profesora con la cabeza abajo ya que ya habían sido regañados, pero cuando la alzaron pudieron ver con absoluto terror cómo la franco-china los miraba con un aura oscura envolviéndola por completo.- Ustedes… supongo que debí esperarlo por sus hermanos.- luego miró a la profesora que también se había intimidado por su presencia.- ¿Cuál fue el motivo?
-A-Al parecer dijeron cosas de usted, y se burlaron porque su amigo Adrien ya no se junta con ella.
-Ya veo. Bien, puede decir a sus padres sobre lo sucedido y que ellos decidan el castigo.- esta vez los pequeños comenzaron a tener ganas de llorar, pero esta vez Bridgette no se ablandó, habían lastimado a su pequeña fresita y eso era algo que no iba a perdonar jamás.
Se fue a con Marinette al parque donde limpió sus lágrimas y le compró un helado.
-¿Mejor?- ella asintió.- Bien. Marinette, lamento mucho que pases esto por mi culpa.
-No es tu culpa. Ellos son tontos por creer que eres mala y A-Adrien es más tonto. ¡Los odio!- dijo haciendo un puchero y Bridgette suspiró.
-No digas eso.- limpió sus ojos de cualquier rastro de lágrimas.- Sabes, a lo largo de la vida te vas a enfrentar a gente mala y más que nada a gente tonta. Pero no debes enojarte con esa gente por ser tonta, mejor siente lástima de ellos porque no pueden ver más allá de sus narices. Si sientes rencor eso también te va a afectar y ellos van a ganar.
-Pero me quitaron mis galletas y dijeron cosas feas.
-Ah, pobrecita. Vas a comer galletas apenas lleguemos y si alguna vez te dicen algo feo tú solo di: Botellita de jerez todo lo que me digas será al revés. Funciona bien para los pequeños de tu edad.
-Ya no soy tan pequeña.- se quejó Marinette y Bridgette rio.
-Tienes razón, antes de poder siquiera notarlo serás una bonita señorita. Y ya no podré abrazarte tanto como quisiera.
-Si podrás, te doy permiso pero que no sea muy fuerte.- Bridgette sonrió y aprovechó poder abrazar a su hermana. Cuánto le gustaba poder estar cerca de su familia, y el cómo ellos ahora la apoyaban la hacían sentirse fuerte. Después de unos momentos caminaron de regreso a su hogar, sin notar a la mujer que había visto la escena escondida tras unos árboles en la sombra.
Sintió algo de nostalgia por esos momentos perdidos. E ira contra quienes se los quitaron.
-Bridgette…- le habló Tikki desde su bolso.
-Tranquila Tikki, cuando todo termine todo será como debe de ser. Este nuevo plan hará una enorme diferencia.
Todavía quedaba unas cuantas cosas por hacer y las horas seguían corriendo veloz en aquella carrera. Muy pronto todo terminaría y nadie se interpondría en su verdadera misión, ni siquiera ese gato molesto, ni su yo del pasado, ya que ella también le ayudaría a ejecutar su plan de una vez por todas.
* Merde: Mierda
….
Y… espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer. Dejen review, nada de tomatazos, aceptamos bebidas y postres de temporada, cuídense mucho que esto del coronavirus todavía no termina, y sin más qué decir además que les deseamos lo mejor y agradecemos su apoyo… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!
