Hola a todos! He aquí traemos el siguiente capítulo de esta historia. Estamos cada vez más cerca del final! Tres capítulos más! Y no nos hacemos responsables de los posibles gritos que den de la emoción, impotencia, o de lo que sea, llevo diciéndolo capítulos atrás. Así puestos sin más qué decir además que esperamos el final de temporada también… COMENZAMOS!
…..
Advertencia: Este capítulo tiene descripciones de escenas un tanto sangrientas, por lo que se pide discreción y todos los que sean débiles de corazón entran a estos terrenos bajo sus propios riesgos.
Capítulo 22.
Verdad sangrienta.
Cuando Bridgette vio a Volpina es ese lugar sintió que el mundo se detuvo un momento, nada más podía escuchar su respiración y su cerebro trabajaba rápidamente.
¿Qué hacía Lila allí?
¿Por qué con ellos?
O… ¿por qué parece de alguna manera perturbada?
Cuando se acercó a ellos Bridgette, Félix y Natalie se levantaron pero puesto que Bridgette era la más cercana en ese momento sintió que sería la primera a la que atacaría pero no fue así. Volpina se sentó en la silla que había pertenecido a Bridgette con un aire causal como si estuviera lista de iniciar una agradable charla.
-¿Me reconoce, monsieur? Supongo que mi socia ya le habló de mí.- el señor Gabriel afiló la mirada.
-No tengo idea de quién demonios eres. Pero no voy a tolerar esto.- Natalie fue la primera en irse contra ella, pero Volpina la tomó del brazo y la lanzó hacia una mesa donde Natalie cayó de espaldas y la mesa cedió cayendo de lado y con una de las patas rompiéndose y girando en el suelo.
-¡Señorita Sancourt!- Bridgette quiso ayudarla pero por el rabillo del ojo vio la flauta de Volpina y la esquivó sintiendo el arma rozar a milímetros de su rostro.
-Tú tampoco estorbes, mestiza inmunda.- en un rápido movimiento la pateó en el estómago lanzándola hacia la orilla de la terraza, rompiendo el cristal que decoraba el lugar y apenas dándole tiempo para sujetarse y quedando colgada desde el segundo piso.
-¡Bridgette!
-¡Cha…! ¡Félix!- por unos momentos había querido llamar a Chat Noir por su ayuda pero se rectificó a tiempo. Félix corrió hacia ella esquivando a Volpina, aunque ella no tenía interés en él por el momento. Se apoyó en los antebrazos de Gabriel ejerciendo una gran fuerza en este que apenas hizo una leve mueca por el dolor.
-Ahora vamos a hablar seriamente, viejo. Sabes muy bien quién soy y de lo que mi socia y yo somos capaces.- dijo al creer la mentira de Mort Rouge sobre lo ocurrido a la mansión.- Así que vas a hacer lo que te digo, vas a ayudarme a limpiar mi nombre y serás mi pequeña marioneta o sino despídete de tus adorables hijos.
Mientras Félix ayudaba a Bridgette escuchó aquello. Sabía que Claude y Nino tenían algo preparado pero no esperaba que tras esa bomba Lila se volviese loca.
-Dame tu mano.- Bridgette se la dio y la ayudó a subir con cuidado de los vidrios que había en el suelo. Cuando estuvo arriba, Bridgette vio alrededor. Un mantel que arrastraba en el suelo detrás de Volpina, la pata de la mesa rota, y la corbata de Félix.
-Voy a necesitar eso.- señaló la corbata y él se la dio sin dudar a pesar de su leve confusión. Un reflejo que tenía como Chat Noir.
-¿Me has escuchado bien?- preguntó Volpina a Gabriel que notó como Natalie se movió por el suelo ante la señal de Bridgette que tenía la pata y la ató con la corbata.- Sabes de lo que somos capaces, así que harás lo que te ordeno. Porque bien puedo comenzar en estos momentos con tu famoso ángel de Paris y convertirlo en un verdadero ángel.- aquello enfureció más a Gabriel que cualquier otra cosa. Por lo que acercó un poco su rostro al de Lila.
-Dos palabras. Está despedida.- usando su única pierna movible la pateó con toda la fuerza que pudo en el estómago, cuando ella retrocedió Natalie jaló el mantel que pisó haciéndola caer y fue que Bridgette y Félix tomaron sus manos y Bridgette apretó el nudo de la corbata, apretando con la pata de la mesa esta y así inmovilizar por completo sus manos. Volpina se quejó pero a pesar de que tenía a tres personas encima logró sacárselos de encima aunque Bridgette logró dar un último impulso y lanzársele encima cuando apenas se quitaba la amarra de las manos.
-¡Maldita cucaracha!- la tomó de su ropa y la lanzó por encima de su cabeza para quitársela de encima. Fue que su transformación desapareció un segundo después y a pesar de estar en el suelo, Bridgette le mostró el collar.
-¿Buscabas algo?
-No... ¡NO!- fue que se dio cuenta de la enorme desventaja, y en lugar de quedarse y pelear por el miraculous, optó por correr lo más rápido que pudo y salir del restaurante.
-¿Estás bien?- preguntó Félix y ayudó a Bridgette a levantarse.
-Yo estoy bien. ¿Ustedes están bien?- preguntó acercándose a los dos adultos y Gabriel se resentía un poco de su pierna.
-Todo bien, señorita Dupain-Cheng. Pero hay que llamar a las autoridades.
-Es verdad. No podrá ir muy lejos.- aseguró Natalie. Bridgette de verdad esperaba eso y fue que examinó el miraculous con detenimiento que sus ojos se abrieron ante el reconocimiento. No era el collar barato que Lila siempre usaba, podría reconocerlo entre miles.
-No puede ser…
-¿Bridgette?- Félix notó su completo desconcierto e intentó tocarla más ella esquivó su toque.
-Yo… ah, debo ir a casa. Una disculpa. Tengo cosas que hacer.
-¡Espera, Bridgette!- pero ella no le respondió, salió de ese lugar deseando llegar pronto a casa y esperar que sus peores miedos no fuesen justificados e ignorando las decenas de mensajes y llamadas que comenzaron a llegarle de sus ex amigos y compañeros.
…
El alcalde había convocado a una rueda de prensa. Estaba nervioso pero sus dos hijas estaban con él apoyándolo desde fuera de cámaras por lo que decidió por última vez respirar profundo y dar un paso al frente hacia el podio. Las cámaras lo enfocaron directamente.
-Gente de Paris, muchas cosas han sucedido estos días y estas me han abiertos los ojos ante lo que estamos enfrentando. Primero que nada, me gustaría retirar la orden de aprehensión contra Ladybug y Chat Noir, debido a pruebas obtenidas por el capitán de la policía, Roger Raincomprix que han demostrado la inocencia de estos. Ofrezco a nombre de la ciudad de Paris una disculpa por poner a los héroes que nos han salvado del día a día en una situación peligrosa y que espero pronto se lleve a cabo la aprehensión de la terrorista conocida como Mort Rouge.- los flashes aparecieron casi cegando a los presentes pero él siguió hablando.- También, sé que esto llevará a una investigación de mi mandato por parte del gobierno francés, por lo que cuando eso ocurra dispondré de mi cargo voluntariamente.- todo el mundo apenas podía creer lo que escuchaba, el alcalde anunciando su renuncia, ¡eso era un hecho sin precedentes!- Durante los próximos días seguiré respondiendo preguntas sobre esto pero por ahora debo hacer muchas cosas antes de dejar el cargo. Muchas gracias.
Sin más qué decir por el momento ignoró las preguntas que la prensa le lanzaba con respecto a la participación de su hija y lo que le pasaría a su familia. Cuando llegó a con sus hijas, Zoe sonrió ampliamente.
-Estoy muy orgullosa de usted. ¿Y ahora qué va a hacer?
-Bueno, puesto que lo más probable es que deje el puesto de alcalde, me dedicaré de nuevo a mi pasión e incursionar en el mundo del cine. Aunque quizás deba hacer algunos sacrificios.
-¿Qué sacrificios?- preguntó Chloe de repente incómoda.
-Pues… tal vez deba vender el hotel.
-¡¿QUÉ?! ¿Vender el hotel? ¿Nuestro hogar? ¡Eso es ridículo! ¿Y dónde vamos a vivir?
-Pues… ya le eché un ojo a una bonita mansión en el centro.
-¿Y qué será entonces de nosotros? ¿Qué será de mí?- dramatizó Chloe pero Zoe sonrió a sabiendas de lo que tenía que decir.
-¿No crees que es mejor vivir en una gran mansión que en un hotel donde llegan día a día gente que siempre hace ruido? Además, si papá a incursionar en el mundo del cine, es una buena oportunidad, ¿no? Viajes, conocer a gente famosa, y hasta podrías participar en las películas.- Chloe abrió la boca pero la cerró al darse cuenta de la verdad de sus palabras.
-¡Claro! ¡Quiero ser una estrella! ¡Con mi foto en los grandes carteles de Paris y el mundo!- André de inmediato se aclaró la garganta.
-Primero que nada deben prepararse bien. Ya que no es lo mismo actuar en una película escolar que una profesional, así que estoy investigando a qué escuela de arte dramático podré inscribirlas apenas acabe el instituto.
Las dos estaban emocionadas por las noticias, incluso Chloe que a sabiendas que tendría que cumplir con su condena por lo que hizo, su futuro no se veía tan oscuro como antes.
…
El adulto Félix cuidaba de Adrien y Gorila. Había mantenido a Adrien apartado de la habitación donde estaba su madre, ya que lo que iba a tener que hablar con su padre de un tema muy difícil para todos.
Su teléfono vibró y despertó a Plagg que estaba dormido sobre él.
-¡Ah! Condenada cosas, no puede dormir uno a gusto.
-Plagg…- respondió de inmediato al reconocer el número de su yo más joven.- ¿Pasó algo?
-Creo que tenemos un problema.
-¿Qué sucede?
-Lila, es decir, Volpina apareció de repente en el desayuno para atacarnos.
-¿Están bien todos? ¿Y Bridgette?
-Ella está bien. Todos, en realidad le quitamos el miraculous a Lila y huyó como la cobarde que es. No nos dio tiempo de atraparla.
-¿Y cuál es el problema? Acaso… ¿ella apareció?- preguntó directamente por Mort Rouge.
-Peor, Bridgette se llevó el miraculous. ¡Puede averiguarlo todo!
Hizo una mueca como si esas palabras hubiesen escocido una vieja herida. Intentó pensar qué podría hacer con la cabeza fría.
-Vale… los kwamis tienen como regla nunca revelar el nombre de su portador, por lo que Trixx no le podrá decir a Bridgette acerca de su versión malvada.
-¿Y si le cuenta algo del futuro? Bridgette es muy lista, ella se dará cuenta de inmediato.
-Entonces será mejor que Chat Noir mueva esa cola y vaya a hablar con ella.- el joven lanzó un bufido y colgó. Aquello podría ser un enorme problema. ¿Qué tanto afectaría el futuro si Bridgette se enterase a este punto de la verdad?
«Mucho podría cambiar, pero no a nuestro favor. Si los guardianes se enterasen también podrían quitarle el miraculous»
Necesitaba pensar, necesitaba arreglar todo. Un día más. Mañana era el último día y si lograban detener a Lila y los planes de Bridgette de que se repitiera la misma desgracia habrán terminado con todo.
-Un día más… uno y toda esta pesadilla desaparecerá.
El desaparecería, su horrible futuro desaparecería, y con todo eso también Mort Rouge desaparecería y miles de vidas se salvarían.
…
Papeles e hilos estaban alrededor decorando su habitación. Juliet había anotado y unido cada punto con todo lo referente al diario y a lo que las versiones del futuro de sus amigos le contaron. Estaba repasando todo una y otra vez y todos esos hilos llevaban a una hoja en blanco en la que no había anotado nada, porque no tenía idea a qué llevaba todo eso.
-Juliet, cariño. El almuerzo ya está… ¡Uf!- su abuela casi se enredó al entrar con los cordones.
-¡Lo siento abuela!
-¿Qué es todo esto?- preguntó la mujer acomodando su apenas cano cabello oscuro.
-Esto es… ¡para un libro!- mintió con una amplia sonrisa tensa.- Estaba pensando en escribir una novela, ya sabes, como papá escribía sus artículos de viaje pensé en aventurarme en el mundo de la escritura.
-Vaya, pues esto sí que se ve muy completo. ¿Y de qué es esto?
-Amm… estoy estudiando a la villana de mi historia. Una mujer sedienta de venganza contra sus enemigos que no puede perdonar lo que le hicieron, y uno de ellos viaja al pasado para arreglar todo pero ella no quiere e intenta de todo para que su joven yo se vuelva ella y así seguir con su venganza o prolongar su propia existencia en la línea del tiempo aún existente. Es una persona un tanto perturbada por todo lo malo que le pasó, pero a pesar de eso no le gusta lastimar a quienes se portaron bien con ella.- tras unos momentos su abuela se rio.
-Qué personaje tan interesante. ¿Y cuál es su objetivo final? ¿Cobrar venganza de todos y dejar a sus aliados?
-Aliados que intentan detenerla pero… no logro entender cuál podría ser su objetivo final. Es decir, un villano debe tener un propósito grande y malvado. No sé…- su abuela lo pensó un momento y tras seguir un poco los hilos y encontrar la página en blanco sonrió nuevamente.
-Tal vez ya tengas la respuesta.
-¿Eh? Pero si no hay nada.
-Eso mismo. Nada. Tu villana intenta prolongar su tiempo para no desaparecer, ¿no? Pero qué tal si al final eso es lo que quiere.
-No te entiendo abuela.- su abuela rio entre dientes.
-Digamos que quiere desaparecer todo pero no puede hacerlo hasta llegado cierto momento. Y sobre esas personas que estima tal vez las envíe lejos a una nave espacial o cree con un poder mágico un nuevo mundo donde ellos sean felices y los malvados no existan. Como sea creo que esto representa bien lo que podría querer. Convertir ese mundo en nada para crear algo nuevo.- Juliet se quedó tan fría en su sitio que apenas y sintió el beso de su abuela en la frente.- Como sea no te quemes demasiado la cabeza. La idea es por demás interesante pero una buena historia se planea con mucha anticipación y planeación. Vamos que tu desayuno se va a enfriar y sabes que Wilson espera que le des de desayunar también.
-Ya… Ya bajo enseguida. Necesito un minuto.- su abuela se marchó y Juliet se sentó en su cama. Fluff de inmediato salió de entre sus peluches.
-¿Qué sucede? ¿Pasa algo? ¿Tienes fiebre? ¿Te duele la barriga o la cabeza?
-Esto es una novela… una obra… una historia dantesca.
-¿Uh? ¿Qué quieres decir? No entiendo, dices cosas curiosas.
-Todo esto no es más que una obra y nosotros somos los actores. ¡Ella sabía que esto iba a pasar!- señaló una de las hojas y siguió los hilos.- ¡Que ellos robarían ese miraculous! ¡Tú miraculous! Para intentar arreglar todo este desastre.- le señaló.
-Owww, yo soy el que se marea con el tiempo, pero tú me mareas más.
-Todo esto lo estuvo planeando por años. Quería incluso que Chat Noir viniera y le ha hecho creer que ella intenta evitar que la detengamos. ¡Ella quería que él estuviese aquí! Quiere vengarse de él y obtener su miraculous.
-Pero eso significaría que ella podría obtener el poder absoluto y…
-Destruir el mundo que conocemos…- dijo mirando la hoja blanca de papel.- Y crear uno nuevo a su antojo.
La idea le causó grandes escalofríos. Tenía que hablar con Félix y su versión adulta pronto pero antes tenía que desayunar o su abuela le llamaría la atención y necesitaba mucha energía para su cerebro.
Mandó un mensaje a todos.
En mi casa a la 1. Les envío la ubicación. URGENTE!
…
Esa mañana se produjo un gran alboroto, la gente del refugio se había asustado cuando unos extraños aparecieron una mañana, pero Chat Noir sintió un tremendo alivio cuando reconoció las vestimentas de estos. Los guardianes al fin habían llegado. Chat Noir se acercó y fue directamente hacia Su Han, los años habían sido generosos con él y seguía manteniendo esa expresión testaruda en sus facciones, los demás maestros llevaban una capucha encima que ocultaban sus rostros.
-Nos alegra mucho verle, maestro.
-No digas nada. Hemos tenido que venir por sus errores llevaron a la destrucción de su propia ciudad. Y el mundo también corre peligro.- Chat Noir hizo su mejor esfuerzo de no bajar la mirada como muchas veces había hecho desde lo sucedido.
-Si me deja explicar la situación maestro…
-No hay necesidad.- dijo este con dureza sin mirarle.- Apenas y derrotemos a Ladybug y recuperemos el miraculous vendremos por el tuyo y el resto. Mientras tanto no intervengan. Sabía muy bien que fue un error dejarles los miraculous a dos jóvenes como ustedes. Y me aseguraré que a futuro este error nunca se vuelva a repetir.- el gato mordió su propia lengua. De repente se sintió atacado sintiendo aquello demasiado injusto pero él no era nadie para reclamar. Sus manos no estaban tan limpias como las de Bridgette, también estaban manchadas de sangre, la sangre de ella, desde hacía muchos años atrás antes de esta tragedia. Bajó la cabeza en silenciosa resignación.
-Entendido. Pero por favor… no pongan en riesgo su vida.- el maestro frunció el ceño pero asintió, o eso le pareció a Chat Noir. Se dio la vuelta y se fue de allí con los otros seis maestros que le seguían.
Chat sintió la mano de Viperion posarse sobre su hombro.
-¿Estás seguro de esto?
-Quiero estarlo. Ellos son unos expertos, espero que puedan contra ella.- declaró deseando con toda su alma que ellos pudiesen derrotarla al fin.
Los maestros llegaron a la ciudad en ruinas. El lugar era tan silencioso que incluso se escuchaba el sonido de las ratas correr y chillar bajo ellos en las alcantarillas. Su Han ordenó a los maestros separarse y obedecieron de inmediato. Caminó por la avenida principal hasta llegar a lo que quedó del Arco del Triunfo. Por debajo de los restos pudo ver la mano putrefacta de un cadáver y por sus pies una muñeca que alguien dejó olvidada.
-¡Vaya! ¡Vaya! ¡Vaya!- zureó lento y fuerte Mort Rouge que estaba sentada encima de una luminaria no muy lejos de él, con su pierna recogida hasta su pecho y una amplia sonrisa.- El gran maestro ha llegado. ¿A qué debo este magnífico honor?
-Ladybug. Como maestro del templo de los miraculous te ordeno que me regreses tu miraculous y la caja. Has pervertido tu camino y no eres más digna de portar tu miraculous.
-Eso no lo niego.- aceptó ella ladeando la cabeza y aceptando sus palabras.- Sé que ya no soy digna y que Tikki y los demás estarían mucho mejor sin mí.- Su Han se sorprendió ante sus palabras, podía ver la verdad en ellas.- Le juro que lo que más desearía en estos momentos sería renunciar a todo y que mi memoria se borrara… pero eso dejaría impune a muchas personas.- siseó entre dientes con rabia y luego volvió a sonreír, poniéndose de pie sobre el vehículo con una sonrisa.- Así que los necesito un poco más hasta cumplir con mi objetivo. Por lo que le pediré amablemente que se marche.
Los maestros se movieron sigilosos alrededor, Su Han podía sentirlos sin necesidad de verlos o escucharlos.
-No. Me entregarás tu miraculous y serás depuesta de tu cargo como guardiana. No permitiré que sigas haciendo mal de este poder sagrado.
-Ah, ah, ah~- movió su dedo en negativa.- Todavía tengo cosas que hacer, maestro. Y ya que lo recuerdo, también estoy enojada con usted.- dijo con una sonrisa retorcida.- Usted sabía todo pero me dejó a mi suerte. A mí, ¡Ladybug! Todo lo que dijo sobre las tradiciones, proteger el equilibrio y de confianza fueron sólo palabras de su parte. Tiene parte de culpa en todo esto. Así que es hora de que se haga también responsable.
En ese momento dos maestros atacaron sin siquiera hacer el más mínimo sonido en el viento, pero cuando sus patadas tocaron la luminaria se dieron cuenta que todo fue una ilusión. De repente el sonido de las ratas aumentó y el temblor en el suelo hizo que todos se pusieran alerta.
-¿Qué es esto?
Fue que se dio cuenta, las ratas no hacían el sonido porque sí, estaban huyendo de algo. Las tapas de las alcantarillas salieron volando y torres de agua se dispararon en cada esquina. Pronto uno de los maestros cayó de uno de los techos y Su Han vio sorprendido al maestro herido. Luego enseguida otro le siguió, cayendo por completo atado en una posición nada cómoda contra el pavimento.
-¡Reúnanse!- ordenó el maestro a los maestros restantes que rápidamente se unieron y formaron un círculo alrededor. Pronto, Mort Rouge apareció atravesando una columna, tenía sobre de ella los miraculous, todos los que tenía disponibles y listos para usar su poder.
-Así como con muchos voy a regresarlos a su hogar, pero no sin antes darles una lección para que no vuelvan.
Los maestros atacaron y ella fue contra ellos, sin embargo, cuando Su Han lanzó su golpe ella ya había invocado el poder de Multitud del miraculous del ratón, pasando burlonamente entre estos y posándose sobre algunos. Uno de estos quedó rápidamente paralizado por el Veneno de la abeja y otro sintió la poderosa fuerza del miraculous del tigre y del buey, escuchándose sus huesos romperse y caer al suelo. Nada más quedaban tres de pie y los pequeños ratones se perdieron de la vista de todos.
Su Han escuchó atento lo que estaba alrededor, a pesar de que el agua le dificultaba la tarea, podía escuchar los pasos en el agua y eso era suficiente. Giró sobre sí mismo y pateó el agua de sus pies logrando darle a Mort Rouge que había regresado a su tamaño original. Los dos maestros restantes fueron a por ella y la joven reaccionó retrocediendo de inmediato, bloqueando sus poderosos ataques hasta que Su Han se unió y la golpeó directamente en el plexo solar, sacándole el aire y lanzándola contra una pared. Los dos maestros la sujetaron de los brazos para incapacitarla contra una pared y Su Han volvió a golpearla con fuerza haciendo que la pared se agrietara y ella vomitara saliva y sangre.
-Has ensuciado el nombre de la orden de los miraculous. Ahora te retiraré tu miraculous y se te borrará la memoria.
Ella logró recomponerse un poco y sonrió con los hilos de saliva y sangre cayendo de su boca.
-Habla mucho… siempre ha hablado mucho.- fue entonces que Su Han sintió algo en su espalda, se trataba de un pequeño ratón, no, una mini Multi Rouge, dando a entender que no se había unido por completo a ella en su momento y este pequeño ratón tenía el miraculous del sonido.
-¡Requiem!- el sonido a tan corta distancia hizo que el viejo maestro saliera volando hacia el cielo.
Este apenas y se recuperaba del poderoso ataque directo cuando al bajar su cuello fue tomado por la villana desde lo alto de un edificio. Su Han no podía creerlo y al mirar hacia abajo vio a los otros dos maestros en el suelo.
-I-Imposible… nadie tiene tanto poder, ¡ugh!- la mano del miraculous del tigre se introdujo en su boca y estiró hacia afuera su lengua.
-Parece ser que no recuerdas de lo que soy capaz. Fui alguna vez Ladybug, la heroína que hacía lo imposible posible. La protectora de Paris y del mundo.- dijo entre dientes estirando más su lengua.- Pero cuando el mundo falla al héroe, este debe hacer algo para cambiar el mundo, ¿no cree, maestro?- los ojos del maestro se abrieron ante el entendimiento de sus palabras, intento decir algo para hacerla cambiar de parecer pero era inútil.- ¿Quiere hablar? Ups, lo siento. Pero para eso necesitará… su lengua.
El movimiento de las garras perforar la carne fue rápido y doloroso. Cuando le soltó este se estaba desangrando mientras caía al vacío y ella abrió un portal hacia el Tibet, hacia el templo mismo, y luego envió a los otros maestros. Miró la lengua en su mano y rio con gran placer. Ya quería mostrar su trofeo a todos esos incautos. Sin embargo, algo captó su atención… una figura que se movió a lo lejos y regresaba de vuelta a su base.
-Mmmm~, parece que no vinieron solos. Bien, me siento muy generosa el día de hoy como para hacer una oferta 2X1.
Carapace había sido testigo de lo ocurrido. Había ido a por víveres con un grupo, por unos momentos había pensado en intervenir pero no quería estorbar. Sin embargo, ella se había deshecho uno a uno de esos sujetos y hasta arrancado la lengua a un pobre hombre. Tenía que salir de allí con su equipo y llevar los víveres y medicamentos. Llegó con el grupo que ya tenía todo empacado.
-¿Qué pasó? ¿La derrotaron al fin?- preguntó Noel a su hermano.
-Tenemos que salir de aquí pero ya. No quiero que hagan ruido, intentaremos irnos rodeando el Sena.- le dijo al grupo que asintió, y fue que Carapace sintió algo rozar su cabeza. Al ver arriba vio el yoyo suspendido como un péndulo.
-¿Tan pronto se van?~- la villana hizo un mortal en el aire perfecto al caer al suelo y miró al grupo que estaba congelado de miedo.- Oh, vamos. ¿Ni siquiera un aplauso?
-Hermano…- musitó Noel y Carapace antepuso su escudo al grupo.
-Váyanse de aquí ahora mismo.
-Pero…
-¡Váyanse YA!- les ordenó con voz firme.- Y dile a Alya que la amo.
Ante esas palabras Noel sintió sus lágrimas agolpar sus ojos al entender lo que estaba haciendo.
-No… ¡No! ¡Nino!- gritó este pero un fuerte Iván lo tomó con fuerza y lo cargó llevándoselo a pesar de lo mucho que pataleaba y gritaba.- ¡Suéltame mastodonte! ¡Nino! ¡NINO! ¡No te hagas el puto héroe! ¡NINOOOOO!- gritó hasta casi romperse la garganta y tras unos momentos su voz ya no fue audible para ambos contendientes.
-Muy noble de tu parte. ¿Dónde estaba esa nobleza años atrás?- Carapace no respondió.- ¿Qué pasa? A ti no es a quien arranqué la lengua.- soltó una pequeña risa. Carapace tragó duro.
-Quisiera creer que hay algo de humanidad dentro de ti. Pero creo que pido demasiado.
-Claro que tengo humanidad. Pero es solamente con quienes me ayudaron en mis horas más oscuras. Y antes de abrir esa asquerosa boca tuya deberías preguntarte, ¿dónde quedó tu humanidad cuando yo, tu supuesta mejor amiga, fue a parar a prisión?- Nino no respondió pero era claro que había dado en el blanco.- Por cierto, ¿alguna vez Lila te presentó al fin a ese director tan famoso que tanto te prometió que conocerías?
-Sé que lo que hicimos estuvo mal. Pero eso no te da derecho de hacer esto.
-¿No?- soltó una carcajada al aire.- ¡Estoy en todo mi maldito derecho!- le gritó eufórica.- ¿Sabes lo que me molesta más? Que Alya y tú tuvieron el maldito derecho de ser padres mientras que yo no. Así que voy a devolverles el favor y arrancarles el corazón como a mí me pasó.
Y sin decir más ambos se lanzaron contra el otro en una pelea que nada más tendría un ganador.
…
El miraculous del zorro reposaba sobre su escritorio y Bridgette lo miraba fijamente. Todos los kwamis estaban congregados alrededor de su cabeza y susurraban unos a otros sin saber cómo procedería la Guardiana. Tikki fue habló al oído de Bridgette.
-Bridgette, si no estás segura o no te sientes preparada…
-No creo estar preparada, Tikki, pero ¿cuándo lo hemos estado?- tragando duro tocó el miraculous y este se iluminó saliendo de este una esfera de luz naranja que se movió inquieta alrededor de Bridgette hasta que Trixx apareció.
-Ah… ¿dónde estoy?- se preguntó el kwami confundido más cuando vio a Bridgette no pudo evitar sobresaltarse y retroceder.
-Tranquilo. Estás a salvo.- dijo Bridgette malinterpretando su reacción.
-¿Otro yo? ¿De dónde vienes amigo?- interrogó Trixx un tanto desconfiado.
-O de qué tiempo.- agregó Fluff girando sobre él y sobre sí mismo.- Tiempo, pasado, futuro, qué tan adelante o qué tan atrás.
-Chicos, calma.- dijo Bridgette para que no lo abrumaran.- Puedes responder si lo crees apropiado pero de verdad me gustaría mucho saber de dónde vienes.- el Trixx del futuro bajó la mirada y Bridgette le dio unas uvas verdes a sabiendas de que le encantaban. Al ver la fruta, el kwami comenzó a comer, Bridgette se preguntó con qué rayos estaba alimentando Lila a este pequeño o si de verdad le preocupaba al menos alimentarlo.
-Mmmm, nada más he comido granola y frutos secos todo este tiempo. Esto es una delicia.
Bueno, al menos era un pequeño peso menos. El Trixx del presente no parecía feliz de compartir sus uvas, menos con él mismo, pero Bridgette le dedicó una mirada conciliadora para que le dejase comer y lo tomó entre sus manos para que estuviera cerca pero no tanto para atosigar a su otro yo. Cuando pareció más a gusto, este miró a Bridgette sin miedo, o al menos con mucha menos desconfianza.
-¿Ya te sientes mejor?
-S-Sí… gracias.
-Me alegro mucho. Me gustaría hacerte algunas preguntas, claro, si es que no te molesta responder.
-N-No… bueno, lo intentaré.- Bridgette asintió.
-¿De qué tiempo eres?
-Vengo del futuro.- todos ahogaron una exclamación.
-¿Qué tanto del futuro?
-Quince años.- Bridgette apretó los labios, sintiendo un frío comenzar a surcar su espalda.
-¿Puedes decirme algo de ese tiempo?- el pequeño negó.
-N-No puedo decir mucho.
-Entiendo. No puedes decir nada sobre quienes fueron tus portadores, ¿no?- el kwami asintió.- Trixx, ¿pasó algo conmigo?- el kwami asintió.- ¿Es por eso que no pude protegerlos? ¿Por eso están en manos de Mort Rouge?- el kwami se paralizó y para sorpresa de todos negó con la cabeza. Bridgette mordió un poco su labio.- Trixx, ¿cómo es el futuro?
-Es… horrible. Hay destrucción, miedo, s-s-sangre por todos lados y… mucha muerte.- se cubrió su rostro con su colita y Bridgette sintió su corazón hundirse ante las palabras del kwami y el temor de los demás kwamis.
-Trixx… ¿Mort Rouge es una persona del futuro?
-Sí.
-¿Es alguien a quien yo conozco?
-N-No puedo decir eso.
-Bien, capto.- respiró hondo y preguntó.- Si entonces si en el futuro algo me pasó, pero al mismo tiempo no fue por eso que están tus amigos y tú a merced de Mort Rouge, eso quiere decir que…- de repente se sintió mareada y se levantó tambaleante de la silla alejandose del escritorio.- No… no puede ser…- de repente las palabras de Mort Rouge sonaron en su cabeza,
-El futuro no cambiará Ladybug. Y aquellos a los que proteges, aquellos en los que confías, y la persona que amas te apuñalarán por la espalda sin dudarlo un segundo.
-Piensa en mí como una amiga, la amiga que está aquí para abrirte los ojos.
-Yo sé todo de ti, querida. Y tarde o temprano me darás la razón porque así son las cosas. ¡Es inevitable!
Sintió deseos de vomitar pero pudo controlar la bilis pero estaba tan pálida que los kwamis se congregaron alrededor de ella.
-¡Bridgette! ¿Qué tienes?
-Necesita agua, ¡Tráiganle un vaso!
-¡Aire! ¡Abran las ventanas!
-¡Denle espacio! ¡Atrás! ¡Atrás!
Bridgette tomó el vaso de agua que los kwamis llenaron hasta el tope, ni siquiera le importó derramar algo de esta mientras la bebía y logró sentirse un poco mejor, pero no del todo. Miró de nuevo a ese Trixx que tenía las orejas abajo.
-Sé que un kwami no puede decir nada de sus portadores, ni siquiera escribirlo o en señas, pero puedes decirme, ¿sigo siendo la guardiana de tu miraculous y el de los demás?- el pequeño kwami bajó la cabeza sin responder pero su silencio le dijo todo. Bridgette dejó que sus rodillas al fin cedieran y se quedó sentada en el suelo no sintiendo ni escuchando nada alrededor suyo, dándose cuenta de una verdad que admitía que desde lo más hondo de sí misma sabía pero que no quería aceptar. Por eso jugó con ella, sus extrañas palabras, sus sospechas de que conociera su identidad… ahora todo estaba claro.- Yo soy Mort Rouge.
…
Nino y Claude llegaron a la casa de Juliet y la joven los guio hasta su habitación. Claude se encargó de observar cada pequeño detalle del lugar intentando mantener una expresión tranquila al estar por primera vez en la casa, y más que nada en la habitación, de la chica que le gustaba.
-Tengan cuidado, mi cuarto no es demasiado grande.
La habitación era pequeña pero no por ello minúscula. La habitación de color melocotón tenía una amplia ventana en la que se imaginó visitarla de forma romántica como Kid Mime, un escritorio más grande que la media donde cabía su computador y varias libretas y libros desperdigados, un armario en la pared, un par de coloridos pufs en una esquina donde había un televisor y un par de consolas y controles cubiertos con una tela para protegerlos y un librero que estaba dividido en libros y video juegos. Aunque fuese a tropezarse un par de veces tenía que admitir que le encantaba la habitación.
-¡Viejo! Mira estos juegos…- dijo Nino fascinado.- Espera… ¿tienes los juegos de UMC 5 y GoW* Ragnarok? ¡Es imposible! ¡No saldrán hasta dentro de finales del año!
-Mi hermano Christian es programador de video juegos.- explicó Juliet.- Vive en América y me envía los juegos a probar o por adelantado antes de su fecha de lanzamiento.
-Wow, que genial no hacer fila en la tienda. ¿No crees, Claude? ¿Claude?
-Eh, ah… ¿qué decías?- le preguntó apenado ya que se había perdido un momento en su imaginación y en el aroma a frutos que percibía en el aire.
-Olvídalo. ¿Y bien? ¿Esperamos a Félix y a su versión madura?
-No. Los tendré en directo en unos momentos.- dijo encendiendo la pantalla del monitor y tal como predijo, momentos después de conectarse dos pequeñas pantallas aparecieron. Los kwamis salieron de sus escondites y se acercaron al enorme bulldog que no dejaba de roncar sobre la cama de la joven.
-¿Qué es esta bestia?- preguntó Duusu.
-Es un perro, uno muy arrugado y baboso.- explicó Fluff.- Ya van varias veces que babea mi colita.
-Es lo que los perros hacen.- dijo Wayzz, aunque este parece más ancho que la media.
Cuando al fin aparecieron los rostros de ambos Félix, Nino ahogó una exclamación.
-No puede ser… si es verdad, ¡sí eres tú, Félix!- exclamó Nino al ver a la versión adulta de su amigo y el joven suspiró.
-¿En serio, Nino?- más el adulto rio entre dientes.
-Supongo que es normal estar sorprendido.
-Vaya, es más amable que tú. Deberías aprender un poco de él.- dijo Claude y el joven Félix frunció más el ceño.
-Si no estuviera fuera te respondería como quisiera.- Nino y Claude rieron pero Juliet exhaló profundo antes de hablar.
-Bueno, creo que es hora de hablar de lo que ha pasado hasta ahora.- dijo con actitud mediadora.- El alcalde ha retirado la orden de aprehensión contra Ladybug, Chat Noir y sus aliados y está en todas las noticias la orden para atrapar a Lila. Toda la policía la está buscando en cada rincón de la ciudad y es cuestión de tiempo para que la encuentren.
-Después de revelar sus mentiras todo se fue cuesta abajo. Debieron haber visto su cara en la escuela.- dijo Claude con una media sonrisa.- Se los juro, me hubiese gustado grabar el momento para la posteridad.
-No digas eso.- regañó Nino.- La señorita Mendeleiev salió herida, está estable pero esa loca casi la mata e iba a matar a todos los que estábamos allí.
Matar. La sola palabra causó escalofríos a los jóvenes, no pudiendo imaginar que una chica de su edad, y menos una compañera de clase, fuera capaz de alzar un arma contra ellos. Claude se disculpó por lo que dijo en voz baja pero fue audible para todos y Juliet le dedicó una leve sonrisa antes de volver a concentrarse en la pantalla.
-Bien, lo que tengo que decir es un asunto serio pero creo saber entender cuál es la motivación de Mort Rouge para hacer esto.
-¿Qué quieres decir?- preguntó el adulto.- Ella misma nos ha dicho que haría que la historia se repitiera.
-Sí, pero no hasta que se complete su plan.- Juliet abrió una ventana, una presentación que era una línea del tiempo de lo sucedido hasta ahora.- De acuerdo a las explicaciones de Fluff, el tiempo es como una soga, este se va hilando por cada acción poco a poco hasta algo que no debería pasar forma un nudo y a pesar de que el tiempo se sigue hilando este se deshará en un punto en el que existirán finales diferentes. Su nudo comenzó cuando Bridgette fue culpada de todos esos crímenes y el hilo del tiempo siguió haciéndose hasta que se dividió en partes formando distintos universos del tiempo. En uno de los universos Bridgette muere.- explicó señalando una ventana donde estaba el símbolo de Ladybug tachado.- En otro, Chat Noir y Ladybug mueren. En otro ella es detenida pero sigue como la villana de la ciudad. Y hay otros similares pero debido a las acciones que se han hecho, esos futuros han desaparecido sólo perdurando el futuro de donde este Félix y Mort Rouge provienen.
Nino alzó la mano como si estuviesen en clases.
-Vale, creo entender que hemos evitado varios finales trágicos, ¿no? Entonces, ¿por qué no desaparecen todavía nuestros amigos futuristas? Es decir, ¿no debería ser como en los programas en donde arreglas el pasado y este desaparece?
-¡Oh, no, no, no, no, no!- dijo Fluff.- Las cosas son más complicadas en la línea del tiempo. Muuuuucho más.
-Deja lo explico.- dijo Juliet tomando a Fluff y dándole un dulce que tenía.- A pesar de que estamos cambiando varias cosas, el nudo original sigue impidiendo que los cambios sucedan de inmediato como en los otros futuros que han desaparecido y se crearon en un punto del tiempo mucho más adelante.
-La última pelea.- dijo el adulto entendiendo sobre ello.- Nosotros peleamos contra ella para conseguir el miraculous del conejo. Sabíamos que podíamos morir o incluso existía la posibilidad de que ella… que nosotros tuviésemos que… - cerró la boca y el joven afiló la mirada.
-Debes estar bromeando, ¿no? Eso nunca me lo dijiste.
-Se pensó que podría pasar. Igualmente hubiésemos regresado en el tiempo para impedir todo esto.
-Tú…- el joven parecía querer decirle algo pero apretó los labios y dejó salir un trémulo suspiro.- Juliet, prosigue con lo que estabas diciendo.
-Vale.- dijo ella.- A pesar de que hemos cambiado algunas cosas ese nudo sigue impidiendo que los cambios afecten ese futuro. Tenemos que deshacer ese nudo para que todo fluya y hacer desaparecer ese futuro pero… creo que ella ya lo sabía.
-¿Qué quieres decir?- preguntó el adulto confundido.
-Mort Rouge tiene como misión hacer pagar a todos por lo que le pasó. Mientras más doloroso mejor para ella. ¿Y qué mejor venganza contra su propio Chat Noir que impidiendo que realice su misión?
-¿Quieres decir que ella sabía que él iba a viajar en el tiempo?- preguntó el joven Félix.
-No estoy segura en un 100%. Sin embargo, considerando sus acciones y su forma de actuar tanto con sus enemigos como con quienes fueron sus amigos, es lo que más se acerca con el objetivo de...
-¿Qué porcentaje?- interrumpió el joven rubio y ella puso una gráfica en su computador.
-Un 83%
Un silencio cayó sobre de ellos y el adulto pasó su mano por la cicatriz donde había estado su ojo y luego miró la pantalla.
-¿Me estás diciendo que ella planeó todo esto? ¿Qué intentaríamos detenerla a cualquier costo?- ella asintió y el adulto suspiró.- ¿Cómo se puede detener?- Juliet respiró hondo antes de hablar.
-Mañana es el día X, o el día en el que el nudo se creó. Tenemos que detener a Lila o cualquier plan que Mort Rouge tenga para ella sin importar qué. Y tú, el Félix adulto, debe permanecer oculto ya que me temo que su objetivo es conseguir tu miraculous.
-¿Mi miraculous? No lo entiendo, ¿por qué?
-Su objetivo es verte fallar.- dijo el joven Félix de repente entendiendo varias cosas.- Es nuestro peor miedo. Fallar en proteger lo que amamos.
-Entonces va a hacer algo grande.- dijo Claude y Nino asintió.
-No sólo eso.- dijo Juliet preocupada.- Mort Rouge ha hecho todo lo posible para no sólo hacer perdurar su existencia hasta este punto a pesar del nudo en el tiempo, sino porque estuvo preparando a Bridgette para este día. La usará para algo grande y luego buscará la forma de quitarle el miraculous para finalizar su objetivo. Va a pedir su deseo para crear una nueva realidad.
Todos vieron la pantalla en la que se veía ambos miraculous y luego un espacio en blanco.
-Creará un mundo nuevo.- musitó Félix para asombro de todos.- Y deberemos preguntarnos qué clase de mundo va a crear.
-O a quienes incluirá.- agregó Nino para horror de todos los presentes. El adulto al entender todo ello asintió, aunque por dentro temía lo que eso fuese a conllevar.
-Muy bien. Es hora de hacer el último plan.- declaró serio y con voz de mando.- Mañana debemos de sobrevivir para que todos podamos tener un futuro. Esto no va a ser como ella quiera.
…
Cuando anocheció Bridgette no había bajado a comer, su estómago le decía que debía alimentarlo pero su cuerpo no se movía de la cama mirando a la nada. Marinette comenzó a asustarse. Además, había notado que desde esa tarde el teléfono de su hermana se había al fin descargado después de las múltiples llamadas y mensajes que estuvo recibiendo iluminando el aparato cada tanto.
-¿Por qué Bridi no responde?
-Está pensando muchas cosas, es mejor dejarla sola.- dijo Tikki igualmente preocupada por su portadora. Sin embargo, Marinette subió a su cama y se sentó a un lado. Bridgette le daba la espalda.
-Brid, debes levantarte y comer. Papá y mamá se van a preocupar.
-Lo siento, Mari. Pero no me siento con ánimos.- Marinette infló sus mejillas y se paró sobre la cama.
-¡ALLÁ VOY!- saltó sobre su Bridgette que no tuvo de otra más que levantarse.
-¿Estás loca? Me has sacado el aire…
-¡DESPIERTA!- le golpeó con su dedo en la frente.- Tú siempre me dices que si algo me molesta debo enfrentarlo. Si algo te tiene así no debes de quedarte ahí sin hacer nada.
-N-No es tan fácil Marinette… me acabo de enterar de algo que podría cambiar mi futuro y no sé cómo tomarlo.- habló cabizbaja.
-Pero si no haces algo al final nada cambiará.- Bridgette miró con asombro a la pequeña.- Yo confío en ti. No porque seas Ladybug, sino porque eres mi hermanita y te quiero. También mamá, papá, mis abuelitos, Claude, Zoe, Kagami aunque me da miedo, Luka, Juliet y hasta Chat Noir. También Félix, ¿no? Todos nosotros estamos para ayudarte. Así que no te pongas triste. Si necesitas ayuda estamos contigo.- Bridgette exhaló una leve risa y abrazó a su pequeña hermanita. Marinette definitivamente tenía ese algo especial que la volvía única.
-Gracias, pequeña fresita. Es justo lo que necesitaba.
-Ya ves. Y es como dices. Todo tiene una solución, nada más hay que buscarla.
Fue que Bridgette se separó de ella y la miró con ternura con una sonrisa.
-Tienes razón. Siempre hay una solución para todo.
Tras unos momentos alguien tocó a la trampilla baja, corrección, la trampilla a la azotea. Al abrir, Chat Noir se asomó y miró la escena entre ambas hermanas.
-Amm… ¿interrumpo algo?
-Para nada.
-¡Bien! ¡Chat Noir llegas justo a tiempo!- dijo la pequeña que se acercó a él y susurró a su oído.- Ha estado triste todo el día. Hazla sonreír.
-Haré mi mejor esfuerzo.- Marinette sonrió y bajó de la cama para así salir del cuarto y darles la privacidad que ellos merecían.- Tu hermana miaudora.
-Ya, pero es que no sabe lo terribles que son tus chistes.
-¡Hey!- ella se acercó para subir a la azotea y así poder admirar parte de la ciudad.- Hoy ha sido un día muy agitado.
-Ni que lo digas… Chat, ¿puedo hacerte una pregunta?
-Adelante.
-Ese amigo tuyo… ¿es del futuro?
-¡Eh! Aaaah… no entiendo qué quieres decir ¿Futuro? ¿Qué futuro? No sé a qué te refieres.- dijo jugando con sus garras.
-Chat Noir.- le llamó la atención y él suspiró resignado.
-Vale… sí. Lo es.- ella respiró y dejó ir el aire poco a poco.
-Supongo que sé lo que ahora sientes cuando te escondo cosas. Perdón…
-No, Bridgette. También te entiendo. No sabes cuántas veces quise decírtelo pero… no podía. Me lo tenían prohibido.
-¿Y ahora ya no?
-Al diablo. Igualmente iba a decírtelo.- ella asintió y tras unos momentos de silencio entre ambos ella bajó la mirada.
-Chat, si algo pasa, si no podemos derrotar a Mort Rouge o hace algo que ponga en riesgo tu vida o la de alguien más… Yo quiero que la detengas, usándome a mí.
-¿Qué?- sus orejas bajaron mirándola perplejo.
-Ya sé quién es ella.- dijo con resignación dolorosa.- No sabes lo mal que me siento al saberlo. Saber que ella soy… yo.
-Tú no te pareces en nada. No digas eso.- ella suspiró.
-Ya lo sabías entonces.- vio a su gatito bajar las orejas pero no se enojó, más bien le sonrió triste.- Chat Noir… si algo pasa, tienes que detenerla a cualquier costo usándome a mí.
- No… Espero que no sugieras lo que creo que estás pensando.
-Chat Noir. Si la situación se pone mal, tú deberás atacarme a mí.
-Eh… creo que se metió cerilla en la oreja. ¡No escuché nada!
-¿Chat Noir?
-¡La, la, la, la, la!~ ¡No escucho nada!- se cubrió los oídos.
-¡Chat!
-¡No oigo nada, soy de palo, tengo orejas de pescado!
-¡Chat Noir!
-¡Miauuuuu! ¡Meoooooooow!- maulló frenético y ella tuvo que tomar sus manos y quitárselas por la fuerza.
-¡Tendrás que hacerlo!
-¡No lo haré!
-¡Tienes que ser tú!- le gritó tomando su rostro con sus manos.- Tienes que ser tú y nadie más.
-Es que no puedo. ¡No voy a hacerlo!
-¡Ugh! ¿Por qué haces las cosas difíciles?
-¡Porque eres muy terca! ¡Hay otras soluciones!
-¡Te estoy diciendo por si acaso!
-¡NO!
-¿Por qué tienes que ponerte tan pesado?
-¡POR QUE TE AMO!- le gritó a todo pulmón para sorpresa de ella.- Te amo. Y eso no cambiará. Amo a la chica valiente, patosa, tierna, dulce, aguerrida, creativa, y que es capaz de comerse un pastel entero y cargar sacos enteros de harina sin cansarse y es más fuerte que yo.- la tomó del rostro para ella también le viera.- Te amo. Y siempre lo he hecho a pesar de ser un cabeza dura.- la joven se quedó sin palabras, sintiendo su corazón latir y sus mejillas enrojecer. Chat Noir estaba decidido por su amor a ella.- Plagg, Destransformación.- en ese momento Félix Agreste la estaba mirando fijamente con esos intensos ojos azules. No hubo palabras ante el asombro, no hubo más gritos o lágrimas, y ninguno habló por esos segundos que fueron eternos para ellos. Sus labios se tocaron y se abrazaron con fuerza dejando que ese beso expresara todo su sentir. Tikki sonrió y Plagg se asqueó, más esperaban que con ello las cosas fuesen para mejor de ahora en adelante.
Mientras tanto en la cocina.
-¡Sabine! ¿Dónde dejé el azúcar? ¡Debo hacer mi especialidad para los enamorados!
-¡Chat Noir es mi cuñado! ¡Chat noir es mi cuñado!- gritó Marinette saltando sobre el sillón con gran emoción. Sabine suspiró ante ese par, aunque era entendible ante esa sonora confesión, debía poner un lugar extra en la mesa.
…
Esa noche, Gabriel estaba junto a su esposa, sosteniendo su fría mano observando por un momento el respirador que tenía conectado y luego su pacífico rostro. La puerta se abrió a sus espaldas y se cerró a la espalda del intruso.
-¿Cómo sigues?- preguntó el adulto que llevaba un plato de comida caliente.
-Todavía sigo haciéndome a la idea de todo lo que pude haber provocado. ¿Por qué no viniste a mí en primer lugar? Mucho pudo haberse evitado hasta cierto punto.
-Porque te conozco. Incluso en el futuro, tú mismo me dijiste que en esta época eras demasiado terco para escuchar a otros y no te equivocaste. Incluso en estos momentos no sé si confiar en ti por completo o seguir vigilándote.- Gabriel le miró ofendido por un momento pero al ver a su hijo como un adulto prefirió cerrar la boca.
-Yo hice todo por nosotros. Por nuestra familia.
-Tal vez así lo viste. Pero al final tu deseo egoísta pudo haber traído la muerte de Adrien o la mía en su momento.
-¡No!- casi saltó de su silla.- ¡Yo nunca hubiese dejado que pasara eso!
-Ese es el precio. Querer cambiar el pasado para recuperar a un ser querido hubiese traído consigo el perder a otro. Aquí no habría nada al azar y se así hubiese sido, ¿de verdad querías intercambiar la vida de tu esposa por la de alguien más? Ella nunca lo hubiese aprobado, al contrario, te odiaría.- Gabriel desvió la mirada pero sabía que sus palabras habían dado en el clavo. Félix se sentó a un lado y le miró fijamente.- Sabes que debes dejarla ir.
-¿Qué?- volvió a mirarle, esta vez estupefacto por sus palabras.- ¡Claro que no! Todavía hay una oportunidad, ella puede regresar a nosotros. ¡Tiene que hacerlo!
Félix suspiró y luego tras unos momentos se levantó y con sumo cuidado le quitó la mascarilla de oxígeno a su madre.
-¡No! ¿Qué haces? ¡Pónsela de vuelta!- gritó aferrándose a su brazo pero el joven adulto no se inmutó.
-Tú sabes tan bien como yo que ya no necesita esto.- Gabriel dejó de sacudirlo y le miró atónito.- Ya basta de mentirte a ti mismo. Sabes muy bien que ella ya no está entre nosotros desde hace mucho tiempo, esta cama tiene bolsas de hielo debajo y bolsas de agua fría para conservarla, aún antes del miraculous ella estaba enferma, lo sé bien porque tú me lo confesaste.- el agarre de Gabriel se debilitó gradualmente hasta que volvió a caer en la silla de ruedas.- El miraculous sólo agravó su enfermedad y este absorbió parte de esta. Por eso es que cuando Natalie usó el miraculous también enfermó en su momento y todavía lo está. Ella sigue necesitando atención aún hoy en día para hacerse cargo de dos niños.
Gabriel pasó su mano por su rostro, despeinándose un poco en el proceso.
-Ella quería hacer de este un lugar mejor para ustedes. Quería contribuir en algo antes de que su tiempo acabara. Pero su enfermedad ya estaba demasiado avanzada…- explicó con voz ahogada y Félix suspiró a lo bajo.
-Lo sé. Es por eso que debes darle el descanso que le corresponde. Vive tu vida, disfruta a tus hijos ahora que tienes juventud, y siempre recuérdala con ese gran amor que ambos tuvieron y que creo dos vidas que están dispuestas a cuidar de ti. Siempre y cuando tú también procures de ellos.
Al final Gabriel soltó un sollozo y Félix le dejó llorar en silencio. A las afueras de la habitación, Natalie que había escuchado todo se mantuvo afuera todo el tiempo, lloró también en silencio, sabiendo que debía despedirse de su mejor amiga y prometiéndole que cuidaría de su familia.
…
Leía el libro de la Guerra y la Paz, sin embargo, sentía que su tiempo estaba cerca. Lo había sentido a lo largo de esos días pero hoy era más notorio el cambio de energías que había. Sus horas estaban contadas pero estaba bien, pronto movería las últimas piezas de ese ajedrez que llevaba planeando años desde su encierro y todo estaría bien después. Tikki dormía en una mullida almohada, le dio una suave caricia y tras unos momentos vio en la calle a Lila entrar a su edificio de departamentos. Sabía a qué venía pero no esperaba que llegase a tales horas. Con movimientos suaves despertó a la pequeña kwami.
-Mmm. ¿Qué pasa?
-Quiero que te quedes dentro de la caja de los miraculous.
-¿Qué? ¿Por qué?
-Haz lo que te digo. Por favor, Tikki.- la kwami asintió, Bridgette normalmente no ordenaba, no le gustaba hacerlo, por lo que prefería que siguiese así y entró sin rechistar a la caja donde los demás la recibieron curiosos.
-¿Qué pasa?- preguntó Stompp.
-No lo sé. Pero parece ser que algo va a pasar.- explicó la kwami a los kwamis presentes y ninguno se atrevió a salir.
Mientras esperaba a Lila, miró por la ventana el cielo nocturno de Paris, pensando que mañana haría una perfecta luna llena…
Carapace saltó sobre uno de los muros de un edificio destartalado y tuvo que esquivar uno de los ataques del yoyo de Mort Rouge cuando este intentó atacarlo a la columna que se partió al jalar. Esquivó el escombro y atacó anteponiendo su escudo, no quería arriesgarse a lanzarlo a menos que estuviera por completo seguro que este regresaría a él. Ella siguió atacando y él defendiendo hasta que un golpe en el estómago lo lanzó contra un poste partiéndolo en dos.
-Has aprendido a relacionarte con el miraculous como antes. ¡Felicidades!- aplaudió ella y Carapace miró alrededor buscando algo que le pudiese ayudar y fue que recordó un lugar cercano, así que se movió rodeándola un poco.
-He mejorado mucho más de lo que crees. ¡Y todos pronto te harán frente para derrotarte!
-Claro, como si de verdad pudieran hacer lo que yo.- fue contra él y Carapace tuvo que poner su escudo para bloquear golpe y seguir retrocediendo.- Soy rápida.- barrió el suelo casi sacando de balance a la tortuga que tuvo que apoyarse con su mano para evitar un nuevo ataque.- Soy ingeniosa. ¡Soy más fuerte!- lo pateó con fuerza y fue tanta la fuerza que él salió despedido hasta las puertas de un club.- Soy la guardiana de los miraculous y ¡soy mejor que todos ustedes!
-Creo que has olvidado lo que es la humildad. Y quizás seas mejor, pero todavía podemos vencerte. ¡HA!- lanzó su escudo que ella esquivó apenas y moviéndose un poco.
-¿Eso es todo?- pero Carapace no apuntaba a ella y lo supo cuando el escudo comenzó a golpear y destruir las columnas que rodeaban el salón de baile.
-Oh, sí. ¡Protección!- invocó al saltar y atrapar su escudo y todo alrededor comenzó a derrumbarse ante el mal estado del lugar sobre la villana. Escombros y acero cayeron por todas partes y Carapace retiró su escudo cuando todo terminó. Se acercó ante los escombros y pudo ver una mano sobresalir de estos.- Lo siento, pero era la única forma.- la mano no se movió, permaneció inerte ante sus movimientos. Sonó su comunicador y respondió.
-Carapace, aquí Chat Noir. Danos tu ubicación.
-Estoy cerca del Rio Sena en el Suroeste, en un club llamado Full Moon… Creo que la vencí. O estás inconsciente, no se mueve.
-Vamos para allá y sal de ahí. No te arriesgues.
-De acuerdo, cambio y fuera.- terminó la comunicación y se dispuso a hacerle caso a Chat Noir pero se detuvo. Mort Rouge había destruido Paris, su ciudad, su hogar, nada volvería a ser como antes por culpa de ella. Incluso su hija tendría pesadillas por lo sucedido y ni qué decir de su esposa. Tal vez estuviese mal pero…tenía que asegurarse de que estuviera muerta.
Se acercó a ella y pateó su mano. Le habían caído encima los dos pisos enteros del club. Pero entonces notó en el techo un pesado vitral de una noche estrellada que decoraba el segundo piso, las orillas estaban revestidas de pesado acero. Lo sabía porque había tocado en ese club y ese vitral siempre le había gustado ya que las luces hacían que las estrellas y la luna adquirieran colores vibrantes, por eso siempre pedía tocar en el segundo piso. Miró abajo y siguió mirando la mano inmóvil. Aquello era lo suficientemente pesado para hacer puré a alguien. Tomó su escudo y lo lanzó arriba, reveló uno de los soportes de la esquina, luego otro, lo vio moverse un poco. Volvió a lanzar su escudo sin notar el leve movimiento de la mano. Su descubría el tercero el cuarto debía de ceder por sí solo. Lanzó su escudo escuchando el metal comenzar a ceder ante su peso.
-Lo siento de verdad, pero esto es lo mejor. No podría vivir en un mundo donde tú estuvieras respirando y deseando nuestras muertes. Un par de golpes más y será todo.
Lanzó una vez más el escudo y ante el fuerte sonido del choque del metal todo el escombro se alzó y Mort Rouge tomó a Carapace del cuello.
-Entonces muérete.- saltó esquivando el vitral que cayó pesado sobre de ellos, usó su yoyo para jalarlo del cuello y pasar a milímetros de la estructura que cayó justo donde ella estuvo momentos atrás. Lo subió hasta el edificio más alto cercano, seis pisos estaban más que perfectos. Carapace intentó respirar y no fue hasta que ella le arrebató el miraculous que le liberó y lo sujetó de la ropa en la orilla.
-B-Bridgette… Bridgette por favor, no lo hagas. Tengo una niña pequeña, por favor. Por favor, no me mates- suplicó con voz temblorosa.
-Yo también llegué a ser madre Nino, aunque fuera por unos instantes. Pero eso no te impidió querer matarme.- lo soltó y Nino cayó del edificio y ella también se dejó caer. Su cuerpo cayó de espaldas sobre un auto y ella sobre de él, no sólo destrozando los vidrios de este sino también casi desprendiendo su cabeza del impacto y su cuerpo se abrió del pecho entre sus pies manchándolos de sangre.
Los héroes llegaron a la escena pero no encontraron a Carapace. Chat Noir entonces escuchó no muy lejos de allí una melodía sonar. Salió de allí siendo seguido por los demás hasta donde estaba la música a todo volumen, encontrandose una calle arriba lo que quedaba de su amigo. Su cuerpo yaciendo sobre el automóvil, pero sin rastro de su cabeza y su pecho había sido abierto en dos. De repente Rena Rouge gritó de horror y comenzó a llorar a mares y Chat Noir vio lo que ella veía. Sobre un poste roto estaba la cabeza Nino clavada. Sus ojos seguían abiertos con hilos de sangre cayendo de estos y su mandíbula había sido dislocada para que en este pudiera caber el corazón que le faltaba en el pecho. La mandíbula dislocaba no pudo más sostener el corazón y este cayó al suelo como una pelota y rodó cerca de ellos. Rena siguió gritando como una desquiciada mientras Viperion intentaba tranquilizarla. Chat Noir no pudo ver esa escena por más tiempo, pero le acompañaría en sus pesadillas por mucho tiempo.
La puerta se abrió y Lila entró sudorosa y pálida a su departamento. Bridgette seguía contemplando la luna que era lo único que iluminaba ese cuarto.
-¡Tienes que ayudarme!- exigió Lila.- ¡Todo se fue al carajo! ¡Saben todo! ¡Ahora me están buscando y tienes que sacarme de esto!
-¿Cómo es que te descubrieron?- preguntó aun dándole la espalda y con voz tranquila.
-Por un par de malditos videos. ¡Esa puta de Chloe nos vio en las calderas y la zorra de Alya de alguna forma grabó todo lo de nuestra habitación!
-Ah… ¡Ja! Vaya, no pensé que usaría eso tan rápido. ¿El audio fue bueno?
-¿A qué te refieres?- preguntó confundida.- No te entiendo, ¿qué quieres decir? ¿Vas a hacer algo para ayudarme?
-Uff, pensé que eras un poco más lista pero bueno, nunca has tenido sentido común.
-¿Qué cosa? ¡Tienes que ayudarme! ¡Tú me metiste en este problema!- le gritó yendo hacia ella para abofetearla pero Bridgette detuvo su mano y la apretó con fuerza.
-¿Yo? No querida, tú misma te metiste en este problema.- giró su rostro revelando a la joven su rostro iluminada por la luna.- Y así como a ti nunca te importó mi vida ¿por qué carajos me importaría la tuya?- soltó una macabra carcajada al ver su rostro lleno de miedo.- Es hora de mostrarte tu futuro.
GoW* God of Wars.
….
Y… espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer! Así pues dejen review, nada de tomatazos, aceptamos bebidas de temporada, dulces y quesos, y sin más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!
