Sábado, 16 de abril de 2005

Disclamer: Ya todos lo sabemos de memoria, pero el ánimo sadomasoquista que reina en mi mente me obliga a decirlo: FMA no me pertenece (aunque no me sepa el nombre del autor sabemos que es de él) ni sus personajes, ni sus espacios, ni nada (¬¬). Solo Angelina, Zeus y John (que esta muerto XD) son míos. Cierto, Athena tb es mía.

Disculpas: Ya lo saben, FF no deja ni puntos ni signos de interrogación ni nada de eso.


Espacio Eterno

"Espejos del pasado, reflejos del futuro"

"¿Del…?" –Ed miró a Angelina visiblemente confundido. ¿Del futuro, eso era ridículo.

"¿No me crees?" –preguntó ella, sonriendo. -"No me extraña, no te preocupes"

"¡No, no es que no te crea pero…"

La pelirroja rió con ganas.

"No te preocupes. Me parece completamente coherente que pienses que este mundo no tiene futuro. Pero créeme que lo tiene. Y yo vengo de allá."

Hagane se sacudió un poco la sorpresa y miró el nuevo escenario. Hasta la molesta luz se había olvidado con la declaración de la chica.

"¿Y esto…?"

Ante él, una enorme máquina metálica, blanca reluciente, enormes ruedas negras y alas gigantescas. El gran detalle era que esa cosa no estaba ahí hacía dos minutos.

"Esta nave, Edward, se llama Zeus, y si las cosas salen bien, es lo que nos llevará a ambos a nuestros hogares"

Un extraño ruido salió de lo que Angelina llamaba Zeus y una puerta nació de la superficie lisa del costado. Al bajar, Ed notó que adherida a la puerta venía una escalera.

"Mientras desayunamos te cuento mi historia."

Luego de unos segundos, la escalera tocó tierra, y Angelina pisó el primer escalón. Con una mirada amigable invitó a Edward a seguirla, para entrar en la colosal estructura metálica. Luego de algunos titubeos, el rubio aceptó, caminando lentamente por los peldaños, como si de un momento a otro fueran a desaparecer.

"Vengo del año 2019 de la era de este mundo" –dijo cuando ya estuvieron arriba, cuando Ed terminó de ver todo con cara de embeleso. –"En mi tiempo, la tecnología permitirá sanar enfermedades que hoy son mortales, viajar a través de los grandes mares sin peligro y en cortos tiempos, hablar con alguien que está a miles de kilómetros, entre muchas otras cosas. Lamentablemente para mí, acabo de descubrir que, con algunos errores de cálculo y ayudas no previstas, esa misma tecnología nos permite lo que creíamos imposible… viajar a través del tiempo."

Angelina guió a Edward a través de blancos pasillos llenos de puertas, botones y miles de cosas que mataban al alquimista de curiosidad. Le sorprendía que esa chica hablara su mismo idioma, y que fuera capaz de leer todos los letreros que había en ese lugar, aunque no todos los entendiera.

"Esta nave nos permite viajar fuera de la Tierra" –los ojos miel claros de Hagane se clavaron en ella con sorpresa –"La profesión de estudiar el espacio se llama Astronomía, y la de salir hacia el espacio se llama Astronauta. De estos últimos solo hay unos cuantos miles en un mundo sobrepoblado como el que impera en el siglo XXI. Esta nave es la más moderna de todas las de su tipo, llamados Transbordadores Espaciales y yo, supuestamente la más apta para manejarla. Un amigo llamado John me acompañaba… pero lamentablemente murió en el accidente cósmico que nos trajo aquí… "

"¿Accidente qué?"

Una última puerta se abrió y apareció una pequeña cocina de la que Edward apenas pudo identificar algunos elementos. Angelina le invitó a sentarse y comenzó a calentar agua.

"Accidente cósmico. La Tierra flota en un lugar eterno llamado espacio o cosmos. Los planetas, las estrellas y todo lo demás son llamados elementos estelares, elementos espaciales o elementos cósmicos."

"Eso, incluso para esta era, es historia vieja" –Ella sonrió nuevamente al tiempo que colocaba frente a él una taza de café y se servía una de leche.

"Entonces no será tan difícil explicarte qué pasó. Eso si, tendré que contarte muchas cosas que tendrás que guardar en secreto si no quieres pasar a la historia como el nuevo Nostradamus"

"Claro."

Durante varias horas, Angelina se dedicó a explicar los principios básicos de la electrónica, la informática, genética, filosofía y sociedad del siglo XXI. A través de modelos y demostraciones, le mostró lo que se podía hacer y como se podía hacer. Sonriendo, se dio cuenta que el rubio asimilaba todo con gran rapidez, y que pronto comenzarían a hablar en términos similares.

"En pocas palabras, un accidente cósmico es una gran explosión que puede viajar miles de millones de kilómetros en pocos segundos. Son causados, generalmente, por estrellas que acaban su ciclo de vida y estallan. Estas explosiones, llamadas también súper novas, generan tal cantidad de energía que pueden destruir otras estrellas y planetas. Nosotros estábamos realizando experimentos que consistían en saltar de un punto a otro, sin recorrer la distancia entre ellos…"

"Una teletransportación"

"Exacto. El túnel estaba hecho cuando de pronto apareció la ola de energía que nos golpeó. Creo que la súper nova alteró los patrones del túnel provocando este viaje temporal en vez de espacial…" –Angelina levantó los ojos para mirar a Edward, quien se encontraba muy concentrado procesando las palabras de la pelirroja. -"Lo siento, fui demasiado rápido y ni siquiera pregunté si me entendías…"

"Entonces tu túnel es parecido a mi puerta… Ambas se generan y modifican con energía, con la diferencia que la Puerta se genera con gran cantidad de energía del Alquimista, y tu túnel…"

"Con energía generada por esta nave"

Hagane continuó pensando y Angelina no lo interrumpió. Lentamente ella preparó unos emparedados y los sirvió.

"¿Hace cuanto estás aquí?" –preguntó él.

"Casi 3 años"

Casi atragantado con su café, Edward lanzó un ruidoso "¿QUEEEE!" que la sobresaltó.

"¡Yo también llevo 3 años aquí!" –ella levantó una ceja y lo miró.

Recorrí el mundo buscando una solución que nunca llegó… Ni siquiera en este siglo tecnificado… Y simplemente me resigné.

"Vaya coincidencia" –dijo –"¿Qué diablos…?"

"¿Piensas que es una coincidencia?"

"…Pues claro… ¿no pensarás acaso que…?" –pero algo le impidió terminar la frase.

"¿Que llegamos juntos, al mismo tiempo, traídos por lo mismo?"

Fue después de la Gran Guerra… y aquí me tienes…

"¿En dos planos tempo-espaciales distintos a un mismo espacio convergente?"

"La Puerta es una conexión Interplanos, como la llamarías. Y si tu túnel es una manera de saltar a un punto a otro, entonces tu Túnel es una primitiva forma de la Puerta…"

"¿O sea que si el túnel fuera perfeccionado… podríamos saltar por el multiverso?"

"¿El qué?"

"Realidades paralelas"

Busqué y busque hasta que mi camino se cruzó al de Stephanie… Entonces me di cuenta que nunca podría volver y que lo mejor era vivir en este lugar…

"Los alquimistas tomamos nuestra energía de las muertes generadas en este mundo. Esta realidad existe para alimentar la necesidad energética de los alquimistas"

"Los científicos ciertamente tomamos los eventos del pasado para estudiar hechos y reacciones. La Tecnología también, podría decirse, se alimenta de los errores mortales de la ciencia para avanzar"

Edward bajó la cabeza un momento y comenzó a pensar. Su cabeza estaba armando nuevas piezas, basadas en la esperanza de que esa chica y su supuestamente futurista tecnología pudieran sacarlo de ese mundo.

"Si los alquimistas obtenemos energía de este mundo… y las bases del futuro son los errores de esta época… entonces es posible… que el paralelo de mi mundo sea tu realidad… y no estos años"

"¿Mm?"

"Este mundo es el paso obligado entre ambas realidades. El intermedio"

"Pero… si tu mundo se conecta con este a través del Espacio, y este al mío a través del Tiempo… entonces debería haber un sistema de equivalencia que combinara Espacio y Tiempo para crear un camino directo entre ambos mundos."

"Tu creaste un túnel al mismo tiempo que yo abría la Puerta. Pero tu túnel es una forma básica de La Puerta… ¡la energía de la supernova perfeccionó el túnel y te trajo a la primera parada de ese súper túnel interplanos¡este mundo!"

Todo en el mundo tiene un equivalente. Incluso el tiempo tiene una manera de ser convertido en espacio. Cuando logras ese conocimiento, tienes el mundo en tus manos Angelina…

"Solo debemos esperar a que alguien intente abrir la Puerta del otro lado, abrir un túnel dentro de ella y será cosa solo de pasar."

"¿Y sabes cuando será eso?" –Edward, sorprendido, volteó la mirada hacia la pelirroja. –"Vas demasiado rápido Edward. Entiendo que quieras irte, yo también, pero tenemos que ser realistas. No sabemos si tu hermano intentará abrir la Puerta y no podemos generar la energía de la supernova"

"¿Eh?... ¿cómo supiste que era mi hermano quien podría abrir la puerta?..." –ella se sonrojó y miró rápidamente hacia el techo.

"Tú… lo dijiste cuando me contaste sobre ti… hablaste de tu hermano y la Piedra filosofal…"

Hagane pensó algunos momentos, pero no dio mayor importancia al asunto. Angelina suspiró aliviada y se levantó indicándole que le siguiera.

"Ven Edward, hay algo que quiero mostrarte. Quizás nos ayude a pensar mejor tu teoría."

Mientras se devolvían por los pasillos, comenzó a hablar de la mente humana y sus alcances. De cómo era la máquina más perfecta y como ni siquiera la más moderna tecnología era capaz de superarla.

"No hemos podido crear una mente humana electrónica, pero… hemos llegado al concepto de Inteligencia Artificial…"

"¿Inteligencia artificial?"

"Así es. Es un programa creado con la instrucción de pensar. Es como una conciencia creada por el hombre. Como el ser humano no es capaz de usar el 100 de su mente, se usa estas mentes creadas para llegar rápidamente a distintas conclusiones."

"Las máquina sí rinden al 100 verdad?"

"Así es."

"¿Y qué quieres mostrarme?"

"La mente que maneja esta gran máquina"

Y justo cuando Ed creía que no podía ver cosas más increíbles, el máximo logro de la humanidad del siglo XXI apareció frente a sus ojos.

"Su nombre es Athena, como la diosa de la sabiduría y las artes de la mitología griega"

"Un gusto conocerte, Edward Elric"

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

No sabía bien porqué pero la verdad era que no le sorprendía del todo.

El mediodía caía sobre Rizenbul y la casa estaba en completo silencio. Ni un ladrido, ni un sonido. Solo el viento rozando la suave primavera de aquél pequeño pueblo.

El humo de su pipa se desvaneció al tiempo que observaba el cielo. Nunca en años se había quedado sola. No desde que su hija se casara y Winry naciera. Siempre su hogar había estado lleno de gente, Hoemheim y Trisha, más adelante Edward y Alphonse. Incluso Roze y su hijo, y la temporal visita de Izumi y su marido…Pero poco a poco todos se habían alejado, y ella, quien se supone debería haber partido primero, era la última en observar esas colinas verdes y tranquilas.

"Buena suerte…"

Al y Winry habían partido al amanecer. Ambos estaban muy serios y decididos. No regresarían sin Ed.

"¿Dónde estás Ed, están buscándote con desespero"

Una sola pista. Un muchacho de largo cabello negro y automails a medida de Hagane. Un mundo enorme donde buscar, un resultado que podía decepcionar.

"Buena suerte muchachos…"

No podía hacer más. Ya había dado a su nieta todas las armas posibles para sobrevivir, y ahora tenía que confiar en su capacidad y en la de Alphonse. Pero nada de eso evitaba que la soledad doliera en el alma. Siempre esperó que los hermanos volvieran con bien, para no obligar a Winry a buscarlos… pero no había ocurrido. La vida de los alquimistas había sido más dura que cualquiera de sus pesadillas y ahora, con Ed desaparecido, el manto de angustia sobre los Rockbell simplemente era asfixiante. Si no lo encontraban, aunque fuera su cuerpo o la confirmación de su muerte, la rubia mecánica se volvería loca.

Ya habían partido hacía horas. El almuerzo esta vez era para uno. Un guiso delicioso, de esos que Ed degustaba con deleite aunque tuviera leche…

Con pesadez apartó el plato mientras se secaba una lágrima. No había apetito.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

El tres avanzaba ruidoso a través del ancho puente de doble vía que estaba sobre el río. Ciertamente era una obra increíble, casi sin precedentes en todo el continente.

Con una velocidad cercana a las 90 kilómetros por hora –algo casi impensado –el tren prácticamente volaba sobre sus rieles a 100 metros sobre el río. Grandes alquimistas y arquitectos se habían necesitado para construir esa enorme y colosal estructura.

"Me preocupa Pinako-baasan" –dijo por fin Al –"Quizás…" –pero no pudo terminar. La verdad quería decir Quizás debiste quedarte Winry, pero no tuvo el valor. La rubia estaba desesperada por saber algo de Ed. Los años pasaban y la mente se confundía. Ambos necesitaban urgentemente saber que Edward Elric realmente había existido.

"Es fuerte…" –dijo Winry, casi sin titubear –"Alguien tenía que quedarse para prepararnos algo de comer cuando regresemos con Ed"

El destino era Ciudad Central. Sus contactos le habían dicho que hacía poco se había trasladado de vuelta desde Torán, una floreciente ciudad al norte de la capital.

"¿Crees que sepa que soy yo?"

"Nunca te ha visto así Al. Pero no te preocupes, me reconocerá y estoy segura que nos ayudará"

Confiado, Al asintió. Ciertamente él no se negaría. Una a una las piezas encajarían y podría abrir la Puerta cuando reencontrara la Piedra Filosofal. Por ahora, el primer paso era encontrar a Roy Mustang, Alquimista de la Llama.

Continuará…


Notas: Lo admito, me he demorado dos millones de años en actualizar. No tengo excusas…

Gracias a todos los reviews, en especial a Isilme-Senpai, HagaRenPotter, Alchea. Devilrina, Anzu Zoldick, Lila Negra (que tiene un fic muy bueno de FMA), Daniela Lynx, Kayter, Bratty y Nyu Hikari.

¡Un beso a todos!