Capítulo 9-. En un lugar en el cielo.
No se sentía bien.
Era una horrible sensación de Deja Vu, la falta de aire, el estar sometida. Tenía náuseas y le dificultaba respirar, por más que intentará, no podía meter aire en sus pulmones, sentía como se sofocara poco a poco, incluso la luz centellaba frente a sus ojos.
No podía escuchar su voz gritando pero estaba seguro de que lo estaba haciendo, su garganta dolía mucho por el esfuerzo que hacía por gritar y meter aire al mismo tiempo.
— ¡...Ty!
Intentó cerrar los ojos, pero los recuerdos borrosos de alguien sujetando sus brazos mientras gritaba se sobreponían a lo que pasaba frente a ella.
— ¡...Ty!
La sensación de ser sujetada por los hombros la hizo lanzar los puños hacía adelante, sin escuchar el gemido de dolor frente a ella, también comenzó a dar patadas.
— ¡...Ty!
Las manos en su boca, intentando hacer que la abriera, que se tomara lo que habían puesto en ella.
— ¡...Ta!
El dolor en su garganta cuando sintió un tubo dentro de ella, las voces de las personas a su alrededor que no dejaban de decir su nombre una y otra vez, diciéndole que abriera los ojos.
— ¡...Ta!
El golpe en sus mejillas definitivamente la despertó, mirando los ojos brillosos de su prima frente a ella, sintió que caía en espiral hacía la tierra mientras la nauseas casi la hacían vomitar, agachando la cabeza en busca de aire.
— Todo está bien Hinata — Le aseguró la castaña dándole un abrazo — Estamos bien, así que respira profundo.
Hinata se aferró con fuerza a su prima, sin notar la sangre en su costado, respirando por la boca en un intento de calmarse.
— Respira por la nariz — Sasuke se arrodillo junto a ellas, mirando a Hinata e indicándole como hiciera la respiración — Exhala por la boca.
Hinata lo miró por varios segundos, en los que intentaba aclarar su propia mente, siguiendo por inercia su forma de respirar, hasta que comenzó a calmarse poco a poco.
Sasuke tomó sus manos con delicadeza, separando sus brazos de Yosei, ya que ella no se dio cuenta que tan fuerte la estaba abrazando, hasta que las separo por completo. La castaña se recargó hacía la derecha, sosteniendo su costado ensangrentado.
Hinata abrió la boca asustada, pero Sasuke la jaló hacía él dándole la vuelta para quedar con su espalda contra su torso, atrapándola en un torpe abrazo improvisado.
— Mantén la calma, ya viene la ambulancia.
Hinata apretó la manos de Sasuke, asintiendo con la cabeza, mientras miraba a su prima fijamente. Yosei le sonrió, mientras intentaba ponerse derecha, pero terminó casi recostada sobre la banqueta. Hinata sintió como Sasuke se ponía tenso tras ella, por lo que se separó lentamente.
— Ya estoy bien — Mintió con una pequeña sonrisa.
El moreno asintió, pasando a su lado de forma muy rápida, sujetando a Yosei y recostándola completamente contra el suelo, analizando su costado herido.
— Es un vidrio — Le dijo la castaña a Hinata — Saltó con el impacto, estaré bien.
Hinata quiso preguntar a que se refería, pero sentía que volvería a caer en otro ataque de pánico, así que lo dejó pasar mientras se arrodillaba en el otro lado de la castaña, tomando su mano.
— Lo siento — Se disculpó mirando la mano de su prima — Lo siento yo...
Yosei apretó su mano aún sonriendo.
— Está bien, cualquiera se asustaría con algo así — Le aseguró.
Hinata asintió levemente aún con la mirada gacha. No notó al rubio que corría de un lado a otro en total pánico, y al que tanto Sasuke como Yosei, estaban ignorando por qué no querían tener que calmarlo.
Tampoco notó, por obra de Sasuke, el cuerpo sin vida que aún tenía un cuchillo en la mano, junto al vidrió que se estrello con el impacto de dos disparos.
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Gaara condujo con cuidado, habló con cuidado, las palabras exactas y precisas para intentar que Layla mantuviera la calma, tratando de explicar todo lo que había pasado sin dar demasiados detalles o frases sueltas. Al final no funcionó, y fue zarandeado de un lado a otro hasta que consiguió hacerle comprender a la mujer que su hija estaba a salvo, pero en el hospital.
Se sentía mareado y su cabeza aún punzaba para cuando consiguió que la mujer lo siguiera al coche, luego por fin pudo conducir al hospital.
Se encontró con otra chica histérica.
Hinata, la prima de Yosei.
Sabía que había estado junto con ella cuando ocurrió el incidente, pero pensó que Sasuke ya la habría calmado lo suficiente para cuando él llego, una vana ilusión cuando fue zarandeado de un lado a otro una vez más.
Por cierto Sasuke no se veía por ningún lado. Quería golpearlo.
Cuando consiguió tranquilizar a Hinata, Layla se acercó a ellos con paso lento, tratando de mantener su propia calma.
— ¿Cómo está? — Alcanzo a preguntar Layla a una llorosa Hinata.
Hinata hipó un momento, con los ojos aún llenos de lagrimas, mientras se encogía de hombros y negaba con la cabeza. Yosei le había dicho en alguna ocasión que su prima posiblemente se pondría histérica ante la sangre, pero no creyó que sería a ese extremo.
Gaara sujetó a Layla de los hombros, tratando de consolarla, separándola de Hinata para que no la fuera a zarandear, mirando a las dos de la forma más calmada que encontró.
— Sasuke dijo que era solo un vidrio, ella va a estar bien.
Layla asintió levemente, no tan convencida de las palabras del pelirrojo.
Él chico apretó los labios levemente, Sasuke era el que normalmente tenía que lidear con Layla, ya que tenían mucho tiempo de conocerse. Él no sabía que la mujer podría llegar a ser de esa manera, aunque Yosei se lo había advertido antes, creyó que la castaña estaba exagerando.
Por fin entendió como fue que ella tuvo que organizar un funeral con la pierna rota cuando estaba apenas en el primer año del instituto.
Sentó tanto a Hinata como a Yosei en una de las bancas cercanas y fue por un té para mantenerlas ocupadas y tranquilas. Él no tenía habilidades sociales y no sabía que hacer en momentos como ese. Sabía que Yosei estaría bien o Sasuke también estaría en pánico queriendo matar a medio mundo, pero aún se sentía levemente preocupado, ya que "técnicamente" ella era su novia, y por qué Yashamaru aún estaba en tratamiento. Admitió muy en el fondo que realmente apreciaba a ese chica pero olvido esa sensación muy rápidamente.
Después de unos minutos que le parecieron horas, Sasuke por fin salió de uno de los cuartos, su ropa estaba levemente manchada con sangre, pero él parecía calmado.
Caminó hasta ellos, tomando las manos de Layla que estaba temblando.
— Va a estar bien — Le aseguro — Era solo un vidrio, pero hay que descartar otras lesiones.
Layla dio un largo suspiro de alivio, mientras las lagrimas caían por sus mejillas, al igual que Hinata, que aún temblaba levemente.
Sasuke miró a Hinata por unos segundos. Soltó una de las manos de Layla y la puso sobre la frente de la morena, que se sobresaltó ante su tacto. Sasuke frunció el ceño al sentir la temperatura elevada.
— Pediré otra cama en el cuarto — Le dijo separando la mano — También pediré que te den un calmante.
Hinata negó rápidamente con la cabeza, pero el moreno solo la ignoró mientras consolaba a Layla, que seguía llorando.
Se sintió feliz por un momento, pero también se sintió culpable.
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Había sido solo una fracción de segundo, en la que había juntado sus labios para darle a entender que quería un beso antes de irse a la escuela, pero la mirada del chico le dijo que había desatado una bestia.
Intento correr a la salida, pero terminó atrapado en su abrazo y luego ambos terminaron en el suelo.
Bueno, él no la soltó.
Abrió los ojos.
Se sintió levemente confundida en donde estaba y que había pasado, pero el dolor en el costado rápidamente le recordó lo que había pasado.
Se había asustado.
No por la sangre o el hombre muerto con el cuchillo, extrañamente eso no fue lo que la asusto, si no los gritos de Hinata. Como entró en pánico, la golpeo, la pateo, y no dejó de gritar por un buen tiempo, hasta que ella y Sasuke lograron tranquilizarla.
Tal vez se había activado un acto reflejo, y eso la preocupaba aún más.
¿Cómo había muerto? ¿De verdad se había suicidado?
Sasuke le dijo alguna vez que no creía que se hubiera suicidado, pero tampoco tenían pruebas de lo contrario.
Dejó la preparatoria antes de tiempo, por lo que no tenía muchos recuerdos de Hinata, aparte del día de los esclavos cuando la había ayudado a comprar a Sasuke, pero nunca volvieron a interactuar, al menos no personalmente. Era amiga de Kiba y Shino, era la hija mayor de la familia Hyuga, pero no tenía información adicional de ella, y estaba segura que Sasuke tampoco.
Bueno, eso era enteramente su culpa, se centró demasiado en su propio grupo de amigos que nunca se acerco demasiado al resto de sus compañeros. De todo su grupo de prepararía, solo se hablaba directamente con Ino y Karin, tal vez Shikamaru, Chouji y Sai por inercia, pero del resto no tenía información, ni siquiera de Naruto, que solía acosar a Sasuke para que fueran amigos.
Entonces Hinata... Lo que le había pasado antes de morir, la forma en la que reaccionaba cada vez que veía sangre, el pánico que tenía...
— ¿Qué demonios le paso? — Susurró.
Tampoco era como si pudiera preguntarle a Kiba o Shino, bueno, de hecho no estaban ni en el país, así que esa idea estaba descartada. Ino o Karin tal vez podrían saber algo, pero sería demasiado extraño que ella les preguntara algo.
También estaba la otra variable, si Hinata empezaba a recordar lo que le había pasado, ¿Cómo le explicarían el por qué la hicieron pasar por su prima? ¿Como justificarian que no le dijeron a Hiashi o a Hanabi?
Sujetó su sien cuando sintió que comenzaba un dolor de cabeza.
— Ese idiota — Murmuró de nuevo.
Solo Sasuke era capaz de meterla en este tipo de líos, rescatar a alguien tan conocida por todo (incluidos su pequeños circulo de amigo) y luego entregársela a ella para que buscara una forma de que funcionara.
Aunque salvar a su ex compañera de clases no estaba en sus planes, tampoco la iba a dejar morir a la intemperie. Le gustara o no, Hinata estaba viva, estaba aprendiendo a cocinar (incendiando su cocina en el proceso) y se había hecho muy cercana a Layla. Puede que hubiese perdido su vida anterior, pero podía esforzarse por continuar con su vida a partir de ese momento.
Se puso de lado, aún pensando en que hacer a partir de ese momento, cuando casi se cae de la pequeña cama individual en la que estaba. La razón de su preocupación estaba acostada en la otra cama.
Esa chica iba a ocasionarle un infarto tarde o temprano.
Suspiró de nuevo, mirándola dormir.
Tenía una venoclisis en el brazo, seguramente la sedaron cuando entró en pánico, o Sasuke y Gaara estaban tratando de deshacerse de ella.
La segunda razón era la más probable.
Gaara no era una persona muy sociable, y Sasuke parecía sentirse muy culpable por lo que había hecho. Aunque ambos tenían razones validas, no era una justificación para andar sedando a las personas.
Cerró los ojos un tanto con fastidio mientras se ponía de pie, dirigiéndose a la salida del cuarto, ella también necesitaba unos momentos a solas.
Caminó por los pasillos para servirse un vaso de agua, su costado punzaba dolorosamente, más de lo que quería admitir, también tenía miedo. ¿La estaban tratando de matar a ella o a Hinata?
Botó el vaso de papel a la basura para regresar al cuarto, deteniéndose por unos momentos, creyendo ver una cabellera castaña bastante familiar, pero al final siguió caminando, sintiendo que se le estrujaba el corazón.
No quería estancarse en el pasado.
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Hinata despertó con dolor de cabeza, Yosei estaba dormida cuando ella despertó, pero su rostro no se veía calmado.
Hinata se sentó con calma mientras se sujetaba la cabeza, sentía una ansiedad que no podía describir, como si algo malo fuera a pasar.
Negó levemente con la cabeza, pensando en que más podría salir mal, levantándose para tomar un vaso de agua. Se detuvo en la puerta, a punto de gritar cuando vio a un chico de cabello castaño sujetar a Sasuke por el cuello, elevándolo unos centímetros del suelo.
El chico la miró y luego dio un bufido mientras lanzaba a Sasuke al suelo, Hinata retrocedió a la habitación.
— No la despiertes — Le espetó el chico para luego ver a Sasuke — Voy a tratar contigo después.
Hinata apretó los puños con fuerza.
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Y fin, por ahora.
Perdón por la demora, tengo mucho trabajo y aun más con otros proyectos. El capítulo es cortó, pero el siguiente es demasiado largo, no entonaba con este, pero también era necesario.
Les agradezco a todos por sus comentarios y favoritos, lamento no poder agradecer personalmente.
Juds fuera.