Capítulo 10-. Una chica que no es Hinata.
Había pasado poco tiempo desde que despertó, desde que conoció (se reencontró) a su prima loca y sus amigos más locos que ella. En especial le había incomodado esa pelirroja que gritó la primera vez que la conoció, pero que también constantemente acosaba sexualmente a Sasuke.
El Sasuke de ese momento, que fue golpeado por un castaño extraño y que era regañado por la pelirroja.
No hacía ningún movimiento hacía él, tampoco parecía tratar sus heridas con delicadeza, como haría alguien que quiere llamar la atención.
¿De que se había perdido?
— Es una larga historia — Dijo Sasuke sin mirarla mientras sujetaba su costado.
Hinata se sonrojo al darse cuenta de que había sido muy obvia con sus pensamientos sobre el moreno y la pelirroja.
— ¡Ah! L-Lo siento, no quise entrometerme.
Karin le dio una mirada de disgusto al moreno y luego le sonrió a Hinata.
— No te preocupes, salimos antes pero terminamos por muchos motivos, Yosi se sentía culpable, por lo que suelo actuar como enamorada para que no se sienta mal.
Hinata ladeo levemente la cabeza.
— ¿Por qué se sentiría mal?
Karin y Sasuke compartieron una mirada complicada, pero al final no dijeron nada. No era como si pudieran ir por ahí contando esa rara historia.
— Ese sujeto que viste hoy, ¿Ha intentado acercárseles antes? — Le preguntó la pelirroja desviando el tema.
Hinata negó con la cabeza.
— Es la primera vez que la veo.
Karin asintió y luego dio un suspiró mientras tomaba su celular y mandaba un mensaje, luego miró a Sasuke con algo de molestia.
— ¿No te dijo el gemelo maldito que no tenía contacto con él?
Sasuke se tomó la frente, dirigiendo su mirada hacía Hinata, que no notó su mirada. Decir sus suposiciones con la posible responsable de todo lo que estaba sucediendo en el mismo cuarto sería incomodo.
— Creo que lo sé, pero al mismo tiempo, ¿Saratobi decidió por si misma trabajar para ella? Dijo que no estaban involucrados...
Karin frunció el ceño.
— Es su hermana, no pueden no estar involucrados, Asuma tampoco ha dicho mucho al respecto.
Sasuke miró sus manos por un momento.
— ¿Eso quiere decir que él es parte de Cerberus?
Karin apretó los labios.
— Si Kurenai lo vinculo a Cerberus, ¿Siempre la a estado vigilando?
Sasuke negó con la cabeza, pensando en Hinata.
Ese sujeto la miró por unos segundos, pero era como una burla, ¿Sabía el verdadero origen de Hinata? Además de que él también conocía a Hinata Lobster personalmente, aunque eran casi idénticas, la otra chica sin duda hubiera corrido hacía Yosei para despertarla o lo habría pateado.
— ¿Pasa algo malo con Yosi? — Preguntó Hinata algo confundida.
Sasuke se tomó la cabeza con su brazo menos adolorido para luego ver a Karin, que se había encogido de hombros.
— No malo... exactamente.
Karin negó con la cabeza mientras le fruncía el ceño a Sasuke.
— Es bastante malo, si vez que ese tipo se le acerca de nuevo, lánzale algo y luego corre junto con ella.
Sasuke rodo los ojos al ver la cara asustada de Hinata.
— No la asustes, él solo es peligroso para otras personas... — Dijo el moreno viendo a Hinata.
— Ella es otra persona... — Le aclaró Karin.
— No lo es... Bueno, mejor si corre.
— ¡¿Qué?! — Gritó Hinata algo asustada.
Sasuke no dijo nada mientras se recostaba en la mesa de examinación, quejándose levemente del dolor de costillas que tenía.
— Pensaré en algo, ve a descansar — Le dijo a Hinata haciendo un movimiento con su mano — Karin te llevará.
La pelirroja le frunció el ceño a Sasuke y al final negó con la cabeza, tomando el hombro de Hinata y haciéndola salir de la habitación. La morena se sintió incomoda por el toque de la pelirroja, pero esta la soltó al salir de la habitación.
— Ese idiota siempre está dando problemas — Se quejó Karin — No importa que diga Yoss, no dejes que se idiota se le acerque.
— ¿El chico castaño? — Preguntó Hinata, que aún no comprendía que pasaba.
— ¡Si!
Karin empezó a hablar en voz alta, despotricando contra ese chico, pero Hinata no comprendía nada, por lo que solo pudo asentir levemente con la cabeza, sin saber que otra cosa más hacer.
Al final, Yosei no se entero de que ese chico había estado en el hospital.
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Hanabi había escuchado muchas cosas a lo largo de su vida, también sabía que su hermana había muerto. Esa pequeña esperanza que había tenido varias semanas atrás se desvanecieron cuando su padre habló con ella de forma calmada y un tanto molesta.
Había otra Hinata, una Hinata Lobster que había estado viviendo en Noruega todo este tiempo.
Según Ko, su hermana le había dicho alguna vez que tenía un Doppelganger que era prima de una compañera de su escuela, incluso había preguntado si tenían familia en Noruega, ella no era capaz de recordar esa conversación.
Trató de dejar de pensar en esa otra persona que no era su hermana, una persona grosera que incluso se atrevió a golpearla. Cuando se enteró que esa chica no era "su" Hinata, casi habla con su padre para que le diera un castigo apropiado por haberla ofendido.
Sabía que era mezquino y que no terminaría en nada, esa chica solo estaba defendiendo a su tía.
Pensaba en eso mientras observaba el paisaje cambiante tras la ventana del auto, que se detuvo en un semáforo. Por alguna razón no conocida, tal vez la vida la odiaba, vio de nuevo a esa chica que no era su hermana.
Estaba en el carril de bicicletas junto a la odiosa castaña. Parecía estar aprendiendo a montar la bicicleta, con la castaña sujetando el asiento dándole indicaciones mientras la atrapaba de vez en cuando. Esa chica que obviamente no era su hermana, sonreía sin parar, haciéndose el cabello largo hacía atrás, parecía casi una foto para una postal.
Era una chica sonriendo felizmente por algo tan tonto como montar una bicicleta, tal como su hermana no lo había sido.
Desvió la mirada con molestia, esperando impaciente que el semáforo cambiara de color, sin poder evitar dar una ultima mirada a esa chica, que de alguna forma se había caído sobre la castaña desagradable.
Hanabi no notó la pequeña sonrisa que se escapó de sus labios mientras se alejaba entre el trafico.
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Sus pasos resonaron en el mármol, no le gustaba como se escuchaba, pero tampoco era algo que no pudiera tolerar. Se detuvo unos metros antes de llegar a la tumba, donde vio a su hermano arrodillado cambiando las flores con calma.
Sasuke no lo miró en ningún momento, aunque también era posible que no supiera que él estaba ahí.
— Hola — Dijo Itachi con calma.
Sasuke no le respondió mientras terminaba sus rezos para luego levantarse y salir sin decirle una sola palabra. Itachi no pudo volver a hablarle mientras se arrodillaba.
¿Qué podría decirle a su hermano? "Sabes, voy a morir pronto, arreglemos las cosas". Sacudió la cabeza descartando la idea.
Hasta hace unos días, su hermano era más amable cuando hablaban, luego por alguna razón se peleo con Madara en la oficina, los gritos se escucharon por todo el piso. Cuando llego al lugar Madara tenía un ojo morado y Sasuke ya se había ido.
Él no tuvo el valor de preguntarle a Madara y Obito no pudo conseguir mayor información de la que ya tenía.
Después de solo unos minutos arrodillado se dio cuenta de que había perdido toda su fuerza, sentándose de lado de alguna forma para recuperarse. El ni siquiera poder ponerse de rodillas sobre la tumba de sus padres lo hizo sentir peor de lo que ya se sentía.
¿Qué pensaría su madre? ¿Estaría decepcionada de él por permitir que su hermano se alejara?
— ¿Uchiha-San?
Itachi se sobresaltó un poco al escuchar la voz ronca de Sabaku no Gaara tras él, quien lo miraba con duda en su expresión.
— Buenas tardes Sabaku-San.
¿Que más podría decir en esa situación? Sentado frente a una de las tumbas, no arrodillado...
— ¿Necesita ayuda?
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La primera vez que entró a la casa de Uchiha Sasuke tenía muchas expectativas, que fueron brutalmente aplastadas cuando escuchó que su prima tenía su propia habitación.
Además de las quejas constantes de Yosei por irse a su propia casa mientras ella le ocultaba lo que había pasado con el castaño raro que había golpeado a Sasuke y la verdadera razón por la que estaban en la casa del moreno.
El comportamiento de ambos era un poco extraño para ella, que no sabía si estaba alucinando o si de verdad era extraño.
— ¿En que piensas?
La voz de su prima la sobresaltó, así como que se acostara en el sofá, le recargara su cabeza en sus rodillas mientras se estiraba.
¿Era ella la rara por estar incomoda por el contacto físico o era Yosei?
Su prima le había enseñado a andar en bicicleta y le enseño a cocinar lo básico. Últimamente hacía un viaje diario al hospital para que almorzaran juntas, pero al final siempre terminaba almorzando con Sasuke por qué ella estaba ocupada. Tampoco sabía si eso era intencional o no.
— ¿Puedo hacerte una pregunta? — Dijo Hinata después de unos minutos de silencio.
— Mhm — Respondió la castaña algo adormilada.
La castaña normalmente cerraba los ojos cuando se acostaba en las rodillas de Hinata por que la vista era solo la de sus pechos por el tamaño de estos, así que era común que dormitara.
— Em... ¿Eres solo amiga de Sasuke-San?
Yosei abrió los ojos lentamente, viendo el rostro sonrojado de Hinata.
— Algo así... ¿Por qué preguntas?
Hinata desvió levemente su mirada sonrojándose aún más.
— Por qué parecen muy cercanos — Mintió levemente.
Yosei movió su cabeza para estar más cómoda.
— Si tú pregunta es por nuestro comportamiento... Bueno a veces dormimos juntos.
Hinata quiso respirar abruptamente, pero solo logro ahogarse con su propia saliva, por lo que Yosei tuvo que levantarse para darle palmadas en la espalda y pudiera volver a respirar con normalidad.
— Tranquila, respira.
Hinata escuchaba las palabras de su prima pero no pudo decir nada, solo mirándola con un poco de elocuencia.
— Lo siento, es mucha información... Bueno, ¿Qué harían si Sabaku-San se entera?
Yosei giró levemente la cabeza, una mezcla de confusión e incomodidad.
— Enm... Gaara lo sabe — Murmuró rascándose la mejilla — No le importó demasiado.
Hinata sintió su cabeza girar por un momento, simplemente agradeció no haberse desmayado con tanta información.
— Bueno... Claro...
Yosei le palmeó levemente la cabeza, pero en lugar de darle tranquilidad, se sintió como una mascota.
— Quiero mucho a Sasuke como amigo, pero no tenemos sentimientos románticos el uno por el otro — Le aclaró — Algo similar para con Gaara, es conveniente para nosotros tener una relación publica, esa es la razón de anunciarlo — Dijo con calma, omitiendo la parte de los libros volando por su oficina — Han pasado muchas cosas en mi vida, así que mantener una relación física con ellos sin ataduras es algo que simplemente paso, los tres estamos al tanto de lo que sucede y no hay problema entre nosotros, pero no todos tenemos las misma creencias, si mamá se enterara seguramente enloquecería.
Hinata asintió con calma, tratando de procesar todo lo que había escuchado sin mucho éxito.
— Sasuke ¿Te gusta? — Le preguntó Yosei.
Hinata negó rápidamente con la cabeza, moviendo las manos frenéticamente, desarmándose ante la sonrisa tranquila de Yosei.
— Bueno... Ahora que hemos estado desayunando juntos lo eh conocido un poco más — Dijo en voz baja.
Yosei, que sabía que Sasuke rara vez hablaba no se creyó eso en absoluto. Aunque ella sentía algo por Sasuke, que en algún momento confundió con amor, fue un sentimiento que se desvaneció gradualmente al ver que Hinata miraba a Sasuke con ojos cada vez más brillantes.
No la recordaba mucho de la escuela, pero creía que a ella le gustaba Namizake, además de que no sabía si recordaría quien era en realidad, y que de hecho fue Sasuke quien le hizo eso... No sabía si estaba bien que ella sintiera algo por él, pero tampoco podía impedírselo.
— Entonces dejare de dormir con él, pero no puedo ayudarte con más, no soy buena celestina.
Hinata ladeo la cabeza ligeramente, ya que no comprendía del todo lo que había escuchado hasta el momento, incluyendo que su prima haciéndola desayunar con Sasuke no era para ayudarla.
— Eh... ¿Gracias?
La castaña se volvió a acostar recargada en las piernas de Hinata.
— ¿Que vas a hacer mañana de almuerzo?
Hinata le sonrió lo mejor que pudo. ¡¿Para que demonios le preguntaba eso si ni siquiera almorzaba con ella?!
— Tal vez Onigris... Por cierto, la tía Layla está preguntando si comes todos los días.
Yosei gimió estirándose un poco, Hinata la comparo con un gato.
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Al final había terminado haciendo Onigris, Yosei no comió con ellos.
A pesar de considerarse una persona tranquila, Hinata estuvo a punto de irrumpir en la sala de rehabilitación en la que estaba, solo que Sasuke la detuvo.
La platica se concentro en aspectos médicos importantes que no conocía, que solo logró confundirla más y una platica incomoda con quien en realidad no quería hablar hasta que aclarara su cabeza, un pensamiento poco racional si recordaba que vivía en la casa de Sasuke.
— ¿Te sientes incomoda en casa?
Hinata negó levemente con la cabeza, viendo su pequeño batido que Sasuke le había comprado en algún momento del almuerzo.
— Yo... ¿Le gusta Yosi?
Casi se mordió la lengua luego de que la pregunta saliera de su boca, sintiendo que sus mejillas se coloreaban lo más que podía.
— Es una buena amiga, pero no me gusta románticamente si es tú pregunta.
Hinata miró su batido de nuevo, ¿Ella tenía una mentalidad muy anticuada o ellos eran muy liberales?
De verdad trataba de no juzgarlos por lo que hacían, pero se encontraba pensando en palabras poco agradables para su prima. La hacía sentir misógina, ya que no imaginaba nada contra Sasuke. Sabaku sabía lo que pasaba, así que no era como tal un engaño, ¿O una relación abierta?
— En unos días más llegaran Karui y Killer Bee — Dijo Sasuke tomando un trago de su café — Se quedaran unos días y están emocionados de verte.
Hinata alzó la mirada, olvidando sus preocupaciones sobre la vida sexual de su alocada prima, sonriendo por recordar un poco de un pasado que no era suyo.
Entre la platica y las risas, olvido por completo lo que había sucedido entre Sasuke y Yosei.
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Na Hyeongoh no era alguien a quien le gustara confrontar a los demás. Siempre fue muy tímido, no le gustaba causar problemas, aún cuando los problemas parecían seguirlo a donde quiera que fuera.
La solución también llego por si misma.
La culpa también.
Cuando Yosei le habló de un proyecto demasiado experimental, explicándole todo con lujo de detalle, para molestia de Sasuke, pensó que él sería básicamente un conejillo de indias, nunca pensó que no sería el primero en probarlo.
Pero bueno, no era como si esa chica loca fuera a experimentar con él de la nada.
Las dos personas al final del pasillo también se quedaron completamente inmóviles al verlo. Tantas cosas que decir, aunque estaba seguro que algunas no eran buenas, ni palabras pidiendo perdón.
Él nunca los perdonaría, pero las acciones en consecuencia de sus acciones fueron demasiado grandes, las secuelas aún eran palpables.
— ¿Hola?
Un silencio incomodo los envolvió, unos tratando de ignorar las miradas, otros tratando de ignorar las cicatrices.
— ¿Dónde está tú hermano?
Hyeongoh solo se acomodó las gafas y fingió demencia, retomando su camino con ayuda de las muletas. No eran buenos recuerdos los que tenía de esos dos sujetos, no necesitaban recordarle que estaba separado de su hermano por culpa de lo que hicieron.
— ¿Señor Na?
Se sobresaltó al escuchar una voz clara y dulce atrás de él, viendo a la (no) prima de Yosei verlo con una sonrisa. Aunque de vista, la conoció cuando todavía era la otra Hinata, por lo que verla sonreír tan a menudo era un poco extraño.
Le sonrío mientras se inclinaba en un saludo, viendo el bento en sus manos.
— Hola ¿Comiste con Yosei?
Hinata sintió que su sonrisa se agrietaba a la mención de su prima, que la había vuelto a dejar plantada.
— No, estaba ocupada, pensé que estaría con usted.
El chico de gafas sonrió levemente, mirando de reojo a las dos personas al final del pasillo.
— No soy el único con el que trabaja — Le aclaró con un poco de pesar — Estoy seguro que no te rechazo por algo trivial.
Hinata puso un ligero puchero sin notarlo, lo que le pareció tierno a Hyeongoh.
Solo lo había conocido levemente durante las constantes visitas que le hacía a su prima al hospital, además de que el chico en realidad era bastante reservado, pero también tenía un gran parecido con el castaño misterioso que había atacado a Sasuke.
Tampoco podía preguntarle de la nada si lo conocía, por lo que la mejor táctica era empezar a hablar de poco a poco, hasta obtener más información.
— ¿Ya no necesita la silla de ruedas? — Pregunto Hinata mientras comenzaba a caminar con el moreno rumbo a la salida.
El chico negó con la cabeza levemente.
— Aún la necesito, pero Yosei quiere que me mueva más, por eso uso las muletas por más tiempo.
Hinata asintió con calma, siguiendo el ritmo lento del chico al caminar.
— Mi prima parece estar más ocupada de lo habitual, espero que no lo esté presionando a usted también.
El chico negó con la cabeza. Su cabello negro se desordeno levemente, dándole aún más parecido al castaño. Hinata lo encontró extraño.
— A veces es muy impulsiva, pero no se excederá de tus limites — Dijo con un poco de culpabilidad — No te preocupes por eso, me preocupa más que siga comiendo.
Hinata río levemente.
— ¡Lo sé! No se como se olvida de comer.
El chico acomodo sus gafas y negó con la cabeza de nuevo.
— Supongo que cuando te concentras tanto en algo pierdes la noción del tiempo, ¿No has pensado en regresar a tus estudios?
Hinata se encogió levemente de hombros.
— Sasuke-San me dijo que estudiaba medicina, pero no lo recuerdo bien, además estando tanto tiempo aquí, no siento que sea el camino que deba tomar, los pasillos blancos y el tener la vida de alguien constantemente en tus manos, donde cualquier error puede resultar fatal, siento que no estoy hecha para ese tipo de situaciones.
Hyeongoh asintió levemente.
— Padre es ministro de justicia — Dijo con una calma que ocultaba todo el pesar que eso significaba — Pero ese nunca fue mi camino, solo tienes que buscar y seguir adelante, estoy seguro que Yosei y Layla-San te apoyaran en lo que sea que elijas.
Hinata le sonrió en respuesta. La verdad es que no estaba segura de que era lo que quería hacer de ahora en adelante, solo sabía que no quería que se relacionara con la medicina.
— Por cierto, ¿A que se dedica señor Na?
El chico le sonrió lo mejor que pudo.
— Soy psiquiatra.
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Su vida había sido trivial, o eso pensaba.
Luego de la muerte de sus padres, luego de que Madara lo tratara como una basura desechable y se separara de su hermano, no creyó volver a tener una familia, o formar lazos con nadie.
De alguna forma, una niña de sonrisa inocente y cabello castaño llego a su vida sin anunciarse, poniendo lo que él creo ordenado patas arriba de nuevo.
Nunca admitiría que su vida no era tan ordenada como él creía.
Pero ella, su padre y su madre, le dieron una familia.
Perder a Zeref Hime, el padre de Yosei, fue como volver a perder a su propio padre. Que Layla y Yosei terminaran tan lastimadas también fue un duro golpe, ya que no pudo llorar la muerte de quien fue su figura paterna.
Se propuso protegerlas, así como Zeref lo protegió a él, aunque fracaso estrepitosamente.
Como su única amiga fue herida, como las cosas se complicaron más allá de esperado, como casi acaban muertos y las secuelas de todo, lo que lo llevo a dormir con ella.
Una horrible idea si lo pensaba más detenidamente, pero lo hecho, hecho está, no es como si pudiera cambiarlo, incluso, años después, volvió a arrastrarla a más problemas, al pedirle que salvara a Itachi.
Que salvará a un miembro de la familia Uchiha, aún cuando el patriarca había intentado matarla.
Pensó que era por esa razón que había dejado de dormir con él, pero en realidad eran otros sentimientos que se negó a compartir.
¡¿Pero que demonios era tan importante como para dejarlo ponerse azul?!
Se sujetó la frente maldiciendo su mala suerte, pensando en salir a un bar para buscar un poco de desahogo.
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Siempre le inculcaron el respeto a los mayores, el dar una imagen adecuada para su posición y cuidar de la imagen de la familia, aunque lo odiaba, aunque llego a lastimar a su persona querida, ella debía mantener el prestigio de los Hyuga.
Pero ver esa imagen era como un Deja Vu.
Danzo Shimura, regañando a la chica que tenía la misma cara de su hermana, por algo tan trivial como chocar con él.
Esa chica que no era su hermana, se había disculpado y bajaba la cabeza repetidamente, mientras un chico en muletas, de cabello negro y gafas, trataba inútilmente de calmar a Danzo.
Era casi la misma escena que ella presencio, solo que no había nadie defendiendo a su hermana.
Al igual que ella, Neji y su padre, que desde una prudente distancia observaban todo el altercado. Era un hospital, por lo que posiblemente alguien viniera a mediar la situación.
Quiso dar un paso al frente al ver a Danzo alzar su bastón, pero su padre la detuvo con la mirada, indicándole que no se metiera en asuntos ajenos, sobre todo con Danzo Shimura.
— ¡¿Qué está pasando?!
El gritó vino de la castaña desagradable que había salido de uno de los pasillos, confrontado a Danzo y poniendo a la morena tras ella, lo que implico que recibió por completo el golpe del bastón de Danzo.
Lo que empezó con una escena de disculpa por chocar con alguien, terminó con otra persona en el suelo por el golpe del bastón de una persona como Danzo. Hanabi suspiró levemente, pensando en el pasado, casi segura de que esa Hinata se arrodillaría junto a su prima y le pediría perdón a Danzo.
Aunque Hanabi no conocía los pensamientos de Hinata, que empezaron con una confusión cuando un anciano extraño exigió una disculpa y terminó golpeando a su prima por haberse interpuesto entre ellos.
Ese anciano extraño, golpeo a la persona que la había estado cuidando desde que despertó, solo por que ella había chocado con él.
"¡Este imbécil!"
Para sorpresa de Hanabi, Hyeongoh y los demás presentes, lo que Danzo recibió de Hinata no fue una disculpa, si no un puñetazo, que irónicamente, también lo tiró al suelo.
Hanabi entendió en ese momento, que esa chica no era Hinata.
Y fin, por ahora.
Perdón la demora y la falta de palabras, pero estoy contra el tiempo ahora mismo, tratando de terminar un poco de todo.
Lo siguiente en la lista a actualizar es Sweet Surrender, pero ténganme un poco de paciencia por favor, estoy tratando de actualizar más seguido.
También quería aclarar un poco, no mucho por que sería spoiler, pero si Hinata recupera sus memorias, no se arrepentira de haber abofeteado a Hanabi. Es una explicación mucho más larga, implicando cosas que se verán en el proximo capítulo y en el propio desarrollo del personaje, espero que aclare algunos puntos de vista.
Gracias por todo su apoyo, de verdad, espero por fin poder darme un tiempo para responder a todos sus comentarios.
Gracias de nuevo y bonita noche, sin más por el momento, Juds fuera.
