IV

Al día siguiente en el estudio, Eiri se sorprende al ver a Shuichi ahí…

-Buenos días Shindou-san, me alegra saber que eres puntual-

-Bu-buenos días Uesugi-sensei-

-Hoy veremos historia del Renacimiento, por favor toma tu libro y lee la pagina cuatro-

-His… ¿historia? Pero…-

-¿Sucede algo?-

-El… el ensayo…-

-¿Cuál ensayo?-

-El que me dijo que tenía que entregarle la próxima clase-

-Claro, aun sigue siendo para la próxima clase-

-Co… ¿Cómo…?-

-Y también te dije que revisaras el horario al terminar- toma el marco llevándoselo- y veo que no lo hiciste- Shuichi mira el escrito sorprendiéndose al darse cuenta de su error….

-Lunes, literatura…. Mar-martes, historia…-

-Entonces ¿para cuando es el ensayo?-

-Pa-para la próxima semana…-

-Si quieres puedes entregármelo ahora pero si crees que no tiene la calidad deseada…-

-¡Para la próxima semana se lo entrego como debe de ser¡se lo prometo!-

-Eso me gusta, una cosa mas… gracias-

-De… de nada pero ¿Por qué…?-

-Por lo que hiciste, lo hiciste bastante bien-

-¿Nani?-

-Por favor la pagina cuatro-

Horas más tarde en la clase de música, Shuichi se carga una expresión de felicidad y extrema relajación que ni el mismo se aguanta…

-Nee Shuichi, te sucedió algo bueno ¿cierto?-

-Pues… sip, la verdad es que me quite un gran peso de encima y… ¡ah! Ryu-chan, perdóname…-

-¿Nani no da?-

-Por como me comporte ayer, te prometo que no vuelve a suceder-

-Shuichi…- le toma tiernamente su mejilla- ya te dije que estaba bien, no es para tanto- le da un beso en la frente

-Ryuichi… seguimos la clase donde nos quedamos –lo guía hasta la silla detrás del escritorio sentándolo, haciendo lo mismo pero en las piernas de este.

En el despacho de Tohma, este acompañado de Eiri comparten un poco de té…

-Ayer pusiste en apuros a su excelencia-

-En realidad mi meta era otra-

-Y ¿la lograste?-

-Con excelentes resultados-

-Eiri-san, necesito pedirte un favor –el rubio lo mira extrañado- no deberías de jugar con fuego y no por lo que le puedas hacer a el príncipe sino por lo que podría hacer Ryuichi-

-¿Qué podría hacerme ese loco del muñeco?-

-Solo has lo que te pido-

-¿Por qué tendría que…?-

-Y ¿como esta Mika-san?-

-Esperándote y un poco celosa de que haya venido a trabajar aquí-

-Siempre tan fiel, por eso la amo… ¿celosa¿por qué?-

-Dínoslo tú –Tohma le sonríe como siempre; llaman a la puerta…

.-Adelante-

-Disculpe las molestias señor pero llego esto para usted-le entrega un paquete

-Gracias Sakano-san- lee el remitente- por eso la amo-

-Un regalo de mi hermana-

-Sí y muy interesante-