"Nunca te dejaré solo"
cap.13
El plan
Luego de terminar el entrenamiento del día, Ryu esperó en su cuarto hasta que anocheciera. Luego bajó y se escondió en un rincón esperando que el área estuviera vacía. Apenas vió la oportunidad no dudó y entró en la bodega de la casa.
Era una habitación como las demás solo ocupada por dos estantes en donde se almacenaban todo tipo de vinos y algunos licores. El dragón buscó aquel que su tutor deleitaba todas las noches y lo abrió. Sacó el famoso frasquito que había robado en la mañana y lo vertió en la botella. Luego la tapó y se aseguró de que nadie se diera cuenta de que había sido abierta con anterioridad. La puso en un lugar estratégico de forma que cuando fueran a seleccionar el vino, eligieran ese y se fue a su cuarto.
"Ahora solo hay que esperar la cena" pensó recostándose en su cama. "Kyu, solo espérame un poco más, volveré lo más rápido posible."
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'Megumi, pasa por favor' le ofreció la madre de Kyu.
La chica de pelo rosa agradeció el gesto y preguntó por su amigo.
'Esta en su cuarto, recién se tomó un té y se siente mejor.'
'Que bueno' se alegró Megumi. Luego de las indicaciones de la mujer, la chica golpeó la puerta y pasó.
'Ah! Hola Megu. ¿Cómo estas?' saludó Kyu con voz débil, apoyado sobre un par de almohadas.
'Eso debería preguntarte yo a tí. ¿Qué fue lo que te ocurrió?. Es raro que te enfermes.' dijo agarrando una silla y sentándose en frente de su amigo. Antes de que pudiera responder nada agregó: ' ¿Es por Ryu ?. El profesor Dan nos dijo que está de viaje, pero realmente no le creo. ' Dijo con sinceridad esperando alguna respuesta de su amigo.
'No, nada de eso, es solo que la noche pasada hacía mucho frío y parece que me agarré uno de los peores virus.' mintió.
Megumi lo miró seria a los ojos por varios segundos, como pidiéndole la verdad, pero Kyu solo respondió con un "En serio" y una sonrisa.
' Está bien si no quieres contarme. Pero sabes Kyu, no quiero que te preocupes tanto por él. Realmente no se qué es lo que está pasando, pero no quiero que te enfermes por eso. Después de todo, tienes que pensar que todo se va a solucionar.' dijo con una sonrisa.
'Megu.'
' Por eso, quiero que confíes en mí para lo que sea.'
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La mesa estaba lista. Los dos comensales se sentaron alrededor de la misma.
Anubis bebió un poco del vino, con su cara de inocente. Al parecer no había notado que Ryu le había metido algo a su botella.
El joven dragón estaba impaciente. Quería saber si su plan había resultado o no. Miró expectante a Anubis quien soltó la copa y continuó comiendo.
'¿Sucede algo príncipe?' preguntó al ver que el chico lo miraba. ' ¿Acaso te parezco atractivo?' bromeó.
'Nada de eso' respondió volviendo a prestarle atención a su comida. No podía ser, Anubis no estaba revolcándose en el piso, o suplicando, o tan solo apoyado en su silla en un sueño eterno, sino que se encontraba allí, frente a él, haciendo bromas de mal gusto como siempre. El contenido de la botella no había funcionado. Tal vez los miembros de Plutón tenían inmunidad contra ellos, quien sabe.
' Me voy a dormir' informó poniéndose de pie.
'Que duerma bien príncipe.' le deseó como la mayoría de las noches.
Ryu estaba bastante enojado pero su rostro se mostraba tan calmo como siempre.' Claro que lo haré, si tú te mantienes lejos de mi cuarto.'
Anubis sonrió ante aquel comentario y esperó a que el príncipe se fuera para continuar con el postre.
El joven de pelo azul cerró la puerta tras él. Estaba realmente enojado. Todo el día había estado pensando muy dentro de su ser que el plan funcionaría. Pero no había sido así. Golpeó su escritorio con el puño.
'Rayos' dijo para sí. Pero eso no iba a quedar así, claro que no, ya pensaría algún otro plan para que su objetivo se cumpliera.
Esa noche, Ryu tuvo un sueño bastante extraño.
Estaba frente a Kyu quien le extendía una mano. Cuando Ryu se acercaba, un par de manos lo tomaban. Eran las manos de su tutor, quien lo llevaba hasta el trono de Hades. Ryu se sentaba en él y de repente sentía ganas de matar. Entonces Kyu llegaba a verlo pero en vez de recibirlo con los brazos abiertos, el joven dragón tomaba una daga y lo apuñalaba. Kyu yacía en el suelo y Hades tomaba a su nieto del hombro y le sonreía con satisfacción...
Abrió los ojos al mismo tiempo que se sentaba en la cama. Estaba agitado y transpiraba. Se miró las manos. Aún podía sentirlas llenas de la sangre de Kyu.
'Eso... no sucederá.' dijo tratando de convencerse. Pero realmente estaba asustado. ¿Y qué tal si algún día lo hipnotizaban para que matara a Kyu?. ' No, eso no va a pasar, no va a pasar.'
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Las cortinas de la habitación se abrieron.
'Buenos días Kyu' lo saludó su madre. 'Mira que hermoso día.'
'Buenos días señor. El señor Anubis lo está esperando abajo.' dijo una de las mucamas luego de atar las cortinas.
Abrió los ojos.
'Buenos días madre. Hoy ya me siento mucho mejor.' dijo con una sonrisa Kyu.
Ryu miró por la ventana. No había ni una sola nube. Esperó a que la joven se fuera para levantarse y cambiarse de ropa. De seguro hoy su tutor le tenía preparado una gran sesión de entrenamiento. Suspiró resignado.
Kyu se vistió y bajó a la cocina. Allí su madre le tenía listo un delicioso desayuno el cual devoró para tener todas las fuerzas necesarias para todo el día. Agarró su mochila y le dio un beso en la mejilla a su madre. Era hora de ir al colegio.
'Buenos días príncipe.' lo saludó con su frase habitual el rubio.
Ryu tomó asiento y lo saludó. Frente a él había una taza de café, pero de seguro como todos los días, estaría sin azúcar. Le echó una mirada rápida a la mesa. Allí la encontró, en la otra punta, al costado de Anubis. 'Si tan solo estuviera más cerca.' se dijo para sí.
El rubio, que en ese momento estaba bebiendo sorbo de su café, lo dejó inmediatamente en la mesa y le acercó el azúcar. Ryu se quedó perplejo ante el gesto. Es decir, hubiese jurado que lo había dicho lo suficientemente bajo como para que no lo escuchara.
'Aquí tiene.' le ofreció.
'Gracias...supongo' respondió agarrándola y comenzando a ponérsela en la café.
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Ryu respiró agitado. El entrenamiento lo estaba haciendo más fuerte, pero aún así no podía llegar al nivel que su tutor le pedía.
'¿Estas listo para que ataque nuevamente?' preguntó poniéndose en posición ofensiva.
¿Para qué preguntaba, si de todas formas no iba a escucharlo?. ' No, espera... un minuto... más.' pidió igualmente.
'De acuerdo.' dijo como si nada.
Ryu se quedó mirándolo por un momento. "No puede ser" Pensó, definitivamente hoy su tutor estaba algo extraño. "¿Acaso... lo que le dí ayer sí surgió efecto?" se preguntó esperanzado. "Veamos... si no fue un veneno, entonces puede que haya sido un...¡ya lo tengo!". Se puso de pie tratando de observar cada movimiento de Anubis. 'Levanta la mano derecha.' dijo mirándolo.
Anubis levantó la mano derecha en efecto.
Ryu no lo podía creer. ¿Entonces sus suposiciones eran correctas?.
'Ahora da media vuelta.' Anubis obedeció sin decir nada.
Era increíble, ahora podía seguir con sus planes. Ahora Anubis, que estaba controlado por él, entraría al escritorio de su abuelo y cuando éste se descuidara. ¡Zas!. Lo cortaría a la mitad. Y así, sin cabeza, la organización no podría seguir funcionando.
'Anubis, ven un momento.' le ordenó. Cuando el hombre estuvo lo suficientemente cerca, Ryu acercó sus labios muy cerca de la oreja del rubio y le dijo. 'Quiero que vayas a donde se encuentra Hades y cuando él se distraiga mátalo.' le ordenó con una sonrisa malévola que no pudo evitar.
Anubis comenzó a caminar hacia la casa. Ryu lo siguió cautelosamente. Aún no podía confiarse. Anubis paró frente a la puerta que Ryu había reconocido como la del escritorio de Hades. Tocó la puerta y entró junto con Ryu.
'¿Qué sucede Anubis?' le preguntó el viejo Hades quien estaba ordenando un par de papeles. '¿Acaso le sucede algo a mi querido nieto?' preguntó con sarcasmo. 'Ahora mismo estoy por ir a una reunión con uno de nuestros clientes.' se puso de pie.' Así que en cuanto vuelva me dices lo que pasa.' Guardó los papeles en un portafolios y fue hacía la salida pasando por delante de los dos.
'Ahora' ordenó Ryu con una voz casi inaudible. Anubis sacó de su sobretodo un arma y le disparó por la espalda a Hades quien sin poder evitar la bala cayó al suelo.
Al ver que no se movía, el dragón se acercó cuidadosamente a su abuelo y le tomó el pulso. No tenía. Tampoco parecía respirar. ¿Acaso finalmente lo había logrado¿Así, tan fácilmente había caído el poderoso rey Hades?.
'Increíble' se dijo para sí sonriendo. 'Anubis.' dijo pasando sobre el cuerpo. 'Quiero que nunca más pronuncies mi nombre ni el de nadie de la DDS. Y también... necesito que me des dinero.'
'Sí.' Anubis sacó de su sobretodo su billetera y le entregó todo el dinero que tenía al joven. Ryu lo guardó en el bolsillo de su pantalón. 'Sígueme.' Ryu cerró la puerta del escritorio y caminó hacia la puerta de calle, al fin sería libre, al fin podría ver a Kyu y toda aquella pesadilla terminaría. Los guardias lo vieron pasar como si nada, después de todo iba con su jefe, así que no tenían nada que decir. Llegaron a la reja que separaba la mansión de la calle. Ryu le ordenó a Anubis que la abriera.
'Ahora quiero que regreses a leer tus mangas. Y si alguien pregunta por mí, diles que no les interesa.' dijo Ryu antes de salir de la propiedad.
Una vez afuera comenzó a correr hacia la estación de trenes. Iría a buscar a Kyu, lo vería y lo abrazaría.
"No puedo creer que mi abuelo fuera tan tacaño" pensó cuando estaba comprando el pasaje en la estación. El dinero que tenía Anubis era lo suficiente para dos o tres pasajes en tren.
N.A.: Síiiii! Terminé el capítulo!. El otro día estaba en clases y entonces se me ocurrió toda la continuación del fic!. Inmediatamente comencé a escribirlo, no vaya a ser que se me olvide! '.' Bueno, espero que sea lo suficientemente largo como para compensar las dos o tres semanas que no actualicé (aunque lo dudo). Desde ya muchas gracias por leer y hasta la próxima.