CAPITULO XVI

Los días pasaron lentamente, nosotros los profesores trabajando duro para terminar de dar todo el material a los alumnos y estos empezando a estudiar, solo quedaban dos meses para que terminara el curso.

Yo volví a ser como antes, es decir con la mente bien despejada. El último acontecimiento me había hecho volver a la realidad y darme cuenta que había perdido la noción de lo que pasaba a mi alrededor. Volví a vigilar de cerca a los chicos, me olvide de Jiménez y de...Snape. Aunque esto último me costaba y cuando me descuidaba pensaba en él. Tenia la suerte de no cruzarme por su camino normalmente, creo que ambos nos rehuíamos. Así paso todo el tiempo, sin nada interesante que contar, hasta el principio del último mes. A la semana siguiente empezarían los exámenes y entonces no tendría tiempo de relajarme por lo que decidí dar una vuelta por Hogesmade.

Ese Sábado llovía a cantaros pero eso no me impidió salir al anochecer del castillo y dirigirme a Hogesmade. Utilicé mi capa negra, aquella con la que me cubría la cara y ante mi diversión solía ganarme miradas de susto y de desconfianza de los habitantes del pueblo. Simplemente imaginaros a una persona con una capa que casi roza el suelo, cubriéndole el rostro y sin dejar ver nada de su cuerpo... Sino fuera porque voy de negro con esa capa estoy segura que parecería un fantasma muggle... Y ese día, junto a la oscuridad y la lluvia mi aspecto debería ser bastante escalofriante. Aún sonrió al recordar esas miradas de miedo e...incluso de odio y desconfianza por parte del pueblo, como ya os he dicho.

Me dirigí con cautela albary me senté en la misma mesa donde lo hice a principios de curso cuando vi a Snape.

Unamujer se me acerco y yo le pedí un Wisky de fuego. Mi rostro seguía sin verse y esta vez no fue por la costumbre de auror, sino por el simple hecho de que deseaba estar sola, pensar.

En el bar no había casi nadie, solo un borracho durmiendo en la barra y unos jóvenes bebiendo en un mesa, sus risas eran ruidosas y sus groserías eran bastante molestas. No les hice caso, no estaba allí para eso, solo para poder relajarme, sin necesidad de encerrarme en mi despacho o en mi habitación.

¿Cuánto tiempo estuve allí bebiendo en silencio? No lo sé. Pero un poco antes de irme, me quite la capucha de mi cabeza, dejando ver mi pelo castaño y mi rostro blanquecino.

Estaba bastante borracha y eso fue un fallo por mi parte. Porque con el alcohol solo volví a recordar mis errores, mis fallos en los últimos días. Volví a recordar la molestia de un Jiménez libre y matando. La rabia, al recordar el hábil espía en el castillo, me recorrió mis venas como un camino de lava.

La camarera me volvió a servir otro Wisky y una sonrisa burlona se me dibujo en mi rostro al ver la sorpresa de esta aldarse cuentaque su cliente no era un hombre, sino una mujer.

Los jóvenes ahora estaban borrachos, muy borrachos, algunas veces no podía evitar escuchar el grito de estos al contar sus noches con prostitutas e incluso con algunas chicas, que según ellos, por mucho que dijeran "NO" ellas lo querían.

Trate de hacer oídos sordos a estos comentarios, ya no era aurora y no podía hacer nada contra ellos, a no ser que los encontrara en plena faena.

Otro Wisky me fue servido, mis sentidos estaban muy embotados la verdad,...y no vi como otra figura negra entraba en el bar y se sentaba en una esquina oscura sin pedir bebida alguna.

Note como una mano se posaba en mi hombro, yo miraba mi vaso y ni un solo movimiento dio a entender que sabia que me estaban tocando.

"Hey guapa¿te quieres unir con nosotros?"

Por la voz reconocí a unos de los jóvenes borrachos, estaba llena de rabia y un escalofrió me recorrió la espalda cuando conseguí que mi mano no cogiera la varita y maldiciera al chico. Simplemente me quede quieta sin contestarle.

"Una señorita tan guapa no debería estar sola en este bar, y menos bebiendo a solas cuando puede estar acompañada."

"No me toques."

Mi voz sonó fría y cortante, él chico no quito su mano de mi hombro y sentí otro escalofrió al controlarme. Creo que temblaba en ese momento.

"¿Tienes frió? Ven con nosotros al lado de la chimenea."

"Tienes 10 segundos para soltarme y dejarme sola."

El chico no se dio cuenta de que en ese momento yo había agarrado ya mi varita.

"¡No seas así! Es sábado, vamos a pasarlo bien."

"Te quedan 5 segundos. Cinco, cuatro..."

"¿Y que me vas hacer sino te dejo? Solo quiero que disfrutes una noche con nosotros."

"...Tres, dos..."

Justo en ese momento note como la mano del chico se soltaba de mi hombro. Yo seguía mirando mi vaso medio lleno, pero había otra figura negra a mi lado que sujetaba la mano del chico.

"La señorita te ha dicho que no, chico. Lárgate."

Esa era la voz de Snape, fría como el hielo y capaz de aterrorizar al hombre más valiente del planeta.

"Yo solo quería..."

"Te acabo de salvar la vida, lárgate ahora mismo."

Al final el chico se dio la vuelta y se marcho, no era tan tonto; primero porque Snape en ese momento tenia su varita apretada contra su garganta sin que sus amigos pudieran percatarse de ello y correr en su ayuda. Y segundo porque si no os lo he dicho ya Snape es una persona muy alta y con mucho poder. Nadie seria tan tonto como para meterse con él sin realmente conocerlo, y menos unos chicos como esos.

Note la miraba de Snape en mi nuca.

"Vamonos, Dumbledore quiere hablar con usted, llevamos toda la tarde buscándola."

Me encogí de hombros y de un trago me bebí lo que me quedaba de Wisky.

En el momento en el que me levante sentí que el suelo se movía por si solo. ¡Estaba muy borracha!.

Con un esfuerzo empecé a caminar, y debo decir que Snape en ese momento no daño mi orgullo ayudándome a andar.

Salimos del bar, yo notaba la rabia y enfado de Snape en esos momentos, sabía porque estaba así. Se suponía que yo no debía salir del castillo por mi propia seguridad, pero de todas formas¿acaso no estaba él en las mismas circunstancias que yo ahora que todos lo conocían como el traidor de Voldemort?.

Mi mente estaba embotada y deje de dar vueltas al asunto, simplemente me concentraba en no tropezar y caer. A mitad de camino Snape saco algo de su túnica y me lo tendió. Era una botellita verde con un liquido transparente. Mire la botella con el ceño fruncido.

"Es para su borrachera, le producirá una fuerte jaqueca pero Dumbledore me ha pedido que usted llegara en buen estado. Tiene que hablar con alguien de España."

Encogiéndome de hombros me bebí la poción, sin pensar en esa persona de España.

Cuando llegamos a la entrada del castillo la poción ya había actuado y un fuerte dolor de cabeza me recordaba que no debía beber, menos si no soy una persona que aguanta bien el alcohol.

Subimos hasta el despacho del director, al entrar en la estancia me recibió la mirada fría y enfadada de Dumbledore. ¿Os he dicho alguna vez que no hay que enfadar a Dumbledore? Por si no lo he dicho, os lo digo ahora. Dumbledore es muy simpático, agradable y no suele enfadarse..., pero si metes la pata bien a fondo puede ser muy desagradable contigo. Y yo con mi borrachera y habiendo desparecido sin decir nada a nadie había metido bien la pata.

Me senté en un silla delante de él. Snape se escondió en las sombras como solía hacerlo cuando se requería su presencia pero no se le pedía que formara parte de la conversación.

Dumbledore me miro con enfado y un escalofrió me recorrió cada nervio de mi resacoso cuerpo, note todo su poder en la habitación, un poder que casi se podía tocar con los dedos. En esos momento me dio la sensación de que era una niña pequeña, mi magia era solo de juguete, no era nada en comparación de ese hombre.

"¿Qué crees que hacías?"

Baje la cabeza con rapidez, sin poder contener la mirada de Dumbledore.

"Lo siento Albus."

"¿Lo sientes? Noa ya eres mayorcita para saber que esa palabra no sirve para nada. Pensaba que habías madurado, que todo lo que habías visto te habían convertido en alguien con dos dedos de frente."

"Solo he salido a tomar una copa Albus. Necesita pensar lejos de aquí."

"Podías habérselo comentado a alguien, a mi por lo menos. Nadie te hubiera impedido ir."

"No lo volveré a repetir."

"Noa eres perseguida por Jiménez, y sabes que ese mago es muy poderoso, aunque tu también lo seas. Nos hemos preocupado por ti. Hemos buscado por todo el castillo incluso nos hemos adentrado en el bosque para buscarte. Nos preocupamos por ti. Deja de comportarte como una niña sola, porque nunca lo has estado."

"Albus...no lo volveré a repetir. No sabia que os ibais a preocupar por mi. Lo siento."

Mire el suelo compungida, Albus siempre se preocupo por mi demasiado. Esta riña me recordaba a cuando era pequeña y mis padres adoptivos no conseguían sacarme de mis cincos, entonces era Dumbledore quien hablaba conmigo y me reñía.

Levante la vista y me volví a encontrar con la mirada bondadosa de Dumbledore, se le había pasado el enfado, él era así. Remus me contó una vez que el único que se libraba de las reprimendas de Dumbledore era Harry y la única razón para ello era que el chico bastante tenia con lo que le había pasado al romper las normas. El año pasado lo hizo y Dumbledore no le dijo nada, no le riño. Demasiado tenia ya con la muerte de Sirius, el chico necesita atención y amor, y no que le regañaran por sus errores por que ya había pagado por ellos.

De todas formas, debo deciros que la relación que yo mantengo con Dumbledore no es muy normal, para mi es como un abuelo, alguien a quien siempre he tenido cerca cuando lo he necesitado.

"Noa, nos hemos preocupado, es solo eso. Simplemente dinos donde estarás cuando te vayas del castillo. Creo que el dolor de cabeza que tienes ahora será más que castigo para ti."

Dumbledore rió, y yo sentí como mis mejillas se ponían rojas..¡la muy traidoras!. Dumbledore nunca me había castigado, incluso el día que me escape de casa de mis padres adoptivos, Dumbledore no lo hizo. Solo me riño y me hizo sentir peor que una rata traicionera. Yo era de pequeña muy rebelde, y el día que me escape era porque quería ver un concierto donde mis padres me prohibieron ir por ser menor de edad...Sonrió cuando lo recuerdo.

"Ahora Noa, te estábamos buscando porque Carlos quiere hablar contigo."

Allí me puse tensa, ese maldito idiota.

"¿Quiere hablar conmigo¿creo que ya lo dijo todo la ultima vez?"

"Parece ser que te necesitan para algo."

Mi dolor de cabeza aumento en ese momento, Carlos era un motivo para ello. Al final me resigne, y afirmé con la cabeza.

"¿Cuándo se va a presentar?"

"Dentro de diez minutos."

Me acaricie la frente con fuerza, tratando de eliminar mi dolor de cabeza.

"¿Tienes algo para este dolor de cabeza, Albus?"

"No, y aunque existiera algún remedio para la resaca te juro que no te la daría."

Mire a Albus con el ceño fruncido, enfadada por mi estupidez.

Mantuvimos un silencio en la sala, yo perdida en mis recuerdos, recordando la ultima conversación con Carlos. Dumbledore dando de comer a Fawkes y Snape...bueno este seguía escondido en la sombra, yo notaba su mirada posarse en mi nuca cada "x" tiempo. ¿Ambos estábamos sorprendidos por su presencia¿Por qué quería Dumbledore que estuviera presente Snape?
Un ruido en la chimenea nos llamo la atención, la cabeza del idiota de Carlos estaba allí, sonriendo como un bobo.

"Hola Noa¿cómo estas?."

Jejejejeje¡ya sé que soy mala! Pero os juro que actualizare pronto esta vez y sabréis que es lo que quiere el estúpido de Carlos. Me ha vuelto la musa, por lo menos para la conversación de Carlos y tengo una idea de lo que pasara este verano, jejeje.

Todos me preguntáis por lo que sintió Snape en la casa, ser un poco paciente y Snape os lo dirá.

La clave de todo es el verano, jejeje.

Muchas gracias a todos y ahora respondo a los reviews:

MissAndreinaSnape: Perdón, perdón, perdón. Soy un caso y lo más seguro es que cuando copiara tu nombre en mi libreta para poder responderte lo leyera mal. No sé que me ha pasado ya que no ha sido la primera vez que te respondo a un review...eres de mis principales lectoras y debo mantenerte contenta, jejejeje... Como ya he dicho con el tiempo sabréis lo que Snape sintió en la casa, será en verano, cuando la historia vaya terminando... aunque iré dejando señales para que os deis una idea, jeejej.

Nocrala: Ante todo debo decirte que me encantan tus fics, son muy originales y te tengo como autora favorita, así que no me perderé ninguna. ¿Por qué Harry esta tan frió? Quizás este reaccionando a lo que paso el año anterior, el saberse el único capaz de vencer a Voldemort, la muerte de Sirius. El que hubiera un espía en el castillo, todo eso debe ser demasiado para un chico de 16 años. Aún no le ha dicho a nadie la profecía, y eso le esta quemando por dentro. El saber que no existe un bien o un mal, mirar el ejemplo de Malfoy y Snape. Pero de todas formas el chico os lo contara este verano.

Amsp14: Este verano se unirán un poco más, son dos imanes y algo pasara, pero...Aún no sé si él piensa que la pone en más peligro, ya veremos, jejejje. ¿Soy mala?.jejej

Zaise: Me alegro mucho que te haya gustado lo que has leído de mi fic, solo espero no decepcionarte con el final o el continué. Muchas gracias por todo.