- ¿Qué pasó? -preguntó Chrollo con una voz muy baja y ronca.
Chrollo acababa de despertar, sintiendose bastante mareado y confundido. Le dolía mucho la cabeza y sentía como si todo a su alrededor diera vueltas. Pronto pudo reconocer que estaba sentado en el asiento trasero de una furgoneta en movimiento y que por alguna razón inexplicable estaba desnudo a excepción de una toalla que envolvía todo su cuerpo a manera de cobija. Chrollo entró en pánico. Lo último que recordaba antes de perder la conciencia era haber utilizado sus Peces de Interior y oficiado el funeral de Feitan, sintiendose mareado y enfermo todo el tiempo. Después de eso no conseguía recordar mucho. ¿Habría fallado su plan?
- No se preoupe jefe. Todo fue un éxito. – respondió Shizuku, quien se encontraba en el asiento de al lado suyo.
- Tuvimos que improvisar después de que quedaras inconciente pero no fue nada grave. Nosotros y los demás estamos sanos y salvos.– dijo Nobunaga desde el asiento de conductor.
- ¿Cuándo pasó eso?
- Ayer en la noche. Estabamos bajando al segundo piso y de repente te desvaneciste estampaste en el suelo. A decir verdad nos preocupó mucho. ¡Te diste un golpe tremendo! – respondió Nobunaga.
- De hecho tienes unos moretones horribles en la cara, las rodillas y el pecho. Parece que hubieras sido usado como pera de box por Bono. – comentó Shizuku.
Chrollo se llevó las manos a la cara, sintiendo un ligero dolor al tocarla y percatandose de que ahora su rostro estaba cubierto de algun tipo de ungüento anti-inflamatorio. A decir verdad al líder de la Brigada Fantasma le sorprendia que sus compañeros hubieran salido con vida sin la ayuda de sus habilidades nen. La mayoría de el plan de escape que habían organizado dependía de sus habilidades directamente, así que cualquiera que haya elaborado aquel plan de emergencia que hicieron había sido un genio.
- ¿Entonces qué hicieron para salir Kakin? – interrogó Chrollo nuevamente.
- Tuvimos que dividir la ruta de escape en dos direcciones y usar los explosivos restantes para crear un tipo de distracción. Machi, Phinks, Kalluto y Bono escaparon tirandose por el puente de Huo Lei, mientras que Shizuku, usted y yo seguimos por la ruta original. Si las cosas salen bien nosotros estaremos en Ciudad Meteoro mañana por la noche. – explicó Nobunaga.
- ¿Y cuando crees que lleguen Machi, Phinks, Kalluto y Bonolenov a Ciudad Meteoro? – dijo Chrollo.
- No tengo idea. Hable con Machi hace unas dos horas y me dijo que ella estaba por tomar un vuelo a Padokea, así que supongo que tardara un buen rato en poder recibir llamadas. – contestó Nobunaga.
- ¿Padokea? – preguntó Chrollo ligeramente desconcertado.
- Ella, Bonolenov y Phinks van a acompañar a Kalluto a Padokea. Al parecer Kalluto quiere pasar unos días festivos con su familia o algo así. – aclaró Nobunaga.
- Ya veo… Emm… ¿Saben que pasó con mi ropa? – preguntó Chrollo ligeramente apenado de su desnudez.
- Te hiciste popó en tus pantalones cuando estabas inconciente y tuve que cambiarte. Además tenía que curar tus heridas y ponerte pomada de arnica. Pero no te preocupes, ya hice que Blinky limpiara toda tu ropa. – dijo Shizuku inexpresivamente.
La piel de Chrollo se torno color tomate al escuchar la embarazosa explicación de Shizuku. Si hubiera hecho un concurso de todas las cosas humillantes que le habían pasado desde que regresó del Continente Obscuro sin duda esta hubiera llegado al primer lugar.
- ¡Shizuku! ¡No tenías que mencionar eso! – exclamó Nobunaga sintiendo pena por su líder- ¡Además debíste haberlo vestido cuando nos paramos por gasolina hace cinco horas!
- Bueno, tu tampoco te acordaste, así que no es mi culpa. – se excusó Shizuku.
Chrollo suspiró resignadamente. Pese a lo competentes que eran en el arte del robo y el asesinato Nobunaga y Shizuku seguían teniendo la capacidad de atención y memoria de un pez dorado.
- Disculpa por olvidarlo jefe. ¿Le parece si nos paramos que se vista? – preguntó Shizuku a Chrollo servicialmente.
- No… no te preocupes. Creo que es mejor continuar hasta que llegemos a algún punto más apropiado. Por cierto… ¿No tendrán de casualidad algo de beber? – preguntó Chrollo sintiendo calor y la garganta demasiado reseca.
- Tengo una lata de refresco de café si eso te sirve. – dijo Shizuku entregandole la lata a Chrollo después de abrirla.
Chrollo le agradeció a Shizuku e inmediatamente se llevó el refresco a su boca. Aquella bebida pese a mantener su textura burbujeante esta ya estaba caliente tan caliente como si se tratara de un té y aunqe tenía cierto toque amargo de café seguía sintiendose excesivamente azucarada, incluso para el usualmente glotón de Chrollo. Chrollo recordó por un momento las indicaciones de la doctora que lo atendió y que le ordenó dejar de consumir cafeína y azúcar, sin embargo, en aquel momento a lo único que le importaba era saciar su sed, ya habría tiempo para hacer dieta cuando llegara a Ciudad Meteoro. Tras terminarse el refresco dio un pequeño eructo y frunció el seño. Pese a que consumió hasta última gota de aquella lata, se seguía sintiendo mareado y sediento.
- ¡Carajo! ¡No puedo creer que me vaya a pasar mi luna de miel sufriendo de incontinencia fecal y tomando refresco tibio en la carretera mientras mi esposa va de vacaciones a Padokea con dos hombres y el niño consentido de la Brigada! – exclamó Chrollo con frustración e impotencia.
- ¡Hey no se ponga celoso jefe! Dudo mucho que Phinks quiera algo con Machi y Bonolenov no es lo suficientemente atractivo para que Machi… un momento… ¿Esposa? – exclamó Nobunaga desconcertado.
- ¿Cómo puedes decir eso de Bono, Nobu? Bonolenov es muy atractivo, sin embargo estoy segura de que el es muy caballeroso para cometer adulterio. -dijo Shizuku desviando la conversación inocentemente.
- De verdad necesitas lentes nuevos Shizuku… ¡Pero no nos desvíemos Shizuku, ahora lo importante es lo que dijo el jefe! ¿De verdad estas casado? – preguntó el espadachín sorprendido.
Chrollo simplemente sonrió y les mostro orgullosamente su mano izquierda, la cual portaba en el dedo anular un grueso anillo de platino con un brillante opalo negro en el centro. Si algo distinguía a la cabeza de la Araña era su gusto por la joyería refinada, siendo sus aretes de lapislazuli y plata, así como ese majestuoso anillo otra prueba de aquella aficion.
- Casados ante los ojos de la Iglesia. Machi no es precisamente creyente y estaba insegura de hacer una boda religiosa, pero al final logré convencerla. Ella quería algo sencillo y privado, así que simplemente fuimos nosotros dos y el sacerdote. Pedí a Phinks y a Bono de que firmaran como testigos y estuve a punto de organizar un festejo con ustedes para celebrar nuestra boda, sin embargo, se atravesó todo ese embrollo en Kakín y el resto es historia…
- ¡Vaya, vaya! ¡Que afortunado jefe! – exclamó Nobunaga feliz por Chrollo.
- En cuanto las cosas se pongan en orden juro que haré un banquete de bodas y una fiesta para disfrutar con ustedes. Ya fueron suficientes lágrimas en el funeral de Feitan. Y hablando de eso… ¿Qué dijeron los medios de comunicación respecto a eso?
Shizuku le pasó un pediódico con un encabezado que decía "Aumentan víctimas a 437, aún hay desaparecidos". Chrollo agarró el periódico y miró satisfecho como la mayoría de las páginas de aquel períodico hablaban de aquel atentado de una u otra manera. "Familiares de víctimas exigen justicia", "Momia de guerrero neolítico destruída en atentado", "Regente de Kakín promete pena de muerte a los integrantes de la Araña", "El daño es irreparable: paleontólogo de Kakín afirma", "El museo no contaba con medidas suficientes según expertos", "Turismo en Kakín se paraliza tras atentado", "V6 declara guerra contra la Brigada Fantasma"…
Incluso en la sección de farandula y entretenimiento había un artículo enteramente dedicado a una famosa comediante que falleció en el atentado, así como un par de notas de como Sonne Limarch había hecho una donación enorme a los supervivientes del atentado y como el elenco de Saturday Night Live tuvo que disculparse publicamente por haber mencionado a la Brigada Fantasma en su sketch cómico más reciente.
- La gente no deja de hablar de nosotros. Somos prácticamente celebridades. – afirmó Shizuku.
Chrollo sonrió macabramente al oír la afirmación de Shizuku. Pese a el mareo y la debilidad física el ver el nombre de la Brigada Fantasma en todos lados le hacía sentir inhumanamente poderoso. Chrollo Lulcifer soltó una diabolica carcajada: pese a las pérdidas que habían sufrido en el Continente Obscuro y sus peripecias en Kakín la Brigada Fantasma estaba en la cúspide de su existencia.
