Disclaimer: Fairy Tail y sus personajes son propiedad de Hiro Mashima, la historia a continuación es totalmente de mi imaginación y sucede en otro universo.


Capítulo 16. Primer día de entrenamiento

-¿Por qué tienes que tener todas estas cosas Lucy?-

Natsu Dragneel se encontraba cargando cuatro maletas de generoso tamaño directo a su departamento, su mejor amiga y ahora nueva compañera de cuarto se giró a verlo mientras caminaban hacía su nuevo hogar.

-Natsu, si metieras todas tus cosas personales de tu apartamento dentro de maletas ¿Crees que solo sería una?-

El Dragneel se quedó callado ante esto, estaba increíblemente emocionado de que Lucy se mudara con el pero no podía evitar tener la sensación de que eso también ocasionaría algunas discusiones entre ambos.

Como ayer por ejemplo, cuando ambos llegaron al departamento caminaron como zombies a la cama y justo cuando cayeron rendidos la rubia comenzó a gritar que no podía dormir con él, ¡Como si no lo hubieran hecho antes! Así que molesto por aquella actitud decidió no moverse de la cama, si ella no quería dormir con él era su problema. Se quedó dormido sin saber si Lucy se había quedado con él, esa noche tuvo pesadillas, unas horrendas escenas donde esa amable y dulce rubia se apartaba de su lado, se despertó asustado en su cama, empapado de sudor, fue ahí cuando noto el cuerpo a su lado que estaba fuertemente enredado al suyo.

-¿Natsu?, ¿Qué sucede?- Lucy se había despertado cuando sintió a su mejor amigo moverse tan frenéticamente, estaba tan cansada que ni siquiera abrió los ojos y continuó abrazando al pelirosa.

-¿Lucy? ¿Qué estás haciendo aquí?- el Dragneel estaba realmente sorprendido ¿No se había ido a dormir a otra parte?

-Sí, lamento lo de antes Natsu, trate de dormir en el sofá pero prefiero estar aquí contigo, esta es tu casa y no pienso volver a tratarte así, ¿Me perdonas?- a pesar de hablar tan coherente el vocalista de "The Slayer´s" noto que su amiga estaba semidormida, por lo que prefirió dejar de hablar y devolverle el abrazo a su mejor amiga, para que ambos pudieran regresar tranquilamente a dormir.

-Sí que eres rara, no tienes que pedir disculpas Luce-

A la mañana siguiente despertó con los brazos vacíos pero con un agradable aroma a comida recién hecha, al parecer Lucy había preparado el desayuno y nuevamente estaba utilizando una de sus camisas para vestir, lo que disparó el corazón del Dragneel.

Después de comer ambos fueron directo a empacar y cambiar las pertenencias de Heartphilia a su nuevo hogar, y ahí es donde se encontraban en ese instante, subiendo por las escaleras y abriendo las puertas del apartamento del pelirosa.

-Muy bien, esas eran las últimas, creo que comenzare a desempacar mañana si no te molesta Natsu, ¿Dónde entrenaremos hoy?-

Oh, había olvidado ese pequeño detalle, justo cuando estaba a punto de responder eso escucharon como alguien tocaba la puerta, pero antes de abrir la puerta, Natsu ya sabía quién era la invitada.

-No tenías que venir por nosotros Erza, ya conozco el camino-

Y ahí estaba en todo su esplendor la gran Titania, aunque la ropa que llevaba no era la de siempre, ahora que se fijaba bien, Lucy nunca la había visto así antes, su amiga pelirroja lucía un top deportivo que le quedaba ajustado al cuerpo luciendo así su trabajado abdomen, las piernas las tenía cubiertas por unos leggins negros que llegaban debajo de la rodilla, además de unos tennis flexibles que parecían calcetas en lugar de calzado, además no pudo evitar notar las vendas alrededor de sus rodillas y nudillos, ahora sí que estaba impresionada.

-Creía que esto pasaría, Lucy necesito que te cambies, usa algo ligero que no evite el que te estires, Natsu tú la ayudaras con su vendaje, hace mucho tiempo no te veo practicarlo- Erza paso directo a la estancia y tomo asiento en el sillón, luego volteo a verlos a ambos.

-De prisa, Jellal ya está en allá y no quiero que empiece el calentamiento sin nosotros-

-Vale, vale, no puedo creer que me hagas practicar mis vendajes ahora mismo, Luce no tenemos mucho tiempo así que hay que cambiarnos rápido-

Ante la seriedad de ambos Lucy Hearthilia se dio cuenta del gran problema en que se había metido.

Después de buscar y encontrar rápidamente un conjunto que generalmente usaba para hacer ejercicio el cuál consistía en unos leggins negros junto con una polera sin mangas ajustada al cuerpo, además claro del sostén deportivo junto con sus tennis de suela gruesa; salió del baño para encontrarse a un Natsu sin playera envolviendo un vendaje alrededor de su muñeca hasta el antebrazo.

Lucy no pudo evitar sonrojarse ante la vista de su mejor amigo así, y es que aunque hayan estado en la misma situación distintas veces, los músculos de su amigo y esa perfecta línea en v que se marcaba más por los pantalones holgados hacían que se le hiciera agua la boca.

-¿Luce?, ¿Te sientes bien?- después de terminar de vendarse los brazos Natsu volteo a ver a su mejor amiga quien lo miraba fijamente sin parpadear.

-¿Are? ¡Si claro!... emmm ¿Tengo que vendarme también?- recobrando la conciencia la rubia se acercó nerviosamente a su mejor amigo y tomo asiento en la cama para calmar su agitado corazón.

-¡Sí! Yo te enseñare - el chico le dio la espalda sonriente y fue directo a su cajón de ropa, de donde saco dos pares de vendas y las desdoblo con cuidado, después procedió a coger un frasco de lo que parecía ser una crema del estante y se acercó para luego arrodillarse frente a su mejor amiga.

-Ahora tengo que hacerlo yo por ti, pero en un futuro podrás hacerlo tu sola- decía Natsu mientras abría el frasco de crema y la untaba por las muñecas de Lucy con mucho cuidado.

-Deben estar ligeramente apretadas pero si empieza a doler tienes que decírmelo ¿vale?-

Cuando termino de untar la crema, Natsu procedió a vendar desde el codo hasta los nudillos de la rubia con mucha delicadeza, a pesar de que sabía cómo se hacían los vendajes, era la primera vez que lo había hecho con otra persona, y pensar que podría incomodar o lastimar sin querer a Lucy lo hacía poner un poco nervioso.

Al terminar se enorgulleció de sí mismo por su trabajo, ahora Lucy estaba protegida y esos vendajes parecían no incomodarle.

-Gracias Natsu- Lucy se levantó de la cama y comenzó a mover sus rodillas y brazos para comprobar que no le apretaran sus vendajes, para su sorpresa los sentía perfectos.

-¿Estas segura que quieres hacer esto?- la pregunta broto de sus labios antes de que pudiera detenerla.

-Natsu, esto no está en discusión, tengo que hacerlo, más que por mí, por Fairy Tail- sus ojos chocolate brillaron con determinación.

-No me esperaba menos de ti- le respondió con una gigantesca sonrisa mostrando su blanca dentadura.

-¡Natsu, Lucy! ¿Ya están listos? ¡Tenemos que irnos!-

Al escuchar el gritó de Titania, ambos chicos temblaron de miedo y salieron corriendo de la habitación para llegar a lado de la intimidante pelirroja, quien tenía una mirada encolerizada por la demora de sus amigos.

-Bien, ya que estamos aquí supongo que podríamos aprovechar para calentar un poco, Natsu escúchame bien, no quiero que te apartes de Lucy hasta que lleguemos al lugar del entrenamiento ¿Esta claro? Eres más rápido que ella y aunque te desesperes no quiero que se separen, ahora escúchame tú Lucy, quiero que empieces con un trote leve, si empiezas a correr puedes hiperventilarte, no te separes de Natsu ¿Entendido los dos?-

-¡Si señora!- respondieron al unísono elevando su mano derecha hacía su frente en posición de soldado.

-Bien, los veré ahí dentro de 30 minutos, si no llegan en ese tiempo ya sabes el castigo Natsu, mucha suerte Lucy-

Después de eso Erza comenzó a correr, Natsu y Lucy comenzaron con un leve trote como les indico Titania pero la rubia no estaba acostumbrada a correr más de cinco minutos, por lo general siempre trataba de evadir ese tipo de ejercicios pero ahora no era una opción, su amiga le comentó que Natsu era mucho más rápido que ella pero no lo veía alejarse más de dos pasos, además de ir girando la cabeza cada dos o tres minutos para regalarle una tranquilizadora sonrisa que la entusiasmaba a correr más rápido.

A pesar de eso y como era de esperar de una chica nueva, Lucy comenzó a sentir como si le quemaran los pulmones, su respiración estaba agitada y sentía una opresión en el pecho, pero al girar a ver a su compañero se dio una tremenda sorpresa al notar como el parecía estar como si nada. Frustrada y cansada la rubia decidió tomar un descanso y se detuvo abruptamente apoyándose sobre las rodillas para recuperar el aire perdido.

-¿Estás bien Luce?-

La chica quería responder pero si lo hacía sentía que se ahogaría por no recuperar el aire perdido, después de unos segundos de intensa respiración, Lucy sintió que al fin podía hablar.

-Eso sucedió porque corriste demasiado rápido al principio, y tu respiración está mal, debes inhalar por la nariz y exhalar por la boca… eso así… estira un poco, puede darte un calambre-

-¿Cómo es…. que tú no estás cansado?- consiguió decir la rubia mientras alcanzaba las puntas de sus pies con las manos como le dijo su compañero.

-¿Pero de que estás hablando? Apenas han pasado 15 minutos, además, estamos trotando Lucy no corriendo, todavía no estamos a la mitad del valle-

Al escuchar esto, Lucy sintió que le daba un ataque al corazón ¿Cómo es que ese chico seguía parado sin siquiera una gota de sudor? ¿Era alguna clase de atleta o algo? Él nunca le había comentado que hiciera ejercicio, por Mavis, aún después de todo ese tiempo juntos jamás lo vio poner un ligero interés en el ejercicio.

-Vamos Lucy aún nos queda un largo camino y no querrás que Erza te castigue ¿o sí?- eso último lo dijo con cierto tono de malicia, pero al parecer tenía razón, aún faltaba mucho para llegar a donde sea que ellos fueran, así que a pesar de sentir las piernas entumecidas, la rubia decidió continuar con su camino junto a su compañero.

-Alza un poco más las piernas… eso así, ahora respira como te dije, no te inclines, endereza tu postura…. ¡Vaya si se nota que es tu primera vez corriendo Luce!- Natsu lograba ver el esfuerzo en su compañera, y no era por la tensión en sus piernas o las finas gotas de sudor que perlaban su piel y pegaban su dorada cabellera al rostro, no, él veía la determinación en sus ojos, esa mirada que había visto en pocas personas hasta ahora, quizá eso era lo que más admiraba de su mejor amiga.

Después de tres breves descansos y una hora después, los chicos llegaron a un gran claro situado en la cima de una pequeña montaña, el pelirrosa había guiado a su amiga a través de la maleza y las gigantescas rocas que estorbaban en el camino, normalmente sola tendría que saltar esos obstáculos pero debido a que era imposible para ella sola por el momento, Natsu tuvo que ayudarla.

Justo alcanzaron dos cabelleras de peculiares colores primos cuando Lucy se tiró al pasto rendida por el esfuerzo recién realizado, al verlos llegar, Erza fue en su dirección a ver como se encontraba su amiga, ella mejor que nadie conocía sus malos hábitos en cuanto al ejercicio, pero si era honesta, no esperaba que llegara en esas condiciones.

-Bien Natsu, llegaron veinte minutos tarde, ya sabes lo que eso significa para ti y Lucy ¿cierto?, en cuanto acaben podremos empezar. Jellal y yo estiraremos un poco-

-¡Sí! ¡Sígueme Lucy!-

A pesar de todo la tortura aun no terminaba, y lo peor de todo era que Natsu parecía estar disfrutándolo, Lucy pensó que seguramente ese chico tenía serios problemas.

-Bien, esto es lo que haremos, ¿Ves ese árbol enorme de ahí?- el pelirosa señaló un gigantesco árbol justo en medio de los demás, era alto y grueso, parecía ser un cedro muy hermoso y fuerte, Lucy se fijó en sus ramas y noto que habían unos cuantos tubos de metal que atravesaban su tronco para improvisar unas barras como de gimnasio, la rubia tembló ante el mal presentimiento.

-Sí, Natsu tengo que advertirte, jamás he logrado hacer una sola barra, ¡Apenas puedo soportar mi propio peso!-

Ante el nerviosismo de su amiga el Dragneel solo atino a reír fuertemente encogiéndose sobre su estómago.

-Ya lo se Luce, jajaja, mejor deberías poner atención, sígueme-

El chico la guio hasta el árbol, justo ahí se puso unos guantes de lo que parecía ser piel y saltó para quedar colgado en una barra de metal.

-Todo lo que tienes que hacer es abrazarme del pecho Lucy, haré flexiones contigo cargándote-

Ah, solo era eso, espera un momento, ¿¡Tendría que que?!

-¡Debes estar bromeando!-

-De prisa Luce, se me casan los brazos, solo salta y abraza tus piernas a mi torso, será más fácil si tomas impulso, debes quedar justo alrededor de mi cintura, apoya tus brazos alrededor de mi cuello si te acomoda mejor ¡Pero date prisa!-

Lucy se dio cuenta de que estar en esa posición debía ser cansado, seguramente no tanto como hacer flexiones cargando el peso de alguien más pero ese no era el problema, ella no podía hacer lo que él le pedía sencillamente porque estaría violando una de las primeras reglas de los mejores amigos, ¡No tocar de más a tu mejor amigo por más sexy que este fuera!

Con un suspiro Natsu se dejó caer al suelo y se acercó a su compañera.

-Está bien si no quieres hacerlo, buscaré una cuerda para que saltes mientras yo termino el castigo ¿vale?-

Entonces Lucy reaccionó, él no estaría en ese castigo de no ser por ella, de hecho ella fue quien lo retraso todo el camino y si no fuera porque él que seguía su ritmo e incluso la esperaba a que descansara, Natsu no tendría que recibir el castigo… y ella no estaría ahí en ese momento.

-Está bien, lo haré, vuelve a colocarte en posición Natsu, necesitaré impulso-

-¿De verdad?-

-Sí, después de todo somos un equipo- le respondió regalándole una gigantesca sonrisa como las que él solía darle a ella. Con los ánimos renovados el Dragneel volvió a tomar posición con su cuerpo colgando de la barra de metal. Al ya estar preparado Lucy respiró hondo y salto de la misma forma, solo que ella utilizó el cuello de su amigo como soporte y luego enredo las piernas alrededor de su cintura, justo por arriba de la pelvis.

Esta posición dejo ambos rostros muy cerca el uno, por lo que la rubia se sobresaltó y evadió rápidamente esos ojos color jade, escondiendo entre la amada bufanda de su mejor amigo sus mejillas que sentía ardiendo.

Por otro lado, Natsu retomo la compostura y comenzó con su conteo, 1…2…10…15…. Así hasta llegar al 100, cuando termino se dejó caer al suelo aun con Lucy aferrada a él y luego la ayudo a bajar cogiéndola por la cintura.

Después de 100 lagartijas con Lucy en su espalda, 500 abdominales y 100 saltos, Natsu decidió que su castigo había terminado por hoy. A pesar de eso la rubia se sentía una inútil ya que no había realizado ni la mitad de esos ejercicios porque según el pelirosa, cargar con su propio peso era suficiente para sí misma.

-Bien Lucy, terminamos el calentamiento por hoy, ahora iremos con Erza para enseñarte lo que viniste a aprender-

La Heartphilia estaba fuera de sí ¿Solo calentamiento? ¡Sentía que iba a desmayarse ahí mismo!

-¡Erza! Ya terminamos con el calentamiento y el castigo, ¿Podemos empezar a entrenar de verdad?- gritó Natsu corriendo hacía la pelirroja.

-Ya que estas tan entusiasmado el día de hoy no te molestará mostrarle a Lucy como es una verdadera pelea ¿Cierto Natsu?-

-¿¡Enserio puedo?!- los ojos del joven brillaron con emoción.

Lucy pudo apreciar como el joven peliazul llamado Jellal se apartaba de en medio mientras que le dirigía a ella una mirada que le advertía que hiciera lo mismo, no queriendo averiguar porque aquella mirada de advertencia, la rubia pensó que lo más inteligente sería imitar al Fernández.

Luego de tener el campo libre Erza y Natsu se separaron a diez pasos de distancia entre ellos, ninguno apartaba la mirada del otro y cuando menos se lo esperaban Natsu fue el primero en correr frente a Scarlett.

-¡Estoy encendido!-

Llegó rápidamente a su lado para intentar encestar una patada horizontal, aunque Erza la bloqueo con facilidad para luego tratar de tumbar al chico con una patada circular, pero Natsu saltó evadiendo así la inminente caída y se hecho un poco para atrás.

Al haber tomado distancia, Erza fue quien se acercó esta vez al muchacho para tratar de encestar un puñetazo en su estómago pero él reacciono a tiempo para bloquear con su antebrazo izquierdo y devolver el golpe con el derecho.

Pocos eran los golpes que acertaban ambos luchadores, fue entonces cuando Lucy noto unas pequeñas chispas en los guantes de su compañero.

-¡Jellal aleja a Lucy un poco más!- gritó Natsu viendo firmemente a su oponente.

En ese instante sintió como un par de manos la arrastraban por la espalda hasta quedar detrás de un arbusto a lado del chico llamado Jellal.

-Supongo que jamás habías visto una pelea así antes ¿Me equivoco?, ahora sabrás porque Natsu Dragneel es el Dragon Slayer de fuego en Fairy Tail- comentó sin apartar la mirada de la pelea el peliazul.

-Aún no me han explicado todas esas cosas en realidad, y si, esta es mi primera vez observando una pelea, debo decir que llevo mucho tiempo conociendo a Erza y me impresiona mucho su fuerza, bueno ambos son increíbles en realidad, todo esto es increíble- observaba fascinada la Heartphilia.

-Bueno, entonces presta mucha atención a lo que pasara a continuación, quedarás fascinada-

La rubia alcanzó a ver como del par de guantes de Natsu comenzaban a salir chispas, después el realizo un poco de fricción entre ellos.

Entonces sucedió, en el segundo en que el Dragneel separó sus manos llamas rojas las envolvieron. Lucy gritó alarmada pero Jellal la sujeto para evitar que fuera a "rescatar" a su amigo.

A pesar del fuego, Lucy observó cómo Erza corría hasta él y trataba de atacarlo de frente, Natsu reaccionó de inmediato y corrió de igual forma pero la chica lo esquivo arrastrando su cuerpo por el suelo justo por encima del pelirrosa. Al quedar en su espalda la pelirroja siguió corriendo hasta el árbol de frente, tomando impulso corrió por encima del tronco y dio una voltereta que la dejo nuevamente cara a cara con el Dragneel, la única diferencia era que ahora en ambas manos tenía lo que parecía ser un par de espadas largas y delgadas.

-Ahora si es divertido, ¡Luce ve esto! ¡Karyuu no tekken! -

Pasaron muchas cosas a la vez que Lucy no pudo explicar en ese momento.

Uno: al parecer el fuego que emanaban las manos de Natsu no parecía quemarle.

Dos: por alguna extraña razón Erza corría hacia el con aquellas extrañas espadas apuntándolo.

Y tres: en el instante en que ambos chocaron una inmensa nube de polvo se elevó donde al parecer sus ataques colisionaron.

Lucy no se detuvo a pensar en más, saltó del arbusto que la protegía del polvo y algunos escombros y corrió directo a las dos figuras que alcanzaban a verse a través del desastre causado. Antes de llegar a socorrer a sus amigos se dio cuenta que Jellal ya estaba al lado de Erza ayudándola a levantarse con dificultad, mientras que Natsu yacía inmóvil en el pasto, con el fuego de sus guantes extinguiéndose.

-¡Natsu!- la rubia corrió al lado de su compañero para coger con cuidado su cabeza y colocarla en su regazo.

-Natsu, ¿Estas bien?- Lucy comenzó a preocuparse porque el chico no abría los ojos, a pesar de eso no veía ninguna herida por ningún lado.

-Él está bien, quizá un poco adolorido de la cabeza, ya despierta Natsu, estas preocupando mucho a Lucy- era su amiga pelirroja que al parecer también estaba algo adolorida.

-Agh, ¿Luce? ¿Qué haces aquí? Le pedí a Jellal que te pusiera a salvo- luego de sentir que su cabeza ya no martilleaba Natsu abrió sus ojos para encontrarse con una mirada preocupada por parte de su mejor amiga.

-Dios, ustedes sí que están locos- y es que a pesar de la ligera preocupación Lucy esbozo una dulce sonrisa para luego ayudar a su amigo a levantarse.

-¿Ahora entiendes porque no quiero que entrenes con nosotros?, esto es sumamente peligroso Luce, Erza y yo ya tenemos la práctica necesaria para aguantar nuestros propios golpes y evitar que sean mortales entre nosotros, pero tu….- Natsu la miraba fijamente, él entendía a la perfección porque Erza le pidió que lucharan a pesar de no hacerlo desde hacía mucho tiempo, ellos casi nunca practicaban peleas así, a lo mucho realizaban solamente combate mano a mano pero el hecho de que tuviera que usar sus guantes y Erza sus espadas quería decir que tenían que lograr que Lucy se asustara y desertara del entrenamiento.

- Esta bien, lo entiendo- al escucharla Natsu dejo escapar un suspiro de alivio.

-Entonces tendré que entrenar duro para llegar a donde ustedes han llegado, que bueno que ya casi empiezan las vacaciones de navidad, quizá pida una reducción en mi horario escolar cuando entre el próximo año, creo que también debería dejar mi trabajo como voluntaria en la biblioteca, hummm tengo que ver de qué otra forma podré ahorrar dinero- Lucy comenzó a pasearse con una mano en la barbilla pensando decidida.

Natsu observó fascinado la actitud de su mejor amiga, aún estaba asustado, demasiado para su gusto, pero eso no evito que sonriera enormemente con orgullo, era increíble cómo ni siquiera la salvaje pelea que había tenido delante de sus narices fuera suficiente para dejarla fuera de la acción. Se sorprendió a si mismo con el pensamiento de que estaba seguro que Lucy no hubiera dado marcha atrás ni aunque hubiera visto pelear a Laxus por el simple hecho de que ella no sería su Lucy.

-Vale ya entendimos Lucy, estas más que dispuesta a entrenar con nosotros, lamento esta demostración pero la necesitabas ver para saber a lo que te enfrentas, Natsu necesitas hablar con ella y explicarle todo este nuevo mundo, por el momento Jellal te enseñara algunas posiciones para defenderte, solo eso, no necesitas saber atacar por el momento ya que es innecesario, te explicaremos mejor más tarde, Jellal te la encargo mucho- en cuanto Fernández posiciono a Erza en un árbol cercano la dejo que se recostara y se acercó a su rostro para acariciar su mejilla.

- Estará bien, ahora descansa ¿vale? No tardaremos demasiado, solo le enseñare las posiciones básicas-

- ¡Donde le hagas algo a Lucy te incinero Jellal!- gritaba Natsu mientras Lucy lo ayudaba a colocarse bajo el mismo árbol donde se encontraba Titania.

-Tranquilo Natsu, tu novia estará bien-

-¡No somos novios!- respondió la rubia a la defensiva mientras iba a sus lecciones con el peliazul.

-Bien, comencemos con lo básico, la postura es importante en cualquier clase de pelea, separa las piernas a la altura de tus hombros… bien así, ahora mantente firme, aplica toda tu fuerza posible en abdomen y piernas, los enemigos trataran de derribarte y no debes permitirlo… bien, ahora haremos esto-

Mientras Jellal y Lucy estaban ocupados en el entrenamiento, Natsu y Erza observaban fijamente cada uno de sus movimientos.

-¿Por qué no has hablado con Lucy acerca de los Dragon Slayer´s Natsu?-

Ambos estaban concentrados en las posiciones básicas que Jellal estaba enseñando a Lucy, ahora estaba enseñándole la postura de los brazos para protegerse el rostro.

-No es un tema que hubiera querido discutir con ella por el momento, tenía la esperanza de tener un poco más de tiempo antes de tener que explicarle todas estas cosas- la seriedad que reflejaba el rostro de Natsu no era común.

-Sabes que todo miembro de Fairy Tail debe saber acerca de los guardianes y miembros clase S y es primordial explicarle acerca de ustedes los Dragon Slayer´s-

-Eso ya lo sé Erza… es solo que…-

- Tienes miedo-

Solo en ese momento Natsu bajo su mirada avergonzado por el descubrimiento.

-Escúchame Natsu- la pelirroja se acercó más a él. – Conozco a Lucy de mucho más tiempo que tú y estoy segura que ella no es como todos, desde la primera vez supe que encajaría perfectamente dentro de Fairy Tail por muchas cosas y una de ellas es su capacidad de juzgar a las personas por lo que en realidad son-

-Sí, y yo soy un perfecto monstruo-

-Eso no es verdad, no hables así de ti mismo-

-Dime, ¿Cuántas personas que conoces pueden escuchar conversaciones a metros de ellos? o ¿Cuántas pueden olerte a kilómetros?, ¿Cuántas personas que conoces se alejan de ti porque eres un maldito fenómeno? Incluso entre Slayer´s, soy el único que puede hacer esas cosas… no quiero que Lucy me vea como un fenómeno-

-Ella jamás te vería de esa forma-

Entonces eso era, Erza aún podía recordar como de niño muchos se burlaban de él, tanto por su cabello rosado, su afición por los dragones y el fuego, hasta por el simple hecho de que su propio padre lo haya abandonado.

Muchas veces sus amigos dieron la cara por él, Erza aun recordaba cómo junto con Gray daban palizas a los estúpidos niños que se atrevían a hablar mal de su amigo, a Natsu nunca pareció importarle nada de eso, el problema era cuando alguien se metía con sus amigos.

Recordaba con claridad el último día en que el pelirosa piso una escuela, iban en la secundaria, ellos eran llamados los huérfanos de Fairy Tail; en verdad era molesto tener que ver como muchos adolescentes seguían con sus burlas de niños pequeños, era el final del año escolar y a un grupo de imbéciles se habían atrevido a jugarle una broma al Dragneel encerrándolo en un pequeño estudio, pero la broma llego demasiado lejos cuando un chico en particular decidió intentar prender fuego a la sala, ella y Gray llegaron justo a tiempo para sacar a su amigo del lugar y evitar el incendio, pero lo que no esperaban era que luego de abrir la puerta los mismos bandidos los atacaran con bates de béisbol por detrás, en el momento en que comenzó a ver negro por un mal golpe escucho los gritos.

Las pupilas de Natsu se encogieron y dio un gruñido casi animal al aire, a los dos minutos los mismos seis muchachos que casi los matan terminaron sangrando en el suelo, costó mucho trabajo tranquilizar al Dragneel después de eso pero con ayuda de Macarov consiguieron que no los arrestaran.

Dos de los muchachos terminaron con fracturas y quemaduras de tercer grado y otros dos con el rostro deformado. A partir de ahí fue que comenzó la verdadera tortura para el Dragneel.

Pasaron meses para que lograra salir de aquel encierro fortuito dentro de Fairy Tail que Natsu se había autoimpuesto, muchas personas lo llamaban monstruo o fenómeno desde aquel accidente pero solo la gente de Fairy Tail o su familia sabía la verdad. El regreso de Igneel fue un verdadero alivio para el chico, aunque todos conocían al alegre e infantil Natsu Dragneel, el que su padre estuviera con él le había devuelto la confianza que el mismo había perdido sin saberlo, pero nuevamente el destino le jugo un juego caprichoso y le arrebato al ser más querido del chico.

Y entonces llego su milagro personal llamado Lucy Heartphilia, ¿Quién diría que una sola persona provocara tantas transformaciones en un muchacho tan hiperactivo e infantil como él?

-Oye Erza, hay algo que debo preguntarte-

Regresando a la realidad Scarlett le prestó un poco más de atención a su amigo a lado de ella. Natsu sabía que la escuchaba así que procedió a hablar.

-El otro día, bueno… el día del ataque simultáneo… perdí mis sentidos por unos instantes-

Eso sí que la sorprendió. -¿De que estas hablando?-

-Verás, hubo un momento en que no supe que hacer, tenía demasiado miedo y me congele, no supe identificar los olores ni los sonidos… todo era casi negro para mí.. me bloquee-

-Natsu, eso solo puede significar una cosa-

-No lo menciones-

-Puede que hayas intentado entrar en Dragon Force-

-¡Te dije que no lo mencionaras!-

Ante el gritó del Dragneel, todos voltearon a verlo, incluso Jellal y Lucy detuvieron abruptamente su entrenamiento.

-¿Natsu?- Lucy bajo los brazos y deshizo su posición para ir hacía sus amigos.

-Escucha, aunque no lo aceptes sabes que es la verdad, Igneel te hablo sobre ello, no es la primera vez que pasa y no puedes seguir ocultándoselo a Lucy, ella debe saberlo- le dijo Erza pasando un brazo alrededor de su cabeza y acercándolo a su pecho en forma de un abrazo fraternal.

-¿Está todo bien?- Jellal y Lucy llegaron justo a tiempo para ver como Erza soltaba lentamente a Natsu.

-Creo que será todo por hoy, Natsu podrá explicarte cómo es que trabajaremos los siguientes días y lo que te falta por aprender, Jellal y yo nos retiramos, nos vemos luego chicos-

-Nos vemos chicos, gracias por todo- se despidió amablemente la rubia, pero jamás escucho despedirse a su mejor amigo, de acuerdo, en verdad estaba molesto por algo.

-¿Sucedió algo?- quiso ir directo al grano.

- Vamos a casa Luce, muero de hambre- respondió el pelirosa tratando de evadir por completo la pregunta.

A pesar de haberse dado cuenta de la mentira ella lo siguió, nuevamente Natsu tuvo que ayudarla a atravesar los obstáculos del claro, al parecer el chico se había quitado sus guantes para poder tocarla.

Al llegar al apartamento casi una hora después, Lucy sentía que no podía con la angustia de ver a su compañero así de angustiado y molesto, así que lo primero que hiso al abrir la puerta y ser recibidos por Happy y Plue fue directo a la cocina y comenzó a cocinar con lo que había en la nevera, en cambio Natsu camino directo al baño para tomar una ducha.

Lucy sentía el ambiente tenso, tenía que encontrar la forma de devolver a Natsu a la realidad cuando de pronto algo se le ocurrió mientras preparaba los emparedados, corriendo entusiasmada hacia el cuarto principal y busco entre todas sus cosas el reproductor que generalmente usaba en su antiguo departamento, lo conecto rápidamente en la cocina y encendió su ipod para reproducir una canción.

En cuanto los instrumentos comenzaron a sonar la rubia escucho la puerta del baño abrirse, debía comenzar ya.

We're a thousand miles from comfort; we have travelled land and sea

But as long as you are with me, there's no place I'd rather be

I would wait forever, exalted in the sea

As long as I am with you, my heart continues to beat

En cuanto salió de la ducha Natsu escucho nuevamente su analgésico personal, Lucy estaba cantando, olvidando completamente el hecho de que solamente vestía unos pants flojos que encontró en el suelo, cambio el rumbo de su habitación directamente a la cocina de dónde provenía esa hermosa voz.

With every step we take, Kyoto to The Bay

Strolling so casually

We're different and the same, gave you another name

Switch up the batteries

En el momento que entro se encontró con la rubia cantándole con una sonrisa frente a la mesa, seguía sudada y sucia por el ejercicio pero eso a él no le importo y se acercó para tomarla de la cintura con una sonrisa

If you gave me a chance I would take it

It's a shot in the dark but I'll make it

Know with all of your heart, you can't shame me

When I am with you, there's no place I'd rather be

Danzaron por toda la cocina, ya que era un espacio cerrado apretujaron sus cuerpos lo más que podían para evitar golpes con algún mueble, Happy y Plue seguían sus pasos cada vez que daban una vuelta, como si estuviesen celebrando algo.

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

Olvidándose de todas sus preocupaciones el Dragneel continuo dando vueltas con Lucy entre sus brazos, pidiendo silenciosamente que no acabara ese momento.

We stake out on a mission to find our inner peace

Make it everlasting so nothing's incomplete

It's easy being with you, sacred simplicity

As long as we're together, there's no place I'd rather be

Lucy comenzó a dar pequeñas risas mientras cantaba, no podía evitarlo, se sentía demasiado a gusto así, trato de mantener la calma y seguir respirando para no perder el tono.

With every step we take, Kyoto to The Bay

Strolling so casually

We're different and the same, gave you another name

Switch up the batteries

Se separó por un instante de Natsu y tomo un poco de distancia, luego comenzó nuevamente con el baile individual e incitó a su amigo que la siguiera.

If you gave me a chance I would take it

It's a shot in the dark but I'll make it

Know with all of your heart, you can't shame me

When I am with you, there's no place I'd rather be

Dos pasos a la izquierda y dos a la derecha, las manos revoloteando inquietas sobre sus torsos y las cabezas moviéndose al ritmo de sus caderas.

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

When I am with you, there's no place I'd rather be

Plue y Happy ahora estaban saltando sobre el mueble de la sala, disfrutando tanto como sus amos del ritmo de la música y la vocalista.

If you gave me a chance I would take it

It's a shot in the dark but I'll make it

Know with all of your heart, you can't shame me

When I am with you, there's no place I'd rather be

Lucy sabía que eran las últimas estrofas así que termino de mover sus pies y se acercó a Natsu mientras estaba distraído y lo abrazo por la espalda juntando sus manos sobre su abdomen.

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

When I am with you there's no place I'd rather be

Natsu se detuvo al instante. No sabía cómo reaccionar ante eso.

no,no,no,no, no place I'd rather be

No, no, no, no, no place I rather be

No, no, no, no, no place I rather be

when I am with you there's no place I'd rather be...

Estuvieron quietos por unos instantes, dejando que las respiraciones de ambos se tranquilizaran un poco y disfrutando del silencio que se había producido en ese momento.

-¿Me explicaras que es lo que te sucede?- Lucy fue la primera que decidió romper el silencio.

El pelirrosa suspiro con fuerza y se soltó del agarre de su compañera para poder voltear a verla a los ojos.

-Lucy, hay demasiadas cosas que me gustaría que no supieras para poder protegerte, no es que no confié en ti es solo… que me asusta como reaccionaras ante eso-

La muchacha solamente atino a sentarse sobre la mesa y tomo ambas manos del chico con fuerza entre las suyas.

-Deberías tenerme más confianza ¿sabes?, no hay una sola cosa que no sepas sobre mí después de todo- termino con una sonrisa.

-Tú ganas, pero si voy a contarte todo te quiero cerca de mi ¿de acuerdo?, aun temo por tu reacción, vamos al sillón-

Lucy no dio ninguna queja y lo acompaño hasta la gran sala, para ella ese era el sitio más grande del apartamento y al parecer más cómodo desde la última vez que ayudo a Natsu a limpiar.

El Dragneel tomo lugar en el suelo acomodando un par de almohadas para que estuvieran cómodos, luego jaló el cuerpo de Lucy para acomodarlo entre sus piernas, de esta forma ella recostó su cabeza sobre su pecho desnudo y dejo que el jugara con sus manos.

-En Fairy Tail hemos tenido muchos problemas que van más allá que una simple batalla musical, hemos peleado con personas que quieren hacernos daño, algunos solo nos amenazan, otros han querido asesinarnos- los ojos de Lucy se abrieron desmesuradamente ante eso.

-No te asustes, ya son cosas normales dentro de Fairy Tail ¿sabes?, recuerdo el primer día que llegue, Igneel me dejo a cargo del viejo y el me mostró el lugar, a los tres días ya estaba luchando contra unos bandidos que quisieron meterse a robar, la mayoría éramos niños así que se confiaron, aún recuerdo como le rompí el labio a uno y lloro como marica- la pequeña risa que soltó después la alivio un poco.

-Pero después comprendí que no siempre mis oponentes iban a ser tan débiles y fáciles de vencer por lo que mi fuerza no bastaría si deseaba proteger a mi nueva familia, Igneel me enseño artes marciales pero he entrenado con Mira Taekwondo, Erza me enseña el arte de katanas, Jiujitsu con Gildartz, boxeo con Gray y Gajeel y muchas otras técnicas de lucha con otros miembros de Fairy Tail-

-Por eso es que eres tan habilidoso en estas cosas, no has dejado de entrenar, ¿Qué pasa con la banda?-

-No es tan difícil acoplarse a este estilo de vida cuando no estudias ni trabajas, en realidad es divertido y me mantiene ocupado para evitar que pase mi tiempo quemando y destruyendo cosas como diría el viejo-

-Hablando de eso, ¿Qué sucede con esos guantes? ¿Cómo es que desprenden fuego y no sales herido?-

-Son especialmente para eso Luce, están hechos de un policarbonato especial que evita que me queme, dentro tiene un sistema hidrogenado que adherí como segunda tela, me permite encenderlos con un poco de fricción, claro tengo que recargarlos con un combustible especial para eso, por esto es que soy el Dragon Slayer de Fairy Tail- habló orgulloso el Dragneel, y como no hacerlo, fui una de las pocas cosas que le dejo Igneel, bueno en realidad el los fabrico y los perfecciono pero los planos, medidas y diseño fueron obra de su padre.

-Es increíble que sepas todo eso, ¡Estoy impresionada Natsu! ¡Son magníficos!- comentó girándose un poco para poder verlo a la cara.

-Lo sé- hubo nuevamente un pequeño silencio entre ambos mientras Natsu reconsideraba sus ideas y trataba de unirlas para terminar de explicarle todo a su amiga.

-¿Me hablaras sobre los Dragon Slayer´s y los miembros clase S?-

Fue más rápido de lo que esperaba, con esa pregunta logró coordinar su pensamientos y seguir con el relato, por más difícil que ese fuera, él debía confiar en ella.

-Bueno, solo conozco a cinco de nosotros, yo soy el Dragon Slayer de fuego, Gajeel es el de metal, Wendy es del aire y hay otros dos chicos que aún no conoces, son los gemelos de Saberthoot, ellos son los Dragon Slayer de luz y sombra.-

-¿Cada uno tiene una característica? ¿Cómo es que la pequeña Wendy puede pelear?-

-Podría decirse que sí, veras yo uso mis guantes de fuego para pelear, Gajeel usa unos chacos de metal extensibles, Wendy tiene este increíble par de botas con las que lanza unas tremendas ráfagas de viento ¡Incluso ha llegado a volar unos metros sobre el suelo! Es increíblemente fuerte cuando se lo propone, y Sting y Rogue son conocidos así por sus habilidades de pelea en pareja, ellos son apodados así por los ataques simultáneos que realizan, pero aún les falta mucho por aprender, yo los he vencido fácilmente- se jacto el chico.

-Aún no me has explicado porque ustedes son llamados "Dragon Slayer´s"-

Natsu aferro más la mano de Lucy entre las suyas y continúo su relato.

-Bueno, verás Luce, los miembros clase S dentro de Fairy Tail son aquellos cuyas habilidades en la lucha son calificadas mediante un examen que realiza el viejo junto con otras personas fuertes como Gildartz o Laxus, solo si pasas ese examen eres un miembro clase S, ellos son los primeros en la fila que defienden nuestro hogar, luego les siguen los guardianes, quienes sus habilidades de lucha no son tan fuertes como los clase S pero pueden pelear en caso de emergencia, Levy es una ¿Lo sabias?-

-¡Levy-chan! ¿Cómo es posible?-

-Gajeel la entreno hace algunos años luego de pasar la tragedia de Phantom Lord, creo que esa es una historia que ella debería contarte-

-Sí, estas en lo cierto, ¿Y los Dragon Slayer´s?- la insistencia era demasiada.

-Nosotros tenemos… habilidades especiales para la lucha, hace algunos años intente hacer el examen clase S pero Erza y Gildartz me calificaron mal decidiendo que no podría cambiar mi rango-

-¿Qué clase de habilidades?-

- Dicen que nuestra fuerza puede crecer, algunos dicen que es sobrehumana una vez fracture la rodilla de un chico en la escuela solo por patearlo con la pelota de fútbol….puedo escuchar las conversaciones de personas a metros de mí…. En este instante la vecina de enfrente está viendo un programa pésimo para cocinar, aunque siempre la escucho quejarse que nunca nada le sale bien, no sé porque sigue haciéndolo-

Al no sentir ningún movimiento por parte de su rubia amiga decidió continuar. – También puedo identificar los olores de una persona y rastrearlos de cierta forma, esta habilidad me ha sido muy útil pero me hace sentir como perro policía- entonces ahora sí que sintió movimiento.

-Espera, ¿Dices que tu nariz es más sensitiva que la de un humano normal?- la sintió mover su cuerpo un poco más lejos de él, pero Natsu la volvió a atraer hacía su cuerpo. Estaba comenzando a asustarse.

-Sí, pero algunos lo ven muy habilidoso Luce, he encontrado a algunas personas desaparecidas y puedo…-

-¡Déjame ir Natsu!- ambos empezaron a forcejear, la rubia queriendo alejarse del cuerpo del chico, intentando sin éxito de desamarrar aquellos enormes brazos fuertes que ahora estaban enredados alrededor de su cintura.

Pero entonces lo sintió, en el momento en que casi lograba arrodillarse y escabullirse lejos del pelirrosa la Heartphilia lo sintió temblar.

-Por favor….sé que esto no es normal…. No soy un humano normal y no se la razón…sé que soy un monstruo…. Y que quizá ya no quieras ni verme pero te lo suplico…. No me dejes Luce…. No te alejes de mi… yo no sé qué haría si tú te fueras de mi vida…-

-¿Qué? ¿Irme?- Oh no, él lo había entendido todo mal y ahora lo había lastimado.

-Hey hey, Natsu mírame, no me iré a ningún lado ¿Entiendes?- la rubia desistió de su intento de huida, se giró para poder alzar los brazos y abrazar al muchacho por encima de su cabeza, ahora la cabeza del pelirosa descansaba sobre la clavícula de la rubia, casi llegando al pecho, de esta forma podía escuchar su corazón latir fuertemente.

-Perdóname si no me di a entender, escúchame, tú me dices que alcanzas a oler el cerdo que está cocinando la señora de enfrente y yo no he tomado una ducha y estoy empapada en sudor justo al lado de ti, ¿Qué se supone que haga? No me iba a quedar aquí viendo cómo te vomitas por mi olor, sé que apesto pero por favor, no vuelvas a pensar que quiero o voy a dejarte porque eso jamás sucederá, ¿Entendido?-

Natsu levantó su cabeza asombrado.

-¿Eso era lo que te preocupaba? ¿Tu olor?-

-¿Qué otra cosa si no?- le respondió con una dulce sonrisa.

-Bueno, quizá el hecho que no soy un humano normal, que podría partirte en dos con mi fuerza y que…-

La rubia estallo en risas, deshaciendo el abrazo que aun mantenían.

-¿Es enserio?, Natsu tu eres alguien fantástico, esas habilidades que tienes solo son eso, ¡Habilidades! Y son fabulosas para mí, si no tuvieras esa manía de estar danzando de aquí por allá o si no fueras piro maniaco o aficionado por la salsa picante o un tipo cualquiera que no hace más que respirar no serías tú, ¡Y no te querría si fueras de otra forma!-

El Dragneel abrió los ojos desmesuradamente, jamás alguien le había dicho tales cosas, en realidad ahora que lo pensaba, Lucy había sido la única persona quien había hecho cosas que jamás en su vida creyó que alguien haría. Quizá por eso era tan especial y única para él, Lucy Heartphilia era una en un millón.

-¿Sabes? en realidad no tienes por qué alejarte así, me gusta mucho tu olor Luce, cuando sudas es verdad que liberas toxinas y el olor corporal es demasiado fuerte en algunas personas pero el tuyo no es así, ahora mismo hueles a una combinación de cerezo y vainilla, ¿O quizá sean fresas? Mmmm nop, creo que son cerezos, ¡Sin importar lo que sea a mí me gusta mucho tu aroma!- finalizo con una enorme sonrisa al estilo Dragneel.

Ambos chicos se quedaron hasta tarde en el sofá riendo y charlando, comiendo de los ahora fríos emparedados que la rubia había preparado anteriormente, ninguno sospechaba que no tan lejos de ahí, con unos binoculares y un micrófono especial, alguien los estaba observando.


CONTINUARÁ…

Notas de la autora: Hola queridos lectores, para las personas que siguen mi fic tan entusiasmadamente y preguntan por misterios aún sin resolver, (Lady-werempire jaja) déjenme explicar que eso vendrá hasta mucho después, claro seguiré relatando leves flashbacks pero ya que esas historias son esenciales para la trama me temo que seguirán siendo un misterio hasta ahora, déjenme contarles que aunque sigo algo desanimada no tengo planes de abandonar esta historia ya que no va ni por la mitad; bueno para finalizar a continuación les dejo el nombre de la canción del día de hoy:

Rather Be - Clean Bandit (Jasmine Thompson Cover)

Muchas gracias a todos y espero seguir contando con sus lecturas y reviews. Os veo a la próxima.