Disclaimer: Fairy Tail y sus personajes son propiedad de Hiro Mashima, la historia a continuación es totalmente de mi imaginación y sucede en otro universo.

Capítulo 19. Charlando con el diablo.

No había marcha atrás.

Hoy era el día.

Natsu Dragneel se había levantado esa mañana con ese único pensamiento en su mente, ese era el día en el cual el viejo y el mismo hablarían y aclararían de una vez por todas sus asuntos con Álvarez.

Se había levantado desde muy temprano para evitar tener que ver la preocupada mirada de su mejor amiga, había tomado una ducha rápida para luego vestirse con un pants holgado junto con una ramera suelta y su inseparable bufanda, pensaba que si las cosas se ponían difíciles lo mejor sería llevar sus guantes de pelea así que los cogió y guardo en sus botas militares.

Quería irse lo más rápido posible de ahí así que decidió que desayunaría dentro de Fairy Tail que es donde los recogerían a él y al abuelo, pero ni con toda su fuerza de voluntad logró irse sin antes ver que Lucy estuviera bien.

Entró con sigilo a su habitación y comprobó que seguía dormida, claro era sábado después de todo, seguramente dormiría hasta las doce del día como era su costumbre durante los fines de semana, al verla ahí tan tranquila dormitando le remordió la conciencia así que trato de salir de la misma forma en la que entró, pero no contó con que una pequeña y delicada mano lo detuviera en su intento de escape.

- ¿Natsu? ¿A dónde vas? ¿Qué hora es? -

Al voltear a verla no pudo evitar sentirse un poco culpable, la había despertado y ahora tendría que inventar una excusa para tratar de tranquilizarla.

- ¿No estarás planeando irte o sí? Creí que habíamos hablado de esto- la rubia ya estaba enderezándose para enfrentarlo cuando vio cómo su mejor amigo suspiraba cansado y se sentaba junto a ella en su cama.

-No quería que te enteraras, sabes que esto es importante, tenemos que saber qué es lo que traman Luce y sabes tan bien como yo que si no vamos los ataques empeoraran- trato de sonar razonable el pelirosa.

- ¿No hay algo que pueda hacer? – su mirada reflejaba tristeza y decepción, decepción por sí misma.

Algo que a Natsu no le gustaba para nada, la cogió con cuidado entre sus brazos y la acercó a su pecho mientras subía sus piernas para acostarse completamente junto a ella mientras le acariciaba con cariño su rubia melena.

-No es tu culpa, ¿Lo sabes verdad? Ellos no solo están buscándote a ti, solo serán un par de horas Luce-

-Un par de horas en las que estaré muriendo del miedo-

-Lo sé, pero yo no estaré en mejores condiciones, tienes que prometerme algo mientras yo no estoy aquí, a cambio yo te prometeré que regresaré sano y salvo a tu lado, ¿De acuerdo? –

La soltó con cuidado y la ayudo a levantarse de la cama sin apartar su mirada de sus ojos chocolates.

-Ayer hablé con Gray acerca de tus avances en el entrenamiento, me gustaría que hoy practicaras con él y Juvia algunas técnicas de Capoeira, ese es el punto fuerte de Juvia y estoy seguro que te acoplarás rápidamente, y otra cosa, el día de hoy no saldrás de Fairy Tail hasta que yo llegue ¿De acuerdo? -

-Eres un mandón, pero lo haré solo porque quiero entrenar con Juvia, va a ser interesante ver otros estilos de lucha que los de Erza, Jellal y tú- sonrió convencida.

-Bien, ahora cámbiate rápido que ya casi es hora que nos recojan y no podré irme sabiendo que estas desprotegida, tendré que llamar a Gajeel y a Levy para que ya no vengan a recogerte, pero eso puedo hacerlo de camino-

Lucy corrió al baño de Natsu a tomar una ducha rápida y cambiarse de paso, solo necesitaría unos shorts y su playera deportiva como siempre, ya se alistaría luego para el espectáculo de esa noche en Fairy Tail. Esa había sido la primera vez que la rubia se había alistado en menos de una hora, el tiempo era esencial y lo sabía, no quería irse sin sentirse segura que Natsu estaría bien ese día.

Salieron del apartamento y caminaron hacia Fairy Tail con algo de prisa, al llegar al bar lo primero que notaron fue el silencio y quietud que reinaba en el lugar, por primera vez desde que había llegado ahí Heartphilia presencio con desagrado la tranquilidad de los miembros.

- ¿Y bien? Parece que estuviéramos en un funeral- rompió por fin el silencio el Dragneel.

- Sabes bien que no estamos acostumbrados a esto cerebro de lava-

- Bueno eso sería porque a nadie le interesaría interrogar a alguien con el cerebro congelado-

- Maldito lanzallamas-

Antes de que cualquiera pudiera lanzar otro insulto ambos terminaron en el suelo con un gran chichón en sus cabezas cortesía de la gran Titania, quien ese día resultaba estar con peores humos que siempre.

-Si ambos siguen así no me quedará de otra más que les rompa ambas piernas-

Ambos muchachos temblaron del miedo y se quedaron sentados en su lugar con la boca cerrada y sudando a mares como un par de cachorros amaestrados.

La rubia no pudo evitar notar esa extraña actitud en su amiga, si bien era cierto que no soportaba ver a esos dos pelear ella sabía que tenía suficiente paciencia como para evitar tener que golpearlos antes de que lo merecieran realmente así que camino lento hasta acercarse a su amiga pelirroja y tomo asiento con cuidado a lado de ella.

-Buenos días Erza, ¿Sucede algo?-

-Oh, Lucy, buenos días- su tan efusivo saludo le confirmo que en efecto algo andaba mal.

-Déjame adivinar, se trata de alguien con el cabello azul y cierto tatuaje rojo en el rostro ¿Me equivoco?-

-No te equivocas Lu-chan- ambas voltearon a ver a la dueña de esa voz quien estaba tomando asiento frente a ellas en una butaca.

-Siempre que estas así es por él, aunque debo admitir que no te veía así desde hace poco más de un año cuando te dijo que vendría a Magnolia a la gran batalla entre bandas, ¿Qué hiso esta vez?- Levy Mcgarden era una de las pocas personas del bar a quien le podía confiar y desahogar todos sus oscuros secretos, después de todo aquella pequeña peliazul comprendía su mal de amores por el enamoramiento repentino que tuvo con Gajeel Redfox luego de los sucesos con Phantom Lord.

Claro Lucy no se quedaba atrás, en sus dos años de conocerla por medio de la universidad, la Heartphilia ya sabía todo acerca del infierno que vivió en la torre del cielo junto a su salvador, después de todo no por nada esas dos eran de sus mejores amigas.

-El día de ayer en el entrenamiento me descargue, casi me pongo de rodillas ante el a implorar que me ame y su única respuesta fue que por ahora lo mejor es que seamos amigos, no sé qué mierdas estaba pensando al explotar de esa manera chicas, prácticamente le grite en la cara que lo amo y no logre nada, pienso que quizá ya no sienta lo mismo por mí- ahora su triste mirada se dirigía al suelo, no temía llorar, no frente a ellas, lo que temía es que Jellal la viera.

-Es un imbécil- soltó con coraje la rubia.

-Concuerdo con Lu-chan, que se quede él con su amistad, Erza lo que tú necesitas ahora mismo es una distracción, ¡Y qué mejor que las fiestas navideñas!-

-No estoy segura, hoy no es mi mejor día y tenía que ser justamente cuando Álvarez vendrá-

-Quizá tengas razón-

-Oigan chicas tranquilas, deberían confiar más en Natsu y el maestro, ellos estarán bien- saltó a defender a su mejor amigo la rubia.

-¿No estas preocupada Lu-chan?-

-Pero claro que lo estoy, de hecho ahora mismo estoy que me muero del miedo- rio con nerviosismo –Pero confío en Natsu, él me prometió que regresaría sano y a salvo a Fairy Tail y sé que lo hará- sus ojos cafés brillaron con emoción.

-Vaya, debo decir que a pesar de llevar unos meses de conocerse ustedes dos se han vuelto muy cercanos Lucy- Scarlett parecía estar recobrando los ánimos con su charla especial de chicas.

-Concuerdo con Erza, ¿Qué se traen ustedes dos eh Lu-chan?- confirmó golpeando su codo cómplice de la pelirroja, ante esas acciones el rostro de Lucy comenzó a tornarse rojo.

-¡No nos traemos nada! ¡Solo somos amigos!- por su tono de voz parecía que había delatado cierto nerviosismo.

-Pero si hasta viven juntos, por Mavis Lucy todos en la ciudad andan hablando de ustedes, hay rumores acerca de una nueva pareja especial de Fairy Tail y créeme que sé que no hablan de Gajeel y de mí, a nosotros ya nos molestaron lo suficiente, incluso vinieron a pedir permiso los de la revista "Músico semanal" para entrevistarlos a ambos, el maestro dijo que si pero luego sucedieron estos problemas con Álvarez y canceló la invitación-

-¿¡Qué hiso qué?!- el gritó aturdidor que pego la rubia fue suficiente para que las pocas personas dentro del bar giraran a verla y su par de amigas frente a ella estallaran a carcajadas.

-¡No se rían! ¡Paren de burlarse que esto es serio!- pero ninguna parecía prestarle atención y continuaron riendo hasta quedarse sin respiración.

-Las amo chicas, esto sí que me levanta el ánimo- hablo entre carcajadas Scarlett.

-¡Ah! ¡Esto es todo! ¡Necesito golpear a algo a alguien! ¡Gray! ¿Dónde estás? ¡Comenzaré mi entrenamiento justo ahora!- se alejó de su par de amigas quienes estaban muriendo de risa frente a ella dando fuertes zancadas en el suelo en dirección a quien sabe dónde, después de todo ella solo quería alejarse lo más posible de las burlas y comentarios vergonzosos, pero eso no evito que cierto pelirrosa se preocupara y como buen amigo se acercara a ella.

-¿Luce estas bien? ¿Qué te sucedió?- su preocupación solo provoco en ella otra ronda de calor en su rostro.

-Estoy bien Natsu no te preocupes, solo quiero comenzar ya mi entrenamiento, mientras más pronto termine más pronto podre irme- evitó por completo su mirada jade que la observaba fijamente.

-Está bien, de todas formas ya estaba a punto de irme, llamaré a Gray- ante eso Lucy reaccionó.

-¿Ya es la hora? ¿Por qué tan pronto? ¿Ya has comido algo? ¿Necesitas algo?- nuevamente la preocupación y el miedo se apodero de ella, no se había dado cuenta de que tan tarde era hasta que su amigo le indico su breve partida.

-Estaremos bien, Jellal nos colocó tres micrófonos escondidos en nuestro cuerpo por si necesitamos ayuda, y ya comí algo, Mira me preparó un emparedado en lo que tu hablabas con Erza, ¿Está todo bien por cierto?-

-Problemas amorosos-

-¿Jellal otra vez?-

-¿Cómo sabes acerca de eso?-

-Por favor Luce, ella me arrastro hasta un maldito edificio lleno de gente loca solo para rescatarlo cuando yo tenía solo dieciséis años, fue divertido patear el trasero a Jellal pero pasamos un infierno antes de eso ¿Quieres que te cuente la historia? Es muy divertida a pesar de todo, cuando regrese compraremos palomitas, sodas, pizza, helado y te contaré todo ¿Qué te parece?- la sonrisa que le brindo era radiante y despreocupada, como si fuera cualquier otro día y no uno donde lo interrogarían y quien sabe que cosas le harían unos enemigos que parecían querer destruirlos. Era una sonrisa hermosa y se la estaba dedicando solo a ella, imitarlo fue inevitable y acercarse a él para abrazarlo por la cintura también, debido a su altura ella podía acomodarse perfectamente entre su pecho para que él pudiera recargar su barbilla sobre su cabeza y corresponder su abrazo con afecto.

-Me prometiste que volverías sano y a salvo, cumple tu promesa y no hagas nada estúpido por favor Natsu, por mí- ante eso el muchacho rio.

-Lo prometo Luce, rayos, ¿Cómo es que me conoces tanto para sospechar que haré algo que defines como estúpido?-

-Ni yo lo se Natsu Dragneel pero más te vale cumplir tu promesa-

Se separaron sonrientes para dedicarse una última mirada de despedida, sabían que no sería para siempre, solo serían unas cuantas horas.

El sonido de una hélice los hiso sudar. Alguien estaba aterrizando en la azotea de Fairy Tail. Ya estaban ahí.

Todos los presentes subieron a la azotea por la puerta trasera de la oficina del maestro para observar como un brillante helicóptero negro estaba detenido sobre el asfalto, la hélice seguía girando indicando que tenía poco tiempo de haber llegado y de lado del piloto estaba un gran escudo de color negro en forma de V, la seña característica de Álvarez.

Jellal fue el primero en acercarse y confirmar la identidad del piloto cuando este bajo, quitándose el casco fue a saludar al peliazul con la mano pero el Fernández le negó el saludo.

-Supongo que no soy bienvenido, un gusto volver a verlos Fairy Tail, y un gusto también líder de Crime Sorciere, no habíamos tenido la oportunidad de presentarnos oficialmente, mi nombre es Mard Geer, soy el vocalista principal de la banda Álvarez-

El hombre de largo cabello negro volteo a ver a todos los miembros ahí presentes, entonces su mirada se detuvo sonriente en un par en particular.

-Veo que están muy bien Natsu y Gray, díganme ¿Sus lindas novias lo están? Porque se ven muy nerviosas-

Ambos sabían que era solo una provocación pero de la misma forma en que la mirada lasciva y sádica recaía en Lucy y Juvia, ellos saltaron a tratar de golpearlo pero un par de personas los detuvieron interponiéndose en su camino.

-Creí que eran más inteligentes ustedes dos, y tú, no vuelvas a ver a mis amigas de esa forma si no quieres que te golpee el rostro hasta dejarte ciego-

-La gran Titania, Kyoka te manda saludos sabes-

-No te metas en lo que no te importa- la otra persona que había detenido al par de amigos era nada más y nada menos que Gajeel Redfox.

-Y claro no podía faltar el gran Dragon Slayer de hierro, todos y cada uno de ustedes tienen cuentas que pagar, pero claro no estoy aquí para eso… por ahora-

-Lo sabemos, como líder de Crime Sorciere debo confirmar que esto no será un intento de secuestro, así que te pido de la manera más atenta que me hagas el favor de confirmar el paradero donde tendrán a Natsu Dragneel y Macarov Dreyar, también necesitare alguna forma de comunicación con ellos y si es posible con su líder Zeref, si no me dan lo que les exijo su solicitud no podrá ser elaborada por ahora y me veré obligado a llamar a las autoridades y a mis superiores para contar con refuerzos-

Ante eso el vocalista de Álvarez sonrió. Volteo a ver a Jellal y le entregó unos documentos junto con unos auriculares del tamaño de una cereza.

-Esa será su manera de poder comunicarse con ellos, todo lo que necesitas esta en ese documento, como podrás ver es una solicitud muy bien elaborada y detallada para evitar algún malentendido por lo que si llegamos a interpretar algún movimiento suyo como declaración de guerra no nos quedaremos de brazos cruzados-

Jellal bajo la cabeza sintiéndose impotente, a pesar de eso guardo los papeles dentro de su chaqueta y se giró a ver al maestro y a Natsu.

-Adelante-

Maestro y alumno se miraron mutuamente y comenzaron a avanzar despacio en dirección al helicóptero que los esperaba con dos cascos de seguridad idénticos con el mismo símbolo tatuado en la frente. Ya preparados su "chofer" cerró la puerta con cuidado para subirse luego en el asiento de piloto y poner en marcha el motor. Natsu se asomó por la ventana para distinguir a todos sus amigos antes que sus mareos lo asaltaran y dejaran inconsciente. Logró ver a Laxus mirando al helicóptero seriamente y de brazos cruzados, Gajeel abrazando protectoramente a Levy por sus hombros, a Gray ser abrazado fuertemente por Juvia mientras él le devolvía la mirada, a Erza ignorar a Jellal mientras este caminaba en dirección a la oficina de Macarov claramente decaído, eso le recordaba que en cuanto regresara le daría una paliza, y luego estaba Lucy.

Ella fue quien más trabajo le costó apartar su mirada, como siempre cada vez que veía esos enormes ojos achocolatados no quería dejar de verlos, aunque en ese momento no lucían tan brillantes como siempre. Lo último que alcanzó a ver antes de caer al suelo víctima de su debilidad en los transportes fue la hermosa y tranquilizadora sonrisa de Luce, una sonrisa que le transmitía paz y esperanza, con esa sonrisa como último pensamiento antes de desmayarse sabía que entonces todo estaría bien.


El trayecto fue demasiado largo para su gusto, despertó gracias a que el viejo lo zarandeo como saco de patatas ya estando fuera del helicóptero.

-¡Despierta estúpido mocoso! ¿No estás viendo acaso la situación en la que nos encontramos?-

Cuando menos se dio cuenta sintió como alguien lo tomaba por la bufanda intentando ponerlo de pie, grave error diría él. Con rapidez cogió ambas manos que lo tenían agarrado de su adorada bufanda blanca y les dio la vuelta sobre su cabeza para poder aplicar una dolorosa llave de lucha a quien fuera que lo estuviese sujetando, lo soltó después de golpear al soldado en la espalda con fuerza dejándolo inconsciente de inmediato, giro su cuerpo entero teniendo un mal presentimiento y se encontró con un terrible escenario.

Decenas de armas estaban apuntándolo de pies a cabeza, las luces rojas marcaban su cuerpo entero como blanco amenazándolo con cualquier próximo movimiento que realizara.

-Natsu, aléjate de ese hombre y sigue sus instrucciones al pie de la letra- trato de intervenir el maestro, pero antes que alguno pudiera decir otra cosa Mard Geer les ordenó con una señal a los hombres que bajaran sus armas.

-Registren a ambos y quítenles todo lo que no sea ropa, el emperador los está esperando-

Luego de dar sus órdenes Mard Geer se quedó esperando a un lado de una gigantesca puerta de caoba, ahora que lo pensaba esa habitación no parecía ser ni de cerca una pista de aterrizaje para helicópteros así que dedujo que tuvieron que cargarlo para sacarlo de ahí y luego llevarlo a esa habitación, giró a ver si podía encontrar unas escaleras o algún elevador además de esa enorme puerta, en efecto parecía haber un elevador, y por las letras S5 logró deducir que estaban bajo tierra, quizá varios metros por debajo, prestó más atención a su alrededor en lo que era revisado por los soldados, piso de mármol, escopetas y pistolas Glock G20 de 9 mm con las que estaban armados los soldados, ni una sola puerta o ventana más que la que tenía en frente y por último pero no menos importante el característico aroma a azufre que emanaba el lugar.

Natsu trataba de guardar todos y cada uno de esos detalles cuando sintió que alguien sacaba sus guantes de pelea de su bota, con rapidez se los arrebato al guardia antes de que este abriera la boca y se los llevara pero dicha acción no fue pasada por alto por el pelinegro.

-¿Qué está sucediendo? Oh ya veo, pero si son tus tan característicos guantes prende fuego, bueno eso sería una molestia para el emperador, el odia el fuego así que será mejor que los conservemos por el momento- al momento de acercarse para tratar de arrebatárselos, Natsu se enfundó rápidamente ambos guantes haciendo fricción generando fuego en ambos puños preparándose para luchar.

-Sabes bien que tanto mis guantes junto con mi bufanda jamás se apartaran de mi lado, así que si quieres quitármelos será sobre mi cadáver, y por lo que veo a tu jefe no le gustaría eso ¿Me equivoco?- terminó sonriendo con calma el líder de los "Slayer´s".

-Llévenselos inmediatamente, si el Friki intenta algo con sus guantes dispárenle en la pierna, quizá no podamos matarte pero si puedo lastimarte Salamander, y no solo a ti, ¿Ves aquella pantalla?-

Natsu giró rápidamente a su izquierda donde una pantalla plana emergía de la pared de madera. Abrió los ojos desmesuradamente al prestar atención a la gran televisión, era Lucy, estaba con su traje de entrenamiento y practicaba junto con Juvia ejercicios de estiramiento junto con algunas posiciones iniciales para ganar fuerza, Gray estaba vigilándolas desde atrás, estaban en la azotea del gremio, justo donde la dejo cuando se fueron pero ¿Cómo era posible? Ahí no podía haber ninguna cámara, por el ángulo en el que se encontraban parecía ser como si lo que fuera que estuviese grabando volara, oh no.

-Es un Dron, muy útil para filmar personas desde nuestra posición ¿Cierto? ¿Sabías que los venden por ebay? En realidad son muy baratos, lo único que tuve que hacer para conseguirlo fue dar el número de mi tarjeta de crédito y los ingenieros de Álvarez lo modificaron de tamaño para largas distancias, inclusive lo volvieron adaptable a su ambiente, es como un camaleón, ¿Quieres que nos acerquemos un poco más a esa rubia? Parece ser una lindura- la cámara hiso zoom en Lucy, enfocando ahora su rostro sudado por el esfuerzo.

-Si le pones un solo dedo encima o le descolocas uno solo de sus cabellos te juro que te convertiré en cenizas imbécil- Natsu había caminado hasta quedar frente al sonriente pelinegro.

-Natsu detente- Pero había sido Macarov quien lo había detenido.

-¿En qué estás pensando anciano? ¡Nos han estado vigilando todo este tiempo! ¡Dios sabe desde cuando!- gritó el Dragneel con furia en su mirada mientras el fuego de sus puños se extinguía.

-Si haces alguna estupidez ellos los dañaran, y no permitiré que nadie salga lastimado así que mejor contrólate por el amor a Mavis-

La voz de la razón había hablado, sintiéndose inconforme e imponente el pelirosa se alejó rechinando los dientes con un gruñido.

-Más te vale que te alejes de ella-

-Adelante, ya es tiempo que conozcan a su anfitrión- haciendo caso omiso a sus palabras Mard Geer abrió la enorme puerta con ambas manos invitándolos a pasar, tanto el maestro como Natsu se miraron con desconfianza pero dieron un paso al frente y caminaron hacia la densa oscuridad que los esperaba ahí dentro, era como entrar a la cueva del lobo.

Birds flying high you know how i feel

sun in the sky you know how i feel

reeds drifting on by you know how i feel

it's a new dawn it's a new day it's a new life for me

Ambos escucharon la letra de una canción y la grave voz de un hombre cantarla, sonaba increíblemente fuerte a pesar de no verse por ningún lugar.

And i'm feeling good

fish in the sea you know how i feel

river running free you know how i feel

blossom in the tree you know how i feel

it's a new dawn it's a new day it's a new life for me

La luces se encendieron cuando Natsu logró captar una esencia en el aire, olía a almizcle con café, mucho café en realidad.

And i'm feeling good

Dragonfly out in the sun

you know what i mean, don't you know

butterflies are all having fun

you know what i mean

sleep in peace

Al fin lograba ver que frente a ellos había un enorme escritorio de mármol pulido, detrás de él estaba el gran y extraño cantante, era un hombre joven de piel pálida y cabello oscuro totalmente peinado, tenía la mirada fija en un colgante pequeño.

When the day is done

and this old world is a new world and a bold world for me

Stars when you shine you know how i feel

scent of the pine you know how i feel

Escuchó al maestro contener la respiración mientras abría los ojos con sorpresa, al parecer aquellos hombres se conocían

Yeah freedom is mine

and you know how i feel

it's a new dawn it's a new day it's a new life for me

and i'm feeling good

Ooooh

(freeer than you)

La canción había terminado, Natsu logró apreciar dos cosas en ella, la primera la voz de aquel hombre era lo suficientemente grave para poder cantar tonos tan altos y la segunda, aquel extraño hombre cantaba con diversión a pesar de aquella triste sonrisa.

-Bienvenidos sean mis invitados de honor, Macarov-san, usted ya me conoce, pero déjeme presentarme ante Natsu, ¿Quiere?-

El Dragneel pasó saliva nervioso, ¿Cómo era posible que a pesar de no conocer a aquel individuo su cuerpo comenzara a reaccionar violentamente ante él?

-Mi nombre es Zeref, yo ya te conozco no hay necesidad de que me digas tu nombre, tengo un par de asuntos que tratar con cada uno por separado por lo que si me disculpas hablaré primero con tu maestro, ¿Te importa?- dijo dirigiéndose al abuelo de Laxus.

Este reaccionó de inmediato y tomo asiento en uno de los dos sillones forrados de rojo que estaban frente al pelinegro, Natsu supuso entonces que debía esperar fuera así que salió por la misma puerta por la que entró encontrándose con la misma cantidad de soldados esperando algún movimiento de su parte. Quizá lo mejor sería esperar viendo a otro lado.


-Antes que comencemos respóndeme algo, ¿En realidad eres tú Zeref?- el aludido se rio por el comentario.

-¿Acaso no me reconoces Macarov? Nos vimos hace algunos años y sigo siendo idéntico a mi padre ¿No lo crees así?-

-La última vez que lo vi tenía veinte años y la primera maestra Mavis Vermilion aún vivía, el Zeref que yo conocí debería tener al menos sesenta años si no me equivoco, tú debes ser otra persona-

-Mi hermosa Mavis, gracias por recordármela Macarov, ¿Cuántos años tenía cuando la vi por primera vez? ¿Treinta? ¿Treinta y cinco? Siempre pareció más joven de lo que en realidad era-

-Tenía casi cuarenta cuando el verdadero Zeref la conoció, déjate de juegos ¿Quién eres en realidad?- los ojos color zafiro resplandecieron con cierto brillo divertido ante la confusión y negación del anciano.

-Te lo dije antes, yo soy el único y verdadero Zeref, hijo de Ishgar y Meg Dragneel, sé que aún los recuerdas-

El Dreyar se quedó estático en su asiento, pero ¿Cómo era posible? De estar vivo no se vería así de joven como ese muchacho frente suyo, ese chico parecía tener no más de veinte a lo mucho veinticinco años, era simplemente imposible.

-El hecho de que mi apariencia física sea igual que hace cuarenta años no quiere decir que no sea yo, esto que estas presenciando son los avances de mi investigación, he encontrado una forma de retrasar el envejecimiento, te daría una prueba pero estoy seguro que a tu edad no te verías de menos de sesenta, ¿Aun así la querrías?- comentó burlón.

-¿Para eso fueron todos tus estúpidos experimentos?-

-Yo no les llamaría estúpidos, de hecho si no mal recuerdo esos cinco chicos son muy especiales hoy en día, yo cree a los Dragon Slayer´s y pienso que deberías estar muy agradecido conmigo por ello-

-¿Agradecido?- el viejo levantó de su asiento y golpeo el escritorio con ambas palmas fuertemente.

-¡Esos chicos vivieron un infierno durante toda su infancia luego de tus malditos experimentos! ¡Natsu vivió bajo la sombra de constantes burlas y abusos físicos en su contra por ser llamado "monstruo" cuando el único monstruo aquí fue el desgraciado que lo uso como rata de laboratorio! ¡Gajeel fue trasformado en un demonio por ese bastardo de José antes de encontrar a su verdadera familia! ¡Sting y Rogue vivieron en las calles antes de que Saberthoot los encontrara y diera cobijo! Y mi pequeña Wendy…. No sabíamos que habías realizado esas malditas pruebas en alguien tan pequeño… ¿Cómo pudiste? Recién era una bebé, si no fuera por Jellal jamás hubiésemos sabido de su existencia -

Un silencio perturbador se adueñó de la sala antes de ser cortada por el mismo anfitrión.

-Yo no hablaría de esa manera si fuera tú, gracias a mi ellos son más hábiles, fuertes e inteligentes que un ser humano normal, yo diría que tengo cierto derecho sobre ellos, y con respecto a su crecimiento, si yo hubiese estado ahí para ellos eso no habría pasado-

-Oh por favor Zeref, ¿Tengo que recordarte lo que paso en tu maldito laboratorio "La torre del cielo"? Solo hubo diez sobrevivientes, entre ellos mi hija Erza, tu abandonaste a tus científicos para que hicieran lo que quisieran con todos esos pobres niños y el tiro te salió por la culata, ellos mismos se encargaron de destrozar tus adorados experimentos-

-Quizá tengas razón en eso, la torre del cielo fue un error que no pienso volver a cometer, Eileen está furiosa conmigo por ello y no me gusta que mi mejor cirujana este de mal humor, aunque los resultados fueron bastante interesantes, me gustaría trabajar con esa hija tuya, aunque seguramente el resto de las dosis de medicamento ya debió de haber desaparecido de su cuerpo después de diecisiete años, una verdadera lástima-

-No he venido a restregarte ni aplaudirte tus pecados, dime qué demonios quieres de Fairy Tail y veremos la forma de negociarlo, pero no volverás a acercarte a mis hijos que eso quede claro-

Zeref se quedó en silencio después de eso, la seriedad en su rostro le dificultaba a Macarov el poder leerlo, recordó con lástima al prodigioso joven de dieciocho años que anhelaba ser un gran médico experto en biotecnología, sus talentos e inteligencia lo llevaron a un gran viaje alrededor del mundo para sus estudios gracias a las becas que había conseguido, a pesar de su corta edad ya se había graduado de medicina en Harvard y había comenzado sus estudios en biotecnologías en la universidad de Magnolia, fue ahí donde la conoció.

Mavis Vermilion se había dedicado a dar clases de idiomas en la universidad una vez se jubiló como maestra de su amado bar Fairy Tail a sus 38 años, fue ahí donde se conocieron y su trágica historia de amor dio comienzo, ese pequeño gran genio se había inscrito para tomar clases particulares de griego antiguo con la famosa rubia, amor a primera vista muchos dijeron.

Los años pasaron y su romance fue creciendo con ellos, pero entonces llegaron ambos a una edad en la que ya no podían ocultarlo, para protegerlo Mavis había decidido terminar con él para dejarlo vivir su vida y un próspero futuro lleno de felicidad, pero contra todo pronóstico el chico cayó en un profundo mar de soledad y desesperación. Durante mucho tiempo dejo de saber sobre él, cuando se convirtió en tercer maestro de Fairy Tail el chico desapareció de la faz de la tierra, para muchos había sido como si jamás hubiera existido, luego la tragedia los asalto, dos años después de eso Mavis Vermilion falleció.

Muchas cosas pasaron desde que conoció a Zeref, pero jamás se imaginó que tuviera una mente tan perversa como para haber estado realizando experimentos ilegales con niños para "mejorar "a la raza humana, jamás nadie logró comprobar nada debido a que estaba bien encubierto por decenas de abogados que lo defendieron y negaron todas las demandas, fue así como después de su pelea contra Oracion Seis y de haber encontrado a la pequeña Wendy dio por finalizado ese tema, que equivocado había estado.

-Tengo dos objetivos en mente Macarov, para conseguirlos necesito dos cosas de ustedes, una de ellas es Fairy Heart, o Lumen Historie como gustes llamarlo, es un programa muy interesante y por más que mis mejores ingenieros y hackers han intentado copiarlo no lo han logrado, con eso compruebo una vez más las habilidades e inteligencia de mi amada Mavis y la segunda cosa que necesito para lograr mis objetivos es a la señorita Lucy Heartphilia- la risa del anciano no se hiso esperar.

-Me temo que tus demandas no están a mi disposición-

-Debo suponer entonces que no me darás nada de lo que te estoy pidiendo- Zeref llevo sus manos al rostro en posición de triángulo acercándose un poco a su invitado sobre el escritorio.

-Sabes que para mí es imposible, Lucy ya se ha convertido en una más de mis hijas, mi familia, y daría la vida por todos y cada uno de ellos, no pienso entregártela para tus siniestros propósitos, sin embargo hay algo que puedo hacer con respecto a Lumen Histoire y es proporcionarte información de la persona a quien buscas, dime el nombre y yo haré el resto por ti-

-Eres bueno en las negociaciones Macarov pero no puedo hacerlo, soy sumamente celoso en cuanto a mi trabajo, por lo que si no puedo obtener ninguna de mis peticiones tendré que tomarlas por la fuerza- sus rojizos ojos se estrecharon sin perder de vista la mirada del Dreyar.

-Supongo que no hay nada que hacer entonces-

-En efecto….. esto es guerra-


Del otro lado de la puerta el joven Dragneel ya se estaba impacientando, había tratado de escuchar la conversación que estaban teniendo ese individuo con el viejo pero le resultaba imposible a pesar de sus habilidades, la pared debía ser a prueba de sonido, esa era la única explicación.

Después de unos minutos más al fin Natsu escucho la puerta abrirse para dar paso al maestro, este se encontraba integro físicamente pero su mirada de derrota le indicaba que algo malo había pasado ahí dentro.

-Puedes pasar Natsu, también tengo cosas que atender contigo- la siniestra voz que salió desde las sombras hiso que pasara saliva, con una última mirada se despidió del anciano con la promesa en sus ojos de regresar sano y a salvo, tal como lo había hecho a Lucy hace un par de horas.

Cuando llego al mismo escritorio donde había estado antes no se molestó en tomar asiento tal y como lo había hecho el maestro si no que se quedó parado y de brazos cruzados aun con los guantes enfundados.

- Así que tú eres Zeref, no me imagine que el líder de Álvarez tuviera conejillos de indias para retarnos a una batalla musical-

La mirada que le dirigió fue demasiado nostálgica, como si ya lo conociera de antes.

-Esa vez que pelearon contra Tártaros trataba de probar varios puntos, entre ellos la fuerza de los Dragon Slayer´s, debo decir que resulto interesante-

Una vena se hincho en la frente del pelirosa con enojo.

-Gray perdió a su padre esa noche, Erza fue torturada y media docena de gente inocente murió dentro de ese edificio, no sé a qué le encuentras lo "interesante"- comentó furibundo el muchacho.

-También fue la última vez que viste a Igneel, ¿Me equivoco?- ante eso el pelirrosa abrió los ojos sorprendido.

-¿Cómo lo….-

-El muy idiota quiso evitar que encontrara mi libro de E.N.D., fue un muy valioso e inteligente científico pero tuve que deshacerme de él, ya me había causado muchos problemas- lo interrumpió el pelinegro.

-¿Científico? ¿De que estas hablando? ¿Cómo que deshacerte?-

-¿No te lo dijo?, él fue mi trabajador hace algunos años, él fue el encargado de vigilar el desarrollo de mi más grande creación pero por su "buen juicio" decidió que lo mejor sería arrebatármela, el me traiciono y por eso tuvo que pagar-

-Estas diciendo estupideces, Igneel falleció de un infarto luego de la pelea contra Tártaros- debatió el chico.

-¿No te pareció extraño que esa noche no haya estado a tu lado en esa batalla? Fue porque el muy desgraciado se encargó de ocultar mi libro muy bien, pero no tuvo tanta suerte contra Acnologia, ese tipo tiene serios problemas mentales pero me sirvió bien esa noche, cuando le conté que Igneel era quien tenía en sus manos a E.N.D. él fue sin problemas a tu casa y le inyecto un veneno que no puede ser reconocido mediante estudios sanguíneos, su muerte fue lenta y dolorosa en comparación a lo que los médicos señalaron, no fue un infarto rápido y sin dolor….- no pudo seguir hablando ya que el Dragneel había arrematado contra él sobre el escritorio para tumbarlo con todo y silla al suelo y propinarle una serie de puñetazos que no tenían fin, al instante sintió como sus fuerzas iban desapareciendo sin razón aparente, se detuvo por un instante para poder coger aire y levantarse con dificultad del suelo de donde estaba, fue entonces que noto el dardo en su brazo.

-Maldito- escupió mientras se retiraba el dardo rápidamente.

-Sabía que reaccionarías mal por lo que este cuarto está siendo monitoreado por mis hombres, si tu vuelves a hacer algo así ellos te lanzaran otro dardo paralizante pero esta vez la dosis será más fuerte y te desmayaras, te ruego que por favor no me hagas hacerlo Natsu porque aún tengo muchas cosas que explicarte- decía Zeref mientras se levantaba y limpiaba la sangre de su ahora roto labio.

-Quizá no me creas pero esto que te diré a continuación es verdad, mi nombre completo es Zeref Dragneel, yo soy tu hermano mayor-

Entonces ahora sí que el dardo había surtido efecto, el pelirrosa se había quedado estático y aturdido en su lugar sin siquiera respirar, ¿Había escuchado bien o eran las drogas recién inyectadas a su cuerpo?

-Tu reacción no es muy buena, déjame contarte una historia para que me creas- el pelinegro se había quitado el dije que llevaba puesto alrededor de su garganta y lo abrió para poder mostrar una fotografía lo bastante clara de un bebé de cabello rosado siendo cargado por el mismo Zeref.

-Fue hace exactamente 21 años, tu edad, yo tenía 39, estaba viviendo una vida maravillosa, tenía todo lo que quería, una carrera, una mujer que amaba, un hogar donde vivir, un excelente trabajo en un laboratorio de biotecnología, todo lo que siempre había deseado cuando escape de mi casa… entonces apareció ella…. Nuestra madre- al parecer Natsu había entrado a una especie de limbo en donde todo lo que podía escuchar era la voz de Zeref y todo lo que podía ver era esa gargantilla con una fotografía de él mismo, pues claro ¿Cuántos chicos de pelo rosado conocía? Inclusive tenía esa cicatriz en su garganta, ahora sabía que en realidad no se la había hecho en algún extraño accidente que no recordaba, era una marca de nacimiento.

-Ella había llegado a mí con un pequeño problema, estaba embarazada de ti Natsu, pero como tú no estás enterado de la romántica historia de amor de nuestros padres no te imaginaras el problema que aquello radicaba para ella, te la contaré brevemente también para que entiendas, mi padre embarazo a mi madre a los 16 años de mí, su peor error ya que al ser mayor él huyó de toda responsabilidad y nos abandonó a ambos, decidí hacer lo mismo una vez tuve capacidad para sobrevivir, tenía diez años cuando escape de mi casa y comencé mis estudios, resulte ser un verdadero genio, escribí artículos y libros acerca de mis investigaciones, llegue a ser tan famoso que nuestra madre me encontró veintinueve años después, para ese entonces ella tenía 55, llegó a mí con un muy grave problema, había quedado embarazada de otro hombre y no quería cometer el mismo error que conmigo, yo pensé que se refería a que te cuidaría y amaría como una madre hace con su hijo, pero nuevamente estaba equivocado, ella quería abortarte-

A cada palabra el chico sentía que le faltaba más aire.

-Me pidió ayuda ya que no tenía dinero para ir a una clínica segura, así que decidió valerme de mi título como médico cirujano y que le practicara yo mismo la cirugía, como podrás adivinar no lo hice- ¿El un error? ¿Hermano de ese monstruo?

-Cuando te saque eras un pequeño feto de apenas cuatro meses de vida, obviamente a esa edad no estás bien desarrollado y hubieses muerto en cuanto te sacara del saco amniótico, así que opte por salvarte y dejar morir a la que se decía llamar "madre", el proceso fue complicado pero una vez que el cuerpo sin vida de aquella mujer dejo de funcionar tuve que remplazar el saco por una incubadora en la que estaba trabajando en mi laboratorio para recrear células madre a partir de una muestra de ADN, era un prototipo pero sirvió para mantenerte con vida e ir desarrollando un nuevo cunero que reforzaría y desarrollaría al máximo esplendor todos tus órganos vitales, fueron meses de duro trabajo, tuve que experimentar antes con otros bebés abandonados, así fue como nacieron ustedes los Dragon Slayer´s-

-¿Estás diciéndome…. Que los Dragon Slayer´s fueron experimentos para hacerme más fuerte?-

-Así es, pero el mejor de todos has sido tu mi querido hermano menor, tienes la fuerza, velocidad, sentidos desarrollados e inteligencia y razonamiento mejor que todos ellos, aunque aún no has explotado esas capacidades, ya lo haremos cuando logre encontrar mi libro que Igneel me robó-

-¿Y piensas acaso que estoy de acuerdo con eso?, ¿Qué sucedió con Igneel? ¿Cómo terminé con él?- el chico parecía estar recobrando el habla y color en su rostro, muchos cabos sueltos de su vida estaban siendo atados.

-A pesar de haber salvado tu vida tu seguías muy débil como para salir de mi incubadora, a partir de ahí fue que comencé con diferentes investigaciones en humanos para encontrar una forma de hacerte más fuerte, Igneel era el científico encargado de vigilarte y aplicarte suero para mantener tus signos vitales en buen estado, él era un cirujano experto en pedagogía después de todo, pero algo ocurrió luego que encontrara la forma de hacerte un ser perfecto y completo, él te saco una vez descubrió mi secreto, todas mis investigaciones eran clandestinas e ilegales, por lógica no cualquiera me daría a un niño para experimentar con el así que recurrí a la forma más fácil de conseguir a mis ratas de laboratorio, claro que cuando uno se da cuenta que estaba trabajando en esas condiciones lo más lógico sería que huyera, pero jamás me imagine que lo haría contigo y mi libro en manos-

-Eres un desgraciado, fue entonces que él me crio y vio crecer, tu tomaste a mis amigos y los usaste como animales-

-Todo fue por un bien mayor, yo salve tu vida e hice de ellos unos humanos con habilidades súper desarrolladas, ahora son Dragon Slayer´s, no son humanos ordinarios-

-También hiciste experimentos contigo mismo ¿No es así? Ya que mis cálculos no concuerdan, debes ser un anciano-

-En efecto y como le comentaba a Macarov tengo 60 años, gracias a las células madre que pude extraer de tu cordón umbilical con mis fórmulas para tu crecimiento y desarrollo, encontré una forma de atrasar la vejez en seres humanos, claro esto es un secreto de mi compañía, esto que vez no es eterno Natsu, además tengo que seguir cierto tratamiento para seguir siendo un joven de veintitantos años-

-Definitivamente eres un maldito enfermo, todos estos años al único padre que he conocido realmente es a Igneel, a pesar de haberme ocultado todo esto sé que él me amo con todas sus fuerzas como a un verdadero hijo, ¿Y mi familia? Mi única y verdadera familia siempre ha sido y será Fairy Tail, ellos son los únicos hermanos y hermanas que necesito, si ya acabaste con tu bonito cuento de hadas déjame decirte una cosa-

La furia lo hacía sentir vivo y despierto nuevamente, ya no sentía debilidad en el cuerpo y ahora podía enfocar mejor a su enemigo parándose frente a él.

-Te has metido con Fairy Tail, y te aseguro que ese habrá sido el peor error de toda tu maldita vida, nos has declarado la guerra y créeme que no saldrás victorioso, al hacernos tus enemigos nos has declarado la guerra-

Zafiro y Jade se cruzaron, ambos viendo la determinación en los ojos del otro, Zeref reaccionó con una sonrisa mientras Natsu mantenía su seria posición.

-Está bien hermanito, ya lo había aclarado yo también con tu maestro, te diré algo, dejemos esta pelea para después de las fiestas de año nuevo, considéralo como mi regalo de navidad, ve y disfruta de tu familia, disfrútalos ahora que puedes y mándale mis saludos a Lucy, dile de mi parte que pronto la veré-

-Donde le pongas una mano encima y juro que te golpearé hasta que parezcas una maldita pasa quemada- lo agarró con fuerza y furia de la solapa para acercarlo a su rostro.

-Cuidado Natsu, nos están vigilando- sonrió con sorna el pelinegro, Natsu lo soltó empujándolo lejos de él con fuerza. –Pueden regresar a su amado bar, mis hombres los llevarán, pero recuerda, una vez terminadas las celebraciones Álvarez y Fairy Tail estarán en guerra, prepárense porque esta vez, iré por lo que busco, y cumpliré mis objetivos-

El Dragneel menor le dio la vuelta con los dientes y puños apretados tratando de contener el enojo que sentía en ese mismo instante.

-Oh, otra cosa más antes de que te vayas querido hermano, aun no te he revelado la verdadera identidad acerca de E.N.D. pero creo que eso es charla para otro momento, protege a Lucy lo mejor que puedas, porque iré a por ella, y siempre obtengo lo que quiero-

El pelirrosa azotó con fuerza la puerta de caoba detrás de sí para dar por finalizada esa discusión, no quería saber nada, no quería escuchar nada, muchos secretos le habían sido revelados ese día, la pregunta era ¿Cómo enfrentaría ahora los rostros de todos en Fairy Tail al saber qué él había sido la causa del sufrimiento de muchos?

CONTINUARÁ…


Notas de la autora: Hola queridos lectores, quiero dar una triste noticia, mis vacaciones han terminado, por lo tanto mis actualizaciones (si de por si son lentas) ahora lo serán más, no deben angustiarse ya que si algo no haré será abandonar el fic así que espero seguir contando con sus reviews que me dan tantos ánimos para continuar. Bueno para finalizar a continuación les dejo el nombre de la canción del día de hoy:

Michael Bublé - Feeling Good

Muchas gracias a todos y espero seguir contando con sus lecturas y reviews. Os veo a la próxima.