Este fic participa en el Fictober 2020 del grupo "Yo también estoy esperando otro capitulo de Muérdagos y Mortifagos"
Día 11: Vino
Descargo de responsabilidad: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen. El universo es propiedad de JK Rowling.
Viktor Pov
El salón de baile estaba abarrotado de personas, la banda tocaba una melodía suave para los amantes de los bailes lentos, todos lucían de los más prolijos, pero ella, ella se veía hermosa, su cabello rebelde estaba perfectamente acomodado y todos le pedían bailar con ella. Me mezclé entre las personas, inicié pláticas con temas de lo más aburridos pero que a las demás personas les parecían importantes, clima, política, guerra, este tema en especial me provocaba asco pero a las demás personas les parecía que aún se podía ahondar en ello; el tema de una guerra que terminó. Odiaba hablar de ello pero sabía que era una forma de llegar al punto que me interesaba: el trio dorado. No es que me interesaran las otras dos personas que lo conformaban, pero así podía obtener información sobre ella.
- ¿No le parece increíble señor Krum? – Ni idea de quien sea la persona con la que hablo.
Viktor: Por supuesto, 5 años se van muy rápido. Es importante avanzar y no quedarse estancados en una guerra que trajo sufrimiento.
- Todo se los debemos a Harry Potter y sus amigos.
Por fin el tema que me interesa. – Sin duda, fueron muy valientes a pesar de su corta edad y es aún más increíble que estemos presenciando la boda del primero de ellos.
- Oh sí, esos chicos merecen toda la felicidad del mundo. El joven Weasley se está casando con su novia de la escuela, es un lástima que no haya funcionado su relación con la señorita Granger, hubieran sido uno de los matrimonios más famosos del mundo mágico.
Viktor: ¿Sabe usted por qué no funcionó?
- Al parecer el joven Weasley era muy celoso de ella, la señorita Granger es muy hermosa y se sabe que constantemente recibe propuestas de matrimonio de personas muy importantes, el heredero Malfoy es uno de los tantos que le ha propuesto matrimonio a la joven, creo que fue esté mismo joven el que hizo que la relación terminara de fracturarse.
Viktor: ¿Malfoy importante? Creí que en su juicio se les había dejado sin nada.
- Y así es, la familia Malfoy se quedó sin nada, pero el joven Malfoy tenía su propia fortuna, herencia de sus abuelos Black y Malfoy, esas no le fueron confiscadas y el joven resulto de lo más talentoso para los negocios, con su primera fortuna recupero la Mansión Malfoy y el Wisengamot lo nombró el cabeza de la familia.
Viktor: Interesante. ¿Y sigue buscando matrimonio con la joven?
- ¡Pero por supuesto! Se lo ha propuesto hasta con anuncios en el periódico. He de decir que el diario el profeta jamás había vendido tantas copias como en esa ocasión.
Viktor: ¿Y qué hay de ella? ¿Está interesada en alguien? – Mi mandíbula se puso tensa.
- Hay rumores de que está interesada en el señor Potter, pero nunca ha sido confirmado. Pero con quien se le ha visto es con el joven Nott, lo han intentado entrevistar en infinidad de veces pero es sumamente reservado.
Es demasiada competencia, pero el trofeo más valorado es aquel en que el juego es más difícil. Sonrió sin disimulo y el señor con quien platico también sonríe.
- Tendrás mucha competencia. – ¿Acaso lo notó? – Pero confió en que sabrás mover bien tus cartas. No le hablaré a nadie sobre esta platica pero te recomiendo que dejes de perder el tiempo conmigo y vayas con ella y la invites a bailar, no sea que alguien se te adelante.
Viktor: Muchas gracias y disculpe. – Le dedico una reverencia y me dirijo hacia donde ella se encuentra.
En el camino, recibo varias invitaciones de baile, ninguna me interesa, no es que no sean bonitas, es simplemente que no tiene ese algo que me llame la atención, no me interesa ser la presa, quiero ser el cazador, no quiero ser yo el trofeo.
- Hola Hermione. – La tome distraída y la veo sonreír. – Estas muy hermosa.
Hermione: ¡Viktor! – Se pará y se tira sobre mí en un abrazo, no esperaba eso de ella, huele divino, fresas y chocolate. – Me alegra verte, no había sabido nada de ti desde hace años. Dejaste de escribirme. - ¿Es eso un reproche?
Viktor: Lo siento, pero en la última carta, me dijiste que te cambiabas de casa pero no me diste tu dirección, asumí que no querías saber más de mí.
Hermione: ¿Qué? Pero… Que tonta fui, creí que la había anotado, de verdad discúlpame.
Viktor: Te perdonaré si bailas conmigo y me cuentas que ha sido de tu vida. – Extiendo mi mano y ella la toma mientras me dedica una sonrisa que acelera mi corazón.
Hermione: De acuerdo. – Caminamos a la pista, todos nos miran pero a ella parece no importarle. – Bien, trabajo en el ministerio, estoy en el área de leyes, más específicamente, regulación de leyes mágicas. Ya tengo 2 años ahí.
Viktor: Queda perfecto con tu personalidad.
Hermione: Eso dicen mis amigos, creen que es la combinación perfecta entre grandes archivos, libros y mi pasión por defender a los indefensos.
Viktor: Tienen razón. – Ella se ríe y no deja de bailar. - ¿Qué hay de tu vida personal?
Su ojos parecen sorprendidos. – No hay mucho en ella, vivo en un barrio muggle, Crookshanks es mi compañero de casa, a veces salgo con mis amigos, pero no es tan a menudo como solía ser. Harry suele llevar a sus novias y Ron a su actual esposa, de la que por cierto no soy de su agrado.
Viktor: ¿Aceptarías salir a tomar una copa conmigo?
Hermione: Por supuesto que si Viktor.
Viktor: ¿Podría ser mañana?
Hermione: Claro, pero tendría que ser después del trabajo, espero no te importe.
Viktor: En lo absoluto. ¿Paso por ti al ministerio?
Hermione: No sé si sea buena idea. Siempre está lleno de reporteros y podrían hacer un escándalo. De por si no han dejado de tomarnos fotos en el tiempo que llevamos bailando.
Viktor: ¿Te siguen dando problemas?
Hermione: Demasiados diría yo. ¿Qué tal te mueves en el mundo muggle?
Viktor: No soy un experto pero me agrada el servicio de taxis.
Hermione: Maravilloso. ¿Te parece si nos vemos en un restaurante en el Londres muggle?
Viktor: Me parece bien. ¿Me darás la dirección?
Hermione: Si y también mi dirección actual.
El baile fue maravilloso, era una pena que tuviera que irme, mañana temprano tendría entrenamiento. Me despedí haciendo uso de una vieja táctica, el siempre caballeroso beso en la mano, aún la sonrojaba eso. Camine hacia el punto de aparición y a lo lejos, pude ver al señor con quien hablé, levantaba una copa de vino en señal de despedida o felicitación, solo le sonreí y levante mi brazo a modo de despedida.
Ministerio
Hermione Pov
Entro al vestíbulo del ministerio y siento las miradas brillantes, todos quieren preguntar, todos esos reporteros chupa sangre quieren la primicia. Ninguno tendrá nada de mí. Por fin entro a mi oficina, mi hermoso refugio, agarro el primer archivo cerca de mi mano.
No han dejado de llegar lechuzas, memorándums y flores. Sabía que esto pasaría, en cuanto leí la nota de esa chismosa de Skeeter, sabía que esto pasaría, al parecer ya no me tiene miedo… Me lo tendrá. Solo a Lavander se le ocurre invitar a Rita Skeeter a su boda, mi mayor consuelo es que en estos momentos debe de estar furiosa al no ser su boda el punto de atención en la nota de la columnista.
No quiero ni imaginar lo que corazón de bruja tiene que decir sobre mi baile con Viktor. Mi mejor refugio serán esos inmensos archivos, me ocuparé hasta el cansancio, saldré temprano y me arreglaré para salir a cenar con él.
Dos horas dura mi calma, de repente escucho ruido afuera de mi puerta, mi secretaria suele ser muy silenciosa, jamás alza la voz a menos que sea por culpa de…
- ¡¿Qué diablos hacías bailando con el descerebrado de Krum?!
Hermione: Buenos días Malfoy, te agradecería dejaras de atormentar a mi secretaría. – Ella sigue en la puerta. – No te preocupes Angela, puedes retirarte, ya en mi oficina es mi problema.
Draco: ¿No me ofrecerás un café?
Hermione: Da gracias que no te corro. – Escucho que la puerta se cierra. – Bien. Termina con tus innecesarios reclamos y vete, tengo trabajo que hacer.
Draco: No vengo a reclamar, quiero saber que hacia él ahí y porqué bailaste con él. Es simple y eso no es ninguna clase de reclamo.
Lo miro, sin duda los años le sentaron bien y él lo sabe, sigue siendo un egoísta malcriado pero uno muy listo, respeto la inteligencia, me tomo mi tiempo para responder porque sé que eso lo enoja y si arruinó mi mañana, arruinaré la suya.
Draco: ¿Tienes pensado responder hoy?
Hermione: Lavander lo invitó a su boda, aun en contra de las negativas de Ron.
Draco: Sigue siendo una estúpida.
Hermione: Quería que su boda fuera un desfile de personas "importantes". – Hago manos de Jazz en lo que termino la oración.
Draco: Es curioso que quisiera eso y no me haya llegado una invitación.
Hermione: Pues veras… Ron y Lavander llegaron a un acuerdo. O invitaban a Viktor o te invitaban a ti y al parecer, Ron tiene menos animadversión hacía Viktor que hacia ti.
Draco: O sea que Krum ocupó el que debió ser mi lugar en la pista de baile a tu lado.
Nunca deja de sorprenderme, en el mal sentido. - ¿Escuchaste algo de lo que te dije?
Draco: Lo necesario. De no ser por Krum, yo hubiera bailado a tu lado en esa horrible boda.
Hermione: Es imposible hablar contigo. Es más, ni siquiera recuerdo cuando empecé a hablar contigo.
Draco: ¿Quién atrapó el ramo?
Hermione: ¿Y eso que te interesa?
Draco: Porque si fuiste tú, debó ir a casa de tus padres para decidir la fecha de nuestra boda.
Hermione: ¿Nuestra boda? ¿Y porque crees que me casaría contigo? Llevó año y medio diciéndote que no me interesas Malfoy.
Draco: Pues deberías empezar a decir que sí. Todas esas negativas solo hacen que me interese más. Tu vida sería mucho más sencilla si volvieras a ser como en aquel día.
Mi mandíbula se tensó y solo pude hablar entre dientes. – No menciones aquel día, ni siquiera recuerdo mucho sobre aquel día.
Draco: Me rompes el corazón Granger. ¿Sabes que si me presento ante el área de matrimonios y compromisos mágicos y muestro ese recuerdo, harán valido nuestro compromiso y exigirán una fecha de matrimonio? – Detesto esas sonrisas triunfantes que pone cuando cree que saco un argumento demoledor.
Hermione: No te atreverías.
Draco: Ese es el detalle Granger. Si me atrevo. Pero te daré más tiempo. No quiero que la futura señora Malfoy odie su posición como dueña y ama de tan envidiado título.
Hermione: Escúchame bien Malfoy. No quiero ser tu esposa, jamás seré tu esposa y puedes meterte tu título y posición por donde no te da el sol.
Draco: Ese no es el tipo de palabras que debe usar un dama y menos una como tú. En fin, debo retirarme, tengo negocios que atender. – De su capa sacó una botella de vino y la puso sobre mi escritorio. – Quédatela, la traía para celebrar en caso de que hoy fuera el día en que aceptaras ser mi esposa. Nos vemos la semana que viene preciosa. – Guiña un ojo y sale de mi oficina.
Angela entra a la oficina en cuanto ve salir a Malfoy. - Señorita Granger. ¿Qué hago con la botella de vino?
Hermione: Lo mismo que haces con todas Angela, dispón de ella como quieras, no me importa.
