Capítulo III: Heridas de Confusión
Fluttershy se encontraba bajando unas escaleras, donde las paredes era tierra pura, mientras caminaba se le metían varias dudas sobre como podría cruzar los círculos que había mencionado el Angel Guardián. Después de un par de minutos llegó a una puerta, dio un suspiro y la pegaso procedió a abrir la puerta y entrar. Lo que había al otro lado, era un lugar completamente diferente al que había estado antes, era un lugar donde hacía mucho frío, cosa que no evitó que ella se cubriera con sus alas, y viendo, parecía ser una especie de atmósfera azul, y en un puente, del que estaba la puerta, decidió caminar todo derecho.
El frío hacia que Fluttershy sintiera demasiado miedo al no saber como salir de ese lugar, suponía que debía encontrar otra puerta al otro lado que lo llevaría al siguiente círculo. La pegaso caminaba helada, pero se quedó petrificada al ver unas almas como las que había visto en el limbo, pero estas estaban hablando, y muy pegadas, a lo lejos mientras caminaba veía a algunas haciendo acto simplemente inexplicables, ella no entendía mucho, hasta que el frío empezó a aumentar.
Fluttershy empezaría a acelerar el paso para calentar su cuerpo, pero empezaba a ser inútil ya que el frío, y esa sensación empezaría a empeorar cuando, notó de su espalda que llegaba un viento frío y hasta molesto, y cuando ella volteó se quedó petrificada, ya que vio una especie de tornado que iba tomando a algunas almas de su alrededor, y las iba haciendo dar vueltas y vueltas, hasta el punto en que varias empezaron a salir volando. La pegaso al ver que el tornado empezaría a acercarse, empezó a correr, pero al ver que se acercaba más rápido empezaría a volar y a salirse de la trayectoria del tornado, prácticamente saliendo del puente en el que iba, sin embargo el tornado finalmente la tragó.
Fluttershy estaba en descontrol en el interior del torbellino, con varias almas también, algunas iban chocando con ella mientras iban suspendidos en el aire. Fluttershy estaba aterrada y no sabía que hacer para salir de esa situación, solo estaba esperando a que el tornado la arrojará, eso hasta que recordó lo que una vez hizo con muchos pegaso, entre ellos su amiga Rainbow Dash, crear un torbellino para transportar agua en Ponyville, y ella también su esfuerzo.
Al recordar ese suceso, la pegaso trató de ponerse en posición de vuelo, y empezaría a agitar sus alas, siguiendo el viento que producía el tornado, le costaba mucho trabajo ya que era más fuerte el viento que el que producían los demás pegados en aquella ocasión, hasta el punto en que atrás de ella, choca de manera muy fuerte un alma que iba en el interior del tornado. La pegaso estaba pensando en cómo salir de eso, hasta que volvió a intentarlo una segunda vez, lentamente empezó a agitar sus alas, está vez, más libres que nunca, por lo que siguió ese ritmo sin parar, hasta que al fin, logró seguí perfectamente el viento del tornado.
Tras varios segundos volando en el interior del tornado, ella con los ojos llorosos esquivaba las almas que estaban en el aire, y al final el tornado arrojaría a Fluttershy a gran velocidad, sin embargo gracias a que ella estaba volando, no se entorpeció cuando pasó eso, por lo que ella se encontraba volando a gran velocidad a través del lugar, y tras un par de segundos de vuelo, divisó algo que le llamó la atención, una puerta, y en un lugar distinto, había llegado, al final del círculo.
La pegaso se acercaría al lugar, sin embargo olvidó la gran velocidad con la que iba volando, por lo que su aterrizaje fue bastante doloroso, ya que ella cayó y se dio una fuerte raspada. Tras parar de su aterrizaje, se pondría de pie, con el cuerpo ardiéndole, ya que se raspó en en parte de su lomo y en un casco delantero. Ella se acercaría con un poco de dolor a la puerta, y acto seguido la abrió para entrar,
Después de entrar, ella empezó a respirar agitadamente, sin embargo el ardor de su cuerpo aumento demasiado pero al ver sus raspaduras, vio que estas se empezarían a cerrar, y su dolor poco a poco empezó a desaparecer. Después de esto, la pegaso se encontraba confundida con respecto a lo que le ocurrió, y se empezó a preguntar sobre si cada que salía de un circulo se curaba de alguna herida.
La pegaso después de salir de sus pensamientos, empezó a bajar por las escaleras, que para nada eran diferentes a las que anteriormente había bajado, llegó a la siguiente puerta, y antes de abrirla se puso a pensar, sobre que habría en su siguiente parada, hasta que recordó lo que dijo el ángel guardián, si moría en algún círculo, ella se quedaría ahí para siempre, y al ver las heridas que se había provocado al recién salir de su última cruzada, se le metería un gran escalofrío, que lo pondría a pensar sobre su existencia.
Tras un par de segundos de estar pensando, ella abriría la siguiente puerta y entraría al lugar. Al llegar, le empezaría a caer agua, era un aguacero, sin embargo eso no la detendría al igual que su frío inmenso del círculo anterior, hasta que sintió que algo la golpeó en el lomo, al ver con un poco de dolor, notó que era una bola de hielo, y en eso la golpearía otra bola, estaba granizado. Por lo que Fluttershy empezaría a correr, pero al resbalarse, no tuvo de otra más que caminar, pero a una velocidad considerable, volar no era una opción por el mismo aguacero.
Después de un par de minutos caminando, escuchó unas especies de ladridos, que hacían eco en el lugar, la pegaso le aterró el sonido, pero decidiría seguir adelante, sin embargo no tardó en ver como habían varias almas corriendo, varias de ellas se iban resbalando, la pegaso ahora se empezaba a aterrar, más por el hecho de que escuchó otro gran ladrido a un lado, cosa que hizo que empezará a correr, pero ella se resbalaba mucho, y el granizo no ayudaba mucho. Después de una resbalado que dio, y al chocar con un alma, esta empezaría a gritarle —¡Corre, se está acercando!— y después empezaría a correr la pegaso estaba más que asustada a ese punto y empezaría a correr siguiendo el trayecto para encontrar lo más antes posible la puerta siguiente.
Después de un segundo se resbalaría nuevamente, y al ponerse de pie y al ver a un lado suyo, vio algo que la dejó en shock, era realmente enorme, era una perro de 3 cabezas, era un Cerbero, y está tenía en su hocico varias almas mientras se las comía, la pegaso estaba realmente aterrada con lo que tenía frente a ella, y el Cerbero la voltearia a ver, y estos expresaban una gran ira, la pegaso se le acercaría para tratar de tranquilizarlo con sus habilidades que usa con los animales, sin embargo, esta se ve interrumpida con uno ladridos realmente fuertes, la pegaso pegaría un enorme grito de miedo, y empezaría a correr y el Cerbero empezaría a seguirla, algunas de las tres cabezas en más de una ocasión intentaban agarrarla con su hocico, pero la pegaso o los lograba esquivar, o se resbalaba haciendo que se salvará.
Tras unos segundos, ella se tropezaría con algo, y era una grita en el piso, y al ver rápido, vería que era una cueva, pero el Cerbero pisandole los talones, no lo pensó y entró. Al entrar llegó a una zona segura no sólo del Cerbero, sino también de la lluvia y el granizo. Mientras veía que el Cerbero trataba de meter sus cabezas para alcanzarla, pero al no lograrlo, se iría del lugar buscando más almas. Tras esto Fluttershy se sentaría en el piso de la cueva, con su melena mojada, maltratada, y varios raspones y moretones causados por las resbaladas que se dio mientras corría.
Saldría de sus pensamientos al escuchar una voz atrás de ella —Tu no estas muerta— la pegaso voltearía y vería un alma —Si, yo al igual que tu, me refugio de este castigo, el Cerbero es lo peor— Fluttershy confundida le preguntó —¿Qué castigo?— el alma al escucharla le respondió —Fuimos glotones, nunca compartíamos comida con nadie, y solo comíamos porque se nos daba la gana, al final una diabetes incontrolable me mató— Fluttershy se impactó y le dijo —Yo, lo lamento— el alma le dijo —No hay problema, es nuestro castigo estar aquí—.
Después de unos segundos, Fluttershy se sintió más segura para salir de la cueva y seguir su camino —Este Cerbero es muy diferente al que está en el Tártaro— comenta ella, y el alma le dijo —Eso es por el ambiente, el del Tártaro solo resguarda a los prisioneros, este a los pecadores en en el alto infierno— Fluttershy entendería ahora porque no podía tranquilizar al Cerbero de ese lugar, por lo que después de despedirse, saldría de la cueva, y al ver a su alrededor entré la lluvia y el granizo que no estaba el Cerbero, solo procedió en caminar.
Después de varios minutos entre el aguacero, ella se estaba empezando a cansar, eso hasta que escuchó unos ladridos atrás de ella —Oh no, esto no es bueno— se dijo para sí misma Fluttershy, por lo que aceleraría el paso, pero no tardo, en que se apareciera el perro de tres cabezas atrás de ella, por lo que ella solo empezaría a correr, mientras el Cerbero la perseguía, y tras unos minutos de huir, logró divisar una puerta, era su salida.
Ella solo se limitaba en correr y esquivar las cabezas del Cerbero, hasta que logrará llegar a su destino, la pegaso en más de una ocasión se resbalaba, y en una que otra ocasión hace que casi la agarrara el Cerbero, hasta que finalmente llegó, sin pensarlo abrió la puerta, y la cruzó. Sin embargo antes de poder cerrarla, el Cerbero metió una de sus cabezas en la entrada, tratando de alcanzar a Fluttershy, mientras está forcejeaba con intentar cerrar la puerta. Tras unos momentos de lucha, finalmente la pegaso logró cerrar la puerta. Con unos golpes escuchándose atrás de ella.
Cuando cesaron la pegaso solo se sentó en el piso a respirar agitadamente, y sus moretones y raspones empezarían a desaparecer, ahora entendiendo que cada vez que crucé, y cierre una puerta, sus heridas de cierran. Sin pensarlo mucho la pegaso se pondría a descansar ahí mismo, hasta que sé quedó dormida.