Capítulo 4
Reencuentro.
Ed, Al y Noah se bajaron del tren en la estación de Rizembull. Allí estaba Winry, esperándolos. Se acerco hacia ellos, maravillada por los cambios de ambos. Dio unos pasos, cortos pero firmes, hacia los hermanos.
Aún cuesta creerlo.- murmuró Winry, entonces, cambiando su cara de asombro a la de enfado, saco una brillante y hermosa llave inglesa de su bolsa y le asestó un fuerte golpe en la cabeza a Ed gritando ¡Imbécil, y seguidamente propiciándole otro a Al. Ed, sin siquiera poder enfadarse con Winry por la alegría que sentía por volver a verla, sonriendo dijo:
¡Veo que no has cambiado nada!.- Winry se extrañó al ver que no conseguía su enfado, quizás había madurado. Sus cambios físicos no dejaban de causarle una gran impresión, ya no era aquel chaval de baja estatura. Se podía decir que su altura superaba los 1'75. Ya no quedaba resto de la redondez infantil en su rostro, y los ojos se le habían afilado, teniendo así una mirada salvaje. Ahora encontraba esos ojos dorados más interesantes. De su cuerpo no se podía decir demasiado, ya que llevaba gran cantidad de ropa, pero se notaba el considerable cambio de niño a hombre. Dirigió su vista a Al, seguía teniendo la misma redondez infantil, pero en sus ojos, como en los de Ed, se podía apreciar la experiencia. El verde de sus ojos había oscurecido, y su estatura había aumentado, dejándolo a ocho centímetros, más o menos, de la Altura de Ed. El pelo se le había oscurecido un poco y su espalda se había ensanchado. Y por último dirigió la vista hacia una extraña chica, muy guapa, que hacía sentir mal a Winry, ya que le hacía pensar que quizás tenía algo con Ed. Ella no entendía ese sentimiento, llevaba meses intentando descifrarlo.
E-esto…parece que…- Ed no sabía que decir para romper ese desagradable silencio.- ¿vamos a tu casa?
¿mi casa?- preguntó Winry.- ¡nuestra casa!. Y ella es…
Soy Noah, encantada. Ed me ha hablado mucho de ti.- dijo extendiéndole la mano. Winry la aceptó y le sonrió.
Ella estaba con nosotras en el otro mundo, pero vino con nosotros a este.- aclaró Ed.
¿a que se debe?- preguntó Winry.
No la trataban bien, la tenían como una sucia ladrona por ser gitana.- respondió Ed
¿gitana?- preguntó Winry
Si, pero mejor no hablar de ello.- interrumpió Noah.
Ed le contaba a Winry todo lo sucedido en Alemania, y todas las curiosidades de ese mundo, ayudado por Al.
Parece un mundo muy interesante…- comentó Winry.
Sí, lo es. Pero siempre preferiremos este mundo.- aseguró Al.- ¿verdad hermano?- Ed estaba embobado mirando a Winry. Sin darse cuenta de lo que decía Al.- ¿verdad hermano?- repitió.
¿eh?- al darse cuenta del sonrojo de Winry, no pudo evitar tener el mismo efecto.-ah, claro, si, si.- dijo, mirando hacia el cielo.
Llegaron a la casa de Winry, y saludaron a Pinako, pasaron largos ratos delante del fuego, hablando. Ya era tarde, y los hermanos Elric estaban cansados. Cada uno fue a una habitación, incluida Noah, ya que la casa se había ampliado.
Se oían extraños ruidos en la habitación de Ed, procedentes de su estómago. Poca comida era lo que había cenado, ya que le habían puesto la misma cantidad que hace unos años, y eso ya no le llenaba. Bajó a la cocina y cogió un trozo de pan que encontró en la panera. Cuando se dio la vuelta para seguir su camino hacia la habitación, se encontró con Winry.
¿qué haces?.- preguntó Winry
Tenía algo de hambre. ¿y tú, despierta a estas horas?
No podía dormir. Quería asegurarme de que no ibais a desaparecer, esto parece un sueño…
¿un sueño?.
Nunca pensé que regresarías… así que…
¿así qué?
Tengo que decirte una cosa.- tragó saliva.- t-tengo novio.- Ed no podía creer lo que acababa de oír.
G-genial, ¿me lo presentarás?- Sintió un dolor en el pecho, pero intentó disimularlo. En parte se alegraba por ello, ya que Winry era feliz y había encontrado a alguien.
Mañana es su cumpleaños, y estaba previsto celebrarlo con una fiesta nocturna. Iba a invitar a bastantes personas, pero mejor suspenderla ya que estás aquí.
¡ni de broma, además, quiero conocerle. Tiene mucha suerte de tener una mujer tan hermosa como tu a su lado.- Ed no se podía creer lo que acababa de decir y Winry tampoco. A lo largo del tiempo que había estado separada de los hermanos había construido una muralla en su corazón anti- Edward, que estaba empezando a desmoronarse.- B-bueno...¿que tal te va con él?.- preguntó Edward.
Bien, aunque…- Winry puso una de sus manos en su brazo derecho, tratando de ocultar algo. Ed agarró su mano y le subió la manga forzosamente a Winry.- ¿q-que haces?.
¡¡Te maltrata!.- Exclamó furioso Ed.- tienes un moretón en el brazo. -Te aseguro que ese tipejo no lo cuenta…- se veía claramente la ira en sus preciosos ojos dorados.
¡n-no fue él, ¡te lo aseguro!. Ya sabes que trabajando con automails me doy golpes constantemente..- Ed quería creerle, pero le costaba.
¿S-seguro, por favor, Winry no me mientas, somos mejores amigos. ¿no es cierto?- trataba de sacarle algo.
¡Por su puesto!- dijo dudosa, Winry.
La noche pasó rápido. Durmieron hasta las nueve de la mañana y en seguida comenzaron con los preparativos.
