Capitulo 10
26 de Diciembre 12 pm
Santuario de Athena
- Mando llamarme Senor? – Pregunto Camus a Shion hincado en una rodilla en señal de respeto
- Si Camus, levántate. Necesito tu ayuda en una situación muy delicada. – Le dijo Shion – Acompaname.
Llegaron a los aposentos de Shion donde habia 6 botellas plásticas con liquidos de 3 diferentes colores.
- Tu eres un enólogo fabuloso verdad?
- Oui. Puedo reconocer casi cualquier vino o licor en cualquier combinación – dijo Camus extrañado. – tengo un paladar privilegiado.
- Tengo aquí una incognita que me gustaría me ayudaras a resolver. - dijo Shion abriendo una de las botellas y pasándosela a Camus para que hiciera su magia.
Camus lo tomo. A simple vista parecía una limonada.
Le dio un trago y casi enseguida lo escupio con desden.
- Merde! Pero que caraj… perdón señor pero… que le pusieron a eso? Anticongelante? – dijo Camus tratando de limpiarse la lengua con la camisa.
Shion lo miro.
- Entonces… esa bebida esta adulterada verdad? – pregunto
- Pues si lo que querían era que fuera una simple limonada, si.
- Prueba por favor las otras dos.
Camus lo miro con desconfianza y solo dio un pequeño sorbo, teniendo la misma reacción que con la limonada.
- No probaba algo tan asqueroso desde …
- Continua…
- Desde… que asisti a una fiesta preuniversitaria por error señor… - Dijo cuidando sus palabras
- Que es lo que contiene?
- A la combinación se le llama Agua Loca. Realmente para un paladar normal, solo es un simple ponche, bebida saborizada o limonada en este caso. Se le pone la botella de alcohol mas barata que se encuentre y se mezcla. Debido a que en si no se siente el alcohol, las personas pueden beber litros y litros sin sentir ningun efecto, pero cuando se presentan, son desastrosos. Es como si tomara 3 litros de vodka sin reducir.
Shion se puso a ver las botellas.
- Comprendo. Puedes averiguar que licor fue el que adultero estas bebidas?
- Si, pero como hay cientos de posibilidades me va a llevar tiempo y yo tengo que salir de aquí en 5 dias. – dijo Camus
- Hazlo tu prioridad. – ordeno Shion - Si no logras hacerlo en ese tiempo tendre que seguir investigando sin ti.
Camus tomo las seis botellas y asintió.
Se dirigio directo a los calabozos. Se escuchaban muchas voces llorando, gimiendo y vomitando.
Decidio investigar de donde salía todo eso y se dirigio al Calabozo #2.
Seiya estaba durmiendo la mona, roncando a todo lo que daba, Ikki se dolia de la cabeza y se quejaba como anima en pena mientras Hyoga hacia cubos de hielo para ponérsela en los chipotes de la pelea de la noche anterior y se la pasaba hablando de que no recordaba nada, Shyriu vomitaba en un cubo junto a el mientras consolaba a Shun quien lloraba como nina perdida en centro comercial por lo mal que se sentía.
Camus no sabia si llorar o reir, pero tuvo que ponerse en su papel.
- Hyoga!
- Maestro… Que esta haciendo aquí?
- Que estas haciendo TU aquí! Que están haciendo ustedes cinco aquí! Mon Dieu! Que vergüenza Hyoga! Crystal y tu madre se retorcerán en sus tumbas!
Hyoga sin dejar sus cubos de hielo de la cabeza contesto apenado:
- Maestro, le juro que no sabemos que sucedió. Ninguno de los cuatro recuerda nada y Seiya aun no despierta para preguntarle. Estabamos con Saori un momento y de repente amanecimos aqui.
- Tomaron alguna bebida alcohólica?
- No Maestro. Solo ponche y limonada.
- Y porque terminaron en el calabozo?
- No lo sabemos!
- Supongo que nos enteraremos pronto Hyoga…
Camus salio de esa sección y dejo a los pobres chicos con la resaca.
Se dirigio al Calabozo #1
Escucho risas histéricas que salían de ahí y cuando le pregunto al guardia le dijo que ya llevaba un buen rato asi.
- Milo…
Su amigo lo volteo a ver y volvió a reir, pidiéndole con la mano unos segundos para poder controlarse. Camus tamborileo un pie con desesperación.
- Ya?
- Que tienes amigo? Te convirtieron en paletita de limón sin azúcar? Porque esa cara?
- Como carajos lo hiciste?
- Que yo hice que cosa? De que me estas acusando ahora?
- De alterar las bebidas de la fiesta de ayer…
- Que pruebas tienes de que fui yo?
- Eres el único que se atrevería a hacerlo… Ya viste en que estado dejaste a los muchachos?
- Como jijos quieres que sepa como están si no he salido de esta prisión en 6 dias! – dijo Milo en un tono bastante convincente – Preguntale a mi guardia. No he dado un solo paso fuera de este lugar.
Camus miro al guardia. Cierto. Le tenía bastante miedo a sus jefes como para no haber reportado algo asi. Camus suspiro resignado.
- Y de que te estabas riendo tan escandalosamente?
- De uno de los chistes de Kanon.
- Kanon estuvo aquí hoy?
- No, no ha venido por aca. Me estoy riendo un chiste que hasta ahorita entendí.
- Si como no… - dijo Camus algo molesto – Si descubro que fuiste tu quien trato de envenenarlos, ya no solo será Mu el que te rompa la cara.
- Como quieras – dijo Milo recostándose en su catre y dándole la espalda – Pero yo no fui.
Camus tomo las botellas y se fue a su casa para ayudarle a Shion a resolver el misterio.
En el área de amazonas
Marin y Geist tienen una conversación privada en el único lugar donde podían tenerla ya que nadie mas se atrevería a interrumpirlas: La Cabana de Shaina.
Tuvieron que hacer espacio entre cajas, bolsas y canastas de regalos que habia recibido por navidad para poder sentarse en algún lado.
- Y ahora? Que sugieres que hagamos con Junet, Marin? – pregunto Geist
- Por lo que vi, no llegaron tan lejos esos dos. Solo algunos manoseos y…
- Marin! Por menos de eso Shaina la hubiera desterrado!
- Ya lo se, ya lo se… - dijo Marin – Pero ella no esta aquí y no tiene porque saberlo…
- Pero no estábamos solas! Jabu e Ichi tambien la vieron… el patriarca… todos los que estaban ahí! – Casi grito Geist – Que demonios le pasa a esa escuincla!
Marin estaba en una encrucijada. Si no la castigaba, sus alumnas podrían ver la debilidad en su grupo, pero castigarla bajo los estándares de Shaina era demasiado severo.
- Ley del hielo?
- Las ninas lo notarían y no podríamos explicárselo
- Exponerla?
- Eso terminaría con su reputación y la nuestra.
- Carajo! Como es que eramos las únicas que no fuimos afectadas por esa locura?
- Agradece eso. No hubiera podido vivir conmigo misma si hubiera hecho algo como lo de Junet. Por cierto… Ya se despertó?
- No. Esta perdida. Sus alumnas están entrenando con las mias – dijo Geist
- Y si la ponemos a hacer los quehaceres de todas las cabanas por un mes… crees que sea suficiente castigo? – pregunto Marin
- Se me hace poco. Que tal esto. No hay días libres, ni salidas, ni visitas y aparte hace los quehaceres de todas por un mes…
- Si… Si pregunta alguien, fue resuelto internamente. Las ninas no deberán saber…
- Marin, y si Shaina regresa antes de que termine ese mes?
- Que el cielo ayude a Junet, porque no creo que ni tu y yo unidas podamos ayudarla.
En los aposentos de Saori tres horas después
- Mmm… Oh si Seiya!... Asi!... No te detengas!... dame mas mi spiderman de bolsillo! Mas duro!... Asi… uyy que rico…
Tatsumi entro a la habitación justo cuando estaba lo mejor sonrojándose por lo que su querida amita decía y le coloco una compresa fría en la cabeza (aunque yo digo que debio habérsela puesto en otro lado), haciendo que Saori brincara por la sensación y se despertara de golpe.
- Tatsumi! Que estas haciendo aquí? Crei que estabas de vacaciones! – dijo mientras trataba de incorporarse pero el dolor de cabeza, el mareo y las nauseas no la dejaron.
- Descanse señorita. El maestro Shion me dio un permiso especial para estar aquí para atenderla – dijo – Me dijo que habia enfermado de repente y necesitaba de mi asistencia asi que vine corriendo. Como se siente?
- Mi cabeza me va a estallar… Quiero vomitar…
- Debio comer algo en mal estado. Sucede muy seguido durante las fiestas. – dijo
- No… Me desmaye?
- No creo. Solo ha despertado, pedido mucha agua y se ha vuelto a dormir. – dijo – Marin y Geist la trajeron caminando según me dijeron.
- Menos mal… creo que atrape algún virus…
Tatsumi nada diplomático le dijo
- Por sus síntomas y su aliento, mas bien creo que atrapo una borrachera
- Estas loco! Yo nunca bebo alcohol!
- Pues…
- Fui la única que enfermo?
Tatsumi no dijo nada
- Contestame!
- En realidad todos deben estar igual por lo que Shion me comento.
- Y Seiya y los demás?
- En el calabozo a donde pertenecen
- Que?
- Shion los puso ahí hasta que estén en condiciones de interrogarlos.
- Necesito hablar con Shion – Dijo con ademan de levantarse, pero todo le dio vueltas y volvió a caer sobre los almohadones – Tiene que dejarlos libres
- No creo que pueda hablar con el por ahora – dijo Tatsumi – Tiene que dormir mas, y tomar muchos liquidos. Despues ya veremos si se puede levantar. Ademas no le recomiendo que vaya a verlo ahora. Decir que esta enojado es poco.
Saori lo miro y recapacito.
- Esta bien, pero cierra las cortinas porque la luz me esta matando!
Isla Columbus Isle
12 pm Restaurante del Hotel
- Muero de hambre! – dijo Shaina que venia de la playa con Vehu y Jely detrás – Puedo entrar con esta ropa o debo ir a cambiarme?
- Es la hora del lunch…
- No necesita cambiarse…
- Ademas a esta hora es buffet...
- No tiene que lidiar con camareros estorbosos y snob…
- Ya, ya… ya entendí. Vamos pues! – les dijo.
Entraron y dejaron sus cosas en la silla de junto mientras ella escogia que es lo que queria.
Si, tenia hambre, pero tampoco queria comer algo muy pesado. No habia hecho ejercicio en seis días… seis! Manana tendría que buscar donde estaba el gimnasio o iba a perder forma. Tomo un poco de pasta al pesto, unas carnes frias con cuadritos de distintos quesos y un jugo de naranja natural con hielo para reponer azúcar.
Cuando llevo su plato a la mesa Minos ya estaba esperándola sentado en la silla frente a ella.
- Buenas tardes Shaina
- Hola Minos. Como le haces para encontrarme siempre?
- Acaso te estas escondiendo de mi?
- Ciertamente no me estoy escondiendo de nadie – dijo intentando ser lo suficientemente cortante como para que se fuera.
- Vamos! Yo se que eres lo suficientemente bondadosa como para no correrme de tu mesa.
- Primero, nadie que me conozca me diría bondadosa sino todo lo contrario y en segunda no es mi mesa, es del hotel y hasta el momento no te he corrido. – contesto Shaina
- Que bueno, porque no pensaba irme.
- Bien…
- Pues bien…
- Te han dicho que eres insufrible?
- Y a ti?
- Todo el tiempo
- A mi tambien.
Shaina no pudo evitar reir. Ok. Ella era terca pero el estaba a su mismo nivel de terquedad.
- Que te parece que hagamos una tregua – dijo Shaina – La verdad es que ya que estoy aquí en una mi… mini vacaciones… me gustaría un poco de paz y tranquilidad
- Y a mi me gustaría un poco de compañía. Todos me tienen demasiado miedo.
- Bueno… únete al club… - dijo Shaina tomando de su jugo
- Tu pides una tregua y yo pido que me dejes compartir algunas actividades contigo sin ninguna mala intensión.
Shaina lo miro y recordó lo que Vehu y Jely le habían dicho. El queria salir de ahí.
- Cuanto tiempo llevas aquí.
- Tres meses
- En serio? Y que hiciste los primeros meses para no aburrirte…
- Ejem Ejem… tu porque crees que mi brazalete no se ha caído
- Oops… perdón – dijo Shaina ruborizada – Y porque yo? Hay demasiadas chicas solas en este lugar.
- Ninguna como tu – dijo Minos coquetamente
- (Diantres! Si no fueras un Juez del Infierno… - pensó Shaina)
- Quid pro quo. Tu me das la oportunidad de salir de aquí, y en su momento, yo te dare algo a cambio.
- Como que?
- Como lo que quieras. Sabes que puedo concedertelo.
- Y yo que tendría que hacer? – dijo un poco escéptica
- Pasartela bien conmigo, lucir siempre hermosa, y evitar que intente propasarme…
- A que le llamas tu propasarte…
Minos se levanto y le susurro algo al oído que hizo que Shaina le diera tremenda cachetada que le volteo la cara.
- Si bueno… no tienes que ser tan drástica, pero si, algo asi funcionara.
- Y no te desquitaras conmigo ni con ninguno de mis amigos?
- Por las cachetadas que me des? No.
- Y porque si lo harias?
- Si hiciéramos un pacto y lo rompieras… O le fueras de chismosa a alguno de mis enemigos acerca de lo que escuches o veas que hago… O decidieras mientras estas aquí, "estar" con algún otro hombre que no sea yo… - dijo en forma arrogante
Shaina comenzó a reir
- Oh cielos… una cosa es segura… me haces reir mucho…
A Minos nunca le habían dicho que era gracioso
- No entiendo…
- De donde sacas que quiero estar con alguien aquí o alla?
- Yo se que aquí no, al menos aun no… Pero alla si tienes a alguien…
- No se a quien te refieres – Dijo Shaina dedicándose a comer ignorando los sentimientos que le estaba haciendo recordar
- No te preocupes… No puedo leer quien es… Al menos mientras estoy en la superficie… - dijo Minos entrecerrando los ojos – Pero te aseguro que lo hare tarde o temprano.
Shaina se quedo callada y siguió disfrutando de su comida.
- No lo hagas…
- Hacer que?
- Eso
- Averiguar quien es? Porque?
- Porque si no, no hare ningun trato contigo. – dijo Shaina viéndolo a los ojos
Minos se recostó aun mas en su asiento y tamborileo sus dedos en la mesa, pensando. Habia lanzado un dardo en la obscuridad. El de ningun modo tenia esa clase de poder mientras no estuviera en su puesto, pero ella no lo sabia.
- Ademas tengo mis condiciones.
- Cuales son?
- No puedes decirme lo que puedo o no hacer; No tenemos una "amistad" exclusiva por lo que voy a poder hacer actividades con quien yo quiera; No voy a romper compromisos hechos previamente solo porque te de la gana; Nos veremos siempre en publico y me ayudaras tu tambien a tratar de quitarme el brazalete.
- Demasiadas condiciones.
- Quedate otros tres meses.
Minos volvió a tamborilear los dedos lo que francamente estaba poniendo nerviosa a Shaina.
- Ok, aquí va mi contraoferta. No te voy a decir que puedes o no hacer, pero me vas a dejar comprarte lo que yo quiera que te pongas. Es parte de lo que necesito. Lo de la amistad no exclusiva… no hay problema al igual de los otros puntos…
- Perfecto!
- Pero… - dijo Minos sonriendo – Cada que suene tu brazalete, te voy a dar un beso en la mejilla. Y por cada vez que lo haga va a ser mas y mas cerca de esos deliciosos labios tuyos.
Shaina se puso blanca. Estaba jugando con fuego. Pero tal vez eso era lo que necesitaba para incentivarse a dejar las malas palabras y sus ataques de ira y poder quitarse el brazalete.
- Entonces qué? Aceptas – Dijo Minos extendiendo su mano para cerrar el trato.
