Capítulo 63

Abril 15, 8.45 am

Octava Casa

Santuario

Camus se dio cuenta que Shaina estaba riéndose como loca de la manera menos escandalosa posible e incluso cayendo hincada sin control.

- Tanto fue el impacto que perdiste la razón? – Le pregunto

Shaina no podía contestarle aun, pero solo movió la cabeza negativamente.

Como explicarle a Camus que ella se había imaginado a Samira como una mujer exuberante, llamativa, de cabello rubio o pelirroja sin ninguna decencia al vestir… tal como todas las mujeres que habían pasado por las trusas de Milo y le mandaban con ella recados que obviamente el nunca recibía? Como decirle que se había imaginado a Mi Bella Genio y no a la Madre Teresa? Su rápida imaginación había colocado a Milo en una túnica permanente, teniendo que rezar 5 veces al día, comiendo con las manos, montado en un camello en lugar de su motocicleta… Y si a eso le sumábamos el nerviosismo de no poder controlar sus celos… El resultado fue una risa incontrolable, pero sorprendentemente, no quería arrancarle los ojos a esa criatura que parecía demasiado dulce.

Samira veía con curiosidad a las dos figuras desde el umbral de la casa y Milo se asomó también.

- Que estás viendo allá afuera pedhí mou.

- Pues… no estoy muy segura. Tu amigo Camus vino por ti y la muchacha que venía con el parece que se sintió mal, Habibe.

- Muchacha?

Alcanzo a ver el cabello verde de Shaina y que estaba en su uniforme de entrenamiento y pensó lo peor. Acaso había sido un choque tan grande ver a Samira por primera vez?

Camus mientras tanto se enfadaba más y más con Shaina.

- Shaina! Levántate. Nunca le he pegado a una mujer pero me están dando muchas ganas de darte unas buenas nalgadas por maleducada.

Shaina aún no podía controlarse. Era demasiado gracioso.

- Shaina… Milo viene para acá. Contrólate y ven a que te la presente o nunca te lo va a perdonar.

Shaina volteo a ver el pasillo y efectivamente Milo ya venía hacia ellos.

Hizo un esfuerzo sobrehumano y se levantó. Se limpió las lágrimas de risa y regreso de la mano de Camus.

- Todo está bien por aquí? Shaina te sientes bien? – dijo extendiéndole la mano

Shaina solo asintió con la cabeza y se dirigió directo hacia Samira ignorando a Milo quien veía extrañado a su amigo.

- Hola Samira. – dijo Shaina recogiendo su canasta con ambas manos – Soy la Jefa de Estado Mayor. Mi nombre es Shaina de Ofiuco. Lamento no haber estado aquí para darte la bienvenida ayer, pero tenía algunos compromisos previos.

- No te preocupes – dijo Samira no sabiendo si saludarla con la mano o con un beso como en su tierra – Me da gusto conocerte.

Camus estaba algo desconcertado con el comportamiento errático e inusualmente amable de Shaina para con Samira y Milo estaba esperando que Shaina sacara las uñas como era su costumbre.

- Toma. Te hornee estas galletas de bienvenida para ti. – dijo Shaina amablemente extendiéndole la bolsa más grande que encontró.

A Samira se le iluminaron los ojos. La tarde anterior, Geist le había comentado durante la cena que si llegaba a caerle bien a Shaina, tendría la mitad del Santuario de su lado y ella quería encajar por el bien de Milo.

- Gracias! Muchas Gracias! – dijo emocionada abrazando su bolsita de galletas – Yo no tengo nada para darte voy llegando!

- No te preocupes. Quieres pasar un rato con nosotras en el recinto?

Tanto Milo como Camus se miraron preocupados. Así de fácil iba a ser admitida en el cerrado circulo de las mujeres?

- Puedo ir Habibe? – pregunto esperanzada.

- Claro que sí. Con ellas estarás a salvo. – Dijo Milo mientras Shaina tuvo que voltear hacia arriba para evitar otro ataque de risa.

- Voy a ponerme bien mi velo – dijo Samira corriendo hacia el tocador

Esto le dio la oportunidad a Milo de preguntarle.

- Que traes entre manos viborita? Te prohíbo que lances tu veneno en contra de mi Samira. – advirtió Milo asustado.

- Con el miedo que me tengas me basta bichejo… - dijo Shaina fastidiada por la poca fe de sus amigos – Pero no temas. A tu señora no le pasara nada mientras esté con nosotras. Sera bienvenida en el recinto como todas las mujeres que vengan al santuario. Y me voy adelantando. Los espero abajo.

Tomo su canasta y se fue canturreando. Eso había sido más fácil de lo que había pensado…

Abril 15, 9.00 am

Tercera Casa

Santuario de Athena, Grecia.

Kanon, listo para su entrenamiento, vio su reloj y se sentó con las piernas cruzadas en su sofá pues había decidido tomarse unos minutos para abrir una cuenta de correo electrónico fantasma. Había sentido los cosmos de tres personas bajando hacia allá y también sintió a Shaina que estaba a punto de llegar, y lo que menos quería era interrupciones así que después de pelearse con el maldito lento internet, por fin logro su cometido.

Justo iba a comenzar a escribirle a Tania cuando tocaron a su puerta. Se levantó con su mejor sonrisa y abrió la puerta:

- Hola Shaina! Buenos Días!

- Hola Kanon. Solo quería pasar a agradecerte por nuestra conversación de ayer – dijo la peli verde entregándole una bolsita de galletas – Toma. Recién Horneadas para que te de energía y le rompas la cara a algún dorado hoy. Te doy permiso – dijo guiñándole un ojo.

Kanon rio de buena gana. Parecía que la viborita estaba de buenas hoy.

- Jajaja no necesito energía para eso, solo un poco de ganas- dijo Kanon sonriendo

- En todo caso, motivos no te faltaran – dijo Shaina

Kanon vio de reojo que Canon, Milo y su señora estaban a escasos metros y de pronto y sin previo aviso abrazo a Shaina.

Shaina quedo perpleja por el extraño comportamiento de Kanon, mas no hizo nada por zafarse, lo que hizo enfadar a Milo.

- Hey! El Sanbocho debe guardar distancia! - grito

Kanon volteo como si no los hubiera visto.

- Hola! Buenos días!

- Hola Kanon – dijo Camus viéndolo fijamente tratando de adivinar lo que tramaba.

- Solo estaba cobrando mi recompensa. No sé por qué te habría de molestar Milo. – dijo Kanon sonriendo inocentemente – Además, Shaina no trae su uniforme así que esta fuera de servicio

- Eso es cierto Milo – dijo Shaina – Sabes que comienzo a las 12. – después se zafo y dijo - De todos modos ya tengo que irme Kanon. Gracias de nuevo por lo de anoche.

- Regresa cuando quieras. Siempre estoy disponible para ti.– dijo guiñándole el ojo haciendo ruborizar a Shaina con su intencional doble sentido, quien mejor tomo a Samira de la mano y comenzó a bajar la escalera.

Milo veía bajar a las chicas y cuando y como pudo tomo de la playera a Kanon.

- Que se supone que paso anoche? Por qué te da las gracias? – dijo Milo

Kanon no se inmuto.

- Eso, es algo que a ti no te concierne. – dijo – Es algo entre Shaina y yo. Dedícate a cuidar a tu mujercita, que los demás ahora tenemos pase libre con Shaina.

- Que insinúas? – dijo Camus enojado.

- Nada en específico – dijo Kanon zafándose – Los veo en el entrenamiento? Aun no termino de lo que debo hacer.

- Ten por seguro que allá me vas a contestar algunas cosas Kanon – amenazo Milo

Este último se encogió de hombros y se metió para su casa con una sonrisa satisfecha.

- Milo… no dejes que te provoque. – dijo Camus

- Pero estamos hablando de Kanon! Con Shaina! – grito Milo – Es completamente inaudito!

- Y yo nunca escuche que dijera que se había metido con él o viceversa. Estás oyendo lo que quieres oír! – dijo Camus – Cálmate. En algo tiene razón. Tienes a Samira. En ella debes enfocarte ahora.

Milo respiro profundo y se dejó llevar por Camus hacia el coliseo. Allá arreglaría cuentas con su amigo.

Abril 15, 2 pm

Cafetería del Club Cruzeiro

Belo Horizonte, Brasil

El Dr. Reginaldo Ferreira entro en la cafetería del club, donde hizo algunas preguntas a sus directivos antes de dirigirse a la mesa donde estaba sentado Alde junto a otros de su misma clase en el Súper Camp.

Estaban ya terminando su almuerzo, por lo que con una simple señal del Dr. Ferreira, los demás jugadores desalojaron la mesa llevándose con ellos las bandejas vacías. Tomo asiento frente un sorprendido Alde que obviamente no tenía el gusto de conocerlo.

- Aldebarán Taurus supongo? – Pregunto algo impactado con el tamaño de Alde

- Si Señor, en que puedo servirle? Creo que no tengo el gusto – dijo Alde limpiándose las manos con la servilleta.

Reginaldo Ferreira no era un hombre que se impresionara fácilmente, pero el físico de Alde y sus modales, no correspondían con la imagen de el que se había hecho en su cabeza. Había creído que al decirle alto, pues un máximo de 1.80 mts sería el límite, que es lo que promediaban los jugadores europeos. Cuando le dijeron que era fortachón, no le dijeron que sus músculos dejaban a lelos a los campeones de fisicoculturismo… Y esa mole le había ganado al equipo A? La fortuna que podría hacer poniéndolo de portero!.

- Soy el Dr. Ferreira. Ha escuchado hablar de mi? Yo si he escuchado hablar de ti. – dijo finalmente

- Lo siento… acaso mis últimos exámenes salieron mal? Si es así, tal vez debo dejar alguno de los cinco postres del almuerzo – dijo Aldebarán sobándose la cabeza.

El Dr. Ferreira se quedó en silencio antes de comenzar a reír. Él era bastante conocido en todo Brasil y si se pudiera decir en todos los países afiliados a la FIFA por ser el presidente del club Cruzeiro FC. Pero este hombre delante de él, que según su archivo solo contaba con 24 años, no tenía ni la menor idea, y creía que venía a hablarle de sus análisis clínicos.

- No Taurus, soy el presidente del club.

- De verdad? Wow! – dijo saludándolo con ambas manos – Muchas gracias por la beca. Sus instalaciones son de primera y las técnicas y jugadas que he aprendido son igual de fantásticas!

- Pues… gracias supongo! – dijo el Dr. Ferreira – Aunque en realidad no he venido a hablar de futbol…

- En serio? Entonces no entiendo.

- Estoy hablando de mi hija, Nívea.

Alde volvió a sonreír tranquilamente.

- Ah! Cierto! Niv! Que pasa con ella?

- Eso mismo quiero saber yo…

- Lo siento no entiendo…

- Pues… déjame te explico. Nívea es mi única hija. Y durante años he estado muy preocupado por ella. Me ayuda entrenando el equipo juvenil femenil… es la coreógrafa, y muy buena, de las porristas… las has visto?

- A las porristas?

- Si

- La verdad no.

El Dr. Ferreira casi se cae de la silla. Ese tipo era real? O tal vez… podría ser que también fuera gay?

- Bueno, el punto es, que supe de su propia boca que antier te invito a salir…

- Ah sí. Me llevo a conocer algunos puntos de Belo Horizonte. Tiene una hija muy linda y divertida también.

- Yo… que puedo decir. Soy su padre jeje!. Quisiera saber si… ella se te ha insinuado o si hay alguna… mmm posibilidad de que … ejem ejem… no bsbsb bshshshsb

Alde parpadeo un par de veces.

- Lo siento señor. Creo que no escuche eso último.

- Que si tú puedes decirme si existe la posibilidad de que Nívea no fuera bbsbana

- Ay creo que sigo sin entender!

- QUE SI SABES SI ES LESBIANA O NO!

Todos a su alrededor voltearon a ver la mesa por unos segundos antes de regresar a sus respectivas conversaciones.

Alde quedo muy sorprendido con la pregunta.

- Vaya! No… no me lo parece. Por qué lo pregunta? Acaso la ha visto en alguna situación embarazosa con otra mujer?

- No! No… desde luego que no, pero le he preguntado directamente y solo se molesta conmigo y no me da la respuesta. No sé si ella te ha contado que su madre nació al darla a luz, por lo que no tuvo una figura materna. Yo amaba demasiado a mi esposa y no volví a casarme. Ahora no se si eso fue bueno o malo. Pero volviendo a Nívea, si ha salido con chicos, pero una sola vez y no vuelve a verlos. A veces siento que solo lo hace para complacerme y si le aúnas que juega soccer mucho mejor que la mayoría de ellos y gusta de usar pantalones y le gusta estar con las porristas… tu que pensarías?

- Supongo que no lo mismo señor – dijo Alde en tono de reproche que el papa de Nívea supo interpretar muy bien.

- No me malentiendas muchacho. Amo a mi hija y no me molestaría que lo fuera mientras ella sea feliz. – dijo – Pero ya tiene más de 21 y yo o quiero nietos o saber que va a adoptar, pero saber algo! Ella no se abre conmigo… y…

- Y…?

- Ya que parece que eres su protegido me preguntaba si podrías ayudarme a averiguarlo.

Alde se quedó muy serio. Eso era meterse con una parte de la vida privada de Niv que no tenía contemplada.

- Yo no quisiera que ella se molestara conmigo Señor. – dijo – Ella es mi única amiga, y solo estaré aquí tres semanas.

- No te pido que la espíes muchacho, sino que sigas con cualquiera que sea la relación que tengas con mi hija, y en caso de que haya alguna confirmación de una cosa o la otra, que hagas feliz a este viejo diciéndoselo. No te preocupes. Yo no soy nadie para reclamarle lo que haga o deje de hacer. Te confirmo que solo quiero verla feliz, ya sea con un hombre o una mujer, pero no quiero verla sola.

Alde lo miro muy serio. Sintió que lo que el papa de su amiguita decía era verdad. El mismo debía rayar en los 60 y si Niv era su único hija era lógico que se sintiera con un poco de miedo.

- Bueno. Le prometo que se lo hare saber, mas no hare nada que pueda ofender la integridad de su hija.

- Gracias muchacho. Y también te pediría discreción en el asunto. – dijo el Dr. Ferreira – si Nívea se entera que te aborde para este tema, literalmente me mata. Jijiji. Es una muchachita muy fuerte.

Alde le sonrió.

- No se preocupe. No diré nada.

El Dr. Ferreira se levantó.

- Dime Aldebarán… te gustaría acompañarnos en el palco de los directivos el próximo domingo para el partido contra el Santos? Nívea estará ahí también.

Por toda respuesta Alde abrió los ojos y movió afirmativamente la cabeza. Que era mejor que la combinación entre un buen partido de futbol soccer y una excelente compañía?

Abril 15, 7 pm

Onceava Casa

Santuario de Athena.

Camus salió de la regadera con solo una toalla alrededor de la cintura. Tomo una botella de vino tinto, una copa de cristal y se sirvió. Se cuidó bien de dejar la botella a un lado. Iba a necesitar de más de una copa para poder relajarse.

Se sentó en su sofá, tomo su celular y marco el discado rápido. Hubo dos timbrazos antes de que contestaran.

L: Legetai?

C: Hey Laura. Es Camus

L: Camus Hola que milagro!

C: Estas disponible para charlar? No interrumpo?

L: Claro que no. Solo estoy acabando unos informes.

C: Que bien. Te toco turno nocturno?

L: No exactamente. Me gusta quedarme hasta tarde para hacer los informes sin tener gente que me interrumpa con tonterías.

C: Ouch eso dolió

L: Jajaja no es para ti, sino para jefes inoportunos que además no pagan horas extras. Y a todo esto… estoy segura de que no hablaste para saber mis horarios.

C: Que tal que sí.

L: No… más bien suenas algo… "cargado" Jajaja suéltalo anda! Ya deje todos mis informes a un lado para ponerte toda la atención.

C: Gracias. No es nada malo ni nada tan pesado. Pero las únicas personas con las que puedo hablar por aquí son las involucradas y pues…

L: Ya se. No quieres que sientan que están en el medio.

C: Si, algo así. Veras. Mis más viejos amigos son Milo y Shaina…

L: Son pareja?

C: No… ellos querían pero no se pudo. Ahora Milo está casado y Shaina no. Y esta un nuevo amigo, Kanon. El… es el más… coqueto digámoslo así de los tres. Un soberano patán. Estos últimos días ha estado algo distante y hoy por la mañana Kanon hizo algún tipo de insinuación de que… podría intentar algo con Shaina. Bueno, yo no escuche eso pero Milo si…

L: Pero me estás diciendo que Milo ya está casado…

C: Lo está, pero dudo que puedas dejar de querer a alguien de la noche a la mañana. Shaina también tiene novio y no quiere nada con Kanon. De hecho yo creí que no se llevaban bien…

L: Y luego que paso?

C: En cuanto pudieron se liaron a golpes.

L: Y quién gano?

C: Ninguno. Llego Shaina con la esposa de Milo a donde estábamos y como Shaina es nuestra jefa…

L: Oh-oh

C: Sip, Y por eso ahora estoy solito. No es tan malo. Estoy degustando una de mis preciadas botellas de vino para relajarme.

L: Que mal. Necesitamos conseguirte una novia.

C: Ay no. Tu no por favor! Con Shaina y Milo tengo diciéndome que debo hablar con mi ex para tratar de arreglar las cosas

L: Y tú no quieres volver a verla?

C: Desde luego que la quiero ver! Y no solo para admirarla jaja

L: Entonces?

C: No quiero admitir que hice mal en irme sin pedir una explicación

L: Ante quien no quieres admitirlo

C: Con Fler

L: Fler es la chica que me platicaste?

C: Si

L: Pero… ya pasaron muchos días.

C: Si. Casi un mes.

L: Y no crees que ella se merece una oportunidad? Te había fallado antes?

C: No, creo que no. Aunque nuestra relación siempre fue a larga distancia. Ella está en Noruega.

L: Uy algo lejos.

C: Si. Y el pueblo donde vive aún no tiene teléfono o internet. Tendría que ser por telegrama y aun así llega con varios días de diferencia.

L: Y si le mandas un telegrama pidiendo que venga a verte? Yo creo que la última vez, si tú fuiste el que se arriesgó a ir hasta allá, ella bien puede venir a tu llamado si le interesara arreglar las cosas no crees?

C: Pero… y si no viene?

L: Entonces ya podrás seguir adelante con tu vida sin ninguna duda de que ella escogió otro camino.

C: mmm… Estoy indeciso.

L: Vamos! Anímate! Es más, aquí tenemos un servicio de telégrafo las 24 horas. Que te parece si lo mando por ti así no tienes ese momento de arrepentimiento de último minuto.

C: Estas segura de que es lo mejor que puedo hacer?

L: Es lo mejor Camus. Te quitaras un peso de encima y tus amigos no estarán molestándote.

C: De acuerdo. Confiare en tu buen juicio como acuariana. La dirección es…

Abril 15, 4pm

En algún lugar de la Selva Amazónica Peruana

Liz estaba impaciente. Llevaba lloviendo más de 18 horas y Shaka se había negado a moverse de ese punto. Había liderado y ayudado a los guías a hacer un buen refugio ante la primera señal de que iba a llover para evitar que las tiendas no fueran arrastradas por el agua o se inundaran ni hubiera posibilidad de ser atacado por animales salvajes. También había hecho hábilmente, antes de que comenzara a llover, un firepit con una roca gracias a uno de sus precisos golpes, donde pudieron hacer una fogata sin que el agua afectara las llamas y desde luego, le había improvisado un pequeño tejaban para que el agua no la apagara. La humedad les calaba los huesos y de no ser por sus tiendas, a estas alturas ya estarían padeciendo de hipotermia.

Liz lo había mirado asombrada. Samantha, la nueva novia de su padre y próxima madrastra según intuición de Liz, le había ensenado muchos trucos de supervivencia, pero lo que él había hecho, era ridículamente bueno para alguien que nunca había salido de excursión según su tío Budd.

Podía verlo desde su cabaña, con su manto budista, totalmente concentrado en su meditación, sin ser molestado con los mosquitos, ni la lluvia, ni los gruñidos de los animales a su alrededor… Solo con verlo podía sentir la tranquilidad que emanaba de su cuerpo. Y al mismo tiempo se veía tan guapo!

Cuando su tío Budd le dijo que la persona que requería de su ayuda se parecía a la Barbie que él le había regalado hace muchos años, Liz había corrido a buscar entre sus álbumes de fotos, la única foto que tenía a sus 10 años con sus 200 barbies y había hecho reír mucho a su tío al intentar adivinar cuál de todos se parecía a Shaka. Buda entonces le había dicho que buscara a la Barbie con los ojos más azules, el cabello más lacio y largo y se lo imaginara en varón y ahí encontraría la respuesta. Fue entonces con esa imagen en su cabeza que había llegado por el al hotel en Aguas Calientes y fácilmente lo había reconocido. Pero para variar su gran bocota le había hecho perder muchos puntos con él desde el principio. Como iba a poder conseguir abrirse más con los muchachos si la regaba cada vez que hablaba?

Durante estos pocos días que llevaban juntos, casi una semana, poco a poco había logrado que Shaka le dirigiera más la palabra y ya no estuviera tan malhumorado. Sera que lograría su cometido y entonces su tío Budd le encontraría un novio? O… no seria que había escuchado mal y su tío había dicho que Shaka sería su novio si lograra conquistarlo? Pensándolo bien, era guapísimo y sus hijos saldrían preciosos, con su dinero podrían tener una gran casa en la pradera de dos pisos con tejas rojas, con un perro labrador y un gato de angora blanco y el tío Budd podría cuidárselos mientras ambos viajaban por el mundo y…