Capítulo 148

Junio 17, 11pm

Aposentos del Patriarca

Santuario de Athena, Grecia

Era la quinta vez que Shion despertaba sudando. Que acaso las pesadillas nunca terminarían?. Se levantó, se puso su bata y decidió darse un largo baño en las termas para relajarse. En este momento no podía darse el lujo de enfermar de nuevo.

Flashback

- Aioros! Shion! – exclamó Shura corriendo a su encuentro.

- Shura, que pasó? Los encontraron? – preguntó Shion

- Aun no! – dijo abriendo su remolque e invitándolos a pasar – Donde pueden estar?

Aioros abrazó a su amigo. Era difícil ver a Shura en ese estado.

- Donde esta Alejandro? Creí que ya estaría aquí – dijo Shion

- Me llamó hace un rato. Estaba a cinco minutos – dijo Shura sentándose en su sala para poner la cabeza entre las manos.

La puerta se abrió y Alejandro pasó.

- Shion… Shura – dijo a modo de saludo

- Alejandro…

El suegro de Shura se hincó frente a él.

- Dime todo lo que sepas- le ordenó

- Uno de los clientes de los autos envió dos boletos para un Car Show en Lisboa – dijo Shura – Mario y otros parientes nos los dieron de regalos de bodas pero era el mismo día del compromiso de Shaina…

- Quien es Shaina? – preguntó Alejandro

- Nuestra Jefa de Estado – contesto Aioros sirviendo un vaso de agua a todos ahí.

- Y por qué tenías tu que ir dejando sola a Zita! – gritó Alejandro.

- La asistencia era obligatoria y ella quería ir a ese evento así que se fue con Omar – contestó Shura con el respaldo de Shion.

Alejandro iba a comenzar a alegar con Shura acerca de esa decisión, pero Shion se interpuso.

- No busques culpables Alejandro – dijo Shion – Lo importante es encontrarlos a tiempo.

- Sabemos que no están heridos. Ya llamamos a todos los servicios de emergencia de Lisboa y de Madrid y no hay nadie que se les parezca. Desaparecieron antes de siquiera tomar el avión.

- Alejandro – interrumpió Shion – No perdamos el tiempo. Tú me dijiste que podías encontrar a todos tus descendientes. Encuéntrala.

Alejandro bajo la cabeza y cerro los puños en un gesto de impotencia.

- Lo he intentado desde que Shura me llamó y no puedo hacerlo. Algo me está bloqueando. – contestó

- Eso es imposible – dijo Shion – No existe nada que pueda impedir que la encuentres con tu cosmo.

Shura reaccionó ante esto último levantándose rápidamente.

- La pulsera! – gritó Shura y para sorpresa de sus compañeros salió corriendo del remolque.

- Shura! – dijo Aioros siguiéndolo. Alejandro y Shion hicieron lo mismo.

Shura se dirigió a donde estaba Rosa.

- Rosa! – dijo sujetándola con suavidad de los hombros – De casualidad viste si Zita llevaba puesta la pulsera que le regale?

- Por qué? Es importante? – preguntó la anciana mirándolo extrañada.

- Mucho

- Pues… - la anciana pensó un momento – Si… Si! Dijo que era para no extrañarte mientras estaban separados.

Shura la soltó y se volteó hacia Shion quien le puso una mano en el hombro a forma de tranquilizarlo.

- Es mi culpa… Es mi culpa que Alejandro no pueda sentirla! – dijo desesperado

- Amigo… no estamos entendiéndote – dijo Aioros – De que pulsera hablas y que tiene que ver.

- Yo…

- Shura! La vida de tu esposa y tu hijo está en juego! – reprendió Shion – No es momento para titubear. Que carajos estas escondiendo?

Shura se abrazó a si mismo poniéndose en cuclillas.

- Yo le regalé a Zita una pulsera de compromiso que… había sido heredada por mi madre. Ha estado en la familia por doscientos años o más!

- Y?

- Esa pulsera… Bloquea los cosmos de las personas para evitar ser encontradas. La leyenda de mi familia dice que fue forjada por el mismo Dios Herrero para ayudar a uno de mis antepasados a esconderse de sus enemigos. Rosa dice que ella la traía puesta cuando desaparecio.

Shion se puso blanco y respiró profundo. Seguramente era una simple coincidencia. No era la misma que él tenía que buscar. Alejandro tomó a Shura de la camisa obligándolo a levantarse.

- Y sabiendo el peligro que corría… le diste esa maldita pulsera? Y la dejaste salir de España? – le gritó

Aioros y Shion se voltearon a ver.

- Peligro? Shura… de que está hablando? – pregunto Aioros tratando de separarlos.

Ahora fue el turno de Shura de mirar a Alejandro pidiendo que les explicara. Alejandro tuvo que tragarse su orgullo y confesarse.

- Como sabes Shion, mi nombre real es Tritón, hijo de Poseidón y… Él me ha estado buscando por más de 2000 años para acabar con mi vida. Temo que Zita haya caído en sus manos para obligarme a salir.

Fin del Flashback.

Dohko vio luz dentro de las termas y fue a investigar. Era su última ronda antes de cambiar de guardia con DM. No escuchaba ruido y tampoco había nadie dentro del agua. Acaso habrían olvidado apagarlas?

Se dio la media vuelta para hacerlo el mismo cuando Shion salió de detrás de la última columna con su toalla alrededor de la cintura.

- Ni te atrevas – dijo secándose las puntas del cabello.

- Shion! Pero que haces aquí tan tarde! – exclamó Dohko yendo a su encuentro – Estas solo?

- Quien querrías que estuviera conmigo? – preguntó Shion

- Pues… no se… es que es … raro – dijo Dohko – Te pasa algo?

Shion se puso su bata en silencio. Le estaba pasando de todo pero no era como para desquitarse con su amigo.

- No podía dormir. Es todo – Contestó

- Aja. Mi guardia termina en pocos minutos. Por qué no bajas a mi casa y nos tomamos un trago de mi botella de Baijiu reserva especial que me traje la última vez de China? – dijo Dohko

Shion lo miró con desconfianza

- Tu nunca sacas tu reserva especial

- Bueno… - dijo Dohko – Creo que después de tanto trabajo, me merezco aunque sea un traguito.

- Desde cuándo?

- Oh vamos! Ayúdame aquí! Sabes lo nervioso que estoy de que en menos de dos semanas tengo que salir a buscar a mi sucesor? – dijo Dohko un poco más serio.

- Eso sí es más creíble. – dijo Shion sonriendo – Con gusto brindare por el éxito de tu misión contigo. Solo deja ponerme ropa o comenzaran los rumores…

- Mas?

Shion lo volteó a ver con actitud enfadada y Dohko se echó a correr a su casa.

- Allá te veo pues.

Hora y Media más tarde…

Shion intentó levantarse, pero el mundo le dio vueltas y volvió a sentarse en el sillón frente a Dohko.

- Ok… ahora entiendo porque solo tienes que tomar un chupito – dijo Shion riéndose

- En serio? – preguntó Dohko – Cuantos llevamos?

- Quien los cuenta! – respondió Shion – Y a todo esto… si vas a buscar a una niña como Sunrei, Maldito pervertido?

- Shhhhhhhhhhhtttttt

- Qué?

- Las paredes oyen – dijo Dohko

- No me digas!

Dohko asintió con la cabeza.

- Pues que paredes tan chismosas – contesto Shion – Entonces?

- Qué?

- La pregunta

- Cuál?

- Ebrio y sordo… Sunrei… Sun-rei

Dohko deliberó un poco.

- No me vería un poco…

- Pervertido? HDP? Si… un poquito

- Bájale! Tu porque no tienes que cumplir esta misión tan difícil – se quejó Dohko – Yo ya no se ni por dónde empezar.

- Ya! Usa un poco de tu encanto con las chinitas y velás como te hacen aloz… jajajaja – dijo Shion visiblemente afectado por la bebida – Ya no debo tomar. Creo que me sale lo Dohkiano Jajaja

- Hey! Tu nunca podrás ser como yo aunque quisieras.

Shion se sirvió un poco más.

- Ya en serio amigo… Desde que te fuiste y me abandonaste para irte a achatar las nachas a los cinco picos…

- … Pero por órdenes de Athena… - aclaro Dohko

- …como sea… No te conozco a muchas amigas ni novias ni…

- Y Nancy qué?

- Oh vamos! Tu sabes que te hizo caso solo porque Diana me hizo caso a mi primero.

- Quieres apostar? Yo conocí a Nancy primero y te presente a Diana.

- Mentira… es más… - dijo Shion sacando su celular – Le preguntare

- No seas así! Es casi la una de la mañana. Están dormidas.

- Duh! Solo le mande un mensaje!

- Ah bueno… Pero de todos modos… las mujeres caen a mis pies fácilmente solo con mi sonrisa – dijo Dohko

Shion agitó negativamente su cabeza

- Pero si no eres Milo!

- Bah! La mía es más bonita – dijo Dohko

- No. Si eso fuera, ya tuvieras a una Samira a tu lado. – dijo Shion

- Ay que ternura! Esa niña hizo un excelente trabajo con el compromiso… digo… la boda de Shaina – dijo Dohko – Milo se sacó la lotería con ella.

Shion se hundió en su asiento.

- No me recuerdes ese evento por favor.

- Por qué? Creí que estabas de acuerdo con lo que había pasado! – exclamó Dohko sorprendido.

- Que de acuerdo ni que ocho cuartos! – dijo Shion – No me dejó ninguna opción

Dohko chifló.

- Le vas a dar tu sermón cuando regrese?

- Para qué? Aquí ya nadie me hace caso amigo. Por eso ya hice un trato con Athena.

Dohko se incorporó en el sofá.

- Trato? Que trato?

- No sé si decirte… aunque de todos modos te vas a enterar. – dijo Shion – Renuncié.

Dohko dejó caer su vaso de la impresión.

- No, no lo hiciste!

- Oh sí. Si lo hice. – dijo Shion sonriendo – O qué? Creíste que tenía siempre a Aioros a mi lado solo por gusto? Y más te vale que no menciones esto a nadie! Aun no es tiempo de decirles.

Dohko fue a traer otro vaso y se sirvió más licor que se tomó de un trago.

- Pero… pero…

- Qué?

- Porque?

Shion recargó su cabeza en el respaldo y cerró los ojos, volviéndolos a abrir para mirarlo directamente.

- Estoy cansado.

- No, no es cierto!

- Si, Dohko. Ya era tiempo de retirarme cuando Saga… hizo lo que hizo. – dijo Shion – Si bien no era mi hora, esperaba finalmente estar en paz.

- Pero Hades te lo impidió verdad?

- Sí.

Dohko se quedó en silencio pensativo. La verdad es que no concebía el santuario sin Shion como patriarca.

- Quien más lo sabe?

- Solo Aioros para que aceptara comenzar a ser entrenado y tu – contestó.

- Pero… te necesitamos! Ahora más que nunca! – insistió Dohko pasándose la mano por la cabeza – Esta misión es muy difícil, necesitamos tu guía y tu ayuda.

- Y eso les estoy dando. – contestó Shion – Como ejemplo ahí tienes a Nívea, la novia de Alde, que vendrá con él. A nuestro torito le dará muchas gratas sorpresas. – dijo Sonriendo – Y es muy bonita.

- No cambies el tema.

- No lo hago. – dijo Shion – Te estoy haciendo ver que a pesar de que esta decisión ya tiene mucho tiempo, no he dejado mis deberes. Ni los voy a dejar en los próximos 18 meses.

Dohko agachó la cabeza. Estaba incrédulo.

- A todos los quiero ver felices y con familia antes de irme Dohko y tú no debes ser la excepción.

Dohko no contestó. Estaba enojado.

- Esto es por lo de Agasha, verdad? No me perdonas que no te haya dado su misiva antes… - reclamó Dohko – Por eso me excluiste de esta decisión.

Shion se sirvió otro chupito. Era más fácil hacerlo así para hablar del tema.

- Si… y no.

- Explícate.

- No te guardo rencor si a eso te refieres – explico Shion – Pero tu preferiste hacerle esa promesa a ella, antes de honrar nuestra amistad y eso… si me dolió.

- Lo siento…

- Desgraciadamente para mí, no puedo olvidarlo. – dijo Shion muy serio – Hasta el suegro de Shura conoció a mi hijo… y yo no.

- Que dices? – exclamó Dohko asombrado, pero Shion no movió ni un músculo facial – Ya tienes una pista de dónde encontrar algún miembro de tu familia?

- No. Aún no. Pero estoy cerca… muy cerca… - dijo Shion – Desafortunadamente como Patriarca del santuario los problemas no cesan y no puedo dedicarle ni cinco minutos.

- Lo dices por lo de los sucesores? Yo creo que estamos haciendo un buen trabajo – dijo Dohko – Milo y Shura ya comenzaron. Dos de seis que han salido no está mal.

Shion comenzó a reír.

- Ahora qué?

- Y ambos están casados – dijo Shion – Así que aguas jajajaja no te vayan a casar a ti también.

Dohko se cruzó de brazos.

- Ya te dije que eso es imposible!

- Nada es imposible Dohko – dijo Shion feliz de encontrar el punto débil de su amigo – Tu mismo dijiste que tu sonrisa bla bla bla

- Pero no para casarme!

- Es más… - dijo Shion – Te reto.

- A qué?

- Demuéstrame que puedes salir al mundo y sobrevivir y conquistar a una chica como hombre normal, sin cosmos. – dijo Shion

- Que gano si lo logro?

- Mis respetos…

- …Y dejaras la tontería de renunciar?

- Eso no está a discusión, pero… te bautizo al chiquito! Jajajaja – dijo Shion – Ok… creo que debo irme a mi cuarto. Ya estoy viendo dos Dohkos y con uno es suficiente, gracias.

Dohko entrecerró los ojos.

- Mejor quédate a dormir en el sofá – dijo – No es conveniente que los demás te vean en ese estado.

- Bah! Milo esta con Samira disfrutando de su amor… Shura está buscando a su esposa perdida… Te dije que es la nieta de Poseidón? Jajaja

Dohko se cayó del asiento de la impresión.

- Que que?

- Oh sí! Y luego preguntas que porque estoy cansado. – respondió Shion - Pero hacen una muy bonita pareja. Zita tiene los suficientes… como se dice? Ah sí! Cojones!

- Shion!

- Qué? Aioros no está porque esta con Shura… Camus en el calabozo… y Afro en su sueño de belleza… ves como nadie puede decir nada?

Dohko agarró una libreta y comenzó a escribir las preguntas que tendría que hacer sobrio a Shion porque estaba seguro que no se iba a acordar por la mañana.

Shion ya no volvió a servirse alcohol. Solo se quedó mirando al frente.

- Estoy pecando de envidia amigo – confesó finalmente

- Tú? Envidia a qué?

- A todos ustedes – dijo Shion encogiendo los hombros – Van a encontrar a una pareja de la cual se van a enamorar y dejaran de estar solos. Tendrán quien les haga piojito en la noche Jajaja

- Que ridículo! – dijo Dohko – Tu puedes tener a quien tú quieras también!

- Estoy curado de espanto – dijo Shion – Durante los primeros años de mi primer patriarcado, lo necesite, lo soñé y mira lo que paso. Todo por escuchar a una mujer despechada…

Dohko le puso una mano en su hombro.

- Shion, debes olvidar…

- Olvidar que? Que la diosa a la que serví me dio la espalda en su momento? Que Yuzuriha me llenó de veneno la cabeza en contra de Agasha? Que a mi discípulo le gustaba mi mujer? Que todos complotaron contra mí? – dijo Shion riendo con amargura – No. No voy a olvidar. No debo. Es lo único que pueden pedirme y que no voy a hacer.

- Es por eso que ya no confías en nadie?

- Así es. Confío en mí y en que mi trabajo lo hago bien y nada más. De ahí a que alguien vuelva a entrar en mi corazón, está difícil. Si no lo he hecho desde hace más de 200 años, no lo comenzaré a hacer ahora. – dijo – Además, estaré viajando mucho. Lo que menos necesito es una pareja que no pueda seguirme el paso o me exija no seguir buscando.

Dohko se quedó callado. Era difícil que Shion le hiciera ese tipo de confidencias y no quería enfadarlo.

- Y si te vas que va a pasar con Shaina, Kiki y Sammy? Ellos te necesitan.

Shion comenzó a reír de nuevo.

- Que ridículo eres! Shaina acaba de casarse. En cualquier momento decide que no puede con ambas responsabilidades y se larga a vivir con Minos. – dijo Shion

- No lo había pensado en eso.

- No. Ustedes no piensan mucho… es parte de su naturaleza. – dijo Shion

- Bueno, pero los niños…

- Esa es otra historia. Aioros cuidara bien de ellos. – dijo Shion

- Pero… no tiene también que engendrar a su hijo? – pregunto Dohko – O también ya cambio eso?

- No. también lo tendrá y todos serán felices para siempre. – dijo Shion – Me preocupan algunos de los muchachos pero estoy seguro que en la segunda vuelta sacaran la misión adelante.

Dohko se hundió en su asiento de nuevo.

- Déjame adivinar – dijo cruzándose de brazos – Mu, Afrodita y Aioros

- Ja! No le atinaste a ninguno! – dijo Shion sonriendo

- No? No te preocupa Mu? – preguntó sorprendido.

- En absoluto. Estoy seguro de que en cuanto salga encontrara a la chica. Además falta mucho para eso. – dijo Shion

- Mmm… y Afrodita? Recuerda que los rumores dicen que él y DM…

Shion volvió a reír esta vez con más fuerza.

- Amigo… lo mismo dicen de nosotros dos… o de Mu y Shaka… o de Milo y Camus…

- Jajaja y eso que nunca damos motivos! – recordó Dohko – Entonces? Afrodita yo digo que será el más difícil de que engendre a su sucesor.

- No te creas. – respondió Shion – Puede ser bastante machito cuando se lo propone.

- Pagare por ver. – bromeo Dohko – Me lo imagino casándose con una florista o….

Shion azotó su vaso contra la pared haciendo que se rompiera en mil pedazos.

- Perdón, perdón, lo olvide… bueno, me entendiste.

- Y Aioros… lo único que le hace falta es salir. Con su carácter y su apostura, le será muy fácil conseguir que alguien se enamore de él. –dijo Shion – Así que no. Te equivocaste.

- Me doy entonces. Por quienes te preocupas entonces? – pregunto Dohko

- Kanon, Aioria y Shaka.

Dohko frunció el ceño. Nunca lo hubiera pensado de esos tres.

- Y se puede saber por qué? – pregunto Dohko – Kanon es famoso por ser un mujeriego sin control, Aioria tiene o tenia o puede tener a Marín y Shaka… pues es Shaka!

- Precisamente por las razones que me diste – dijo Shion enigmáticamente y al ver que su amigo no entendía se explicó – Kanon, por su misma facilidad de hacer amistad con el sexo opuesto, va a ser muy difícil que lo tomen en serio.

- Pero Saga si pudo hacerlo con Laura…

- Saga por su nueva profesión, ha aprendido a controlar sus ímpetus, pero Kanon no.

- Kanon se toma la vida más a la ligera.

- Mmm… No. tampoco exageres – dijo Shion – Pero tendrá que trabajar duro en su credibilidad para la mujer que escoja.

- Ok. Ya entendí lo de Kanon pero… y Aioria? – Preguntó Dohko

- Ah… nuestro leoncito, El orgullo es su perdición. – dijo Shion - Si hubiera mantenido a su amiguito dentro de sus pantalones, sería el que más fácil tendría su misión. Ahora tenemos a dos corazones rotos y un orgullo por los suelos por su tontería.

- Si bueno… Se necesitan dos para bailar el tango.

- Lo sé.

- Y entonces Shaka? No me vas a decir que no es guapo, educado, inocente…

- Y con completa falta de experiencia en el trato al sexo opuesto. Es como poner a un niño de 12 años a hacer la misión y hasta ellos tienen porno debajo del colchón.

- Shion!

- Qué?

- Sabes qué? Mejor terminémonos la botella y vamos a dormir. – dijo Dohko sirviéndole el ultimo chupito de la botella – Te pones muy pesado y sangrón cuando bebes.

Shion le aceptó el trago.

- Y si ya sabes como soy, para que me invitas? jajajaja

Junio 18, 7 pm

Departamento de Akane Li

Beijing República Popular de China

Akane llegó exhausta a su pequeño departamento de apenas 83 metros cuadrados en el tercer piso de un viejo edificio en el centro de Beijing. Dejó los zapatos en la entrada y se colocó sus cómodas pantuflas, habito que había adquirido de su madre.

Fue directamente a su recamara, donde se quitó su traje sastre color gris Oxford y se tiró a su cama tan solo en ropa interior. De todos modos no había nadie que la observara, ni una mascota ni una plantita… nada.

La decoración tampoco decía mucho de su dueña. Contrario a lo que cualquiera hubiera pensado de una Fiscal de distrito China – Japonesa, Su decoración era 100% occidental en blanco y rosa.

Sobre el pequeño escritorio de madera al final de su recamara, había al menos cincuenta carpetas de los casos que tenía pendientes. Maldita la hora en que su padre se había metido en problemas con el gobierno chino!. Ahora ella tenía que pagar su deuda trabajando para ellos sin poder salir del país.

Su celular sonó como todas las noches a la misma hora.

- Ni hao baba

- Hola hija. Como te fue hoy?

- Igual que siempre. Como están ustedes?

- Tu madre está bien, aunque todos los días me culpa de que ya tengas casi 28 años y no te hayas casado. Creo que no me lo va a perdonar nunca.

- Mmm… y para que querían que me casara? El régimen está cada vez más paranoico. Así al menos soy libre de ir y venir por todo el país.

- Lo siento hija. Debí dejar las cosas como estaban y no intervenir, pero no pude. Mis ancestros han de estar maldiciéndome por haberte provocado todo esto. Aun les llevas incienso y les rezas verdad?

- Si baba

- Gracias hija. Deseas que te enviemos algo de por acá?

- Solo sus bendiciones.

- Esas las tienes y lo sabes. Has salido en alguna cita?

- Desde que me lo preguntaste ayer? No.

- Exagero verdad?

- Algo.

- En fin. Tu madre te manda besos y yo también. Avísame si en algo cambia mi caso sí?

- Lo hare.

- Te llamare mañana mi pequeño gorrión.

Akane sonrió y colgó. A pesar de que su padre descendía de los Altos Taonias, ella no se creía lo suficientemente buena para presumirlo, pero por el parecido que su padre decía que tenía con su tatarabuela, a quien había conocido por una pintura en uno de los pergaminos más antiguos del archivo Taonia a donde una sola vez la había llevado su padre cuando era niña, se había ganado el apodo.

- Y ahora como te digo que me mandaran a Hong Kong por otro humillante caso imposible de un Guó wài padre – dijo antes de ponerse sus guantes de boxeo rosas para golpear el saco de arena que estaba en su recibidor con la bandera china como blanco.

Era la única manera en la que podía soportar eso desde hacía seis años.

Junio 18, 5 am

Aposentos del Sanbocho

Santuario de Athena, Grecia

Sammy terminó de bañarse sola después de hacer la cama, se cepilló el cabello y se hizo una coleta. No estaba acostumbrada a ese peinado y le costó un poco de trabajo, pero logro hacerla casi a la perfección. En lugar de ponerse un vestido, se puso su antiguo uniforme de entrenamiento. Ya casi no le quedaba, así que decidió ponerse unos mallones diferentes únicamente y su máscara.

Salió con mucho cuidado de no hacer ruido, hacia la cocina. Los cocineros ya se encontraban trabajando en el desayuno, y estaban bastante concentrados en eso, por lo que no le fue difícil robarse varias bolsas de basura negras. Con ellas en la mano, regresó a la habitación que tenía asignada.

Entro al vestidor donde estaba su camita que no había usado en varios días y en donde estaba su ropa y fue metiendo en la bolsa todos sus vestidos de fantasía que Zita le había comprado y los que en su cabecita no concordaban para una niña madura. Pronto lleno la primera bolsa, le hizo un nudo y la dejó en el rincón. Tomó otra bolsa y lo llenó de todos los juegos, juguetes y artículos divertidos que le habían hecho y comprado y pronto la bolsa quedo llena. Fue hasta la cama, trajo a cobrita y la depositó hasta arriba sin poder soltarla. Estaba indecisa si ella entraba dentro de juguetes o no. Decidió que aún no podía deshacerse de ella, le pidió perdón, la regresó a la cama y anudó la otra bolsa.

- Tendré que pedirle ayuda al Maestro Kanon – se susurró – Las dejare aquí mientras.

A las 7 en punto ya estaba sentada a la mesa, en silencio esperando que apareciera Shion y Kiki.

- Buenos días – dijo cuándo lo hicieron.

- Buenos días Sammy. – dijo Shion – Hoy no quiero estarlos arriando, comprendieron?

- Si maestro.

La comida comenzó a llegar y Sammy comió en completo silencio y con modales impecables a pesar de que Kiki intentaba por todos los medios hacerla enojar y llorar.

Shion los miraba intrigados. Sammy estaba demasiado seria y aunque Kiki le estaba pasando su sandia que no le gustaba, Sammy tomaba los cuadritos sin chistar y se los metía a la boca en un claro desafío para el chiquillo.

Sammy terminó su plato de fruta y avena y rechazó el cereal para tomar huevos revueltos con jamón, cosa que ella siempre evitaba pues decía que le daba asco. Shion iba a decir algo pero ella no dijo nada al comérselos.

- Me permite retirarme Maestro? – dijo hablando por primera vez – Debo prepararme para la venida de la Maestra Mayura.

Shion la miró e intentó ver más allá, pero ella obviamente no lo estaba dejando entrar.

- Adelante.

Sammy levantó su mesa, hizo una perfecta reverencia y dejo lentamente la habitación.

- Kiki… notaste algo extraño en Sammy esta mañana? O solo estoy alucinando? – preguntó Shion a Kiki.

- Tal vez le duele la panza maestro. Cuando a mí me duele, no quiero saber nada de nada.

- No… es algo más. Termina el desayuno y con doble porción de Sandia – dijo antes de regresar a su desayuno.

- Pero no me gusta!

- Quieres que sea triple?

- No! Ya me la como. – dijo Kiki sirviéndose lo pactado

Shion sonrió satisfecho y después decidió darle algunas instrucciones extras a Mayura telepáticamente. Necesitaba saber si lo que estaba pasando con Sammy era completamente normal o había algo más. No tenía ninguna experiencia con niñas.

Junio 18, 11am

Tumba desconocida

Cementerio de Rodorio.

Afrodita de Piscis estaba cómodamente acurrucado en su tumba favorita para hacer la siesta. Tenía su sombrero de paja sobre su cabeza para taparse el sol y todos sus implementos de limpieza en su mochila.

DM llegó también con una mochila al hombro y al ver a su amigo en esa posición tan relajada, decidió gastarle una broma. Se acercó por detrás del árbol, hizo un hueco con sus manos para simular el eco de una máscara y dijo:

- Muy bonito Caballero. Así nunca va a terminar su castigo.

Afro se levantó de un salto y se puso en cuatro simulando que limpiaba la lápida.

- Estoy limpiando Shion, de verdad que sí y… - escuchó una carcajada y se dio cuenta que había caído en la broma de su amigo – Idiota! Me Asustaste!

- Jajaja con razón no dices ni pio cuando te reganan. – dijo DM – te la pasas dormido en lugar de hacer lo que te indican

- Qué demonios haces tú aquí? – pregunto Afro molesto – No deberías estar metido en tus libros de leyes?

- Bah! – dijo Sentándose bajo un árbol – Toma, te traje una botella de agua medio congelada. Hace demasiado calor.

- Gracias – dijo tomándola de sus manos – No vayas a ir de chismoso con Shion de cómo me encontraste.

- Nah! A mí me importa un comino todo esto y lo sabes – dijo DM – De hecho me alegro que seas un huevon porque así me ayudas.

Afro le tomó un trago a la botella de agua y lo miró con desconfianza.

- A que quieres que te ayude?

- Necesito que me ayudes a conseguir depa en Londres.

Afro se sentó y se cruzó de brazos.

- Que te ayude Radamanthys ahora que eres taaaaaaaaaan amigo de Minos. – contestó

- Jajaja muñecón no te me pongas celoso. Ya sabes que tú eres el único.

- Aja. Por eso yo estoy castigado y tu no.

- Ah no. Tu estas castigado por idiota. A quien se le ocurre atacar a Minos en un lugar lleno de cámaras. – dijo DM – Anda! Ayúdame. Tú tienes mejor gusto y sentido de compras que yo.

- En eso si tienes toda la razón.

Dm sonrió y sacó una laptop de su mochila. La puso en sus piernas y la encendió

- De donde carajo sacaste esta computadora?

- Se la pedí prestada a Milo. Es la que le compró a Samira. – dijo DM

- Y Samira no la va a necesitar?

- Solo la necesito unas horas. – respondió DM – Además Milo dijo que quería que Samira descansara porque ya se picó con lo de su empresa.

- Aja. Eso solo significa que se la quiere coger y no quiere que nada la distraiga – dijo Afro con los ojos entrecerrados – Pero aquí no hay internet de donde te cuelgues.

- Duh… trae internet satelital rosita fresita.

- No me digas así Mascarita Sagrada

- Hey!

- Tu empezaste. – replicó Afro – Recuérdame para que carajos quieres estudiar Leyes?

- Para darle en la madre a algunos jueces que conozco y…

- Jajaja te vas a poner al tú por tú con Minos y compañía? Jajaja esa ni tú te la crees. – se burló Afro

- Para tu información, hay muchos más jueces en el mundo a quien joder, no nada más esos tres. Además …. Oh…

- Qué?

- Acabo de recordar algo que… - exclamó DM – No… tal vez solo fue para molestarme…

- Queeeeeee!? Dime!

- Nada, nada…. A ver… si mal no recuerdo… necesito un departamento barato cerca de la estación de algún metro o del teatro Covent Garden. – dijo DM – tú le sabes mover más a esto – dijo pasándole la laptop.

- Inútil… - dijo Afro acomodándose – De cuanto es tu presupuesto?

- Mmm… de lo que pedí… me darán 8000 dólares al mes para cubrir todas mis necesidades y…

- Que que? Pero por que tanto! – se quejó Afro – A mí solo me darán $6250!

- Muajajaja pues por idiota! Además aunque tenga beca tengo que pagar matricula, libros etc… por eso pedí más.

- Arghhhhh no se me ocurrió hacerlo. – dijo Afro regresando al motor de búsqueda – A ver… digamos que de 1000 a 2000 dólares de renta…

- Si… me parece bien. Pero no quiero estudios – dijo DM viendo como Afro casi ni miraba el teclado sino que solo miraba la pantalla.

Afro volteó a verlo.

- Por qué carajos no?

- No cabrán mis juguetes – dijo DM – y esos solo tienen un micro frigo bar donde no caben mis cervezas… y la cama solo cabe una persona…

Afro le dio una palmada en la nuca.

- Vas a estudiar o a divertirte?

- Hey! Parte de mi misión es coger – dijo crudamente – Y necesito un mínimo de espacio no?

Afro roló los ojos. En parte tenía razón.

- Y quiero poder caminar a la escuela. No quiero gastar en transporte.

Afro se cruzó de brazos

- Algo más?

- Que este amueblado con buen gusto, en un piso superior con buena vista de la ciudad…

- Óyeme… no soy tu agente de bienes raíces! – dijo Afro

- Jajaja pues pareces uno siempre con tu blusita rosa y tus pantalones blancos así que no te quejes.

- Idiota – murmuró Afro – Ok. De 3000 opciones ya lo bajamos a 3.

- Yeah!

- Este está en el barrio de Fitzrovia, dos arriba de la escuela, como a 20 calles, cerca del metro, un poco pequeño pero en un barrio tradicional y…

- No. Next.

- Ok. Esta este otro en el barrio de Clerkenwell, quinto piso, a 15 calles, cerca del metro, y…

- No. Este tiene la cocina junto al micro baño. Como voy a poder cantar mi opera favorita con mi cepillo de lufa si el baño de un avión esta más grande que la ducha de ese. Next

Afrodita respiro muy profundo mientras en su cabecita repetía: Es mi amigo.. es mi amigo…

- Y este…

- Next

- Qué? Por qué?

- Tiene decorado rosa. Van a creer que soy como tú.

Afrodita se rascó la cabeza.

- Ok. Cuanto estas dispuesto a sacrificar de tu presupuesto.

- Tengo que?

- Sí. Serán menos cervezas, menos restaurantes y menos viejas pero el lugar que quieres. – dijo Afro – No pensé que fueras tan… especifico en tus gustos.

- Ok. Ok. 3000 es lo máximo si paso tiempo en la biblioteca en caso que necesite libros que no tengo.

Afrodita palmoteo y siguió buscando. Media hora más tarde…

- Lo encontré. Y te quedas con este y me vale un cacahuate cualquier cosa que digas en su contra. Una recamara un baño, la cocina separada de las otras áreas, a 3 calles de tu escuela en tercer piso, con decoración minimalista en blanco y negro, con restaurantes y boutiques, y un sofá para cuando me des asilo y cuesta únicamente 2600 dólares al mes.

- Pero… pero…

- Nada! Es eso o te duermes en una banca del parque.

- Que malo eres conmigo – dijo DM haciendo pucheros – Te voy a acusar con mami Shaina jajajaja

- Que infantil eres! – lo regano aventándole la lap – busca tu solo entonces.

- No! Si lo quiero. Solo te estoy molestando.

- Ah bueno

- Ayúdame a obtenerlo. – pidió DM – Y… me prestas dinero?

- Qué? También eso?

- Anda! Tu siempre tienes tu guardadito.

- Si pero también lo voy a necesitar

- Pero estoy seguro de que me van a pedir los tres meses adelantados y no tengo tanto. – rogo DM – Además tendrás donde quedarte en la fashion week de Londres…

- Cierto…

- Oye… hablando de eso… ya buscaste tu donde te vas a quedar?

Afrodita se quedó callado. La verdad es que entre su castigo y todo lo que había pasado esos últimos seis meses no había hecho ninguna previsión.

- Si vas a Italia primero? – volvió a preguntar DM

- No se…

- Y si vas y pasas unos días en Nueva York?

- Como porque o para qué?

- Para que te compres garras bonitas y dejes ese pinche pantalón que me tiene hasta la madre

- Jajaja ay mi vido! Jajaja no es mala idea pero es muy caro.

- Pídele asilo a la amiga de Aioros – dijo DM mientras entraba a la página de la aerolínea para comprar su boleto

- Cual amiga de Aioros? – pregunto Afro extrañado.

- La ex de Shaka hombre! La rubia!... – Afro lo miraba sin saber a quién se refería – La del vestido estilo Cinderella de la boda de Milo!

Afro abrió grandes los ojos.

- En serio que la había olvidado.

- Duh…

- Pero ya me diste una ideota… idiota. Jajaja

- Uhhh… no le vas a hacer de chivo los tamales al angelito verdad? – pregunto DM preocupado. Esa sonrisita de Afro no decía nada bueno.

- No, pero si jijiji

DM termino de comprar su boleto en silencio y agradeció a Afro su ayuda retirándose para dejarlo "con su castigo". Esperaba no haber metido la pata en nada con su amigo o todos se le echarían encima.

Junio 18, 6 pm

Oficina del Patriarca

Santuario de Athena, Grecia

Shion terminó sus labores y se quitó su casco y su máscara. Estaba desvelado, con resaca y parecía que ese día no iba a terminar, pero finalmente lo hizo. Estaba a punto de salir a cambiarse a su habitación cuando sintió a Sammy y Mayura acercarse. Decidió esperarlas y salir.

Ambas no tardaron en aparecer en el umbral de la puerta e hicieron una reverencia antes de acercarse. Shion le abrió los brazos a Sammy como siempre y esta se acercó lentamente y en silencio contrario al escándalo y rapidez que la caracterizaba.

- Como te fue en tus clases hoy Sammy? – Pregunto Shion

- Excelente

- No es algo pretencioso decir eso?

- No cuando dices la verdad – contestó muy seria – Puedo retirarme? Necesito cambiarme para la cena.

- Adelante.

Sammy hizo una reverencia y lentamente se fue a su habitación.

Shion esperó a sentirla lo suficientemente lejos como para poder hablar con libertad. Se sentó e invitó a Mayura a hacer lo mismo.

- Eso que te dijo es cierto. No tuvo un solo error el día de hoy. – dijo Mayura

- Eso siempre es gratificante. – contestó

- No, no siempre. – dijo Mayura tomándose la libertad – Hoy te doy la razón. Sammy estaba en extremo extraña. No era la misma Sammy de siempre. Es… como si hubiera envejecido 10 años en pocos días. No sé si me doy a entender.

- Mmm… mejor explícate.

- Todos los ejercicios los hizo al pie de la letra, es cierto – Explico – Pero no puso su corazón en ello. Su mente divagaba. Estaba distraída, pero no jugaba. Era como si… fuera ajena a nosotras.

- Entiendo

- Ella es la primera siempre en salir corriendo a la hora del almuerzo y en el descanso, la primera en escoger con quien jugar. – siguió diciendo Mayura – Hoy se sentó en un rincón y se puso a tejer sin mirar o hablar con nadie hasta que fue la hora de regresar a las actividades.

Shion se hundió en su asiento y frunció el ceño.

- Esto no es un comportamiento normal, verdad? – preguntó

- No, no lo es. Pero intente leerla varias veces y lo único que tenía en su cabeza era una melodía tocada en el piano. – dijo Mayura – No sé qué es lo que significa eso.

Shion suspiró.

- Esto comenzó a pasar cuando vino Apolo – dijo Shion

Mayura se inclinó sobre el escritorio.

- Crees que se haya dado cuenta de que él es su padre? – susurró

- Si lo creo… y también creo que tiene el corazón roto.