Innocent

Cáp. XII Aun paso al Infierno…

Las cortinas se corrieron dando paso a un nuevo día, los anteriores habían sido demasiado ajetreados. Sin embargo Kaoru se sentía más tranquila, las pesadillas parecían haberse calmado y aquella noche concilio el sueño tranquilamente. Claro, después tener a su marido como invitado en su habitación. Suspiro mirando el otro lado de la cama, Kenshin se levantaba muy temprano, siempre antes que ella, lo cual implicaba que despertara sola. Últimamente la intimidad con él le resultaba menos vergonzosa e incluso agradable, sin contar que había despertado todo un mundo de nuevas sensaciones.

Bajo las escaleras encontrándose con Tae, la mujer correteaba desesperadamente a un par de chiquillas. Su sonrisa se ensancho, se encamino hasta el despacho de su marido, abrió la puerta sin producir ruido alguno, al hombre que custodiaba le hizo una muda seña de complicidad.

Frente al vitral se encontraba el pelirrojo acompañado de un pequeño niño. Kenshin explicaba cuales eran sus tierras y cual seria la responsabilidad del pequeño. Nuevamente se alejo dejando atrás esa escena. Ya sola en la biblioteca, se sentó en el escritorio tomando uno de los libros, las letras enlazadas comenzaron a convertirse en pensamientos.

Hacia ya siete días desde la muerte de su padre. Ahora sus dos hermanas y hermano vivían en Shinai. Kenshin había pedido que los llevaran de inmediato. La casa tenia un nuevo aire fresco y joven, uno que hacia ya mucho tiempo había sido olvidado para sus habitantes. Levantó la vista del libro, su rostro se reflejo en unos ojos marrones.

- Tsubame…

- Señora… lamento interrumpir, se que no debo hacerlo – la chica froto sus manos en señal de nerviosismo – al señor en verdad le molesta que lo haga

- No, no pasa nada, dime…

- Es solo que, Seta-san le ha enviado esto – la niña mostró una fina carta. Kaoru la miro perpleja, pero estiro la mano tomándola suavemente procurando no maltratarla – también mando decirle que tiene una sorpresa para usted, y me dio una dirección diferente…

- ¿A qué hora? – La señora Himura se levanto para dirigirse a la salida hablando aun

- Mencionó la misma hora

La sonrisa de Kaoru se acentuó, guardo la carta dentro del libro que antes estuviera leyendo y lo dejo en la mesita antes de la salida. Gran error…

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Era medio día, levanto la mano con el artefacto, las personas frente a él sonrieron, el hombre en la silla, la mujer a su costado y los niños a su alrededor. La luz y un nubarrón de humo sellaron aquella imagen, las figuras se destensaron mirándose unos a otros.

- Listo! – sonrió el joven haciendo una reverencia - la siguiente semana la mandaré a su casa Hon-sama

- Gracias

Kaoru observaba los movimientos dentro de su carroza, estaba segura de que él no había notado aun su llegada ya que se mantenían a distancia prudente. Repentinamente el giro atrapando su mirada, ella se sonrojo. La forma que tenia Soujiro de mirarla la hacia sentir desnuda, sentía que no había nada que pudiera ocultarle. El joven camino hasta ella, subiendo también a la carroza. Su vista se deslizo entre la de ella y la de la niña que la acompañaba.

- Un placer verla el día de hoy señora Himura – atrapo su mano llevándola hasta sus labios

- Seta-san debo insistir en que me llame Kaoru – el sonrojo acentuó su juventud. Retiro la mano tan suavemente que pareció mas una caricia – ¿cuál es la sorpresa que prometió!

- Este es un pequeño adelanto de esa sorpresa – entrego un gastado y ligero paquete

- ¿Adelanto?

- El resto querida señora deberá esperar un poco, antes visitaremos a una vieja amiga – el chico sonrió sin apartar la vista de la niña y dirigiéndose a ella hablo – creo que hoy tu también debes venir con nosotros, la sorpresa te incluye

La carroza paso de largo por la terrecería a las afueras del pueblo, a lo lejos lo que al principio parecía una macha en el horizonte pronto se convirtió una casa o mejor dicho una mansión, estaba cercada por varios hombres, al parecer soldados al mando de Kenshin. No le pareció extraño, muchas de las propiedades de aquella zona estaban igual.

Se detuvieron frente a la barricada, uno de los hombres se acerco haciendo una señal para que los otros bajaran la guardia.

- Venimos a ver a la señora – hablo la voz dentro del vehículo

- ¿Quién le busca!

- Yo… - esta vez interrumpió una voz femenina – abre paso inmediatamente, soy la señora Himura

El hombre palideció, sus ojos se fijaron en la puerta que permanecía cerrada. Los hombres que habían escuchado aquellas palabras permanecieron en la misma postura. Sin embargo tras algunos minutos de indecisión la puerta por fin se abrió.

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Entre tanto Kenshin había terminado sus labores en el despacho. Ahora solo deseaba poder pasar algunas horas en compañía de su esposa, aunque tan solo se tratara de mirarla leer en la biblioteca. Sus pies lo llevaron hasta donde creyó podía encontrarse ella. La habitación se encontraba sola, el ventanal abierto y el freso aroma a flores. Escucho las vocecillas de los niños acompañados por Tae acercarse por el pasillo, estaba a punto de preguntar al ama de llaves por su esposa cuando en descuido golpeo la mesa de la salida, el libro sobre esta fue a parar al suelo. Se inclino sosteniendo con una mano el objeto, sin embargo antes de enderezarse completamente una pequeña hoja se deslizo.

Levanto también la fina hoja, había decidido no leer el contenido, sin embargo, podría decirse destino o simplemente lo inevitable, desdoblo descubriéndola.

Tae se encontraba buscando de nuevo a los niños, era la doceava vez que lo hacia ese día, ya había recorrido varias habitaciones cuando un grito que hacia ya mucho no escuchaba atravesó sus oídos, todo parecía indicar que su amo la estaba llamando y que estaba molesto. Se precipito hasta donde provenía el sonido.

- ¡Tae! – la mujer se presento frente a él – ¿dónde esta la señora… donde esta Kaoru¡

Sus ojos se clavaron sobre la figura de su amo, de espaldas a ella, la habitación completamente destrozada, hojas sobre la mesa. Cartas que se vieron estrujadas cuando no hubo respuesta. Entonces distinguió, pequeñas gotas, caían del rostro de su amo hacia aquellos papeles. Kenshin volvió a hablar aun más furioso pero sin darse vuelta.

- ¿Dónde está esa maldita! – Tae se sorprendió

- Sa…salio hoy muy temprano, en su carroza privada – ella lo siguió con la mirada cuando él paso a su lado

- Llama a mi guardia, que la busquen y cuando la encuentre tráela a mi despacho – antes de salir y sin girarse continuo – manda un telegrama a Kyosato, dile que es urgente que lo vea

El rostro de Tae palideció, sus pies no se movieron. Kyosato era el encargado de una tierra lejana a donde ellos se encontraban, también era propiedad de los Himura, pero ella mejor que nadie sabía que en esa tierra la autoridad le pertenecía ese cruel hombre. El ama de llaves antes de ir a trabajar a Shinai había sido empleada de esas tierras. Las condiciones en que vivían todos los empleados eran deplorables, parecían más esclavos que verdaderos empleados.

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La puerta del recibidor se abrió, dándoles paso, el joven camino hasta llegar al primer sillón, con una mirada la invito a pasar. Kaoru avanzo mirando todo a su paso, era una amplia habitación, tenia aspecto de casa de veraniego, con ligeros toques ingleses que hacían aun mas extraño el sitio. La puerta se abrió nuevamente, sus ojos azules recorrieron aquella figura. Una dama en verdad hermosa, ligeramente más alta que ella, cabellos castaños, el rostro finamente maquillado. Tsubame permanecía apartada en un rincón, no había reconocido la casa hasta encontrarse dentro de ella, estaba llena de detalles que solo Himura-sama podía otorgar.

- ¡Que sorpresa! – hablo perezosamente la mujer sentándose en el otro asiento – y ¿quién eres tu jovencita?

- Yo…yo soy – Kaoru no supo porque pero repentinamente sintió que todo aquel poder que su esposo le otorgaba desaparecía – soy Kaoru

- Kaoru… - menciono el nombre con hastió – ¿y Kaoru tiene algún apellido?

- Si Yum,i ella es la señora Himura – ella no pareció sorprendida ante la interrupción del chico – deberías ser mas cortes¿sabes? Ella ha venido especialmente a conocerte

- Entonces he sido muy grosera… yo soy Yumi, sin ningún apellido ni honorífico, las mujeres como yo no lo utilizamos

- No comprendo – respondió confundida la señora Himura. Una estruendosa risa inundo la habitación

- Yo querida, soy una mujer de la vida flotante, una mujerzuela, pero no tienes de que preocuparte… quita esa cara, a mi no me importa que me digan de esa forma, todo lo que vez a tu alrededor es gracias a eso

- Yumi, porque no le cuentas de tu ultimo cliente…

Su sonrisa se amplio, pudo distinguir el sobresalto de la niña y la palidez de su rostro por aquellas palabras. Tsubame estuvo a punto de intervenir, incluso sin querer avanzo un paso. Sin embargo no había nada que pudiera evitar que su señora se enterara de la verdad, si ella llegaba a interrumpir lo único que podría hacer era explicar ella misma todo.

- Él… es el hombre mas maravilloso que he conocido… – repentinamente los ojos de Yumi se transformaron de hastiados a enamorados – no tiene defectos, su mal carácter se lo debe a un don de mando innato, es un guerrero, no teme en absoluto morir y porque sabe que eso no ocurrirá a manos de nadie, fue soldado de la ultima guerra, también por eso su cuerpo es simplemente exquisito

La sonrisa de Kaoru se estaba desvaneciendo con cada descripción, había algo… algo hacia a ese hombre tan parecido a su Kenshin.

- Además… es el mejor amante que he tenido – los ojos de Kaoru se dilataron, en un reflejo se levanto interrumpiendo la conversación – que pasa querida… ¿acaso conoces tu a este hombre? Una pista mas… él diseño esta casa

El aire se escapo en un suspiro de sus pulmones, sentía como si la hubieran golpeado, la habitación giro en torno a ella. Las cosas ahora estaban mas claras, sabia quien era el actual amante de Yumi; sintió los latidos de su corazón volver a su sitio. Sin embargo no permaneció por más tiempo en aquella casa, salio lo más rápido que pudo, seguida por la pequeña niña, una vez abordo la carroza, pidió que la llevaran lo más rápido posible hasta Shinai.

Desde la ventana principal las dos figuras que antes la acompañaban permanecían de pie observando aun como se alejaba el carruaje.

- Tan solo hay que esperar a que ella lo deje… no abra mas amor – murmuro el joven Seta sonriendo sin perder de vista el reflejo de la mujer. Ella en cambio tenia una expresión extraña, no era dolor pero tampoco alegría – estaré esperando para llevarla donde Shishio-sama

- Ahora el podrá volver conmigo ¿no es así?

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El carruaje volaba a toda velocidad, Tsubame miraba de vez en cuando a su señora, no había una sola lágrima en sus ojos, sin embargo el sufrimiento era claro. La niña noto entonces lo que miraba Kaoru, lo había desenvuelto hacia tan solo unos segundos. Era una fotografía, una gastada y vieja fotografía. En ella se mostraba toda una escuadra de soldados, alineados y sosteniendo sus armas en descanso, ahí de entre todos, en el centro… Battusai miraba ausente. Lentamente Kaoru levanto la vista, una tenue sonrisa en sus labios

- Lo sabias ¿no es cierto?… ¿todos los de Shinai lo sabían? – su sonrisa se transformo en un gesto de dolor – debí suponerlo… he sido tan tonta, una tonta creyendo que me amaba… que solo existía yo… ¿desde cuándo se ven?

- Desde antes que yo llegara a trabajar

- Mucho tiempo…

La carroza se detuvo interrumpiendo la conversación, un no llevaban ni la mitad del recorrido. La puertecilla se abrió dando paso a un corpulento hombre. Él se sentó a un lado de Tsubame abriendo paso a otro que se coloco en el opuesto.

- Señora tenemos la orden de escoltarla hasta Shinai - No hubo respuesta

La tarde había caído cuando la carroza entro a Shinai. No había empleados merodeando como siempre, las luces también estaban apagadas haciendo toda la construcción aun mas tenebrosa. Kaoru bajo antecedida por uno de sus guardias, entonces reparo, había una guardia de mas de veinte hombres, ellos la habían escoltado, cual si fuese un criminal. Sin embargo ni si quiera noto cuando uno de ellos la tomo por el bazo y la condujo por la casa hasta el despacho de su marido…

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Kenshin permanecía sentado con las luces apagadas, sus ojos ámbar eran lo único que resplandecía. Había vuelto a ser el cruel Battusai, y ahora más que nunca estaba sediento de sangre, pero no cualquiera, sino la de aquella que había provocado todo su sufrimiento.

Sus oídos se afinaron cuando escucho los pasos acercándose a la puerta. Entrecerró los ojos cuando esta se abrió dejando filtrarse algo de luz, pero todo fue momentáneo, el reflejo se disipo con un golpe seco. Entonces enfoco la figura que se encontraba frente a él, tenia el aspecto de una niña, inocente y desvalida.

- ¿Dónde has estado Kaoru? – hablo lentamente pero con agresividad – mejor debería preguntar… ¿con quién?

El silencio se acentuó. Las palabras se encontraban atascadas en su garganta, había evitado llorar en el camino para poder enfrentarlo sin que él notara su dolor. Desvió el rostro evitando tener que mirarlo directamente. Kenshin en tanto tomo aquello como una evasiva, una afirmación a lo que más temía. Con ira se levanto y caminando hasta ella se le paro en frente.

- ¡Maldita sea, mírame cuando te hablo! – la tomo con ambas manos. Los ojos de ella abarrotados de lágrimas – ¿creías poder engañarme… a mi!

- No… no se de que estas hablando – furiosamente el pelirrojo se giro evitando mirarla – no entiendo… yo debería

- ¡Cállate¡No tienes derecho a decir nada! – su mano se elevo estrellándose en el rostro de la chica dejándola tendida en el piso – yo… te abrí mi casa, te despose y ¿así es como me pagas, comportándote como una mujerzuela!

Kaoru permanecía tendida en el piso, le dolía tremendamente el rostro, la confusión nublando su razonamiento. Hacia tan solo un momento esperaba ser ella quien pidiera explicaciones. De sus ojos brotaron lagrimas "¿acaso me castiga por enterarme de lo de su amante?" reflexiono aun inmóvil "¡no… él cree que yo…!" sus sentidos se reactivaron "si tan solo pudiera explicarle" pero sabia que eso seria prácticamente imposible estando así su marido, pero no había otra salida. Coloco sus manos en el piso empujando su cuerpo para levantarse, pero su acción se vio interrumpida. El pie de Battusai aprisiono su espalda regresándola a la misma posición.

- ¡Ahí es donde perteneces… debí dejarte donde te encontré! – escupió oprimiendo con mas fuerza hasta lograr que ella gimiera – en aquella pocilga, con tu familia muerta de hambre

- Ken…shin… por… favor

- ¡No me llames así…! - retiro de golpe el pie escuchando atentamente sus desesperados intentos por tomar aire. Con un esporádico movimiento, la tomo del vestido levantándola - ¿sabes que me encantaría hacer en este momento?

Kaoru se encontró cara a cara con el ser que atormentaba sus noches desde que era niña, aquellos dorados ojos sedientos del mas puro dolor, sintió sus manos recorrer desde su espalda hasta su cuello, acariciando lentamente con sus pulgares. Ella cerro los ojos "quizás todo a terminado" pensó destensando sus músculos. Pero eso era lo que Battusai buscaba, repentinamente sus manos oprimieron dejando sin aliento a la joven.

- Vez lo fácil que es querida – cerro los ojos disfrutando el momento. Había sido tan rápido que no permitió ni una queja – podría oprimir hasta que simplemente dejaras de respirar

- …Ke… - se esforzó con las lagrimas fluyendo libremente por su rostro

Kaoru sintió la desesperación de su cuerpo por la falta de oxigeno, sus pies despegándose del piso, sus manos que antes apretaban las muñecas de su esposo lentamente fueron perdiendo fuerza. Sintió el vomito atascado en su garganta impidiéndole aun mas el paso de aire y las gotas de sudor mezclándose con las saldas lagrimas. Sus ojos se cerraron preparándose.

- No, no creas que será tan fácil – la chica sintió su cuerpo chocar contra el piso a falta de agarre – Kaoru… odiaras el día en que te atreviste a engañarme, rogaras porque esta noche fuera tu muerte

Sus manos se apoyaron en el piso, había vomitado y ahora luchaba desesperadamente por obtener aire. Entonces escucho los pasos acercarse nuevamente, Kenshin la tomo por el brazo obligándola a levantarse y seguirle. Kaoru sintió el choque del aire nocturno contra su rostro, fuera su carruaje les esperaba junto con la misma guardia que la había escoltado.

- Llévala donde Kyosato – hablo a uno de los hombres sin soltarla aun – sin detenerse

- ¿Solo a la señora… no llevara cosas?

- No las necesitara – el pelirrojo apretó aun mas la muñeca de la chica mientras la empujaba hacia el frente

- Kenshin… por favor déjame aclarar esto – lucho por soltarse

- ¡Cállate o acaso quieres que todos se enteren de la vergüenza que eres para mi!

Aun a rastras la condujeron subiéndola al carruaje.

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La noche había caído hacia varias horas, a temprana hora había pedido a todos los empleados que pasaran el día fuera de casa, él tenia un asunto para ocuparse… Battusai lo tenía. Se encontraba ahora sentado en una enorme cama hace tanto que no vengo aquí, no había motivos… ahora todo esta perdido sostuvo con firmeza el revolver entre sus manos acaso no me ambas Kaoru… también yo debería ser castigado y por eso levanto el arma hasta su rostro entre sus ambarinos ojos.

Continuará…

Notas de Yuky: hola, hola ,hola a todos, ya estoy de regreso! Si, deben de estar pensando que es muy pronto, pero todo ha sido un error de la editora sustituta…¬¬ que por cierto olvidó subir el capítulo que debería de haber sido subido hace un mes. La verdad es que hasta que le dije "bueno Kazy ya no me duele tanto el brazo, voy a actualizar" ella por fin recordó el fic y subió el capi, así que les doy una sincera disculpa y ahora que estoy de vuelta prometo que no nos atrasaremos.

En fin, que les ha parecido el capi, intenso ¿no? la verdad es que de este capítulo en adelante todos los fans de Kaoru nos van a odiar pues digamos que va a sufrir un poquito, y no se preocupen si no entienden muchas cosas, o si ven que algo no encaja, como ya lo hemos venido diciendo (o se supone que Kazy debió mencionarlo) a partir de este momento toda la maraña que hemos armado, se va a empezar a desarmar ok? Así que no se desanimen.

Bueno ya! Vamos a contestar los reviews porque por lo visto a Kazy también eso se le pasó y aunque solo vamos a contestar unos cuantos por falta de tiempoesperamos que los demás nos entiendan si nos les contestamos sus reviews (no es por mala onda)

Verito S.: muchas gracias por tu review, en verdad es una pena lo del bebé pero ya más adelante verás que pasa y esperamos no nos mates, porque con este capítulo podras ver lo que le espera a Kaoru.

Misao Hx: Bueno en realidad ella no lo sabia porque no estaba embarazada, lo que pasó es que Misao corrió el rumor de que lo estaba pero ella solo estaba enferma del estómago, por eso ella nunca se daba cuenta de las prohibiciones de Misao.

Tsuki-Ra. bueno todo lo del embarazo se dio por suposiciones de la loca de Misao, por supuesto que en esos tiempos se enteraban ya hasta mucho después. Gracias por informarnos de tus fics, ten por seguro que los vamos a leer. en cuanto al otro fic...ya se nos había olvidado actualizarlo, pero ahora que nos lo recuerdas ten por segura una pronta actualización. Muchas gracias por leernos y por tu review, cuídate.

gaby-hyatt: tu nuestra lectora fiel...bueno perdón por no contestar antes tus reviews, aquí va la contestación para los dos ok? Para empezar, creemos que ya te diste cuenta que ya le pusimos a "alguien" a Kaoru para que le de su cucharada de su propio chocolate a Kenshin. en cuanto a lo que tiene que ver Makoto Shishio en la historia, pues más adelante se contará lo que en verdad pasó, por lo pronto te damos una pista: Shishio quiere quitarle a Kaoru a Kenshin.

Dark Lid´ Bride: Si efectivamente Yumi es secuaz de Shishio. yuky te agradece de antemano (quemada jajaja) tus buenos deseos. Esperamos que nos sigas leyendo y que se vayan deshaciendo tus dudas, si no nos avisas eh?

Ghia-Hikari: Bueno, desgraciadamente no le va a ir tan bien a Kaoru, pues como ves, el sufrimiento a penas comienza. Estas en todo el derecho de odiar a Battusai pues lo que va a hacer con ella es demasiado vil.

Delaila: Bueno la que va a sufrir en este caso va a ser Kaoru, sentimos mucho nosotras también portarnos tan mala onda con ella pero ya que estamos aquí...

Dark-Natt: Chica como has estado! Bueno te vamos a contestar los dos reviews vale . Nosotras tambien esprabamos tus actualizaciones, te agradecemos que nos sigas leyendo. Jjajaja en cuanto a lo de el padre quemado de Kaoru pues...fue completamente idea de Kazy que eso estuviera dedicado al accidente que sufrio Yuky (Yuky: que por cierto no es nada gracioso pues tengo una mega cicatriz de 30 centimetros por todo el brazo eh?) en si queríamos borrarlo del mapa y cuando no supimos como inventamos miles de situasiones, pero esta fue la que más encajo (además de que Kazy se aferró ¬¬) Muchas gracias porque siempre nos apoyas y nos esperas con lo de la actualización, pero como ahora Yuky está de vuelta, ya no pasará tan seguido que el fic se quede atascad. tu no te preocupes que puesdes contarnos todo lo que tu quieras, puedes confiar en nosotras. Que bueno que sea feliz pero recuerda que el fin no justifica los medios Eh!. Bueno chica cúídate mucho, esperamos que te haya gustado el capi.

hitoki-chan: perdónanos por confundirte, cualquier duda que tengas nos la puedes consultar y trataremos de contestartela. Esperamos que en los próximos capis tus dudas queden resueltas.

monika-san: muchas gracias por el dato de Broken pieces, en verdad nos es de mucha ayuda. Nosotras tambien sentimos lo del bebé, pero es que no era su tiempo, quizá más adelante lo sea.

Kaoruluz: como ves, Kaoru si se enteró de su amorio, pero Kenshin malinterpreto las cosas con lo del fotógrafo y pues...se portó muy duro con Kaoru.

yumi-sama: si Yumi si es secuaz de Shishio , sentimos en verdad haberte hecho bolas, pero ya verás que más adelnate todo se va a resolver y toda la verdad va a salir a flote, además también estamos nosotras para aclarar las dudas, no dudes en preguntarnos

Mitsuki Himura: jajaja bueno sentimos hacer a Kenshin tan malo pero es que aveces se pasa de bueno y queriamos darle otra imagen y pues ya ves que Kaoru si tuvo que irse.

Ok ok Aquí esta la contestación a algunos cuantos. GRACIAS POR LEERNOS Y POR TODOS SUS REVIEWS.!

JA NE.