Capítulo 173
Julio 15, 4p.m.
Casa de Ares
Bagdad, Irak
Ares se tomó el licor del vaso y dejo la botella y el vaso en la mesita más cercana. Había escuchado bien? Keres embarazada? Respiro hondo y contó hasta 20 antes de empezar a caminar hasta la habitación donde se encontraba porque si no lo hacia, hubiera corrido a matarla.
Durante el camino, se preguntó de que forma la tía abuela Nix lo torturaría por no cuidarle el tesorito a Keres. Se lo había advertido cuando la dejo a su cuidado y 5000 años más tarde, no creía que hubiera cambiado de opinión.
Nix, o la tia abuela Nix como la conocían en la familia de Zeus, era en realidad la tia bisabuela junto con Gea, o Hemera, aunque ninguna de las dos ultimas bajaba a la tierra nunca y esto hacia que la visita de Nix cada seis anios, fuera todo un acontecimiento, sobre todo para sus hijos.
Ares no veía a Keres como a su tía abuela sino como a una prima hermana debido a que crecieron juntos, razón por la que la jodia, fregaba, ordenaba y hasta golpeaba a veces y ni en sus más locos sueños se le hubiera ocurrido echársela al plato como Apolo había insinuado en su coraje. Hubiera sido demasiado fácil, pero simplemente no le gustaba. Era Demasiado plana y le tenia suficiente miedo/demasiado respeto a su madre, y ahora, si Apolo esparcía la noticia, iba a ser su palabra contra la de él, quien desde luego no tenía buena reputación con ninguno.
Abrió la puerta de la habitación sin tocar y vio a Keres hecha un ovillo en una orilla de la cama asustada de su reacción y llorando también por la sorpresa. Tal vez esperaba gritos y golpes de su parte, pero Ares sabía que si quería llevar la fiesta en paz hasta con su madre, tenia que tratar bien a una mujer embarazada pues iba a estar muy sensible por las hormonas los próximos meses.
- Tampoco lo sabias verdad? – le preguntoo Ares al ver el miedo en sus ojos.
Keres negó con la cabeza tomándose la cara con ambas manos y El se sentoo en la orilla.
- Acaso tus hermanas nunca te dieron algún consejo para que esto no pasara? – pregunto Ares suavemente – O tu madre… no se… hasta Eros!
Keres se secó las lágrimas con el dorso de la mano y volvió a negar con la cabeza.
- Soy la mas chica y… ellas casi no me hablan – Logroo articular
- Cierto. Y estarías loca si les hubieras preguntado a tus hermanos – dijo Ares antes de suspirar – Sabes lo voy a pedirte que hagas verdad?
Keres lo miró con furia. Si acaso era lo que ella estaba pensando…
- No me voy a deshacer de él! – Le gritó atreviendoce a aventarle una almohada y abrazando otra – Sere madre soltera, trabajare el doble y lo hare un berseker digno, pero no me obligues!
Ares esquivoo la almohada con facilidad pero se extrañó mucho. Acaso no lo conocía lo suficiente para que supiera que no era capaz de pedirle algo así?
- Me refería a que deberás renunciar a tu puesto e irte de aquí. – contesto Ares - Busca al padre de tu hijo para que los mantenga y …
- No! El… no puede saberlo! – dijo Keres rápidamente.
- Y por qué no? – pregunto curioso
Keres guardó silencio y bajoo la mirada para abrazarse las rodillas.
- No podre ayudarte si no me dices que sucede. Por qué es hijo de tu esposo el mortal verdad?
- No he estado con nadie más – susurroo Keres algo triste
- Pues aun así tiene responsabilidad en esto. Buscalo y que se haga cargo de ustedes. – insistió Ares
- Es que…
- Que?
- Él no quería casarse conmigo. Y luego la pócima de Isis…
Ares se levantó de la cama como resorte.
- Ahora que hizo esa mendiga vieja loca? - gritoo
Keres iba a comenzar a llorar y Ares se echó para atrás.
- Ok… no le digo así. Solo dime de que pócima hablas.
- Yo no sabía que el tenia alguien más. Te lo juro! – respondio Keres
Ares abrió los ojos muy grandes al comprender de que estaba ella hablando asi que la tomoo de los hombros y la sacudió un poco.
- Lo obligaste? Contesta!
- Si! Si lo hice!
- Dímelo todo Keres o juro que te mando con tu madre en este instante! – gritoo soltándola.
Keres se tranquilizó lo suficiente como para contarle como llevaba mucho tiempo enamorada de él, que aprovechándose de un descuido, en el usoo algunos menjurjes de Hypnos y asi había podido secuestrarlo junto a Isis y de ahí lo había manipulado para casarse, para consumar y antes de que ella pudiera disculparse y retractarse, él había desaparecido gracias a su ex amiga. Jamás mencionó que era Shaka, el santo dorado de Athena, ni que lo había rebautizado con el nombre de Aleix. Sabía que Ares era lo suficientemente HDP para aprovecharse de eso para joder a Athena y ella estaba en contra de eso a pesar de trabajar para él.
Ares caminoo como león enjaulado analizando la situación unos minutos antes de pararse frente a ella:
- Keres… De todas las estupideces que has hecho en todo el tiempo que has estado conmigo, esta se lleva el premio mayor – dijo Ares en tono molesto – Entiendes la magnitud del problema en el que te metiste y me metiste por tu maldita calentura?
- Lo siento
- Tu madre estará en la tierra en quince días exactos. Sabes bien que no puedes faltar a tu reunioncita familiar. – le dijo aun paseándose de un lado a otro
- Lo sé – dijo abrazándose asustada
- Y no solo tu madre estará ahí. Mis padres fueron invitados y tus 17 hermanos ya confirmaron.
Keres comenzó a temblar. Llevaba años molestando a sus hermanos y esta vez no se la iban a pasar. En cuanto la vieran se le echarían todos encima sobre todo Hypnos y su ultima bromita.
- Ayúdame por favor! No sé qué hacer! – dijo corriendo a abrazarlo de las piernas hincándose en el proceso
Esto tomó por sorpresa a Ares. Keres era orgullosa. En todo este tiempo cuando la llegaba a golpear no gritaba, no lloraba. Su trabajo lo hacía a cabalidad y cuando quería, podía ser su mejor aliada pero hasta ese día, después de miles de años, era la primera vez que suplicaba por su ayuda. El solo pudo apiadarse de ella y la hizo levantarse mientras le acariciaba el cabello de forma consoladora.
- Ya veremos que se me ocurre de aquí a entonces, pero desde luego ya no podrás trabajar así que tendrás que nombrar a un reemplazo. Y sigo insistiendo en que tu "esposo" tiene que saberlo de todos modos.
- No. Aleix debe ser libre para amar a la chica que…
- Aleix?
Keres se tapó la boca. Diablos! Se le había salido el nombre sin querer.
- Aleix? No suena griego. – insistió Ares
- No dije nada – dijo Keres – Olvida que alguna vez lo dije!
- De que me serviría de todos modos el puro nombre? Ahora regresa a la cama y descansa que no quiero que algo te pase.
- No me siento mal – replico Keres
- Dije a la cama – Gruñó Ares en un tono que hizo que Keres corriera a esconderse debajo de las cobijas. - Te vas a quedar ahí hasta que sepa a donde te voy a mandar mientras tanto, entendiste? Ya enviare a alguien más a limpiar el regadero y a enviarte algo de almorzar? Que se te antoja? Fresas con chocolate? Te enviare unas. A todas se les antoja eso. – dijo Antes de salir azotando la puerta.
Keres pudo escuchar que Ares comenzaba a dar órdenes desde el pasillo y a varios comenzar a correr como desesperados. Ojala hubiera hecho bien en pedirle ayuda, pero si había alguien que pudiera ayudarla a resolver el problema era él. Nadie más era tan manipulador y perverso que pasaría como el más fiel de los corderitos.
Julio 15, 8 pm
Aeropuerto Heatrow
Londres, Inglaterra
Afro, DM y Phil llegaron al aeropuerto esperando que el vuelo de Afro hacia Paris saliera pronto. DM le había preguntado a Afro que por que no había usado el tren a lo que el Pisciano le había dicho que prefería viajar una hora, a casi tres así tendría tiempo de acostumbrarse y tener su sesión de belleza antes de la sesión de fotografías de la mañana siguiente.
- Te estas tomando tu papel demasiado en serio – dijo DM mientras se sentaba en el suelo con las piernas cruzadas frente a Afro para sorpresa de Phil, quien aún no había conocido su verdadera naturaleza sencilla.
- Creo que ya para hoy deberías de saberlo no? – dijo quitándose cuidadosamente un mechón de su cara – Espero que cuando regrese no encuentre un chiquero en la casa.
- Oh vamos! Acaso hay un desorden ahorita?
- Porque hice el aseo antes de salir y así lo quiero encontrar cuando regrese – advirtió Afro – Además, tengo las cervezas contadas. No puedes tomar más de una como ya quedamos
- Pero…
- Te deje comida para toda la semana en el congelador y la lista del mandado en la puerta del refrigerador. Ya sabes dónde, y de que marcas me gustan y no quiero pretextos para encontrarlo vacío porque el dinero está en el cajón – siguió diciendo Afro
DM estaba de mil colores mientras veía de reojo a Phil disimular una carcajada.
- Me estas avergonzando – susurro DM con una mirada de pistola.
- Por mí no se detengan. No me gusta meterme en el matrimonio de mis amigos – dijo Phil recibiendo un zape de parte de Afro poniendo cara de interrogación.
- Querías ser parte de nuestro cerrado círculo de amigos? Pues paga el precio! – reclamó Afro – Además tal vez tienes razón solo es una semana. Que tanto desmadre puedes hacer en ese tiempo.
DM lo miro como pidiéndole que lo retara un poquito mas pero Afro no dijo nada.
- Puedo…?
- No, no puedes meter a ninguna mujerzuela – negó Afro
- Y si…?
- No, no puedes tener fiestas.
- Y que pasa si…?
- Vas y pagas un hotel.
- Sabes que no me dejas divertirme, verdad rosita? – dijo DM cruzándose de brazos haciendo berrinche – Mejor quédate por allá así me dejas vivir mi vida.
- Yo creo que la razón por la que precisamente estas en la escuela, es porque no estaba ahí para frenarte cuando lo de España…. Italia…
- OK OK ya entendí – dijo DM levantándose del suelo al escuchar que llamaban a los pasajeros del vuelo de Afro – No tienen que enterarse todos de mis pequeños errores.
Afro lo abrazó y también a Phil.
- Ya fuera de broma, no te meterás en problemas con los Heinstein verdad? – reafirmó Afro
- No. No me interesa interactuar con ellos. – declaro DM sinceramente
- Me parece bien. No olvides meter esos documentos que te deje a la oficina de patentes y llamarle a Shura a ver cómo va todo.
- No jefe. – dijo haciéndole un saludo militar
Afro se despidió de ellos con una sonrisa y entró a la zona de abordaje. Phil entonces pudo dar rienda suelta a sus risas que tenia guardadas y que lo hicieron caer de rodillas en el suelo mientras que DM cruzado de brazos, zapateaba con impaciencia.
- De que te estas burlando ahora? – preguntó DM
- De que no se si parece tu papaa o tu mayate Jajaja – respondió quitándose una lagrima de risa
- Y eso que no lo has visto en sus peores días – respondió el canceriano – Hoy anda de buenas porque va a realizar su sueño de estar en el mundo de la moda.
- Pero si es, verdad? – preguntoo Phil mientras volteaba la mano en un ademan gay - tu sabes…
DM se puso serio mientras ayudaba a Phil a levantarse y caminaban hacia la salida. La verdad es que por muy afeminado que fuera Afro, no le conocía nada que lo confirmara y eso a veces lo sacaba de quicio.
- 20 años de conocernos y no tengo la menor idea – contesto DM para sorpresa de Phil - Aunque el tampoco lo aclara deliberadamente.
- Bueno, supongo que eso es bueno. Mientras no te importe ni cambie su amistad…
DM negoo con la cabeza.
- No Phil. Afro más que mi mejor amigo es mi hermano. Ambos daríamos la vida por el otro y el que sea o no sea gay no cambiaría eso – afirmó DM – Además, crecimos con cientos de otros varones. Supongo que ya hubiera habido algún rumor o escandalol y yo no recuerdo…
DM abrió grandes los ojos cuando vio a dos chicas en minifalda, con botas a las rodillas, ombliguera blanca y sus maletas en la mano. Ambas eran delgadas, con piernas largas y bien torneadas y debían medir 1.75 pero una de ellas era rubia natural casi nórdica y la otra tenía el cabello negro azulado. De espaldas parecerían gemelas pero de frente eran completamente distintas.
Dm le dio unas palmaditas a Phil en el estómago para que viera lo mismo y este volteó:
- Tatis! – gritó Phil corriendo hacia la rubia.- No te esperaba aun!
Tatis? Que no se llamaba así la novia de Phil que siempre estaba ausente y de la que siempre hablaba? A poco ese bombón era la novia de su amigo?
- Phil! – grito la chica botando la maleta para correr a los brazos de Phil quien para sorpresa de DM lo tomó a besos y cachondeos. – Tenía muchas ganas de verte.
La otra chica se acercó a ellos con ambas maletas.
- Ejem, ejem. – dijo la castaña para que se separaran – Este no es ni el lugar ni la hora.
Los dos chicos se separaron algo avergonzados, pero DM podría ver el cambio que la chica realizaba en su amigo. Hasta su postura al caminar cambiaba. Definitivamente ella lo hacia feliz.
- Discúlpalos por favor – dijo la castaña dirigiéndose a DM – No se habían visto en dos semanas. Soy Yelina Plushenko, compañera de la zorrilla esta.
- Ángelo Cancro pero me dicen DM. – dijo el canceriano pensando en que ahí había carne fresca para jugar – No te preocupes. Me alegra verlo feliz. Puedo ayudarte con esas petacas, digo, maletas?
Yelina comenzoo a reir.
- Vaya! Tenemos un caballero por aquí! – dijo Yelina sonriendo mientras entregaba las dos maletas que DM cargo con gusto – Desde cuando conoces a Nerdie?
- Quien?
- Phil. Es un nerd bien hecho y asi le digo yo – dijo Yelina encogiéndose de hombros
- Casi dos semanas. Estamos juntos en la escuela de verano. – contesto DM
- Ahhh pero tú no pareces un nerd – aseguró Yelina – De hecho más bien pareces un Bully
- En serio? Interesante. Te gustaría comprobarlo? – dijo DM coqueto
- Por qué no?
Los cuatro salieron del aeropuerto para compartir una cerveza en el bar preferido de las chicas. DM se la paso coqueteando con Yelina y a pesar de todas las advertencias de Afro, terminaron en su departamento. Total. Tendría como 7 días para limpiar y desaparecer cualquier rastro para que Afro no se enterara porque Afro enojado, era como traer una espina de rosa pinchándole el trasero.
Julio 16, 8 am
Comedor del Patriarca
Santuario de Athena, Grecia
Aioria, Aioros, Shaina, Kiki, Mist y Sammy habían estado platicando antes de entrar al comedor acerca de donde podían ir los chicos a comprarle algo de ropa a Mist ahora que el castigo de Aioria terminara en unas cuantas horas y ya estaban sentándose a la mesa para desayunar cuando Shion entró.
- Buenos días a todos – dijo de mucho mejor humor
- Buenos días Maestro Shion – dijeron todos al unísono antes de dejar que el patriarca se sentara primero por respeto y luego ellos.
- Aioria, no esperaba encontrarte aquí arriba aun! Acaso perdiste los estribos después de que me fui? – dijo Shion mientras untaba su pan tostado con mantequilla, haciendo que el caballero de Leo se ruborizara un poco
- Si bueno… No se puede domar al león en un dia – respondio Aioria sonriendo
- Lo se, pero me da gusto que al menos lo intentes. Quien es esa princesita sentada en tus piernas? No me la has presentado.
Mist se debatió en los brazos de su papaa para que la bajara y cuando Aioria lo hizo, esta corrió a los brazos de Shion quien la cargo con ternura.
- Le presento a Mist… mi hija – dijo Aioria con un nudo en la garganta.
- Hei Mist. Velkommen hjem.– dijo Shion para beneplácito de Mist que por fin comprendia todo lo que un adulto le decía en ese lugar.
Lo miró curiosa tocando su cabello y sus cejas antes de comenzar a hablar en su lengua natal con Shion explicándole todas sus aventuras esos dias y preguntándole cosas básicas de todas las personas que había conocido hasta ahora y por su mama y su tio Ikki.
Todos miraban curiosos la interacción entre ellos dos excepto Sammy, quien comía en silencio su desayuno. Shaina lo notó por lo que en lo que los varones se entretenían con Mist, ella le preguntó en voz baja:
- Por qué estás tan callada Sammy?
- Por que a ella la dejan hablar en la mesa y a mí no?. – dijo muy seria – Eso no es justo. Yo llegue primero
Shaina sonrio. Una escorpioncita celosa? Nahhh. Inconcebible.
- Porque ella es un bebe todavía y además solo estará por poco tiempo – le explicó
Sammy dejo su comida.
- Se va a ir? – pregunto en un tono mas triste.
- Bueno, ella tiene que irse con su mama, pero si todo sale bien regresara muy pronto.
- Pero ya no voy a tener con quien jugar de nuevo – respondio Sammy haciendo carita triste
Shaina le sonrió.
- Ahora que el maestro llego, podremos volver a jugar por la mañana antes de tus clases y antes de dormir. Quieres?
La carita se le ilumino a Sammy y volvió a sonreír mientras asentia y terminaba su desayuno junto a Shaina.
Shion platicaba con todos en la mesa poniéndose al día en entrenamientos y cosas ambiguas sin entretenerse en detalles escabrosos o temas delicados que ya tocaría con cada uno, mientras le daba de comer a Mist pacientemente.
Cuando todos hubieron terminado, Shion pidió a Aioros quedarse un momento a platicar con él mientras los demás iban a sus actividades diarios y Mist corría para jugar con Sammy.
- Platicame Aioros – dijo Shion - La guerra en el zoológico continuó cuando me fui?
- Guerra? Cual guerra? – pregunto Aioros inocentemente
- Entre Shaina y tu hermano desde luego
- No. Afortunadamente y justo a tiempo parece que hicieron las paces. – dijo Aioros
- Hicieron los deberes que les deje? Posiblemente con la llegada de Mist…
Aioros sabia que lo único que quería era un pretexto para seguir teniéndolos castigados, asi que no le dio el gusto.
- Han estado muy dedicados a eso – dijo Aioros – Se hubiera sentido orgulloso de ellos. De los dos por igual.
Shion se quedo callado unos segundos.
- Y cuéntame entonces, se confirmó la paternidad de Aioria?
Aioros se ruborizo un poco.
- Shaina abrió el sobre con la respuesta de la prueba.
- Entiendo… - dijo Shion muy serio
- Fueron causas de fuerza mayor! – se apresuró a decir Aioros – Le aseguro que ella nunca se atrevería a abrir su correspondencia de otro modo.
- Eso ya lo sé. Pero… cuéntame de esa "causa de fuerza mayor". Cómo fue? – pregunto Shion
Aioros procedió a contarle lo sucedido días antes y como Shaina con ayuda de Minos habían podido darles un respiro.
- Espero que no te sorprenda que el cheque mensual de Aioria traiga un significativo descuento los próximos meses – dijo Shion tranquilamente.
- Que? Por qué?
- No esperaras que acepte que Minos trabaje para bienestar de nosotros gratis verdad? – dijo Shion sirviéndose un poco de agua
- Pero Shaina dijo que…
- Shaina no estará aquí siempre y a ti no te gustaría estarle haciendo trabajos gratis a quien hasta hace poco era tu enemigo solo por compromiso – dijo Shion sin elevar el tono de la voz – Y además no quiero deberle nada.
Aioros se quedo en silencio unos segundos y suspiró. Shion tenía razón.
- Entonces descuéntemelo a mí por favor – pidio Aioros – Aioria estará muy gastado si Lyfia acepta lo de la custodia compartida y que le pase pensión.
- De acuerdo, te lo descuento a ti. – aceptó Shion – Ahora cuéntame que otras novedades hubo en mi ausencia.
Aioros le contó todo lo que recordaba, haciendo que Shion se sintiera menos culpable de agarrar el día libre el día anterior, después de todo, quien sabe hasta cuándo podría volver a tener todo un día de paz absoluta y Aioros debía comenzar a foguearse en los problemas que heredaría proximamente.
Julio 16, 11 am
Palacio Valhala
Asgard, Noruega
Hilda estaba en su habitación vistiéndose frente al Espejo. Al final, se puso su abrigo para sus oraciones del Medio día ante la estatua de Odín. Se acomodaba los guantes en sus manos y acariciaba su pancita con ternura.
- Voy a tener que comenzar a tejerte algo extra para el frio, hijo mío, aunque tal vez deba abrigarme un poco más ahorita por si las dudas. No quisiera que volvieras a enfermarte por mi culpa.
El ruido de cosas azotándose contra la pared al final del pasillo la hizo correr hacia allá. Se dio cuenta que el ruido venia del despacho de Siegfried por lo que tocó a la puerta.
- Adelante!
Hilda abrió la puerta y vio como todo el despacho estaba desordenado.
- Por qué tanto escándalo? Sucede algo Malo? – Preguntó Hilda
- Tu hermana me va a matar de un coraje! – dijo Siegfried – No sé cómo o por qué, pero esto nos dejaraa muy mal parados con los vecinos si llegan a enterarse!
- De que hablas? Ahora que hizo mi hermana?
Por toda respuesta, Siegfried le extendió la Revista donde salía Fler y Thes con el título "Las nuevas promesas de la moda salen del closet".
- Y mejor ni leas el articulo o te dara un ataque cardiaco – dijo Siegfried enojado - Esta vez, Fler fue muy lejos.
Hilda vio la revista y comenzó a reír a carcajadas en silencio mientras se desplomaba en la silla más cercana con la cabeza viendo hacia abajo.
- Ay por Odín! – dijo corriendo hacia ella – Perdón. No debí darte así la noticia. Estas bien? Habla por favor Hilda!
Le levantó la cabeza y para su sorpresa, Siegfried se dio cuenta de que estaba riendo.
- Ay no! Ya se volvió loca! – dijo corriendo por un vaso de agua y acercándoselo a los labios.
Hilda rechazoo el vaso.
- Jajaja no. Estoy bien Jajajaja Es que… Fler tiene cada ocurrencia Jajaja - dijo
Siegfried la miro escéptico.
- Acaso no entendiste lo que quisieron decir? Digo porque mi francés no es muy bueno pero…
- Si… y también entiendo que esté experimentando solo por despecho. – dijo Hilda dejando a un lado la revista – Ademas se veía muy chic y a la moda, no lo crees?
- Que pasó con la hermana sobreprotectora que todos conocíamos? – pregunto su esposo
- Se quedó en Holanda, amor – dijo muy seria – Ser así solo condujo a mi hermana por el mal camino. Ella ya no tiene 17. Ya sabe lo que hace y que todo tendrá sus consecuencias.
Siegfried se sorprendió un poco.
- Si pero las otras familias reales…
- Las otras familias reales no tienen a mi valiente hermana echándose a todo el mundo en contra solo por su estúpida venganza hacia aquel que le congeló el corazón – declaró Hilda – Si ella quiere irse por ese camino, yo la apoyare. Si quiere regresar y retomar donde lo dejamos, también será bienvenida. Ya no más pleitos entre hermanas Siegfried. Ya no lo resistiría.
Su esposo se quedó callado. Que tanto hubieron platicado ellas dos cuando las dejaba a solas?
- Además tu no estas así nada más por lo de Fler verdad? – pregunto Hilda
- No. El asunto de Mist me trae cabreado. – admitió Siegfried – Lyfia no quiere compartirla con su padre y el padre no quiere que ella la crie sola.
Hilda se quedó callada.
- Nuestros abogados dicen que lo que El pide no es nada del otro mundo y ella debería ceder pero ella no quiere. Esta necia.
Hilda le dio un abrazo y un beso.
- Por qué no mejor vas al comedor, tomas un lunch y atiendes algunos asuntos oficiales y ya después con la cabeza más fría sigues con eso. – sugirió Hilda - Tu a quien estas apoyando?
- Como dices?
- Estas tomando partido con alguno de los dos cierto? – preguntó Hilda
- Pues… conocemos a Lyfia hace tanto que yo crei que…
- Como te sentirías si yo te escondiera a nuestro bebé por dos años? – volvió a preguntar Hilda.
Siegfried la miroo y sus ojos brillaron.
- Tu no lo harias.
- No, no lo haría porque quiero verlos felices a los dos. – dijo Hilda abrazandolo otra vez – Solo piensa en lo que el sintió cuando se enteró antes de seguir de parte de ella. Ponte firme y oblígala a firmar. De todos modos anda viajando la mayor parte del tiempo últimamente y que pasaría si el padre se entera y la acusa de negligencia parental? Podría obtener la custodia permanente y eso si le rompería el corazón a Lyfia. Me voy a hacer mis oraciones. Te veremos más tarde – dijo dándole un beso y saliendo del salón.
Siegfried se quedó callado y comenzó a analizar sus palabras. Hilda tenía mucha más experiencia que él en asuntos legales debido a su posición y podría ser que tuviera razón. Llamaría a los abogados para discutirlo un ultima vez antes de mandar a llamar a Lyfia para exponerle los resultados y tomar una decisión.
Julio 16, 8 am
Isla San Andrés
Atlántico Sur
Shura veía con ansias hacia la puerta trasera del castillo flotante. Desde que Mu le había hecho el favor de ir a dejarlo, había sentido a Zita en cierta parte del castillo pero no quería irrumpir así como así. No sabía si había gente armada o si tendría problemas al sacarla. Para este momento, el ya había estudiado la rutina y sabia cuantos sirvientes había en dentro y que Marina cuidaba de ella.
Bajó su cosmos al Máximo y Esperó a que la cocinera sacara la basura como todas las mananas, y en lo que ella le dio la espalda, el se escabullo rápidamente por la cocina evadiendo la mirada de cualquier persona subiendo las escaleras hasta el segundo piso.
Escuchó una flauta y supuso que la que tocaba Sorrento de Sirena. Al sentir el cosmo de Zita, se acercó a esa habitación y después de que acabara su melodía, escuchó que le aplaudían:
- Bravo! Estuviste fenomenal Sorrento! – exclamó Zita – Me gustoo mas que la ultima.
- Gracias, gracias. Esta la compuse especialmente para ti – dijo el peli lila – Me inspiraron tus ojos.
- Deja de bromear – dijo Zita – Sabes bien que estoy casada.
- Aja… y tu "esposo" en este momento debe estar también divirtiéndose con una docena de mujerzuelas.
Shura estaba a punto de entrar para meterle excalibur por donde no le daba el sol, pero Zita no cayoo en el juego.
- Mentira. Él no lo haría nunca y yo tampoco. – exclamó Zita – Porque no vas mejor al mercado como me prometiste y me traes esa fruta de la que me hablaste ayer?
Shura escuchó como se movía una silla y unos pasos que se aproximaron a la puerta.
- Solo porque Julián se enojara conmigo si no te mantengo contenta. – dijo Sorrento de mala gana – Pero eso no quita que no siga intentándolo.
- Sera bueno desayunar un jugo de esos, pero no eres suficiente hombre para mi – dijo Zita en voz pedante – Anda… ve y consigue la fruta. Shu shu!
- Ya voy…
A regañadientes y de mal genio, Sorrento salió de la recamara y escondido detrás de una columna, Shura vio como él seguía de largo. Esperó hasta que escuchó el ruido de la puerta principal al cerrarse antes de abrir la puerta y entrar sin permiso.
Zita , aun en pijama, jugaba con algunas piedras preciosas que le había regalado su abuelo y algunos otros sus generales marinos, para congraciarse con poseidon. Los guardaba con recelo en una cajita mientras los miraba por milésima vez. Shura corrió hacia ella.
- Zita!
- Shura? – dijo recibiendo el abrazo de su esposo con algo de sorpresa – Shura! Que haces aquí?
- Vengo a rescatarte mi amor. – dijo entre besos mientras Zita le echaba los brazos al cuello.
- Pero… no puedo irme asi. Mi abuelo no está y se pondrá muy triste si no me ve y…
- Omar está en el campamento con Rosa y Pedro. Esta a salvo. Te llevare con ellos – contesto Shura
- No hablo de Omar. – dijo Zita en tono despreocupado – Además estoy enojada con él. Primero dice que no me va a dejar y luego me deja y no me dice a donde va ni se despide ni nada. No le importó que me haya enfermado y casi me muera.
- Que que?
El color se le fue por completo a la cara de Shura. Zita había estado enferma y el no lo sabia?
- Estuviste… enferma?
- Si pero ya estoy bien y él bebe también – dijo tocando su vientre con ternura.
Shura la abrazo y bajoo para darle un beso en el vientre pero este movimiento hizo que sus piedras cayeran de la cama al suelo haciendo enfadar a Zita quien suavemente lo separoo de si.
- Perdóname mi amor. Fue mi culpa. Debí buscarte y llevarte desde el principio pero tu padre no me dejoo y… – comenzoo a disculparse Shura
- Si bueno. Fue mejor así – dijo la pelirroja hincándose a recoger las piedras con desesperacion – De que otra manera me hubiera enterado que tengo un abuelo rico?
Shura la miró extrañado recordando la conversación que había tenido con Omar al respecto.
- Omar y Rosa no te dieron lo suficiente? Te falto algo mientras crecías? – pregunto Shura – Tengo entendido que Alejandro te proveía de todo lo que necesitaste.
- Bah! Son migajas únicamente de lo pude haber tenido. – replico Zita guardando sus piedras como si fueran tesoros – Si mi papa me hubiera dejado con mi abuelito Pose, posiblemente…
- Posiblemente nunca nos hubiéramos conocido. – Respondió Shura con voz triste. En que momento su dulce gitana había cambiado tanto únicamente para ver las riquezas materiales?
Zita dejo de hacer lo que estaba haciendo para voltear a verlo. Shura miro sus ojos con perspicacia. No eran azul cielo… eran casi negros. Algo no estaba bien aquí. Zita parecio reflexionar un poco al respecto.
- Si, Tienes razón. Y no vendría un bebe en camino que… - Zita se tomó el corazón como si le doliera un momento y estuviera batallando con algo para después volver al mismo tono frio de antes – Pero tal vez hubiera tenido la oportunidad de conocer mas lugares como a los que me lleva mi abuelo en este lugar y tendría muchas mas joyas y…
Shura apretoo los labios y la tomó de las muñecas haciendola levantarse bruscamente. Esa no parecía ser su Zita. Acaso solo estaba cayendo en una ilusión? La miroo a los ojos quienes lo miraban entre admirados y asustados y se dio cuenta que no traía la pulsera que él le dio, pero traía un pequeño dije en una cadena de oro con un dije muy pequeño. Intentó ver más de cerca que tipo de dije era, pero al tomarlo sintioo que estaba agarrando un hierro al rojo vivo y por lo mismo soltó el dije y soltó a Zita.
- Donde está la pulsera que te regale? No te basta con esa joya? – la enfrentoo.
- Si es muy bonita pero es muy pequeña. – dijo Zita – Además tu amigo se la quedo. Supuse que te la daría o me la daría pero no sé cuándo lo voy a volver a ver. Ve y pídesela a él.
Shura comenzó a buscar el collar que le dio Kanon pero recordó que lo había dejado en el campamento y se maldijo internamente por eso. Zita volvió a abrazarlo y escondió la cabeza en su torso.
- Quédate aquí conmigo. Mi abuelo no dirá que no. – le suplico – No nos faltara nada y tendremos una buena vida.
Shura no pudo evitar abrazarla y besarla. Cualquier cosa que le estuviera pasando a Zita y su extraño comportamiento, estaba seguro que no era su culpa.
- Sabes que te amo Zita…
La pelirroja asintio.
- Pero… no siento que tu seas la misma persona.
- De que hablas? – pregunto sorprendida – Yo soy la misma Zita de siempre!
- No. – dijo separándola muy a pesar suyo – Parece que ahora es mas importante para ti las cosas que puedes tener aquí, que lo que yo te ofrecia que era amor incondicional y vas a tener que decidir entre mi amor o el dinero de tu abuelo.
- Eso no es justo!
- No, no lo es. Porque yo no podría vivir a expensas de tu abuelo y ten por seguro que tu abuelo jamas consentiría que yo estuviera aquí contigo… - dijo Shura muy serio
- Mentira! El solo quiere verme feliz…
- Entonces estas diciendo que yo no te hacia feliz? Soy pobre pero nunca te iba a faltar nada ni a ti ni a nuestros hijos.
La cabeza de Zita comenzoo a ser un caos y tuvo que sentarse en la cama. Shura la ayudo a recostarse cuando vio que ella necesitaba hacerlo.
- No te pido que tomes una decisión en este momento Zita, volveré en unos días. Esta bien?
- Eres muy malo conmigo Shura – dijo cerrando los ojos acurrucándose en los brazos de su esposo quien empezó a acariciarle el cabello – Te lo pido. Quedate conmigo.
- No hasta que tomes una decisión – dijo besándole la cabeza – y mientras tanto, no le digas a nadie que vine a visitarte, de acuerdo?
Zita asintio mas dormida que despierta.
Shura salió de la habitación y del castillo con todas las precauciones posibles. Una vez en la playa, Le marcó a Mu quien se presentó casi de inmediato.
- No estabas ocupado verdad?
- No realmente. – contestó el lemuriano
- Me podrías llevar al Santuario? Necesito hablar con Shion. – suplico Shura
- Claro. Son 10 Euros. – dijo Mu extendiendo la mano.
- Como dices?
- Ya que me están comenzando a agarrar de taxi, no tengo ningún problema, pero ya cobro 10 Euros.
Shura le sonrió por lo atrevido que se había vuelto últimamente el ex tímido Mu y no dudó en pagárselos. Mu los tomó, los guardó y lo llevo al santuario donde Shura Shion ya lo esperaba en su oficina. Aioros estaba con el cuándo Shura tocó la puerta:
- Adelante.
Shura entro y Shion fue a recibirlo a mitad del camino.
- Bienvenido a casa Shura! Que paso? Por qué estás aquí, solo? Acaso Mu no te había llevado a donde estaba Zita?
- Si pero, quería consultarle algo maestro
Shion lo aproximó a su salita y le acercó un vaso de té para que se relajara. Shura lo tomo de un solo golpe.
- Lo que dijo Omar es cierto. Zita ha cambiado. Solo piensa en las cosas que Poseidón puede darle pero… no creo que sea algo natural. Por eso vine por consejo. – dijo Shura
- Explícame por qué dices eso – dijo Shion muy serio sentándose frente a el
- Es como si se debatiera entre dos personalidades y sus ojos… ya no son del mismo color – señaló – Si me la traigo ahora, va a ser muy infeliz. Pero si la dejo… puede ser peor verdad? Y si la saco a la fuerza, puedo enfadar a Poseidón y crear un nuevo conflicto y ya no sé qué hacer! – dijo tomándose la cabeza con ambas manos.
Shion vió la desesperación en los ojos de Shura y cruzoo miradas con Aioros.
- Viste algo fuera de lo común en ella? Alguna seña, tatuaje…
- No, solo un dije que yo se que no era de ella pues conozco bien lo que tenia y lo que no. Cuando lo toqué para verlo mas de cerca me quemó la mano – aseguró Shura
- Pero Zita físicamente está bien?
- Si. Aunque dijo que había estado enferma y la sentii un poco mas debil que de costumbre.
Aioros volteo a ver a Shion. Tal vez ahí estaba la respuesta.
- Crees poder quitárle ese dije que dices?
- No. En verdad quema! – dijo Shura – O al menos conmigo lo hace.
- Aioros, acompaña a Shura a descansar y arreglarse un poco. – dijo Shion – Déjenme pensar un poco para ver como resolvemos el problema. Al menos comprobaste que tu esposa esta sana y que pronto la tendremos por aquí bailándonos contigo. Porque de que nos vas a mostrar como bailas de esa no te escapas eh?
Ambos caballeros rieron y shura asintio. Aioros le paso el brazo por los hombros:
- Estas muy cansado? O quieres acompañarnos al centro por ropita para Mist? – pregunto Aioros
- Mist?
- La hija de Aioria
- La queeeeeeeeeeeee?
- Jijiji amigo… te has perdido de muchas cosas, ven que te la presento y te pongo al dia – dijo Aioros feliz de tener alguien nuevo a quien pasarle el chisme.
Ambos caballeros dejaron el templo principal y Shion se recostó en el silloncito y cerró los ojos. Debía haber una forma de traerse a Zita sin causar problemas y de regresarla a su caracter. Sonrió al recordar un punto clave: Un Dije, y quien era el forjador oficial de objetos metalúrgicos del Olimpo? Fes. Él podría darle una respuesta que lo llevara a la solución al problema de Shura.
Julio 17, 9 am
Onceava casa dorada
Santuario de Athena, Grecia
Camus terminó de desayunar solo como casi siempre desde que Milo se casó. Después de recoger y lavar sus trastes, decidió que era hora de tirar muchas cosas que jamás usaría así que se puso a hacer limpieza profunda en la casa de acuario y en un arranque de frialdad puso todas las cosas de Fler en una caja dispuesto a llevarlos o a una bodega o tirarlos a la basura. Acababa de terminar de embalar todo en cajas de cartón cuando sonó el teléfono. Tardoo un poco en contestar debido a que en ese momento, no tenia ninguna motivación para correr por el.
C Alo?
L Hola osito! como estas?
C Sigo preguntándome si estoy lo suficientemente gordo para ser llamado así. dónde estás?
L yo no te llamo osito por lo gordo, porque tu gordo pues de donde. Estoy en mi apto, para eso te llamaba. Para avisarte que ya estoy de regreso en la ciudad.
C ahhh magnifico. Como te fue?
L Maravilloso! la pase muy rico!
C no lo dudo pero no me des los sucios detalles. Solo respóndeme, te trata bien?
L Si, él es muy lindo conmigo, siempre está pendiente y cuidándome
C más le vale pero no le dijiste nada de… lo que nos pasoo en París verdad?
L no, él sabe que me puse un poco mal pero nada más y que tu controlaste muy bien la situación.
C Fiuuu que alivio
L Jajaja de eso no tienes que preocuparte
C y te quedarás en tu departamento mucho tiempo?
L Pues creo que no, lo que me demore en empacar nada más. Me vas a venir a ayudar?
C Bah! que ni para eso sirve Saga?
L Jajajaja a él lo voy a poner a cargar las cajas en la noche cuando me recoja, porque según él no me puedo quedar sola.
C pues si puede cargar las cajas también puede empacar tus cosas. Capaz que no le gusta que toquen nada tuyo.
L Jajajaja ni que te fuera a poner a empacar mi ropa interior. si no le gusta que se aguante!
C no me arriesgo. Además andamos cortos de dorados otra vez y no me dejan salir.
L Porque andan cortos de dorados otra vez?
C Aioria está castigado pero le conviene porque así puede estar todo el tiempo con Mist. Shura llegó ayer pero volverá a irse; Afro y DM andan de mision junto con el maestro Dohko y Shaka... tampoco ha regresado
L Quien es Mist?
C La hija de Aioria
L Aioria tiene una hija?
C Acabamos de descubrirlo y el también
L Pues me alegro por él, debe estar feliz no?
C Pues... sí. Supongo que sí lo está. Al menos por un lado
L porque por un lado?
C porque por el otro lado, es prueba irrefutable de que tuvo una aventura aun estando de novio con Marín, y eso lo hace sentir un poco… culpable.
L Es un idiota que no supo amarrarse los pantalones, y seguro él no es el único que sufre con eso sino Marín también
C Uhhh...
L Uhhh qué?
C Creo que ninguno ha pensado en eso. No la he visto en muchos días
L Ojala esto no le cause más dolor y sepan manejar la situación
C Manejar? a que te refieres con eso?
L A que usen la cabeza para algo más que para peinarse, y entiendan que ella esta dolida y no va estar muy abierta a aceptar explicaciones, ni consejos con respecto a todo lo que está pasando con Aioria
C y a mí porque me lo dices si yo no me llevo con ella? aunque eso explicaría por qué no han bajado a Mist del templo principal
L te lo digo para que te evites un dolor de cabeza si la ves
C gracias pero no necesito más dolores de cabeza. Con los míos tengo.
L pues cuantos dolores de cabeza tienes? y eso tiene que ver con el tono de tu voz?
C este es mi tono de voz habitual
L aja yo nací de noche, pero no anoche.
C es solo que me agarraste en medio de la limpieza de mi habitación
L y que tiene que ver la limpieza de tu habitación con tu tono de voz?
C y dale con mi voz. Estoy tirando a la basura todo lo que cierta persona hizo el favor de enviarme o dejar aquí
L y porque te dio por botar a la basura todo lo que esa persona dejo o te envió?
C mmm...
L que paso mientras estaba en Niza, Camus?
C nada de lo que debas preocuparte. Termina de empacar mejor para que vayas a cocinarle al marido.
L odio cuando me dicen que no pasa nada, como si con eso uno evitara que uno se preocupara por los que quiere, pero yo no te voy a obligar a que me digas algo que no quieres, solo quiere que sepas que yo te ayudare y apoyare en lo que tú quieras y necesites
C …
L cuando quieras hablar me avisas sabes que siempre estaré para escucharte o en su defecto cuando explotes
C ya explote gracias. Está bien. Solo para que Milo no me regañe de nuevo. Hace unos días... recibí una misiva de parte de... Fler
L y que decía la misiva?
C que está embarazada
L oh Dios mío!
C y que prácticamente si la busco, aborta
L si quería lastimarte lo supo hacer muy bien
C aun así una parte de mi quiere ahorcarla
L y la otra parte?
C la otra parte... también
L si lo imagino, cuando fue la última vez que estuviste con ella?
C creo que el primero de mayo
L crees?
C estoy seguro
L entonces asumo que ya hiciste cuentas y sabes cuantos meses tiene aproximadamente?
C enserio esperas que lo sepa?
L si espero que tengas al menos una idea, porque si antes la querías buscar ahora seguro lo quieres hacer sin ninguna duda, pero quieres esperar por lo del bebe
C si pero para encerrarla en una maldita mazmorra y...
L ay no te pongas en plan idiota, eso lo dices porque estas emputado y dolido
C y como esperas que este?, hasta un ultrasonido me mandó
L y pensabas botar todo eso?
C obvio que eso no.
L ay Camus en nuestros berrinches cualquier cosa puede pasar y más si nos guardamos todo, cuando te llego la misiva?
C el 4
L y porque no me avisaste para haberme venido y empezar a buscarla de una vez?, has podido averiguar algo?
C No, nada y avisarte de que iba a servir? ni siquiera estas trabajando
L para empezar a buscarla y otro que viene con ese tema
C cual tema?
L a ver necesito la misiva para poder rastrearla y ver de dónde se envió, ir al aeropuerto por los videos, lista de vuelos y pasajeros del día que ella se fue y sino buscar porque otro medio se pudo salir
C se pudo salir de donde según tu
L también necesitamos saber cuántos meses tiene aproximadamente para que cuando te le presentes él bebe no corra riesgo
C repito no estás trabajando así que no tienes que hacer todo eso
L yo lo hago porque quiero así que no molestes
C bueno pues cuando termines de instalarte en tu nueva casa me avisas
L no vayas a botar nada de lo que te envió Fler para así poder averiguar y haber como empezamos a buscarla
C nada nada?
L no nada, nada
C Ash.
L nunca se sabe cuándo se pueda necesitar
C está bien lo guardare en una bodega
L me parece muy bien
C te dejo. Milo viene a fastidiar. me da gusto que ya estés aquí
L ok, yo también me alegro de estar aquí pero no tanto como quisiera
C tiempo de volver a la realidad no? te mando un abrazo congelado
L si, y es más difícil de lo que pensé, gracias osito, y la encontraremos no te preocupes
C Salúdame al Señor de Gómez.
Camus colgó y arrojo el celular indiferente mientras mandaba llamar al mensajero. Para Laura era muy fácil decir todo eso porque no lo estaba viviendo, pero para él, todas esas cosas eran el recordatorio de errores y más errores que no lo dejaban vivir paz. Decidió enviar todo a la bodega. Ya si Laura se los pedía, los sacaría de ahí, pero mientras tanto no tendría el constante recordatorio de lo estúpido que había sido al enamorarse de Fler.