Capitulo 224

Septiembre 26, 11:00 am

Entrada de la LSEPS

Londres, Inglaterra

Dm camino las dos calles que separaban la estación del subterráneo con la escuela, con las manos metidas en los bolsillos del pantalón. Esta vez, al ser la última vez en que él debía estar en esa escuela debido a la finalización del curso, no fue vestido como normalmente lo hacía. Su cabello estaba tan alborotado como lo traía siempre en el santuario, y vestía su ropa vieja y gastada sin hacer nada por verse mejor. Era el día en el que entregarían calificaciones y sabrían si habían aprobado el diplomado o no. Además, le habían llamado para recoger su título también, ya avalado por la LSEPS.

Cuando llegó a la puerta, para su sorpresa, varios guardias de seguridad lo detuvieron. Eso era algo nuevo para el.

- Ahora que pasa? Cualquier cosa, yo no fui. – dijo extrañado

- Solo pueden pasar alumnos. Lárgate vago! – grito uno de ellos mientras le cerraba el paso.

- Que dijiste imbécil?

- Te vas a poner difícil? – el mismo guardia sacaba una macana negra de su uniforme mientras los otros solo miraban la escena.

- Yo estudio aquí!

- Y donde está el gafete obligatorio?

DM a mala hora recordó que siempre lo traía en la gabardina. Gabardina que ese día no se le había dado la regalada gana de usar.

- Lo olvide.

- Sin gafete nadie pasa. Lárgate y deja pasar a los que si son alumnos. – dijo agresivamente un segundo guardia mientras los alumnos que pasaban, lo veían extrañados de arriba abajo por su vestimenta.

DM estaba a punto de mandar al inframundo a los guardias cuando Pandora y Radamanthys, se acercaron por atrás para mostrar su gafete.

- Pase usted señorita… señor… – dijo abriéndoles el paso.

DM no dijo nada, pero aunque Radamanthys puso por delante a Pandora empujándola ligeramente por la espalda a la altura de la cintura, ella no dio un solo paso. Se tomó unos pocos segundos antes de decir:

- El viene con nosotros. – dijo señalando con el pulgar a DM

El guardia iba a comenzar a reclamar, pero la mirada de Pandora le infundio miedo y solo atinó a decir un tenue " Si señorita". Radamanthys solo hizo una expresión de desaliento pero no dijo nada. Estaba mucho más nervioso por saber las calificaciones, que ponerse a pelear con él o con ella, además de que no quería tener otro strike tan pronto con Hades.

DM guardo silencio y bajo la cabeza para seguirlos hasta control escolar, donde ya muchos se arremolinaban a ver las listas a gritos entusiasmados y empujones.

- A ver! Ustedes nacos. Quítense! – gritó Pandora haciendo que todo el grupito se callara y le abriera el paso instintivamente.

Pandora se acercó a ver la lista sonriendo. Primera en la clase. Puntuación perfecta.

- Tenía que ser así – dijo altivamente mientras Radamanthys veía el suyo y le tomaba una fotografía para enviársela a su hermano.

- Mmm… Un Minos me va a joder con esto por meses – exclamó Wyvern viendo su 96.

DM se acercó después de ellos, maldiciendo por lo bajo: 95. Radamanthys le había ganado limpiamente después de todo. El susodicho comenzó a reír al ver esto y tomo su celular para hablarle a sus amigos alejándose de ellos dos. Pandora también se retiró del lugar despacio caminando hacia los jardines muy satisfecha consigo misma.

DM aprovechó la distracción de Radamanthys para seguirla y acercarse a ella despacio.

- Podemos hablar?

- No creo que te convenga ser visto hablando conmigo. Acaso no soy una…

- Por favor. Te lo pido como gente civilizada.

- Ustedes de civilizados no tienen nada, pero está bien. – dijo de forma altiva antes de señalarle las bancas más cercanas del parque

Pandora se sentó acomodando bien su falda y esperó. DM no se sentó, sino que se paró junto a ella aun con las manos metidas en los bolsillos poniéndose a patear un diente de león cercano.

- Bueno… Estoy esperando - dijo Pandora en tono insolente – Y por que estas vestido así hoy? Acaso no te llegó el correo electrónico especificando la nueva regla de entrada?

- Aparentemente no lo vi. Debió irse a mi bandeja de spam.

- Entonces? Que querías decirme?

- Si bueno… es que no sé por dónde empezar.

- Tal vez sea mejor que me vaya y me avises cuando estés listo – dijo Pandora levantándose y haciendo ademan de irse, pero DM la tomó de la muñeca, haciéndola voltear enojada.

- No, Espera. Es que no estoy acostumbrado.

Pandora miró la mano y tocando su dije en forma de lanza, generó una descarga eléctrica a DM quien estoicamente lo soportó sin soltarla.

- Suéltame!

- No hasta que aceptes quedarte y dejarme hablar.

Pandora cesó la descarga.

- Hazlo entonces que no tengo todo el día.

- Solo quiero pedirte disculpas por la manera tan… estúpida en la que me comporté en tu fiesta. Soy medio bruto para reaccionar y todo me tomó por sorpresa. El ambiente tan cargado y la ropa tan tiesa no me ayudó tampoco.

Pandora guardó silencio. Recordó la conversación con Afro, pero aún estaba dolida. No debía solo aceptar sus disculpas y ya.

- Por qué es tan importante para ti la criada de Radamanthys?

- Un par de años atrás ella fue una persona muy especial para mí. Es difícil explicarte en este momento pero te prometo que algún día te lo diré.

- Y ese es un motivo para hacer esa horrorosa comparación conmigo? – preguntó mirándolo de frente donde sus ojos violeta le mostraron dolor a DM

- Eso fue un gran error de mi parte causado por el Shock inicial de verla ahí. De otro modo yo jamás te hubiera dicho eso.

- Yo nunca seré como ella. No me interesa serlo. - insistió

- Lo sé. Tú eres Pandora Heinstein. No necesitas ser como nadie más. – confesó – Tu… eres única.

- Y solo para que lo sepas, Radamanthys y yo nos encargamos de sus hermanos. Tienen la mejor educación y nunca les va a faltar nada. No soy un monstruo.

- Lo sé y no sabes cómo te agradezco que puedas hacer lo que yo nunca podré.

Pandora lo miró entre extrañada y enojada.

- Lo sabes? Como es eso?

- Hable con ellos – respondió con una sonrisa triste – Parece que Radamanthys se ha ganado su afecto.

- No sé cómo o cuando lo hiciste, pero te agradecería que si quieres hablar con ellos, por lo menos me pidas permiso.

- Lo prometo. También quisiera agradecerte tu ayuda con la ponencia. Fue un descuido de nuestra parte, imperdonable. De no habernos ayudado, los tres hubiéramos estado en grandes dificultades.

- No lo hice por ustedes dos par de estúpidos – respondió Pandora subiendo un poco la voz – Pero tu amigo el becado no tiene la culpa de cargar con tus tonterías. El necesita la beca porque mantenerse aquí. Sin ella para plebeyos como el, no es fácil y el sí requiere las calificaciones. Así que lo hice por él, no por Radamanthys o por ti.

- Pues a nombre de Phil, te agradezco tu ayuda – dijo DM sonriendo al comprobar de nuevo que Pandora era fría por fuera pero dulce y compasiva por dentro. – Podre regresar a recluirme al santuario muy tranquilo porque sé que el estará bien.

Pandora se sorprendió. Ya tenía que irse? Era demasiado pronto! DM parecía haberle leído la mente porque sonrió y dijo.

- En tres días más te deshaces de mi presencia. Afro está empacando justo ahora.

- Pues… me alegro. Ahora si no hay más de que hablar, debo irme. Rada me está esperando para ir a Comer.

- Puedo invitarte a cenar?

- Por qué lo harías?

- Agradecimiento? Celebración? Necesito un motivo?

- Acabo de decirte que iré a comer con Radamanthys al Alain Ducasse, El restaurante más exclusivo de Londres, para celebrar que como siempre, soy la mejor.

- Ya sé que no puedo competir con aquel que tiene recursos ilimitados pero… esperaba que quisieras abusar de mis fabulosas dotes culinarias. – dijo DM algo apenado por alabarse en una actividad que pocos conocían de el – Prometo que me humillare vistiendo delantal y gorro de chef y te prepararé cualquier cosa que me pidas.

Pandora sonrió por primera vez. Quería humillarse? Le daría gusto. Total. Sería la última vez que lo viera y podría continuar su vida y sus cursos con normalidad como antes de reencontrarse ahí.

- Cualquier cosa, eh? Suena tentador saber que podre hacerte comer tus palabras. En mi departamento el 28 a las 6pm para que la cena comience a las 8pm. Deberás llevar todos los ingredientes que creas necesitar para preparar mi cena.

- Me darás una pista?

- No. Tu deberás averiguarlo. Buena suerte.

Pandora tomó su bolso y caminó hacia Radamanthys, quien ya la esperaba al final del pasillo.

- Ahí te veo! – gritó – Y gracias otra vez!

DM la miró alejarse contoneando sus caderas. Ya había dado el primer paso. Ahora tenía que redimirse con ella a través de esa cena antes de que regresara al santuario. Que sería lo que ella le iría a pedir que había sonado tan misteriosa? Iba a tener que improvisar.

26 de Septiembre, 8 am

Templo Principal

Santuario de Hera, Grecia

Liz estaba sentada en la mesa principal desayunando con Sasha, Marin, Aioros, Kiki y Sammy. Todos estaban demasiado silenciosos como si la alegría del desayuno se hubiera ido. Observó a Sammy comer toda su avena aunque Kiki le sirviera más cada que podía; a Marin poniéndole sirope de maple light a sus pancakes; Aioros leyendo algo en el periódico y Sasha observándola a ella en forma poca amistosa.

Decidió bajar la mirada a su plato de fruta para terminarla y salir corriendo de ahí antes de que los ojos de Sasha se convirtieran en puñaladas que pudieran herirla.

Albi ore entró al comedor haciendo una pequeña reverencia.

- Disculpen que interrumpa pero, la señorita ángelus tiene una visita urgente

- Quién es? – pregunto Sasha

- Dice que viene de parte de su tío Uriel.

- Disculpen. – dijo Liz levantándose para seguir a Albi ore quien la llevó hasta la puerta de entrada del santuario lo mas rápido que pudo.

Liz pudo ver a un chico rubio alto vestido con un uniforme como todos los asistentes de su tío.

- Señorita Ángelus?

- Si

- El señor Uriel ha mandado por usted. Ha ocurrido un accidente y se solicita su presencia en su casa en Soho de inmediato.

Liz se preocupó. Acaso algo había ocurrido con su padre? Por eso su tío lo había enviado para llevársela?

- Es papa? Le paso algo?

- No tengo más información. Nos vamos?

Liz se volvió hacia Albi ore.

- Podría decirle al Patriarca que surgió algo importante y regresare en cuanto pueda? Yo me comunicare con el mas tarde. Es imperativo que vaya yo con este hombre.

- Esta segura?

- Sí.

- Entonces yo le aviso.

Liz asintió al uniformado y este desapareció junto con ella dejando una interrogante en la cara de Albi ore, pero de todos modos regreso caminando despacio a comunicar el mensaje. Al llegar al templo principal, Marin ya estaba en su oficina, Sammy iba en camino a la tercera casa de la mano de Europa, Kiki había bajado a la primera casa y Sasha discutía unos asuntos con Aioros.

- Disculpe Excelencia – dijo con respeto – La Señorita Ángelus tuvo que salir del santuario por algún tipo de asunto importante y se comunicara más tarde

- Dijo de que se trataba?

- No. Pero parecía algo angustiada. – respondió Albi ore mirando a Sasha, quien tenía una cara de felicidad que apenas podía con ella.

- Gracias. Esperare un par de horas a que ella llame. Avisen a la puerta de todos modos para que en caso que llegue antes, la dejen pasar sin problemas.

El caballero de plata asintió y salió del salón.

- Es una lástima que se haya ido así, Aioros – dijo Sasha fingiendo pena – Pero de todos modos no íbamos a poder llevarla.

Aioros la miró extrañado.

- Llevarla a donde?

- Acaso no te lo había dicho? Oh que descuido el mío! – dijo – Debemos asistir a un evento en Asgard mañana al medio día.

- El pasaje nos llevara dos días!

- Sí. Pero tenemos a dos expertos en Tele transportación que pueden ayudarnos: Mayura y Kiki.

- Preferiría que fuera Mayura – dijo Aioros filosofando – Kiki aún no intenta algo tan lejano y en caso de peligro, ella tiene más experiencia. (Además de que si es algo secreto, sabe cerrar la boca a diferencia de Kiki)

- Mayura será. – respondió – Hazla venir para darle los pormenores y a Marin para darle algunas indicaciones por el tiempo que estaremos fuera.

- Nos llevaremos a Mist? Creí que sería hasta el día primero!

- No. Eso es responsabilidad de sus padres – contestó Sasha – Prepara tu equipaje para únicamente un par de días y lleva tu túnica de gala que te acaban de entregar y todo tu equipo patriarcal. Estarás ahí representando el santuario junto a mi después de todo.

- Así será.

Aioros fue a dar las indicaciones necesarias y Sasha se sentó en el trono sonriendo. Ciertamente ese iba a ser un evento que les demostraría a todos, que ella no era la misma tonta que cuando regia el Santuario 200 años atrás y todos deberían aprender a respetarla.

Septiembre 27, 7.00 am

Habitación de Fler

Palacio Valhalla, Noruega

La fuerte tormenta matutina golpeando la ventana de colorido vitral de cristal despertó a Fler. Hacía mucho que no escuchaba ese sonido, que en otros tiempos, incluso la había arrullado. Abrió los ojos tratando de enfocar su mirada y el crepitar del fuego encendido de la chimenea la hizo incorporarse de un solo movimiento. Estaba en Asgard! Como era eso posible?

Afuera, las damas en el pasillo debieron escuchar el movimiento de la cama porque minutos más tarde tocaron a la puerta:

- Pase!

Dos de las damas pasaron y le hicieron una reverencia.

- Le trajimos su desayuno señorita. – dijo mientras ponía la bandeja sobre la mesita

- Helga… que… que estoy haciendo aquí?

Ambas damas se miraron interrogantes.

- Es el día de su boda señorita. Todo está preparado para el medio día. Los invitados ya comenzaron a llegar y los regalos se están poniendo en el salón de banquetes.

- Se dice que el mismísimo Thor estará presente – comentó la más joven emocionada

- Y… el novio ya llegó? – preguntó Fler con voz apenas audible

- No señorita. Se espera que llegue justo antes de la ceremonia.

Fler solo atinó a agarrar el tarro de leche fresca y tomar de ella. Sin previo aviso? Sin darle la oportunidad de decirle a nadie? Estaba segura que era una pesadilla y en cualquier momento iba a despertar.

Septiembre 27, 11am

Departamento de los Gemini - Gómez

Atenas, Grecia.

Saga despertó después de sus primeras 12 horas de sueño seguidas en muchos meses. La cirugía de emergencia que había tenido la noche anterior en el corazón abierto de un niño de cinco años lo había agotado física y anímicamente, y sin su esposa a su lado, simplemente había caído en un sueño tan profundo que se había olvidado hasta de cargar el celular y cuando se dio cuenta de esto, maldijo su cansancio y lo puso a cargar mientras se disponía a tomar un baño relajante. Se llevó el teléfono y una bomba verde que arrojo al jacuzzi de la terraza justo antes de meterse.

Llevaba ya algunos minutos relajándose en las burbujeantes y verdes aguas calientes, cuando su teléfono inalámbrico comenzó a sonar.

S Hola?

K Bueeeeeeeeeno. Tal parece que la señorita por fin decidió contestarle a su hermano más guapo

S Numero equivocado

K Mamon.

S Jajaja

K Ya en serio. Te llame al celular y no contestaste.

S Necesitaba dormir y mi celular entendió muy bien esto.

K Anda por acá Shura, quien anda depre porque su sirenita anda de paseo. Es tu día libre?

S Así es. Solo estoy para emergencias.

K Te la vas a pasar conejeando?

S No. Porque estoy solitooo… no hay nadie aquí a mi laaaado. No habrá problemas hoy… de mí ya sea han burlaaaado.

K Burro!

S Jajaja

K Al menos estas de buenas. Oye… Salimos muy temprano del santuario porque es nuestro día libre y nos compramos la Xbox one pero en la entrada nos la querían confiscar por orden de la nueva Sanbocho así que nos regresamos a la ciudad. Nos dejas jugarla y dejarla en tu casa? Anda! Te llevamos las cervezas y la botana.

S Aprovecha que mi domadora no está. Pero tráete algo más fuertecito y yo pediré unas pizzas.

K Y la dieta?

S Que parte de hoy estoy soltero no se entendió.

K Vamos para allá. Una media hora para que por lo menos te pongas ropa interior.

S Jajaja me conoces bien. Aquí los veo.

Saga colgó con una sonrisa. Los tres hermanos en una tarde de juego… cuanto tiempo había pasado desde la última vez? 15 años? Se levantó muy animado para vestirse. Recordó que no le había mandado un mensaje de buenos días a Laura y tomó el celular. Lo encendió y vio que por la madrugada Laura le había enviado un mensaje.

- Amor, aquí reportándome como te prometí. Sé que es muy temprano y posiblemente estés dormido pero no podía esperar para darte la noticia. Recuerdas la conversación que tuvimos respecto a posponer la fabricación del equipo de futbol? Creo que el aviso le llegó tarde a la cigüeña porque… llegó el primero. Vas a ser papá! Te mando su primera foto. (imagen )

Saga lo leyó varias veces y salió corriendo a la terraza para gritar a todo pulmón aun desnudo.

- Voy a ser papaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

- Métase a su casa pervertido! – le gritó una de las vecinas del edificio de enfrente unos pisos más abajo que estaba sacudiendo las sabanas en su terraza

Saga comenzó a llamar a Laura pero sin obtener ninguna respuesta. No entraba la señal.

- Supongo que lo apagó para evitar que le arruine su misión con mis llamadas de control.

Aun sin poder contener su emoción, Saga comenzó a hacer espacio en su sala frente al televisor para cuando llegara Kanon y Shura, pudieran pasar un rato inolvidable después de que, obviamente, les informara que iban a ser tíos.

Septiembre 27, 11.55am

Habitación de Fler

Palacio Valhalla, Noruega

Como era la costumbre, Fler había sido bañada en agua perfumada con flores frescas traídas de lugares más cálidos dentro de la misma zona. Fler se dejaba bañar, peinar, maquillar y vestir con todas las damas alrededor dándole sus enhorabuenas y diciendo que invitados habían llegado y desde donde habían venido. No podía romper su promesa ahora, pero tampoco quería casarse con un desconocido. Peor aún, sentía que le estaba fallando a Thes y a su hija.

Una de las damas que habían ido por un adorno para el tocado que habían olvidado en otra habitación entro rápidamente con una sonrisa:

- Ya llegó! El Señor Sigmund llegó y se ve guapísimo!

- De verdad? – contestó la otra – Ya quiero verlo en su traje de gala.

- Está hablando con el Señor Siegfried y la Señora Hilda acerca de la ceremonia. Esta todo el salón lleno de flores y brillo! Ay señorita Fler, que afortunada es usted!

Fler no contestó. La iban a casar con Sigmund? Pero si ellos apenas habían cruzado palabra. Aunque tenía sentido. Era de una buena familia y su hermano fácilmente podría haberlo convencido de que solo fuera un matrimonio de conveniencia y cada uno hiciera su vida aparte hasta que ambos decidieran lo contrario. La cabeza comenzó a darle vueltas. Por qué no había señal de celular para enviar por lo menos un mensaje a Thes y a Camus?

Tocaron a la puerta.

- Es hora Fler! Te espero al final de la escalera! – Grito Siegfried desde el pasillo mientras hablaba con quién ella supuso que era su hermana y sus paso desaparecieron poco a poco en el pasillo.

Fler volteó hacia el espejo de cuerpo completo y suspiró. Había soñado desde niña con usar ese vestido de novia para casarse con Hagen. Estilo medieval, corte imperio y de manga larga, ese vestido llevaba al menos tres generaciones en su familia y su madre lo había usado. Cuando conoció a Camus y Hagen le rompió el corazón, había decidido no usarlo y dejárselo a Hilda, pero Hilda no lo había usado tampoco en su boda. Ella sabía que le hacía ilusión usarlo a Fler, pero a Fler le traía malos recuerdos y por eso había decidido que Thes le hiciera el suyo. Eso tampoco había sido la mejor decisión ya que pocos días después, Camus la había abandonado también.

- Supongo que era mi destino usar este vestido. – señalo

Las Damas le pusieron una última capa de laca en su cabello trenzado en forma de corona y la tiara de flores de perlas fue asegurada una última vez. Otra de las damas le entregó un ramo de flores blancas y todas le abrieron la puerta y le hicieron valla hacia la salida.

Bajó la escalera donde Siegfried le dio la mano vestido con su traje y varias medallas que Hilda le había dado por sus servicios todos estos años.

- Te ves muy Hermosa Fler

- Gracias. Puedo pedirte un favor?

- Dime.

- Puedo hablar con el novio antes de casarme? Es lo único que pido. – respondió – No romperé mi promesa a Hilda ni a Asgard pero… Necesito hablar con él.

- Esto no estaba planeado.

- Por favor…

Siegfried se detuvo. Los invitados y el Sacerdote ya estaban en el salón, Y solo esperaban que el novio entrara para proceder con la ceremonia.

- Está bien. Espera en este saloncito – dijo Abriéndolo – Vendré con él y solo tendrán cinco minutos antes de que tu hermana me mande a buscarlos. No debes olvidar que no tolerare ninguna jugarreta. Tuviste mucho tiempo para detener esto.

- Gracias Siegfried.

Fler se sentó en uno de los silloncitos y esperó mientras oraba por el perdón de la personas a las que estaba defraudando.

Septiembre 27, 12.55pm

Salida Sur del Santuario

Rodorio, Atenas

Camus no entendía la razón por la que la nueva Sanbocho lo había mandado a hacer algo que un mensajero podía hacer fácilmente, pero era un buen pretexto para salir aunque fuera a caminar por Rodorio.

La indicación, había sido estar a la 1pm cerca del campanario para hacer la entrega y que era tan importante lo que contenía, que no podían dejarle la responsabilidad a alguien de rango menor.

Camus camino lentamente desde la salida sur del santuario hasta el punto de encuentro mientras sus pensamientos volaban hacia la última vez que había visto a Fler/Gigi.

Flashback

Camus ayudó a Fler a subir las escaleras del bote turístico que les daría el paseo en bote turístico por el Rio Sena. Casi no había gente abordándolo, y el decidió que subieran al segundo piso, al aire libre, para poder admirar el brillo de las luces de Paris de noche. Tomaron asiento y Fler sonreía mientras veía la torre Eiffel delante suyo. Llevaba tantos meses viviendo en Paris pero no había hecho ese paseo aun.

- No sé cuándo vaya a poder regresar a Paris así que le agradezco que me acompañe a este paseo – dijo Camus – Espero que su novia no se moleste mucho.

- Ella no va a saberlo – respondió Fler – Además no hay nada de malo en lo que estamos haciendo, o si?

- No.

Justo antes de que saliera el bote, cinco amigos, tres hombres y dos mujeres muy jóvenes en trajes de noche corrieron para alcanzar a subirse. Afortunadamente para Camus, se quedaron en el primer piso con los demás y claramente se veía que estaban celebrando algo, pues la botella de champaña y la música no se dejaron esperar.

Fler y Camus no les pusieron mucha atención cuando el bote zarpó. La iluminación en los puentes, en la ribera llena de vida nocturna, el museo de arte moderno y la catedral de Notre Dame, era demasiado hermoso como para perdérselo. Durante unos 45 minutos en los que la guía explicaba el recorrido ninguno de los dos dijo nada que no fuera de vez en cuando señalar algo que les hubiera llamado la atención. La más emocionada parecía ser Fler, quien señalaba cuando veía pintores en algún puente o alguna novia festejando su despedida de soltera en un bote paralelo y Camus solo lo veía a ella. Que había hecho para merecer el desprecio de la madre de su hija y que ya no pudiera estrecharla entre sus brazos como cuando estaban en Asgard? Ah sí. Demasiadas cosas.

El grupo de chicos pareció aburrirse de ser regañado por los guías y subieron al segundo piso, saboteando el alto parlante y poniendo su propia música en el reproductor con bocinas. La torre Eiffel ya se veía muy cerca indicando que el final del recorrido estaba próximo y en la lista de reproducción comenzó a sonar:

Time, it needs time
To win back your love again
I will be there, I will be there

Camus se levantó del asiento para sorpresa de Fler.

- Si Mini Gigi me lo permite, me gustaría sacar a bailar a su madre. – dijo extendiéndole la mano a Fler.

Fler lo miró por unos segundos con la mano extendida. Aprovechar cada oportunidad era la meta. Finalmente tomó la mano y se levantó.

- Ella dice que sí.

Camus sonrió y la tomó de la cintura acercándola suavemente hacia él. Fler recargó sus manos y su Cabeza en el torso de Camus y comenzaron a bailar al ritmo de la música mientras Camus cerraba los ojos para disfrutar el momento.

Love, only love
Can bring back your love someday
I will be there, I will be there

Fler sintió como la estrechaba aún más contra su cuerpo y se ruborizó. Estaban en público y a él no le importaba tomarla así.

Fight, babe, I'll fight
To win back your love again
I will be there, I will be there
Love, only love
Can break down the wall someday
I will be there, I will be there

- Discúlpeme si la incómodo.

- No, para nada. Estoy bien.

- Imagino a la mujer que amo mientras estoy así – dijo sin dejar de bailar – Esta canción es exactamente lo que necesito expresarle a ella sin tener el valor.

Fler tembló de emoción. Camus la hizo dar un giro antes de volverla a poner en su lugar entre sus brazos. El escándalo de los cinco chicos se detuvo al verlos bailar y las chicas comenzaron a grabar con sus celulares el espectáculo.

- También puede fingir que soy ella y decírselo. – dijo finalmente

Camus asintió y comenzó a cantarle al oído sin dejar de bailar.

If we'd go again
All the way, from the start
I would try to change
The things that killed our love
Your pride has built a wall, so strong
That I can't get through
Is there really no chance
To start once again?
I'm loving you

Ahora fue Fler la que se acurrucó en sus brazos aún más. La canción, cantada por la seductora voz de Camus, Le estaba llegando hasta el fondo de su corazón.

Try, baby, try
To trust in my love again
I will be there, I will be there
Love, our love
Just shouldn't be thrown away
I will be there, I will be there

Que podía contestarle? Que aunque ella dijera que sí, su destino ya estaba sellado por su hermana? Que no por eso había comenzado todo este distanciamiento entre ellos?

If we'd go again
All the way, from the start
I would try to change
The things that killed our love
Your pride has built a wall, so strong
That I can't get through
Is there really no chance
To start once again?

Camus escondió su cara en el cabello de Fler. Era muy difícil. Fler era la única con la que su corazón se derretía sin remedio a pesar de que él quisiera mantenerlo congelado.

If we'd go again
All the way, from the start
I would try to change
The things that killed our love
Yes, I've hurt your pride, and I know
What you've been through
You should give me a chance
This can't be the end
I'm still loving you
I'm still loving you
I'm still loving you, I need your love
I'm still loving you (I'm still loving you, baby)

La música termino y los muchachos comenzaron a aplaudir y hacer escandalo ovacionándolo haciendo que se separaran al mismo tiempo que el bote atracaba. Fler volteo a verlo con una sonrisa.

- Estoy segura, que ella estaría conmovida y aceptaría – dijo mientras Camus la ayudaba a bajar los empinados escalones

- Nada en el mundo me haría más feliz, que ella lo hiciera – respondió Camus reponiéndose de su momento de debilidad – Debo regresar a mi casa o tendré problemas. La llevare a su departamento.

- No hace falta – respondió Fler parando a un taxi – Muchas gracias por un día inolvidable. Prefiero que usted regrese a donde deba y no se meta en problemas para que pueda volver pronto a visitarme.

Camus le tomó la mano y se la beso.

- Puede apostar a que lo hare.

Fler se subió al taxi y le dio la dirección. Camus no se movió hasta que lo vio perderse y comenzar a correr en dirección hacia Grecia. Si no llegaba a tiempo, Sasha no lo dejaría salir en meses.

Fin del flashback.

Camus llegó al Campanario de Rodorio un minuto antes de la 1pm. Volteó a todos lados y no vio a nadie extraño. Un sonidito bastante fastidioso en la campana lo hizo voltear. Una figura bastante conocida por él, se subió al frágil barandal visiblemente temblorosamente agarrada de una de las paredes. El viento comenzó a soplar y su vestido blanco y su cabello rubio ondulado se agitó con él.

- Fler!

Camus corrió a toda velocidad escaleras arriba esperando alcanzarla. Que había pasado que ahora tomaba tan drástica decisión? Una caída de los 20 metros sería fatal para ella y su hija!

Llegó hasta la campana justo en el momento en que Fler que tiraba al vacío. Camus se tiró atrás de ella esperando poder evitar una tragedia para lo cual llamó a su armadura pidiéndole a Athena le diera una oportunidad más y extendió el brazo pero…

Camus cayó sobre una rodilla en un lugar rodeado de gente que por un momento no reconoció. Loki chocó la mano con Lucifer al saber bien hecha su travesura y regresar a sus lugar de honor donde Odín, Freya, Thor y Sasha estaban sentados en la misma mesa que Hilda. Camus volteo hacia atrás y vio a mucha gente conocida de Asgard, algunos personajes que parecían importantes vestidos en ropas lujosas y todo el salón adornado con flores blancas y listones dorados. Frente a él, Siegfried y Sigmund junto con los otros cinco dioses guerreros lo esperaban. Del otro lado, Aioros vestido con su ropa de Patriarca y su mascara nueva lo veía sin saber exactamente que estaba pasado y el anciano en ropa ceremonial que estaba detrás de un altar visiblemente dedicado a Odín , lo veía entre curioso y asustado.

- Finalmente el novio llegó – dijo Siegfried – Justo a tiempo.

- No entiendo. Siegfried. Que estoy…

Siegfried lo miró por un segundo antes de adelantarse y susurrarle.

- Sígueme.

Desorientado por lo no saber por qué estaba de nuevo en Asgard, Camus lo siguió en silencio.

- Solo serán cinco minutos – le dijo al público – Ya regresamos.

En cuanto salieron del Salón, Camus se detuvo en seco.

- Por qué me engañaron así? Donde esta Fler? Ella está bien?

- Ella está perfectamente. Te está esperando en esta habitación. – dijo poniendo la llave en la cerradura – Lista para su boda.

- Que dijiste?

Siegfried se detuvo antes de abrir la puerta.

- Mira Camus. Yo no te agrado y tú no me agradas, pero esto es algo que si juegas bien tus cartas, hasta nos lo vas a agradecer – explicó – Y antes de que hagas conclusiones tontas otra vez, debo decirte que prácticamente Hilda la obligó a hacer esto y yo no sabía que tú eras el novio hasta hace unas horas.

- Dijiste… boda?

- Que esperabas? Que la desgraciaras y después Hilda te ayudara a lavarte las manos casándola con alguien más? – volvió a decir Siegfried en voz baja – No te preocupes. Solo es un viejo método para hacer alianza oficial con el Santuario y darle un apellido a la hija de Fler. No tendrás ninguna obligación y obviamente tampoco la dote reglamentaria.

- Es este otro método de tortura medieval? Porque si es así…

- Dime Camus… Sasha sabe cómo se dieron las cosas con Fler? Que esto podría hacerlos felices a los dos?

- Claro que no! Hasta donde podría ella enterarse por los chismosos, yo no soy bienvenido aquí.

- Como consejo, sigue fingiéndolo o tú por qué crees que ella prácticamente te vendió a Hilda para casarte con su hermana? Para ayudarte? En cuanto alguna de las dos vea que esto puede hacerlos felices, pueden echarlo a perder.

Camus se quedó callado. Así que por eso Aioros y Sasha estaban entre los invitados? Malditos sean!

- Otra cosa. Fler no sabe quién es el novio. No la culpes. – Abrió la puerta y Fler se puso de pie.

Camus entró furioso. Había caído en la trampa de Sasha para hacerlo "eternamente miserable" y eso nunca se lo iba a perdonar. Todo su enojo se fue por la borda cuando vio a una apesadumbrada Fler vestida de novia con los ojos enormes por la sorpresa y temblando de miedo al ver a Camus imponente con su armadura puesta.

- Cinco minutos Fler – dijo antes de cerrarles la puerta

Fler retrocedió con las manos entrelazadas en el pecho tratando de controlar su corazón enloquecido de temor.

- Tú… tu eres…

- Aparentemente – contestó Camus caminando hacia ella

- Pero… y Sigmund…?

- El hermano de Siegfried? Con él era con quien estabas dispuesta a casarte?

- No pero… las damas dijeron… y luego yo pensé…

Camus llego hasta donde estaba ella para verla directo a los ojos que amenazaban con llorar llenos de arrepentimiento y vergüenza.

- De nuevo me ocultaste que te ibas a casar?

- Iba a decírtelo pero… no me dieron tiempo! – se defendió – Anoche estaba en mi departamento en Paris y hoy amanecí aquí! Una vez en Asgard no hay forma de comunicarme y lo sabes! – tuvo que sentarse – Sal de aquí mientras puedas. A ti no tienen forma de obligarte. La humillación quedara en la familia por unos meses pero tú puedes salvarte!

- No.

- Camus por favor no seas necio.

Camus se hincó frente a ella para levantarle la cara hacia él.

- Eres otra alucinación? Otro juego de dioses en contra mía?

- No.

- Por qué no puedo sentir tu cosmos entonces? Sabes cuánto tiempo te estuve buscando y no pude encontrarte… Gigi?

Fler volteó hacia la pulsera de Lyfia. Ella le dijo que no se lo revelara a nadie. Después lo miró a él.

- Una amiga me ayudó con magia a esconderlo – contestó – Yo estaba muy dolida.

- Entiendo. Cuando yo supe la verdad, casi vengo a matar a Hagen. – confesó – Pero ahora estas con Thes.

- Eso… eso también fue para… alejarte?

El corazón de Camus volvió a estrujarse.

- Entonces… me odias?

Fler se cubrió la cara con las manos.

- Lo intente. Intenté odiarte pero no pude. Intenté dejar de amarte y tampoco pude. Perdóname.

Camus sonrió casi a punto de perder el control. Quitó las manos de su cara para tomarlas entre las suyas.

- Entonces salgamos de aquí. Huyamos donde ni tú hermana ni el santuario pueda separarnos. Me pondré a arar mi propio viñedo si es necesario para mantenerlas y que podamos ser finalmente felices los tres. Ahora es el momento de hacerlo.

La cara de Fler se iluminó. De verdad él le estaba pidiendo eso? La quería hasta ese punto?

Antes de pudiera contestar, la puerta se abrió de una patada que dio Siegfried como si los hubiera estado escuchando y los cinco dioses guerreros lo rodearon. Fler dio un pequeño grito y Siegfried la detuvo.

- Escolten a Camus hasta el altar y no duden en quitarle la vida si se resiste. – ordeno con tono firme.

Con un movimiento de la mano como orden ellos obedecieron mientras Camus puso su cara más amarga que tenía para darle gusto a la traidora de Sasha y su próxima cuñada porque intuía que si de casualidad sabían que esa ceremonia lo haría feliz, la cancelarían a último momento.

En el salón, la orquesta comenzó a tocar la marcha nupcial y mientras los fotógrafos oficiales tomaban al novio quien veía con odio hacia Sasha y demás invitados de honor, Una chica de cabello castaño, muy joven y vestida de forma muy modesta veía al novio con pena. Tendría que hablar con el respecto a este evento en cuanto pudiera.

Fler entró con una cara muy seria al lugar del brazo de su cuñado. No se atrevía a mirar a Hilda por temor a que le dieran unas enormes ganas de mandarla al carajo en público. Se paró frente al sacerdote y Camus, y apenas y subió la mirada.

- Estamos aquí reunidos, para ser testigos de la unión de dos potencias sagradas a través de la pareja que esta frente a nosotros: Fler Polaris y Camus Verseau. Ambos representan lo mejor de dos mundos que aquí, en la tierra favorita de Odín, que traerá muchos beneficios mutuos.

Camus miró a Aioros de forma desafiante. Esta no era una boda. Era un maldito contrato comercial!

El sacerdote siguió ensalzando las bondades de Odín y familia y como esa unión limaría asperezas con la familia De Zeus y como ambas familias lucharían codo con codo en futuras contiendas como si fueran hermanos gracias a esa unión.

Fler no pudo evitar pensar que si acaso esa unión como él decía se llevara a cabo, solo duraría hasta que ellos siguieran vivos, ya que era lógico que nuevos gobernantes de ambas casas, pudieran volver a caer en la mezquindad de su ambición.

- Princesa Fler Polaris: Acepta a Camus Verseau del Santuario de Hera como su compañero de vida para lograr que Asgard sea honrada como se debe y se permita a esta tierra sagrada seguir brillando con luz propia?

Fler volteó a ver a su hermana, quien la veía con una mirada de advertencia que daba miedo.

- Acepto.

Se escuchó un murmullo de aprobación por parte de todos los presentes.

- Camus Verseau: Acepta a nuestra princesa Fler Polaris de las heladas pero bendecidas tierras de Asgard como compañera de vida para reforzar las alianzas establecidas entre nuestros sabios gobernantes y que ambas casas se ayuden en las buenas y en las malas?

Camus volteó hacia Aioros, quien negaba con la cabeza. Le estaba dando la anuencia para negarse?

- Acepto.

De nuevo se escuchó a la multitud sonreír y emocionarse con la respuesta.

Siegfried le extendió la mano a Camus.

- Dame las alianzas.

- Yo no tengo nada.

Sasha lo miró y sin hablar le dio la respuesta. Ese paquete que él tenía que entregar en el campanario, traía dentro las alianzas. De entre su ropa sacó la caja y se la entregó a Siegfried quien a su vez se la entregó a Sigmund para que la abriera. Una vez afuera, Sigmund se las regresó a su hermano pero cuando este se la iba a dar a Fler y Camus, este sonrió.

- Dame una espada también.

- No se permiten armas – contestó en voz baja el cuñado de Fler

Camus encendió su cosmos haciendo que los dioses guerreros se pusieran en guardia, pero Camus no se movió. Una chica muy joven de cabello castaño cubierta por una capa se acercó a ellos por detrás: era Athena disfrazada.

- Dohko, préstame tu espada – le dijo por cosmos – es urgente.

Por toda respuesta, la espada dorada de la armadura de libra apareció en sus manos y se la pasó a Siegfried quien se la dio a Camus sin voltear a ver quién se la había dado y Odín, al adivinar el motivo, le extendió la suya a Aioros quien no estaba seguro de que hacer hasta que vio a Camus poner la alianza que le correspondía en la punta, y él lo imitó con la que le correspondía a Fler. Hilda y Sasha se levantaron molestas de sus asientos al unísono pero no había nada que ninguna pudiera hacer cuando estaban rodeadas con dioses que parecían haber dado su anuencia.

Aioros le dio la espada a Fler con la alianza en la punta y los dos novios las cruzaron. Camus fue el primero en hablar.

- Juro ante todos los dioses del olimpo y también Asgardianos que no va a importarme si engordas, adelgazas o envejeces mientras estés a mi lado. En nuestro hogar nunca faltarán los quesos, los chocolates, el vino y el papel higiénico. Prometo no llevar la cuenta de los errores que cometes, ni castigarte o vengarme por ellos en el futuro y siempre bajar la tapa del inodoro, sacar la basura y aceptar ser el culpable de todo lo que pase, hasta que la muerte nos separe.

La gente comenzó a reír cuando comprendió lo que el novio había dicho en su marcado acento. Fler contuvo la risa, pero sabía por qué Camus lo estaba haciendo y ella debía hacer lo mismo.

- Juro ante todos los dioses Asgardianos y del Olimpo, escucharte con atención aunque las cosas que digas carezcan totalmente de lógica y sentido; Te prometo que en cada desayuno voy a darte el pan tostado que me salga menos quemado para comerlo con los quesos, los chocolates y el vino y prometo respirar profundo y recoger tus desastres en el baño, la habitación, el salón, y en toda la casa hasta que la muerte nos separe.

La gente les aplaudió mientras se reían aligerando la tensión del momento dioses incluidos. Las únicas que no estaban nada contentas eran las dos chicas que habían comenzado todo esto. No entendían como ellos podían burlarse de tan sagrada ceremonia como si no les importara.

El sacerdote intentó poner orden mientras conminaba a los novios a ponerse mutuamente las alianzas en el dedo anular de la mano derecha lo cual hicieron después de regresar las espadas.

- Señoras y señores, Le damos la bienvenida al Sr. Y la Sra. Verseau.

Todos comenzaron a aplaudir mientras vitoreaban a los novios y comenzaban todos a tomarse las fotos conmemorativas con ellos.

- Tendrán que darme copias – dijo Camus de mejor humor mientras posaba sin sonreír por completo pero con un brillo diferente en los ojos.

Siegfried fue por Hilda para tomarse las fotografías oficiales y Aioros hizo lo mismo con Sasha.

- Amor… discúlpalos. – dijo Siegfried ofreciéndole el brazo – Comprende que no fue fácil para ellos aceptar esto. Si vieras como estuvieron discutiendo justo antes.

- No debiste permitirles hablar – dijo justo antes de subieran a tomarse las fotos con ellos.

Sin decirles palabra a los novios, Hilda se bajó del pódium para ir al salón junto con los invitados VIP. Tocándole el turno a Sasha y Aioros, aunque Fler fingió su mejor cara, Camus no pudo hacer lo mismo. Le dio un pisotón a Aioros tan fuerte que en la foto salió ligeramente encorvado.

- Camus!

- Tienes suerte de ser el "patriarca" Aioros, de otro modo, ya estarías muerto – le susurró antes de que el fotógrafo pusiera a otras personas para la foto.

La música en el patio comenzó a tocar y Fler, terminaron con ese compromiso y lo guio hacia el balcón donde pudieron saludar al resto de Asgard, donde todos comenzaron a lanzarles flores y vitorearlos.

- Esos no son los votos que tenía que decir. Discúlpame. Perdí el control y arruiné la ceremonia. – dijo en voz baja mientras saludaba al publico

- Sé por qué lo hiciste y lo agradezco

- La verdad es que yo hubiera dicho – le tomó ambas manos y la gente al verlos guardó silencio para verlos y escucharlos – Fler… Aunque no pueda cambiar el pasado, si puedo prometer que estaré en tu futuro para celebrar tus triunfos como si fuesen los míos propios y sujetarte fuerte si en algún momento llegas a tropezar, me comprometo a ser tu amigo incondicional y amante ferviente, ayudarte a construir nuestro nuevo mundo y a labrar nuestro propio destino, En ti he encontrado la magia que le hacía falta a mi simple vida. Y por eso me entrego a ti, porque sé que la magia se convertirá en guía de nuestro amor.

A Fler se le subieron todos los colores y su expresión de felicidad era total.

- Camus El compromiso que aceptamos hoy es decisivo, porque implica permanecer a tu lado el resto de mi existencia, y pensar en ello me hace sentir dichoso porque eso incluye contar con tu paciencia, comprensión y amor por siempre y para siempre. No es casual la forma en que nos conocimos, tampoco es casual lo rápido que nos llegamos a amar. Así mismo, no es casual que tú este aquí frente a mí escuchando la forma en que me comprometo a ser tu compañera fiel y Más que un juramento, esto es una confesión. Admito que no tengo ningún argumento racional para fundamentar lo que siento por ti, pero supongo que de eso es de lo que se trata el amor. Gracias por aceptarme.

El estruendo que se escuchó afuera fue tan fuerte, que los seis dioses guerreros salieron a ver lo que sucedía. Camus beso sus manos y su mejilla y la llevó hacia dentro, donde la gente los esperaba para comenzar el banquete.

Septiembre 27, 2pm

Departamento de los Gemini - Gómez

Atenas, Atenas

Saga volvió a marcarle a Kanon. Se suponía que iban a llegar a medio día, pero eran las 2pm y comenzaba a preocuparse. No porque no supiera que estaban bien, dado que aun podía sentir el cosmos de ambos, sino porque no le contestaba ni por ese medio.

Tocaron a la puerta y corrió a abrirles.

- Oye está bien que seas impuntual pero ya tenía hambre! Las pizzas ya están frías y…

Kanon no contestó. En una mano tenia las compras y en la otra a un Shura totalmente nockeado.

- Pero qué demonios…!

- Ayúdame con esto! – dijo Kanon entregándole las compras que Saga se apresuró a tomar y Kanon llevó casi con los pies arrastrando a Shura.

- Tomaron sin mí?

- No es lo que crees…

- Pues explícame.

Kanon puso a Shura sobre el sofá, quien involuntariamente cayó hacia el posa brazos.

- Donde esta Laura? No quiero que ni vaya a escuchar esto, ni después me vaya a querer enviar a la cárcel por Narcotraficante.

- Laura está en una misión en Madrid. Oye hablando de eso… Vas a ser tío! – le mostró el celular con la imagen del ultrasonido haciendo que Kanon no solo no lo felicitara sino que se pusiera blanco como el papel y muy serio – No es fabuloso?.

- Laura… estaba en Madrid?

- Es lo que te acabo de decir. – insistió Saga – Porque no me felicitas?

Kanon miró a Saga y pasó saliva.

- Zita también está en Madrid – dijo apenas de forma audible volteando a ver a Shura.

- En serio? Que posibilidades había de eso?

- No has prendido el televisor en todo el día verdad?

Saga negó con la cabeza.

- Acababa de despertar cuando me llamaste – dijo moviéndose hacia la cocina para poner las cervezas en el refrigerador y mientras masticar un pedazo de pizza

Kanon aprovechó para tomar el control remoto de la televisión y prenderla. Saga se sentó en el sillón junto a Shura mientras Kanon llegaba al canal que estaba buscando.

- Seguro que está bien?

- Pues… tuve que hacerme pasar por ti en el hospital para robarme una jeringa llena de DORMICUM o como se llame.

- Que hiciste qué?

- Fue necesario. Estábamos comprando la cerveza y en la tienda tenían las noticias y Shura se puso a tratar de localizar a su esposa y familia sin lograrlo y se me puso histérico, abolló varios autos en el camino… tuve que hacerlo antes de que hiciera daño a alguien. En internet decía que era un buen sedante.

Saga lo revisó. En efecto, sus pupilas y su pulso le decía que estaba completamente drogado.

- Cuanto le diste?

Kanon sacó la jeringa a la mitad.

- Idiota! Lo puedes matar con esto!

- No se ha muerto. Además le puse solo 1mg y solo se enojó más. Tuve que volver a hacerlo y luego escaparme del hospital con él a cuestas – reclamó Kanon – Así que ni me veas feo. Se tiene que hacer lo que se tiene que hacer.

- Si pero por qué? Shura siempre se mantiene bajo un control envidiable! No debiste!

Kanon logró sintonizar el noticiero y le hizo una señal a Saga para que escuchara.

- Buenas tardes señoras y señores, les damos la bienvenida al noticiero de las 3 de la tarde. seguimos con ustedes para seguir informándoles sobre el suceso que paso esta mañana donde el hospital Militar de Madrid España quedo reducido a escombros debido a una explosión. Las autoridades aún no saben si se trató de un ataque terrorista o de un cilindro de gas que exploto en el sótano pero la investigación ya está en curso, mientras se siguen trasladando a los heridos y pacientes a otros hospitales, esto sumado a las manifestaciones que empezaron el día de hoy por la negativa del gobierno español para darle su libertad a la provincia de Cataluña. Aun no hay un número total de víctimas, pero se sabe que todo el lugar a varias cuadras a la redonda están bloqueados por elementos de todos los mandos. Tenemos unas pocas imágenes de lo sucedido antes de que el sistema de comunicaciones colapsara, por lo que no podemos saber con exactitud lo que está sucediendo. El espacio aéreo de toda el país está restringido debido a los protocolos de seguridad nacional en caso que este sea un ataque terrorista como el ocurrido años atrás en la misma ciudad en el metro de la ciudad por un grupo de…

Kanon volteó a ver a su hermano cuando sintió un cambio en su cosmos. Su cabello estaba completamente gris y su cosmo estaba inestable. Revisaba la ecografía enviada por Laura donde claramente el membrete era del mismo hospital. Dejó caer su celular mientras se levantaba dispuesto a todo.

- Mi mujer… mi bebe…

- Saga contrólate! – dijo mientras tomaba la jeringa – Trata de llamarle.

- No contesta.

- Dijeron que las comunicaciones estaban mal. Ten paciencia.

- Jajaja me pides paciencia? No solo mi hijo y el de Shura están ahí. También el tuyo!

- Qué? De que hablas?

- Nat, la amiga de Laura está embarazada y tú eres el padre. Y ella estaba también ahí! Son nuestros hijos, Kanon! En este momento voy a ir y a matar a quien…

Kanon se movió con rapidez inyectándole el resto de la jeringa y siendo víctima de un golpe de su hermano que lo mandó hasta la cocina antes de caer como piedra en el suelo de la sala. Kanon se levantó quitándose un hilillo de sangre del labio antes de caminar hacia su hermano. Tal vez no era la mejor manera de decírselo pero no encontró una mejor. Que habría sucedido con las dos mujeres de sus hermanos? Estarían bien? Y por qué había dicho que su hijo también? Ay Athena! Por qué ahora? Que hicieron ellos para merecer todo eso? De pronto su mente se iluminó y el cayó al suelo en Shock: La amenaza de Eris!

Septiembre 27, 5pm

Palacio Valhalla,

Asgard, Noruega

Durante todo el banquete, Camus seguía mirando a Sasha. La molestia de la chica pelilla, que hablaba muy alegremente con alguien que se parecía mucho a Liz pero con cabello obscuro, había desaparecido. Cuando de vez en cuando llegaban a cruzar miradas, la sonrisa de la pelilla era casi tenebrosa. La cena había ocurrido entre alegría, música y mensajes de enhorabuena de los aldeanos, pero no los habían sentado juntos. De un lado de la mesa, en la cabecera estaba el, y del opuesto estaba Fler. A su derecha estaba Thor, Loki, Odín, Freya, Hilda y Siegfried. A su izquierda, Aioros, Sasha, La chica de cabello castaño que se parecía a Liz, el padre de esta chica, y Sigmund.

- Porque la cara larga amigo – dijo Thor – Debo felicitarte por lo valiente que eres.

- Ah sí? Por qué exactamente? – contestó Camus en tono frio

- Por aceptar un matrimonio por conveniencia. – respondió el dios del trueno – Creí que en estos tiempos eso ya no se usaba.

- Cuando nadie te quiere ni regalado, es una buena opción – intervino Loki en tono burlón – Además no seas hipócrita. Hubieras querido estar en su lugar de no ser porque madre no nos permite casarnos con humanas.

- Ella es una azalea en un banco de nieve – respondió Thor en tono amargo – Merecía algo mejor.

- Tu no eras una opción – insistió Loki – Además, solo es un matrimonio de palabra para limpiar el honor de los Polaris y del panteón nórdico. En un año podrá divorciarse y entonces sí, haz con ella lo que quieras.

Camus se levantó tan violentamente de la mesa que todos, Fler incluida, voltearon a verlo. Tratando con todas sus fuerzas de retomar el control, volvió a tomar asiento.

- Qué? No lo sabias? – el tono que Loki le estaba poniendo a la conversación estaba enfadándolo aún más – El trato entre los líderes del Santuario y los líderes del Palacio Valhalla fue ese. No los van a dejar estar juntos. – se rio- Aunque debo decir que me hiciste ganar un buen dinero cuando te pusiste la pulsera que "encontraste". Mi hermano decía que no eras tan estúpido como para ponértelo pero yo le dije: Hermano, es un caballero de Ath… de Hera, así que Estúpido es su segundo nombre.

Si las miradas pudieran convertirse en dagas doradas para matar dioses, ambos habían muerto con una de esas miradas que Camus les estaba dando. Thor se inclinó más hacia él.

- No le hagas caso, es que aún no los perdona por lo que le echaron a perder la última vez…

- Ni el tiempo que me hicieron pasar castigado en la obscuridad, pero ese no es el punto.

La pulsera, que el había pensado que era de algún pretendiente de Fler, comenzó a picarle pero él no podía rascarse debido a su armadura.

- Lamento informarles, que cualquier plan entre los traidores y los… Dubhe Alfa, no va a resultar.

- Anda, danos el gusto de ver si sirven las pulseras – incitó Loki – Levántate de la mesa y llévate a la Novia diciendo que tienen que descansar. Ninguno de nosotros los va a detener. Te doy chance. Anda!

Camus miró a Fler. Sí. Se la iba a llevar a descansar pero lo más lejos que pudiera de ese castillo. Caminó hasta ella y le extendió la mano.

- Es hora de retirarnos, Ma petit.

Fler asintió, y puso su mano sobre la de el. Ninguno de los invitados se inmutó y ambos caminaron hacia la salida del salón. Debido a la amplitud del vestido de Fler, ella cruzó primero el umbral de la puerta desapareciendo al instante de la vista de Camus quien al dar dos pasos para buscarla cayó esta vez los pocos metros que le quedaban a su caída desde la torre del campanario de Rodorio. Ya casi anochecía y quedó aturdido por unos segundos mientras las personas que pasaban por ahí lo miraban extrañados y el también al saberse en Grecia. Había sido un truco? Una alucinación del enemigo? Lentamente miró su mano derecha y efectivamente vio la alianza con grabado de copo de nieve. No había sido un sueño ni ninguna otra manipulación similar.

Fler se agarró del umbral de la puerta del departamento sobre la boutique horrorizada. Donde estaba Camus? Por qué estaba en ese lugar? Se dejó caer lentamente en el suelo cuando se dio cuenta que la boda solo había sido un truco, porque a ellos dos, después de tanto tiempo que les había costado arreglar las cosas, no les iban a permitir estar juntos.

Septiembre 28, 4.00am

Departamento de los Gemini – Gómez

Atenas, Atenas

Nat y Laura salieron de la Oficina de la Interpol de Atenas rendidas. Laura solo quería llegar con Saga para celebrar la buena noticia y Nat ya estaba con las piernas hinchadas y hambrienta después de manejar ocho horas de Madrid a Toulouse Francia por la simple desesperación de su amiga de llegar antes de lo convenido con sus jefes. No habían encontrado ningún vuelo disponible y dado que sus celulares habían fallado y no podían llamarle a nadie, había sido una suerte para ellas ir a desayunar y encontrarse a Zita y familia en ese merendero. Habían estado platicando y tomándose fotos para la posteridad las tres e incluso Zita le había regalado una de las copias autografiadas del libro donde salía en la portada. A medio día seria la firma, pero Laura le dijo que no podían quedarse y que buscarían una arrendadora de autos para llegar manejando a Atenas, a lo que Zita simplemente se había echado a reír.

- Tú quieres que tu trasero te quede como aspirina verdad? Plano y con la rayita en medio – se burló – Lo que necesitan es ir a Barcelona o algún otro aeropuerto grande. De seguro encontraran vuelos aunque sea con escala. Si se van manejando son casi dos días.

- Maldición! Es mucho tiempo – había exclamado Laura

- Son 7 horas al aeropuerto internacional de Barcelona. – dijo Zita – Es lo más rápido que podrías ir.

- Road trip! – Exclamó Nat emocionada – La Inter… galáctica y compañía paga!

- Zoqueta – murmuró Laura al ver que Nat casi se había ido de lengua.

Zita les había recomendado una arrendadora que tenía sucursales en todos los países de la comunidad europea para poder dejarlo en Atenas. Habían agarrado camino cerca de las 7 de la mañana y dado que los celulares dejaron de tener batería unas horas después y el cargador de encendedor del auto no funcionaba, habían agarrado un mapa de la guantera. Después de una parada de descanso y para comer algo en Zaragoza, habían tomado mal el mapa y en lugar de desviarse hacia Barcelona, habían seguido hacia Huesca, donde después de tomarse las fotos del recuerdo reglamentarias, decidieron seguir derecho hasta donde las llevara el camino, pues estaba más cerca la frontera Francesa que la ciudad de Barcelona.

Después de mostrar sus pasaportes habían seguido la carretera hasta llegar a Toulouse.

- Y aquí es cuando te voy a ahorcar Nat! Como que no sabes dónde quedaron los celulares?

- Buaaaa es que los puse en la bolsita de plástico Ziploc junto con los Snacks pero creo que cuando tire la basura estaban dentro y como tenía mucho sueño no me fije.

- En serio que ni siquiera tengo fuerzas para pelear, Nat. Estamos sin celular, sin podernos comunicar con Camus para que nos traduzca, sin GPS, y no me se de memoria los números de teléfono de alguien que nos pueda salvar. Tu si?

- Pues mis hermanos están inutilizables así que… solo los de la antigua oficina.

- Pues improvisaremos. Dámelo. – contestó Laura parándose en una gasolinera para hacer una llamada.

Nat le proporciono el teléfono del Capitán Kira, quien de inmediato le llamó al Director Leroy quien a su vez pidió el apoyo de su Colega en Paris para que las fueran a recoger ahí. Laura estaba muy agradecida de que al menos el Director Leroy, ávido de la información que necesitaba de la misión de ellas, les hubiera conseguido transporte privado que las había llevado directo a Atenas en tiempo record.

Cuando llegaron a la oficina del Director eran casi las 3 de la mañana y el las esperaba con la mano extendida.

- No sé cómo o porque están aquí antes, pero no es hora de charlar. Denme la información y vayan a descansar. No estaban a vuelta de la esquina. Las espero a las 4pm aquí mismo para rendir informe.

- Sí señor. Gracias.

Ambas chicas habían tomado un taxi.

- Mi depa está más cerca. Vamos?

- Bueno.

Las dos subieron al elevador entre cabeceos y risas burlándose la una de la otra. La puerta se abrió, y ambas arrastraron sus maletas casi pateándolas para ya no tener que jalarlas.

- Estoy muerta. – dijo Nat – Recuérdame no volver a dejarte manejar otra vez.

- Qué? No te gusta?

- Casi te sales del camino dos veces y casi rompemos la suspensión del auto tres!

- Yo conté cuatro pero era para que pudieras dormirte un rato.

- Y como me voy a dormir si venia muerta de miedo

- Exagerada.

Cuando Laura abrió la puerta, para su sorpresa, había varias botellas de vino vacías, pizza por todos lados, Kanon y Shura dormidos de borrachos junto a la consola y la televisión en stand by.

- Pero que carajos paso aquí?

- Tuvieron fiesta y no invitaron – dijo Nat tratando de pasar por entre el desastre con la maleta.

Saga salió tambaleándose del sanitario algo mareado también.

- Amor?

Saga volteó con los ojos vidriosos.

- Que no tenía el cabello azul? Se lo pinto? – respondió Nat en tono de confidencia.

- Lau? Mi Lau? Eres tú de verdad? – dijo mientras corría y se pegaba en el dedo chiquito en el sofá por andar descalzó. Cojeando llegó hacia ella y la abrazó a punto de exprimirla. – Si eres tú! Estas bien? No te paso nada?.

Kanon y Shura despertaron al escuchar el escándalo. Era obvio que aún no estaban en sus cabales por la forma en la que las miraban y arrastraban las palabras.

- Una menos falta una y la mas importante para mi – dijo Shura casi llorando – Donde estará mi Zita?

- Hola Shura! Zita está con sus abuelos. Desayunamos con ella. – dijo Laura tratando de zafarse de los brazos de Saga quien no la dejaba ir – Nos ayudó a conseguir un vehículo.

- Segura? No la puedo localizar

- Es que los teléfonos fallaron. Pero sí. Porque están así? Que sucedió?

Kanon sin decir palabra pero aun tambaleante, prendió la televisión en el noticiero donde las dos pudieron ver la magnitud del problema ahora que se habían filtrado imágenes aéreas.

- Ay Dios! Nosotras estuvimos ahí!

- Lo sé. – dijo Saga abrazándola más fuerte.

- Amor… me vas a asfixiar. Cálmate y te doy un beso.

Saga no espero a calmarse y comenzó a besarla haciendo que su alma se tranquilizara de nuevo y su cabello poco a poco recobrara su color normal.

Nat agitó su cabeza incrédula al ver esto. Sería uno de esos colores nuevos que cambiaban de color con el calor?

Kanon aprovechó la distracción de sus hermanos y tomó a Nat del brazo fuertemente llevándosela a la terraza sin que esta se resistiera mucho.

- Oye tú, suéltame!

Kanon cerró la puerta tras de él y la soltó de manera agresiva.

- Me puedes decir que son estupideces de que estas embarazada por mi culpa? Por qué me incriminas? No tengo ni un quinto a mi nombre como para que quieras sacar provecho de mí.

- Yo no te estoy incriminando – se defendió

- Entonces deja de pregonar por toda Grecia que tus errores son por MI culpa!

- Yo solo dije que PODIA ser tuyo que es diferente. De la vez que nos acostamos en el Table. Recuerdas?

- Ja! Acaso crees que yo recuerdo a todas las mujerzuelas con las que me acuesto?

Nat respondió con una furiosa cachetada que Kanon no hizo nada por detener en parte por la bebida y por otra porque el la estaba provocando.

- Tu madre es la mujerzuela aquí! A mí no me hablas así!

- Pues si lo fue no me acuerdo y eso explicaría lo bastardo que soy. Eso te hace sentir mejor? Deja de inventar cuentos o te juro que lo vas a lamentar.

- No estoy inventando nada. Solo hubieron dos personas posibles y tú eres uno de ellos.

- Y que dijiste? Me agarro a este que tiene cara de pendejo y ya no? Escúchame bien porque no lo voy a repetir. Esa aberración no es mía. No es ni remotamente posible, pero si escucho tan solo una sola vez mas que alguien siquiera lo insinúa y te voy a dar donde más te duele entendido zorra?

Nat comenzó a hiperventilar por la furia que la estaba consumiendo.

- Espero que de verdad sea de Ángelo y no tuyo para que no tenga un desgraciado hijo de puta como padre!

- Jajaja ese es el otro? Jajaja buena suerte con intentar chantajearlo a él. Porque si yo soy un HDP, él es el dios de los HDP.

- A mí no me interesa que ninguno de ustedes sean parte de la vida de mi hijo! Si mis hermanos no me hubieran presionado ni siquiera hubiera revelado los posibles nombres!

- Ellos deben de saber lo fácil que eres, así que no les habrá caído de sorpresa que metieras las cuatro... O más bien... Las abrieras.

- Deja de tratarme así o el que lo vas a lamentar eres tú! – Sacó su arma de cargo para tratar de intimidarlo y le apuntó a Kanon quien comenzó a reírse y se puso el cañón de la pistola en la frente para sorpresa de la chica.

- Te trato como me viene en gana. Dispara anda! No puedes nanana y sabes qué? Ya dije lo que tenía que decir y me voy a mi casa. – vio de reojo a Laura mostrándole en la computadora de Saga unas fotos haciendo que Shura se relajara en cuestión de Zita y supo que todo estaría bien – Tu presencia me incomoda.

Se quitó la pistola de la cabeza de un manotazo dando la media vuelta para entrar a la sala.

- quien fue el chismoso? quien fue?

- Tus hermanos

- eso es mentira! ellos no hablarían contigo!

- Adiós.

Llegó a donde Saga abrazaba a Shura también.

- Eit cuñada, Me da gusto que hayas regresado a salvo. Te dejo a tu marido para que festejen pero si no salgo de aquí voy a hacer algo que no debo. Vámonos Shura. La Sanbocho nos va a estar esperando con una hoja de castigo en la mano. Y Felicidades por la nueva adición a la familia. Vendré pronto para ponerme al tanto.

Nat corrió, aventó la pistola al sillón y volteó a Kanon jalándolo de la camisa.

- Quien fue? Laura o este? – preguntó Señalando a Saga.

- Laura, si no la controlas me voy a encabronar. – Aseguró Kanon molesto

- Nat! Que te pasa!?

- Tu cállate! – le gritó Nat – Tú tienes la culpa por hocicona y ahora este maldito perro cree que puede tratarme como una puta cualquiera

- Guau Guau! – ladró Kanon haciendo que Saga lo sacara de ese conflicto llevándoselo más cerca de la puerta.

- Que está pasando? – preguntó – Nat es muy propensa a tener problemas en su embarazo

- Y eso a mí que me importa? Yo ya me voy y me llevo a Shura. – contestó Kanon llamando a un taxi con la aplicación de su celular – Esto está de locos y lo que menos quiero es que después me cobren a mí los daños que podría hacer si no me voy de aquí ahora.

Shura, sin comprender lo que pasaba se despidió de todos y jaló a Kanon hacia afuera quien azotó la puerta tras de él haciendo que Nat cayera dramáticamente de rodillas.

- Nat! – dijo Laura hincándose junto a ella

- Déjame en paz! Todo esto es tu culpa! Fue una trampa tuya!

- Ni siquiera sé de qué hablas! – se defendió – y por qué no está tu arma en tu funda?

- Quiero que mis hermanos vengan por mi – lloró

- Nat… ninguno de los tres está en condiciones, recuerdas? – comenzó a preocuparse Laura al ver a su amigo en ese estado

- Lo voy a matar! – gritó Nat haciendo que Saga interviniera durmiéndola con su cosmos.

- Lo siento dulzura pero fue por su bien

- Lo sé. Llévala por favor a la segunda recamara. Al rato la llevo a su casa. Está cansada y ya no sabe lo que dijo.

Saga obedeció y mientras Laura se quitaba los zapatos y suspiraba al ver todo el tiradero, Saga regresó.

- Fue mi culpa. En mi desesperación al no saber nada de ti, se me salió decirle a Kanon lo del hijo de Nat y al parecer pelearon por eso.

- No es la mejor manera pero de alguna forma se iba a enterar – volvió a abrazarlo – Lamento que te hayas preocupado. Yo solo quería venir corriendo a tus brazos después de la maravillosa noticia y no pensé que hubiera sucedido eso.

- Te creo – dijo respondiendo el abrazo - pero estaba... Casi histérico. Como era posible que los dioses me quitaran a mis dos amores?

- casi histérico?

- ok, ok histérico y medio. En mi defensa Shura estaba igual. Estúpido Kanon nos drogó a los dos!

Laura comenzó a reír. Ese cuñado suyo era de cuidado.

- Sabes? Me puse tan contento que la vecina me regaño por andar desnudo gritando.

Laura sacó de su chamarra la fotografía del ultrasonido.

- Ya te la había enviado pero… aquí está en vivo.

- Cuantas semanas?

- Entre 3 y 4. Ves? Solo es un puntito.

- El puntito más hermoso del universo porque es nuestro. – Saga sonrió y Laura sintió que las piernas se le hacían de gelatina – Me haces el hombre más feliz del mundo.

- Y tú a mí la mujer más feliz del mundo. Saga… vamos a ser papás!

- Vamos a ser papás! Oh oh, vamos a tener que cambiar la decoración del cuarto de huéspedes... Y clausurar los jacuzzis... Y cambiar los rieles de la terraza... Y quitar todo lo puntiagudo de los muebles!

- Podrás vivir sin los jacuzzis?

- No será ningún sacrificio si es por la seguridad de mis amores.

Laura sonrió llevándoselo a la habitación.

- Eres un amor lo sabias? – le dio un beso - Algo solucionaremos para que los jacuzzis no sean un peligro para ellos y lo puedas seguir usando, aún tenemos mucho tiempo. Voy a tomarme un baño. Me duelen las piernas de manejar. Me esperas?

- Si

Para cuando Laura regreso de su baño, Saga ya se había dormido abrazando la ecografía del futuro bebe mascaritas.

Septiembre 28, 5.59 pm

Departamento de Pandora

Londres, Inglaterra

Pandora miró el reloj: 5.59pm. En mal momento se le había ocurrido decirle a DM que viniera a su apartamento cuando había demasiadas memorias excitantes ahí. No solo eso. Se suponía que ella estaba indignada con él por todas las cosas que le había dicho en la fiesta. Por qué se había dejado llevar por lo que Afro y el mismo DM le habían dicho? No era más fácil solo alejarse de él y nunca volverlo a ver?

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando el timbre comenzó a sonar y fue a abrir la puerta no sin antes revisar en el espejo, si su imagen estaba perfecta. No solo se había maquillado con cuidado, sino que había recogido su cabello en un chongo de corazón con algunos casuales dejando su cuello a propósito al descubierto para torturarlo.

- Me sorprende que llegues a tiempo – Dijo Pandora abriendo finalmente la puerta

- De hecho llegue hace diez minutos, pero sé que la puntualidad es importante para ti – respondió DM como con diez bolsas del mandando dejando sorprendida a Pandora aparte de su mochila en la espalda.

- Que tanto trajiste! – preguntó

- Tú me dijiste que trajera de todo para consentir a Milady – respondió yendo directamente hacia la cocina.

Pandora solo lo dejo hacer y deshacer. Una vez que DM hubo acomodado todo en la cocina, que no le tomó más de diez minutos, abrió la división de la barra de la cocina para tener un visual de Pandora quien tomó una sopa fría del refrigerador y se sentó en el sofá prendiendo la televisión con las piernas cruzadas dejándole una buena visión de sus piernas a DM.

- Serias tan amable de aventarme el cojín que tienes a tu lado? – dijo DM desde detrás de la barra.

Pandora lo miró con sospecha y lo aventó, cachándolo DM en el aire. Unos minutos más tarde, DM, vestido con una filipina blanca nueva, delantal, gorro, bigote falso y una tremenda barriga para lo cual había utilizado el cojín, salió de la cocina con un plato de vegetales crudos pre cortados con aderezo.

Pandora tuvo que soltar la carcajada al verlo y taparse la cara con el cojín. Eso no lo esperaba.

- Mi scusi signorina. Cosa vuoi per cena oggi? Questo chef farà ciò che vuole la signorina.

- Rheinischer Sauerbraten per favore signore.

La sonrisa de DM se transformó en preocupación. Ese era el platillo que la última vez no le había salido lo suficientemente bien como para presentárselo a ella. Pandora parecía saber lo que estaba pensando pues su sonrisa era más bien sádica.

- Uhhh… estas segura? Puedo prepararte algo más… liviano.

- No. Solo tengo antojo de eso. Pero si no puedes…

- Hare mi mejor esfuerzo. Ensalada?

- No. Quiero Rheinischer Sauerbraten!

- Ok. Ok. Pero… podrías… inspirarme un poco?

- Inspirarte?

- Un poco de música, platica…

- Regresa a la cocina que pronto tendré hambre – dijo Pandora apagando el televisor y dándole el control del reproductor.

DM asintió y la vio desaparecer en la sala con un par de revistas femeninas, donde ella se descalzó y se puso cómoda ignorando el ruido de instrumentos en la cocina. DM puso música y comenzó a cocinar. Pandora sonrió con satisfacción. Era casi imposible que el pudiera recrear esa receta por la simple y sencilla razón, de que la carne requería un marinado especial de varios días y algunos ingredientes. Y una vez que el fallara, ella podría burlarse y humillarlo como ella quería. Con ese pensamiento, se recostó en su sofá quedándose dormida.

Una hora y media más tarde, el aroma tan único que venía de la cocina así como un DM cantando, la sacó de su ensoñación. Se dio cuenta que DM le había puesto una manta que seguramente había sacado del closet de blancos. Se levantó y se acercó a la cocina despacio y sin hacer ruido para ver a DM bailando como Carlton del Principe del Rap mientras cantaba:

It's not unusual to be loved by anyone
It's not unusual to have fun with anyone
But when I see you hanging about with anyone
It's not unusual to see me cry,
I wanna die

It's not unusual to go out at any time
But when I see you out and about it's such a crime
If you should ever wanna be loved by anyone,
It's not unusual it happens every day
No matter what you say
You'll find it happens all the time
Love will never do what you want it to
Why can't this crazy love be mine?

It's not unusual to be mad with anyone
It's not unusual to be sad with anyone
But if I ever find
That you've changed at anytime
It's not unusual to find that I'm in love with you

Pandora tuvo que salir de ahí corriendo directo al baño. Eso ya era demasiado. No podría mantener su postura seria con el haciendo todas esas tonterías. Para cuando regresó, del baño donde tuvo que retocarse peinado y maquillaje, DM ya había comenzado a poner la mesa.

- Milady… la cena esta lista. – Le abrió la silla para sentarse aun disfrazado y sonriendo – Espero que sea a su entera satisfacción.

- Ya veremos – Dijo Pandora sentándose mientras DM ponía la servilleta en sus piernas.

DM no dijo nada, pero fue a la cocina por una fuente conteniendo la carne y otras más pequeñas con patatas al horno con piel, fideos y puré de manzana. Puso un poco de pan, aunque sabía que Pandora lo ignoraría por conservar la línea pero como se veía bien, decidió dejarlo. Le emplato la carne y lo demás y se quedó junto a ella de pie para esperar su veredicto.

Pandora se acercó a su plato para olerlo. Demonios. Eso olía muy bien.

- Buen provecho Milady.

Pandora cortó su primer bocado y al probarlo, volteó a ver a DM quien la miraba ansioso.

- Es… perfecto

- Lo sabía! Muajaja digo… me alegra.

- Voy a cenar sola?

- Me da permiso de sentarme con usted o debo comer en la cocina? – bromeó.

- Quítate ese ridículo disfraz y siéntate.

- Como ordene la señorita.

Pandora espero unos segundos hasta que el tomó otro plato de la cocina y se sirvió también.

- Debo admitir que no estaba muy seguro de que funcionara pero… - comió un bocado – salió perfecto

Pandora no dijo nada acerca de sus modales rudimentarios para comer. No era la primera vez que lo veía.

- Yo tampoco lo esperaba.

- Entonces… Me redimí?

- Sí.

- Bien.

Durante la cena, ambos platicaron acerca de la escuela y sus planes al respecto. Pandora se encontró sonriendo más veces de las que ella hubiera querido debido a las tonterías con las que salía DM como volverse el Representante de Afro en su carrera de modelo si todo lo demás fallaba.

- Olvidé hacer un postre! – dijo de repente – Estúpido! Estúpido!

- Tranquilo. Yo me encargo. – Respondió Pandora – Creo que ya trabajaste demasiado por esta noche.

- Pero…

- Solo no intervengas – dijo Pandora poniéndose un delantal que tenía colgado de la puerta de la cocina – Me gusta hacer postres.

DM se quedó sentado en la mesa viendo hacia la cocina. No se imaginaba a la arrogante y mimada Pandora en la cocina para nada. Después de unos minutos en los que escuchó la batidora, se acercó también sin hacer ruido a la puerta para espiarla. No podía ver lo que estaba cocinando, pero el horno estaba prendido Y podía ver que ella estaba diciendo la verdad cuando dijo que hacer postres le gustaba y podía apostar a que la hacía feliz. Sonreía todo el tiempo y era muy diligente. A él también pero a Pandora claramente la satisfacía a un nivel profundo, como él se imaginaba que se sentía cuando tocaba su arpa. Ella parecía feliz mientras se movía por la cocina. No, más que feliz. Brillaba. No la había visto así y estaba a un mundo de distancia de la mujer rica, prepotente y blanca como el papel que todos conocían. La observó moviéndose por la cocina. Pandora era hermosa, elegante y con clase. Y era una Heinstein. Los Heinstein cocinaban? No. No podía imaginarse a Radamanthys con delantal haciéndose unos huevos escoceses.

Una Heinstein haciendo un postre para él? Un don nadie?

Siguió pensando en eso y volvió a sentarse en la mesa. DM dejó de pensar cuando Pandora puso un plato frente a él. Pensamiento inútil, realmente, cuando parecía y olía tan increíble.

Levantó la vista hacia una sonriente Pandora.

- Zuccotto? En serio? Me hiciste Zuccotto?

- Con mermelada de frambuesa al horno. Espero que te guste.

Él cortó el Zuccotto, ligeramente crujiente por fuera y suaves por dentro y oh Dios, el olor. Si existían premios para los olores de la comida, ella lo había ganado.

Se contuvo de hacer exclamaciones guarras por pura determinación porque no era como ningún Zuccotto que alguna vez hubiera comido. Ligero como el aire, con el sabor ácido de esa increíble mermelada de frambuesa. Lo terminó en un tiempo récord incluso antes de que ella pudiera servirse su propio plato.

- Eso fue rápido - comentó Pandora mientras DM se daba el lujo de mirarla atentamente por primera vez. Estaba descalza porque los tacones en la cocina eran un peligro, y su vestido negro a la rodilla estaba bien cubierto con el delantal morado con sus iniciales. Su maquillaje era muy femenino y se veía más deliciosa que el Zuccotto. Su corazón golpeó bajo las costillas, con fuerza cuando escuchó – te sirvo más?

Pandora regresó a la cocina y DM no respondió. Lo pensó muchas veces mientras cerraba los ojos y cruzaba los brazos. No venía a eso. No venia preparado. Bueno ya que. El de la despedida por lo menos.

- Pandora, ven por favor - su voz sonaba extraña, incluso a sus propios oídos.

Ella estaba llevando su propio plato a la mesa cuando se detuvo ante la extraña nota en su voz. Entonces lo miró a la cara, miró hacia abajo en su regazo, le miró de nuevo y se sonrojó. Lo que él quería era evidente en su rostro, por no mencionar la enorme erección muy bien delineada por su pantalón.

Caminó lentamente hacia él como si una fuerza extraña la impulsara pero Sin vacilación alguna. Si hubiera vacilado, si sintiera que la estaba obligando de alguna manera, se detendría.

Ella se quedó de pie a su lado, con las piernas rozando donde estaba sentado.

DM se sentía fuera de control, una sensación inusual y una que habría rechazar en cualquier otro contexto. El control del Maestro Morte se había ido. En este momento, lo único que quería era estar dentro de Pandora y sentir su cuerpo desnudo contra el suyo. No había planificación, ni ninguna acción ulterior, actuó por puro instinto y se movió muy despacio.

- Esto tiene que salir —susurró, bajando el zíper del vestido y subiéndoselo lentamente — Ayúdame a quitártelo.

Pandora dejó el plato en la mesa y levantó las manos en el aire como si él fuera un ladrón de bancos. Le levantó el vestido y se lo sacó por arriba, tan rápidamente que su pelo crujió con electricidad estática. Sin sujetador y solo unas pantis de encaje negro. Fantástico. Sus manos temblaban tanto con una emoción indefinida que no sabía si podía tratar con pequeños ganchos y cosas.

Ella era increíblemente hermosa en esa luz. Toda esa piel pálida suave, los pechos grandes en su estrecha caja torácica.

Pandora sonrió. Él no le estaba dando órdenes. Morte no estaba ahí y Candy no estaba ahí. Solo estaban Pandora y DM. Se dio el lujo de hacer lo mismo con él, quitándole, no, arrancándole la camisa de donde varios botones volaron hasta caer en el suelo mientras el solo levantaba el trasero y se sacaba los pantalones quedando en una de esas trusas blancas que Pandora había visto en el espectacular frente a su ventana por varios días.

- Tengo que apagar el horno antes de que cause un accidente – Dijo Pandora regresando a la cocina sonriendo, pero esta vez DM la siguió para su sorpresa.

DM apagó el horno, despejó la mesada con el antebrazo e instaló a Pandora en el borde, dando un paso entre sus piernas. La besó en el cuello y murmuró:

- Verte cocinar y comer tu Zuccotto me ha puesto caliente.

Pandora se rio y sus pechos se estremecieron sobre su torso. DM pasó la mano hasta su largo y delgado muslo hacia su sexo y haciendo a un lado su ropa interior, la tocó haciéndola estremecer.

- Verme comer lo que tu preparaste también tiene ese efecto en ti? — le preguntó a Pandora.

La espalda de Pandora se arqueó y su cabeza cayó hacia un lado. Su cuello era una zona erógena y DM lo sabía mejor que nadie. Él pasó la nariz contra su cuello, y las ondas de cabello suave que enmarcaban el rostro de ella acariciaron su piel.

- Averígualo. Te doy permiso. —susurró Pandora queriendo tomar control.

DM estaba tan encandilado con el sabor de su piel, con la sensación de su cabello contra su rostro que le llevó un minuto entender a qué se refería. Lamió la piel detrás de la oreja mientras la acariciaba y... sí. Aparentemente verlo comer el postre la había preparado muy bien. Ella era como un pequeño horno allí, caliente y jugosa. La acarició con suavidad, lentamente, echándose hacia atrás para ver su cara con la luz de la cocina. Pandora brillaba, como una perla. Mientras la tocaba, entró en ella con su dedo, estudiando su expresión para ver si le gustaba.

Su cabeza estaba inclinada hacia atrás, los ojos cerrados, las pestañas absurdamente gruesas aletearon. Cuando su rostro se tensó supo que iba por buen camino.

- Ángelo… —susurró.

- Estoy aquí — respondió

Así resbaladiza y caliente, terminó de quitarle la ropa interior, se quitó la suya y la penetró como un sueño, levantó los labios de su cuello para besar su boca, otra fuente de calor en la que él podría entrar de nuevo después de todo lo que había pasado. Todo en ella era magia pura, la sensación de su espalda suave en sus manos, los muslos suaves agarrando los de él.

DM se movió hacia adelante, dentro de ella, besándola profundamente, su lengua imitando lo que estaba haciendo en la parte inferior del cuerpo suave y dulce.

Estaban haciendo ruidos en la tranquilidad de la cocina, sus cuerpos rozándose en todas partes. Por un segundo DM apartó su boca de la de ella y bajó la mirada hacia donde estaban unidos, se observó a sí mismo mientras se retiraba y luego se deslizaba de nuevo en su interior. Pandora miró también hacia abajo. La piel de él era más oscura, más áspera. Observar sus cuerpos retorciéndose juntos fue el espectáculo más erótico que jamás había visto y que ella sabía, después de esa noche, que no volvería a ocurrir jamás.

Ambos levantaron la vista, y sus ojos se encontraron. Parecía como un momento increíblemente solemne, como si el aire fuera vacilante, expectante. Este era un asunto serio. DM sentía como si no sólo estuviera unido por la parte inferior de su cuerpo, sino también su corazón, latiendo justo al lado del suyo.

Pandora sonrió, levantó una mano hacia su mandíbula, se inclinó para darle un beso con una ternura que nunca había dado a nadie. A DM Le dolió el pecho y la única cosa que podría ayudar era besarla de nuevo, moviéndose más profundamente en ella, más rápido, hasta que estalló en su interior y la sintió pegada a él con los brazos, la boca, las piernas y su sexo. Apretándose con fuerza a su alrededor mientras ella estallaba en éxtasis y él se vaciaba en su interior, la abrazó con fuerza, casi con miedo de dejarla ir. Aun jadeando, recargó su cabeza en el cuello confundido por eso que estaba sintiendo.

- Quieres… quedarte esta última noche? – preguntó suavemente Pandora. Ella también estaba sumamente confundida pero no quería dejar pasar la oportunidad para volver a sentirse así de bien. Como podía ella ser manejada por el a su antojo? En lugar de humillarlo había resultado algo… romántico?

- Ni siquiera Hades entrando por la ventana y apuntándome con su espada me sacarían de aquí esta noche – contestó DM cargándola por la cintura sin salirse y besándola mientras la conducía a la recamara.

Ella, Pandora Heinstein, aunque fuera por esa noche, sería solo suya.

Septiembre 29, 4.30 pm

Hotel Cityview

Hong Kong, China

Dohko estaba muy alegre en el lobby del Hotel donde se hospedaba Shion. Había estado saliendo con Shion y Akane todos los días y ella reía mucho con sus ocurrencias. Era el último día que Shion iba a estar en Hong Kong y necesitaba hablar con él. Se sentó en uno de los silloncitos para leer el periódico para esperarlo y su teléfono comenzó a sonar.

D Hola?

S Maestro. Habla Shiryu

D Shiryu hijo! Qué bueno que me llamas. Como has estado?

S Bien maestro.

D Y la escuela? Espero que estés aprendiendo mucho.

S Si maestro. Hasta hoy, he estado estudiando con ahincó para hacerlo sentir orgulloso pero…

D Pero?

S Maestro…

D Shiryu, que sucede? Ya bastante intrigado estoy conque tú me llames ya que no quiero reclamar pero no he oído nada de ti desde que te llame cuando estaba en la cárcel.

S Lo siento maestro. Soy un alumno malagradecido después de todo lo que ha hecho por mí.

D Ya ya no exageres. Dime a que debo el honor? Necesitas ayuda? Dinero? Que te hagan piojito?

S Maestro… Debo dejar la escuela.

D Qué? Por qué?

S Voy a regresar a los cinco picos.

D Por qué?

S Pues… Sunrei…

D Si, ya sé que Sunrei está en los cinco picos. Eso me recuerda… Podrían limpiar mi casa la próxima vez que la usen para sus… rituales amatorios? Eso de encontrar pruebas de que mi Alumno es sexualmente activo… y que conste que no me espanto pero …

S Sunrei está embarazada.

D …

S …

D Repite eso?

S Que Sunrei está embarazada y voy a tener que dejar la escuela para casarme y mantenerlos y…

D Ah no. Eso sí que no!

S Maestro!

D Shiryu! Apenas vas a cumplir los 18! No debes dejar la escuela!

S No tengo opción. No la voy a dejar sola.

D No dije que lo hicieras! Espera. Dohko respira… respira… ok. No vas a dejar la escuela. Es una parte muy importante para el futuro de ambos.

S Que sugiere?

D Llévatela a Japón contigo. Pregúntale a Saori si puede vivir ahí contigo mientras te estabilizas. Buscas un empleo de medio tiempo, ahorras para el futuro y si Saori accede, Sunrei tendrá la mejor atención. Tu sabes que Japón está muy avanzado en medicina. Terminas la universidad y entonces sí, te la llevas de regreso y te pones a trabajar en serio. Toma ventaja de las oportunidades que tienes.

S No se me había ocurrido.

D Y tampoco se te había ocurrido ponerle doble bolsita al dragón…

S Como dice?

D Nada. Sigue mi consejo muchacho. Es por el bien de los tres.

S Gracias maestro. Hablare con Saori y con Sunrei y lo mantendré al tanto. Me hacía falta hablar con usted.

D Cuando quieras.

Shiryu colgó el teléfono y Dohko se quedó viendo al infinito por algunos minutos antes de levantarse a recepción por la llave del 101.

Una hora más tarde, Shion entraba al lobby del hotel haciendo malabares con sus bolsas de compras y el libro que había estado leyendo bajo el brazo mientras buscaba la llave de su habitación. Venia suficientemente cargado con bolsas de tiendas de bebe que a los ojos de cualquiera que no lo conociera pensaría que él era el futuro papa, pero él estaba feliz de haberlo hecho ya que sabía que eso le daría una alegría a Geist al mismo tiempo que el aquietaba un poco su conciencia.

Inicio del Flashback

Shion camino de regreso de la comandancia de policía donde había llevado una canasta de regalo al Capitán Kira agradeciendo que el equipo de limpieza de los forenses hubiera terminado su casa antes de que Junet llegara y se decepcionara ya que él les había prometido un mini santuario para que pudieran vivir en paz y gracias a las tonterías de Dohko, esa paz se había visto comprometida.

De reojo, mientras pasaba por el parque, sentada en los columpios vio una figura familiar. Le costó un poco de trabajo estar seguro que era ella debido a su camiseta larga suelta con estampado de Hello Kitty color gris y sus mallas negras, pero en cuanto ella levantó la mirada hacia él, Shion supo que era Geist y se acercó.

- Buenos días Geist. No esperaba verte por aquí.

- Maestro! – Exclamó sorprendida levantándose sin saber si debía o no arrodillarse

- Tranquila. Siéntate. No quería importunarte. Que haces aquí tan solita?

- Pensaba

- Ah sí? Y en qué?

- En cómo salir del lio en el que me he metido yo sola.

- Con eso te refieres a…

- A la misión que le pedí a Hera y ahora no sé por dónde comenzar.

Shion se sentó en el columpio junto a ella.

- Cuéntame. Dos cabezas piensan mejor que una.

- Bueno… Mayura tuvo la grandiosa idea de decirme que le escribiera una carta a Hera para que, ya que tenía que salir del santuario para que no se notara mi estado, ayudarle con unos niños y al mismo tiempo yo pudiera regresar a la isla para el alumbramiento… y lo hice

- Y?

- Ella aceptó.

- Felicidades. Ya se lo dijiste a Shaina?

- No la encontré en su casa. Su celular suena pero no responde. Y creo que la suerte esta de mi lado porque las piernas me temblaban de miedo a su reacción.

Shion sonrió. El también estaría nervioso con el genio que Shaina se cargaba para ese tipo de noticias.

- De su departamento me fui al Orfanato que ella ayuda. Fui con ella un par de veces a dejarles sus donaciones. Se me ocurrió que podían darme tips de cómo empezar…

- Eso fue muy inteligente.

- Ni tanto. Cuando llegue, me enteré que el dueño de la propiedad ya les había pedido que desalojaran porque la había vendido a una compañía constructora para derrumbarla y construir un centro comercial. Las 12 niñas y 5 monjas que las cuidan y alimentan serán reubicadas en otros lugares dentro y fuera de Grecia, donde haya cupo para ellas y hay al menos dos pares de hermanas que serían separadas de ser así y… volví a meter la pata.

- Que hiciste?

Geist se abrazó a sí misma.

- Pensé: Que haría Shaina en este caso?. Solo son 12 niñas entre las edades 6 y 11. Y… le sugerí a la Madre superiora, que yo tenía un lugar para ellas. – suspiró – Si no podía con los niños que ya tenía comprometidos con Hera, como voy a poder con más?

Shion comenzó a reír. Estas niñas se metían en cada rollo solas.

- Y por qué no les hiciste la invitación a las monjas también?

- Eh?

Shion se levantó para hincarse frente a ella y tomarle ambas manos haciéndola ruborizar.

- La mayoría de conventos y orfanatos católicos están saturados. Sera difícil acomodarlas y aun así sería una innecesaria molestia financiera por tener más bocas que alimentar ya que ellos se mantienen de patronatos y donaciones. Si te llevas a todo el personal y las niñas, podrán vivir a costillas de Hera, sin frugalidades, y podrán seguir juntas las hermanas que no deben separarse para no traumarlas – cof cof Ikki y Shun cof cof -. Al mismo tiempo, como ya no dependerán de un patronato, tú puedes ser la administradora de los recursos y al mismo tiempo que cumplirías las ordenes de la diosa. Regularmente en esos lugares hay una persona que cocina, otra que tiene conocimientos médicos y suficiente experiencia para enseñarles el nivel básico y medio. Tu por otro lado, si decidieras hacerlo sola, cuando nazca tu hij no tendrás fuerzas, ni tiempo y supongo que ni ganas de hacer todo eso por todas las niñas. También querrás dedicarte a él o ella y disfrutarlo cada segundo. Aprovecha para hacer una buena acción y al mismo tiempo, ayudarte a ti misma. Eso, es lo que Shaina haría.

Geist lo miró fijamente y Shion pudo ver como su cara se transformaba poco a poco.

- Pero su religión…

- Su religión y la nuestra no están peleadas. Siempre nos hemos ayudado, por lo menos desde al menos 250 años entre el vaticano y nosotros. Puedes separar el grupo si así lo decides entre las niñas a las que las forzaran a llevar la religión católica y el grupo de los futuros adoradores de Hera.

Geist comenzó a pensar más a fondo. No era una idea descabellada.

- Además, esos orfanatos solo deben mantener a los niños hasta los 12 años. De ahí puedes decidir si las mandas fuera a aprender un oficio, o las mantienes ahí para ayudar con las más pequeñas y que sigan sus estudios medios superiores.

- Sí. Eso puede funcionar! Y las monjas pueden ayudarme a transformar el castillo y decirme que se necesita comprar para tenerlo listo y …

- Ya vas comprendiendo – dijo Shion sonriendo - Me gustaría también poder visitarte continuamente cuando se hayan asentado si no te molesta para darte seguimiento y ayudarte. Y yo sé que Mu también…

- Uhhh si claro que será usted bienvenido pero…

- Pero no se lo has dicho, verdad?

Geist lució visiblemente incomoda.

- No. Tiene suficientes problemas ya. O sea si le voy a decir pero… ahorita no. Tal vez hasta que me establezca bien y… que agarre valor y que él también se estabilice y…

Shion se levantó negando con la cabeza.

- O sea nunca.

- No dije eso.

- No te preocupes. Yo sé dónde estarás y quiero que me prometas que una vez estés ahí, no saldrás de la isla.

- A dónde iría?

- Me refiero a que, tarde o temprano, y entre más pase el tiempo, vas a incrementar las posibilidades de querer huir para no enfrentarlo y por lo mismo, tarde o temprano yo mismo te llevare a Mu para que se lo digas. Comprende que no voy a dejar que mantengas el secreto por mucho más y tampoco te dejare huir de esta responsabilidad de decírselo al padre. La última vez que tú y yo hablamos me pediste tiempo y te lo concedí. Pero también me gustaría que Mu estuviera contigo no solo en el alumbramiento sino en el proceso. Esto creo, es una parte importante en el vínculo de formación entre padres e hijos y siento que él se va a sentir muy feliz también.

- De verdad lo cree?

Shion asintió. Se quitó la pulsera que le había quitado a Zita y se la puso en la muñeca. Estaba muy confiado en que la modificación que le hizo a esa pulsera había surtido efecto y ella solo la miraba interrogante.

- Cuídamela por favor. Te traerá buena suerte.

- Lo prometo.

Platicaron de futuros planes respecto a la misión de Geist antes de que Shion tuviera que retornar a su casa y ella fuera hacia el orfanato de niñas nuevamente a hablar con la Madre Superiora.

Fin del Flashback.

Shion abrió la puerta de su cuarto de hotel y se dispuso a descansar un rato antes de la cena. Sin encender la luz, puso sus bolsas de compras junto a la puerta y se aventó a la cama de espaldas, lanzando inmediatamente una exclamación de dolor al sentir que toda su columna tronaba como chinampina.

Dohko se lo quitó como pudo de encima respirando con dificultad.

- Idiota! Me sacaste el aire! - exclamó

Shion prendió la luz de la lámpara lateral.

- Qué demonios haces en mi cama! Quien te dio permiso de entrar a mi habitación así?

- Oh vamos! Estaba descansando un rato!

- Descansar que, si no estás trabajando? – dijo doliéndose –Además no estabas dormido o tus ronquidos me hubieran alertado.

- No son ronquidos, un tigre ronronea que no es lo mismo.

Shion se levantó a prender la luz principal aun doliéndose.

- El sonido es el mismo. Por qué no puedes dormir?

- Pues es que…

- Qué?

- En cinco días no creo que haya habido un avance con Akane y el tiempo pasa rápido. – dijo Dohko en tono desesperado – Dijiste que me ayudarías. En dos días prometí regresarme al santuario y no he conseguido nada de nada. Eso sí, ya le envié mi Omiai a su padre aunque no he recibido respuesta.

Shion se sentó en el sofá de su habitación con las piernas cruzadas de frente a su amigo

- Que tú qué? Pero estas tonto o que te pasa? Si ella se entera, a tu dragoncito le va a quitar escama por escama.

Dohko hizo una cara chípil que tomó a Shion por sorpresa.

- Ahora que dije?

- Dragoncito

- Y eso que?

- Es que no te he dicho… me van a hacer abuelo buaaaaaaaaaaaaaaa. Apenas parezco de 23 y ya voy a cuidar nietos….

- De parte de quién?

- Shiryu y Sunrei.

- Uy pues felicidades!

- Como que felicidades? Shiryu acababa de ingresar a la Universidad y ahora se quiere salir para cumplirle a Sunrei.

- Que feo! Shiryu es más poderoso que tu hasta haciendo herederos jajaja

- Shion! Camate pofavo! – volteó a ver las compras de Shion levantándose para fisgonear el contenido de las bolsas – Tiendas de bebes? Tu que andas comprando en esas tiendas? Hay algo que no me has dicho?

- Jaja como qué?

- Estamos embarazados?

- Ya quisieras. Tu tiras puras salvas.

El sonido de unos golpes fuertes a la puerta hizo voltear a Shion.

- Quién?

- Akane

Dohko y Shion se miraron sorprendidos.

- Metete debajo de la cama

- Para qué?

- Tu obedece si no quieres que le diga de tu amor malsano por mi ajajajaja – se burló Shion en voz baja – Deme un minuto en lo que me visto de nuevo porque estaba por meterme en la ducha!

- OK!- contestó Akane toda ruborizada al saber algo tan personal.

Dohko a regañadientes se metió debajo de la cama y Shion volvió a tenderla de manera que no se notara que alguien había estado ahí, y para cubrir cualquier evidencia de la presencia de Dohko. Abrió la puerta con una sonrisa.

- Akane! No esperaba verla aquí. Pase por favor.

Akane asintió y Shion la invitó a sentarse mientras el volvió a ocupar la silla frente a la cama. Akane volteó a todos lados a ver si él estaba solo y al comprobar que así fuera se volvió hacia él.

- Vine a preguntarle algo y espero que me conteste con total honestidad.

Shion alzó una ceja. Desde cuándo tan formal y valiente?

- Le prometo hacerlo pero me intriga.

Akane tomo aire y se tronó varios dedos.

- No soy ajena a la realidad del amor moderno donde el romanticismo no tiene sexo definido y que la sociedad los acepta cada vez más…

- ¿?

- En este país hay normas y condiciones para estas situaciones para que no se caiga en malos entendido pues todo el mundo tiene derecho de amar y compartir su vida con quien mejor le convenga, no cree?

- Si usted lo dice – contestó Shion intentando saber a qué se estaba refiriendo Akane – Pero…

- Déjeme terminar. Si se respetan y asumen estas normas, este tipo de relaciones pueden vivir en absoluta paz, aunque sean hermanos, tíos, primos…. La ley en este país lo permite. Lo sabía?

- Pues no realmente pero no entiendo…

- Aun no termino – siguió Akane cada vez más ansiosa – Yo creí, cuando usted me invitó a tomar un café, que usted era un chico normal que de verdad estaba enamorado de la novia de su hermano pero estos días me surgieron tantas dudas…

- Dudas? Sobre qué? – Akane calló, pero Shion insistió – Dijo que tenía una pregunta pero hasta ahora no ha hecho ninguna.

Akane respiró profundo antes de armarse de valor y preguntar:

- Quiero saber si entre Dohko y usted hay alguna relación incesto-amorosa.

Shion la miró muy serio antes de sonreír a punto de la carcajada. Akane le sostuvo la mirada.

- Es en serio la pregunta? – dijo finalmente Shion

- Es muy en serio – contestó Akane – El nunca sale si no es con usted y si bien es cierto que me la paso muy bien porque son muy divertidos, yo quisiera poder salir a solas con él. Cuando pienso que ya vamos a estar solo, usted aparece o ya nos estaba esperando.

- Y ya se lo dijo? – preguntó Shion – Créame que de no ser porque Dohko me pidió que me quedara casi hasta que el tuviera que regresarse, y porque me he entretenido en algunas compras, ya me hubiera ido. Mayi no va a esperar soltera por siempre y yo no quiero que me la ganen de nuevo.

Esta confesión sacó de balance a Akane.

- Como dice?

- Que Dohko la mandó por un tubo para poder salir con usted sin remordimientos y ahora esta solita en Grecia esperando ser conquistada por mí y yo estoy aquí como mal tercio. – contestó Shion con voz fastidiada – Como pudo pensar que nosotros dos…?

Akane se ruborizó. Su madre le había metido la idea en la cabeza pero no lo iba a decir.

- Lo siento.

- Peor aún. – Shion se levantó para encasillarla ahí mientras con su cosmos cerraba la puerta - Como fue capaz de venir a mi habitación, solita, en falda que parece de colegiala…

Akane alcanzó a levantarse de la silla para bajarse la falda del uniforme lo más que pudiera.

- …acusándome de ser del bando contrario? Puedo demostrarle fácilmente que no lo soy. – dijo tomándola de una muñeca

- No! Suélteme! – contestó asustada mientras se jaloneaba y trataba de abrir una puerta

- No sé de donde le vienen todas esas ideas, pero… - la llevó hasta la cama para tirarla ahí mientras con el pie pateaba ligeramente las costillas de Dohko para que se avispara – yo soy muy macho y a las pruebas me remito.

Subió una rodilla a la cama y la tomó de las dos muñecas. Akane lo veía horrorizada. El no se atrevería, o si?

- No! No haga esto! Si le creo! Déjeme ir!

- Por qué habría de hacerlo? Tu fuiste la que viniste sola a buscar a un guapo soltero a su habitación de hotel… Es lo lógico. Dame una buena razón para dejarte ir viva?

- Porque yo amo a su hermano y solo quiero ser de el!

- Repita eso?

- Que yo amo a su hermano y solo quiero ser de el! – dijo más fuerte mientras Shion aguantaba la sonrisa

- Cual hermano? Tengo muchos

- Dohko! Su hermano Dohko! Yo lo amo y no quiero que usted me haga nada! Prefiero que sea el!

Shion la liberó y sonrío mientras Akane lo miraba con terror.

- Sal de ahí zoquete! Ya la escuchaste. A ver si ahora también quieres que me quede para hacerles mal tercio!

Akane sintió como la cama comenzó a temblar y se bajó corriendo hacia la puerta que seguía trabada comenzando a golpearla. Dohko salió de debajo de la cama con una cara de felicidad que apenas podía con ella, pero Akane se sintió humillada. Shion lo sintió e intento explicarse.

- Me disculpo por la manera en la que se me ocurrió que era la forma más rápida de que usted lo dijera y de que él lo oyera. Mi hermano Dohko aquí presente es bastante estúpido para las cosas del corazón y por mas señales que usted le daba, él estaba más perdido que usted. Dohko, la escuchaste?

- Si

- Tienes algo que decir al respecto?

- Sí. Esto – sin decir agua va, lanzó un puñetazo a la cara de Shion quien no hizo ningún intento por parar – Lárgate!

- Pero es mi cuarto! – dijo abriendo la puerta seguido de Dohko quien lo siguió al pasillo

- Lo siento mucho Shioncito pechocho, pero no esperabas que no hiciera nada delante de ella verdad? – le dijo por cosmos mientras le gritaba – Y agradece que este Akane presente o te rompía las bolas!

Shion se fue riendo ante la demostración de "hombría" de Dohko y este regresó a la habitación donde Akane permanecía inmóvil sin saber qué hacer. Dohko había escuchado la confesión que había hecho.

Dohko la miró muy serio y le tomó ambas manos con las suyas.

- Yo también te amo Akane. Solo que no quería decirlo hasta no saber si tenía alguna oportunidad.

Akane sonrío y Dohko aprovechó esto para finalmente sellar la confesión con el beso que le había sido negado todo este tiempo. Ahora si podía finalmente regresar a Grecia con la esperanza y agradecimiento a Athena por ser correspondido.

Octubre 1, 1pm

Hospital Israelita Albert Einstein

Sao Paulo, Brasil

Niv esperaba que su padre regresara de la recepción donde le hicieron entrega de varios recibos de pago. Llevaban tres días en Sao Paulo de los cuales uno de ellos lo habían dedicado a tratar de descansar en la alberca del hotel, el segundo en toda clase de análisis y este para la cita con el Neurocirujano.

Carlo se sentó junto a ella a esperar su turno mientras Niv movía sus manos nerviosa. Y si le decían que su condición era permanente? Aceptaría ese diagnóstico? Qué pasaría con Alde y ella si así fuera?

- Basta Niv. – dijo su padre tomándole las manos – Comienzas a desesperarme

- Estoy nerviosa. Dame un break.

- Todo saldrá bien.

- Si tan solo me hubieras dejado en Belo, ahorita mis amigas estarían aquí conmigo.

- O sea que soy mala compañía

- Nunca dije eso – respondió Niv abrazándose del brazo de Carlo – Es solo que… tengo miedo

- No está mal sentir miedo, Niv – respondió Carlo dándole un beso en la cabeza – Pero por eso vinimos a este hospital. Está en el ranking 1 de todo Latinoamérica. Y si aquí no nos gusta el resultado, nos iremos a Houston, y si no, a China o a todos los mejores hospitales del mundo. Pero tranquilízate.

- Gracias papá.

La recepcionista del consultorio médico los anuncio y Carlo la tomó de la mano para ponérsela en el brazo y así ambos entraran juntos.

- Boa Tarde Doutor Basurto – saludó Carlo – Soy Carlo Ferreira.

- Boa Tarde. Pasen por favor y siéntense – dijo el médico señalando las sillas frente a el – Usted debe ser la Señorita Ferreira.

- No. Soy la Señora Taurus – contesto Niv con una sonrisa – Y muy orgullosa de serlo.

El medico miró a Carlo.

- Mi hija se casó en el tiempo que pasó entre que hice la cita y hoy.

- Felicidades Senhora. Enhorabuena.

- Gracias. Y… ya tiene los resultados de los análisis? – preguntó Niv sin poder ocultar su ansiedad.

- Efectivamente – dijo el médico abriendo el expediente – Usted Señorita, digo, Señora, cumple con el 90% de los requisitos para que la cirugía pueda ser efectiva

La cara de Niv se iluminó.

- De verdad? Escuchaste eso papa? Voy a poder operarme!

- Si hija! Estoy muy feliz!

- No tan rápido Señora. – vio como las caras volvieron a cambiarles – Hay muchos exámenes que deben hacerse antes de hacerla y en su estado, la anestesia es muy peligrosa y yo no recomiendo hacerla.

Carlo intervino.

- No entiendo, Dr. Acaba de decirnos que puede ser posible la operación. Entonces su estado no mejoro? El coagulo se movió?

El Medico los miró extrañados.

- Siempre existen riesgos en toda intervención quirúrgica, pero por el tamaño del coagulo y su localización actual, es muy posible que ella pueda recuperar la vista. No de forma perfecta y tal vez deba usar lentes correctivos por un tiempo pero la recuperaría. También debemos tomar en cuenta que cada organismo es diferente y el tiempo de recuperación varia de persona a persona.

- Eso lo entiendo doctor. Trabajaba con médicos deportivos todo el tiempo. Pero no entiendo entonces a lo que se refiere con mi estado.

El Dr. Sonrió. No esperaba ser el quien diera la noticia.

- Señora Taurus… sus exámenes muestran que está en la semana 9 de gestación.

Ninguno de los dos reacciono.

- O sea cómo? – preguntó Niv

- Creo que a su hija le faltó la charla de las flores y las abejas, Sr. Ferreira – se burló el doctor ante la expresión de ambos.

- Está queriendo decirme que… voy a ser abuelo?

El Dr. Asintió con una sonrisa.

- Siiii! Finalmente se me hizo ser abuelo! Siii!

- Papa! Doctor está usted seguro? No hay ni un pequeño margen de error?

- 100% seguro, no. Para eso deberá usted ver a su obstetra. – respondió – Es por eso que la cirugía no la recomiendo hacer ahora. El primer trimestre del embarazo, es decir las primeras 12 semanas son cruciales para el desarrollo del feto. Y la operación no solo puede provocar alguna malformación o problema debido a la falta de oxigenación, sino incluso podría provocarle un aborto. – ambos se sorprendieron ante esto – Si bien nosotros intentamos mantener una buena ventilación y presión arterial estable durante la anestesia, Siempre debemos tener en cuenta este factor para ingresarla o no. Esta dispuesta a arriesgarse aun así?

Carlo tomó las manos de su hija.

- Por favor Niv. Espera un poco más…

- Y después de las 12 semanas? Existe el mismo riesgo?

- Habría menos efectos nocivos para el feto por estar más desarrollado, pero sigue habiendo un riesgo.

- Niv, hija… consúltalo con Aldebarán.

- No. Yo ya se cuál sería su respuesta.

- Señora, lo ideal sería que pospusiera la operación hasta el término de su embarazo.

- No! No es justo! Ya esperé demasiado!

Carlo abrazó a su hija. Solo ella podía saber cuánto sufría al estar en ese estado de ceguera. El Dr. Les dio unos minutos para calmarse.

- Dr. Una pregunta. Este tipo de operación no se puede hacer con ella despierta? He visto algunos casos de operaciones cerebrales donde el paciente está sentado y despierto?

- Si bien la anestesia es más local como usted lo plantea, toda manipulación de la masa encefálica conlleva un riesgo y nunca es tan sencillo como se aprecia en las películas – aclaró el médico – En todo caso puedo plantearlo al comité médico que me acompañaría a la cirugía pero también existe un riesgo de sangrado y por consiguiente pérdida de sangre para los dos.

Carlo no soltó a su hija.

- Por favor, tomate tu tiempo para meditarlo. No tomes ninguna decisión sin consultarlo con tu marido.

- Pero es mi cuerpo!

- No. Ahora hay un pequeño ser creciendo dentro de ti, que es de los dos. Además por ley, al estar casada, él debe ser informado e incluso firmar la responsiva, cierto?

El medico caviló.

- Bueno si, aunque la señora también está en toda su capacidad para tomar la decisión y necesitamos que un familiar firme las responsivas correspondientes. En este caso esposo o padre.

- Ese puede ser tu papa.

- No. Me niego a firmar nada.

- Papa!

- No cederé a tus caprichos esta vez Nívea.

- Me dijiste Nívea!

El Doctor revisó su reloj. Esto iba a tomar mucho tiempo, así que prefirió voltearse hacia la computadora y comenzar a teclear.

- Bueno, de todos modos no pueden tomar la decisión de inmediato pues como les dije antes, la señora Taurus debe realizarse otros exámenes y traerme la documentación firmada por cada especialista antes de proceder a una programación. Y cada uno de estos, les pedirá una responsiva firmada.

- Que especialistas son esos? – preguntó Niv frustrada

- Cardiología, Anestesia, Optometría, Obstetricia… y todos deberán ser hechos en este hospital para que todo quede en sistema y no se demore en la entrega. Una vez que ya tengan todo listo, le llaman a mi recepcionista y programan una cita para revisarlo todo.

- Mejor deme una cita desde ya, porque no voy a cambiar de opinión. – insistió Niv haciendo al médico suspirar – Yo hablare largo y tendido con mi padre. Canalíceme con los demás médicos.

- De acuerdo. Pondré todo esto en la historia clínica, le daré las interconsultas y demás exámenes que debe hacerse. – Comenzó a escribir muy rápido y el sonido de la impresora era lo único que se escuchaba en esa habitación.

Carlo sacó su celular y comenzó a buscar el número de Aldebarán. Niv escuchó el clásico sonido y preguntó:

- A quien llamas?

- A Alde. Él debe estar al tanto de esto.

- te lo prohíbo papa! hablo en serio!

- por qué estás tan renuente en decírselo? Acaso no es de el?

- Claro que es de el! Pero… Qué tal que todo sale mal? Mejor le digo si todo sale bien y así…

- Aja. si todo sale mal y perjudicas al bebe por tu necedad, los perderás a los dos! Entiéndelo!

Niv comenzó a tallarse los ojos para limpiar las lágrimas que asomaban.

- Por qué tenía que pasar esto justo ahora?

- los hijos llegan cuando tienen que llegar. No antes ni después. así que no reniegues o me voy a enojar.

El medico terminó de imprimir y les dio un folder con las hojas.

- Aquí está la historia clínica para ustedes, los exámenes nuevos que solicite como un electrocardiograma, exámenes de sangre entre otros, las interconsultas con los otros especialistas, y saliendo de aquí en el primer piso puede solicitar las citas. Yo los veré en tres semanas. 15 de Octubre a las 10.30

Carlo agradeció al médico y se llevó a Niv, quien volvió a tomarlo del brazo. Ninguno de los dos hablo hasta que Carlo, en lugar de pedir las citas, siguió hasta la salida sin que Niv se lo reclamara.

- Espérame aquí- le dijo dejándola en medio del jardín de la entrada en una banca – voy por la camioneta.

- Está bien.

Carlo desapareció en el estacionamiento y Niv miró alrededor. Había muchos árboles jóvenes creciendo y energías verdes pequeñas jugando con las flores y entre ellos. Algunas de esas energías la saludaron con la mano alegremente mientras seguían jugando. Niv bajo la cabeza hacia ella, donde alcanzó a ver una pequeñita luz dorada sobre su vientre y solo hasta entonces, fue cuando se dio cuenta de la verdad y sonrío: Iba a ser mamá. Como era posible que se atreviera a hacerle daño a algo que solo era una muestra del gran amor que se tenían entre Alde y Ella? Se reprochó a si misma por su necedad y decidió pensar las cosas dos veces. Era tiempo de madurar.