—¡Percy! ¡Percy despierta!—
Una sacudida despertó al alterado semidiós que se incorporó casi inmediatamente, se llevó las manos a las mejillas y las notó húmedas Hazel y Frank lo miraban preocupados.
—¿Que ha ocurrido?—
—No parabas de revolverte y decir cosas, al final prácticamente gritabas suplicando—Hazel miraba preocupada a su amigo, había visto muchos semidioses tener sueños que no eran agradables pero ninguno como el de Percy.
—Lo siento si os alteré—
—No te preocupes los semidioses no solemos tener sueños agradables—Frank le palmeó la espalda.
—Ya—queriendo cambiar de tema y olvidar ese sueño decidió preguntarles la ubicación—¿Por donde estamos?—
—En la Alta California no tardaremos en llegar a tierra—
El grupo finalmente llego a tierra y por una vez Percy se alegró de alejarse del mar, caminando no le daría más vueltas a la cabeza sobre lo ocurrido.
Estuvieron un rato andando hasta que se toparon con una tienda que vendía productos ecológicos perteneciente a la diosa del arco iris. En ese momento estaba siendo atacada por el gigante Polibotes y su ejército intentaban entrar en la tienda pero cada vez que habrían las puertas salía un arco iris. Los monstruos intentaban atacar la luz pero acababan quemados y las armas derretidas, todas en multicolores.
El gigante enfurecido se plantó ante la tienda.
—¡Es suficiente diosa! ¡Soy Polibotes y te ordeno que te rindas!—en ese momento algo redondo y oscuro salió de establecimiento asustando a los de alrededor pensando que era una granada pero Polibotes lo cogió—¿¡Un muffin de chocolate!?—furioso lo arrojó a la tienda.
Se volvió hacía las tropas—No tenemos tiempo para tratar con una simple diosa menor, hemos de llegar a San Francisco—
Se sacudió el cabello del que salieron unas enormes serpientes, los basiliscos, montaron guardia alrededor de la tienda. Cuando el ejército se había ido los tres con cuidado fueron hacía la tienda matando en el proceso a algunos de esos bichos y entrando por fin en la tienda.
Era como una tienda hippie de colores y con productos ecológicos, detrás de un mostrador había una mujer con piel de color oliva, cabello largo y negro y cálidos ojos marrones y gafas a Frank le recordaba curiosamente a su madre.
—Bienvenidos a Rainbow Organic Foods & Lifestyles mi comida es completamente orgánica, soy Iris—
Hazel se adelantó—Humm gracias veníamos a por suministros y para ayudar a nuestro amigo—señaló a Percy quien estaba muy callado, todavía tenía un colapso mental por ver a todos esos cíclopes, centauros y otras criaturas junto con los sueños cada vez más oscuros.
Iris miró con suavidad al joven.
—Fleecy—
De la nada apareció una joven, de cabello blanco muy rizado, sobresaliendo a ambos lados de su cabeza como la clara de un huevo frito. Sus ojos son desconcertantes pues sus iris cambian de color de gris, negro a blanco.
—¡Mande señora! ¿que desea?—
Frank se sobresaltó tanto con la repentina aparición que terminó por caerse en una fuente de Neptuno, la chica dio una palmada y la fuente desapareció.
—Perdonad por mi espontaneidad soy Fleecy una ninfa de las nubes—asintió sonriente.
—Fleecy necesito que lleves a Percy para que le des una medicina y ayudarles a enviar un mensaje—
La ninfa asintió y se llevó Percy tras unas cortinas de cuentas. Iris miró seriamente al semidiós.
—Lo que él tiene no es una enfermedad normal y corriente—
Ambos romanos se miraron preocupados—Ha estado teniendo pesadillas que son terribles incluso para lo que suele tener un semidiós—cada vez estaba peor.
—Por lo que veo no solo son sus sueños y su amnesia es otra cosa lo que le aflige ¿os ha dicho de que van sus sueños?—
—No, pero le hemos oído hablar en sueños. La mayoría sin sentido pero otras decía palabras como padre, Claus y morir—Frank estaba confundido¿sería un trauma relacionado con Santa Claus?
A Iris se le ensombreció el rostro—No sé con claridad lo que es, eso está más allá de mis capacidades pero parece grave, lo mejor es que busque ayuda como Apolo, Venus o Psyche—
Hazel estaba confundida—Apolo entiendo ¿pero porque Venus o a Psyche?—
—Ha veces el mal no viene del cuerpo, sino de la mente y el alma. Tal vez la diosa del amor pueda entender lo que le pase o a su nuera pero una cosa, si recupera la memoria podría empeorar sufrir apagones como tú Hazel pero más violentos—
Hazel y Leo estaban horrorizados ¿que podían hacer?
—Entonces hay que impedir que recupere la memoria—
—No, debe hacerlo para que continúe la misión y él debe enfrentarse a sus demonios, ha veces el remedio es peor que la enfermedad—
En ese momento aparecieron Percy y la ninfa, se veía mejor pero la ninfa les dijo que no pudo enviar el mensaje por lo que esta vez lo intentaron los tres y esta vez consiguieron contactar a Reyna que se estaba bañando en ese momento asuntando a la pretora.
Aquello les mejoró el humor a todos y salieron de la tienda gracias a la lanza de Frank que se convirtió en un guerrero esqueleto y masacró a los basiliscos, algo espeluznante y continuaron el viaje hacía Alaska.
